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Nº035 - 23 02 1836
Nº035 - 23 02 1836
Nº035 - 23 02 1836
porque tratándose de establecimientos religiosos, I tración. " H é aqui reformas radicales; hé aqui He dado cuenta al REY N. S. de una instan- El Boletín Oficial de Leyes contiene el siguiente
consagrados al silencio y á la contemplación, no progresos positivos , y hé aqui de que modo con- cia en q u e D. a Estefanía Zoznya, viuda de D. Vi- decreto , que hace tiempo se esperaba. — "Nos,
les tocaba acabar sus dias, sino con la calma que viene y debe gobernarse.» cente Barbería teniente que fue del 5.° batallón Federico Guillermo ect.—Habiéndosenos informado
inspira la buena conciencia : y q u e los siervos de Navarra, solicita la pensión correspondiente de las pérdidas considerables q u e han experimen-
del Señor han pasado á mejor vida, reingresan- Por lo demás no deja de estrañarnos aquello
de que, con la extinción de regulares, consiguen por haber muerto su marido el día 9 cíe Agosto tado algunos de nuestros vasallos en la reduc-
do á la sociedad, y volviendo sus bienes al centro de i834 al impulso de una sufocación, que le ción de la deuda española, y considerando el in-
de q u e no debieron salir : es decir , á la Nación. estos ingresar en la sociedad: como si el carác-
ter de religiosos los hubiera tenido fuera de ella. produjo u n o de los acontecimientos de la glo- minente riesgo, que amenaza á aquellos q u e se
Dejando el birla birloque, que es una frase ta- riosa acción acaecida en aquel d í a ; y enterado ocupan de estas especulaciones en mis Estados,
bernaria y que solo puede justificarse en nuestros Se acaba de decir también por los mismos
; periódicos, que los bienes pertenecientes á las S. M. del expediente formado en virtud de esta deseando -poner límites á estas transaciones, ha-
escritores, por el exceso de placer que les causó reclamación , conformándose con el parecer de ciendo una concesión al mismo tiempo á los tí-
esta sabia medida de Mendizabal, es de notarse casas religiosas vuelven al centro de donde n u n -
ca debieron salir, como propiedad de la nación; su Asesor Real , y teniendo presente la práctica tulos ya adquiridos; creemos necesario evitar por
el torpe sarcasmo con que cantan el triunfo de observada por su Augusto hermano, ' Q. E. G. E.) medio de medidas legales , los abusos qqe resul-
la impiedad , riendo sobre las victimas que aca- j no hay pues en apoderarse de estos bienes (si
lo han de decidir nuestros oráculos) ni r o b o , ni se ha servido conceder á la referida viuda la pen- tan de estas operaciones de intereses , y nos r e -
ban de sacrificar en las aras de la revolución. El sión de 2 000 leales ele vellón anuales; decla- servamos la facultad de arreglar este asunto p o r
silencio, la contemptacion de los religiosos, (a ¡ rapiua. despojo, violencia, saqueo etc. e t c . ; pero
rando por p u n t o general con este motivo , y en medio de otras providencias; pero adoptamos pro-
buena conciencia, la calma con que terminan sus en medio de esta vocinglería, nosotros probaré* aclaración del artículo 5.° del Real Decreto de visionalmente las que nos han sido propuestas por
dias , ect. ect. son aparentes graciosidades , que nios todo lo contrario: á saber, que estos bienes 11 de Febrero de i8:¿4- hecho extensivo á las nuestro ministro de Estado; y son: i." Toda transa-
refluyen contra ¡a religión del estado. Son o b - pertenecen á la Iglesia, y que no han sido m familias de las víctimas de la presente campaña, cion en los fondos españoles q u e se ejecute des-
jetos que deben tratarse siempre con el mayor pueden ser popiedad de la nación: y por con- que deben considerarse también muertos en ac- pués de la publicación del presente decreto será
d e c o r o , y solo podrá prescindirse de estos mira- secuencia legitima que el tomarles de cualquiera ción de guerra ó de resultas de ella los que han nula , á menos que no se verifique por las
mientos en el estado de licencia y desmoraliza- manera es un verdadero r o b o , una rapiña en fallecido por efecto de las fatigas de la campaña. partes contratantes. En cualquier otro caso no
ción eu que se halla la Península. todo el rigor de la palabra. (Se continuará) 0
q u e cualquiera acontecimiento de ella, les ha tendrá valor ni efecto. Ningún alegato legal se ad-
mitirá en la materia : á las transacioneS en estos
EN LA IMPRENTA REAL.