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Series de Taylor
Series de Taylor
0, y sidefi-
nida negativa, entonces Af < 0, cuando x + dx € U , 8). Quiere decir, en el
40.2. Condiciones suficientes de un extremo estricto 31
Fig. 161
primer caso es un punto de minimo estricto yen el caso segundo, un punto de
mo extricto
™ ‘Supongamos ahora que la forma cuadratica (40.2 2)es indefinida. Esto significa
aque existen dos puntos di” = (dx... » dty) y de"’ = (dx; « « dey) tales que
Ad, . dq) > Oy A (EX; s . » dt’) < 0. Bashndonos sobre este hecho no
podemos decir de inmediato que el incremento de la funcién af cambia de signo en
cualquier entorno del punto x®, Basso au os puntos x + de’ = (x() +
0+ dy) y x9 + dx” 170+ de;") pueden, en genera,
incid no pelonecer al dominio de definicon del funcion/ No obstate, leu
tado deseado se deduciré de que la forma cuadrética A (dx) conserva invariable un
‘mismo signo 0 igualdad a cero en toda recta que pasa por el punto x de la que esta
jentras que el valor A (6) +x # 0, no depende, en
cextraido este mismo punto, >
‘general, de la eleccién del punto en dicha recta,
Examinemos el punto dx’ = (dxj, . .., de,), ‘Tracemos una semirrecta que
tiene su origen en el punto x® y pasa por el punto x + dx. Para cualquier punto
X= Op, «+ Xq) de esta semirrecta pongamos drj= x, — x4, i= 1,2, - + M YO=
= E dx} En este caso (fig. 161)
cosa, i= 1,2, (40.5)
°
donde cos a, son cosenos directores de la semirrecta en consideracién. Por esta ra
z6n el punto
(@ =) (cosa, - + €082,)+ (40.6)
?2 40. Extremos de las funciones de varias variables
dispuesto, evidentemente, en la esfera unidad*? § con centro x, serd el mismo para
todos los puntos x de esta semirrecta, es decir, el punto (40.6) no depende de la dis-
tancia p entre x yx,
Por consguinte l valor dela forma cuadrtic (40.2 en el punto (40.6), es de-
ae,
*) tampoco depende de p. De aqui, para todo punto (40.6) te-
a, dy
a( i 3) = Ald yy de) >0-
e e
&,
° °
tenga lugar [a desigualdad 2le(dx)! 0,) ax, ax a3] > 0...
ay ay
nn 2
a>,
ay On
% dy ayy
Onn
2 Records qe par lo cons restore erin I gud ona + +
+ cove = I
40.2. Condiciones suficientes de un extremo estrcto 3
Al observar que la forma cuadrética A(x) es definida negativa cuando, y solo
cuando, la forma cuadritica ~A(@) = J (aj) x,x;€8 definida postva, obte-
nemos, haciendo uso de las propiedades conocidas del determinante, el siguiente
criterio para distingui la definicion negativa.
Para que la forma cuadrética (40.7) Sea definida negativa, es necesario ysufiien-
te que se verfiquen las desigualdades
411 412+ Fin
a M2 413
yy 3+. Bay
>O)a,, a2 a3) <0-..,(-1)'
ay ay
ay <0) 22
4% an
>0.
32 ayy
at G2 ++ + Gan
Enunciemos ahora el teorema 2 para el caso de dos variables, expresando las condi-
ciones que se imponen en la forma cuadrética (40.2) de una manera explicita, en tér-
minos de las segundas derivadas parciales.
Teorema 3, Supongamas que la funcién fx, ») esté definida y tiene derivadas
parciales continuas de segundo orden en cerio eniorno del punto (xo, ¥g)s que es un
‘punto estacionario para flx, y), es decir, en este punto
Sem fy = 0. (40.8)
Briones, sem oI) gga og, (wos)
es un punto de extremo estricto, a saber, de méximo estricto, sien este punto
See <0
¥ de minimo estricto, si
Sux > 0,
Sivenel punto (&,¥)
Lacby ~ Bey <9, (40.10)
el extremo en él esté ausente.
En fin, cuando
Facby ~ fy (40.11)
en el punto (Xo, vq), puede ocurrir que haya un extremo en ély puede ocurrir que no
1o haya.
Efectivamente, si fay # 0 en el punto (xp, ¥e)s la forma cuadrética (40.2) en
nuestro caso puede escribirse asi:
Ads, dy) = Sexe? + Yuyde dy + fydy? =
+) Dela condicion 40.9) provene,evidentemente, que fz, # On el pUnO br,
6429a §.40, Extremos de las funciones de varias variables.
1
[Waa + Loyd? + Cox Sy — Aye’. (40.12)
“Todas las derivadas parciales aqui y en adelante se refieren al punto (Xp, ¥o-
"Vemos inmediatamente que si se cumplen las condiciones (40.9), la expresin
entre corchetes en la formula (40.12) es positva para dx? + dy? > 0,8 decir, A (dx,
dy) es una forma cuadritica definida, a saber, definida positiva cuando f,,>0 y defi
nnida negativa, cuando f,, < 0. Por supuesto, dicha deduccion proviene también del
criterio de Sylvester. En el primer caso, segin el teorema 2, (xp, Yo) es el punto de
minimo estricto y en el segundo, de méximo estricto. Si, ademas, queda cumplida la
condicion (40.10), entonces para dy=0, dx # 0 tenemos de (40.12): sign A (dx, 0)
SBD fs ¥ PATA = Syn dy = —Syy SE OKIENE SIENA yy, Six) = ~SiBM Say
donde s¢ deduce que la forma cuadratica A (dx, dy), es, cumplida a condicién
(40.10), indefinida,
‘Asi pues, hemos investigado por completo el caso
Sec #9 9 Secby ~ fiy #0
El caso en que
Sex =% Syy #9-Y Saxby ~ fy #0
se investiga de modo antlogo,
Si, en cambio, f=. = Jyy = 0» pero, como hasta ahora, facfyy — f2, # 0, enton-
cos uiestenente 7, £3, porto tanto ent caso se cumple coniion (0.10)
yA (dx, dy) = 2, dx dy. Vernos de inmediato que la forma cuadratica A (dx, dy) es
jindefinida bajo las suposiciones adoptadas, pues sign A (dx, dy) = —sign A (dx,
dy). Por so, con el objeto de obtener los valores de la forma cuadratica de signos:
contrarios, basta tomar, al principio, dx y dy de un mismo signo y después, de sig-
fos opuestos, Segin el corema 2, yy) no es ene caso dado un punto de extre-
mo.
Finalmente, e1 as0 fy, = Syy = Sy = 0 n0 es compatible con la suposicién de
ue fer fyy ~ Sey # 0. De esie mod, hemos examinado todos los casos posibles,
‘cuando se cumple la desigualdad f,,fyy ~ fry # 0.
Para acabar con la demostracion del teorema nos basta mostrar con unos
ejemplos que, cuando tiene lugar la correlacion (40.11), puede existir un extremo y
puede no existir.
El punto (0, 0) para la funci6n z = x2 + 2xy + y®esestacionario y en €l zy,
Zyy = yy = 2,9, POF tanto, se cumple la condicién (40.11). Al advertir que
= (¢ + yf, vemos que siempre z > 0, con la particularidad de que z = Oen la recta
x + y = 0; por ello el punto (0, 0) es un punto de extremo, aunque sea no estricto.
Para la funcién z = xy° el punto (0, 0) es también estacionario y en este punto
Leg Zyy = Zyy = 0, POF lo cual la condicién (40.11) queda asimismo cumplida. Sin
embargo, debido a que la formula, que representa dicha funcién, contiene poten
cias impares de las variables x y, la funcién cambia de signo en cualquier entorno
de cero, a consecuencia de lo cual, (0, 0) no es un punto de extremo.
41.1. Funciones implicitas dfinidas por una ecuacién 35
40.3. OBSERVACIONES SOBRE LOS EXTREMOS
EN LOS CONJUNTOS
Sea f una funcion derivable en un conjunto acotado abierto G y continua en la
clausuraG de dicho conjunto. Se pide hallar los valores maximo y minimo de la fun-
cién f en el conjunto G (de acuerdo con el teorema 3, p. 19.5, estos valores existen).
Con este objeto podemos, por ejemplo, hallar todos los puntos estacionarios de la
funcién fen G, caleular en éstos los valores de la funcién y escoger, siempre que sea
posible (desde el punto de vista tebrico, esto es posible, por ejemplo, cuando el ni-
‘mero de los puntos estacionarios sea finito), aquellos en los que la funcion asume
Jos valores méximo y minimo entre todos los valores en los puntos estacionarios. A
continuacién, conviene comparar estos valores con los que toma la funcién en la
frontera det conjunto abierto G, hallando, por ejemplo (en el caso de poder
hacerlo), los valores maximo y minimo de la funcién fen la frontera de la region G.
‘Al comparar los valores maximo y minimo en los puntos estacionarios con los valo-
res correspondientes maximo y minimo en la frontera del conjunto G, podemos,
evidentemente, hallar el maximo y el minimo buscados de f en G.
Cuando G es una regién plana y su frontera esté constituida por una curva defi-
rida por cierta representacién x = x(), y = (0, @ < 1 < B, la cuestion sobre la
bbisqueda de los valores extremos de la funcién f(x, ») en la frontera de G se reduce
ala investigacién del extremo de la funcién de una variable f¢r(), (0), que se rea-
liza con ayuda de los métodos ya conocidos.
‘Los métodos que pueden emplearse en el caso multidimensional para buscar
puntos extremos en la frontera de una region serdn considerados en el § 43.
_Ejercicios. 1. Hallense los extremos de lafunci6n z = x° + 12ay? - 15x ~ 24y.
2, gTendré un extremo la funcién z = x’? ~ 3xy + 2x + y en el punto (1, 1)?
3. Hillense los valores maximo y minimo dela funcion z = x? + y? = 4x ~ 2y + 4en una
region cerrada limitada por las lineas x = 4,9 = — 1.x ~ y= 3.
4. Seaa = const > 0, X= [(x,)): IxI < a, y€ R). Hallense todos los extremos de la fun-
cinz= At + V6@P= Fos y en X y todos tos valores mbsimos y
iminimos de ella en X.
5. La superficie total de un paralelepipedo rectangular es igual a 6, ;Para qué valores de
la longitud de sus aristas el volumen del paralelepipedo serd maximo?
§ 41. FUNCIONES IMPLICITAS
41.1. FUNCIONES IMPLICITAS DEFINIDAS POR UNA ECUACION
‘Aclaremos las condiciones bajo las cuales una ecuacién de varias variables defi-
ne una funcién univoca, es decir, define una de dichas variables como funcién de las
demés. Empezaremos nt estras consideraciones por el estidio de una ecuacién que
contiene dos incognitas
Fey)
0.36 $41. Funciones implicitas
Si la funcion de dos variables F(x, y) esta definida en cierto subconjunto A del
plano R2,,A C Ri, y si existe tal funciOn de una variable y = f(a), definida en el
conjunto B C R, contenido en la proyeccién del conjunto A sobre el eje Ox, que
para todo.x e B tenga lugar (x, f2))€ A y sea vlidalaidentidad F(x, fs) = 0, en-
tonces f se denomina funcién implicita definida por la ecuacién F(x, y) = 0.
Lema. Sea F(x; y) una funcién continua en cierto entorno rectangular
UG ¥0) = (yi bx— xl < Ely — yol< a)”
del punto (%q.¥4) ¥ supongamos que dicha funcién es, para todo x € (xy ~ &. X +
+ ©) fii, estrictamente mondtona respecto de yen el intervalo (y ~ 1, ¥o + 1). En
este caso, si
Fo 90) = 0,
existen tales entornos Uti) = (&y ~ 8: Xo + 8), del punto x» y UY) = Y —
= € yp + €)del punto yo, que para todo x € Utxa) se tiene una solucién, y sélo una,
y-€ UU) dea ecuacion F(x, y) = 0. Esta solucion, que es una funcion de x yse de-
Signa por y = f(x), es continua en el punto xo y
F060) = Yor
De este modo, el lema afirma, en particular, que para las suposiciones asumidas,
la funci6n implicita y = f(x), definida por la ecuacion F(x, y) = 0, existe y posee la
propiedad de que las igualdades
FG) =0 € y= So)
son equivalentes a condiciOn de que x € Utd), ¥ € UO).
DEMOSTRACION. Por hipotesis del ema, la funcion F¢x, y) es, para todo x € (r9~
= £,%) + B) filo, estrictamente mondtona respecto de la variable y en el intervalo
Go ~ 1.¥0 + msn particular, en éste es estrctamente monétona la funcién F xq,
_»). Supongamos, para concretar, que es estrictamente creciente. Elijamos arbitra
rlamente ¢ > 0, subordinado s6lo a la condicién 0 < < 9. Como la funcion Fx,
_») de la variable yes, en el segmento [Yg ~ €, ¥o + ¢], estrictamente reciente y, por
hipétesis, Fox, ¥o) = 0, entonces
Fly Io~ 9 <0, Foie + 2) > 0.
Mas la funcion de dos variables F(x, y) es, conforme a la suposicién, continua
enelconjunto abierto Ubi ¥)9 Gye Yo— € Uy YQ) Hey Yo + £) € Uli ¥0)»
por lo cual existe tal § > 0,0 < 8 < £, queen el &-entorno del punto (xy, yo — #) 8¢
verifica la desigualdad F(x, ») < 0, y en S-entorno del punto (x, Yp +2), 18
gualdad Fc, ») > 0 (véase el lema 1 en el p. 19.3). En particular, para todo x € (fp—
— 8, x9 + 6) (fig. 162) quedan valitas las desigualdades
FUYo— <0, Fleyo+ 2) >0. ay
‘En concordancia con las desighaciones aceptadas en este libro, seria més correcto de-
notar el entorno del punto (x) mediante U(r, ¥,)) en lugar de Uy). Para simplificar
las designaciones, convendremos en omitir el segundo paréntesis.
41.1. Funciones implicitas definidas por una ecuacién 3
Tee TOT yay THE
Fig. 162
Pongamos
UG) Be - 8x9 + 9, UO) 0p - 8.4 + 2.
Dado que, siendo fijado x € U(x,), la funcion F(x, y) de la variable y es continua
cen el segmento [yp — & Yo + el, entonces, de la condicién (41.1) se deduce (de
acuerdo con el teorema de Cauchy sobre los valores intermedios de una funcién con-
tinua, véase el teorema 2 en el p. 6.2) que existe tal y* © U(r) (véase Ia fig. 162)
ue Fx, *) = 0. Por ser F(x, y)estrictamente monbiona.en el segmento . ¥y — &,
Yo + &] respecto de la variable y, el valor indicado de y* es tinico.
‘De este modo, se ha obtenido una correspondencia univoca (funcién univoca)
x= yt xe Ube, y* € Ute) que se designard mediante f: y* = f(x).
Por definicion de esta correspondencia, para cualquier x € U(x.) e y* = f(x) te-
nemos
Fey) =0, re UU
con la partcularidad de que el punto y*, que posce dicha propiedad, es ‘nico. He-
mos demostrado, pues, la exstencia y unicidad de la funcién buscada f.
Lego, por hipdtesis del lema, Fly J) = 0, ¥, comox9€ Utxg)20€ UO0)
tonces, debido a la unicidad de la funcion f, tenemos y, = Sx)
‘Al final notemos que ¢ > 0 se ha fijado arbitrariamente a condicién de que ¢<
< my que seha encontrado para él tal 8 > 0, que de |x ~ gl < 8 (es decir, de In
condicion x € Ute) provenia la inclusion f(x) © Uy), es decir, la desigualdad
7ex) ~ fla)! < e: Esto preisamente significa la continuidad dela funcion fen el
punto x
Las ‘condiciones suficientes, cSmodas para aplicarlas, de la resolubilidad
univoca de la ecuacién F(x, ») = Oen cierto entorno del punto (ry 9), para el cual
Flty ¥) = 0; las proporciona el siguiente teorema.
‘Feorema 1. Supongamos que la funcién F(x, y) x continua en cierto entorno del
‘Punto (x99) tiene en dicho entorno una derivada parcial F(x, y) que es continua
fen el punto Uy 9). En este c030, si
Flay Yd = 0 Fylty I) #0,38 § 41. Funciones implicitas
existen tales entornos Ue.) y Ue) de las puntos respectivas x, € Yq» que para todo
xe U(x, se tlene una y slo una, solucidn y = f(x) € U(),) dela ecuacién F(x, y) =
Esta solucidn es continua en todo punto de UG) € Yo = Sx).
‘Sisuponemos complementariamente que la funcién F tiene en cierto entorno del
‘punto (Xo, ¥q) una derivada parcial F(x, y), continua en el punto (ry, ¥o) entonces
1a funcion f(x) tendré también en el punto x, una derivada y para ésta queda vélida
1a formula
_Filio.¥0
FG 90
DEMOSTRACION. Debido a que la funcién F(x, ») ¢s continua en cierto entorno
del punto (xo, ¥o)y€s también continua en el mismo punto la derivada parcial F, (x,
y), existe un entorno:
U9) = (Nile xq 1). Demostremos que en tal caso tendré lugar tambiém para m ecuaciones.
Mostremos primero que cada una de las ecuaciones (41.8), la iltima, por
ejemplo,
Ym
Fy
2X yee
*°) BI sistema de funciones f,(x,,-- 1x), k= 1, 2, -- -, m, viene designado con un
simbolo f(x), puesto que define una correspondencia determinada: alos puntos de cierto con-
junto del espacio Rel sistema indicado les pone en correspondencia los puntos determinados
del espacio R™ 0, cémo suele decise, aplica el conjunto mencionado del espacio Ren el espa-
cio RtFa §.41, Funciones impltctas
puede ser resuelta en el entorno del punto (x, 4 por lo menos respecto de una
variable. En efecto, por hipétesis del teorema, en el punto (x, ¥)
a aR,
OE ye Fy) |” Wm
me af eerrerecenes | a 0,
80pm)
Fy Fy
1” Wm
y, por ende, en dicho punto por lo menos un elemento en la ditima fila del jaco-
bbiano es distinto de cero. Supongamos, para concretar, que este elemento ser el il
timo:
OF,
FO) 4g,
Ym
De aqui, en virtud del teorema 1° del p. 41.1, se desprende que la ecuacién
F(x, 9) = Opuede ser resuelta respecto de ¥,,€n cierto entomo del punto (x ¥,)-
Daremios una definicion ms exacta de esta idea. Designemos mediante Uel entorno
del punto (x, ¥, en el que las funciones F, i= 1, 2,. . .» m, son continuamente
derivables y pongamos y=(, .. «Jj Entonces, existen un entomno rectangu-
lar U"*"=" del punto
(2,7) = 2 YP,
YD) 41.9)
y un entorno U! del punto y{® tales que U"*"-!x U!'C U,y setiene la dnica
funcién
In = 2. nk Dye Imad 41.10
que esta definida en U"*"™! y que satisface las siguientes condiciones:
FG ek ee Im DELI,
entonces
POI) = OO. 6 Xp Pare Fm EU (41.11)
Fig Kyo os Xp Pyro maar OY) = 0. (41.12)
‘Ademés, de acuerdo con el mismo teorema 1°, la funcién g(x, ») ¢s continuamente
derivable en U"*"=! y .
2, yO) = yO). (41.13)
En este caso, si (x,y) € U"t"— ey, € U', entonces el sistema (41.8) ¢s equivalente
al sistema
FG =0, F= 12-41, Ig = OO). (1.14)
Sustituyamos en las primeras m — 1 ecuaciones del sistema (41.14) la expresion
(41.10). Al introducir las designaciones
41.3. Funciones implicitas dfinidas por un sistema a
Byes oe ye Yao Imad) = Fy 6 Xe
VisSim
Xp eID)
12..agm— 1. @LI5)
‘obtendremos, en este caso, el siguiente sistema de m ~ 1 ecuaciones con m +n — 1
incbgnitas:
41.169
By Os os oe Xm Ie so Ym
‘Ademés, para (x,y) € U"*"™!, y,, € U! el sistema de ecuaciones
FON=0, FHL. .ym— 1,
a (41.1
Ym = 8) Guin
es equivalente al sistema (41.14).
Mostremos que el sistema (41.16) saisface las condiciones que se diferencian de
las que son satisfechas por el sistema (41.8), s6lo en que m — 1 se ha sustituido por
‘m. En efecto, las funciones#,,k = 1,2, .. ..m — 1, son continuamente derivables,
en el entorno U"*"-" como composicién de las funciones continuamente deri-
vables. De las condiciones F(x, y' 0,i = 1,2,.. .,m,y (41.15), (41.13) pro-
viene que 0, y) = 0,k = 1,2,....m— 1.
Demostremos que en el punto (x, y') (véase (41.9))
ae,
800+ = Imad
Indiquemos previamente que de (41.10) y (41.15) se deduce que
2) OF, OF ae . 41.18)
We Wm
y de (41.12), que
oF, OF y 8
Sm ym 0, k= 12.0 umal (41.19)
Om Oe
s
a ae
4, 1, deo cual, como se sabe,
y
cl valor del determinante no cambiar4. Por es0, utilizando (41.18) y (41.19) y de-
sarrollando el determinante obtenido por los elementos de la iltima fila, obtenemos
a
Ahora, en el determinante.
stkima columna multiplicada por =8 §.41. Funciones implictas
0,»
20,5)
Fy X,Y) Ab), - . 2%,
Wm De Inn | 6,7
y coro el primer miembro de la igualdad es
segundo miembro, de donde
into de cero, seré no nulo también el
8G, Bd
so lo BO
BO + Fmd | v2.7
En vista de que las condiciones, analogas alas condiciones para las funciones F,,
i= 1,2,.. «4m, se cumplen para las funciones #,, i = 1, 2,...,m—I,y, de
acuerdo con la suposicién sobre la induccién, el sistema de ecuaciones (41.16) es
‘univocamente resoluble respecto de las variables,y,,.. .. Ym en certo entorno del
punto (, , Con més precision, sea U"**~ "un entorno rectangular del punto
@®, ¥) obtenido como resultado de la resolucion de la ecuacién F,, = O respecto
de la variable pq, Desarrollémosto en un producto de los entornos rectangulares U,
yUzdelos puntos = 2, . ..xe,1 = OP, .
respectivos Rey RF~! (aqui y
‘ces, existen un entorno U, C
yl inico sistema de funciones
V1 = AW) = Sie Xa
(41.20)
Im=1 = Sn 0) = S18
as
‘ue estén definidas en el conjunto U, y que satisfacen las siguientes condiciones: si
xe Uz, se tiene
41.3. Funciones implicitas deftnidas por un sistema 8
GAD «+ Se 1 Uy 2
yen U, las funciones (41.20) son continuamente derivables y satisfacen el sistema de
ecuaciones (41.16):
By os Xqp SAGs «Sm 100) = 0,
LQ. nm— 1. (41.22)
Es importante notar que en virtud de la unicidad de la solucién (41.20) del siste-
ma (41.16) para x € U,, 7 € UF € Yq € U!, el sistema de ecuaciones,
Ye = Ie k= AQ. m= Ay 1.23)
Ym = 8)
es equivalente al sistema (41.17).
Sustituyendo las expresiones (41.20) en (41.10), obtendremos una funcién dex,
definida en U,; designémosia con fy
Yin = Cy = SiO Lint) = Sn
Sefialemos que el sistema de funciones
MACs kde
(véanse (41.20) y (41.24)) es precisamente el sistema buscado de funciones que satis-
face las exigencias enunciadas en el teorema. En efecto, sea U, = Uz x U!; enton-
ces six € U,, de conformidad con (41.21) y @LID,SO) = GyWs- - sf GE Uy \
De (15), (41-22), (4.24) y (41.12) se deduce que Fr, /(0) = 0,1= 1,2... mh
para cualquier x € U,, Debido al teorema 1” y la suposicién de inducci6n, las fun-
ciones (41.10) y (41.20) y, por lo tanto, la funcién (41.24), son continuamente deri-
vables.
‘Hemos demostrado de este modo que la aplicacién f(x), definida por las fun-
ciones (41.25), es una solucién continuamente derivable del sistema de ecuaciones
(41.8) en el conjunto U,, y si en este caso, x € U,, entonces y = f(x) € U,. Observe-
mos, ademas, que si x € U;, el sistema (41.25) es equivalente ai sistema (41.23).
Resta demostrar la unicidad de la solucién del sistema de ecuaciones (41.8). Con |
‘este fin representemos en forma del esquema que sigue los pasos (realizados en el
‘transcurso de la demostracidn) de unos sistemas de ecuaciones a los otros, equiva- |
lentes alos primeros, es deci, a aquellos que tienen exactamente ls misma solu-
clones:
FG) = 0, P= 1,2...
Xn) = Sn) (41.24)
2 2p amy (41.28)
2). ym = Ly
* FI) FOF 0M F=NB--am—1y
8,9) = 0, F= 120.41,
Yn = PRY
¢
Y= Ler F= 1,2,
4642950 §.41. Funciones implicitas
Ym = 002)
*
i= Fide
Las flechas dobles_significan la equivalencia de los sistemas de ecuaciones en
consideracién, la cual en todo caso tiene lugar para x € U,,y € U,. De esta equiva
lencia deriva precisamente la unicidad de la solucién (41.25) del sistema (41.8) en los
fentornos que se consideran, de lo cual, segin se ha observado anteriormente, en vi
tud dela condicion Fi, y) = 0,i= 1, 2, . . .»m, se deduce que fe = y.0
El teorema demostrado sobre las funciones implictas es uno de los mas impor-
tantes teoremas del andlisis matematico y tiene toda una serie de aplicaciones en di-
ferentes apartados de éste. Con algunas de ellas nos encontraremos en los capitulos
ulteriores de nuestro curso. El teorema citado es un “teorema puro de existencia’
tanto su enunciado, como la demostracién aducida no dan origen, en el caso gene-
ral, a un método concreto de resolucién del sistema (41.8). Por ejemplo, si todas las,
Fy, k = 1,2, ..™m, enel sistema citado de ecuaciones son funciones elementales,
tentonces,siguiendo el esquema de la demostracin del teorema, no tendremos éxit
fen “*hallar (se trata de un caso general) en la forma explicita” todas aquellas fun-
cones cuya existencia se ha utilizado en la demostracién mencionada, y obtener una
solucin del sistema que tenga también la forma de las funciones elementales. Real-
mente, en este caso la soluci6n del sistema de ecuaciones (41.8), la que existe en vir-
tud del teorema citado, noes, en elcaso general, una lista de las funciones elemen-
tales (si incluso dicho sistema consta de una sola ecuacion).
‘Naturalmente, silas funciones F, son elementales y, por consiguiente, vienen de~
finidas mediante ciertas formulas, la soluciOn del sistema (41.8) puede hallarse con
‘cualquier grado de exactitud, es decir, en principio, las tablas de los valores de estas
soluciones pueden ser compuestas con cualquier grado de exactitud. En realidad,
sin embargo, la exactitud, con la que se calculan las soluciones, se determina, desde
luego, por el objetivo concreto, en aras del cual se resuelve el sistema en consider
«ion. El propio teorema 2en este caso nos da una certeza objetiva de que, al realizar
correctamente los célculos correspondientes,calculamos, de hecho, la solucién bus-
cada del sistema. No nos detendremos en los métodos numéricos que se emplean pa-
ra solucionar los sistemas de ecuaciones; solo algunas de las cuestiones de la resolu
‘cion numérica de las ecuaciones se consideran en ““Complemento” al final de este
tomo.
TIndiquemos como una circunstancia esencial que el teorema 2, al igual que todos
los teoremas de este tipo, proporciona métodos cualitativos, en el caso dado, para
estudiar las propiedades de las soluciones del sistema de ecuaciones.
Resulta interesante notar que las derivadas parciales de la solucién del sistema
resan con facilidad, si se cumplen las condiciones del teorema 2, en for-
través de las derivadas parciales de las funciones Fy, k = 1,2, -
Sm) = PCL Os +
12,2...
igualdades (41.8) respecto de x;, considerdndolas identidades segin x,
decir, sustituyendo en elas sus Soluciones y; = yj (ty, «+» %qheJ = ly
este caso obtendremos
9 Xn &S
sm En
41.3. Punciones implicitas definidas por un sistema 31
yy My
‘x, ‘ay, ax,
12cm
os
ste sistema de ecuaiones,inealesrespeto de, en virtud de que su determinan-
te en el punto considerado es distnto de cero: !
Fp «os Fp)
Bins Fo) 4,
30.000 I_)
tiene una solucién, y s6lo una, la cual puede hallarse, por ejemplo, segiin la regla de
Cramer*,
‘Si es preciso hallar todas las derivadas
Deen FSA e ey
conviene calcular las diferenciales de ambos miembros de las identidades menciona-
das arriba (41.8). Haciendo uso de la invariacién de la forma de la primera diferen-
cial respecto de la eleccién de las variables, obtendremos
“oF, oF,
ay k dy, =0, k= .
y mat y Bs Re NR am
= :
. Fy. +f,
a sta dela imma condcon 97" 4 0, te site de as euaione,
lineales respecto de dy,,... .» d)jq tiene una solucién y éstaes‘inica. Sila hallamos,
gheoefcene de de a expreston para dy srk prciaments la dervada parcial
a,
Los dos métodos son aplicables también para el célculo de las derivadas de Orde-
nes superiores de las funciones y,(xy,. . .»X,) que son soluciones del sistema de las
cecuaciones (41.8) (por ejemplo, Bajo el supuesto de que todas las funciones F, k =
= 1,2, + my tienen derivadas continuas de érdenes correspondientes). Aplicando el
método de diferenciales, se debe recordar, por supuesto, que las diferenciales de or-
dden superior al primero, si se expresan en términos de las diferenciales de las fun-
ciones, son mAs complejas, en lo que se refiere a su expresin, en comparacién con
cl caso cuando ellas se expresan s6lo en términos de las diferenciales de las variables
independientes (véase el p. 21.2).
‘Las derivadas de rdenes superiores de las funciones y;(x, . . «.X,) pueden ob-
tenerse también, por derivacién sucesiva, a partir de las expresiones para las prime-
9G. Cramer (1704 — 1752), matematico suizo.2 §.41. Funciones implictas
a
cs devas) gina ein rl Carbs tena
‘ecuaciones citado anteriormente
OF, “OF, 8
a Fey oo, kao,
% ay, Bx,
cen forma de una razbn entre dos determinantes. Dicharazén puede dervarsetantas
weces cuantas veces son dervables ls funciones F, k = 1, ....m. En este caso, si
todas las derivadas de las funciones F,, k = 1... m, de orden hasta r inclusive
son continuas, lo serdn también todes las derivadas parciales de las funciones
Ops kped = ty um, de orden hasta el mismo r
‘Un coajunto (lamado también a menudo una case) de todas las funciones que
son r veces continuamente derivabes en la regin G se denota con C*(G). De este
modo" sic adiionalmente alas condiciones del terema 2, F, € C’W),
‘m, donde Ues un cierto entorno del punto (x, y), las soluciones y; = yx
12) del sistema de ecuaciones (47) pertenece también ala clase C*(U,)en cierto en-
térmo U, del punto x®,
Ejetcicios. 5. ajo qué condiciones impuestas sobre Jy g, la ecuacién y = afte) + #12)
define, en certo entorno U del punto (x) Ia funcion z(x,9) © C2(U)? Dembesrese que,
cumplidas estas condiciones, para cualesquera (x, ») € U
Bh eihy + Hy =O
6, Sea dado un sistema de ecuaciones
wo) = - SOP
+O O) = ¥~F0.
Hillense las condiciones, impuestas sobre la funcion f, para las cuales est sistema define en
Gertgentorno U dl punto 3) as funcones w = ux, y),¥ = v(x, ») dela case CU).
Demieatese queen este cto, = w en todo punto de U.
41.4, APLICACIONES
En este punto se estudiarin las aplicaciones f: X ~ R™, X C R", es decir, aplica-
ciones de tl indole que a todo punto x = (x), .»,X,) del conjunto X, dispuesto en
clespacio puntual aritmético n-dimensional R* (véase el p. 18.1), le ponen en corres
pondencia el punto y = (7), . «» Jn) del espacio puntual aritmético m-dimensional
RM De este modo, fs (Xp «= 4X) — Or » Js Cy « «+ %q) €X. Obviamente,
la definicién de tl aplicacin Fes equivalente a in definicion de m funciones /;:X —~
= Riales que sea fix yp J = 1
GO = Lev
se denominan funciones coordenadas de la aplicacién J ¥ se escribe
fe Sm)
‘Alas aplicaciones que se consideran se generaliza el concepto de continuidad.
414, Aplicaciones 3
Definicién 3. Una aplicacién f: X — R™, XC R", se denomina continua en el
punto xe X, si para cualquier entorno V(y) del punto y® = f(x) existe tal en-
tomo Ute del punto x® que
HUEY AX CVO.
Por cuanto en todo entorno de un punto*) se contiene su entorno esférico,
dicha definicin es equivalente a la siguiente.
‘Una aplicacion f: X ~ R™, X CR", se denomina continua en el punto x e X,
i para cualquier e-entorno dei punto y®) = fe existe tal -entorno del punto x®
ae HUE, 5) 1X) c UY, €).
Esto, a su vez, puede ser parafraseado, con ayuda de las desigualdades, de la ma-
nera siguiente.
‘Una aplicacién f: X — R", X CR", se denomina continua en el punto x e X,
si para cualquier ¢ > Oexiste fal 8 > 0 que para todos los puntos x « X, que satisfa-
cen la condicién p(x, x) < 3, se cumple la desigualdad
FG), FO) < e.
La definicién de continuidad puede enunciarse tambien en términos de las suce-
siones.
Definieton 3°. Una aplicaci6n f: X ~ R", X CR", se denomina continua en el
punto x e X si para cualquier sucesion x ¢ X,k =1,2,.. .,tal que jim x” =
= 2, tiene lugar
. Him FO") = $00).
‘La equivalencia de estas dos definiciones se demuestra por analogia con la de-
mostracién de la equivalencia de las definiciones del limite de funciones segiin
Cauchy y segiin Heine. Demos a conocer esta demostracion.
‘Supongamos que la aplicacién f es continua en el punto x en el sentido de la
definicién 3, xX, k= 1,2... 49
Jim x” = x0. (41.27)
Prefijemos ¢ > 0. Para ¢ existe un 5 > Otal que si xe X, p(x,x) < 6, se verificala
desigualdad p(f(x), 64%) < 2.
En virtud de la condicion (41.27), existe tal nimero kp que para cualesquiera k >
> kotenemos x" e U(X, 5) y, por consiguiente, (f(x), 4) < &. Esto preci-
samente significa que jim fox) = fo‘),
‘Supongamos ahora que la aplicacién f es continua en el punto x en el sentido
dela definicion 3” y que las condiciones de la definicién 3 no estan cumplidas, es de-
cir, existe tal éy > 0, que para cualquier 8 > Oexiste un x, € Ue, 8) 9 X, paral
* Recordemos que se llama entorno de un punto cualquier conjunco abierto que contiene
dicho punto (véase la definicion 14 en el p. 18.2)sa § 41. Funciones implicitas
cual p(/(x,), S) > eo. Tomando sucesivamente 5 = — ,k = 1,2,. . ., yponien-
do, para abreviar, x“) = x,,,, obtenemos x) ¢ v1) 1 X, es decir, » x,
r
9) < {Por consiguiente, jim x4 = x yx eX; sin embargo, "), fee)>
2 £0, de este modo, la sucesion (f(x*)] no tiene el punto f(x) en calidad de su
limite. La contradiccién obtenida demuestra la afirmacién enunciada. O
‘Lema 1. La aplicacién f = (fy... fy): X = R".X CR", es continua en el
unto x cuando, y s6lo cuando, en dicho punto son continuas todas las funciones
coordenadas fy, . «5 Sy.
DEMOSTRACION DE IA NECESIDAD. Supongamos que la aplicacién J es continua
enel punto oe X, ¥ = (A, . . ., ¥) FG, De acuerdo con la definicién 3,
para todo entorno V(4) del punto ¥, en particular, para cada uno de sus entor-
nos eibicos (véase el p. 18.1)
PY, 2) = ly, -— ¥ < B
existe tal entorno U(#) del punto x que
SUG) NX) c PO, 2).
Por consiguiente, para todo x € U(x) 1 X se verifican las desigualdades
Ife) — YP 1 que el en-
torno e-cibico P(Y, e) del punto y® esta contenido en VY),
PY, &) C VOM,
Por ser continua cada una de las funciones f= 1, 2, . . ., m, en el punto x
cexisten tales entornos U; = Ut!) que para x € U; M X se verifica la desigualdad
U4) - Yl 0.
weet,
Ahora, observando que de (41.86) se deduce
Foy = Sum taco (41.92)
donde lim, a (r, ¢) = 0, elijamos » > Ode modo tal que para r < p se verifique la
desigualdad .
lates el Ope me Yo Fra de
sth definida y es continuamente derivable en el entorno U!?. La primera de estas
‘aplicaciones es continuamente derivable en el entorno U® del punto (1, ... 39,
22?) yi segunda es continuamente derivable en el entorno correspondiente del pun-
13, «20 x0) Por ello, de (42.10) de las propiedades de los jacobianos de
Yr) Oy
nA) Br
‘De acuerdo on la condcibn del eorema, el rango de a mati de Jacoot ene
conjunto G es igual o inferior a r, por consiguiente,
Veo Wye InIead
ay nx)
Se). (2a)
nk)
en todo punto de G. Por elo, de (42.11) se desprende en seguida que para cualquier
punto (¥1, --. +37) € Uy, por ende, para todo punto
Ov Pe Xp Af ee a EU
sé verifica la igualdad (42.8). Puesto que las coordenadas xf se han fijado arbitr
riamente, con tal de que sea Ix? — 1 <8, k= rt Wye J — ted + leon
rn, esto quiere decir que la igualdad (42.8) es justa en todo el entorno U.
De este modo, la funcién (42.7) depende sblo de las variables yy... »¥,- Al de-
signarla por el simbolo &, obtendremos
er Wares Sooke pron hg) = AO Ie
jamos ahora by 8p <5 y 6) < 1, de una manera tal que para Ix; — x91 < by,
i= 1,2,...,,se cumplan las desigualdades
ly — Pl <8 = 1.2
te
Esto ¢s posible, puesto que las funciones y, = #61,
sistema (42.5) son continuas en el punto x.%6 $42. Dependencia de as funciones
En virtud de lo demostrado, para cualquier punto x del entorno dy-cibico del
punto x, es decir, para todo punto x = (xy, ... »%,) tal que
Ii, = PL < 81 = 12s om
Sek vllda a identdd 6G) = Bei00, 4D
decir, en el entorno citado del punto 2 las funciones ¢,,
pendientes.
‘Andlogamente se demuestra también la dependencia de cada una de las fun-
iomes ¢, 2 +» + %m de gs ~- + , en cierto entorno del punto x.
‘Al igual que la condicién necesaria para la dependencia de las funciones, las con-
diciones suficientes pueden enunciarse también en términos de los gradientes. Para
simplifcar,limitémonos al caso en que r = m — 1.
Silos gradientes Ve), ... , Ve Son linealmente dependientes en todo punto de
1a regidn G, entonces, cualquiera que seael punto x € Gen el quem — 1 de os gra-
dientes mencionados son linealmente independientes, existe un entorno suyo en el
cual las funciones 4, .. 5 mq son dependientes. Ademds, si, por ejemplo, los gra-
dientes V¢, . , em 80% linealmente independientes en el punio dado y, por lo
tanto, el gradiente Ve,, en él es una combinacién lineal de ellos, entonces en el en-
‘torn mencionado la funcién q depende de las funciones ,-- + %m — \-
‘Conviene fijar Ia atencién en que las condiciones suficientes para la dependencia
de las funciones, establecidas aqui, tienen un cardcter loca, a diferencia de los resul-
tados del punto anterior que son de cardcter global. Esto significa lo siguiente: si un
sistema de m funciones continuamente derivables (42.1) es dependiente en el con-
junto abierto G CR", entonces, de acuerdo con el teorema I del p. 42.1, en todo
punto dé dicho conjunto el rango de la matriz de Jacobi de este sistema es inferior a
‘m (correspondientemente, si por lo menos en un punto del cunjunto G el rango de la
‘matriz que se considera es igual a m, el sistema es independiente en todo el conjunto
G). En cuanto al teorema 2 de este punto, se debe decir que éste solo afirma que si
en algin punto x e G se cumplen sus condiciones, el sistema dado de funciones
serd dependiente s6lo en cierto entorno del punto citado (y no en todo el conjunto
G). De este modo, efectivamente, la afirmacién del teorema 2 tiene un cardcter lo-
cal.
Diremos, ademés, que si en fodo punto x del conjunto abierto G se cumplen
las condiciones del teorema 2, entonces, naturalmente, en este caso, el sistema de
funciones en consideracién serd dependiente en cierto entorno de todo punto. No
obstante, el teorema 2 no garantiza que dicha dependencia sera la misma en todos
los entornos indicados, es decir, del teorema 2no se infiere que en diferentes puntos
unas mismas funciones serdn dependientes de las otras y que las funciones # que
‘cristalizan en realidad” la dependencia de unas mismas funciones, consideradas en
distintos entornos, serdn coincidentes en los puntos de interseccién de estos entor-
nos. Por consiguiente, del teorema 2 no se infiere ni mucho menos que el sistema de
funciones que satisface las condiciones de este teorema en todos los puntos x del
conjunto G serd dependiente en todo el conjunto G en su total en el tinico sentido,
es decir, en el sentido de la definici6n 1. Esto precisamente
‘que el teorema 2 no lleva el cardcter global.
+r @p 4 son de-
43.1. Concepto de extremo condicionado 2
Observemos que existe un acceso algo mas general al concepto de dependencia
de las funciones que permite construir la teoria global de este problema, sin embar-
{80 no nos detendremos en ello.
Ejemplo. Examinemos un sistema de funciones
w= sen (+ y)
(42.12)
cos (x + 9).
El jacobiano de este sistema es nulo en todo el plano
cos (x + y) cos & +»)
—sen & + y) ~sen (x + y)
y, como ¢s facil de ver, el rango de la matriz de Jacobi de este sistema es igual a uno
en todos los puntos del plano,
‘Segiin el teorema 2, las funciones (42.12) son dependientes en el entorno de cada
punto del plano. En el caso dado la dependencia de las funciones se halla facilmente
en la forma explicita, por ejemplo, en el conjunto abierto de los puntos (x, »), para
los cuales cos (x + y) > 0, ella puede ser dada por la formula v = VI =u’
Ejercicios. 1. Sean w= +P +2 vewt eta wertyte De
rmuéstrese que las funciones u, v, son dependientes y hllese Ia ecuacién que expresa su de-
pendencia
2. Investiguese la cuestion sobre la dependencia de las funciones u = §? + 9? + 9,
va intwa + a+ Bz int att i.
Problema 28, Una funcién u = u(x, y) se denomina arménica en una region plana, sien
todos los puntos de esta region satisface la ecuacién Au = 0 (véase (41-109)), Demuéstrese
‘que dos funciones arménicas son dependientes en una regién plana cuando, y s6lo cuando
son linealmente dependientes.
§ 43. EXTREMO CONDICIONADO.
48.1. CONCEPTO DE EXTREMO CONDICIONADO
Supongamos que en un conjuntoabierto G C R" vienen definida las funciones
[00 = 1,2, 5m, 3.)
vi
x = (y= 4%) € @. Designemos mediante X un conjunto de los puntos x € G,
donde todas las funciones f,,/ = 1, 2, .. ,m se reducen a cero:
| X= bef) = 0 = 1,2... ,mx € GB). (43.2)
Las ecuaciones
Se) = 5 = 1,2,
se llamarén ecuaciones de conexién (enlace).
(43.3)
> pang8. § 43. Extremo condicionado
Definicién 1. Sea y = f,(x) una funcién definidaen G. El punto x® e X sella-
‘ma punto de extremo condicionado®) de la funcion Jy (x) respecto de las euaciones
de enlace (43.3) (0 si se cumplen dichas ecuaciones), siempre que es un punto de
‘extremo ordinario de esta funci6n al considerarse ésta slo en el conjunto X (véase
elp. 40.1).
En otras palabras, el valor de la funcion fox) en el punto x se compara aqui no
con todos los valores suyos en un entorno suficientemente pequetio de este punto,
sino s6lo con los valores en los puntos pertenecientes, ala vez, al mencionado entor:
no suficiente pequefio y al conjunto X. Al igual que en el caso de los extremos ord
narios, podemos, desde luego, considerar los puntos de extremo simplemente con-
dicionado y los de extremo estrictamente condicionado.
Ejemplos. 1. Consideraremos una funcion
Seya2ey (43.4)
y la ecuacién de enlace
xty-1=0. 3.5)
Hallemos el extremo condicionado de la funcién (43.4) para el caso en que se
‘cumple la ecuacién de enlace (43.5). De (43.5) tenemos y = 1 ~ x, de donde
See 1 = x) = BP - 2+ 1
De este modo, cuando se cumple la condicién de enlace, la funcién (43.4) es una
funcién de una sola variable. Su extremo se halla de una manera elemental: igualan-
do a cero su
2x — 1 = 0,dedondex
evidentemente, un minimo (la funcién es un potinomio de segundo grado cuyo tér-
ida (la condicion necesaria de un extremo), obtenemos
1
En el punto dado la funcién que se considera, tiene,
mino mayor tiene coeficiente positive). Al valor x = > + de conformidad con la
‘ecuacién de enlace (43.5), le corresponde
2
Por consiguiente, en el punto (1/2, 1/2) a funcién (43.4) alcanza su minimo res-
pecto de la ecuacién de enlace (43.5). En el lenguaje geomeétrico esto significa que el
unto del paraboloide z = x? + y?, que se proyecta en el punto (1/2, 1/2), es el
més inferior de todos sus puntos dispuestos por encima de la recta (43.5) (fig. 165).
Este ejemplo muestra que un punto en el que la funcién alcanza su extremo condi-
cionado, no es, en el caso general, punto de extremo de esta funcién.
2, Consideraremos la funcion f(x, y) = y* — x*ylaecuacién de enlace y = 2x.
‘Tenemos f(x, 2x) = 3x?, es decir, si se cumplen las ecuaciones de enlace, la fun-
cién en consideracién es también una funcién de una sola variable y, evidentemen-
te, alcanza su minimo cuando.x = 0{fig. 170). De conformidad con la ecuacién de
enlace, al valor x = Ocorresponde el valor dey = 0, y, por lo tanto, la funcién fix,
y) = y? — x7 tiene en el punto (0, 0) un minimo condicionado respecto de la
ecuacién de enlace y = 2x.
"9 Sea adoptado también el término “extremo relativo".
43.1, Concepto de extremo condicionado x
Fig, 169
Cabe destacar que en este caso Ia propia funcion f(x, y) no tiene maximo ni
‘minimo en ningiin punto del plano. De este modo, e! ejemplo considerado muestra
{que la funciOn puede no tener un extremo, pero, para ciertas ecuaciones de enlace,
puede tener un extremo condicionado.
En lo sucesivo supondremos que
1) todas las funciones fof, - Jy Son continuamente derivables en el conjunto
abierto
2) en el punto x que se considera, los vectores Vfj, -.. » Vf Som linealmente
independientes, es decir, el rango de la matriz de Jacobi
(mu
pm i= AQ omy
Fin. 170100 § 43. Extremo condicionado
csigual a m, o sea, al nimero de sus fils las filas de la matriz de Jacobi son compo-
nentes de los gradientes Vf... » Vfn)-
De acuerdo con los resultados del pérrafo anterior, esto significa que las fun-
ciones del sistema (43.1) son independientes en cierto entorno del punto x. Por
cuanto en un espacio n-dimensional no pueden haber mas de n vectores linealmente
independientes y el rango de la matriz no puede exceder del niimero de columnas,
entonces, de la condicién 2) proviene que m