ORIGINAL

FACIAL PARALYSIS REPORTED IN A PAEDIATRIC EMERGENCY DEPARTMENT:

ACTUATION PROTOCOL REVIEWED AND VERIFIED
Summary. Introduction. As result of our aim to improve the quality standard of our emergency system, work has been carried
out in relation to the development and monitorization of effective clinical protocols in the department of paediatric practice.
Patients and methods. An evidence based review approach was taken to design a clinical protocol about Bell’s palsy condition
for the paediatric emergency department. Previous protocol approved in March 2003 was reviewed accordingly with the new
designed protocol’s quality standards. The Bell’s palsy cases reported since March 2003 until June 2006 to paediatric emer-
gency department were analyzed. Results. A total of 27 patients affected by Bell’s palsy were reported to the hospital’s
emergency department. Facial expression was described in 85.19% of the cases. Cranial nerves normal function was reported
in 77.78%. Fundoscopic examination was described in 77.78% and otoscopic findings in 44.44%; the absence of herpes
vesicles was analyzed only in 11.11%. All patients received steroid therapy (prednisone) and the treatment resulted in the
complete recovery. The mean time to resolution was 58.6 days. Conclusions. In order to improve hospital’s quality standards,
clinical protocols should be designed and verified regularly to ensure the proper performance. Medical auditing also
contributes to improve effectiveness in health attendance. [REV NEUROL 2007; 45: 205-10]
Key words. Bell’s palsy. Clinical protocols. Facial paralysis. Medical audit. Paediatric emergencies. Quality standards.

Aportación de los estudios neurofisiológico y ecográfico

al diagnóstico del síndrome del túnel carpiano.
Correlación quirúrgica
C. de Pablos a, M. Velasco-Zarzosa a, R. Landeras-Álvaro b,
M. Rubio-Lorenzo c, P. Martínez-Zubieta c

APORTACIÓN DE LOS ESTUDIOS NEUROFISIOLÓGICO Y ECOGRÁFICO AL DIAGNÓSTICO

DEL SÍNDROME DEL TÚNEL CARPIANO. CORRELACIÓN QUIRÚRGICA
Resumen. Introducción. El estudio neurofisiológico (ENF) como técnica de elección para el diagnóstico del síndrome del tú-
nel carpiano (STC) ha demostrado repetidamente su utilidad y eficacia. Más recientemente se han incorporado técnicas de
imagen como la ecografía (ECO), que aporta valiosos datos en cuanto a la morfología normal del nervio mediano en el canal
carpiano y sus cambios patológicos. Nuestro objetivo ha sido comparar los resultados de ambos estudios, ENF y ECO, en un
número reducido de pacientes de nuestra casuística con el fin de comprobar su diferente utilidad en el diagnóstico del síndro-
me. Pacientes y métodos. 60 pacientes diagnosticados de STC, en los que se estudió la conducción nerviosa de ambos nervios
medianos y cubital mediante electrodos de superficie, así como estudio ecográfico de ambas muñecas mediante transductores
lineales 5-10 Hz y 5-12,5 MHz. Resultados. Según el grado de afectación se utilizaron escalas de gravedad para ambas prue-
bas y los resultados se compararon estadísticamente mediante análisis de regresión, test de Pearson y test t pareado, que de-
mostraron una ausencia de correlación entre ambas pruebas. Conclusión. La falta de correlación evidenciada entre ambas
pruebas en los diferentes estudios estadísticos utilizados indica que ambas son herramientas útiles en el diagnóstico de STC.
Los datos neurofisiológicos aportan información acerca de la funcionalidad del nervio y la ECO, por su parte, informa de sus
alteraciones morfológicas en condiciones patológicas y las posibles lesiones o variantes anatómicas causantes del síndrome,
por lo que consideramos que ambas pruebas no son excluyentes, sino complementarias. [REV NEUROL 2007; 45: 210-5]
Palabras clave. Anatomía del túnel carpiano. Conducción nerviosa. Ecografía. Estudio neurofisiológico. Síndrome del túnel
carpiano. Técnicas comparativas.

INTRODUCCIÓN ye el mayor porcentaje de pacientes en los laboratorios de neu-

El síndrome del túnel carpiano (STC) producido por la compre-
sión del nervio mediano en la muñeca es la mononeuropatía por
atrapamiento más frecuente de miembros superiores y constitu-
Aceptado tras revisión externa: 06.07.07.
a
Servicio de Neurofisiología Clínica. b Servicio de Radiología. c Servicio de
Traumatología y Ortopedia. Hospital Universitario Marqués de Valdecilla.
Santander, Cantabria, España.
Correspondencia: Dra. Carmen de Pablos Vicente. Servicio de Neurofisio-
logía Clínica. Hospital Universitario Marqués de Valdecilla. Avda. Valdeci-
lla, s/n. E-39008 Santander (Cantabria). Fax: +34 942 315 095. E-mail:
nflpvc@humv.es
© 2007, REVISTA DE NEUROLOGÍA
rofisiología clínica [1-3]. Puede aparecer en el contexto de una
afectación más difusa de nervio periférico como la diabetes o el
hipotiroidismo; pero, en la mayoría de los casos, no se puede de-
mostrar una causa. Es de sobra conocida su asociación con tra-
bajos que implican actividad manual repetida, pero hay también
otros factores que contribuyen a su aparición o agravamiento,
como la obesidad o la edad avanzada [4,5]. Asimismo, se discu-
te la importancia de la genética en su aparición, dada la frecuen-
te ocurrencia de casos familiares [6,7].
En fases iniciales del síndrome la aplicación de medidas
conservadoras puede ser útil para mejorar los síntomas; sin em-
bargo, el tratamiento de elección es quirúrgico, por lo que es
importante efectuar el diagnóstico diferencial con otras entida-

210 REV NEUROL 2007; 45 (4): 210-215

 SÍNDROME DEL TUNEL CARPIANO

Tabla. Valores de conducción del nervio mediano.

Conducción motora Conducción sensitiva

LDM (ms) VCM (m/s) Amp (mv) VCD1 (m/s) Amp 1 (µv) VCD3 (m/s) Amp 3 (µv)

Media 3,3 59,8 10,7 51,0 13,8 54,7 10,3 Controles: 100 (72 M, 28 H)
DE 0,4 5,5 4,1 5,2 5,0 3,8 3,9 Edad: 22-85 años
(media: 53,5 años)

Media 4,8 54,3 9,6 32,7 4,9 34,6 3,3 Pacientes: 60 (51 M, 9 H)
DE 1,9 9,9 4,5 16,3 5,3 16,6 3,6 Edad: 21-82 años
(media: 52,2 años)

DE: desviación estándar; LDM: latencia distal motora; VCM: velocidad de conducción motora segmento codo-muñeca; Amp: amplitud del potencial motor; VCD1:
velocidad de conducción sensitiva dedo 1-muñeca; Amp 1: amplitud del potencial sensitivo dedo 1-muñeca; VCD3: velocidad de conducción sensitiva dedo 3-mu-
ñeca; Amp 3: amplitud del potencial sensitivo dedo 3-muñeca; M: mujeres; H: hombres.

para confirmar el diagnóstico de STC. Además, permite estable-

cer la gravedad de la afectación, excluir neuropatía difusa y te-
ner unos datos de referencia para estudios postoperatorios [1,4,
8-10]. La elevada incidencia y significación del síndrome ha lle-
vado al desarrollo de diversas técnicas neurofisiológicas con el
fin de delimitar el lugar de atrapamiento con la mayor precisión
posible, y a la publicación de protocolos y guías de parámetros
prácticos para su diagnóstico, tanto clínico como neurofisioló-
gico [2,3,9,11,12].
La ecografía (ECO), como técnica de imagen, se ha incor-
porado, más recientemente, de forma habitual en el diagnóstico
del STC. Con esta técnica se puede obtener una valoración ana-
tómica del canal, del nervio mediano y las estructuras adyacen-
tes, y comprobar sus modificaciones en condiciones patológi-
cas. A lo largo de la última década, la introducción de transduc-
tores de alta frecuencia (5-12 y 5-15 MHz) y de nuevos equipos
ecográficos con mayor resolución de campo ha permitido una
mejoría en la visualización de las partes blandas, incluyendo los
nervios periféricos [13].
Presentamos los resultados del estudio combinado neurofi-
siológico y ecográfico efectuado en una serie pacientes diag-
nosticados de STC con el fin de comparar ambas pruebas.

Figura 1. Anatomía del túnel del carpo normal. Objetivamos, a la altura del
relieve óseo del escafoides y pisiforme, el nervio mediano en localización
superficial a los tendones flexores del segundo y tercer dedos, bajo el re-
tináculo flexor. El nervio se visualiza con menor ecogenicidad que los ten-
dones flexores.
PACIENTES Y MÉTODOS
Seleccionamos al azar 60 pacientes, remitidos al laboratorio de Neurofisio-
logía Clínica con el diagnóstico clínico de STC, 51 mujeres y 9 hombres,
con edades comprendidas entre 21 y 82 años (media: 52,25 años).
En todos los casos el síntoma predominante y con el que se inició el cua-
dro fueron las parestesias de predominio nocturno. En 19, además, había
dolor, en 11 pérdida de habilidad o fuerza y en 4 se objetivó amiotrofia. De
estos pacientes, 15 fueron intervenidos.
En 4 casos el estudio fue unilateral, y en el resto se estudiaron ambas ma-
nos. En total se estudiaron 116 manos.
En todos los casos, además del nervio mediano, se estudió el nervio cubi-
tal del lado más afecto.

des que puedan provocar síntomas análogos. La precocidad en Método neurofisiológico

el diagnóstico es también importante, ya que de ello depende,
en gran parte, el éxito de la intervención; porque la edad, la lar-
ga evolución, la existencia de atrofia de la eminencia tenar o las
respuestas ausentes o muy prolongadas a la estimulación del
nervio son factores que se han asociado con peor pronóstico tras
la descompresión [4,8].
El estudio neurofisiológico (ENF) ha demostrado ser un
método válido, con un alto grado de sensibilidad y especificidad
Se emplearon electrodos de superficie tanto para estimulación como para
registro, con montaje vientre muscular-tendón para el componente motor.
El nervio mediano se estimuló en muñeca y en codo, y el nervio cubital en
muñeca, bajo-codo y sobre-codo. Para estudio del componente sensitivo se
emplearon electrodos de registro de superficie en muñeca con montaje mo-
nopolar, estimulando los dedos 1 y 3 en el nervio mediano y el dedo 5 en el
cubital. Ocasionalmente se utilizaron electrodos profundos de aguja en mu-
ñeca para registro de los potenciales sensitivos en aquellos nervios media-
nos más afectos.

REV NEUROL 2007; 45 (4): 210-215 211

C. DE PABLOS, ET AL
Los parámetros valorados fueron: en el componente motor latencia distal
motora (LDM), velocidad de conducción motora (VCM) en el segmento co-
do-muñeca para el estudio del nervio mediano y en los segmentos bajo codo-
muñeca y a través de codo para el nervio cubital, así como la amplitud del
potencial motor distal. En el componente sensitivo se valoró la velocidad de
conducción sensitiva (VCS) de los segmentos dedo 1-muñeca (VCS1) y de-
do 3-muñeca (VCS3) en el nervio mediano y del segmento dedo 5-muñeca
(VCS5) en el nervio cubital, así como las amplitudes correspondientes y la
forma del potencial: normal, desincronizada o polifásica.
La temperatura se mantuvo por encima de los 32 ºC, utilizando una lám-
para de infrarrojos para calentar la extremidad.
Los resultados se compararon con valores normales obtenidos en nuestro
laboratorio en un grupo de pacientes con edades similares (Tabla).
Para valorar el grado de afectación establecimos una escala del 1 al 5, te-
niendo en cuenta el número de parámetros neurofisiológicos alterados y su
intensidad, de modo similar a otras publicadas [14,15]:
0. Normal: sin anomalías en el ENF.
1. Muy leve: descenso discreto en los valores de conducción sensitiva, sin
aumento en la LDM.
2. Leve: aumento de la LDM y/o la VCS.
3. Moderado: anomalías en la conducción y en la amplitud.
4. Acusado: algún potencial sensitivo ausente y aumento de la LDM.
5. Muy acusado: potenciales motores ausentes.
Método ecográfico
Se utilizaron transductores lineales 5-10 MHz (Logic 500 GE) y 5-12,5 MHz
(Esaote, Technos mpx), que permiten el estudio detallado anatómico de los
nervios mediano en el túnel del carpo y cubital en el canal de Guyón en los
planos transverso y longitudinal y su valoración dinámica.
El patrón ecográfico típico en un nervio normal consiste en un ‘patrón
fascicular’ en el plano longitudinal que consta de múltiples bandas hipo-
ecoicas que representan a los fascículos nerviosos, separados por bandas
discontinuas hiperecoicas correspondientes al perineuro que rodea los fas-
cículos y al epineuro que forma la envuelta superficial del tronco nervioso.
En el plano transverso observamos un patrón ‘reticular’ que consta de áreas
hipoecoicas redondeadas u ovales, correspondientes a los fascículos, rodea-
das de líneas hiperecoicas (peri y epineuro). El número de fascículos detec-
tables ecográficamente es menor que el número real [16,17].
En el estudio sistemático del túnel del carpo debemos visualizar el nervio
mediano proximal al túnel del carpo, a la altura del músculo pronador cua-
drado, y seguirle en el interior de túnel donde proximalmente presenta una
forma elíptica en el plano transverso, para ir aplanándose progresivamente
[18]. En las maniobras dinámicas observamos un pequeño desplazamiento
del nervio, comparado con el amplio movimiento de los tendones (Fig. 1).
Los criterios diagnósticos por imagen clásicos de STC incluyen:
– Engrosamiento proximal del nervio medido a la altura del radio distal o
túnel proximal y aplanamiento distal: un área mayor de 9 mm2 en el tú-
nel proximal es un criterio de STC [13,19]. Para clasificar el grado de
afectación considerando el tamaño del nervio nos hemos basado en el tra-
bajo de Lee et al [19], calculando el área del nervio a la altura del esca-
foides basándose en su forma elíptica, A = Pi (D1 × D2) / 4. Hemos con-
siderado que había afectación leve-media si el área era mayor de 9 mm2;
moderada, si era igual o mayor de 15 mm2, y acusada, si era mayor de
20 mm2 [13, 16-19].
– Engrosamiento del retináculo flexor: mayor de 1,1 mm en varones y de
1 mm en mujeres.
– Abombamiento del retináculo flexor: una distancia igual o superior a 4 mm
entre el punto más superficial del retináculo y una línea que una la punta
del gancho del ganchoso y el tubérculo del trapecio.
Ecográficamente es posible detectar, en ocasiones, la causa de la compre-
sión como: tenosinovitis de los tendones flexores, en que observaremos un
halo hipoecoico que los bordea, correspondiente a la distensión de la vaina
y al aumento de la vascularización mediante Doppler; lesiones focales en el
interior del túnel como gangliones, depósitos de amiloide o tumor de célu-
las gigantes de las vainas tendinosas; tumores neurogénicos y variantes ana-
tómicas musculares, como vientres flexores de los dedos anómalos o inser-
ciones proximales de los lumbricales. También variantes del nervio como
nervio mediano bífido (2,8% de la población normal), que, a su vez, se pue-
212
Figura 2. Variantes. La ecografía permite detectar variantes anatómicas
que pueden ser importantes de cara al tratamiento quirúrgico. Ejemplo de
nervio mediano bífido (dividido en dos ramas antes de entrar en el túnel
del carpo) con arteria mediana persistente.
de asociar con una arteria mediana persistente cuya trombosis puede desen-
cadenar clínica de túnel carpiano [20] (Fig. 2).
Método quirúrgico
Bajo anestesia local o regional intravenosa y con isquemia preventiva de la
extremidad se practica incisión longitudinal palmar sobre el borde radial del
cuarto eje de la mano, desde el pliegue de flexión distal de la muñeca hasta
el cruce con la línea de Kaplan; posteriormente, se efectúa sección del reti-
náculo flexor en su borde cubital y exploración del nervio mediano y del
contenido del canal carpiano, procediéndose a la liberación del nervio y co-
rrección de patologías sobreañadidas, si las hubiere. Finalmente, se realiza
hemostasia y cierre cutáneo.
RESULTADOS
Estudio neurofisiológico
En total se estudiaron 116 nervios medianos; 99 fueron patológicos (85,3%)
y 17 (14,6%) normales. Según la intensidad de afectación, 27 nervios se ca-
lificaron de grado leve, 14 leve-moderado, 25 moderado, 13 moderado-acu-
sado y 20 acusado.
Afectación bilateral se encontró en 44 pacientes y en 11 se observaron
anomalías limitadas a un mediano.
Estudio ecográfico
Se estudiaron 97 manos: en 76 (78,3%) en encontraron alteraciones y en 21
(21,6%) el estudio fue normal. De las 76 manos con ECO patológica, en 30
el grado de afectación fue leve, en 22 leve a moderado, en 17 moderado, y
en 7 acusado.
Correlación ENF-ECO
Se comparó el resultado de ambas pruebas en ambas manos separadamente:
– Mano derecha: se efectuaron ambas pruebas en 53 manos. Según las es-
calas establecidas para cada prueba, el grado de afectación fue análogo
para ambas pruebas en 14 pacientes, en 28 el grado de afectación era ma-
yor en el ENF que en la ECO y en 11 pacientes la intensidad de afecta-
ción era mayor en la ECO que en el ENF.
– Mano izquierda: se efectuaron ambas pruebas en 44 manos, de las cuales
en 9 el grado de afectación fue análogo, tanto en el ENF como en la ECO
(3 normales, 2 leves, 2 moderados y 2 acusados) y diferente en 35 (en 27
había mayor afectación en el ENF que en la ECO y en 8 mayor afecta-
ción en la ECO que en el ENF).
Estos resultados se compararon estadísticamente mediante análisis de regre-
sión, test de correlación de Pearson y test t pareado.
Análisis de regresión
La comparación de resultados ENF/ECO de la mano derecha muestra que
REV NEUROL 2007; 45 (4): 210-215

Figura 3. Imagen intraoperatoria en un caso de síndrome del túnel car-
piano acusado con signos de estenosis e isquemia neural.
se ajustan a la ecuación de la recta siguiente: ENF = 2,18 + 0,563 ECO, lo
que demuestra que el valor de p es menor que el nivel de significación 0,05.
Por lo tanto, no podemos afirmar que haya significación estadística.
ENF/ECO de la mano izquierda: el análisis en este caso se ajusta a la
ecuación de la recta ENF = 2,18 + 0,484 ECO, que tiene idénticos resulta-
dos al previo.
Test de Pearson
La correlación entre ENF y ECO de la mano derecha no se puede afirmar,
ya que dicho valor es de 0,504 (p = 0,0000; p < 0,05).
En el caso de la mano izquierda, el coeficiente de correlación de Pearson
es 0,428, con idéntica significación que el anterior.
Test t pareado
Se formula la hipótesis siguiente: que tanto los resultados de la ECO dere-
cha como del ENF derecho tengan igual media; se demuestra con el interva-
lo de confianza del 95%, con t = 4,31, p = 0,000, p < 0,005, que no podemos
aceptar dicha hipótesis.
Iguales conclusiones se obtienen de dicho test aplicado a la ECO y el
ENF del lado izquierdo.
DISCUSIÓN
La susceptibilidad del nervio mediano en el sector del canal car-
piano viene dada por las condiciones anatómicas de la región,
consistente en un túnel osteofibroso que, dada su rigidez, es
susceptible de estrechamiento por factores compresivos, con la
consiguiente afectación de las estructuras que transcurren en su
interior.
Los mecanismos básicos de la afectación en la conducción
nerviosa ante compresión prolongada se han demostrado en es-
tudios experimentales: con niveles bajos de compresión, lo pri-
mero que ocurre es la disminución del flujo sanguíneo epineu-
ral, el aumento de la presión endoneural y la afectación del
transporte axonal. A mayor compresión o compresión más du-
radera, se produce isquemia y edema epineural, se bloquea el
transporte axonal y, progresivamente, se produce lesión vascu-
lar intraneural y edema endoneural (intrafascicular), que inter-
fiere con la función nerviosa, alterando el medio iónico de los
REV NEUROL 2007; 45 (4): 210-215
SÍNDROME DEL TUNEL CARPIANO
axones y disminuyendo el flujo capilar. Niveles de compresión
mayores producen lesión vascular intraneural hasta la isquemia
completa. El edema endoneural duradero induce invasión por fi-
broblastos, que conduce a fibrosis. Últimamente ocurre desmie-
linización y degeneración axonal. En estudios animales, tras
compresión grave se ha observado desplazamiento nodal con
invaginación de las áreas comprimidas hacia segmentos nervio-
sos no comprimidos [21-23].
Estas lesiones, corroboradas en pacientes con STC, se co-
rrelacionan con la sintomatología clínica, siendo la primera ma-
nifestación las parestesias, atribuidas a una descarga excesiva
neuronal en el nervio mediano relacionada, al igual que el dolor,
con la isquemia [24,25].
La debilidad o la atrofia no aparecen hasta fases avanzadas
en las que hay mayor desmielinización y degeneración axonal,
con afectación de un número grande de fibras nerviosas [26].
En esta fase la pérdida de sensibilidad es permanente.
El diagnóstico neurofisiológico del STC se efectúa demos-
trando, a través del lugar de atrapamiento, el descenso en la ve-
locidad de conducción, debido al proceso de desmielinización/
remielinización, que es el hecho primordial en el STC, siendo la
VCS un parámetro más sensible que la motora [1,24,27]. La
amplitud de los potenciales, parámetro indicativo del número de
axones funcionantes, puede estar disminuida, lo que indica, ade-
más, pérdida o bloqueo de fibras [27].
La conducción en los segmentos distales y proximales a la
compresión es normal, pero también puede estar lentificada,
aunque en menor grado, y con dispersión del potencial de ac-
ción. Los cambios distales se han atribuido a reducción del diá-
metro de fibras o a la inclusión de un corto segmento desmieli-
nizado, y el descenso en la velocidad de conducción proximal,
que se ve en casos acusados, a un incremento del tejido conecti-
vo [1,24,27,28].
El electromiograma de músculos de la mano inervados por
el nervio mediano se considera de escaso valor, ya que suele ser
normal, salvo en casos acusados en que se pueden hallar signos
de denervación, indicativos de degeneración de fibras [24,29].
Se han desarrollado numerosas técnicas neurofisiológicas
para la detección del síndrome: determinación de la conducción
sensitiva dedo-palma y palma-muñeca; diversas técnicas com-
parativas mediano/cubital o mediano/radial; técnicas de estimu-
lación segmental o determinación de la conducción motora
transcarpiana, entre otras, en busca del test diagnóstico infalible
[3,11,12,30]. Sin embargo, hasta la fecha no se ha podido de-
mostrar una técnica superior a otras, teniendo que recurrirse, en
algunos casos, a la combinación de varias.
La ECO, por otro lado, detecta las anomalías y las altera-
ciones del nervio mediano debidas a la compresión, así como
las lesiones focales u otras alteraciones que causen el cuadro
clínico y variantes anatómicas cuyo conocimiento puede ser
especialmente relevante de cara a la cirugía. Asimismo, permi-
te valorar cambios y complicaciones posquirúrgicas y realizar
seguimiento de las lesiones cuando se opte por el tratamiento
conservador, constituyendo, por todo ello, una técnica de gran
disponibilidad, no invasiva, inocua, rápida y cómoda para el pa-
ciente [16,18,31,32].
La cirugía apoyada en ambos métodos diagnósticos da ex-
celentes resultados y aporta datos al conocimiento del síndro-
me. Según datos obtenidos en nuestro hospital, en un 82% de
los casos intervenidos de STC se observa patología aislada del
nervio mediano con variable grado de afectación según las dis-
213
C. DE PABLOS, ET AL

tintas fases de compresión. En fases iniciales hay alteración vas-

cular aislada del nervio, observándose en primer lugar un ‘bo-
rramiento’ y después interrupción de la circulación en el meso-
neuro y palidez, pero conservándose todavía el diámetro normal
del nervio; en casos más avanzados se observa estenosis nervio-
sa (Fig. 3), precedida de un aumento del diámetro por edema, de
distinta intensidad, con cianosis en la zona de compresión y, en
casos acusados, la característica imagen en reloj de arena, de-
tectable mediante ECO (Fig. 4); en lesiones avanzadas o anti-
guas existe fibrosis epi y/o intraneural. Otras anomalías limita-
das al nervio que se pueden detectar mediante la ECO son la bi-
furcación del nervio en el canal carpiano y el schwannoma del
mediano.
En el 18% de los casos se encuentra patología asociada en el
canal carpiano, demostrable con la ECO:
– Anomalía de inserciones musculares (oponente del quinto;
pronador cuadrado) y lumbricales principalmente.
– Tenosinovitis flexores de los dedos.
– Tumor de células gigantes de la vaina tendinosa.

Durante el postoperatorio inmediato, la mejoría clínica es, por

lo general, espectacular en cuanto a la desaparición de las pares-
tesias. En caso de existir atrofia de la musculatura tenar, debili-
dad de las presas dígito-digital y dígito-palmar, y déficit sensiti-
vo en el área del nervio mediano, la recuperación de estas lesio-
nes es tardía y se relacionará con la intensidad del daño neural,
su antigüedad y la edad del paciente.
El tiempo medio de reintegración a las actividades de la vi-
da normal es de 6-8 semanas en los pacientes con lesión de gra-
dos leve a moderado. La integración al trabajo habitual en los
grados moderado a acusado, acusado y muy acusado depende
de si el paciente es trabajador por cuenta propia (más precoz) o
ajena, el tipo de actividad realizada, la edad, la motivación per-
sonal y el tipo de contrato de trabajo (más tardía en puestos de
trabajo fijo). En estos casos, el tiempo de integración a su traba-
jo habitual es de 3-6 meses en trabajadores de fuerza o que pre-
cisen realizar movimientos repetitivos (cadenas de montaje).
En nuestra experiencia, el hecho de no intervenir nunca a
pacientes con ENF normal y clínica dudosa consideramos con-
tribuye a la ausencia de falsos negativos. A estos pacientes se
les efectúa un seguimiento clínico, con nuevo ENF a los 6 me-
ses, durante los cuales se les administra tratamiento médico y
utilización de muñequeras. Si la clínica persiste y el ENF es po-
sitivo, se interviene.
En conclusión, la comparación ENF/ECO mediante los mé-
todos estadísticos aplicados: análisis de regresión, test de Pear-
son y test t pareado muestran la falta de correlación entre ambas
pruebas, concluyendo, por tanto, que ambas constituyen prue-
bas complementarias y no excluyentes.
El ENF informa acerca de la situación funcional del nervio,
del grado de desmielinización y/o la pérdida axonal o si existen
signos de denervación activa, importante de cara al pronóstico.
Resulta de especial utilidad cuando los signos y síntomas no
son convincentes [24].
La ECO permite una valoración detallada de los patrones
normales y patológicos del nervio mediano. Es una técnica de
Figura 4. Síndrome del túnel carpiano acusado. Se aprecia pérdida del
patrón fascicular y reticular del nervio con su hipoecogenicidad marcada.
El nervio se encuentra con engrosamiento proximal y estenosis bajo el
retináculo flexor, el cual se encuentra engrosado.
gran disponibilidad, inocua, rápida, cómoda para el paciente y
no invasiva, con la que podemos valorar los cambios morfológi-
cos del nervio y visualizar lesiones específicas que provoquen
el cuadro clínico, así como excluir otras lesiones que cursen con
clínica similar. Realizar un examen cuidadoso y un buen cono-
cimiento de la anatomía son imprescindibles [13,16-20,31,32].
La combinación de ambas pruebas resulta especialmente válida
en casos en los que existe discrepancia entre ambos resultados,
como ocurre en el caso de pacientes con síntomas acusados (pa-
restesias) y ENF normal. Esto puede deberse a que el estudio se
realiza en fase muy precoz, en la que se produce descarga neu-
ronal excesiva, previa al fallo en la conducción [33], o a que la
sintomatología sensitiva esté causada por una tenosinovitis, ya
que la lesión dentro del túnel carpiano puede afectar, no sólo al
nervio, sino a otras estructuras como los tendones, lo cual se
puede objetivar mediante la ECO [30].
De nuestra experiencia quirúrgica se concluye que la utili-
dad del ENF es fundamental para evaluar el grado de lesión del
nervio, su evolución y como su prueba documental. El estudio
ecográfico debe realizarse siempre que se sospeche patología
sobreañadida en el canal carpiano o alteraciones estructurales
del nervio (neuromas, fibrosis, etc.), datos que son de gran im-
portancia para sentar la indicación quirúrgica.

214 REV NEUROL 2007; 45 (4): 210-215

 SÍNDROME DEL TUNEL CARPIANO

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THE CONTRIBUTION MADE BY NEUROPHYSIOLOGICAL AND ULTRASOUND IMAGING

STUDIES TO THE DIAGNOSIS OF CARPAL TUNNEL SYNDROME. SURGICAL CORRELATION
Summary. Introduction. Electrophysiological study has been for long time the elected approach for the diagnosis and clinical
evaluation of carpal tunnel syndrome (CTS). More recently, echography and other imaging techniques have been introduced
in current medicine for their potential in the anatomical evaluation of the neural compression. To asses the usefulness of both
diagnostic procedures we have compared the findings obtained by electrophysiological and echographic approaches in a
group of 60 CTS patients with different degrees of the disease. Patients and methods. In all patients the conduction velocity
was evaluated in the median and cubital nerves using surface electrodes. For echography lineal transductors of 5-10 Hz and
5-12.5 MHz were employed. Results. The patients were distributed for each test on a scale depending of the severity of the
alterations detected by the corresponding technique and both files were subsequently compared by regression analysis,
Pearson test and paired-test. No correlation was detected in any of the statistical test. Conclusions. The lack of correlation
between the results of both proofs emphasizes the usefulness of the two diagnostic approaches in CTS. While electro-
physiological study provides information about nerve function, ecography unravels the morphological alterations accounting
for the syndrome, therefore being non-excluding complementary approaches. [REV NEUROL 2007; 45: 210-5]
Key words. Anatomy of carpal tunnel. Carpal tunnel syndrome. Comparative techniques. Nerve conduction. Neurophysiological
study. Ultrasound imaging.

REV NEUROL 2007; 45 (4): 210-215 215