Download as pdf
Download as pdf
You are on page 1of 26
cenigma 0 ignorancia? Lothar Knauth 2 biblioteca le las decisiones CHINA; ENIGMA O IGNORANCIA? LA VARIEDAD CHINA La imagen de una China monolitica antecedié a “la imposicién” de una ortodoxia marxistaleninista. Formaba parte de una inercia intelec- tual que clasifica todo lo desconocido bajo ficiles generalizaciones: un procedimiento que parece salvarnos del andlisis profundo de conjuntos desconocidos. De hecho existié en China un sistema politico-cultural uni- ficado, milenario, que defendfa el pais contra las fuerzas centrifugas que lo acosaban y que reaparecieron cada vez que no existié, o estuvo en decadencia, un fuerte poder central. Pero esta armazén de aparente continuidad encubria una tremenda diversidad, producto de 1a com- plejidad geogréfica y humana, A primera vista, tanto la extension territorial como el mimero de habitantes del pats, parecen desafiar la imaginacién. La poblacién re- presenta Ia cuarta’parte de la humanidad y tres veces el nimero de la de los superpoderes: la de la Unién Soviética y la de Estados Unidos, pero su extension territorial (9,597,000 kilémetros cuadrados) no ex- cede en mucho a la de la Union Norteamericana, es menor que la de Canada y es s6lo dos quintas partes de I de la Unién Soviética. En la geograffa china resalta una fuerte oposicién entre el norte y él sur; y las barreras naturales de las montafas de Tibet, en el oeste, y del mar en el este, siempre han sido definitivas. Sin embargo, el norte se abria hacia las estepas de Asia Central con sus pueblos trashuman- tes, y ol sur, con sus vertientes bafiadas por las Iluvias de los monzenes, propicié una gran diversidad étnica y condujo masas de poblacién hacia el Mar Meridional de la China, puente hacia los paises tropicales del sudeste de Asia, el subcontinente indico y aun Africa. Esta costa del sur y sudeste representé una puerta tenuemente abierta al mundo. La 12 Lothar Knauth actual preocupacién de la Repablica Popular China es que fuerzas hos- tiles controlen estos accesos, al ocupar Vietnam y Taiwan; lo cual pre- coniza no s6lo que China quiere asegurar su soberania, sino también que tiene intenciones de abrirse otra vez al mundo. La diferencia entre China y las demés superpotencias —Ia Unién Sovié. tica y los Estados Unidos— es una tradicién que entronea con una de las grandes culturas primitivas de la civilizacién humana, La cuna de la cultu- ra china se encontraba en el valle del rio Amarillo o Juang-jo. Como en las demés zonas donde se originaron altas culturas, esta area se extendi6, en- tré en contacto con civilizaciones menores y se desplaz6. Pero en el caso de China, el centro de gravedad cultural nunca se alejé del punto original. El componente racial que desarroll6 este enfoque de cultura fue el pue- blo jan, una raza mongolojde, seguramente producto de un mestizaje mi- lenario, nutrido desde el norte por pueblos ural-altdicos —turcos y tunguses y aun caucésicos, en épocas més tempranas— mientras desde el sur en- traban elementos austronesios. Aun hoy dia, se acusa marcada diferencia entre los chinos del norte —altos, de tez blanca y prominentes rasgos fa- ciales— y los del sur, de estatura mas baja, piel morena, ojos més oblicuos y aun con rasgos casi malayos. La bandera de la Republica Popular China expresa simbélicamente esta variedad étnica, ya que arriba de una gran estrella para la mayoria jan— tiene un arco de cuatro astros menores que representan las minorfas impor- tantes, Cabe decir que la variedad regional no se expresa s6lo en rasgos raciale: se observa también en variantes de la “pequefia cultura”, como deidades locales y la arquitectura popular. LA ESCRITURA IDEOGRAFICA: COMUNICACION NO-VERBAL DE IDEAS Y VOLUNTADES. Un instrumento importante para la unidad cultural del imperio chino fue la escritura ideogréfica, que hacia comunicables ideas y voluntades, aun entre pueblos que no hablaban el mismo idioma pero que compren- dian, no verbalmente, su significado. Es lamentable que casi todas las noticias sobre la cultura china han lle- gado al mundo de habla espafola, en tiempos recientes, a través de publi- caciones en divexsos idiomas. Lamentable, porque en los siglos XVI y XVII las primeras informaciones que crearon imagenes duraderas en las mentes occidentales, fueron producto de] marcado interés de los propios hispa- nicos en los pueblos con los cuales entraron en contacto. Esos informes fueron transmitides por libros y relatos en castellano. Con el descuido de

You might also like