Professional Documents
Culture Documents
Lesiones Transito PDF
Lesiones Transito PDF
Retrato de un asesino.
LESIONES EN ACCIDENTES DE TRÁNSITO
Traffic Accidents Injures
The traffic accidents injuries non fatal recorded by the National Institute of Legal Medicine and Forensic
science in Colombia are in the third place with 19%
In 2002 this rate was 9% lower than 2001, as well as this the national rate descended from 110 to 98
injuries for every 100.000 inhabitants.
Among the victims the most important decrease was found in pedestrians, motorcyclists and cyclist with
13%, 15% and 17% respectively, while injured drivers showed an increase of 20%
The fast growing of the numbers of cars is an important factor to control. Every year thousands of cars are
brought to the country without any control, having as a result congestion in the streets and the risk of being
involved in an accident becomes higher.
The measures to control the road accidents typically have only helped to recover the damages but there
have never been strategies to plan in advance what to do in order to prevent the accidents. If the government
and the control institutes did this, thousands of lives would be saved every year.
Resumen
Dentro de las lesiones no fatales valoradas por el Sistema Médico PATRICIA TIRADO CADAVID
Forense Colombiano, los accidentes de tránsito ocuparon el tercer lu- Técnico administrativo CRNV
gar con el 19%. COLABORADOR JUAN IGNACIO CARDONA GIRALDO
Filósofo CRNV
En el 2002 se registró una disminución de los lesionados en accidente
de tránsito del 9% con respecto al año 2001. De igual manera la tasa
nacional por 100.000 habitantes bajo de 110 a 98.
La accidentalidad vial
De lo anterior, se deduce que es posible reducir el ries-
debe ser tratada de
forma integral, tanto go de accidentalidad, teniendo en cuenta el diseño de
desde la Ingeniería las vías, sus usos, la iluminación, la señalización, la in-
como desde las fraestructura peatonal; así como también la percepción
Ciencias sociales.
que los usuarios tienen de las vías y sus prácticas en los
escenarios de movilidad vial.
Marco conceptual
Todas las acciones que realizan los seres humanos conllevan ciertos
riesgos implícitos, y con especial frecuencia la movilidad, por eso el
accidente de tránsito afecta a la sociedad en general, no sólo porque
CF Y
puede ser reducido a un valor numérico como lo es el producto de la texto es fruto de la cátedra Epistemología de las ciencias
sociales, dictada por el profesor Francisco Sierra
probabilidad de un suceso indeseable por la gravedad y la magnitud Gutiérrez durante el primer semestre académico del
año 2002 en la Pontificia Universidad Javeriana. Y del
de sus consecuencias2. Esta línea asume que para una determinada Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias
amenaza hay un nivel de vulnerabilidad preestablecido, y por lo tanto Forenses, quienes sin reparo alguno, me brindaron
todos los medios a su alcance para poder culminar mis
un único riesgo verdadero; la amenaza en la accidentalidad de tránsito estudios universitarios.
potencial (señalización, velocidad, volumen vehicular, composición radica en el hecho que el etnógrafo es su propio cronista
e historiador.
vehicular, entre otros). 4
Cfr, Ibid, pág 19, 20.
5
Cfr, Ibid, pág 26. Como ejemplo de lo que Malinowski
quiere dar a entender con esta primera fase
La vulnerabilidad alude a la capacidad que tiene el sujeto de reaccionar documentativa, por el llamada método de
documentación concreta estadística, hoy en día se
ante una amenaza, de acuerdo con su percepción de los elementos puede señalar un estilo investigativo que se ha
del entorno. Corresponde así a la predisposición intrínseca de ser afec- denominado estado de las artes, en el que generalmente
se selecciona bibliografía sobre un tema específico, en
tado o de ser susceptible de sufrir una pérdida. Entre los elementos un periodo igualmente específico (que puede ser
determinado atendiendo a motivos temporales,
que configuran la vulnerabilidad, se califican principalmente aspectos espaciales o espacio-temporales); con el fin de demarcar
relacionados con la movilidad (volumen peatonal, usos del suelo, ilumi- 6
líneas de investigación y sus posibles aspectos críticos.
Cfr, Ibid, pág 28.
nación y señales de tránsito) e infraestructura peatonal3. 7
O análisis genealógico de las relaciones de parentesco,
que antes de reducirse a examen de los vínculos de
consanguinidad y sus roles, mas bien se centra en
El factor de riesgo se determina mediante el producto del valor considerar las relaciones rituales donde se gana y
asigna algún tipo de reconocimiento (Cfr, Ibid, pág
promedio de las variables que componen la amenaza, por el valor pro- 32.)
medio de las variables que componen la vulnerabilidad4. Las variables 8
9
Cfr, Ibid, pág 33, 34.
Cfr, Ibid, pág 28.
10
Citado por, Castro Santiago et al, L os Estudios
Culturales Como Espacio de Articulación. Respecto a
las referencias bibliográficas al texto del profesor
1 Castro, nos permitimos aclarar que se consultó un
Alcaldía Mayor de Bogotá, D.C, Secretaría de Gobierno, La accidentalidad vial en Bogotá D.C, Impresol
Ediciones Ltda., Mayo de 2002, p.35. texto impreso exclusivamente para adelantar el trabajo
2 en cuestión. De aquí que nos abstengamos de cotejar
Ibid, p.74.
3 la fuente, sin que con ello pretendamos no hacerle
Ibid, p.75.
4 justicia a su trabajo.
Ibid, p.80.
que se enumeran a continuación forman parte de la matriz de riesgo,
pero ellas por sí solas no constituyen un factor determinante en el re-
sultado del riesgo.
La composición vehicular tiene que ver con los diferentes tipos de vehí-
culos que ruedan por los corredores viales, así como también con la
CF Y
5
Muñoz, G, Salazar, R, La pacificación del tránsito o tránsito calmado, Ideografic Ltda, Medellín: noviembre
de 2001, p.27.
6
Ibid, p.31.
154
aproxima7. Por otra parte, una inadecuada demarcación puede gene- 11
Cuando se habla del espectro de una ciencia social, se
hace alusión al intento de substancializar una ciencia
rar conflictos entre los usuarios del corredor vial. Por lo tanto, se debe en particular, es decir, de definirla ya sea únicamente
evaluar especialmente su coherencia, pertinencia, teniendo como re- por sus referentes empíricos o por sus presupuestos
especulativos; y se presupone que sí una ciencia se
ferente su posibilidad de ser percibidas8. define únicamente en virtud de su subjetividad u
objetividad, necesariamente se está desconociendo que
tales definiciones son abstracciones de las aplicaciones
En la planificación de los usos del suelo, la compatibilidad de los mismos de sus supuestos métodos, herramientas, problemas
y fuentes, o lo que sería lo mismo, que toda definición
con lo planificado es el punto más importante a considerar. Diferentes de los presupuestos especulativos o de los referentes
empíricos (lo que al parecer delimita la espacialidad de
usos pueden implicar amenazas imprevistas para los actores del tránsi- un saber), traza determinaciones, deviene en
to. Los usos del suelo en las diferentes zonas deben planificarse convenciones establecidas o que se establecen en el
uso de las mencionadas herramientas, fuentes,
maximizando la accesibilidad al transporte público y minimizando las métodos y problemas.
necesidades de pasar entre vehículos o entre otros espacios que obs- Estos términos, desde los cuales se presume es posible
articular una imagen de las ciencias sociales, en modo
taculizan la fluidez tanto del volumen vehicular como del peatonal9. El alguno agotan el devenir de las mismas. Simplemente
y de manera holística, se presumen como el nombre de
volumen vehicular es la principal medida de la amenaza de la cualquier cantidad de matices que se pueden observar
accidentalidad, sea cual fuere su tipología; éste se mide por el número en los autores consultados, útiles para definir los
Estudios Culturales en el marco de las ciencias
de vehículos que circulan en una determinada unidad de tiempo, por sociales; e igualmente se supone que esta definición
un mismo corredor vial, medida que necesariamente variará a lo largo es de carácter holístico, precisamente porque mantiene
abiertas sus categorizaciones y conceptualizaciones ,
del día, semanas y años; las intersecciones con altos volúmenes pre- no sólo a la posibilidad de ser transformadas por otra
metáfora distinta a las que se han articulado, puesto
disponen la accidentalidad10. que a la vez reconoce y trata de velar por no desvirtuar
la posibilidad de pensar el problema de modo distinto,
y de no agotar la tradición en la que se ha inscrito al
Con la infraestructura peatonal se denomina la reunión de diferentes relegarla a un objeto de estudio inmudable.
elementos que se disponen en el espacio público (tales como señales, Lo anterior permite precisar, que cuando se diferencia
entre el contenido y los métodos de una ciencia, ésta
aceras, puentes...), para que los peatones tengan prioridad en térmi- se establece, porque aunque buena parte del contenido
de una ciencia se determina refiriéndose a sus métodos,
nos de tiempo y espacio, sobre el tráfico vehicular; Las facilidades pea- sin embargo la primera diferenciación no se agota en la
tonales determinan el grado de amenaza sobre el peatón, quien por segunda y viceversa. Pues la plasticidad de las
determinaciones propuestas para especificar los
su vulnerabilidad, puede implicarse en acciones de alto riesgo11. Y con referentes y sentidos propuestos para trazar esos
parámetros que determinarán y diferenciarán a los
la noción volumen peatonal se hace referencia al número de peatones Estudios Culturales en relación con la polémica descrita
que transitan por una vía en una unidad de tiempo determinada, que e imputada a las C i e n c i a s S o c i a l e s, no permite
candidatizar tales características a la categoría de
a su vez está sujeta a la variabilidad de los intereses de sus usuarios12. territorio u objeto de los Estudios Culturales.
12
Ibidem.
13
Mojica Sarah, El debate internacional sobre los estudios
Una gran parte de los accidentes viales se atribuye a fallas humanas Culturales: Hans Ulrich Gumbrecht y Arcadio Díaz
Quiñones, Revista Cuadernos de Literatura, Julio-
(errores y/o violaciones intencionales). Se ha dicho que la tendencia a Diciembre de 1997.
de decisiones, los hombres y los jóvenes tienden a evaluar situaciones Los Derechos Humanos, Hermenéutica para la Crítica
15
más accidentes de tránsito por la tendencia a banalizar los riesgos. el que se designa la acción de producir una determinada
simbólica (que en el caso que nos compete serían los
Derechos Humanos).
7
Alcaldía Mayor de Bogotá, D.C, Secretaría de Gobierno. Op.cit., p.47.
8
Ibid, p 57.
9
Ibid, p 49.
10
Ibid, p.57.
11
Ibid, p.52.
12
Ibid, p.59.
13
Instituto Nacional de Medicina Legal, C.F., Convenio GTZ. Lesiones de causa externa, factores de riesgo y
medidas de prevención, febrero de 1997, p.83.
varios estudios han encontrado ciertos rasgos de personalidad antiso-
cial en algunas personas involucradas en accidentes de tránsito de ma-
nera especial en aquellas personas que conducen de manera
imprudente14.
14
Ibid, p.83.
15
Ibid. p.84.
16
Ibid. p.81.
156
que lo hace la infraestructura vial17. El problema con lo anterior, radica Hacia otra lectura
en el hecho que la ingeniería no contempla a los individuos como parte
importante de la accidentalidad, sino como un actor secundario de la de las estadísticas
problemática. regionales
Germán De la hoz
La seguridad vial debe ser considerada como el engranaje de un gran Sociólogo C RNV
sistema, en el que no puede funcionar separadamente cada uno de
sus componentes (personas, vehículos e infraestructura vial).
Observando las cifras regionales
Para que el diseño y construcción de una adecuada infraestructura vial
sobre lesiones fatales que com-
tenga éxito, se deben tener en cuenta aspectos importantes tales como: prenden homicidios, accidentes
la compatibilidad entre la vía y el uso que se le va a dar, señalización de tránsito, suicidios y muertes
adecuada y visible, semáforos situados en sitios estratégicos, espacios accidentales, vemos cómo los ho-
y puentes peatonales suficientes. De esta manera, el conflicto existente micidios casi triplican al resto de
categorías. Yendo más allá de la
entre peatón y vehículo se reduciría de forma considerable, ya que se
contundencia de las cifras, pode-
disminuiría el factor aleatorio y humano atribuido a la accidentalidad vial18. mos afirmar que como expresión
de la violencia que produce vícti-
En el estudio La accidentalidad vial en Bogotá D.C, 1998, realizado por mas fatales, la práctica del homi-
la Universidad Nacional de Colombia, para la Alcaldía Mayor de Bogo- cidio ha ganado efectividad. En
otras palabras, por rudo que pa-
tá, se focalizaron los espacios más riesgosos, de acuerdo con la per- rezca, matar con precisión y ha-
cepción del comportamiento tanto de peatones como de conductores, cerlo deliberadamente resulta ser
el lugar por donde se cruza la calle, la iluminación, además porque una forma efectiva de resolver los
concentraron una mayor cantidad de accidentes de tránsito con heri- desequilibrios y diferencias que
dos19. Estos espacios fueron referenciados como puntos críticos; esta se producen en las relaciones so-
ciales e interpersonales.
es otra de las maneras de combatir este tipo de eventos, porque faci-
lita la pronta intervención de las autoridades que tienen que ver con el La etiología de este tipo de vio-
tema, y pone en alerta a todos los actores de las vías. De esta manera, lencia homicida regional guarda
se incluyen como parte de la estrategia de solución. El paso a seguir, estrecha relación con el compor-
sería tomar las medidas necesarias para contrarrestar los factores de ries- tamiento del fenómeno en el resto
del país, lo cual permite algunas
go que hacen peligrosos estos sectores. generalizaciones. De hecho, sabe-
mos cómo nos estamos matando
los colombianos pero aún no sa-
bemos por qué nos seguimos ma-
tando de la manera en que lo
Análisis de resultados hacemos. Por esta razón, es preci-
so indagar sobre la pertinencia
del modelo de aplicación de polí-
En el año 2002 el Sistema Médico Forense Colombiano, registró a ni- ticas públicas en salud, educa-
vel nacional 42.837 dictámenes judicializados de lesiones en acciden- ción, pedagogía, cultura y
convivencia ciudadana. Todavía
tes de tránsito, presentándose una disminución estadísticamente
más si aceptamos la tesis que da
significativa (P=0,0000) del 9% (4.311 casos) con respecto al año 2001. cuenta de la violencia como fenó-
La tasa nacional fue de 98 personas lesionadas por cada 100.000 habi- meno epidemiológico.
tantes. A nivel nacional se perdió un total de 53.718 años de vida salu-
dable (AVISA). Otro aspecto a tener en cuenta en
torno a las cifras regionales de
homicidio, está asociado a los
17
En el número correspondiente al año 1999 de la revista del Fondo de Prevención Vial: Accidentalidad vial en
conceptos de justicia, desigual-
Colombia, se muestra que el volumen del parque automotor aumentó, el 72%, del año 1990 a 1999. dad y pobreza, escasez de oportu-
18
Alcaldía Mayor de Bogotá, D.C, Secretaría de Gobierno, Op.cit., p. 90. nidades y naturaleza de las
19
Idem p. 81.
elecciones en los individuos para
Distribución según edad y sexo
158
Distribución temporal
CF Y
Cuadro 1. Distribución mensual de lesionados en accidentes de tránsito.
Colombia, 2001-2002 Centro de Referencia Nacional sobre Violencia - INML
159
Distribución según víctima
160
Según el número de casos, tanto hombres como mujeres entre 25 y la comisión del acto violento. En
34 años fueron los más comprometidos como motociclistas con el 37% estos sentidos bien vale la pena
dejar planteadas algunas reflexio-
(2.961) en hombres y 33% (839) para mujeres, para pasajeros el 22% nes (interrogantes) de fondo para
tanto para hombres como para mujeres 1.023 y 1.118 casos respecti- ulterior desarrollo, allanando el
vamente; en cuanto a peatones tenemos que el porcentaje más alto camino de las respuestas esencia-
en hombres correspondió también al grupo de 25 a 34 años con el 17% les sobre por qué nos matamos los
(1.352), mientras que en las mujeres las más afectadas fueron las de colombianos, hacia la búsqueda
de soluciones duraderas en cuanto
45 a 59 años con el 16% (855). a la prevención y disminución de
hechos violentos fatales y no fata-
les. En la base, reiteramos, está el
desafío de las políticas públicas
como instrumentos y mecanismos
Distribución según vehículo involucrado 20 para la reducción de las violencias .
1
20
Para Bogotá, no se cuenta con información según vehículo.
Distribución geográfica
En el año 2002 Amazonas presentó la más alta tasa con 476, siendo
5 veces más elevada que la nacional, situación que fue similar en el
año 2001.
Por punto de atención, las tasas más elevadas con respecto al total
nacional, se encontraron en Leticia, Chocontá, Cáqueza, Zipaquirá, San
Gil y Armenia; a diferencia de El Plato, Agustín Codazzi, Since, Maicao,
La Unión y Chiriguaná que figuran con las menores.
21
Comunicación personal con el Dr. Alvaro Gallego M. Director Seccional Amazonas, Marzo 2003.
162
Cuadro 4. Tasa de lesiones por accidentes de tránsito según departamento. nutención de sus hijos, y el endu-
Colombia, 2002 recimiento de las penas por viola-
ción y otros delitos sexuales, en
particular contra menores. Quizá
una de las figuras más interesan-
tes que pretende dar cuenta de las
dos formas de violencia, social y
económica, lo constituye el pro-
grama Casas de Justicia. A partir
de ellas, establecen competencias
en comunidades de bajos ingresos
con altas tasas de violencia y, pa-
ralelamente, fortalecen el sistema
penal judicial por medio de la
conciliación directa, anticipando
el resultado de ganadores o perde-
dores frente a los conflictos
interpersonales y/o colectivos.
164
Figura 4. Puntos de atención del instituto según rango de tasa de lesiones por accidentes de tránsito.
Colombia, 2002
CF Y
Centro de Referencia Nacional sobre Violencia - INML
165
En cuanto a vehículos involucrados en accidentes de tránsito, los auto-
móviles particulares y las motocicletas siguen siendo los principales
participantes en este evento, con una proporción de 28% y 24% res-
pectivamente.
Recomendaciones
23
Ibid, p.119.
24
Ibid, p.117.
25
Fondo de Prevención Vial, Código Nacional de Tránsito, Ley 769 de 2002, p.41.
166
rigurosamente efectiva logra su aplicabilidad, si no tiene como pre- De otro lado, en los proyectos
supuesto el ser una norma formativa antes que sancionatoria o pu- educativos, por ejemplo en Bogo-
tá, se han elaborado guías de ayu-
nitiva26. da para desarrollar en niños y
4. Evaluar con alguna regularidad a los conductores, para confirmar adolescentes destrezas para la
la capacidad para maniobrar un vehículo, en aspectos como la agu- resolución de conflictos, lo cual,
deza visual y campimetría, orientación auditiva, los tiempos de re- junto con otros mecanismos dise-
acción y recuperación al encandilamiento, la capacidad integral ñados para la vigilancia
epidemiológica, la
motriz, y la discriminación de colores27; ya que todas estas condi- instrumentalización ambiental y
ciones pueden alterarse con el transcurso de los años. la tipificación de conductas (vio-
5. Los peatones están obligados a conocer las normas que el nuevo lentas) en las personas, puede
Código Nacional de Tránsito ha incluido para ellos, las cuales se producir efectos positivos en
cuanto a reducción de hechos vio-
encuentran consignadas en los artículos 57 a 59, puesto que ig-
lentos, en particular de homici-
norarlas, no excusa ante la autoridad la infracción a que se harán dios. Vale la pena destacar que
acreedores por incumplirlas. este tipo de instrumentos y accio-
6. Aumentar del 10% al 30% los dineros destinados para campañas nes pueden ser replicados sin
de educación vial y peatonal28, recaudados por multas de tránsito. sobrecostos excesivos en los nive-
les regionales de administración
7. Continuar con los operativos de control de embriaguez en la ciu-
pública, bien sea en justicia, sa-
dad de Bogotá y extenderlos a nivel nacional, para sancionar a los lud o educación.
conductores que manejen en estado de embriaguez.
8. Con respecto a las glorietas, debe hacerse hincapié en que éstas No obstante el reconocimiento de
no son intersecciones de alta velocidad, también se debe tomar con los importantes avances en la ad-
ministración pública en cuanto a
anticipación el carril correspondiente de acuerdo al grado de giro justicia, educación o salud, el re-
que se vaya a hacer, para evitar interferir con el resto del tráfico al torno a las estadísticas regionales
ingresar a esta área. nos presenta una realidad que no
9. Hacerle una mejor sincronización a los semáforos peatonales, ya podemos desconocer y sobre la
que en muchos sitios el peatón no alcanza a cruzar todas las calza- cual ofrecemos síntesis de esta
corta reflexión a partir de la pre-
das, y se debe quedar en la mitad de la vía esperando que nueva- gunta esencial: ¿por qué, a pesar
mente cambie el semáforo, o pasar corriendo, exponiéndose a de las acciones y medidas adopta-
sufrir una caída. (como ejemplo de lo anterior se puede señalar el das desde los diferentes sistemas,
semáforo de la calle 7 A con avenida Caracas). los colombianos nos matamos más
10. Realizar mantenimiento permanente de las vías, ya que cualquier y con mayor eficaciá?
obstáculo que se presente en ellas hace que se congestione el flu- La respuesta comienza a perfilarse
jo vehicular, aumentando el riesgo de colisión. y aunque podemos identificar con
11. Los motociclistas y ciclistas deben usar en el chaleco reflectivo, los alguna precisión las causas de
colores de alta longitud de onda (amarillo, rojo, anaranjado), para naturaleza social de la violencia
es poco lo que avanzamos sobre
que su presencia en horas nocturnas y de poca visibilidad sea
las causas de naturaleza humana.
detectada más fácilmente. Integrar estas dos dimensiones a
12. Para controlar el sobrecupo, el cual, por demás, favorece las activi- partir de análisis
dades delictivas e incide directamente sobre las graves consecuen- transdisciplinarios y con algunas
cias que conlleva un accidente de tránsito, se recomienda variaciones metodológicas, aun
por determinar, es el desafío inme-
implementar un sistema de alarma que permita monitorear la can-
diato que enfrenta el CRNV.
tidad de personas que hacen uso de los buses de Transmilenio,
con el fin de evitar la extralimitación de usuarios.
Notas
1
En una primera clasificación, la cual ampliaremos en
el curso de nuestras investigaciones, podemos
26
Ibid, p.94. identificar tres tipos de violencia: económica, social y
27
Ibid, p.27. política. Este breve análisis se ocupa tangencialmente
28
Ibid, p.82. de las dos primeras.