ALHUCEMAS*#
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José Luis de Mesa Gutiérrez
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INTRODUCCION.....
PROLOGO.....
PARTES OFICIALES DE LAS COLUMNAS DE OPERACIONES,
ALHUCEMAS, SEPTIEMBRE-OCTUBRE, 1925...
LA AVIACION EN EL DESEMBARCO DE ALHUCEMAS..
LA MARINA EN ALHUCEMAS...
IMAGENES... .essssssecsessessseees
APENDICE I. EXTRACTO DE LA PONENCIA SOBRE EL DESEMBARCO.
REDACTADA POR EL GENERAL DIRECTOR D. FRANCISCO GOMEZ
JORDANA PARA SOMETERLA AL ESTUDIO Y APROBACION DEL
CONSEJO DEL DIRECTORIO MILITAR. 30 ABRIL DE 1928..........
APENDICE II. ORDEN DEL GENERAL EN JEFE AL COMANDANTE
GENERAL DE MELILLA, JEFE DE LA DIVISION DE DESEMBARCO.........
APENDICE III. ORDEN DE LA COLUMNA DEL GENERAL SARO.
PARA EL DESEMBARCO)........00-sss0eccssso0e 6 204
APENDICE IV, COLUMNA DEL GENERAL FERNANDEZ PEREZ
- ESTADO MAYOR.- ORDEN GENERAL DE LA MISMA DEL
DIA 7 DE SEPT. DE 1.925 A BORDO DEL ROMEU....
APENDICE V. EL APOYO ARTILLERO. LOS INGENIEROS.
LA INTENDENCIA. SERVICIOS SANITARIOG..............-- s . 213
APENDICE VI. RELACION DE BAJAS HABIDAS EN ALHUCEMAS
DESDE EL DiA 8 DE SEPTIEMBRE DE 1925, HASTA EL DiA 22
DE OCTUBRE DE DICHO ANO.....
APENDICE VII. RECOMPENSAS OTORGADAS POR LAS.
OPERACIONES EN ALHUCEMAS...........0..0 esnsensontcesonsevescace DUE
APENDICE VIII. ALGUNAS ANECDOTAS DEL DESEMBARCO. 0 223a desde mediados del siglo XIX,
Espafia se vio envuelta en el devenir
politico de su vecino allende el estrecho.
Pero fue en el primer cuarto del siglo XX
en el que Marruecos tomé un peso especi-
fico en la vida de nuestro pais.
Ateniéndonos a los compromisos
intemacionales que habiamos asumido,
nos vimos obligados a intervenir en el
norte de Marruccos para sostener la auto-
ridad del Sultan —del que desciende el
“sobrino” de nuestro monarca-, frente a
unas tribus rebeldes acostumbradas a
‘campar por sus respetos en aquel territo-
rio. Conviene recordar esto, pues parece
ser que, hoy en dia, se les recuerda como
nacionalistas que querian librarse de
Espafia, cuando, en realidad, de quien
querian librarse era del Sultan.
Los hechos mas recordados de la
intervencién espafiola en el norte de
Marruecos son, desgraciadamente, los
més luctuosos: el Barranco del Lobo
(1909) y Annual (1921). Sin embargo,
también se produjeron paginas de gloria,
entre las que destaca con luz propia el
desembarco de Alhucemas.
Fue éste el primer desembarco aero-
naval de toda la historia y de su éxito da
fe el que fuera profundamente estudiado
por los Estados Mayores aliados durante
la planificacién del desembarco de
Normandia en 1944,
Con esta operacién, en la que se
cont6, por primera vez, con la colabora-
cién francesa se dio el paso definitive
para acabar con la rebelion rifefia y con la
sangria de hombres y dinero que nuestro
pais habia enterrado en las inhéspitas tie~
rras del septentrién marroqui
INTRODUCCION
Aprovechando el 75° aniversario de
la operacién hemos querido ofrecer una
vision principalmente grafica de aquel
acontecimiento. Para ello hemos contado
con la inestimable participacion de dos
grandes expertos en las Campatias de
Africa: José Luis de Mesa, que ha contri-
buido con parte del texto y con un gran
namero de fotografias de su amplismo
archivo grafico de la intervencin espaiio-
la en Marruecos, y Santiago Dominguez
Llosa, que ha extraido de su insuperable
archivo documental -posiblemente el
archivo privado referente a este periodo
més completo existente en nuestro pais—
Jos partes oficiales que conforman la parte
esencial del libro y algunas interesantisi-
mas fotografias.
Siguendo la estructura comenzada en
nuestro anterior libro “Las imagenes del
desastre. Annual, 192]”, hemos querido
utilizar un documento oficial que estruc-
ture el relato, en este caso complementa-
do con un prélogo que sitita el aconteci-
miento y unos apéndices que completan el
texto principal, y que sirva como apoyo al
impresionante documento grafico que es
el verdadero ser del libro.
Jamas se han reunido en un solo tra-
bajo tal cantidad de fotografias dedicadas
al desembareo de Alhucemas, muchas de
ellas, no hace falta decirlo, son inéditas,
pucs proceden de Albumes personales de
algunos participantes en la operacién.
Sirva, pues, este trabajo, como
humilde homenaje a todos aquellos que,
en esta ocasion y en otras menos felices,
entregaron sus vidas al servicio de su
Patria en las ardientes arenas del norte
marroqui