The Nun:

In 1952 Romania, two Roman Catholic nuns living at the Saint Cartha's monastery are
attacked by an unseen force when they enter a tunnel to retrieve an ancient Christian relic. The
surviving nun, Sister Victoria, flees from the attacker, a demon appearing as a nun, and hangs
herself. Her body is discovered by Frenchie, a villager who transports supplies to the nuns.
The Vatican learns of the incident and summons Father Burke to Rome, where they ask him to
travel with Sister Irene, a nun in her novitiate, to Romania in order to investigate the situation.
While Sr. Irene is teaching children the relationship between religion and science in a school,
her Mother Superior interrupts her and informs her that Burke has arrived in order to request
Irene's accompaniment in his trip to Romania.
The pair travel to Romania and meet with Frenchie, who leads them to the abbey. They
discover Victoria's body and remove a key from her corpse. Inside, they encounter the Abbess,
who informs them that the nuns observe a period of silence during the night and offers them
lodging at the attached convent if they wish to return the next day. Frenchie is attacked by a
demon as he returns to the village, but escapes. Burke tells Irene that a boy he exorcised,
Daniel, was fatally injured during the exorcism, and Burke has carried the burden of the boy's
death with him ever since. Irene reveals that as a girl, she had visions particularly of a nun,
causing the Church to take an interest in her. Burke is rescued by Irene after being buried alive
in the graveyard by the demonic entity.
The next day, Irene and Burke return to the abbey, but only Irene can enter as it is cloistered.
She meets some of the other nuns and learns that they are praying constantly, swapping in
shifts, to keep the entity at bay. Sister Oana reveals the abbey's history: it was built in the
Middle Ages as a castle by a duke who was obsessed with the occult. The duke summoned
the demonic entity through a rift in the catacombs but was killed by Christian knights, who
sealed the rift with an artifact containing the blood of Jesus Christ. The bombings during the
Second World War caused the rift to reopen, unleashing the entity. Burke identifies the entity
as Valak and discovers the Abbess has been dead all along.
Frenchie heads back to the abbey to help Irene and Burke. Irene is attacked by Valak and joins
the nuns in desperate prayer to fend off the demon. When the group reunites, Irene discovers
that none of the nuns she had seen and talked to were real and she had been praying alone,
later realizing that Victoria had been the last nun in the abbey and had sacrificed herself to stop
Valak from possessing her body and unleashing evil.
Theorizing that Valak can only be stopped if they seal the rift with the blood of Christ contained
in the reliquary, the trio retrieves the vial with the key Victoria had. Irene then informs Burke
that God has called her to make her solemn vows as a nun and asks Burke to elevate her to
the status of a professed nun, which he does in the abbey's chapel.
After the trio unlocks the tunnel door, Irene is lured into a pentagram and possessed by Valak.
Frenchie smears some of the blood of Christ on her face, casting out the demon. Burke is
wounded by Daniel's ghost as Valak starts to drown Irene in a flooded chamber. Irene expels
the blood of Christ in the demon's face, banishing it as the blood of Christ seals the rift. After
Frenchie resuscitates Irene, he reveals his real name is Maurice. Unbeknownst to the others,
Maurice has been possessed by Valak, as evidenced by an inverted cross on his neck.
Twenty years later at a university seminar, Carolyn Perron watches as Ed and Lorraine
Warren present footage of their attempt to exorcise a possessed Maurice. In the footage,
Maurice grabs Lorraine, giving her visions of Ed dying, which initiate the Warrens' investigation
of the Perron farmhouse haunting, as well as their encounter with Valak itself.
En 1952, Rumania, dos monjas católicas que viven en el monasterio de Santa
Cartha son atacadas por una fuerza invisible cuando entran en un túnel para
recuperar una antigua reliquia cristiana. La monja sobreviviente, la hermana
Victoria, huye del atacante, un demonio que aparece como una monja y se cuelga.
Su cuerpo es descubierto por Frenchie, un aldeano que transporta suministros a
las monjas.

El Vaticano se entera del incidente y llama al padre Burke a Roma, donde le piden
que viaje con la hermana Irene, una monja de su noviciado, a Rumania para
investigar la situación. Mientras que la hermana Irene enseña a los niños la
relación entre religión y ciencia en una escuela, su madre superiora la interrumpe
y le informa que Burke ha llegado para solicitar el acompañamiento de Irene en su
viaje a Rumania.

La pareja viaja a Rumania y se encuentra con Frenchie, quien los lleva a la

abadía. Descubren el cuerpo de Victoria y sacan una llave de su cadáver. En el
interior, se encuentran con la abadesa, quien les informa que las monjas observan
un período de silencio durante la noche y les ofrece alojamiento en el convento
adjunto si desean regresar al día siguiente. Frenchie es atacado por un demonio
cuando regresa a la aldea, pero se escapa. Burke le dice a Irene que un niño que
exorcizó, Daniel, resultó gravemente herido durante el exorcismo, y Burke ha
cargado con él la carga de la muerte del niño desde entonces. Irene revela que
como niña, tuvo visiones particularmente de monjas, lo que hizo que la Iglesia se
interesara en ella. Burke es rescatado por Irene después de haber sido enterrado
vivo en el cementerio por la entidad demoníaca.

Al día siguiente, Irene y Burke regresan a la abadía, pero solo Irene puede entrar
ya que está enclaustrada. Ella se encuentra con algunas de las otras monjas y
aprende que están orando constantemente, intercambiando turnos, para mantener
a la entidad a raya. La hermana Oana revela la historia de la abadía: fue
construida en la Edad Media como un castillo por un duque que estaba
obsesionado con lo oculto. El duque convocó a la entidad demoníaca a través de
una grieta en las catacumbas, pero fue asesinado por caballeros cristianos,
quienes sellaron la grieta con un artefacto que contenía la sangre de Jesucristo.
Los bombardeos durante la Segunda Guerra Mundial hicieron que la grieta se
reabriera, desatando a la entidad. Burke identifica a la entidad como Valak y
descubre que la abadesa ha estado muerta todo el tiempo.

Frenchie regresa a la abadía para ayudar a Irene y Burke. Irene es atacada por
Valak y se une a las monjas en oración desesperada para defenderse del
demonio. Cuando el grupo se reúne, Irene descubre que ninguna de las monjas
que había visto y con las que había hablado eran reales y que había estado
orando sola, y luego se dio cuenta de que Victoria había sido la última monja en la
abadía y se había sacrificado para evitar que Valak poseyera su cuerpo. y
desatando el mal.
Teorizando que Valak solo puede detenerse si sellan la grieta con la sangre de
Cristo contenida en el relicario, el trío recupera el frasco con la llave que tenía
Victoria. Irene luego le informa a Burke que Dios la llamó para hacer sus votos
solemnes como monja y le pide a Burke que la eleve al estatus de monja profesa,
lo que él hace en la capilla de la abadía.

Después de que el trío abre la puerta del túnel, Irene es atraída a un pentagrama y
es poseída por Valak. Frenchie mancha un poco de la sangre de Cristo en su
rostro, expulsando al demonio. Burke es herido por el fantasma de Daniel cuando
Valak comienza a ahogar a Irene en una cámara inundada. Irene expulsa la
sangre de Cristo en el rostro del demonio, desterrándola cuando la sangre de
Cristo sella la grieta. Después de que Frenchie resucita a Irene, él revela que su
verdadero nombre es Maurice. Sin el conocimiento de los demás, Maurice ha sido
poseído por Valak, como lo demuestra una cruz invertida en su cuello.

Veinte años después, en un seminario universitario, Carolyn Perron observa a Ed

y Lorraine Warren presentar imágenes de su intento de exorcizar a un Maurice
poseído. En la filmación, Maurice agarra a Lorraine y le da una visión de la muerte
de Ed, lo que inicia la investigación de los Warrens sobre la inquietante granja de
Perron, así como su encuentro con Valak.