KANT, I. (1784).
Respuesta a la pregunta:
é Qué es la ilustraci6n?
Traduccion de R.J.A.
Publicado en la revista
Educacion y Sociedad, Vol.
I, No. 2, 1984, Bogota,
Universidad Externado de
Colombia.ENMANUEL KANT
RESPUESTA A LA PREGUNTA: QUE ES LA ILUSTRACION? *
1. La ilustracién es la salida del hombre de su condicién de
menor de. edad de la cual €1 nismo es culpabl La minorfa de
edad es la incapacidad de servirse de su propio entendimiento
sin la direccién de otro. Uno mismo es culpable de esta
minorfa de edad, cuando la causa de ella no radica en una
falta de entendimiento, sino de la decisién y el valor para
servirse de 61 con independencia sin la conduccién de otro.
Sapere aude! Ten valor de servirte de tu propio
entendimiento! es pues la divisa de la ilustracién,
2. La pereza y la cobardfa son las causas de que la mayoria
de los hombres, después que la naturaleza los ha librado desde
tienpo atrés de conduccién ajena (nsturaliter majorennes),
pernsnecen con gusto como menores de edad o a lo largo de su
vida, por lo cual le es muy facil a otros el erigirse en
tutores. Es tan cémodo ser menor de edad! Si tengo un libro
que piensa por mi, un pastor que reemplaza mi conciencia, un
nédico que dictanina acerca de mi dieta y ssi sucesivamente,
no necesitaré esforzarme. Si sélo puedo pagar, no tengo
necesidad de pensar: otro sasumird por mi tan fastidiosa
tares.
Como 1a mayorfa de los hombres (y entre ellos la totalidad del
bello sexo) tienen sdemés por muy peligroso el paso a la
meyoria de edad, aquellos tutores ya se han cuidado muy
enabienente de asunir semejante control. Después de haber
atontaedo a su ganado doméstico y de haber impedido
cuidadossnente que estes pacificas cristures no osen dar un
solo peso fuera de las andaderas en que las encerraron, les
nuestran luego el riesgo que las anenaza si intentan narchar
solas. Cierto que ese riesgo no es tan grande, pues tras
slgunss ceidas habrian aprendido a caminar; pero un ejemplo
tal por lo comin eaedrenta y espanta, impidiendo todo ulterior
intento.
3. Por ello le es dificil a cada hombre individual salir de
esa minorfa de edad casi convertida en su nsturaleza.
1 Berlinische Monatsschrift, diciembre de 1784.
Treduccién de R.J.A. Publicado inicialmente en Educacién y
Sociedad ( U, Externsdo de Colombia) Vol.1 N.2, ler senestre
de 1984.Inclusive le ha cobrado aficién y por lo tanto es realnente
incapaz de servirse del propio entendimiento, porque janfs se
le dejé hacer el ensayo. Reglamentaciones y férnmules, estos
instrumentos mec&nicos de un uso racional, o més bien de un
abuso de sus dotes naturales, son los grillos que atan a una
persistente minoria de edad. Quien se zafara de ellos daria
solo un salto inseguro por encina de la zanja mas estrecha por
no estar habituado al movimiento libre. Por ello son pocos
Jos que han logrado, gracias a un esfuerzo del propio espfritu
salir de la minorfa de edad y andar, sin embargo, con paso
seguro.
4. Pero, en cambio, es bien posible que el piblico se ilustre
a si mismo; siempre que se lo deje en libertad ello es
inclusive casi inevitable. Siempre se encontrarén algunos
hombres que piensan por si mismos, incluso entre los tutores
institvidos del montén, quienes después de haber arrojudo el
yugo de la, minoria’ de edad propagaraén el espfritu de una
estimacién racional del propio valor y de la vocacién que todo
hombre tiene de pensar por si mismo. Notemos en particular
qve el piblico al que con la anterioridad los autores hebrian
puesto bajo este yugo, después los obliga a someterse al mismo
cuando algunos de sus tutores, por si mismos incapaces de toda
ilustracién, los incita a la sublevacién; tan dafino es
inculcar prejuicios, ya que ellos terminan por vengarse de los
que han sido sus autores o precursores. Por ello puede el
piblico alcanzar ilustracién sélo lentamente. Quizés sea
posible producir por una revolucién la caida del despotismo
personal ode alguna opresién interesada y ambiciosa; pero
jands se logrardé una verdadera reforma del modo de pensar, si
ho que surdirén nuevos prejuicios que, cono los antiguos,
servirén de andaderas para el montén que carece de
pensamiento
5. Pero para esa ilustracién sélo se exige libertad y, por
cierto, la més inofensiva de las que puedan llamarse libertad,
a sabe Ja libertad de hacer uso poblico de la propia razén
en todo respecto. Sin embargo oigo exclamar por doquier: no
razones! El oficial dice: no razones, adiéstrate! El
consejero de finanza: no razones sino paga! El pastor; no
razones, sino cree! (S6lo un Gnico sefior en el sundo dice:
razonad todo lo que querdis, pero obedeced!). Por todos lados
limitaciones .de la libertad. Pero, qué limitacién impide la
jlustracién y cudl por el contrario, la fomenta? Respondo:
el uso piblico de la razén debe ser libre sienpre, y es el
nico que puede producir la ilustracién.de los hombres. El
uso privado de la misma, en cambio, debe ser con frecuencia