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Metaanális de los factores de riesgo en la enfermedad de Parkinson

Article · January 2003


Source: OAI

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1 author:

Mohamed Farouk Allam


University of Cordoba (Spain)
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TemproMandibular Disorders View project

Parkinson's Disease Risk Factors. UCO 2002 View project

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FACTORES DE RIESGO
REVISIÓN
DE EP

49. Hoffman WE, Wheeler P, Edelman G, Charbel FT, Torres NJ, Asuman intracellular PO2 in Aplysia giant neurons and response of neuronal ac-
JI. Hypoxic brain tissue following subarachnoid hemorrhage. Anesthesiolo- tivity following changes in extracellular PO2. Adv Exp Med Biol 1988;
gy 2000; 92: 442-6. 222: 397-402.
50. Gelabert-González M, Fernández-Villa JM, Ginesta-Galán V. Intraopera- 52. Kett-White R, Hutchinson PJ, Al-Rawi PG, Czosnyka M, Gupta AK,
tive monitoring of brain tissue O2 (PtiO2) during aneurysm surgery. Acta Pickard JD, et al. Cerebral oxygen and microdialysis monitoring during
Neurochir (Wien). [In press] aneurysm surgery: effects of blood pressure, cerebrospinal fluid drain-
51. Erdman W, Chen CF, Armbruster S, Lachmann B. Autoregulation of age, and temporary clipping on infarction. J Neurosurg 2002; 96: 1013-9

APLICACIONES DE LA DETERMINACIÓN DE LA PRESIÓN APLICAÇÕES DA DETERMINAÇÃO DA PRESSÃO


TISULAR CEREBRAL DEL OXÍGENO (PtiO2) TISSULAR CEREBRAL DE OXIGÉNIO (PtiO2)
Resumen. Objetivo. Realizamos una revisión sobre el funcionamien- Resumo. Objectivo. Realizamos uma revisão sobre o funcionamento
to y las principales indicaciones de la determinación de la presión e as principais indicações da determinação da pressão tissular cere-
tisular cerebral de oxígeno (PtiO2) sobre la base de nuestra experien- bral de oxigénio (PtiO2) sobre a base da nossa experiência pessoal.
cia personal. Desarrollo. La monitorización de la oxigenación cere- Desenvolvimento. A monitorização da oxigenação cerebral é consi-
bral se considera primordial para la determinación precoz del daño derada primordial para a determinação precoce da lesão hipóxica
hipóxico secundario al traumatismo craneoencefálico grave y la he- secundária ao traumatismo crânio-encefálico grave e a hemorragia
morragia subaracnoidea. La monitorización de la PtiO2 es una téc- subaracnoideia. A monitorização da PtiO2 é uma técnica introduzida
nica introducida recientemente en la práctica clínica que permite, recentemente na prática clínica que permite, com a utilização de um
con el empleo de un electrodo polarográfico, medir localmente la eléctrodo polarográfico, medir localmente a tensão tissular de oxi-
tensión tisular de oxigeno cerebral. Conclusión. La determinación de génio cerebral. Conclusão. A determinação da PtiO2 cerebral é um
la PtiO2 cerebral es un método seguro y exacto para conocer la método seguro e exacto para conhecer a oxigenação cerebral local.
oxigenación cerebral local. Las ventajas de esta técnica sobre otros As vantagens desta técnica sobre outros métodos de oximetria, como
métodos de oximetría, como la espectrofotometría cercana al infra- a espectrofotometria próxima do infra-vermelho ou a saturação no
rrojo o la saturación en el bulbo de la yugular, son que no precisa bulbo da jugular, são que não necessitam de recalibrações e pratica-
recalibraciones y prácticamente no sufre desviaciones en monitori- mente não sofrem desvios nas monitorizações prolongadas. [REV
zaciones prolongadas. [REV NEUROL 2003; 36: 744-9] NEUROL 2003; 36: 744-9]
Palabras clave. Electrodo de Clark. Hemorragia subaracnoidea. Oxi- Palavras chave. Eléctrodo de Clark. Hemorragia subaracnoideia.
genación cerebral. Presión tisular cerebral de oxígeno. Temperatura Oxigenação cerebral. Pressão tissular cerebral de oxigénio. Tempe-
cerebral. Traumatismo craneoencefálico grave. ratura cerebral. Traumatismo crânio-encefálico grave.

Factores de riesgo de la enfermedad de Parkinson


M.F. Allam, A.S. del Castillo, R.F.-C. Navajas

PARKINSON’S DISEASE RISK FACTORS


Summary. Aims. In this review we present and discuss the main risk factors (RF) for Parkinson’s disease (PD) reported by
epidemiological and biochemical research. Methods. The most frequently mentioned RF are: 1. Age: PD is not a pathological
condition that is restricted to the elderly, although most people who suffer from it are over 60 years of age; 2. Sex: in most
epidemiological studies there are no differences to be found in prevalence of PD according to sex; 3. Genetic: no gene has
been identified as being responsible for idiopathic PD. Nevertheless, family antecedents of PD have been identified as RF;
4. Craneoencephalic trauma: this factor can have a systematic bias, since patients seek an explanation for their illness and
remember any head injury as its possible cause; 5. Neurotoxins: a great deal of research was focused on the relation between
PD and direct or indirect exposition to compounds such as MPTP, used in pesticides; 6. Antioxidants: it is thought that if
ingested in sufficiently high quantities, either as part of the diet or in the form of supplements, they might reduce the risk of
PD or slow down its progress; 7. Smoking: several studies have shown a negative relation, while other studies found no
significant relation. Conclusions. There are several RF for PD, although no single decisive triggering factor has been found
to date. Future research must consider the hypothesis of a multifactor aetiology and take into account the interaction between
genetic and environmental factors. [REV NEUROL 2003; 36: 749-55]
Key words. Age. Antioxidants. Craneoencephalic trauma. Genetics. Parkinson’s disease. Revision. Risk factors. Sex. Tobacco.
Toxins.

INTRODUCCIÓN
Recibido: 07.05.02. Aceptado tras revisión externa sin modificaciones: 05.06.02.
La enfermedad de Parkinson (EP) es un trastorno del movimiento
Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública. Facultad de Medi-
cina. Universidad de Córdoba. Córdoba, España. que afecta a diversas partes del cuerpo. Esta enfermedad crónica
neurodegenerativa debe su nombre a James Parkinson, un médi-
Correspondencia: Dr. Mohamed Farouk Allam. Departamento de Medicina
Preventiva y Salud Pública. Facultad de Medicina. Universidad de Córdoba. co londinense que fue el primero en reconocer las características
Avda. Menéndez Pidal, s/n. E-14004 Córdoba. Fax: +34 957 218 573. E-mail: principales de este trastorno, en 1817 [1,2].
fm2faahm@lucano.uco.es Hasta el momento, y a pesar de que la EP se identificó hace casi
 2003, REVISTA DE NEUROLOGÍA doscientos años, su etiología exacta no se ha esclarecido [2-5]. Sin

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M.F. ALLAM, ET AL

Tabla I. Asociación entre la enfermedad de Parkinson y el antecedente familiar positivo en estudios epidemiológicos seleccionados.

Año de publicación Tipo de estudio Riesgo estimado Intervalo de confianza 95%

Pruex, et al [5] 2000 Casos y controles 9,30 2,6-32,6

Taylor, et al [4] 1999 Casos y controles 6,08 2,35-15,69

De Rijk, et al [21] 1996 Cohorte 2,50 0,9-7,3

De Michele, et al [22] 1996 Casos y controles 14,60 7,2-29,6

Seidler, et al [11] 1996 Casos y controles 12,60 4,4-36,1

Breteler, et al [23] 1995 Casos y controles 2,90 1,4-6,1

Semchuk, et al [24] 1993 Casos y controles 5,10 2,2-11,9

Tabla II. Asociación entre posibles traumatismos craneoencefálicos y la enfermedad de Parkinson en estudios epidemiológicos seleccionados.

Año de publicación Tipo de estudio Riesgo estimado Intervalo de confianza 95%

Taylor, et al [4] 1999 Casos y controles 6,23 2,58-15,07

Werneck y Alvarenga [29] 1999 Casos y controles 1,55 0,67-3,62

McCann, et al [30] 1998 Casos y controles 1,10 0,70-1,90

De Michele, et al [22] 1996 Casos y controles 2,30 1,00-5,60

Seidler, et al [11] 1996 Casos y controles 1,30 0,80-2,00

De Rijk, et al [21] 1996 Cohorte 0,70 0,30-1,70

Semchuk, et al [24] 1993 Casos y controles 4,00 1,90-8,30

Williams, et al [31] 1991 Cohorte 0,90 0,40-1,90

Factor y Weiner [32] 1991 Casos y controles 2,30 1,00-4,90

Stern, et al [7] 1991 Casos y controles 2,90 1,50-5,80

embargo, se ha confirmado que el Parkinson no es una enfermedad fue la más frecuente del anciano, con una tendencia ascendente
única, sino que tiene un carácter multifactorial [4-6]. según la edad [14].
Como factores de riesgo (FR) de EP se reconocen factores intrín- La observación de que las tasas de prevalencia de la enfer-
secos incorregibles como los hereditarios, y otros factores extrínse- medad se incrementan con la edad concuerda con la hipótesis
cos y, por lo tanto, modificables, como son el medio rural, la utiliza- de Calne y Langston, según la cual dicha enfermedad es el
ción de agua de pozos, la exposición a pesticidas, los traumatismos efecto de una noxa o noxas (ambientales o endógenas) que ac-
craneoencefálicos (TCE) y el consumo de tabaco [1,2,5,7-9]. túan sobre el circuito nigroestriado dopaminérgico, sobre todo
La hipótesis más aceptada hoy día es la ecogenética, que lleva cuando éste se encuentra funcionalmente deteriorado debido al
asociados los factores genéticos (FG) y ambientales (FA) [10- envejecimiento [15].
12]. Sin embargo, los principales determinantes de esta enferme-
dad no parecen ser genéticos, sino FA todavía por identificar.
Esta revisión presenta y discute los principales FR de EP SEXO
aportados por los diferentes estudios epidemiológicos y bioquí- Se conoce bien que el riesgo frente a EP no es muy diferente entre
micos a lo largo de dos siglos. hombres y mujeres [16]. Son muchos los estudios epidemiológi-
cos en los que no se observan diferencias en la prevalencia de la
enfermedad según el sexo [14].
EDAD Cuende y Baylín opinan que la enfermedad podría afectar
La EP, que por el momento es incurable y de la que todavía se más a los varones [6]. Más aún, Li et al comunicaron en su estudio
desconocen sus causas, puede afectar a toda la población, sin una prevalencia en varones casi tres veces superior a la de las
distinción de edad. Contrariamente a lo que la opinión pública mujeres [17].
cree sobre la EP, no se trata de una patología exclusiva de las Sin embargo, los resultados del estudio EUROPARKIN-
personas mayores, aunque sí es cierto que la mayoría de los en- SON, llevado a acabo recientemente en varios países euro-
fermos superan los 60 años [8,12,13]. peos, coinciden con los de otros estudios previos en no haber
Según los resultados de un reciente estudio poblacional rea- encontrado diferencias de prevalencia de la enfermedad se-
lizado en Cuba, dicha enfermedad crónica neurodegenerativa gún el sexo [18].

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FACTORES DE RIESGO DE EP

Tabla III. Asociaciones entre posibles factores tóxicos medioambientales y la enfermedad de Parkinson en estudios de casos y controles seleccionados.

Año de publicación Vivir en el medio rural Utilización de agua de pozo Exposición a pesticidas

Preux, et al [5] 2000 1,67 (1,00-2,50) 1,21 (0,70-1,91) 1,34 (0,83-2,15)

Taylor, et al [4] 1999 1,07 (0,99-1,15) 0,93 (0,88-0,98) 1,02 (0,90-1,17)

Kuopio, et al [37] 1999 1,45 (0,88-2,41) 1,48 (0,44-4,95) 1,02 (0,63-1,65)

Werneck y Alvarenga [29] 1999 1,00 (0,52-1,95) 1,49 (0,74-3,01) 2,49 (0,53-13,14)

McCann, et al [30] 1999 1,70 (1,17-2,57) 0,60 (0,38-0,92) 1,20 (0,80-1,50)

Chan, et al [38] 1998 0,92 (0,59-1,43) 1,04 (0,70-1,54) 0,75 (0,26-2,22)

Liou, et al [39] 1998 2,04 (1,23-3,38) 1,07 (0,19-5,98) 2,89 (2,28-3,66)

Seidler, et al [11] 1996 1,00 (0,70-1,40) 0,80 (0,60-1,20) 1,60 (1,10-2,40)

Morano, et al [9] 1994 2,50 (1,36-4,61) 2,77 (1,45-5,33) 1,73 (0,95-3,15)

Semchuk, et al [24] 1993 0,80 (0,50-1,20) 1,10 (0,60-2,00) 2,30 (1,30-4,00)

Ho, et al [40] 1989 4,90 (1,40-18,2) – 3,60 (1,00-12,9)

Odds ratio y sus intervalos de confianza del 95%, entre paréntesis.

Estos resultados contradictorios entre los diferentes estudios cidos, en los que la EP se había diagnosticado en el transcurso de
podrían deberse a posibles diferencias en la supervivencia, a un los últimos 50 años, en Islandia, los autores utilizaron una amplia
distinto nivel de accesibilidad al sistema de salud o a diferencias base de datos que contenía información genealógica de 610.920
en la composición por sexos de las poblaciones estudiadas. islandeses, correspondiente a los últimos 11 siglos. Los pacientes
Para que la diferencia de prevalencia entre géneros se confir- con EP se relacionaban más entre sí, en una media significativa-
me, deben realizarse estudios prospectivos de incidencia. mente superior, que los individuos de los grupos controles idén-
ticos. Esta relación se extendió mas allá de la familia nuclear.
Concluyeron, por tanto, que la EP tiene un componente genético,
GENÉTICA así como un componente ambiental que también afectaba a los
A finales del siglo XIX, Charcot, un médico francés, observó una pacientes [25].
alta frecuencia de antecedentes familiares en persones afectadas Los resultados de los principales estudios publicados sobre
por EP. Desde entonces, se sugirió la importancia de una posible EP en gemelos descartan el papel de la genética. Muestran una
base genética en dicha enfermedad [2]. concordancia del 6,1% en gemelos monocigóticos y del 4,6% en
Estudios epidemiológicos han demostrado que la prevalencia gemelos dicigóticos. Dicha baja concordancia, a pesar de que los
del EP es mucho mayor en Europa y Norteamérica que en Asia y hermanos gemelos normalmente comparten una exposición am-
África; además, la mortalidad hallada por la enfermedad aparece biental similar durante sus primeros 20 años de vida, sugiere que
en menor grado en sujetos de raza negra que blanca [19]. La los principales determinantes de esta enfermedad son FA y no
deducción principal de todos estos estudios es que los FG debe- genéticos [26-28].
rían ser muy distintos entre diferentes grupos poblacionales, dado En el reciente estudio de Giroud-Benítez et al [14] se observó
que estos grupos ni comparten la misma carga ni han experimen- muy baja frecuencia en la historia familiar de los afectados y no se
tado las mismas mutaciones genéticas [6,17,20]. encontró ningún sujeto joven con la enfermedad. Dicho estudio
Estudios epidemiológicos analíticos han confirmado la ob- poblacional de tipo ‘puerta a puerta’ aportó que sólo el 12,5% de
servación inicial de Charcot y han identificado la presencia de los sujetos con diagnóstico de EP presentaban una historia familiar
antecedentes familiares de EP como uno de los FR a tener en positiva, sin observar patrón de herencia alguno. Giroud-Benítez et
cuenta [5]. al fundamentan sus resultados en la metodología más estricta en la
En la tabla I se resumen los resultados de diferentes estudios identificación del antecedente familiar de los pacientes.
epidemiológicos analíticos que han evaluado la asociación entre Langston afirmó en su revisión [2], apoyado en resultados
EP y el antecedente familiar positivo. epidemiológicos y genéticos, que existía una agrupación de EP
Dichos estudios no llegan a examinar ni revisar la historia en ciertas familias y grupos étnicos. Sin embargo, añadió que se
clínica de los familiares. Dado que los pacientes intentan encon- precisa la participación de FA, como el medio rural y el estilo de
trar una explicación a su enfermedad, podrían atribuir el temblor vida, para activar los genes involucrados en EP y desarrollar esta
esencial en sus familiares al Parkinson (diagnóstico erróneo). enfermedad.
Además, sus superiores conocimientos sobre los síntomas de la Hasta el momento, a pesar de los avances en el campo de la
enfermedad, comparados con los de los controles, crearían incer- genética, no se ha identificado ningún gen como el responsable
tidumbre en los resultados de dichos estudios epidemiológicos. en la EP idiopática, ni la herencia genética como FR para padecer
En vista de ello, los resultados de estos estudios con respecto a los dicha enfermedad [2,19,28]. Por lo tanto, la EP idiopática no
antecedentes familiares no se pueden considerar concluyentes. debería ser una enfermedad con una importante base hereditaria,
En un gran estudio reciente con 772 pacientes vivos y falle- sino que los FA serían los más importantes en su génesis [2,12].

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M.F. ALLAM, ET AL

TRAUMATISMOS CRANEOENCEFÁLICOS (TCE) En el futuro, las matrices de exposición de trabajo pueden ser
Los TCE, como observó James Parkinson, podrían ser una de las una herramienta más objetiva para evaluar la relación entre EP y
causas del parkinsonismo; además, podrían empeorar la gravedad la exposición precisa, así como la interacción entre la exposición
de dicha enfermedad en pacientes con el diagnóstico establecido. a las toxinas y los genes de susceptibilidad.
Por lo tanto, apoya la relación entre los TCE y su etiología [2]. A Podría investigarse la exposición a estos factores o podrían
pesar de que muchos estudios epidemiológicos han identificado seguirse cohortes a los agricultores y a los trabajadores industria-
una asociación positiva, el tema sigue sin aclararse. Los resultados les, para evaluar si se encuentran expuestos a un riesgo aumenta-
de diferentes estudios epidemiológicos al respecto de dicha asocia- do respecto a la EP.
ción, se resumen en la tabla II. Preux et al, en un reciente estudio
de casos y controles, no apoyaron dicha asociación; pero en este
estudio, no contemplaron el riesgo estimado [5]. ANTIOXIDANTES
Los estudios de casos y controles vistos anteriormente pue- El interés por el posible papel patogénico del estrés oxidativo en
den tener un sesgo sistemático. Los pacientes buscan una expli- la EP ha sido especialmente importante en la última década, desde
cación para su enfermedad y recuerdan cualquier traumatismo la primera descripción de Dexter et al [53]. El aumento de la
como posible causa de la misma. Esto hace que todos los estudios producción de radicales libres y la insuficiencia del mecanismo
de casos y controles estén a favor de considerar el traumatismo defensivo antioxidante podrían desempeñar un papel en la etio-
como posible causa del Parkinson. Sin embargo, los estudios de logía de la enfermedad [46,54]. En muchos estudios neuropato-
cohorte, en los que se hace un seguimiento continuado, evitan lógicos se identificaron indicadores del estrés oxidativo que su-
dicho posible sesgo. Dichos estudios prospectivos dejan este fac- gieren un aumento de peroxidación lipídica en las células cerebrales
tor del traumatismo como menos probable [18]. dopaminérgicas [45,55,56].
Se sospecha que una ingesta suficiente de antioxidantes, bien
en la dieta o como suplementos, podría bajar el riesgo de Parkin-
NEUROTOXINAS son o, como mínimo, decelerar su progreso [45,57,58]. Hasta el
El interés renovado por las neurotoxinas en este tema que nos momento, los estudios que evaluaron la asociación entre la inges-
ocupa se acrecentó al observar que se podía causar Parkinson ta de los antioxidantes en dieta y EP han dado resultados contra-
mediante la inyección intravenosa o, posiblemente, también la dictorios [18,45,46,57-60]. Tres estudios de casos y controles
inhalación, del compuesto químico 1-metil-4-fenil 1,2,3,6-tetrahi- basados en casos prevalentes no identificaron ningún efecto pro-
dropiridina (MPTP) [33,34]. Las propiedades neurotóxicas del tector [58,61,62]; sin embargo, no se pueden excluir posibles
compuesto MPTP causan un síndrome de parkinsonismo que se sesgos. Un reciente estudio de casos y controles, basado en una
parece mucho, clínica y patológicamente, a la EP [12,35]. Mu- cohorte de 25 años de seguimiento de 8.000 japoneses afincados
chas investigaciones se enfocaron hacia la relación entre EP y la en EEUU identificó una asociación inversa significativa entre el
exposición directa o indirecta a compuestos potencialmente tóxi- Parkinson y el consumo de vitamina E [60]. En teoría, las vitami-
cos, como MPTP y su metabolito MPP+, contenido en los pesti- nas A y C también podrían tener un efecto antioxidante en el
cidas [36]. cerebro; sin embargo, dicho efecto no se ha demostrado todavía
En la tabla III se muestra la posible relación positiva entre EP en ningún estudio [18,58,59,62].
y vivir en el medio rural, consumir agua de pozo o utilizar pesti- De acuerdo a la evidencia actual, la vitamina E sería el único
cidas –factores que reflejan la posible exposición a compuestos antioxidante que protege contra el desarrollo de Parkinson. No
neurotóxicos–. Butterfield et al y Hubble et al también dieron obstante, se precisan más confirmaciones en estudios poblacio-
cuenta de la asociación positiva con el uso de los pesticidas; sin nales prospectivos.
embargo, no demostraron ninguna asociación con vivir en el medio
rural o beber agua de pozo [41,42].
Algunos otros estudios indicaron una asociación significati- TABACO
va entre la exposición a los FA industriales (p. ej., los metales Respecto a los FA, el único factor que se ha asociado claramente
pesados como el hierro, el mercurio y el plomo) y EP [12,43-45]. con EP es el consumo de tabaco [2,6,12].
Numerosos estudios han mostrado un aumento de la concen- En los últimos años, varios estudios epidemiológicos mues-
tración de hierro total y de Fe3+ en la sustancia negra de pacientes tran una relación negativa entre el tabaquismo y EP [11,40,41,63-
parkinsonianos [46]. 68]. Sin embargo, otros estudios no encontraron ninguna relación
Hasta el momento no se ha aclarado si los efectos de las neu- significativa [30,37,39,69-73].
rotoxinas medioambientales se potencian por defectos genéticos Todos estos trabajos sugirieron varias teorías acerca de la
en los sistemas de toxicidad en el cerebro [2,4,45,47,48]; sin asociación entre este factor y la enfermedad. Se dedicaron varias
embargo, hay algunas indicaciones de que los polimorfismos de revisiones a la clarificación de toda esta controversia sobre si el
los genes de susceptibilidad están involucrados en la etiología del tabaquismo y el Parkinson se asocian [10,74-76].
Parkinson [49-52]. Muchos investigadores han dado pistas importantes sobre la
Como todos los estudios de casos y controles, los estudios patofisiología de EP y su asociación con el consumo del tabaco.
sobre este tema fueron retrospectivos y se basaron en registros; Fowler et al [77] aplicaron técnicas de imágenes en vivo y
por tanto, los resultados tienen que interpretarse con cautela. Puede demostraron que, comparados los cerebros de fumadores con los
haber ocurrido prejuicio de información, sobre todo cuando se de no fumadores, éstos tenían un 40% de reducción de la forma
sabe que la inhalación de compuestos tóxicos podría causar algún B de la monoaminooxidasa (MAO). MAO B es una enzima se-
daño al cerebro. Es más, las asociaciones se han establecido casi lectiva para la degradación metabólica de la dopamina y su in-
exclusivamente de una manera indirecta, sin medir la verdadera hibición se asocia con una actividad reforzada de este neuro-
exposición. transmisor, así como una producción disminuida de peróxido de

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FACTORES DE RIESGO DE EP

hidrógeno, que es una fuente de las especies de oxígeno reactivo – Incorrecta clasificación de la exposición: los pacientes de EP
[78]. La inhibición de MAO B también puede tener efectos se- posiblemente consideran insignificante el hecho de fumar y
cundarios en otros neurotransmisores, como la serotonina y la no le conceden gran importancia a la hora de citarlo entre sus
noradrenalina, a través de interacciones complejas con la dopa- problemas, o incluso pueden ocultarlo a los médicos [74].
mina [79,80]. Flowers et al encontraron niveles comparables de – Datos inexactos e incompletos acerca del diagnóstico del
MAO en los ex fumadores y en los no fumadores; por lo tanto, Parkinson o el hábito tabáquico: respecto al diagnóstico,
se indica que las diferencias en MAO B entre los fumadores y no hay muchas dudas en los estudios prospectivos que habían
fumadores se deben al efecto farmacológico del tabaco, y no al identificado sólo los casos fallecidos con el Parkinson, como,
genético [77]. por ejemplo, los resultados pioneros de Dorn sobre este tema
Recientemente, De Palma et al [81] explicaron el efecto pro- [63]. El factor de inexactitud en algunos otros estudios pue-
tector del tabaco, basado en su interacción con la glutatión S- de ser el de identificar el hábito tabáquico en las historias
transferasa clase Mu (GSTM1). En su estudio, el efecto protector clínicas [10,69,74].
del tabaco desapareció entre pacientes con un nivel de GSTM1 – Mortalidad selectiva entre los fumadores a edades tempra-
nulo. Según Rostami-Hodjegan et al, la ausencia homocigótica de nas: debido a sus efectos secundarios o la predisposición ge-
GSTM1 afecta aproximadamente al 50% de las personas blancas; nética selectiva [10,14,74,88,89].
esto podría ser la explicación de la asociación heterogénea entre – Diferencia de personalidad asociada a EP: el rechazo del
el consumo del tabaco y la EP en diferentes poblaciones [82]. hábito tabáquico durante la vida adulta temprana puede ser
Investigaciones más recientes nos indican que la 1,2,3,4-te- una manifestación prodrómica de EP, y podría ser la primera
trahidroisoquinolina (TIQ) y la 1,2,3,4-tetrahidro-beta-carbonilo manifestación clínica [90]. Las personas predestinadas a EP
(THbetaC) son dos proneurotoxinas del sistema dopaminérgico son más pasivas, más introspectivas, probablemente no asu-
endógeno o exógeno, supuestamente involucradas en la etiología men riesgos y son más egocontrolados; por tanto, de manera
de EP. Soto-Otero et al [83] investigaron si la administración espontánea, escogen no fumar [91-94]. La incidencia más
crónica de dos dosis diarias de una solución de humo de tabaco baja de alcoholismo en los enfermos de Parkinson, destacada
podía modificar las concentraciones endógenas de TIQ y THbe- desde 1966 por Pollock y Harnabrook, nos hace pensar en una
taC en el cerebro de una rata. Se observó una reducción signifi- actitud temprana entre dichos enfermos [95]. Podría haber
cativa en el nivel de ambas proneurotoxinas después de 30 días algo diferente en el Parkinson que lleve a estos pacientes a no
de tratamiento. Los autores concluyeron que el fumar puede pre- adquirir estos hábitos muchos años antes de la aparición de
venir la acumulación de estas proneurotoxinas en el cerebro y que los síntomas extrapiramidales, y probablemente en la adoles-
corrobora que la reacción entre TIQ y THbetaC con algunos com- cencia tardía o en los años del adulto temprano, cuando pue-
ponentes del humo del tabaco actúan como un mecanismo neu- den adquirirse los hábitos de fumar y beber alcohol.
roprotector para EP [83]. – Causalidad inversa: la EP se asocia con trastornos del movi-
Además de auténticos mecanismos biológicos, se han pro- miento y, al comparar a estos pacientes con controles sanos,
puesto otras hipótesis para explicar la asociación entre el fumar da una sobreestimación de fumadores entre los sujetos sin
y el bajo riesgo de EP. Los argumentos sugeridos por varios trastornos físicos [67,74].
investigadores han incluido: – Si el tabaco tiene un efecto protector real, al mismo tiempo
– Factores de confusión [24]: una posibilidad es que esta clara tendría que retrasar la edad de Parkinson entre las personas
asociación protectora puede ser un artefacto de confusión. predestinadas para esta enfermedad neurodegenerativa. Va-
Hay estilos de vida común que se asocian con el fumar, como, rios estudios han demostrado que la edad de aparición de los
por ejemplo, el del consumo del café. Recientemente, se ha primeros síntomas de Parkinson es mayor entre los fumadores
sugerido el café como un factor que se asocia con una inciden- [37,69,79,87,96]. Otros estudios, en cambio, no han demostra-
cia más baja de EP [5,84,85]. Se piensa que la niacina y otros do ninguna relación dosis-efecto sobre lo mismo [9,16,91].
micronutrientes contenidos en el café tienen un efecto neuro-
protector [86]. De forma semejante, varios investigadores
estudiaron la asociación entre el consumo del té y el riesgo de CONCLUSIONES
adquirir EP [5,9,38,40,87]. El té puede proteger contra EP Son varios los posibles FR en EP; sin embargo, no se ha encon-
debido a sus efectos antioxidantes o a su contenido en taninos trado, hasta ahora, ningún FA o FG determinante para su desen-
que forman firmes complejos con el hierro e inhiben la absor- cadenamiento.
ción férrica [38], y ya se conoce el papel del hierro en la Los futuros estudios deben plantear la hipótesis de una etiolo-
patogénesis de EP [45]. gía multifactorial y tener en cuenta la interacción entre los FG y FA.

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FACTORES DE RIESGO DE LA ENFERMEDAD DE PARKINSON FACTORES DE RISCO DA DOENÇA DE PARKINSON


Resumen. Objetivo. Esta revisión presenta y discute los principales Resumo. Objectivo. Esta revisão apresenta e discute os principais
factores de riesgo (FR) de la enfermedad de Parkinson (EP) aporta- factores de risco (FR) da doença de Parkinson (DP) proporciona-
dos por los estudios epidemiológicos y bioquímicos. Desarrollo. Los dos pelos estudos epidemiológicos e bioquímcos. Desenvolvimen-
FR más escritos son: 1) Edad: la EP no se trata de una patología to. Os FR mais escritos são: 1) Idade: a DP não é uma patologia
exclusiva de las personas mayores, aunque la mayoría de los enfer- exclusiva dos mais velhos, embora a maioria dos doentes tenham
mos superan los 60 años; 2) Sexo: en la mayoría de los estudios mais de 60 anos; 2) Sexo: na maioria dos estudos epidemiológicos,
epidemiológicos no se observan diferencias en la prevalencia de EP não se observam diferenças na prevalência de DP segundo o sexo;
según el sexo; 3) Genética: no se ha identificado ningún gen como el 3) Genética: não foi identificado nenhum gene como responsável na
responsable en EP idiopática; sin embargo, se han identificado los DP idiopática. Contudo, foram identificados os antecedentes fami-
antecedentes familiares de EP como FR; 4) Traumatismos craneoen- liares de DP como FR; 4) Traumatismos crânio-encefálicos. Este
cefálicos: este factor puede tener un sesgo sistemático, dado que los factor pode ter um curso sistemático, como os doentes procuram
pacientes buscan una explicación para su enfermedad y recuerdan uma explicação para a sua doença e recordam qualquer traumatis-
cualquier traumatismo como posible causa de la misma; 5) Neuroto- mo como possível causa da mesma; 5) Neurotoxinas: muitas inves-
xinas: muchas investigaciones se enfocaron hacia la relación entre tigações foram dirigidas para a relação entre DP e a exposição
EP y la exposición directa o indirecta a los compuestos como MPTP, directa ou indirecta a compostos como o MPTP, contido nos pesti-
contenido en los pesticidas; 6) Antioxidantes: se sospecha que su cidas; 6) Antioxidantes: suspeita-se que a sua ingestão em quanti-
suficiente ingesta, como parte de la dieta o suplementarios, podría dades suficientes, como em dieta ou suplementos, poderia baixar o
bajar el riesgo de EP o decelerar su progreso; 7) Consumo de tabaco: risco de DP ou atrasar a sua progressão; 7) Consumo de tabaco:
varios estudios mostraron una relación negativa, mientras que otros vários estudos mostraram uma relação negativa, enquanto que outros
estudios no encontraron ninguna relación significativa. Conclusio- estudos não encontraram qualquer relação significativa. Conclusões.
nes. Son varios los posibles FR en EP; sin embargo, no se ha encon- São vários os possíveis FR na DP; contudo, não foi encontrado, até
trado, hasta ahora, ningún factor determinante para su desencade- à data, qualquer factor determinante para o seu desencadeamento.
namiento. Los futuros estudios deben plantear la hipótesis de una Os futuros estudos devem considerar a hipótese de uma etiologia
etiología multifactorial y tener en cuenta la interacción entre los multifactorial, e ter em conta a interacção entre os factores gené-
factores genéticos y ambientales. [REV NEUROL 2003; 36: 749-55] ticos e ambientais. [REV NEUROL 2003; 36: 749-55]
Palabras clave. Antioxidantes. Edad. Enfermedad de Parkinson. Palavras chave. Antioxidantes. Doença de Parkinson. Factores de
Factores de riesgo. Genética. Revisión. Sexo. Tabaco. Toxinas. Trau- risco. Genética. Idade. Revisão. Sexo. Tabaco. Toxinas. Traumatis-
matismos craneoencefálicos. mos crânio-encefálicos.

REV NEUROL 2003; 36 (8): 749-755 755

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