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Un nuevo saber. Los estudios de mujeres Marysa Navarro y Catharine R. Stimpson (compiladoras) 1. Qué son los estudios de mujeres? IL. Sexualidad, género y zoles sexuales Ul. Cambios sociales, econémicos y culturales IV. Nuevas direcciones ‘Maysa Navarro enseila Historia de América Latina en Dartmouth College, donde ha sido decena asociada de Ciencias Sociales y es Charles Collis Professor of History. (Catharine R. Stimpson es edicorn fundadoca de Signs: Journal of Women in Gulture and Society, Ha paricipado en los estudios de mujeres y de género etd log aoe sesenta, En 1990 fae elegida presidenea de la Modern Language Association. En Ia actualidad es University Professor y decana de estudios agrsdundos en New York University UN NUEVO SABER LOS ESTUDIOS DE MUJERES Sexualidad, género y roles sexuales MARYSA NAVARRO CATHARINE R. STIMPSON ComPILADoras FONDo be Cu-TURA ECONOMICA MEXICO - ARGENTINA - BRASIL ~ COLOMBIA - CHILE ~ ESPANA, EsTADOS UNIDOS DE AMERICA - PERG - VENEZUELA Primera edicibn en expaiol, 1983 Sesnalidad, géntro y roles sexnales Este libro lia sido petracinado por el Comité LAsA / Ford - Estudios de Género en las Améxicas 1D. R.© 1998, FoNDO DE CULTURA ECONOMICA DE ARGENTINA, S.A. EL Salvador 5665: 1414 Buenas Aies |x. Picacho Ajusco 227; 14200 México D. F ISBN: 950-557-339-1 IMPRESO EN ARGENTINA Hecho el depésito que peeviene la ley 11.723 [] Z Haciendo género* Ua 40) Candace West y Don H. Zimmerman Fl objeriva de este articulo es proponer un nuevo conceEt de ge i eve se jogro ratinario iamerso en la interacciOn diana Pet lo implica una evahuacion critica de los conceptos exist=Oes ea eco 7 Bénero, y a introduecién de importantes distincionet sore Sexo, categoria sexual y género. Nuestro planteo es ave © nits stimmjento de [a independencia analitca de estos consePtos ee oretfal para entender el trabajo interactivo que implica 6 cs eerirsona generizada en la sociedad. La dieccion de nusit™ are Pisefones se incina hacia la eeconceptualizacin teGrise, PO? cost en consideramos temas posiles para la investigacién cempi- rica, desde nuestra propuesta tin el principio, habia sexo y habia género. Quienes onset bamos ea erate earon temas a fines de los aos sesentay prinipios Ae ‘ttonta teniamos cuidado de distinguir ano de oto, 1s decia- to earns alumnos ¥ alurmnas que e exo era Jo que dabe a bioto- gia In anacomia, las hormonas ys fisilogia. Bl etnsto, cexplicaba- aera un statis adguirido, construide por medios psicol6gicos, mossy sociales, Para introduce la diferencia entre los dos, «Tule eign en inglés: “Doing Gender pubiado em Gender Soc sent RNB 1990) Traducién de Ja Constasio y Lasse Apone Se ida y coreegida pot Macysa Navaszo. y commie 2 basado eo pare sobre w= abso presenalo en M Seng) se atc ee lege Asrition en Chicago, spties 361977 Trecemos Lynda Anes, Reina Apher, Steven last. Yodith Gerson, ‘grades 92 an, Maya Lester, Jubth Lobes, Robin Lords Moye ae ae eo Sehnede, Buse Thorne, Thome P. Wis Yt Soe al Malin st enaemaker Beck por su geenciat an les or #27070 199 no SEXUALIDAD, GENERO ¥ ROLES SEXUALES cursiamos a casos clinicos singulares sobre herrafroditas! y a in- vestigaciones antropol6gicas sobre “tribus extrafias y ex6ticas”.* Tnevitablemente, como era de esperar, en las semanas siguientes uestras aluminas se sentian confusas. El sexo diffciimente pares igo dado en el contexto de investigaciones que ilustraban el & es ambiguo, ¥ on frecuencia conflictivo erierio desu atribucién Yel género parecia mucho menos algo alcanzado en el contexto de los imperativos antropol6gicos, psicoldgicos y sociales que estu~ Giabamos: la division del trabajo, la creacidn de identidades de gé- hero y la subordinacion social de las mujeres por los hombres. ‘Ademés, la docsina oficial en teorias de la scializacin de género planteaba con fuerza que mientras que el género podia alcanzarse Pigs o menos a los cinco aiios de edad, era sin lugar a dudas per- Thanente, invariable y estitico, de manera muy parecida al sexo. Desde 1975, la confusi6n se ha intensificado y se ha extendido ands alld de cada una de nuestras aulas. Por un lado, hemos apren: lido que la_relacién entre los procesos bioldgicos y.culiuzales era Fucho mis compleja y réflexiva de lo que habamos supvesto.? 4 Por otco Indo, descubrimos que cieras disposiciones estructuraes, Por ejemplo, Jas existentes entve el trabajo y la familia, ‘en realidad pro- ducen 0 permiten_la.existencia de-ciertas capacidades, ‘como el ser rade, que anteriormente asociabamos con la biologia.* En medi de esto, la nocidn de género como algo alcanzado de manera veel rrente en algiin momento se cayé por la borda. lab py low i lip tener ai a ten i ee eatery, Coy R Dib (eda, Nebo Sept or en a Set ony a a pany a eae fake Man and Womanboy Selene Johns Hopkins University Press, 1972). ep et Ta ak Sx and Tempore Sere Yok: ely 133 Fe ee te aenten Seco Review 49 (1984): 1-19, esp. 10-14, " EY trate tax hecusamaiitel a antes f Gre kine of es om versus Shulamith Firestone, The Dialectic of Sex: The Case for Feminist Revolu- tion (Nueva York: William Morrow, 1971 . " fork eet HACIENDO GENERO Ep este articulo nuestro objetivo es proponer ena comprension documentada etnomerodoldgicamente, y por lo tanto distinciva- we goniolgiea, del género como wn logso cutinario, mev6dico Mecourreate. Pensamos que el hacer genero es emprendide por Le Eeey hombres, caya competencia como miembros de 13 so. edad es rehén de su produccion® Hacer género implica un com fiejo de actividades perceptvas, interacivas y mieropolieas 60° Elmente guiadas que conforman actividades particulazes como} cxpresiones de la naturaleza ferenina y de li masculina” Presid vemos el genero como un logro, una propiedad ad” quisida de conducta determinada, questra atencin pasa del te- aur gerno al individual, se centra en fo interecrivo y, en Gi- ee tino, en lo institucional. En un sentido, por supuesto 10s me tflune ron los que hacen género. Pero es un hacer situaloy ind Ticado en presencia zeal o virtual de otras personas, que s° su pone que estén orientadas hacia su produccion. Mas que £3, propiedad individual, consideramos el géneso-samu6.08 zlemento 9 como la Emergeate de situaciones $0¢ razon fundamental de varios arrepos sociales y us medio de leei- {earuna de las divisiones mas fandamentales de la sociedad. rae aiprareguit nuestro planteo, hacemos un aadliss extico de Io gue for soeidlogos han querido detic con género, inclayento su consideracién como la cepresentacion. den. papel enelsenti- . la rer y. Tina demostracion en Ia tezminologia de Goffman. Tanto el papel de género cosmo la demostraion de gé- see ae centran en aspectos del comportamiento del ser mulcr rere ‘fen oposicion, por ejemplo, a las diferencias biol6gicas rome los dos), Sin embargo, para nosotros Ia nocién de genee> coe es oscurece el trabajo involucrado en la produccién del ge come tr las actividades diarias, mientras que la nocién de género 2670 sna demostraci6n lo celega a la periferia de la interacciOn- ond Por puestra parte, afirmamos que las personas que participa 6p” Ie rareenctiOn organizan sus mlkiples y variadas actividades pa- s vase Being Goan, "Genie Dis Std i ee Athropoly of et mations (9765 77 wor RQUNRRS = Paar ua shore) 1m SEXUALIDAD, GENERO Y ROLES SEXUALES ra reflejar o expresar el génezo y estén dispuestas a percibir el comportamiento de las otras bajo una luz simular Para elaborar auescra propuesta, sugecimios desde ya que deben dome en cuenta ls impomtants pero a menyéoignoradas dis dinciones entre sexo, categoria sexual y género {Sexo 4s una deter. ‘inacién hecha'éobce la base de criterios biol6gicos socialmence convenidos para clasificar a las personas come machos o heme bras. Los eriterios de clasiicaciéa pueden ser los genitales de na. cimiento o la configuraciéa cromosémica antes del nacimiento y ho concuerdan necesariameate. La colocacidn en una categori xual se iogra aplicando los criteios sobre el sexo, pero en lo vice “Glavin Na clasificacién se establece y se mantiene por las demo ciones identificatorias social ucridas que proclaman nues- ta pestenencia.a una i otra categoria. Fn este sentido, la categoria sexual de una persona supone su sexo y la representa en muchas situaciones, pero sexo y categoria sexual pueden vatiar de manera independiente; es decis, es posible afirmar que se es tiembro de tuna categoria'sexual aun cuando falten los eriterios sexuales, En contrasteyRénero'es Ia actividad consistente.en manejar una con dlucta deterthinada a la luz de concepeos normativos de actinudes y actividades apropiadas para la categoria sexual de cada persona, {as actividades relacionadas con el género surgen de la exigencia de ser miembro de una categoria sexual y la apoyan. Afirmamos que ei reconocimiento de la independencia analit ca de sexo, categoria sexual y género es esencial para compren- der las relaciones entre estos elementos y el teabajo intersctive contenido en ser una persona con género en Ia sociedad. Aunque fuestra meta primordial es te6rica, habré ocasién para discatie. lineas fructiferas para la investigaciéa empiriea que surjan de la formutacién de género que proponemos. ‘sta deliicén subestan malkiples complies imlicadasen la relcibn ntl biology la cultura (Alisog Jagat, Ferns Poites and Himon Nx ‘ure (Totowa, Ni: Rowman & Allrhelé, 1983} 106-113), Sin embargo loses tccaleamos es que a determinaci6 un proceso socal total, xo arnegera demu ea clasficacin sexual ce una persona et aerers HAGENDO GENERO ua del significado aceptado seacemos con una evaluacioa rade se gener parcasvnt ep rac6n So Fa ee 0° Sion tiene en las supuestas diferencias biolbgicas existen hombres y mujeres. Perspectivas sobre género y sexo ultural aceptado so- cn las sociedades occidentales el concepro cult i ser defnidas ivocos,” con determinadas nidas naturalmente y sin equivocos isadas ieldtirone pteolopensy de comporamieat que pueden pre amen ide sus funciones reproductivas. Los miem! ro ts y Compete desta sce en a een ae ; mujeres como fundamentales y pet les; dife- Sool apeenerente apoyndas por I dist dl eaaio ef meio. masculino, y a mens int Hibota ase, ale le i yortamientos femeninos y mé + 9) oe caivce cacaceraicas promnentes de a organzaci sci {an cons son como son por el hecho de que os hombres fon bres Issues som meen sine divin aepad como sere y furdamentada en !a biologia, que produce a su ves a rearncns piclopes, soe de comport seers reson esrcrurles de una Sociedad son ls pres responsable de esas diferencias son Si bien los andlisis de sexo y gt ar cenian oils os sin critcas eT inge! aa a aare punto de vista, a menudo conservan un concepto Ue shut caitetsas ius cone exo como onatein ‘esenciales de los individuos.* El “enfoque de la: > Veage Harold Garfinkel, Stadies » Eshnomethodology {Englewood itis, Tyumis, seoe sexe (teeie de Lo aprere tone rode Me easy praeg) ee eee (AB BEE Aecata ke Va etek ( semabianetds) 14 sexuauipan, GENERO Y ROLES bexUALeS sel ferencias sexuales”? se atribuye mis cominmente 2 la psicologia que a la sociologia, pero los que hacen encuestas y determminan el género de una persona que contesta sobre la base del sonido de su yor en el teléfono también estén haciendo suposiciones orientadas por las caracteristicas. Al reducir el género a un conjunto vem] ente de caracteristicas psicolégicas 0 a una variable uniraria, se excluye una consideraciéa seria de las formas en que es utilizado | para estruccurar distintas esfecas de la experiencia social.!9 =} En otro sentido, la teorta de los roles se ha encargado de la cons trucei6n social de la cafegorias de género, llamadas roles sexuales ids recientemente, roles de género, y ha analizado cémo se aprenden y se representan. Desde Linton! continuando con las obras de Parsons®? y Komarovsky,? la teoria de Jos.roles ha enfati zado el aspect dinamico y social de la construcci6n y representa- cién de los coles. Pero a nivel de la intcraccién cara a cara, la apli- (Gasion de la teorfa de jos roles al género tiene problemas propios.1¥ ° ‘York: AnchorfDoubleday, 1975}: 308-339; Barrie Thosne, “Gender... How Is I Best Conceprualzed?™, manuscrto india, 1980; Nancy M. Henley, “Psychology and Gender” en: Signs fourmal of Warne: jx Culture and Society 11 {1985}: 101-19. * Thorne, “Gender...", ob. cits: 1. vo Judith Stacey y Borie Thorne, “The Missing Feminist Revolution in So- ciology" en: Social Problems 32 (1985): 307-308 Neate Ralph Linton, The Study of Man (Nuova York: Appleton-Century, 1936), "2 Vase Taleote Parsons, The Social System (Nueva York: Free Press, 1951}; ‘Talcore Parsons » Robert F Bales, Family, Socialization and Interaction Process (Nuova York: Free Press, 1955), 1S Véase Mista Komaroveky, "Cultural Contradictions and Sex Roles”, en American Journal of Sociology $2 (1946): 184-1895 y “Functional Analysis of Sex Roles*, en: American Sociological Review 15 (1950): 508-516. 'e Véase Thorne, "Gender", 00. cits R. W. Connell, Which Way Is Up? (Sydney: Allen & Unwin, 1983), "Hara buenas eeseis y eras, vase Connell, Which Way Is Upt, ob ety yy “Theoriing Gendee", en: Sociology 19 (1985): 260-2725 S. Kessler, D. J. At endon, & W. Connell, y G. W. Dowsert, "Gender Relations in Secondary ‘Schooling, ent Sociology of Educeton $8 (1985: 34-48; Helene Z. Lopata y Bartle Those, “On the Term ‘Sex Roles, en: Signs Journal of Womer in Cu ture and Society 3 (1978): 718-721; Barsie Thorne, "Gender...", ob. cits Stacey Y Thorne, *The Missing Feminist Revolution in Sociology”, ob. cit. ee dens wepede) Caine seca hget HACIENDO GENERO us Los roles son identidades situadas lades situadas ~asumidas y desechadas, seg to requera Ia situacin- mis que idemidades principale, cm como I categoria sexual, que atravisan sivaciones. A eferencia lc la mayoria de los roles, como el de enfermera, doctor, paciente © profesor y estudiante, el género no tiene una ubicacidn especifi- Ga 0 un contexto onganizativo, Ademis, muchos roles ya tienen ina marca de género, de modo que se deben agregar calificativos ‘especiales, por ejemplo la juer 0 ef recepcionista, a les excepcio, nes de la rea. Thorne sefala que conceeualiare gnero come un ro ficult evaluar au influencia sobre otto roles y reduces Uulidad explicatva en dicusiones sobre el poder y la desigal- ad.!” Remitiéndose a Rubin,'8 Thorne pide una reconceptualiz: cidn de los hombres y las mujeres camo gr ales distnoe, a uidos en “relaciones sociales concretas, ica cambiantes, y generalmente desigiales” 1°" “Afirmamos que el g¢ 10 eS ni un ‘as ni una variable o un rol, sino el igrto. tipo d _ un ol, sino el produeto de cierto tipo de Bea scale, QUE 6 pues [a pec social de génece? Be 5 que la creacién continua del significado del yénero a través elas acions humanas.”° Para nosotros el ener se faye stavis de Ja interaccién. Para desarrollar [as iimplicaciones de es eracién vamos a la “demostracién de géneco” (gen. *< Zee C. Hughes, "Dilemmas and Conradeions of Stats” can Journal of Sociology 50 (1945): 353-359. esa eich Thome, "Gender" ob * Gayle Rubin, “The Tac in Women: N . aon Rab The Tea Women Naso he Plc soy” of |, Toward an Anthropology of Women (Noe Monthly Review Press, 1975}: 157-210. een ab Sees York M'Thors, "Gender." ob ct 1 2 Judth M, Gerson y Katy Pes, “Bounds neki Gaon Kh Pe, ound, Negoiatin, Congo tel rd Rc Sal ris 859 7) sirens en sma fortaa oe cade stuacion, Dede a gues conenaons ‘Rormativas de las actitudes y actividades apropia ie at nase cae ae vaci ean sare yn dtvn mvs hst eae Sel condi sda de es execs pd das macs oon e ‘ vt — Anerheace, At a vere . v r cit emenciemti peas 26 tes ple . ee ng SEXUALIDAD, GENERO y 7 ROLES SexUaLes Ze HACIENDO GENERO Syomasiyn ef eneSA) ets como el principio o al final, para evitar la incerferencia con las actividades mismas. Goffman?” formula la demostracion de (ginaro de la manera siguiente: "Si se definiora el género como las | Goieelaciones culturalmente establecidas del sexo (ya sea conse- Pt teraccién y de este modo verse co Produciendo como un logro organs, cuenciz de la biologia 0 del aprendizaje), entonces la demostrs- cin de género se refiere a Jas descripciones convencionalizadas de estas correlaciones”, Estas expresiones generizadas pueden cevelar pistas de las di- mensiones fundamentales y subyacentes de la hembra y el varén, pero para Goffman son actuaciones opcionales. La caballerosi dad puede o no ofrecerse y, si se ofrece, puede 0 no rechazarse.#8 Ademés, los seres humanos mismos “emplean el término expre sidn, y se conducen para adecuarse a sus propias nociones de ex- presividad”.”* Las descripciones de género son menos una conse- cuencia de nuestcas “naturalezas sexuales esenciales” que representaciones interactivas de lo que nos gustaria transmitir so- bre la naturaleza sexual, utilizando gestos convencionalizados, Nuestra naturaleza humana nos da la capacidad de aprender a! producir y reconocer demostraciones de pénero masculinas y fe- meninas: “una capacidad que tenemos por virtud de ser perso- nas, no rachos y hembeas”.29 ‘A primera vista, pareceria que la proposicién de Goffman ofrece ‘una correcci6n sociolégicamente atraciva a las formulaciones de gé- nero que tenemos. Desde su punto de vista, el género es una drama tizacién de un texto escrito socialmente de la idealizaciin que hace Ja cultura de la naturaleza femenina y de la masculina, representada ante una audiencia bien educada en el idioma dé Ta representa- Sién, Para seguir con la metafora, hay representaciones programa- das que se presentan en lugares especiales; como en el teatro, cons tituyen preambulos o intermedios de actividades més serias. Esta perspectiva tiene equivocos fundamentales. Al separar la demostracion de género de los asuntos serios de la interacciéa, juror en su medio ambiente suponten que cada un turaleza esencial, una naturaleen sdeondae Se terales I wraleza que puede discernirse a travé ag SgRot naturales emiidoso exprsndne renee net renigilad ¥ la masculinidad son considerados “pronto brinidad siderados pos de ex- i Tes antitl, algo que puede ser transmitido fogateenes en la case naCion Sotial y, sin embargo, algo que immoroee través de Mee ation mas basica del individuo” 2 Loe meget vencionalin oe’, sectuamos dichas expresiones son “acres cot \cionalizados y rutinarios”25 que trane dete come Ur gonsidecamos,indcan muestra alneacion ea oy es So establecen tentativamente los términos fuaci6n social. Pero también son consid, famiento expresivo, testimonio de nuest Goffman#® ve las demostracion mente convencionallzados es terales del tipo deciara 2Gotfman, “Gender Display”, Egon Play", ob. et bid. 75. ae isa 75 bid 68. senah ibid: 2 Arar le ider se opsion "Wei: 69-70, Pips — yoo Shia: 76 a elec te7 - us SEXUALIDAD, CENERO ¥ ROLES SEXUALES Goffman oscurece los efectos del género en una amplia gama de actividades humanas. El género no es Gnicamente algo que su de en las grietas y resquicios de la interaccién, acomodado aq allé sin interferir con los asuntos setios de la vida. Si bien “| plausible sostener que las demostraciones de género, creadas co- ‘mo expresiones convencionalizadas, son apcionales, no parece plausiole decir que tenemos la opcién de ser vistos por otras per- sonas como mujeres u hombres, Fs necesario ir mds allé de la nocion de la demostracién de gé- nero para considerar lo que esté implicado en la formacién del | Sénero como una actividad continua que tiene lugar en la inze- raccién diaria, En direccién a esa meta, retomamos las distincio. Beet Sexo, categoria Sexual ygénero que presentamos ante: | Flormente. Sexo, categoria sexual y género El estudio clinico de Garfinkel?! del caso de Agnes, una transe- xual criada como varén que adopté una identidad femenina a los 17 afios y se sometié a una operacién de reasignacién de sexo aiios mus tarde, demuestra cmo el género se forma a través de ‘a interacci6n, al mismo tiempo que la estructura. Agnes, a quien Garfinkel caracterizé como “una metoddloga prictien”, desarro- U6 cieetos procedimientas para pasar por “mujer natural y nor. mal”, tanto antes como después de la cirugia. Tenia cl problema Prictico de manejar el hecho de que poseia genitales masculinos ¥ de que carecia de los recursos sociales que la biogratia de una nifia presumiblemente prove en la intesacciGn diatia, En rest. imen, necesitaba exhibirse como ana mujer y, al mismo tiempo, aprender qué era el ser mujer. Por necesidad, esta actividad de tiempo completo tavo que darse en un momento en que el gine. ro de la mayoria de la gente ya esté bien acreditado y rutinizado, Agnes tenia que hacer conscientemente lo que la mayoria de las 2 Gacfnkel, ob. cits 118-140, HACIENDO GENERO a9 mujeres hacen sin pensar. No estaba fingiendo lo que las mujeres, reales hacen naturalmente. Se veia obligada a analizar y a imagi- narse cémo actuar en circunstancias socialmente estructuradas y de acuerdo con conceptos de feminidad que las mujeres que nacen con las credenciales bioldgicas adecuadas legan 2 dat por senta- dos a temprana edad. Al igual que en el caso de otros que deben pasar, como los travesti, los actores de Kabuki, 0 Ia Tootsie de Dustin Hoffman, el caso de Agnes hace visible lo que la cultura ha hecho invisible: el logro del género. La discusién de Garfin- kel? sobre Agnes no separa explicitamente tres conceptos anali- ticamente distintos, aunque empiricamente sobrepuestos: sexo, categoria sexual y género. Sexo nes no poseia los crterios biolégicos socialmente convenides, nurs clstterie coms mlenico dal re fealna. No cleans, Agnes se vee misma como une moe aang era ua mi n pene, cosa que no debe poseer tina mujer. El pene, insistia tila, era un'“error” que necesitaba remediarse Al igual que otros miembros comperentes de nuestra cultura, Agnes respetaba la nocion de que hay criterios biolégicos esenciales que inequivo- camente distinguen a los hombres de las mujeres. Sin embargo, si nos apartamos del punto de vista del sentido comiin, descubrie- mos que la fiabilidad de estos criterios no esté exenta de cuestio- namientos.>* Ademis, otras culturas han reconocido la existenc Sih, 12627, 13132 > el Money bn 6, en, Sonal Diamine lg of fel amasatyomJnal of Nowows on el Ba TSC {5752 Moe Ea Mend Woy ol Gil. abe Mw ty Ges Osten Sogo Cae of eee ee “lyin Pa oto, rien Sf Seal Beaver (74181206 Jobe Money Y fase Tek, Styne (ent it, ows 198)

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