ALEJANDRO SIEVEKING
Avprta— No, por favor, Kurt, estoy con una cara de trasnochat
espantosa, Me acosté a las tres de la mafiana
He1Ga.~ {No nos invitaron a esa fiesta!
Apr Fue una fiesta privada. Estaba hablando con Eduardo
Roprico.~ ¢De qué?
Anprea.~ Lo mismo de siempre. jDe todo! (Eduardo sale de la cas,
se para junto a Andrea.) a
Ebuarno.— Qué significa este escindalo? La mantis religiosa
Kurt. jNo se muevan! ;Quédense tal como estiin! |
Anita No, no. (Se esconde detris de Eduardo.) (979)
Kokr.~ Son diapositivas. Todo sale mejor de lo que es. |
Enuaro.~ Saquela, nomas. A mi las ojeras me sientan mucho,
Hetca jSe ve estupendot |
Anpkea jSiquele una a la Helga con Rodrigo!
Kurr~ Un grupo, quiero un grupo. (Las hnces comienzan a disni
nuir lentamente.)
Ropnico.— Claro, todos juntos. |
Epuarvo. Y, pues, Andrea. Un recuerdo jen colores! Ya, pues,
amor, no sea tan pretenciosa. Venga. (La sujeta.) |
Kurr.= jNo se muevan! |
HeLa jDigan sChiiiis»! Uno sale regio. |
Epuarbo.~ {Chiiiiis! (Helga rie.) |
Kurt. jAtentos! {Uno!
Hetca.— 2¥ por qué no la sacamos en la playa? (Se sale del grupos
iEs mejor!
Kurr.~ ;Dos!
Hera.
Ronrico.~ Mamé, diga «Chiiiis»
ANDREA= jQué absurdo! jChitis!
Kuxr~ jEl que sali6, sali6! ;Tres! (La luz se apaga. El grupo parece
fosforescente unos segundos. Luego desaparece.)
iEspérate, espérate! (Vuelve a su sitio.)
Oscuridad,
x Bélgica Castro (1971).
358La mantis religiosa
Se estrend el 13 de mayo de 1971,
Personajes
Lina
Lalla
Adela
Juan
Aparicio
Teresa
Primera parte
Oseuridad. Oleaje de mar, lejano. Viento,
Al abrirse el telin se ve wna pieza grande y oscura. Las paredes
estén empapeladas y ef color es un morado casi negro. Al centro,
bajo una kampara de cinco globos blancos que producen una luz
difusa, un sofé anticuado, una mesa baja y larga cubierta de felpa y
dos sillones, Alfomibra. A la izquierda un gran reloj de pie. A la dere-
cha un mueble barroco donde hay libros y cajas de madera. Al fon-
do una gran puerta de madera con tallados. A la derecha wna pesa~
da cortina de terciopelo que aculta el hall de entrada. A ta izquierda
tuna cortina exactamente igual que da a un pasillo de distribucion.
‘Aut lado dos maniquies con trajes de novia inconclusos. Gran-
des espojos de taller de costura.
Por la cortina de la izquierda entra Llalla con una bandeja de
Joza con largas tajadas de queso. Se acerca a la puerta del fondo.
Fscucha. Suspira, Deja ta bandeja sobre la mesa. Le quita tas fun-
das al sof y tos sillones y las dobla cuidadosamente. Llalla tiene
cnarenta y cinco afios, es gordita, no usa nada de maquillaje y esta
vestida de riguroso luto, aunque el traje es levemente coqueto. Se
detiene un momento y escucha, sin moverse, como si bubiera sentido
un ruido en la pieza del fondo. Sale Hevandose las fundas. Pausa.
361ALEJANDRO SHLVEKING
Vuelve con dos cojines que pone sobre el sofi. Por ta izquierd
entra Lina con una caja de lata en las manos, Lina tiene cincuent
aiios. Igual que Llalla no usa nada de maquillaje y esta vestida de
Into riguroso. Se detiene junto a la puerta del fondo. Escucha.
Luatia~ Esti tranquil
Liva.~ Ojala que siga asi.
Liatta.-Me dan nervios. Parece que supiera.
Lina.~ jEstis sofiando
Liatiam @Td crees que no se ha dado cuenta de nada2... Av
pienso que somos dem
Lina. 2Estrictas? Somos demasiado buenas, ese ha sido nuesti
pecado. (Por la cortina de la izquierda entra Adela, muy tens
Tiene casi cuarenta aiios, pero aparenta mucho menos y es mil
bonita, leva un traje decididamente audaz, claro, de verant
muy escorado. Su belleza esta levemente afeada por una expr
sidn antiptica. Lina y Llalla la miran, asombradas.)
L1atia~ ;Te has quitado el luto!
Lina.~ Ese traje es indecente
Abeta (Cobibida.) Por hoy dia..
Lina.~ Pero es una frivolidad, de todas maneras,
Apeta.— Como es una ocasién especial...
Lina.~ No tienes para qué explicarnos nada, Se supone que de
hoy en adelante puedes hacer lo que se te ocurra,
Aprta Tienes que reconocer que era un poco exagerado que h
tres estuviéramos de luto por una persona que, al fin y al cal
ni siquiera era pariente nuestro.
Lina Dos personas, en todo caso.
Abeta Perdona, es que lo de Jorge fue hace tantos aiios que
veces me olvido.
Liva.~ Lo iinico que te preocupa es tu vida y nada mas. Pero hay
muchas otras cosas en el mundo, por sino te has enterado.
Aptta $i, perdé Es lo mas natural, ¢no? iY4
las viera en mi lugar!
Lina. Nos has visto.
ido estrictas.
ame, estoy nerviosa,
La MANTIS RELIGIOSA.
Liata No discutan, que nos vamos a atrasar, Todavia no nos he-
mos maquillado, Lina. (Lina saca su maquillaje de la caja de lata.)
Anrta ¢Quieren que las maquille?
Lina. (Saca sma pasta oscura de la caja y un espejo de mano.) Yo
me voy a maquillar sola, Para algo segui ese curso por corres-
pondencia,
Liaua (Se sienta en un sillén, A Adela.) Hazme la linea de los
ojos, por favor. Me tiembla la mano... Yo no sé por qué ser. Los
netvios. jEs una ocasién tan especia
Aveta (Indica los trajes de novia.) ¢Nan a de
Lina. Por supuesto.2Qué tiene de particular?
Abeta. Nada,
Lina ¢Bntonces? (Adel saca una pasta de la caja de tata, Lina,
sentada en el sofa se pone una sombra intensa en los parpados,
mirdndose en el espejo. Golpes en la puerta del fondo, Aullido.
Las tres mujeres no se mueven ni se miran. Esperan. Silencio.
Adela maquilla a Lalla.)
Liat (Animadamente.) En fin, no deja de ser entretenido q
venga un pretendiente, después de tanto tiempo. Antes de lo de
Jorge lo pastbamos bi
Lina (Interrumpe su maquillaje.) Qué quieres decit? Que yo
tengo la culpa de todo?
Liatta.~ Bueno
Lina (Continiia maquilléndose, sonrisa malévola.) Si es por es0,
tii tienes tanta culpa como yo.
Luatta.~ jPero la idea del luto fue euya!
Lina. Era mi novio, jEra logico que después de una muerte tan tervi-
hile y tan estiipida, tuviéramos respeto... una aetitud digna que de-
jara callada a esa gente chismosa y calumniadora! ¢Qué habrian
dicho si al dia siguiente de su muerte hubiera salido con mi vestido
rojo? {Que lo matamos a propésito! jEso habrian dicho! Por lo de-
mas, s0 fue lo que dijeron cuando pasé lo de Carlos.
Lista (Indignada.) Nadie puede haber sospechado ni por un
segundo que yo maté a Carlos a propésito! jNadie! Esas son
mentiras tuyas.
1 esos trajes ahi?
{no es cierto?
363ALEJANDRO SIEVEKING
AbeLa.— No te muevas tanto,
Lina Todos lo decfan, especialmente por Carlo n, lo de J
ge... bueno, era la primera vez que ocurria, Un accidenten.
en defensa propia...Y cuando salimos las tres de luto nadie di
nada. Respetaron nuestro dolor, jUfl, {pero el entierro de
los fue muy distinto! El cuehicheo...c! rumor de esa gentul
peladora, (Sonrie.) Oi muchas frases sueltas.
ALLA. jMentiras! ;Puras mentiras!
Abeta. jNo te muevas tanto!
Luna.- «No puede ser una eas
«Estin locas, deberi
id»... «Lo hicieron a propésiton
nencerrarlas», Eso decian, Por lo menos
dimos el gusto de encerrarnos voluntariamente. Por culpa de
par de estipidos hemos tenido que encerrarnos aqui para sie
pre. ;Porque fue culpa de ellos y nada mas que de ellos Si n
hubieran hecho caso no habria pasado nada, Pero Jorge, pobrecit
era un poco curioso y no pudo resistir la tentacién, (Aullido. G
pes en la puerta del fondo. Lina se levanta y da un paso hacia
puerta, pateando en el suelo.) {Cllate, monstruo asqueroso! fA
ina! jRepugnante! ;Cillate! (Quejidos detris de la puerta, soll
20s.) Hay miles y millones de familias en el mundo y nos tenia q
tocar justa tener que soportar a «eso»... Env fi
pecado cometieron nuestros padres y les cayé eso d
cielo, como castigo, bueno, pase, lo acepto. Pero, epor qué te
‘mos que soportarlo nosotras? gPor qué? Yo era joven cuando
noci a Jorge. (Llalla carraspea.) {Era una nifia, casi! Estaba Tle
de ilusiones, el mundo tenia millones de lugares adonde yo quer
iy gente que queria conocer, caminos y aeropuertos, barcos, t
nes. Desde mi ventana el mundo parecia ir bailando y cantand
itan répido!, y doy un paso afuera y ahi estaba Jorge.
ALLA Estaba Carlos.
Liva.~ Estaba Jorge. ba. {Tan buen mozo!
LIALLA= Menos que Carlos.
Lina. {Mas que ! {Mucho mas!
ApeLa.= Juan si que es buen mozo. |
Lina Eso habra que verlo... Por lo menos ta has podido salir y
nente a nosotra
que si alg
alos
364,
conocer cosas nuevas. Todas esas cosas que dicen que pasan
tan distintas. ;Ah!, ;pero un dia me voy a cansar de este
ro y voy a sali, pase lo que pase, digan lo que digan!
Abtta.= Cuando yo me case. :
Lina. (Com un respingo ir6nico, a Llalla,) Mmmm! Ella eree que
la vamos a acompafiar a la iglesia.
jaro. Son mi familia, Tienen que ir.
Linas (Sonriendo,) Todas? ¢Las tres?
AbELA No... claro que no. Ustedes dos.
Lina Sabes perfectamente que es imposible. (Gesto hacia el fon
do.) No la podemos dejar sola.
AbELA= Mi paps puede cuidarla, mientras tanto.
Lina g¥ quign cuida a mi papa? Ademas no estoy para amargar-
me yendo a la iglesia para ver como se casa otra.
Luaita.- Por Dios, Lina, no seas envidiosal
Lina. gPor qué no? Es lo natural. Es injusto que ella se ease antes
que nosotras.. Si es que Se.casa,
Lisa Tienes que tener cuidado, Adviértele a tu novio.
Aprta Si, le voy a decit.
Liaita.= No lo dejes solo ni un minuto, ni un segundo,
AbrLa— No,
Lina. Si no te va a pasar lo mismo que a nosotras. Di un paso
afuera, creyendo que todo iba a ser bailes y canciones y_jpaft
me encuentro a boca de jarro con un ataiid. Pobre Jorge, si no
2arlos no hubiera sido tan intru-
hubiera sido tan curioso,iy si
so!, no estariamos aqui, ahora, Estariamos muy lejos, en otras
ciudades. (Termina de maquillarse los ojos.)
Latta. No te has pintado la boca. F
Lina. ¢Qué me quieres decir? ¢Que he hablado mucho?
Abeta. Juan debe estar por llegar. x
L1atia~ Si viene a pedir tu. mano, seguramente vendré con los padres.
Appts. No tiene padres. Es solo.
L1auia. Mejor... quiero decir, si realmente te qui
que venga solo 0 acompafiado?... Le habras adelantado algo
fe, equé importa
sobre «ella», 20?
365ALEJANDRO SIEVEKING
Abeta No me atrevi
Lina. Malo, malo.
Abeta Aqui va a ser mas ficil, si ustedes me ayudan. (Timbre
la puerta. Todas se ponen de pie.) Nbi esta. (Camina hacia
cortina de la derecha, Se vuelve hacia sus hermanas con wn li
10 pagino,) Tratenlo bien, por favor, (Sale.)
Lina @Cémo estoy?
Liatta$
mo siempre. Parece que los aitos no hubieran pasa
sobre ti
Lina. No han pasado sobre mi. Han pasado por mi lado. (Por
derecha, entra Adela, sonriente y nerviosa. Hace pasar a Jud
Juan tiene treinta anos. Es muy buen mozo y estd correctam
te vestido: blazer azul y pantalones grises. Entrar a esta casa
para él, como incorporarse a una leyenda, Estdé nervioso.)
Abeta Juan, Llalla, (Juan y Llalla se dan la mano.)
Ltatia— (Rutilante.) Mucho gusto,
Juan Igualmente.
Abeta. Juan, Lina, (Juan y Lina se dan la mano.)
Arta (Con una coqueteria mity turbia.) Mucho gusto.
Juan. Igualmente.
Lina Tome asiento. (Juan se sienta, Lina va a buscar una bande
con copas de vino, Llalla toma ta bandeja con queso.) |
Liatia.~ ¢Se sirve un poco de queso? (Juan saca wn pedazo de queso,
Joan. Gracias. (Lina le ofrece un vaso de vino.)
Lina Un poquito de vino? (Juan recibe la copa.)
Juan. Gracias, (Llalla abre una cajita de madera y le ofrece cigé
rrillos.)
Liatta.~ ¢Fuma? (Juan saca un cigarrillo con cierta dificultad.)
Juan. Gracias. (Llalla prende un fosforo y se acerca a Juan. Juan,
‘maneado, se lleva el pedazo de queso a la boca, creyendo que e
el cigarrillo. Llalla le acerca el fosforo. En vista de que no prem
de Llalla rie y Juan deja el trozo de queso en el cenicero. Masti-
ca un pedazo del cigarrillo. Tose y se levanta, derramando eb
vino sobre la alfombra. Llalla, répidamente, seca el vino con un
paituelo con encaje.)
366
La mantis RELIGION
Liatia jAlegrfa, alegri
Juan. Perdén, ;qué tonto soy!
Lina No es nada. (Le Hena la copa de vino.)
Juan.- Gracias... Lo siento tanto.
Lina.— No tiene importancia. (Jian se sienta.) |
Liva.- Asiento. (Juan se levanta, Se vuelve a sentar. Todos se sien-
tan) i
Liatta Salud. (Todos beben.) Adelita no ha querido contarnos
nada sobre usted :
Aveta. Juan es campedn de natacién. (Leve pausa.)
Liauta Pero, gtrabaja o algo por el estilo?
Si, soy.» ch... Trabajo en el Banco.
Eso si que es interesante. Es cajero?
Si, Justament ,
‘Asi es que millones millones pasan por sus manos todos
(Juan asiente.)
Lina.— {Que bonito trabajo! A
er e me gusta, es nadar.
Juan. Si, pero...lo que verdaderamente gusta,
Latta. Entonees, ya conocer la playa del Apostadero Naval,
zno es cierto
Juan.~ Si, aprendi a nadar abi.
Lina. ¢Aqui en Taleahuano?
Juan. Claro. Viviamos en la calle Col6n, casi al frente del cine
«smeralda»..y cuando era chico venia al huerto de ustedes a
robar peras. (Rie.) Y siempre miraba la casa, tan grande, tan
sola, como las casas de las peliculas de terror. (Rie.) iY me daba
miedo! (Silencio. Las hermanas estin rigidas, evitando mirarse
entre si y mirarlo, Juan se siente incdmodo.) Ahora, claro, ya no
me da miedo, (Pausa.)
Lina. O sea que usted es de aqui
Juans ;
peta. Yo eref que eras de Santiago, del Norte. *
Lina. (Frenética,) jEs un espia! jEs un detective! {Vino a investi-
gar! (A Adela.) jgCémo puedes ser tan estipida?!
Apri. Yo le pregunté y él me dijo que era de Santiago.
367ALEJANDRO SIEVEKING.
Lina. :Ves?
Juan.- (A Adela.) Yo te dije que habia estudiado en Santiago, so
mente.
Aptta jNo es verdad!
Joan. jSif jAcuérdate! ...No entiendo, zqué tiene de particular qi
yo sea de aqui?
Lia Que sabe lo de Jorge y lo de Carlos, jlo sabet
Juan.- Si
Lina Ves? ¢Ves? jVino a investigar!
Juan. jNo!
Liatia= Bueno,zy qué importa? Yo no tengo nada que ocultar
Lina (Leve patisa.) Si... es cierto. Yo tampoco. Fue un accidente
Entr6 de noche, usted sabe. Era mi novio y seguramente pens6
podiamos... antes de casarnos. Senti un ruido aqui abajo y traje
pistola, Pregunté: ¢Quién esta ahi? Se lanz6 sobre mien la oscuri
Sus manos ardian, Yo me asusté y disparé. starlo.. Era
Fue un accidente, Cosas asf pasan todos los d
ALLA A cada rato, Para que vea usted, a mi me pasé Io mist
exactamente igual. Con la diferencia que no se lanzé sobre
Quiso hacerme una broma, pobrecito. Se escondié detras de ui
cortina. Pero era muy, muy grande, era evidente que estaba aby
Disparé una sola vez. Soy inocente. Mi tio... quiero decir, el s
para ai
ui
ior Juez, también dijo que yo era inocente.
Lina. Yo no tenia ninguna razén para matar a Jorge,
Liatia.— Yo tampoco. Quiero decir...a Carlos.
Lina= Me adoraba, estaba loco por mi. No pudo esperar, eso €
todo. Murié de impaciencia.
Ltatta= Carlos era tan bueno. ¢Quién iba a pensar que iba a ha
eso? Venir en la noche, como un ladrén. Seftor detective, le ju
que yo no le pedi que viniera a esas horas, lo juro,
Juan. jPero si yo no soy detective!
Lina.
Entonces, por qué anda con mi hermana?
Porque la quiero.
‘on muy convineente.
gCémo quiere que le crea
2 No hay ningtin hombre del pueblo que se atreva a acereat
368
Lastanris RELIGIOSA
se a nosotras. Todos conocen la historia y nos tienen miedo,
jSon tan tontos! z
Juan Yo conocia la historia, también, pero por qué iba a tener
miedo? Fue un accidente, gno? (Lina y Llalla se miran por wn
breve instante.) 3
Liattae $i, si, Un accidente. Im usted,ge6mo, por qué ra-
z6n iba a querer matar a mi novio? El tinico hombre que me
importaba en ef mundo. Mi tnica oportunidad de... (pausa) de
vivir. Yo... (Se mira las manos.) Yo soy virgen.
Liatta.- jEs un poco ridiculo y vergonzoso ser virgen a los. (mira
4a Lina) treinta aiios, No es lo corriente en estos tiempos.
jLlalla! Lo nico que te falta ahora, es desvestirte.
Soy un ser humano! ;Soy normal! gQué tiene de malo que
Lis
Liat
diga la verdad?
Lina. Ya no tienes ningiin pudor.
L1atta.— Para lo que me ha servido el pudor! ;Te lo regalo!
‘0 conocer a alguien... Yo
(Lloriquea.) Yo quiero casarme... qui
no tengo la culpa y estoy pagando por... por
Lina. (A Juan.) No le haga caso. Esta un poco nerviosa, (A Llalla)
iEstas histérica! (Llalla se levarita y le toma la mano a Juan.)
Liatta.= You. quiero... que... me entienda,
Juan.~ Yo la entiendo.
Liata.— gDe veras?
Joan. Si.
Liata. ¢Profundamente?
Aneta. Llalla, Juan es mi novio. No pretenders que te entienda
tan profundamente, ¢no?
Luatia Era una manera de decir.
Aneta. Te conozco muy bien, Demasiado bien
Lina. Sin embargo, y espero que me perdone la desconfianza, no
Ja todavia, Seria facil para una persona, su-
una palabra comprometedo-
a que digamos.
estoy muy tranquil
pongamos, un detective, sacarni
12 0, por tiltimo, interpretar, mal cualquier cos
Nada mas cortiente que una mala interpretacion.
369ALEJANDRO SIEVEKING
~ Si, yo comprendo...
— Aq
Juan. Si, comprendo perfectamente.
LALLA Perdone si nos hemos equivocado, pero hemos vivido mu
aisladas desde que ocurrié lo de Carlos.
Lia Lo de Jorge.
Liatia~No, lo de Carlos, Muy aisladas. Hemos perdido la costumbre
tratar con la gente. Solamente Adela trata con las clientes en el tal
del centro. Nosotras no vemos a nadie, Trabajamos aqui. Si ésta fue
tuna gran ciudad, usted comprenders que no seria lo mismo. ;Pel
aquit {Todos nos conocen! ;No nos dejan movernos! {Nos espa
Juan. 2¥ por qué no se van a Concepcién?
Lita Lo hemos pensado, pero..
nposible. Por ella. (Indica la puerta del fondo.)
Por quién? (Aullido.) Qué fue eso?
Apeta.~ Nada, No te preocupes. Es mi hermana menor.
Liat a (Sonrisa dulce.) Es un poquito enferma. (Aullido.)
Juan. No sabia que tenfas otra hermana
Lina.~ (Sonrisa venenosa.) No es tan popular como nosotras,
Abeta. Es enferma de nacimiento. No te preocupes
sa.) Grita un poco, pero eso no significa nada,
Juan. Ah... y por eso no pueden...
Aneta. Si, por ella,
Juan.~ Pero, con un par de enfermeras...se la puede trasladar,
Lina J
truosa. No. Es mejor seguir aqui. No es tan terri
acostumbrada.
Juan.~ Por favor,
nada. Un dia via Adela en la plaza y pregunté: 2Quign
contaron lo mismo que ustedes me ha
Lina. Lo mismo? ¢Esta seguro?
Juaw.~ Bueno... no exactament
L1atia. Por favor, cuéntenos, gqué dicen de nosotras?
Juan. Alguna gente piensa que los mataron porque ellos
sé como decirlo.
han venido cientos de periodistas, han tratado...
Es demasiado mons
is permitiria que alguien la viera,
Es :. Yo ya estoy
créanme. Yo no he venido a espiar ni a averigual
2Y
contado ahor:
ch...No
370 \
Qué dicen’
Diga, diga!
s lo que dicen...Yo no quiero herirla:
No, si no nos va a herir, ;Por favor!
nquistar a una... ustedes
intenta-
Liana,
Juan
Lia,
Juan.~ Bueno, dicen que... después de e
me entienden... ms bien dicho... eh... conseguir a una
ron conseguir a las dems. Por eso dicen que (a Llalla) usted,
por defenderse, maté al novio de su hermana y que (a Lina)
usted maté al novio de su hermana, también, por lo mismo.
LLALLA= jQué complicado! No lo entiendo muy bien.
Lina g¥ qué mis?
Joan. Nada mas,
Abra ¥ de mi, ano dicen nada?
Juan. No, nada. (Pausa. Adela mira a sus bermanas con superiori-
dad.)
Appia. Estabas contando que un dia
Juan. Si, en la plaza, Estabas sentad
nifios que jugaban,
Aneta Si.
Juan. Los tilos de plaza estaban amarillos.
te, te cayé una hoja en la cabeza y no te diste cuenta.
Abeta gNo?
Juan=(A Lina y Llalla.)
Apria. (Irvitada,) ¢Pena?
Juan.~ Si, estabas sola
‘Aptia (Molesta.) Me tuviste compasién.
Juan.- (Desconcertado) ¢Qué pasa?
‘AbELA= Que me has mentido. Siempre dijiste que habi
a primera vista y ahora resulta que era compasién.
Juax.= Era... pena, compasion y amor, todo junto.
Apsta.~ No es lo mismo.
Liaua.- (Alegre.) {Qué raro me parece! Da la impresién de que
ustedes nunea han hablado verdaderamente
Atta. (Agresiva.) {Hablamos de otras cosas! De viajes. Viajes
que vamos a hacer cuando nos easemos. De los lugares que nos
we viste.
en un baneo y mirabas a los
Era otofio y, de repen-
‘ecia tan triste, jtan triste! Me dio pena.
sido amor
gustaria conocer,ALEJANDRO SIEVEKING
Lina (Mirando a Llalla con una ligera sonrisa.) O sea que. No
conocen mucho, toda’
ADELA
Hawai no es igual a una persona que quiere ir a, no sé, {Lom
dres! No es igual.
Juan.~ Y a mi me gusta
= Claro que nos conocemos! Una persona que quiere ir
conocer Jamaica.
L1ALLA= @De veras? A mi me encantan los viajes, también.
porque no he viajado nunca. Pero siempre suefio con lugar
lejanos. Justamente anoche soaé que estaba en el Himalaya, Te
era tan bonito, con flores y palmeras.
Lina En el Himalaya no hay flores ni palmeras, Llalla,
Ltatta. ¢Cémo lo sabes? Nunea has estado
Ti tampoco.
LiatiA~ eY para qué tengo el sentido comin?
Lina Eso es lo que yo me pregunto todos los d
L1atia~ Si quieres dejarme en ridiculo no lo vas a conseguir ta
facilmente, (La mira y se rie.) Mmm! ;Supieras lo que deci
Carlos de ti! |
Lina. 2
Set
A ver, pues, equé dec
Liatta.m Que eras una necréfora. (Lina mira a Llalla intensamer
te, luego se levanta, va hasta el mueble. Saca wn diccionario
busca.)
Lina-
M... N... Nar. Necesitado.
iNecréforo! Nekros, muerte, y phoros, que lleva. Género di
coleépteros clavicornios de Europa que depositan sus huevos
los cadaveres... los coleépteros son insectos... (Cierra eb
diccionarino con rabia.) ¢Cémo es posible que le hayas aceptas
do una cosa asi, sabiendo lo de... (Hace un gesto hacia la puerta
del fondo. Se controla. Sonrie.) Bueno, gqué otra cosa se podia
esperar de ese empleaducho insignificante?
Luatta~ glnsignificante? ¢Carlos? (A Juan.) Pesaba noventa y cine
co kilos de puro miisculo, Era significante mas bien. (Aullido,)
Parece que tiene hambre.
Lina ¢Cémo? No les hado de comer todavi
L1atta Eh... con los nervios..
372, \
Lina No vas a cambiar nunca, Razén tenia Jorge cuando deci
{que eras tan torpe. (Llalla se levanta, indignada, le quita el dic-
cionario a Lina, lo abre. Mira a Juan. Sonrie. Cierra el dicciona-
rio y lo deja sobre la mesa.)
aie con pense voy a darle de comer a... mi hermana. (Lla-
lla sale por la cortina de la izquierda, Aullido.)
Juan Tiene mal genio su hermana,
Lina. Usted encuentra? A mi me parece mas bien rorpe. Torpe
pero tratable.
Juan. No, yo digo su otra hermana, la que grita.
Lina. Ah, ella... Si... es decir. No sé... Voy a servir la com
(Mira su reloj.) Ay, son las ocho, recién. Es demasiado temps
how Como esta tan oscuro, cref... Voy a traer mas vino. Con
permiso. (Lina sale levndose la bandeja y las copas. Juan se
vuelve hacia Adela.)
Joan.- Hola.
Aprta.- Hola.
Juan eQué te pasa?
Apri a. Nada, zpor qué?
= Estas tan callada,
Casino me han dejado hablar, 2n0?
Juan. ZEstas nerviosa? i
‘Apri No, gpor qué? Todo est bien, ano? (Aullido.) No hay iv
‘gin problema. Nos vamos a casar y nos vamos a ir lejos. (A
Madagascar, Constantinopla y Nagasaki! No vamos a volver
nunca, nunca mas. (Aullido,) Estaremos tranquilos para siem-
pre. Amén.
gPor qué grita?
= eQuién?
Tu hermana.
~ (Se encoge de hombros.) Tiene hambre.
Juan. Pero... esos alaridos... -
‘Aprta.- Ah, eso. Si, se me habia olvidado contartelo.
Juan. ZEsta loca?
‘Aptia~ No, nacié un poquito deforme, Nada para preocuparse.
8.05 C5.
73ALEJANDRO SHEVEKING
Jus 's mongolica?
Aprta.— No, de ninguna manera. Nada para preocuparse, Es
dificil de explicar... No mente un ser humandwe
iPero no vale la pena hablar de ellal (Lo abraza.) zAdénd
gustarfa ir primero?
Juan.- gAdénde me gustaria? A Jamaica.
Abeta Hay mucho sol alli, verdad?
Juat c
AbtLA.~ He visto fotos. Todo el mundo se ve tostado por el sol,
los dientes muy blancos. El cielo sin una nube. Un negro to
do el bongs. Y, al fondo, gente que se rie y es feliz. Va a
como salir de la miseria. Como vivir en una poblacién miseral
y saltar, de repente, a un hotel en la Costa Azul.
Juan. (Distraida,) gNacié asi?
Abeta Ah? gQuién? (Aullido,)
Juan Ella,
‘ApELA.~ Mi amor, no es problema tuyo. Ni mio, ahora. No pi
AS ao Mena Jama en el sol y las palmeras y la luna
ADELA ¢Qué vas a ganar cc
saber?
Joan. No sé... Nada.
Aprta.~ ¢Entonces?
Juan.~ Es un problema. Existe, zno?
Abeta Bl problema, dices ti? No para mi. A mi no me impor
Ella llegé tarde a la reparticion, como quién dice. Nacié asi y as
se va a morir, Es una casualidad. Ocurre hasta en las mejorg
familias. Una casualidad. No existe. Te vas aca
con ella,
JuaN.~ Me caso contigo y con todo lo que te rodea.
Abram Me rodean las palmeras y la luz dorada del sol y las ola
que susurran. (Aullido. Adela sonrie.) Apenas le den de come
dejara de gritar,
Joan.= ¥ los médicos, zqué dicen?
‘AELA.~ Que no tiene remedio.
Juan gEs deforme?
sar COnMIgO, Mi
Avram No sabia que eras tan curioso. Cref que me querias.
Juan
‘Anria No te oculto nada. Te dije qu
¢Has ofdo hablar de
Juxn.- Me suena, ZNo es un bicho, algo asi?
‘Avria~ Es una especie de... pero es bonita. La cara
por. iNo puedo decirtelo! (Entra Lalla.)
Lita Dice la Lina que dénde dejaste el abridor. Que lo vaya:
buscar, (Leve pausa.) Yo lo acompaiio, mientras tanto, (Pasa
inmensa, Los tres permanecen inméviles.) ;Anda! No te preocu-
pes. (Adela sale lentamente por la izquierda.) Tome asiento. (Se
sientan en el sof.) ¢De qué estaban hablando? Ah, me imagino.
Cosas de enamorados.
~ Estabamos hablando de su hermana. ¢Cémo se llama, a pro-
Te quiero, pero no debes ocultarme nada.
no es exactamente un ser
. la Mantis religiosa?
humano
no fuera
poisito?
Liatta— Yo? Adelaida.
Juan= No, su hermana,
Liaua Adelina,
Juan. ¥ la otra?
Liatta Ah, la otra, (Nerviosa) Teresa
Juan. La Adela no me quiso hablar de ella.
Liatia. Es natural. Cada familia tiene sus lac
mundo entero tiene sus lacras y es natural e:
comprendera que si viene un turista europeo
hinguna manera le van a estar mostrando las poblaciones mar-
inales. Le mostraran el Apostadero, el Hudscar, los edificios
bonitos ~dicen que ahora hay dos 0 tres que son bastante
pasables-, en fin, la playa, por tiltimo, Pero lo feo se esconde, Es
Cada cual quiere mostrar lo mejor que tiene. A propé-
le decimos Teresa.
s, cada pais, el
onderlas. Usted
a Taleahuano, de
natural.
sito, za usted le gustan los dulces?
Juan. $i, mucho!
Luatta.- Son mi especialidad. Sobre todo la torta helada de frutillas
‘al chocolate y el bavarois de frambuesa.jAh, y el dulce de pe-
ras! {Nadie lo hace mejor que yo!... Me gusta cocinar, es una
. (Se acerca mucho y lo ntira a los ojos con
especie de vocat
375ALEJANDRO SLEVEKING
abierta sensualidad.) Usted, gqué prefiere? ¢Medallones de k
gosta a la romana o perdices rellenas con salsa de callampat
Juan.= (Un poco aterrado.) Cualquier cosa... Los medallones?
Liata.~ Usted es muy buen mozo... Muy buen mozo! (Repentis
mente lo abraza y lo besa en ta boca. Se levanta, fingiendo es
muy confundida.) (Perdént... Perdéneme, soy muy sensible a
belleza... (Rie.) jPerdi el controll... Le ruego que me disculpe
yOu. (Se pone seria y sale répidamente por la tequierda, Juan
‘ira salir, sorprendido. Detrés de la puerta se escucha un Ua
suave, apenas audible. Juan vaga por la pieza. Se mira en
espejo, se limpia el rouge de la boca, Rasguitan la puerta
fondo. Juan trata de mirar por el ojo de la cerradura. No h
cerradura, Va hacia la mesa. Ve el diccionario, Lo toma y bi
ca.)
Juan Hij
manso..
Lab... Mad... Man,
nda de
nana... mancha
mano,
bbrigo de forma... eh... Mantis rel
giosa: Insecto méntico; llamada también «Predicador», «Dén
esta Dios», «Santa... Santa Teresa», «Mamboreté», «Mula
diablo»... Es notable por su mimetismo, Se mantiene inmévil
is presas, con su primer par de patas prensoras t
cogidas como en actitud de ruego. Es muy atil pues devora
cantidad de insectos. Algunas sobrepasan los diez centimett
de longitud. (Deja ef diccionario sobre la mesa y se acerca lem
tamente a la puerta del fondo. Se oye un rumon, como si rasgit
jiaran la puerta. Juan se detiene y escucha. Se oye una vor sid
ve que murnura algo como un rezo al otro lado. Entra Adela
Abeta. ¢Qué haces ah
Juan Me parecié que se quejaba.
Abita No te preocupes por ella. Esta bien... Si me quieres, si te
importo algo, un poco que sea, entonces nunea mis te acerques
a esa puerta, Nunca mas. Haz como que no existe. Podemos ser
felices y todo depende de ti
Juan. No me gusta que la gente sufra si yo puedo hacer algo por_
ayudar.
Aria. jPero es que no la puedes ayudar
fadie puede! Es una
376
La Mantis RELIGIOSA,
cosa del destino. No hay nada que hacer. Y, por favor, no creas
's que no sacamos nada con preocuparnos de
que es egoismo,
algo que no podemos solucionar
an. Sins No sé
los, en algtin lugar, muy lejos de aqui, sin problemas.
Juay.= Hay un problema
Appia. ¢Cual? . :
Jann Con To que tengo ahorrado no Hegariamos muy lejos, A lo
mejor hasta Buenos Aires. eo
‘Avram (Demudada.) {Hasta Buenos Aires, nada mas?
amos en tren.
Juan.— A lo mejor, y si nos vamos en oe
‘Anta (Angustiada.) Pero yo quiero irme lejos, muy lejos! (P is
ieguierda entra Lalla que trae wna botlla de vino en wa mat
y una gallina viva colgando de la otra mano. Detras de ella
entra Lina con una bandeja con copas y una botella de vino
blanco ya abierta.) a
Liat En sts honor hemos sacado estas hotellas de vino afijo de
la bodega. Cosecha 1916. 0
Lina.- Las tenfamos guardadas para una gran ocasion
Lina. Y ésta es una gran ocasio
Lina ;Dale de comer a Teresa! :
oa ‘A (Tengo dos manos, solamente! (Llalla toma wna copa ie
vino y se la pasa a Juan con una gran sonrisa.) Con permiso. (Se
acerca a la puerta del fondo, escucha. Se vuelve hacia Lina.)
Esta aqui, al lado de la puerta. a :
Lia (A furan, muy gentil) Perdone el lenguaje que voy a usar,
pero lia no entiende de otra manera, Perdone, por favor. (Se
acerca a la puerta.) Quitate de ahi, eretinal jInfeliz! ;Sal de ahi
si quieres comer, estipida! (Le sonrie a Juan, como pidiendo dis-
culpas.)
= (Escucha.) No se va.
Tae estia! jInsensible! jAlimaiia asquerosa! jSu-
(Sirve vino.)
.gno es cierti
Jegenerada
ecto!
" [tneln) Se fue. (Abre la puerta rpidaente y lana laALEJANDRO SHEVERING
gallina al interior de la pieza, cierra la puerta inmediatament
La gallina cacarea frenética, un instante. Silencio repentin
Listo.
Juan. ¢Se la come asi? ¢Cruda?
Lina.~ Nunca hemos podido ensefiarle
Le dan asco.
L1atta. Pobrecita, jes tan primitiva! (Toma tna copa de vino.)
la salud de los novios!
Juan. Gracias. (Le pasa una copa de vino a Adela, que esté ab:
ta.) ¢No vas a brindar?
Abria zAh?... Si, claro, (Beber.)
LiALLA~ {Qué exquisito! (Llena otra copa para Juan y otra para ell
Juan. (Distraido, mira la puerta del fondo.) Delicioso.
Lina. Perdone que no hayamos guardado nuestro trabajo. (Indi
los trajes de novia.) Pero son trajes muy delicados y preferims
comer animales muert
no moverlos para que no se ensucien,
Joan. Son muy bonitos.
Lina Bordados a mano. Es nuestra especialidad. Hasta las novi
de Concepeién vienen a encargarnos sus trajes. Toman bastal
te tiempo.
L1atta.— Claro que los mas bonitos no los ha visto nadie. El de Lit
y el mio, Estuve un afio bordando el mio. Es maravilloso. S
ramente es el mas bonito que se ha visto nunca, [
Lina El mio es mucho mejor, a pesar de ser ms sencillo. (Bebe,)
Liat. Demasiado simple. Ademas ahora se veria pasado de moda,
Lina.~ No digas ridiculeces. Tiene un corte clasico. El tuyo es
masiado vulgar y exagerado. Ademas te ves muy gorda con eb
Ltatta. jEsa es pura envidia!
Fe un traje asi?
(Indica a Juan.) (Que él decida cual es el mejor!
Lina Como quieras.
Juan. 2Yo? Pero. Pero es que... yo no sé nada de esas co:
LLauta.— Espérese, espérese un momento. Se los vamos a mostrar, |
Lina.— Vas a hacer el ridiculo.
Liatta. Ah, si? jJa! (Lina y Llalla salen por la iequierda.)
mo voy a envidi
(Angustiado.) Yo no sé nada de trajes de novia. ;Nadat
sane ete) No importa Siguces la corriente, (Se acerca a é)
AbFLA.
Pero sabes de novias.
Juan. No. Sé de ti y nada mas.
Aptia= Yo soy tu novia.
Juan.- Eres mi amor.
Antta= (Lo abraza.) ¢De veras? gDe veras?
= Mi amor.
£Qué harias por mi?
Juan.- Todo.
ApeLA ¢Qué es todo?
Juan. Cualquier cosa
‘Apri. ¢Matar?
Juan Todo.
‘Aptiam Robar?
Dan. @Por qué me lo preguntas? .
erie _. estaba pensando... (Se aparta de él.) Yo haria
Jquier cosa por ti, cualquier cosa.
Juan. Hay una que no has querido hacer.
Abeta Para que tu amor aumente, para que no dejes de quererme.
Pero si tt quieres To haria esta misma noche. ;Ahorat Cuando
digas. Siempre que tt... gSolamente hasta Buenos Aires?, cestis
seguro?
aN. Si, seguro.
a Hn Pero ti trabajas en el Banco, eres cajero. Si nos vamos
para siempre, podrias... Sé que es dificil para ti, pero... suponte
aque sea lo bastante como para llegar muy lejos y no tener la
necesidad de volver. Suponte. Debe haber una manera de hacer-
lo sin que se den cuenta, Tomariamos un avién a Santiago y de
ahi a México y de México a Jamaica
Juan.~ No te entiendo.
‘Appia. jNo te hagas el tonto! Lo que pasa es que no quieres enten-
derme.
air
479ALEJANDRO SIEVEKING
Juan. Es que me parece tan raro lo que me pides... Es como renul
ciar a todo.
‘Abeta. No. Es como conquistarme a mi.
Juan. Dijiste que me querrias aunque fuera muy pobre.
‘ADELA. Te querria, pero no me casaria contigo, Ni tampoco... eso,
No podria. Necesito estar libre de todo este peso para po
quererte tranquilamente. Robar en un Banco no es como roby
en una casa. Es plata de todos y de nadie, de cualquiera. El Ba
renta millones de pesos.
en cambio, nosotros seriamos felices... $i no eres eapaz de ha
eso por mi, es sefial de que no me quieres nada.
Joan. (Camina hacia el fondo, sin mirarla.) Pero jrobar!
Aneta. jSi, robart jNo es tan espantoso! Todo ef mundo roba, ay
quién le parece raro? (Se suaviza.) Yo sé, tii eres distinto, pero
lo haces, nada cambiaria entre nosotros... es decir, ;todo ser
posible! {Nuestro deber es ser fel nuestra obligacién!
cualquier cosa que hagamos para conseguirlo, estara bien hechay
Por eso (se sienta en el sofé, mostrando las piernas discretamer
te) si ta dices si, yo digo si. Si dices no, yo digo no. Depende de
Jusn.~ Pareces distinta.
‘AbELA.~ Soy distinta. Tit no te imagi
nas de amantes, pero no, soy virgen. Te he esperado, No sé nad:
pero todas las noches sueiio que tti y yo estamos en una cal
inmensa, tan juntos que siento tu piel ardiendo, y tu espalda yt
pecho y tus brazos, empapados de transpiracién, tus pierna
entre las mias... y tu boca y tus manos y somos uno solo,
rodamos y rodamos... (Se besan apasionadamente, Se desliz
hasta el suelo, con suavidad. El se saca la chaqueta, Ella le qui
ta la corbata y le desabrocha la camisa. Se besan en el suelo,
ella se sube la falda, el se baja el cierre del pantalén y se mont
sobre ella. Entra Llalla, vestida con un traje de novia aparatoso
y una toca fantdstica por lo exagerada. Enseguida entra Ling’
con wn traje de novia de raso antiguo, apegado al cuerpo y un
casco de perlas. Se detienen desconcertadas al no ver a nadie,
Juan se saca la camisa.)
co no se va a arruinar site Hevas cin
as, Podria haber tenido d
Aaaah. :
tt (Juan siente el ruido y las mira, Se levanta lo mas ripi-
cdo que puede, subiéndose los pantalones y poniéndose la cami-
‘sa, Adela se levanta sin apuro y se arregla ta ropa y el pelo. Se
sienta tranguilamente.)
Li atta. (Excitada.) {No se moleste por nosotras!
Juan. Perdén... Lo siento... Jo siento mucho...
Lina. Al contratio... Esu. es estimulante ver a dos personas que se
quieren tanto.
L1auta.- (Abogada.) Ah, si, muy... muy estimulante.
‘ApetAc gA qué hora vamos a comer? Tengo hambre.
En un ratito més. El pato esta en el horno.
st en su casa.
Liatta—
Juan. (Poniéndose la corbata torpemente.) ;Pato? jMe gusta mu
cho!
Liatta.~ (Sensual.) Pato con puré de manzanas y ensalada de apio
palta molida.
{Me gusta mucho!
Liatta. ¥ de postre tenemos papayas en almibar, hechas por mi,
con crema. Y vino blanco. 2O prefiere el tinto?
Juan. Mejor el blanco.
Liaita.~ Si, zno es cierto? Le viene més al pato... y a la papaya.
Juane— Por lo que veo va a ser un verdadero banquete.
L1Atia.- Es en su honor. (Aullido.)
Juan. (Sentindose, nervioso.) Por qué grita ahora?
‘Ape. No le hagas caso.
Liatta Es una léstima que no tengamos tocadiscos. Habria sido
bonito ver bailar a los novios. (Gira farareando «En los bosques
de Viena», intentando Incirse.)
Lina. 1Qué gracioso! {Todas estamos vestid
novia!
Apri (A Juan.) Mi traje
centres a la iglesia:
Liatta.- (Tararea la «Marcha nupcial» de Mendelshobn, Aullido.)
‘a acostumbrar. No le hagas aso.
las de novia, menos la
114 guardado, no lo vas a ver hasta que
Abeta. Te ¥:
Juan. gA quién?
381ALEJANDRO SHEVERING
ADELA A ella.
Juan A Teresa.
ADELA Si, a ella :
Juan.~ Adela, Adelina, Adelaida... y Teresa. ;Sabian de esas ¢
hermanas? Una se llamaba Pata, otra se llamaba Peta, ot
Hamaba Pita, otra se Hlamaba Pota y la iiltima se llamaba j
garita! (Las hermanas oran de la risa. Tratan de hablar,
no pueden. Aullido. Pausa.)
Abeta (Angustiada por el repentino silencio.) Yo me sé una
sia.
Liatta~ Si, ella sabe una po
Lina. ¢Te acuerdas? La recitabas con una
Liatta No te hagas de rogar. jReeftala, recitalat
Apri (A Juan.) 2Tt...2 ¢No te im...2
Juan. Recitala, por favor,
Abtt.a.~ (Carrasped.) «El Abismo Devorador». (Carraspea. Mir
Juan. Juan le sonric. Ella, muy sensual:)
No te acerques al abismo,
dad conmovg
amigo mio, al abismo,
ajo hay una sefiora
Si. Corona. (Se restriega contra el sof
La sefiora de abajo es sola.
Pobre sefiora.
No tiene madre ni padre
nii padre que le ladre.
‘std sentada en lo oscuro
y su trasero es muy duro.
Lina Puro, mi amor.
Arta Si, puro... Pobre sefiora, |
de lejos nadie la ve,
ni él, ni yo, ni usted
De cerca nadie la aprecia,
‘iora sola,
yh
pobre vieja, tiesa, vieja.
Esta sola la sefiora.
Si te caes al abismo,
mo,
te comera ahi m
la sefiora,
sola, (Aullido, Lina, Llalla y Juan aplauden.)
Liatia.— ¢Le gusto? ,
Jurni~ Si, es muy... chan
- a= Vamos a comer. (Todos se ponen de pie.) ‘
(Toma del brazo a Juan para salir. ,Es un poema tan tris-
Liana.
te!
Lina. Tiene mucho contenido.
[Anria— Tengo hambre. {Tengo un hambre terriblet
Lina. Nifia, por Dios, icone ,
Aveta. Si. (Sale Lina, luego Adela, Pausa
7 ues pacar la puerta del fondo, mientras la luz se apaga
Se escucha como si al-
Jentamente.)
Apagon.
385Segunda parte
EI mismo decorado. Dos horas més tarde. Juan y Adela es
sentados, con las luces apagadas. Entra luz del exterior por
ventana o por claraboyas del techo.
Abtta.= 2Vas a hacer eso que te dije?
Juan~ ¢Robar en ef Banco?... No es facil.
AbrLa. Pero es posible.
Juan. Todo es posible.
‘Atta.~ Entonces, lo has pensado?
Juan. Mas 0 menos.
Abeta Esta es la vida que nos espera si nos quedamos aqui. Vivi
asi, con esta gente, en un lugar como éste. No vale la pen:
Mejor abandonar la pelea o morirse. Yo digo: si yo nact, si est
en el mundo, es para sacarle el jugo a la vida. Para reirme y
feliz, aunque solamente sea una hora, un momento perfecto q
me ayude a soportar todo lo que venga despues. Ser vieja y ps
bre y triste y sola. Cualquier cosa. Pero haber tenido algo.
Juan. Pero si nos descubren antes de que salgamos de Chile, e
posible, si nos descubren es la cércel y la miseria para toda k
vida
Abtta.— jTenemos que artiesgarnos!
cesitas, gverdad?
Juan- Si.
Atta. Yo te necesito a ti, (Se sienta en las rodillas de Juan.)
Juan. No ereas que, a veces, no he pensado hacer una cosa pareci
da. Yo no soy un hombre para un trabajo como ef que teng
tampoco, entregando billetes todo el dia, como una maquina,
sentado en esa pecera de vidrio. Pero lo hac
Abeta No es bastante.
JUAN. Si... No me gustan los billetes...Hay gente que tiene muc!
plata, mucha, mucha, Hay otros que ni siquiera tienen cuent
en el Banco, éte imaginas?
Aptia—Pobres diablos,
Hay que tratart... Ti me ni
contento, por
3
Jax. Yo soy un hombre como para naufragar junto a una isla del
Pacifico, Hacerlo todo yo, con mis manos. Y nadar en el agua
azul, hasta el fondo. ¢Has buceado, alguna ver?
Apria.= No, ga qué hora? Yo trabajo.
Juan.- Ta bajas por el agua transparente y parece que volaras.
Podrias quedarte abajo para siempre. Ni siquiera dan deseos de
salir a respirar, Abajo, abajo, entre las burbujas blancas. Es os-
curo, es suave. Todo se mueve y, sin embargo, lo que sientes es
una quietud perfecta. Eres como una pluma, sin peso, sin cargas
ys de repente, al mirar hacia arriba, jves el solt,itriple por el
cristal del agual... Y vuelves hacia arriba, para aleanzarlo, con
alas. ;Ah, mi amor, como subes! {Como un pajaro-flecha!, jeomo
‘que vuelve a su sitio! Vuelas, con alas. Todo se desliza
y te acompaiia. Estés solo, subiendo. Eres tinico, como un re-
limpago. (Aullido, como el de los gatos cuando hacen el amor.
Juan asiente.) Si, ¢s maravilloso. (Adela mira a Juan. Mira ba-
cia la puerta del fondo. Trata de protegerse, tratando de cobi-
jarse con la chaqueta de Juan.) Pero, entonces, de repente, estis
afuera, centiendes? De repente. Se acaba todo. Eres un imbécil
con la cabeza mojada... Yo estoy ahi, en mi elemento, y de re~
pente tengo que sacar la cabeza al Banco y entregar billetes. No
me gustan, Los billetes. Me gustan las islas tropicales.
AbrLa. ...con palmeras y un aire tan suave y tan espeso que pue-
des tocar y echartelo al cuello como una bufanda.
Juan. Yo no soy para un trabajo como éste.
‘Aveta. El mundo esta mal organizado. Bueno, supongamos que
dentro de doscientos afios va a ser un lugar maravilloso para
vivir, Pero ahora, jahora!, qué hacemos nosotros?
Juan.- (Piensa.) Esperar.
‘ADELA. No es justo. Yo no quiero. No tengo tiempo. La gente que
tiene mucha plata es feliz, Tienen autos, joyas y pieles. Pasan de
tun pais a otro como quién va de la cocina al comedor. Y todo
porque son ricos.jSon ricos y no tienen problemas!...Si me juras
‘que lo vas a hacer, yo te juro que esta misma noche... te esperaré
aqui... sin traje de novia... sin nada.., si me juras.
385ALEJANDRO SUEVERING
Te juro!
2Quée?
{Que voy a robarme cincuenta millones!
Aprta. (Feliz.) ¢Cincuenta?
Juan. (Alegre.) ;Cien! ;Doscientos! Todo lo que pueda. (Se abr
zan.)
Abeta. {Mi amor, mi amor! :Ves? jEs tan facil! Y yo te creo,
creo, te creo, te creo. No puede ser de otra manera... Ahot
oyeme bien. Te vas a ir dentro de un rato, supongamos, medi
hora més. Te vas y vuelves una hora después. Van a estar d
midas. {
Joan. (Indica la puerta del fondo.) g¥ ella? j
AbrLA.~ Ella duerme, también, No vas a golpear la puerta. Nadi
Yo te abriré, no te preocupes. (Rie. Lo besa.)
Juan.~ Adela, yo... yo no soy como ti.
Como?
Juan. No soy... virgen.
Abeta. Menos mal. Seria el colmo, Un caso raro.
Juan.= Me habria gustado que ti fueras la primer:
AbELA.~ Es mejor asi, tontito. Me vas a enseiiar.
toma el diccionario.)
JUAN A veces, en el Banco, me empiezo a imaginar como va a
cuando estemos... (Se da cuenta de que Adela est absorta en
diccionario.) @Qué buscas?
Aneta. (Lee.) Buriatos, pueblo de Siberia, a orillas del lago Bail
iQué lejos! (Rée.) FY parece un nombre griego! (Busca.) Mi
mira, Bulak, barrio de El Cairo, donde se encuentra un mu
de antigiiedades egipcias... Bauin, poblacién de las Filipina
Baudn, Bauin... Budapest, capital de Hungria, a orillas del Dav
nubio, gte das cuenta? ;EI Danubiot, formada por la unién
dos ciudades: Buda y Pest. Puente de cuatrocientos metros sobi
el Danubio. (Rie.) ;Parece que ya estuviéramos alli! Eskichehit
ciudad de Turquia, Uskudar, Baba Burtin, (Rie,) ;Baba Burtin!
Se pone de pie
386
La MANTIS RELIGIOSA
Zonguldak, Daday, Kastamonu, Karkinit, Popasnaya, Giresiin,
(Se pone el diccionario sobre la cabeza, se acerca mucho a Juan,
haciendo una suave parodia de la danza del vientre que ha visto
en el cine.) Popasnaya, Popasnaya,
Girestin.
Popasnaya, Popasnaya,
Girestin, jstin, sain!
Entra Llalla, todavia con el traje de novia, sin la toca, con tna
handejita con dos tazas de café. Detrés de ella, Lina con su traje de
novia trae otra bandeja con dos tazas de cafe. Prenden la luz, Ade-
la se detiene.
Liatta.— jEl eafét
Lina.= (Mirando a Adela.) Nos va a hacer muy bien. Creo que se
nos ha pasado la mano con el vino blanco, (Adela y Lina se
lanzan miradas mortales. Adela tonta una taza de café y se apar-
ta, evando el diccionario.)
Juan El pato estaba exquisito.
Lita Gracias. Yo lo preparé. ;A mi me encanta cocinar! Un dia
de estos tiene que venir a probar mis asados con salsa de
callampas. Antes yo misma recogia las callampas en el bosque
de San Vicente. ¢Ha estado ahi?
Juan. 2Un bosque? No me acuerdo. tba a la playa de San Vicente,
a veces. Me acuerdo de que el mar se llentaba de cardiimenes de
anchoas. Y uno nadaba como en una jalea viva.
Lina. Eso debe de haber sido hace miles de aiios.
Juay.~ Hace mucho tiempo.
Lita. Dicen que ahora botan los residuos minerales al mat. Es
tun pequefio mar muerto, No es como antes.
Juan Ast dicen
Liatia~ Antes todo era mejor. Los bosques eran mas solos y mis
grandes. El mar era mas limpio y las callampas mejores, también,
Juan 2¥ se acuerdan de los pasteles de la antigua pasteleria
«Olimpia»?
Aria (Acercdndose a él.) Pasteles de bizcocho con platano y cre-
ma.
387ALEJANDRO SIEVERING
Juan.= (Rie.)jSit 2¥ la matiné de los sbados? Todavia me acuerdo
tuna pelicula viejisima en que John Wayne peleaba con un pull
Era un buzo y Hegaba hasta un barco hundido. 2O era Ray Milland!
Lina (Rie.) [Ray Milland!
Juax.~ En todo caso, peleaba con un pulpo. Siempre me acuerdo d
eso, de los largos tenticulos del pulpo en la sombra. Y cuand
yo buceaba crefa que en cualquier momento y de cualquier pat
te iban a salir esos brazos blandos.
ADELA {Qué asco!
Liatta— ¢Ha comido pulpos, alguna vez?
Juan.~ No. En la playa siempre habja jibias varadas. Me gustaby
ver como las abrian, vivas todavia, Las cortaban con un cu
Hlo, como si fueran de mantequilla. Y lo mas raro de todo es q
las jibias estaban inmoviles, esperando que las abrieran, Quiet
decir, no peleaban. 20 si? Yano me acuerdo, Me parece que la
mataban a piedrazos primero. No me acuerdo.
Lina.~ jHace tanto tiempo que no vamos a la playa! Yo iba a k
Biarritz con mi novio y me compraba panes de micl.
Liatia. Mi novio me compraba bombones de chocolate rellen
con una pasta de almendras molidas y nata de leche mezclad
con aguardiente. Se deshacian en la boca y mareaban, Una vel
los colores mas fuertes y las cosas mis lejanas. Pero la muj
que los hacia se murié y la receta se perdié para siempre. Jor
ge... No, quiero decir «Carlos», lo sintié tanto. Le gustabat
mucho los dulces. Era un hombre grande y corpulento. Un
gante. jAbria las botellas de cerveza con los dientes y quebra
las nueces con los dedos! {No le tenfa miedo a nada! jA nadat
Lia Eso fue lo malo.
Liatta= (Animada.) Una vez... (Por la izquierda entra un boml
de pelo blanco, con pantalones, camiseta de manga larga y
atillas de levantarse. Tiene mas de setenta aitos. Alarido.
hermanas ven al hombre y se levantan. El hombre, al verlas, 11
Se aprieta el estémago de risa.)
Lina. (Muy tensa.) ¢De qué se rie? (El hombre
pues?
.) gDe qué se
388
AbFLA= De ustedes.
Liatta. @De nosotras? ¢No le da vergitenza?
Cémo se atreve a presentarse en esa facha? ;Viiyase a su
pieza! (El hombre se aboga de la risa.)
Liatta— {Qué vergiienza, papa! No ve que tenemos una visita?
Aparicio. jQué parecen las dos! {Fantasmas! jEso parecen! ji es-
tuviera borracho ereeria que son visiones!
Lina {Si estuviera borracho?
Aranicto.— Desgraciadamente no estoy borracho.
Liaia jVayase a su piez
Avanicto.= (Indica a Juan.) Y ese, zquién es?
Liatta.~ (En voz baja.) Qué le importa a usted?
Ananicio.— Otro que se consiguieron, gah? gPara cual de las tres es
ahora?
Aneta. Es mi novio.
Aranicto A mi no me vengan con cuentos. {Como si no supiera
que todas las noches se traen un tipo distintol A mi qué me
importa! Yo me voy.
Lina. No, ahora no se va. Va a explicarle inmediatamente a este
joven por qué ha dicho eso.
Ansricio (A Juans) 2Quiere saber por qué lo dije? Porque es ver
dad. Se ven tan suavecitas y tan solteronas, gno es cierto? Pero
salen en la noche y traen al primero que encuentran.
Lina. ¢Ha visto a alguno?
Aranicio.~ Los ogo. Los oigo a ellos y a ustedes riéndose, Los oigo
correr por la casa, perseguirse y jadear, Oigo como se arrastran
y se manosean y la ropa que se rompe, los vestidos, las blusas y
las camisas. Oigo las inmundicias que se cuchichean y como
muerden y rasguiian mientras hacen el amor.
Lina. (Sonrie.) ¥ qué mas oye?
Aranicio.— Nada mis.
Lina. gNo oye los aullidos?
Aparicio.~ ¢Qué aullidos?
Lina. Los de Teresa.
Aranicio.~ Ella nunca grita, Ella es la tinica buena, la pura.
389ALEJANDRO SIEVEKING
Lina. (Sonrie con malignidad.) Santa Teresa.
Avanicio— Eso es, una santa. Pobrecita. iUna santa! Nadie se it
gina lo que sufre. Pero ella es buena, no se queja. ;Y nunca
tenido nada! Ni bonitos vestidos, ni amigos. Ni un anillo,
Lina Un anillo? 2Y qué iba a hacer ella con un anillo?
Aranicio. (A Juan.) Usted no la conoce. (Juan niega.) Es como.
angel. (Las bermanas se miran entre si Y sonrien con malicie
Es dificil de entender a un angel... es dificil de entender, Usted
la conoce. (Aparicio se acerca mucho a Juan y lo mira a los of
fijamente, toméndolo de las solapas.) No la conoce?
Juan No.
APARICIO
ra
(Sint soltarlo, con simpatia.) Ella... eg... de otra ma
Dios estaba ahi... y si no estaba, no ha estado nunca
ninguna parte. O, a lo mejor... esa noche Dios se fue para sie
pre, (Lo suelta.) La noche en que engendramos a Teresa salim
al balc6n, desnudos, para que el Universo nos viera y supiet
que habiamos alcanzado la perfeccién del amor. Y, entone
algo pas6 en el cielo, las estrellas corrian y chocaban entre
como fuegos artificiales, y la luna palpitaba como un coraz
De repente bajé una luz intensa, como una bola de fuego, pa
zumbando por encima de nuestras cabezas... y todo parecia
der. Nosotros caimos de rodillas, pensando que habia llegado
dia del Juicio Final y pedimos perdén por nuestro orgullo 4
habia precipitado la destruccién del mundo. Pero no pasé na
mais y, al rato, cuando abrimos los ojos, vimos que todo segul
igual. Entonces mi mujer empezé a tiritar y se acosté. Tuvo fi
bre durante varios dias y gritaba, en la noche, diciendo gro
rias increibles y repitiendo que Dios era su amante, que Di
era su amante, que Dios era su amante, Cuando la oyé el cut
que vino a darle Ia extramauncisn, porque se morta, salié ge
tando que esta casa estaba condenada porque habiamos caid
més bajo que el demonio. Entonces... mi mujer se levant6, abri
la ventana y entré todo el viento del puerto, lleno de canciones
de risas y de voces. (Se le Henan los ojos de lagrimas.) ;Y mi
mujer cant6! {Mi mujer canto! (Llora.) Y lo que cantaba era I
390
LALLA (Frid
que cantaba el pueblo, lo que cantaha el viento, la historia de
los hombres muertos y de los que estin por nacer. (Vacila, como
perdido. Se deja caer suavemente en un sillén.)
) Pobre!
Lina.~ (Fria.) Pobrecito.
Aranicio.= Se alejé de mi, se dedicé a vivir para esa cosa que se
formaba dentro de ella. Se refa sola y cantaba, en suetios. (Mira
«a Juan.) Empez6 a mirar a las hormigas... Y yo me quedé solo
Es triste vivir en un puerto triste, pero es peor estar solo en un
puerto triste.
Juan.~ Si. (Las tres hermanas lo miran de reojo.)
‘Avanicio.— (A Juan.) Miraba a las hormigas. Y Teresa crecia sin mo-
verse en su interior, como un cuerpo muerto que se hincha en su
atatid, hasta que lo revienta... {Tanto dolor! {Nadie ha tenido un
dolor como el mio! Después de todo, ese era mi castigo. Estar solo.
LLALLA.= Esthamos nosotras.
Araricio.= Nadie estaba conmigo cuando murié mi mujer. Estaba
solo,
LLALLA= acuérdese. 8
‘Aparicio. No. Estaba mi mujer, Teresa y yo. No habfa nadie més.
Lina zY nosotras? ¢Y la matrona? “
Aranicio.~ (A Juan.) Ellas no me quieren, pero es culpa mia, Las
engendramos sin pasién, deportivamente. (Sonrie.) Y me odian,
porque no son perfectas, como Teresa. (Aullido. Aparicio va ha-
cia la puerta del fondo, Adela se adelanta y se apoya en la puer-
ta, impidiéndole pasar.) Déjame entrar! \
Appia (Con dulzura excesiva.) No se puede, papa.
Aparicio. ¢No se puede?
‘AbeLa Es uta santa. No os de este mundo, No la haga sulin
NA. ¢Como la voy a hacer sufrir yo, si la quiero tanto? (Aullido.)
Estoy aqui, mi amor! (Se escucha un leve rumor en la pieza det
fondo.) 2La oyen?... Ella habla con Dios directamente. Déjame
entrar!
AbtLa.~ Ella no podria resi
vino.
jo. jMirese! Esta sucio y tiene olor a
sorALEIANDRO SHIVERING
Aranicio.~ A ella no le importa. Hace tanto tiempo que no la veo.
no quiero olvidarme de su ara,
Abeta. Lo que no debe olvidar son sus manos.
Aranicio.~ Sus manos en actitud de ruego.
Abeta Vaya a acostarse.
Apanicio~ Tengo que acordarme, para que cuando me vaya...Hay
un barco que sale esta noche. Yo me irfa... (A la puerta.) Dime
que me puedo ir.
Luatta ¢No le da vergiienza, papa? Este es su hogar. jNos dejari
sin importarle lo que nos pudiera pasar!
Aparicio. Ustedes saben cuidarse solas. Y Teresa no me necesita,
iEs una santa! Demasiado buena para este mundo, para est
, si. Yo no valgo nada. No soy digno de verla ni d.
hablarle. (Acaricia la puerta.) Preciosa, preciosa mia. Reza pot
tu padre... por tu pobre... por tu padre,
Apri.a.— (Lo encamina hacia la cortina de la izquierda.) A dormir,
dormii
Aparicio Esta noche sale un barco... No sé adénde va... (Aparict
y Adela salen, Adela vuelve inmediatamente.)
Abtta.— Arterioesclerosis.
LiNa= Arterioesclerosis prematura. A los cincuenta afios empez6,
L1atta jHemos sufrido mucho! Usted ve las cosas que dice
nosotras. Y; lo que es peor, ks dice en tous partes. Esa es ott
de las razones por las cul
ten y nos sefialen con el ded.
Lina. jHa destruido nuestras vidas! Tan simple como eso.
LLALLA= ¢Ha visto que injusticia mas terrible? jNosotras, que he
mos llevado una vida de monjas, ser tratadas peor que la mi
miserable de las prostitutas de este puerto miserable! jNost
tras, que estuvimos rodeadas de amor y belleza desde la mai
tierna infanciat
Lina. (Indica la puerta.) {Hasta que lleg6 ella!
Liatta— Fue una suerte que mi madre muriera al dar a luz, porqu
mi papa, al verla... al ver a Teresa, dejé de ser él, fue otro, Nun
ca llegaba a la casa y cuando llegaba estaba borracho y Hora:
casa...
les no podemos salir sin que nos insul
gor
ba. Empez6 a contar esa historia y otras todavia mas increibles.
Eso que dijo ahora no es nada. Antes nos culpaba de todo. {Has
ta de lo de Teresa! gSe da cuenta? Y por una tonteria, Porque
tuna vez, cuando mi mamé estaba embarazada y andaba vagan-
do por la casa, sin vernos ni ofrnos, como adentro de una cam-
pana de vidrio a la que no podiamos entrar, yo tuve un poco de
celos, un poquitito, jera una nifial, le enterré un alfiler de som-
brero a mi muiieca en... en el vientre. Cosas de nifios. Pero mi
paps no entendis, jse enojé mucho conmigo, como si yo hubiera
sido una experta en magia negra, digame usted! Y apenas soy
una aficionada. jAdemas éramos unas nifias!
Lina. No sabiamos nada del mundo.
Liatia No entendiamos. ¢Qué culpa teniamos nosotras?
Lina.- Afios después aparecié Jorge, Jorge era mi novio. Un intelec~
tual, un cerebro. Un poco curioso, solamente. jE sf que analizaba
bien la situaci6n y se daba cuenta de lo que le pasaba a mi papa!
Sentimiento de culpa por la muerte de mi madre ¢ impulso de
autodestruccién, Un caso tipico. Cuando lo entendi me senti mu-
ccho mejor. Desde entonces no se me escapé ni tn hilo de las ma-
Excepto Jorge, por supuesto, se me escapd completamen-
1a manera inesperada. Yo pensaba
isis de los acon-
NOS.
te. quiero decir, actué de w
{que solo tenfa espiritu cientifico, usted sabe, el an
tecimientos y ta biisqueda de kt verdad, pero, de pronto...
manos ardiant... Pensar que yo... que fui yo!... Sin saber, natural-
mente... No me lo perdonaré nunca. Cémo pudo pasar? (Vacila,
apoydindose en un sill6n.) Me siento mal. (Llalla corre hacia Lina.)
LuAtia.- jLinal jLinita! [Debes tener valor! jLos designios de Dios
son insondable
Lina. Me siento mal. (Llalla ayuda a Lina a sentarse en el soft.)
LLALLA.= jLos nervios! Yo también estoy un poco agitada. {Mi co-
raz6n! ;Como una rana que quisiera salir de un pozo!
Abeta Anda a acostarte.
Lina.~ No... Trdeme un poco de cofiac.
LLALLA. Si, todos necesitamos un poco de cofiac, ahora, (A Adela.)
Acompafiame a la bodega.
393ALEIANDRO SiEVEKING
Abeta. Si, (Llalla sale.) Volvemos enseguida. (Mira a Lina
desconfianza.) No te preocupes. Todo esti bien. (Sale.)
Joan. ¢Le traigo un vaso de agua, mientras tanto?
Lina.~ No, gracias. Signtese...Voy a decirle algo. :Puedo confiar
usted?
= Si, por supuesto.
- No le contara a nadie lo que voy a dec
Juan. No. Yo no acostumbre
Lina Bien, entonces... Pero primero dligame, custed quiere
daderamente a Adela?
» espero.
(Sonrie.) No me mienta, He notado una cierta inseguric
en sus relaciones.
Juan.~ La quiero,
Lina.~ Puede ser una pasién, un deseo, nada mas. Ella es jove
todavia, y bonita. Pero el amor es mas que el deseo carnal, es
integracion total de dos seres, No importa que sea breve, ps
total. ¥ me parece, como espectadora, que lo de ustedes no
de ser una vulgar, y perdone la erudeza del término, calentu
Juan.- Nunca he querido a nadie tanto como a Adela,
Lina Ella es joven, pero vacia. Por lo demés, no es virgen. Un dl
{a vi haciendo el amor con un marinero desconocido entre k
Perales del huerto. Tengo que reconocer que fue una delicad
de su parte no meterlo en Ia casa, como la Llallay que mi
cualquiera en la bodega, aunque era un poco chocante que
dedicaran a esas actividades inmediatamente después dle almus
zo. En fin, no era asunto de mi incumbencia y no dije nada Pe
al verlo... al verlo a usted, senti que su pureza, sti encanto,
ingenuidad, me herfan como un disparo en el pecho. Y yo, au
«jue parezco fria y distante usted sabe, la tragedia se ha apod
rado de mi vida- soy una mujer sensible... muy sensible.
entiende? (Leve pausa.) No me entiende. (Se levanta,) Qui
decir... usted comprendera, lo vi desmudo, casi desnudo. Ese ti
dle cosas me despierta la curiosidad y excita mi imaginacié
Todo esto me ha hecho pensar que una mujer que no es virger
304
La Manis RELIGIOSA,
no ¢s lo mas apropiado para usted. (Se detiene detras del sillon
en que esta sentado Juan y se arregla el pelo, seriamente.) Y yo
si que soy virgen. Puedo demostrarselo... No diga nada, toda-
via, sé que es dificil para un hombre contestar a una proposicién
tan directa. Adela es bonita, una belleza, de esas que ya no hay.
(Cruza hacia el reloj por el primer plano, desplegando habil y
descuidadamente la cola de seis metros de su traje.) Un cuerpo
perfecto, hecho para el amor. Llalla, pobrecita, es tierna, la per-
fecta duefia de casa, préctica y simple como una abuela. Pero
yo... yo soy la razén, la légica, la pre
comtin, Nos gusta el mar, el agua, la profundidad y sus misterios,
las sombras, lo desconocido que se transforma en conocido. Los
mecanismos invisibles. Lo que esta detras de las apariencias.
Juan. ¢Cémo lo sabe? (Lina se apoya en el reloj de pared.)
Lina. Yo sé, Juan... Juan... es un nombre para morderlo como una
manzana... Juan... John... Jean... Johannes... Yo antes. (Sonrie
con voluptuosidad.) Me gustan las palabras. Hombre, varén,
Viril, vertiente, hiimeda, crujiente, lengua, labio, beso, boca,
mano, dedo, boca, mano, manantial, viril, varén, hombre... No
diga nada, piénselo. No tenga miedo, no me voy a lanzar a sus
brazos. Tenemos que legar lentamente el uno al otro, como los
punteros del reloj cuando dan las doce... Asi, lentamente... Con=
migo no es necesatio partir lejos, ni esconder la cabeza debajo
de la almohada... No necesito abrirle la camisa y acariciarle el
pecho... Yo estoy mas alli y mas acd. Yo soy el centro. Mis
palabras son ms acari que mis dedos, pero tengo cuer-
po. Y soy joven, toda
Juan. Soy incapaz. de enga
Lina Pero ella lo ha engaiiado,
Juan. No sé... No creo.
Lina.— ¢No me cree?
JuaN.= Supongamos que sea cierto. Cuando estuvo con ese marine-
ro no me conocia. Luego no hay engaiio.
Lina.= Pero ella no se lo conté, Usted no lo sabia.
Juan.— Nadie confiesa ese tipo de cosas.
in. Tenemos cosas en
dora
fa. Y virgen. (Pausa.)
iar a nadie y a Adela menos, todavi
Se acerca a él.)
395,ALEIANDRO SIEVEKING
Lina.- Entonces. isted no esta enamorado de mi?
Joan. Lo siento... estoy enamorado de Adela.
Luna. ¢Y las miradas intensas que me lanzaba en el comedor?
Juan. Usted estaba en la sombra, no la veia bien,
Lina.~ ZEsté enamorado de Adela... Yo sé que no es verdad, pe
no importa. Usted, ahora cree que es asi y contra eso no hi
nada que hacer. Bueno, me rindo ante la eviden
Juan. (Por decir algo.) :Se siente mejor?
Liva.~ No me he sentido mal en ningin momento, (Aullido.) jCall
te, insectol... Tiene hambre de nuevo, jes insaciable!
Juan. 2¥ no pueden darle un calmante 0 algo por el estilo?
Lina (Desagradable.) Antes de darle de comer llenamos las gall
nas de pildoras para dormix. Y el agua. Si no, no sabemos q
pasaria. (Aullido.) {Mas tarde! Acabas de comer, estipidal (
tra Llalla con una botella de coac. Mas atras entra Adela e
tina bandeja de cuatro copas de contac.)
Liatta= Me llamabas?
Lina No.
Liatta (A Juan.) zLe gusta el cofia
Juan Si, gracias.
Liatta= Cofiae espaitol, de contrabando. (Adela le quita la botel
y sirve en las copas.) La bodega esta lena de botellas que eo!
pré mi papa en los buenos tiempos, cuando recibian gente y
casa se enfiestaba, una vez por semana.
Juan. ¢Qué hacia él?
Abeta ¢Mi papa? Tenia una fundici
litiles! Nos costé vender todo eso,
Liatta Era tan bonito verlo dirigiendo las maniobras, con la ca
roja y la camisa empapada. Como un dios movigndose entre
amas, entre lo nuevo y lo viejo.jEra tan joven que parecia imy
sible que Hlegara a envejecer y transformarse en lo que es ahoi
jlmposible!
Juan.- Bueno... nadie sabe como va a ser su vida,
Aptta.~ Yo sé.
Lina.— Yo sé, también. Veo mi futuro tan claramente como si fuer
enorme. {Tantas cosas i
396
LA MANTIS RELIGIOSA
tun cuadro en la pared. (Llalla se levanta y le eva ta copa de
contac a Lina.)
Liatta. Ah, yo no sé. No sé nada de nada, Aparte de que voy a
envejecer, si es que no me muero antes.
Lia. iQué felicidad la tuya ser tan simple!
Liatta fY que desgracia la tuya..
Liva.- Termina la frase.
Liatia. Estar seca, Tener una maquina de sumar en vez de cora-
z6n, y ojos de examinadora resentida.
Lina 7G, haz tu dulce de membrillo y callatet
AbrLA= jPor favor, por favor! jSé que no estén acostumbradas a
tratar con la gente, pero sean un poco mas amables, aunque sea
mientras Juan esté aqui.
Lina. ¢Como te atreves a Hamarme la aten ignoran-
te? jSe cree el centro del mundo y no es mas que un grano de
arena! (Entra Aparicio con una chaqueta sobre la camiseta, siem-
pre com zapatillas de levantarse. Lleva una maleta de cuero.) iY
rat
n, mocos:
usted, gque no se iba a acosta
Aranicio.- Me voy.
Lraia~ ¢Qué Heva en esa maleta?
Aranicio.= Nada,
Lina. Se va y no lleva nada?
[Aranicto.~ No tengo nada que llevar.
Lina.— No se ponga surrealista y vaya a acostarse.
Liaita jEs tardisimo! No son horas para que ande levantado.
Avaaicio.- No puedo seguir aq
Lina Por qué no? Al revés, yo dirfa que usted da un paso fuera de
esta casa y es una sombra, esté muerto.
Araricio.= Si, asi es.
Lina. ¢Ve? Viiyase a su pieza.
Aranicio.~ No... Prefiero morirme, prefiero ser una sombra a ser lo
que soy ahora, con ustedes, martirizando a Teresa... Yo no la
martirizo, yo no, pero dejo que ustedes lo hagan... Mi mujer
estaba alla arriba ahora, esperindome, sentada en la cama. Y
ime dijo: «Si te quedas aqui te secards, te pondras gris, no podras
397,se
ALEJANDRO SIEVEKING La Mantis RELIGIOSA.
Ananicio.~ Adiés, mujer, no llores. Es una listima que no te hayas
casado.
Liatia.— (Llora fuerte.) {Las cosas que dic
Anxnicio. Habrias sido la perfecta duefia de casa. (Mira a Adela.)
Tai serias la amante perfecta, si no fueras tan ambiciosa.