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CariruLo 2 NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA Juan Jost Bounaca 1. La planificacién de un proyecto hidrdulico requie- re def razonable conocimiento de las necesidades que pretenda cubrir. Estas necesidades como ya se mencioné, estén intimamente ligadas al crecimiento y desarrollo del pais, tegién o localidad, afectadas por la ejecucién del proyecto. A los efectos de este libro, dichas necesidades son conocidas de antemano, pues su determinacién escapa al Ambito de accién de la planificacién hidréulica, aun- que ella participa activamente en el proceso correspon- diente. En realidad, este proceso es uno de aproximacio- nes sucesivas, es decir, las necesidades fijan las magni- tudes del proyecto hidréulico, pero éste, a su vez, puede alterar esas necesidades. Sin embargo, sf es incumben- cia del planificador hidraulico traducir las necesidades en demandas de agua, es decir, en cantidades de agua que deben ser suplidas o retiradas de aquellos lugares donde ella es beneficiosa o daitina, respectivamente. El concepto de necesidades representa al objetivo final del proyecto (habitantes e industrias a ser abaste- cidas, dreas y cultives a ser regados, energia a ser produ- Cida 0 reas a ser protegidas contra inundaciones) mien- tras que el de demanda de agua corresponde tinicamente a unobjetivo intermedio que permite alcanzar el propé- sito final (voltimenes de agua a ser suplidos o retirados). Dentro del término demanda debe incluirse, ademas de la cantidad de agua, su calidad y la oportunidad de uso, Por ejemplo, no es suficiente decir que una industria re- quiere de 30 millones de m3 por afto para satisfacer sus necesidades, sino que habré que agregar que las reque- riré en 1990 y en condiciones de agua potable; o bien, tampoco basiaria con apuntar que una determinada érea agricola debe ser protegida contra las crecientes de un rio hasta 800 m3/seg, sin aftadir que ello es necesario a partir de 1998; en este caso la calidad no tiene significa- cién. Este capitulo versa sobre la determinacién de las demandas de agua sobre la base de unas necesidacies conocidas previamente. Sin embargo, con marcada fre- cuencia dichas necesidades no son dato previo del pro- blema, pues, por muy elaborado que sea un sistema de planificacién global, esraro que haya determinado todas, las necesidades debidamente desglosadas en el tiempo y el espacio y con suficiente detalle para ser traducidas directamente a demandas de agua. Por ello se discute también la problematica desu determinacién, de manera de orientar al lector, si fuese necesario, sobre el camino que podria seguir al respecto. Por otra parte, es frecuente que la potencialidad, que es la capacidad de cubrir necesidades de un proyec- to 0 conjunto de proyectos, no se fije de acuerdo a unas necesidades, sino que por el contrario éstas se adapten a esa potencialidad. En estos casos, la traduccién es en el otro sentido: de cantidades de agua a necesidades posi- bles de ser cubiertas. En la préctica, la tarea de encajar la planificacién hidréulica con las necesidades del pats, re- gin 0 localidad afectadas, es parecida al juego oferta- demanda de los mercados. La oferta, en este caso, estaria limitada por la potencialidad maxima que impone la na- turaleza unida a la tecnologia dentro de unos limites eco- némicos razonables. Los puntos siguientes de este capitulo analizan en forma resumida la problemética planteada para la deter- minacién de las necesidades y demandas de agua, para cada uso de aprovechamiento y de proteccién. 2.1 ABASTECIMIENTO URBANO. Al agua destinada a abastecer el medio urbano le hasido asignada a nivel mundial la primera prioridad, es decir, tiene, en principio, prelacidn sobre cualquier otro uso del agua. En Venezuela este orden jerérquico ha sido claramente establecido en ef “Plan Nacional de Apro- vechamiento de los Recursos Hidréulicos” (1p82). Esta prioridad tiene st fundamento en que dentro del abas- tecimiento urbano est comprendido el consumo para satisfacer las necesidades sanitarias y de agua para beber, ue son indispensables al hombre para su supervivencia, Sinembargo, en la practica, ese primer lugar enla fila de tusos del agua abarca mas que el consumo anterior, pues resulta dificil aislarlo de los otros involucradosen el medio urbano. La dificultad aflora por la complejidad de actividades que significa cualquier ciudad, pues, debe 18 recordarse que la red de distribucién es, por lo general, una sola para todos los usos urbanos, salvo en algunos casos de reas industrials que posean acueductos independientes; en consecuencia, esas prioridades sélo podrian asegurarse dentro del uso urbano con medidas restrictivas como racionar. Conviene en este momento establecer un hecho muy importante a saber: fa demanda de agua de una pobla- cidn para los fines de planificacién de proyectos, no es el consumo de agua que ocurre en ella. Este tiltimo concepto se refiereal volumen de agua realmente consumido en un momento dado, mientras que el primero es el volumen de agua, que razonablemente debia estar consumiendo para Jamisma fecha La diferencia entre constmo (cantidad realmente utilizada) y demada (cantidad que se desea consumir), viene impuesta por muchos factores, siendo el mas im- portante la limitaci6n de la oferta, que es la cantidad que realmente esta disponible a puerta de usuario. Sila ofer- ta es mayor que la demanda, ésta y el consumo serén iguales. A efectos de planificacién de proyectos se supo- ne que el tiltimo caso del parrafo anterior se debe lograr y mas atin, para cumplir ese objetivo se establecen mar- ‘genes dle seguridad. Por estas ratzones se definen varios niveles de demandas para la planificacién # Demarida en reseroa, se refiere a los voliimenes de agua que deben reservarse en las fuentes de abas- tecimiento, conservando margenes de seguridad _generosos sobre los consumos previsibles. ‘© Demandas de proyecto, que son las demandas me- dias que deben ser abastecidas por cada obra (fuente, conduccién o distribucién) paste del pro- yecto. ‘© Gastos de disetio, caleulados sobre la base de la dis- tribucidn instanténea de las demandas de proyec- to, determinando asi las dimensiones hidréulicas de las diferentes obras. Las demandas se expresan comtinmente en mic llones de m? por afio o litros por segundo, y los gastos en esta tiltima unidad. Las demandas corresponden a ‘gastos 0 voltimenes medios en el tiempo, mientras que los gastos de diseio lo son a gastos picos o méximos. ican esta divisién son las si- Las razones que jus guientes: * Al analizar la metodologia de estimacién de de- mandas a largo plazo, existe siempre un grado de incertidumbre o riesgo en estos célculos, y en con- NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA secuencia, se debe ser prucencialmente conserva- dor al reservar agua en las fuentes, es decir, para garantizar que las diferentes poblaciones tengan suficiente agua para cualquier eventualidad que pueda ocurrir hasta eb horizonte de planificaciGn. * Por lo general, las obras se proyectan para cubrir sélo parte del rea urbana prevista y para perio- dos mas cortos que el delimitado por el horizonte antes seftalado. Por ejemplo, una conduccién o una red de distribucién son obras flexibles, pueden ser ampliadas con selativa facilidad, no asi una presa (fuente). Por otra parte, hay estructuras y equipos hidréulicos de corta duraci6n o vida wtil inferior al periodo cubierto por el horizonte. * La dimension de una obra, por ejemplo una tube- ria de distribucién, se determina para el gasto maximo que ella debe suplir en la hora pico de consumo. El procedimiento para determinar las demandas de agua al medio urbano, puede sintetizarse en los si- guientes pasos: » Determinacién de los horizontes de planificacién para el proyecto y sus obras, ‘ Estimacién de las necesidades. ‘¢ Fijacién de las hipstesis de demandas. Estudio de las dotaciones. a. Horizontes de planificacién. Aunque en este caso se refiere a abastecimiento urbano, lo dicho aqui sobre horizontes de planificacién esaplicable a cualquier proyecto hidraulico. El horizonte de planificacién de un proyecto es la fecha més lejana parael cual se supone que él debe satisfacer las cantida- des de agua necesarias pata abastecer las ciudades co- rrespondientes. El horizonte de un proyecto especitico, salvo raros casos, coincide con el correspondiente al plan a nivel nacional (usualmente 30 afios) (1p68).. Las obras (estructuras y equipos bidraulicos) que forman parte del proyecto, tienen los denominades ho- rizontes de obra que no necesariamente coinciden con el anterior, por las miroas razones que no lo hace ta de- manda de reserva con la de proyecto. Elhorizonte de obra se fija tomando en cuenta prin- cipalmente consideraciones de tipo econdmico, donde jue- {gan papel importante las llamadas vidas titiles de las di- ferentes estructuras y equipos. Elcancepto de vida itil no debe identificarse necesariamente con el de periodo de funcionamiento, ya que el primero tiene una acepcién de tipo econsmico, es decir, amortizacién, mientras que el segundo es el periodo real de servicia eficiente. Conocidos los diferentes horizontes de un proyecto, hay que determinar Jas demandas correspondientes (demanda en reserva y demanda de proyecto para cada bra en particular). Los puntos b,c. y d.aclaran el resto del procedimiento. b. Estimacién de las necesidades. Comiinmente las necesidades de las actividades del medio urbano estén definidas de acuerdo con dos facto- res basicos: la poblacion a servir y el plan de desarrollo urbano. Estos dos elementos, que estan intimamente liga- dos, deben cubrir en el futuro un periodo queabarque has- tael horizonte més lejano. Fl planificador hidréulico, en consecuencia, debe disponer de una curva que le seftale la variacién proba- ble del ntimero de habitantes en los aitos de prospectiva y deun plan de equipamiento, que le indique los siguientes datos: diferentes usos de la tierra (comercial, resiciencial, industrial, etc), densidades de poblacidn. tipos de indus- trias, zonas verdes e informacién urbana general. se eee on ERS SS et son) 8, SESE ve, ioe - € & ¢ g £8 Figura 2.1 Crecimiento de a pablacién global de Venezuela y En Venezuela existen como fuente de informacién primaria demografica los diferentes censos efectuados, ‘que reflejan la historia de crecimiento poblacional del pais. El primer censo se realiz en 1873. En la actualidad, estos censos se hacen cada 10 anos. La informaci6n pe de ser encontrada en la Oficina Central de Estadistica e Informatica (OCED de la Presidencia de la Replica, Caracas. Existen también estudios sobre crecimiento futuro, centre los que merecen destacarse los seftalados en tas Re ferencias (2), (3)y (4). Todasestas estimaciones fueron efec- tuadas con anterioridad a 1981, La Figura 2.1 indica con cardcter ilustrativo el crecimiento futuro global de la poblacién, estimado en las tres referencias serialadas. Existen numerosos métodos que tratan de predecir el crecimiento futuro probable de la poblacion. La Tabla 2.1 resume los diferentes tipos existentes con sus princi- pales caracteristicas y limitaciones. Sobre este tema se re- comiendan las Referencias (5) y (6). Como toda accisn dirigida a predecir las estima. ciones de poblacién futura tiene un grado de incertidum- bre, el cual se acrecienta en paises en desarrollo con fuer- tes flujos migratotios internos y externos y una influencia econémica y social muy notoria del Estado; ademas, dicha incertidumbre aumenta, mientras mds pequerio sea el Am- bito geografico a considerar. En Venezuela, comoen todo pais en desarrollo, resulta entonces lo mas conveniente hacer predicciones de poblacién con un marco de refe- rencia territorial Io mas amplio posible y luego irlas des- glosando a nivel regional y Jocal. Este fue el sistema que utilizaron la Comisién del Plan Nacional de Apro- vechamiento de los Recursos Hidréulicos (COPLANARH) Q)y el Instituto Nacional de Obras Sanitarias (INOS) 3). El marco puede reducirse si la poblacién ha alcanzado un buen grado de estabilizacién Como manera de adquirir ilustracién sobre el cre- cimiento urbano del pais, se incluyela Tabla 22, relativaa las tasas de crecimiento pasado de algunas tiudades de acuerdo a datos censales. Partiendo de la observacion de s cifras de este cuadro pueden hacerse,a titulo de ejem- plo, los siguientes comentarios: Caracas, Maracaibo y San Crist6bal tienen una ten- dencia claraa estabilizat la tasa de crecimiento, es decir, son ciudades con una vida y dinamismo pro- pio, que no estan tan sometidas a los avatares del resto del pais. San Cristobal es una ciudad muy {influenciada por la actividad fronteriza, y tiene un cardcter mas. o menos estable. «La ciudad de Valencia refleja el crecimiento que ha tenido en materia industrial (nuevos empleos) ¥ mantiene una tasa anual creciente hasta 1971 ‘METODO DE PROYECCION RESUMEN Asiaticn Supone wn inctemento anal Gonstante Supe un incremento porcenta Tass de screens Spone un ineremento porcenal at earn Fistines_y-prlongarios en et fare Se utlizantmbiin hipeolas lost cas 0 deGomperz, ie ajustan teas decrcimients Consist en aceptar un crecinents demogriic simile al sudo por po Uaciones mayores, Comparatives Shace una coreelaciin matemsie on el crecimiento prevsto de una tein. Cowen rojonal nacional el ps, Componentes Elka Las proyesciones en Bat a los Indices de mablidnd p meu (crecimiento natural os migeacones) Prien Se establee na corcelacon entre by - deempleoe predicciin de posible nimere de em Plevs y poblai. soturacin Consist en defini una poblaion de seabledesstuaciin soponer ty ce- Cimento desable gue tendo el, Esdeterminatien. ‘TABLA 2.1 - RESUMEN DE METODOS DE PROYECCION DEMOGRAFICA EXPRESION MATEMATICA* Parske Pan coy Variable Variable NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA OBSERVACIONES Puede ser copra en prblaciones exabiizadas| para prayeciones a cont flazo (5a 10 af}. ‘Supone wn cresimenoscten wid polo gone ‘al acort plara(5a Dasos) on poblsciones com frandes incentives de desea, Tasiamente representa bien el crecimiento de una pablaccn que sufre un gua incentive de reine Yugo sexta, Su poblema radia en Iasi Eanrarongblede Tendoncia grfica_Prolonga la tendencia hist Variable Supone que bps no sul cambios Marematicos Consist en ajutepotinomioe gene Seponen gue los parimetrospasados se mantienen ralmente de2d0 6 3er grado lasere PEKsE eKsCeKs net caode los plinomin. Enotes ve sceptan 6 taba de crecimiento variables DAKE K€ aks CK Poede dar buenos resultados los planes de dest lio que se spone vasa ciudad, son saves {on ya sults por las publacnes ce eevenin, Hace caso oto de ls pasticularidades de creck rmientode fy indad, especialmente tla correlaccn fsanivel ccna Es cesomendad por la Nacones Unidas, sin em barge no pode, polo general aplicarse nivel fe {ional local por ls difeulad de inforacis, Variable Nose conace sia sdoiemplesda en Venezu, Fo _iblementet aroje Buenos revllados eh pies eo esa Varible Puede ser de mucha uid, especialnent en nie sae poblaciones, "Sialfcado de eminos P, nero de habitants en un momento dado fen fos Pe. nmero dehabtanes en! orgen de tempm; Ke Kio Kay Ke ovfcentesy asa intron de crecinenty, + Enos casos de Puerto la Cruz - Barcelona y Ciu- dad Guayana,se reflejan claramente la creacién de rnvevas ciucdades que originan un crecimiento Vio- lento, seguido de un proceso masestable. + Acarigua~ Araure presenta un proceso violento al comienzo de los aftas 50, acasionado bésicamente porlaejecucién de los programas agricolasa sual- rededor, pero luego se fue estabilizando al atem- perarse éstos: + Cabimas y El Tigre -El Tigrito son las tipicas ciu- dades petroleras que sufrieron una fuerte emi- gracién al decaer esa actividad en la década de Tos aftos 60. © Cumana y Mérida son ciudades decrecimiento esta- ble onatural, es decir, que no han suftido determi- nantes influencias externas. iimero de nacients; M amore de muerte y MI, mero de habitants qa migran En Venezuela ha sido préctica bastante comein en Jos ailtimos ais, elaborar planes de desarrollo de las ciudades més importantes del pais. Estos planes han ve- nido principalmente, fijando regulaciones de! uso de la tierra, es decir, asignando a cada espacio fisico el uso correspondiente. Por lo general, los usos han sido clasi- ficados, asf + Residenciales, divididos en de baja, media y alta densidad. © Comerciales. + Industriales, seftalando comtinmente fos tipos ge~ nerales que se han de establecer (pesado, manu- factura, agro-industrial, etc) * Parques y zonas verdes. * Usos ptiblicos, éreas para edificaciones puiblicas, a TABLA 2.2 ‘TASASDE CRECIMIENTO DE A TASA DE CRECIMIENTO ANUAL % SUNAS POBLACIONES DE VENEZUELA AD 199650 198061 1961-71 _197i-81 1981-90 ‘Conca WeSC aT Marsaibo fn eS ey SonCrstébal-Tirbs 8.18 7B_ SDR Valencia 4s 5a 7a? 553300 Plo.LaCeus-Barcclona 1101 7 4984285 Ciadsd Guayana to atop tat ate ‘Acarigua “Arse em 6m Bk Bas 2S Cabimas sos maw 15 EITigre-E1Tigito 7 7412 Cumend Se 4918S 1087 Merida Bae «SISA 1 ents: Cones ncionales + Ares Metropolitana como oficinas del gobierno, hospitales, escuelas y servicios pablicos en general. Estos planes han sido frecuentemente elaborados con una preponderancia de criterios de tipo urbanisti- os, no siempre fundamentados en consideraciones ra- zonables de crecimiento econémico y social; es decir, e- Ilos representan una visién local deseable, més que una probabilidad real. Este panorama est cambiando al en- prender ei Estado Venezolano planes encaminados al es- tudio més integral y racional dela ordenacién del territo- rio, donde el proceso de urbanizacién juega un papel de primera linea. La Figura 2.2 muestra, a titulo de ejemplo, un plano de desarrollo tipico correspondiente a la ciudad de San Carlos, Cojectes, en una regién agroindustrial c.Determinacién de dotaciones. Seentiende por dotacidn la cantidad de agua deseable por habitante de la cual debe disponer una deter- of tate a oe ‘San Calos, Eade Cojedes, Venezuela Pian Rector de Desarcllo Urbanstico (De eine sh Glee nite te Etro meanteee arto [Efrem e ete Brannan shat coma Speers women Vit et \ er ae a 2 minada poblacidn, Generalmente se expresa en litros per cépita por dia (Ipcpd). Este término no debe confundirse con consumo per ¢épita, que esla cantidad realmente uti- Jizada, pues ésta no es necesariamente la deseada, La dotacién se forma con la suma de los'requeri~ mientos razonables de los diferentes usos que confor- man el abastecimiento urbano: doméstico, comercial, in- dustrial, péiblico; agregandoa ellos las pérdidas que ocu- rren en las redes de distribucién, por juntas imperfectas, malos empotramientos 0 tuberfas rotas. Los factores que influencian la dotacién o consumo deseable, pueden resumirse ast + Necesidiades de tipo sanitaria dentro del consumo ddoméstico. Por razones de salud, es necesario y de- seable una dotacién minima para el uso propia~ ‘mente humano (agua de beber y aseo personal). Elfuncionamiento y tipos de artefactos sanitarios, de cocina y similares tienen una influencia signifi- cativa, en estas dotaciones. + Clima. En éreas muy calurosasel consumo deagua es mayor que en climas frescos, en especial en el rie~ go de jardines. En Venezuela experiencias anali- zadas por COPLANARH (7p7), ponen en duda esta influencia, al menos significativa, del clima; sin embargo, seria necesaria mayor investigacisn al NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA, respecto (Sp4.12) para llegar a conclusiones defi- nitivas, + Tamaiio de la ciudad. Existe una tendencia a que los consumos sean mayores en las grandes ciudades; sinembargo, esto no es siemprecierto, pues influye apreciablemente el tipo de ciudad, en particular su grado de industrializacidn (84.9). # Precio del agua. Fl precio del agua influye en los consumos, particularmente cuando el cabro es por volumen, Esta es la préctica en la mayoria de las ciudades de Venezuela. Sin embargo, por diversas razones, hay mucho consumo no medido. Inves- tigaciones recientes muestran un comportamiento de la elasticidad precio-volumen, parecido al de paises desarrollados como los Estados Unidos (9p51) (9p152). + Cloacas. Existen indicios de que cuando no hay redes de cloacas e] consumo se reduce. Esto es im- portante para buena parte de las éreas rurales y semiurbanas del pais. * Caracteristicas de los habitantes. El nivel de vida y Ia situacién econémica de los habitantes influye en forma muy significativa en 10s consumos. El sistema tarifario actual de Venezuela recarga un costo mayor en los grandes consumidores, es decit en las familias de mayores ingresos. “777 Td con ened | oo {aon olen liezaeall tT t--4 —_POBLACIONES — ao | SS ie ete Figura 23 CConsumos ypoblicisn servida © Tipo de industrias y de comercios. Existen industrias con précticamente sélo un uso de tipo sanitario, pero hay otras de consumos realmente grandes y, entre ambos tipos, hay una gran variedad. Enalgu- nos casos es preferible considerar a las in-dustrias ‘muy consumidorasapartedel consumo urbano, es decir, en forma aislada. La Sidertirgica del Orinoco (GIDOR) en Puerto Ordaz, Estado Bolivar o la Petroquimica y la industria de papel VENEPAL en Mors, Estado Carabotio, ambasen Venezuela, son ‘buenos ejemplosal respecto. Los comercios, ademas del uso santiario, tienen segiin ol tipo, usos adicio- nales importantes, como son los autolavados y las lavanderias. El anilisis de los diferentes factores que influyen enel consumo y, en consecuencia,en las dotaciones, con- duce a concluir que la via mas recomendable para esta- blecer estas tiltimas, es considerar cada poblacién como un caso particular. Sin embargo, la experiencia ha ido seflalando valores generales que son de ayuda; existen, ademés, normas legales que no pueden dejarse a un lado, particularmente en lo veferente a dotaciones minimas. En Venezuela, por razones, que no son del caso ana- lizar, no ha existido un programa sistemético de medi- ciones, que permita conocer los consumos reales, que se- rian de una ayuda invalorable para la fijacidn de dotacio- nes razonables. COPLANARH realiz6 investigaciones al respecto (7p7), también se hizo algo similar para el centro del pafs y para las poblaciones rurales (menos de 5.000 2B habitantes) (8) (9). La Figura 2.3 resume algunos de estos datos para diversas pobalciones de Venezuela;en la figura se observa que Maracaibo tiene el consumo per cépita més alto y que los menores consuimos corresponden a po- blaciones semirurales como Duaca y Aroa. El Depar- tamento Vargas (Litoral Central) tiene un consumo st- perior a Maracaibo, debido a su caracteristica especial de rea de esparcimiento y recreacién de Caracas. A.continuacién se indican los valores representati- vos usuales de cada componente, los cuales son de utili- dad para fijar una dotacién apropiada. Consumo doméstico.~ La experiencia en Venezuela indi- ca que la dotacién mfnima indispensable esté en unos 70 Ipcpd aunque un minimo del orden de los 120 seria lo recontendable. El Ministerio de Sanidad y Asistencia So- cial de Venezuela (11p8) establece unas dotaciones do- mésticas de acuerdo con los tamanes y tipos de parcelas, que son de utilidad en las etapas finales del proceso de planificacién (anteproyecto y proyecto). Investigaciones hechas por la Oficina de Ingenieria A.J. de Guruceaga (6p4.8) basadas en datos de COPLANARH y de acuerdo can diversos estudios realizados por la Universidad Cen- tral de Venezuela (12) (13) (14), egan a los valores mos- trados al final de la Tabla 2.4 Consumo industrial. El consumo industrial depende de! tipo de industria y del proceso que ella utilice. Entre las, industrias de mayor consumo de agua se encuentran: las, TABLA 2.3 - CONSUMOS TIPICOS DE INDUSTRIAS DE ALTA DEMANDA DOTACIONES EN mi unided PRODUCTO. REFERENCIA7 REFERENCIA 15 REFERENCIA 16 UNIDAD CANTIDAD UNIDAD CANTIDAD UNIDAD _CAN Gasolina Ton 2000 toe refinadosdelpeusico Ton 15,00 Refinerias de peesico are 200 ‘Cavcho sintco Ton +.000,¢0 Fras sinttcas Ton 2.00,00 Fertlizentes Ten 250.00 Algodén Ten 250.00 “eis de gods Ton 000 Coeroe Ton 10.0 Ton ea0 Palpa Ton sono Papel Ton 0.00 Ton 15300 Alimentos enlatados Ton 2000 ‘Aas Ton 500 CContraes éricas whe fa ‘Asetaderosy maderers » a0 Bebidas gascons Ton Taser Ton 1500 Cervceras Ton 700 a 180 Conereo m 025 8034 Marmoleris ™ sr “ Deacvesdo a encvesta liad porla UCN m4 procesadoras de alimentos, las de bebidas gaseosas y cervezas, las textileras, las tenerfas, las refinerias de pe- trdleo, las papelerias, las sidertirgicas y las plantas tér- micas de generacidn de energfa eléctrica. La Universidad Central de Venezuela ha realizado encuestas sobre re- querimientosen varias industrias cuyos resultados resume Rivas Mijares (15p56). Existe también informacién recopilada para EE.UU., mencionada por Tchobanoglous (16p407); COPLANARH también (7p18) propone unas dotaciones para un conjunto de industrias altamente consumidorasdeagua. Ena Tabla2.3 se resumen algunos consumos tipicos obtenidos de las tres referencias ante- Para zonas industtiales, se utilizan dotaciones por unidad de érea, que van de 1 a 1,5 Ips/ha, dependiendo de que se presuma o no la instalacién de industrias muy consumidoras de agua. Este procedimiento es itil, ya que, por lo general, es imposible predecir todas y cada una de las industrias que se pudieran instalar en un drea de- terminada. Sin embargo, cuando se presuma la instalacién de tuna o varias fabricas del tipo de las sefaladas en le Ta bla 2.3, es conveniente separar a éstas del resto y consi- derarlas individualmente, especialmente en ciudaces pe- queias, pues ellas podrian consumir mas agua queel res- to dela poblacién. En Areas comerciales, el Ministerio de Sanidad y Asistencia Social (11p8) y el Instituto Nacional de Obras Sanitarias (17p29) han establecido valores: Tchobano- ¢glous (16p406) sugiere como cantidad promedio 40 litros por dia empleado. Uso piiblico.- Este uso comprende los consumosen edi- ficios puiblicos, escuelas y hospitales, para riego de par- ques y zonas verdes y para la limpieze de calles. En este sentido, luego de analizar las normasexistentes de MAS (11p8) e INOS (17p29) y el estudio realizado por Guru- ceaga (8p4.8), se recomiendan los siguientes valores como apropiados: ‘© Riego de zonas verdes y limpieza de calles: 800 a 1.200 Its/ha/dia. ‘+ Edificios piiblicos, escuelas y semejantes: 60.a 100 Ipepd + Hospitales: 500 a 800 kts /cama/dia. Pérdidas.- Sobre este punteno existeen Venezuela infor ‘macién basada en mediciones. Por lo general, se han ve- nido adoptando valores que van del 10% al 20% del con- sumo total, dependiendo de si el acueducto tiene un ma- yor 0 menor control de su eficiencia. Tchobanoglous (16p405) da informacién relativaa los Estados Unidos, en Cifras que van de 20 Ipepd a 75 Ipepd NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA. Dotaciones globales.- EI procedimiento de estimar las dotaciones ¢ consumo deseable para estimar las deman- das deagua de una determinada poblacién puede seguir dos caminos: el ya descrito, de hacer un andlisis detallado por tipo de consumo (doméstico, industrial, comercial y ptiblico), o utilizar dotaciones globales que incluyen to- dos los usos, basadas generalmente en valores extraidos de la experiencia con consumos totales. El primer camino- que es el més légico- necesitarfa de un conocimiento detallado del futuro de cada pobla- ign. Por ejemplo, si se fuesen a utilizar las dotaciones del MSAS, habria que conocer el ntimero y tamatio de las parcelas de terreno, tipos de industrias, tipo de comercio y servicios ptiblicos. Entonces, este primer camino no tiene raz6n de ser en la estimacién del consumo total de una poblaciGn, sino cuando se van aestimar las demandas de reas especificas, cuyos usos estén determinados; por ejemplo, una urbanizacion o un Area industrial, una determinada zona verde o un hospital. COPLANARH (7) con fines de reserva de agua en fuentes estimé dotaciones globales; el INOS (17) tam- bign ha hecho sugerencias en este sentido, y Guruceaga (8) propone un conjunto de valores para la Regidn Central del pais. La Tabla 2.4 resume estos valores. De Viana (18) en trabajo reciente ha recopilado un conjunto de va~ liosa informacidn y propuesto una metodologia al res- pecto, que actualizaba la de COPLANARH. Durdn, Az~ purtia y Crespo (19) han realizado un trabajo para el MARNR, que ha sido actualizado recientemente (50). d. Hipétesis de demandas. Laincertidumbre estara presente en cualquier esti- macién de las probables demandas futuras de abasteci- miento al medio urbano. Esta incertidumbre es atin mayor en un pais como Venezuela, donde la experiencia histérica es corta y la investigacin en materia de dotaciones, limitada. Por otra parte, sia los hechos anteriores se agregan las incertidumbres provenientes de la estimacién de las ofertas (ver Capitulo 3), que en Venezuela adolecen tam- bien de limitaciones, no cabe otra conclusién, que la ne- cesidad de ser conservadores en este sentido, con mér- genes cada vez mayores de seguridad mientras mas li- mitante sea la calidad y cantidad de la informacién dis- ponible. Conviene, entonces, al fijar las hipdtesis de creci- miento de la demanda de una poblacisn, tomar en cuenta los siguientes factores: * Calidad de ta informacién de oferta de agua, es de- ir, grado de seguridad que se tiene en relacién con, TABLA 2.4 - DOTACIONES GLOBALES A. DOTACIONES COPLANRH* EN Iped NUMERO DE ARO HAUITANTES 7980 199020002010 2500498 070 OCR 500999 mo 190250 O45 q 1.800 8 2.499 wo 210280570 aa 28008 4900, 7 0 HHO ‘50008 9.999, 20) 30 R08 yo.000 8 19.999 20 00049080 20.0008 49.899 30 ts0. 5300 0.000 a 98.008 a) 50D BaD 100,000 a 249.999 4 $00 S061 «G7 rs 66 250,000 so 550600680700 B. DOTACIONES INOS *** EN Iped NUMERO SERVICIO SEVICIO DEHABITANTES CON MEDIDORES SIN MEDIDORES hasta 200000 200 “400 20,000 a $0:000 250 500 mas de 50.000, 500 00 C. DOTACIONES INFORME REGION CENTRAL *** EN ped PESODELAREA CONSUMO _CONSUMO CONSUMO CONSUMO INDUSTRIAL m2/hab, DOMESTICO INDUSTRIAL PUBLICO TOTAL 20 28 28 ar 550 120 are 165 7 00 Woais ore 100 a 40 10 28 3 a 400 Referencia 7 pag, 24. Se considera dotaciones de reserva Se inhiye com ai de ino de a extapulacon de COPLANRE s+ Referencia 1 pig 29, Se consieraran dotaciones minima Referenda pig las cantidades de agua aprovechables (Ver Capi tulo3). Seguridad respecto al probable crecimiento de la poblacién, tanto en sus aspectos demograficos co- mo de usos de la tierra y tipos de desarrollos in- dustriales. Esta seguridad es mayor en ciudades estabilizadas y en aquellas nuevas, donde el cre- cimiento puede, al menos parcialmente, ser pla- nificado y controlado. Importancia de la poblacién, en cuanto a conse- ccuencias que pueden traer laslimitaciones deagua, tanto de tipo social como econémico. Por ejemplo, una limitacién de agua esporddica en una po- blacidn poco industrializada trae pérdidas econ micas, que son mucho menores que las que se pue- dan dar en otras altamente industrializadas. idez.o flexibilidad del sistema de abastecimi {o, facilidad de operacidn de fuentes y aducciones ode extensidn de redes y obras de tratamiento. ‘Scconsiecarindolaciones de ese El planificador hidréulico debe pesar, en cada ca- 50, estos cuatro puntos antes de expresar su generosidad en materia de demandas urbanas. Por lo general, se de- finen dos tipos de demandas, antes mencionadas, las de reserva y lasde proyecto. En cualquier caso, e! producto final de la estima cién de demandas debe ser una o mas curvas -segtin el mtimero de hipétesis- de los gastos necesarios versus los aitos de prospectiva, el tiltimo de los cuales debe coinci- dir con el horizonte de planificacién. Un punto importante que se tiene que considerar al formularlas hipstesis de crecimiento delas demandas de agua en el medio urbano, esa variacién de las dotaciones ¢globales con el tiempo,es decir, stuponer una modificacién de ellas en el futuro. Es un pais como Venezuela, donde existe un fuerte proceso de urbanizacién y en el cual el desarrollo de una poblacién puede ser sustancialmente alterado por la acci6n del Estado, parece légica adoptar % dotaciones crecientes con el tiempo, en las poblaciones no estabilizadas. Sin embargo, la experiencia en paises desarroliacos, demuestra que el consumo industrial puede influir de tal forma, que una disminucién en su relacién con respecto a log otros consumes, origina, en algunos casos, descensos en las dotaciones globales. Por ejemplo, siseacenttia la politica de desconcentracién industrial en Ja Regidn Central de Venezuela, ciudades como Caracas, Valencia y Maracaibo podrian sufrir disminutcionesen sus consumos unitarios. ‘Como conclusién de este literal, cabeenfatizar que Ia labor de estimar tas demandas de aguas futuras de una poblacién no se gobierna por célculos matematicos in- falibles, sino que, por el contrario, requiere de buen cri- terio y flexibilidad para adaptarse a lo inesperado. EL Ejemplo 2.1 contiene un anélisis de lo tratado en este punto para un caso real. Todo lo relativo a gastos de disefio de las diferentes obras hidraulicas de un sistema de abastecimiento urbano se trata en el Capitulo 13, donde se incluye el andlisis de las variaciones estacionales y horarios del consumo urbana, ast como el gasto para atencion de incendios. ElMinisterio del Ambiente inicié en 1983 un proce- s0 de actualizacién de las demandas de abastecimiento urbano, que ha venido siendo objeto de publicaciones pe- rriédicas dentro de la serie denominada: Aguaen el Medio NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA Urbano, Actualizacién del Plan Nacional de Aprove- chamiento de los Recursos Hidraulicos. Ejemplo 2..- A la poblacién de San Carlos, Estado Cojedes, uubicadaen la zona norte de los lanes centrales de Venezuela, se le ha planteaco un plan de desarrollo (20), que en forma sim- plfcada, se muestra en el mapa la Figura 22, ya mencionada. Como puede observarse en el citado mapa, la expansién ur- ‘bana propuesta es amplia, o en otras palabras, ests planteada tuna transformacién casi total de esta poblacicn, que entre otras, cosas, afectariecadicaimente las demandas de agua. En este ejemplo, seanaliza en forma resumida el proceso de estimacién de las cantidaces de agua necesarias en los proximos 30 aos (horizonte ato 2010), de acuerdo con las recomendaciones de COPLANARH (Ip68). La informacién general no urbana de todo este ejem- plo ha sido obtenida de la Referencia (21) Sin embargo, las conelusiones y comentarios son del autor de este capitulo. La historia demogrstica de la ciudad, obtenida de los ALVIENTO m = 404070 >70 ° 058 048 078 ° nr Suave ” as 07 oss ” na 70 170 100 970 om 088 1% as oss 1000 975 ons oss 109% i) 070 ° os0 00 06s ° os oxo Moderado 0 ° om 075 w 070 170-05 0 as 075 0 1 0as 1000 070 0 a0 1000 000 ° Das 050 040 ° 00 Fast 0 035 bea as ” as 25-700 19 0 va om 1% 0 Muy foarte 1 Das 038 Daa » os Fuente, Referencia (26 pig 76, tomado aw verde Doorenos ana Frith, + Estoscosients sol se apcan cuando la supedie del sel et verdaderamente so ** Melia entels méxima yl minima humedad TABLA 2.10 - COFFICIENTES DE CULTIVO C, SEGUN HARGREAVES % DEL PERIODO DE CRECIMIENTO cuttivo, oto 40 50600 90100 Alfalfa 055 08 070 080 090 095 0s 099 am 09 ass Caraotas 02 039 040 065 088 | 09 080 090 ae ass 070 G 050 045 045 045048 NA OSD 085 06 055 00 Mae. 020 03) 95 085 080 090 09 085 075 080 050 Algoxisn 010 020 o40 055 075 09 08 089 075 O55 035 Arvoz O60 085 195115120 «1903.90 201009080, Hostatizas* 020 029 025 035 08 085 070 060 OMS 035 Oz0 Hortatizas** 010 020 940 080 085070060 085 OMS O35 00 3 Mani 015 025 935 045 088 080 065085 060 045 00 Papa 070 035 94s 065 08 0) 095 085 085 090 a0 Remolacha 025 045 980 9,70 080 085 097 09 980 090 aso Sorgo 020 035 058 075 085 90 085 070 960 035 Is, : Uva 035 015 029 0.35 04S 085 058 045035 0.35 O70 Cana de azicar Variable entre 085 10 dependiendo de rapier y estado de crecimiento Fuente: Referenca (31) pg 101 *Hrtalizas con aes profundas * Horalizascon alee poo prfundas Des Baus: Figura 2.1 Asentamionto San Migusl, Colonia Tur, Fo, Potyguesa, Venezaela Clasficacton dealada confines de igo “Escala 1:50 (vst parcial ‘Division de Edafologta, MOP, Gusnate, 1972, Contesia MARNR) nifica que el uso consuntivo de las plantas es constante en el mismo perfodo y que atin cuando no exista cultivo, hay consumo, lo cual no es cierto. Lo anterior significa que una estimacién de este tipo sélo puede aceptarse como preliminar. Para calculos mas realistas, la mejor viaes suponer valores de C, variables de acuerdo con Ips cultivos corres- pondientes. Diversos autores han seftalado esta conve- 37 niencia (27) (29) (31) (34) y comprobado su bondad. Hargreaves (31) establecid una tabla de coeficientes C, en funcién del porcentaje de desazrotlo de la planta; estos, valores se indican en la Tabla 2.10. Conocido el periodo que va dela siembraa la cosecha, la tabla permite calcular Ios valores promedios mensuales de C,, Este tipo de en- foqueesel mésconveniente, pero requiere el conocimiento delos cultivos, dato del cual nose dispone frecuenternen- teanivel preliminar, porlo que hay que recurrir alos roé- todos antes indicados. Sobre la validez de los coeticientes Hargreaves, se hard un comentario adicional al analizar el tema de la eficiencia de riego. El empleo de este tiltimo tipo de método supone conocer los valores mensuales de evaporacién en la tina Tipo A, que no siempre estén disponibles. Nucete y otros (29p5) han desarrollado un método de estimacién deeva- poracién en dicha tina que ha dado buenos resultados aunque todavia en un ntimero limitado de casos. Una vez. comocida la temperatura, el método se basa en caleular la evapotranspiracién potencial total anual -generalmente por el método de Thornthwaite (ver métodos basados en Ia temperatura)- dividiéndola por el coeficiente C, (0,7 a 0.8) para obtener la evaporacidn y distribuirla mensual- mente de acuerdo a los valores de alguna tina ubicada en un lugar climatolégicamente similar, Por otra parte, Hargreaves (31p98) ha propuesto una formula para estimar EV mensuales en tinas Tipo A, asi EV = 17,4dT(-H,) 2.2) donde EV viene expresadoen mm, d es a relacién entre las horas promedio con claridad del dia del mes y 12 ho- ras, Tes la temperatura media mensual en °C y H, la humedad media mensual al mediodia expresada en for- ‘ma decimal. La Tabla 2.11 indica los valores ded. Sin em- bargo, el escollo principal radica en disponer de valores de H, lo cual hacen poco aplicables las sugerencias de mejorar lo anterior hechas a Hargreaves par Christiansen (31p98) TABLA 2.11 -COEFICIENTE DE CLARIDAD d PARA USAR EN LA ECUACION 22 LONGITUD NORTE MESES: sadn ENE FEB MAR ABR MAY JUN JUL AGO SET OCT NOV DIC 4 og 089 40110) —«07”~=«0S=S=C«SCOSSCasSa Owe 2 O97 089 tot tor 1108 Nok na? ts, gost 10 97 0881101 3g 108405108 mo O99) 098 osr 8 093 089 Kr 11805102 t5 Lot O0 0880.98 og 6 O26 09011 tot 105. tne 105. tiok Og? 185, $ 98 0s! toe oe torte 408s tL 088 oe 2 for ost tee Gao t2 gua teense t02 88 tas 6 tioz 092 tee 00 tae =—agotee=to2 as toe 0.9 toe Fuente: Referens (3, pg. 99 38 Para estimar los valores EV, Avell4n (32) propone la siguiente férmula para calcular la evaporacién media anual en mm, equivalente alla tina Tipo A: EV =bP(EL)" 2.3) donde P es la precipitacién media anual en min, EL la elevacién sobre el nivel medio del mar en metros, ya yb coeficientes, que Avellén determina aplicando la férmiula nes evapopluviométricas con registros amplios conocidos. El valor b viene dado por: b =1,426 log P-3,6 24) Elvalor dea oscila entre 0,65y 1, siendolos valo- tes altos para areas semidtidas y los bajos para huimedas. Este iltimo coeficiente puede caicularse por las Ecuaciones 23 2.4 para la estacién evapopluviométrica més cerca- nna al lugar de interés. Avellan elabor6 por este proce- dimiento y con los valores registrados un mapa de isoli- reas de evaporacién que se muestra en la Figura 2.12. La NECESIDADES ¥ DEMANDAS DE AGUA distribucién mensual de estos valores puede hacerse si- guiendo patrones similares a estaciones cercanas con te- gistros suticientemente extensos Entre los métodos basados en temperatura, los que han sido més utilizados en Venezuela son el de Thornth- waite (33) yel Blaney-Criddle (34), particularmente el pri- mer método, que viene expresado en la férmula (zry = 20T (2.5) ETP #161) donde ETP viene en cm y referido a un perfodo de 30 dias; tes el tiempo de claridad de un dia, expresado en unidad de 12 hr; Tes la temperatura media mensual del aire en °C; es el indice de calor, que se obtiene sumando los doce indices correspondientes mensuales, calculados por: ip VS rf y 5 (2.6) finalmente el exponentea viene expresado por: © mancanine SCALA GRARICA Figura 22 Mapa de isolfeas de evaporacién media anual Figura 2.13 Esquema del balane hiroldpico en I planta a= 6,75x107 DP ~2,71x10-°1? + 1,792x10"* 1 + 0,49239 en Laexperiencia venezolana con este método, asi co- mo con cualquier otro basado en temperaturas, indica st inexactitud y en general, no se recomienda su aplicacién (5). Solo seria justificable su empleo ante una escasez absoluta dedatos de evaporaciéno para tener una idea de los rangos probables a nivel preliminar. Conocida la ETP, quees la necesidad de agua de la planta, la determinacién de la demanda neta de riego DNR se hace practicando un balance de agua. Este balance, que se muestra esquematicamente en la Figura 2.13, puede resumirse en las siguientes ecuaciones, establecidas para valores mensuales y en unidades de longitad, generalmente DNR = ETP - ETR 8) donde ETR es la evapotranspiracién real, que viene dada por ETR=PE+S si PE+S(ETP (2.9) 9 ETR = ETP si PE+S)ETP (2.10) donde PE es la precipitacién efectiva y$ es el agua alma- cenada en el subsuelo. No debe confundirse a PEcon el concepto hidro- ligico de precipitacion efectiva, pues él se refiere basica- mente a aquella porcidn de la precipitacién P quese hace disponible a la planta y no al porcentaje de Iluvia que es- cure. Blaney y Criddle (34) han desarrollado una curva que permite calcular PE en funci6n de P, la cual se mues- tra en la Figura 2.14. La bondad de esta curva no ha sido comprobada enel pais,y en algunos casos correspondien- tes a cultivos tupidos en zonas planas, se han encontra- do que los valores de PE son practicamente iguales a P (29p10), aunque sin llegar a conclusiones definitivas. Elvolumen deagua capaz de ser retenido en el sub- suelo $ y que sea aprovechable por la planta, depende de dos factores: la estructura de los suelos y la profundidad de las raices. La primera informaci6n puede ser suminis- TABLA 2.12 CAPACIDAD PROVISIONAL DE ALMACENAJE DE "AGUA EN DIFERENTES COMBINACIONES DE SUELOY VEGETACION* TIPO ZONA CAPACIDAD DE DESUFLO RADICULAR ALMACENAMIENTO S| ‘A Espinacs, arvejas, emolachas, anahoris et ‘Aron Fina oso * Franco Arenoso Fino 080 5 Franco Linoso ose 125 Franco Ais O40 ‘0 Arcllso 028 75 Maz algecntabaco, orale, rano Franco reno Fine 1.00 0 Franco Limes 100 20 Franco Ariloso 080 20 ellos 050 190 Calla, pastosarbustos ‘Avena Fina eo o Franco Arenoso Fino 1.00 10 Franco Limos 125 250 Fanco Arona x00 250 Aran, os? 200 [D.Montes fates Franco Arenoso Fino 187 250 Franco Limoso 150 0 Franco acl 00 20 Arion os 20 Bosquesdesarralados arena Fina 250 280 Franco Arenas Fino 200 30 Francolimoso 200 ‘0 Franco Arclln +60 0 Foente: Releanc @ ae & Figura 214 Presipitacionefetiva segin Blaney y Ceidale 1962 trada por los estudios agrolégicos de clasificacién de tie- rras, y la segunda, por las caracteristicas de cada cultivo en particular. Una estimaci6n preliminar de la capacidad ‘maxima de almacenamiento ($ maximo) se puede obtener NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA para algunos cultivos de la Tabla 2.12 que proviene de Thomthwaite y Mahler (29p26). El US. Departament of Agriculture recomienda que solo el 80% del almacena- ‘miento maximo disponible se suponga realmente apro- vechable por la planta (3677). Avellén (82) construyé un plano de DNR, con C, constantes y en basea los valores de EV de la Figura 2.12, que se muestra en la Figura 2.15, es de una gran utilidad en la estimacién de DNR preliminares; la escala original es de 1:500.000. 4. Eficiencia de riego. Una vez calculadas las DNR es necesario traducir- Jasa demandas brutas de riego DBR. Efectivamente, para que una planta reciba las cantidades apropiadas de agua DNR deben primero captarse las aguas, conducirlas al sistema de riego, distribuirlas dentro de ély, finalmente, aplicarlas alla planta. A lo largo de este camino se pierde parte del agua originalmente captada por miiltiples razo- nes que luego se enumeran. Esta iltima situacidn origina 7 phn Figura 2.15 Map cde oineas de demandes nets de ego nicanaara aL ene: Refoema 28) Boma Cpe Figura 216 Coeficiente de cultvo Ce enel sistema de rego Suala-Tagusiguay que el agua a la salida de la captacién DBR sea siempre mayor que el agua necesaria a la planta DNR; la relacion entre estos dos valores se denomina eficiencia global de riego DNR : Dae en a su vez E, puede expresarse ast E XE, XE, 2.12) donde E, es la eficiencia de aplicacién de riego, F, eficiencia de distribucién del agua en la parcelac lote: es la eficiencia de conduccién del agua, desde la capta- cin hasta la toma de la parcela. Laeficiencia de aplicacién F, depende de muchos factores, entre los cuales merecen destacarse: el método de regadio (riego superficial, de aspersién o goteo), la mo- dalidad de riego (surcos, melgas, etc.), la habilidad y ex- periencia del regante, el tipo de suelos y cultivos, la dis- ponibilidad y costo del agwa (escasa o abundante, barata Co costosa), los voltimenes de agua que se vana manejar, el clima,el viento y la topografia del terreno. Lacficiencia de distribucién en la parcela E, , ade- més de ser influida por varios de los factores antes cita- dos, particularmente el método y modalidad de regadio, lacantidad de agua y el tipo de suelos; oes por el tama- Ro de la parcela y la forma de entrega del agua (entrega continua 0 por turnos). La eficiencia de la conduccién E, esta principal- ‘mente determinada por el tipo de conductos (canales de concretoo tierra y /o tuberias), ylas longitudes de las con- ducciones, asi como por el clima y los tipos de suelos que sustentan las conducciones, cuando éstas son canales ex- cavados en tierra Acestas alturas el lector poco familiarizado como estd conel conjunto de variables que afectan E, le resulta conveniente entrar en un mayor andlisis al respecto; el cual se verd en el Capitulo 14, referido especificamente a riego.Sin embargo, convienedar unos rangos preliminares de valores; estos rangos se dan sobre la base de un trabajo realizado por Lépez (37), el cual resume buena parte de la literatura mundial y venezolana al respecto. Para el riego superficial, es decir, aquel que se realiza por agua fluyendo sobre la superticie del suelo, los valores de, van de 0,30 0,55. Para riego por aspersion, que se aplica mediante tuberias y por distribucidn tipo chorro disperso, Eva de 0,55 20,70. Para goteo, quecorrespondea aquel quéentre- ga] agua mediante tuberias y justo al pie dela planta de 0,80 a 0,90. Existen, adlems, otros sistemas mas elabora- dos donde las eficiencias son superiores a 0,90; son riegos muy localizados de tipo jardin o invernadero, que inclu- so hacen uso del agua evapotranspirada mediante con- densacién. 2 4 g jgura 217 Curva ipeas de produccidn Y productividad un culuvo Antes de terminar conel tema de eficiencia de rie- 0 y usos consuntivos en general, merece la pena hacer dos comentarios; el primero: los célculos de DBR efectua- dos sobre la base de la estimacién de ETP, basados en valores de EV y C, variables, arrojan curvas tipicas de consumo similares a la curva A de la Figura 2.16; sin em- bargo, investigaciones realizadas en los regadios de S tay Taguaiguay en Venezuela (38) arrojan curvas de en- trega de agua similares la curva B de la misma figura. La raz6n principal de la discrepancia radica en que a co- mienzo de la temporada de riego, la eficiencia global, par- ticularmente en su aplicacisn, es muy baja;la explicacién esta quizés en el hecho de que la investigacién fue realizada concultivos estacionales, que al principio tienen una zona radicular muy limitada, incapaz de absorber el agua del subsuelo, con lo cual gran parte de ésta se pierde; puede influir, ademés, la desidia del regante en esos primeros Elsegundo comentario se refiere a la relacién entre elagua aplicada a un cultivo y la productividad, enten- diendo por esto iiltimo al rendimiento econdmico por hec- térea cultivada. La relacién entre entrega de agua y pto- duccién por hectarea tiene, generalmente, la forma indicada en la Figura 2.17; dependiendo la forma final de esta relacién, de la curva de la resistencia del cultivo, tanto ala escasez como al exceso de agua. Usualmente, la entrega ideal de agua (maxima produceién) coincide con la DNR, a su vez igual a la ETR, hipétesis sobre la cual se han calculado tradicionalmente las DNR. Sin embargo, puede suceder que al regante, de acuerdo con los costosdeagua y otros relacionados (inversién, eréditos, compra de ferti- lizantes, mano de obra, etc.) le resulte mas productivo una produccién menor, comose muestraa titulo deejemplo en la figura antes mencionada. NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA ¢. Hipétesis de demandas de riego. Los literales anteriores muestran, como en el caso del abastecimiento al medio urbano, que en el céleulo de Jas demandas de agua para riego existe, también, una bue- na dosis de incertidumbre, acrecentada en el caso de Ve~ nezuela por la carencia de una investigacisn sistemética de usos consuntivos y eficiencias de riego. Para completar el panorama, ademds es necesario tomar en cuenta algu- 1nos puntos adicionales como son: 1) Para el céleulo de las DNR son necesarias un con- junto de variables climatolégicas, por lo general, precipitacién y evaporacién. La ocurrencia cuanti- tativa y cronoldgica tanto de P como EV esta liga- daa la probabilidad de que ellas ocurran en unas magnitudes y secuencias determinadas. Esto im- plica que para tener un conocimiento apropiado de la DNR, es necesario disponer de series suficien- temente largas de esas variables, que garanticen un célculo razonable de las probabilidades de ocu- rrencia. Es usual en Venezuela, que o bien no existen esas series largas 0, peor atin, no haya datos en absoluto, originando esto la necesidad de ir a procesos de generacion estadistica (ver Capitulo 3 al respecto). 2) El desarrollo de un érea de riego, atin en paises con una larga tradicién de regadio, tiene un lento pro- ceso de maduracién sometido a muchas vicisitudes de tipo humano, financieras, sociales y econdmicas, por lo que noes facil predecir razonablemente como va a ocurrir la incorporaci6n de hectareas, ¢ inclu: sive cuales son las proporciones de Sreas sembra~ das de uno otro cultivo, Estoes cierto nosolamen- te en dreas desarrolladas por el Estado, sino tam- bien, enel sector privado. 3) En Venezuela, por otra parte, el desarrollo agricola y por lo tanto la seleccién de cultivos, esta fuer- temente condicionadaa las politicas determinadas porel gobierno de turno, especialmente en materia de precios de los productos agricolas y de los insu- ‘mos correspondientes. Este proceso ocasiona que los agricultores varten los tipos de cultivos con ba tante frecuencia, haciendo que las hipstesis para la determinacién de las DNR cambien. Los puntos anteriores refuerzan la conclusién de tomar un camino similar al ya esbozado en abastecimien- to urbano: distinguir entre los tres tipos de demandas: de reserva, de proyecto y los gastos de disefto. En este sen- tido, se hacen las siguientes recomendaciones: + Lasdemandas de reserva, que seria el volumen pro- ‘medio anual a reservar en las fuentes, pueden cal- cularse con la DBR del afio promedio (Py EV me- 43 TABLA 2.13 -EJEMPLO22 ESTACION SAN JOSE DE GUARIBE, ESTADO GUARICO. TOTALES MENSUALES Y ANUALES DE EVAPORACION MES ARO. MAK MAY ocr, Dic TOTAL =o eae 1590 190 toe ‘ne tae teat tone a 7 od 8 Pano & ‘soo our e ma tao the jaa & ire Fos tase 10s eter Bar for tse 1608 tease & Bu ter ann Yee ter &% eo Hsp aed ra ra ‘339 Bone & as jess sz eo tao io tise mo ima zai) Ban is ss. hiss Pee Hiss Te Bee aia ieee tee wa twa oa we ra iia tos tei? jis Baas Boomer ey Rot Hoa tm ‘es We Bite Ho ma we os os 2a ah jos Beant ios te eae Bro ane tz ier Boao is ag oa ts at tas ime Zoe feos Mey aaa Bay tae tase mo Bua? Bot ia as Baa tase ier eat tes Baas oa jane fae ees ie see ws mea mee @ ier aor tes ier tee tma2 tat 2s Mic tes 1b bang sao? tags tape TO tan ta we Eis lone MARIN Dies ponte aera eet del antec dias) y concoeficientes de cultivos constantes,cuan- dono haya conocimiento previo de los tipos de cul- tivos,o con los més consumidores deagua. Las demandas de proyecto, es decir, las asignables alas diferentes obras que conforman el sistema de riego; deben estimarse tomando como base el ano misdesfavorable, dentro de un riegoaceptable (ver Capitulo 4), calculado éste sobre la base de un largo periodio, con valores de C, variables de acuerdo a los cultivos y las dreas cubiertas pot cada obra 0 etapa. * Los gastos de diseito, calculados sobre la base del _mes mas desfavorable del largo periodo, en forma similaral anterior, de acuerdo ala forma deentrega del agua, para Jo cuat se refiere al lector al Capitulo 14, ElEjemplo 22. ilustra sobre lo tratado en este apar- tey muestra como,al contrario del abastecimiento urbano ‘cuya curva tipica de consumo anual es casi constante, la curva representativa de entregas anuales de riego tiene ‘una marcada variacién, con la mayor parte del volumen consumido concentrado en los meses C0. TABLA 214 - EMPLO 22 ESTACION SAN JOSE DE GUARIBE, ESTADO GUARICO. TOTALES MENSUALES Y ANUALES DE PRECIPITACION mim MES ‘aNO ENE FEN MAR ABR Set OGF NOW TOTAL rn ee wos 18 wo oa. fis poke ae woo 1200 some & 82 oo ae 39 io ‘20 ea & ie 02 te 43 a8 00 fers Pe nt sae "Se tore % ae tea “8 tas wea tos & 30 SF war re wae @ 2 2 ss se me m3 pr ee 8 or Res @ ‘SF os Bo Sop ea ee be me 83 8 ar 8 ee ee Sea m3 83 22 ea reo ee ar 78 fea mB 3 83 te “Se aro 78 ea mu 0D me 13 oo ae Ea B33 Tyga So Mee et oH m 08 me tsa 3 ie ot m3 hae‘ 1a ‘af fate % 99 th faa a er er % 08 afar a 32 eo m ‘33 fo oo ‘Go 30 a ees MED 72 $4 ak mar oe esa “learn prea Fiene MARNIE Dinvin pol deinkrmacin eset et niente 4 NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA. TABLA 215- EJEMPLO22 DEMANDAS NETASDE RIEGO DE ESTACION SAN JOSE DE GUARIBE, ESTADO GUARICO aNO MES EV GETP POPES. 2 ER RNs Wes EET SEER] SERN REY oR = Wes 7272 (19507 eta Si Sa m8 Saas Nisa 22 38 fmaa 8a 28 tao A ioe ws 7S sen 9887 Nise mo | oa 0s 1 tos wea 0 Bost } ts30 isi $80) oS Sh A iste e710 Go ncoo288 Stans tar "mo as) ose 2a ota wei 79a) OB S isa @2 0 73 09 wo ara Det aes coe) tos 06 TOTAL ara 53 Toss: ‘Now lpnimeros ene ova) ongavos Caton dt Ejemplo 2, Seexplica a continuacién el proceso de célculo; rfirign- En la zona noroeste del Estado Guarico de Venezuela cerca de la poblacisn de San José de Guaribe, se quiere hacer un desarrollo de 1.000 ha bajo riego, en un perfo- do de cinco afos y a unas 200 ha por af. En las cercanias del drea existe la estacin evapopluvio- métrica del mismo nombre de la poblacién antes mencionada, ‘cuyos datos de pluviometria y evaporacién (Tina Tipo A) se smuestran en las Tablas 2.13 y 2.14. A fines de simplicidad del ejemplo se acepta al periodo de registros de 1960-1980, como representativo de largo plazo. La DNR para caleular la demanda de reserva puede estimarse con base en los valores mensuales promedios y tun coeficiente constante, que se adapta conservadoramente en 0,80, El célculo del balance se muestra en la Tabla 2.15, donde se han. aceptado para PE, los valores de la Figura 2.14 y para S mé- xima una cifra de 100 mm. dose a la numeracién de las eotumnas: (1) Ano a que corresponde el célculo, en este caso el afio promedio. 2) Mes del afo. (3) Valores promedios mensuales de evaporacién EV en um, tomado de la Tabla 2.13. ) C,cocficiente de cultivo, constante e igual a8, porque no se tiene conocimiento previo del tipo de cultivos. (8) ETP en mm, calculado al multiplicar la Columna (3) por laa). (6) Valores promedios mensuales de precipitacién en mm, tomados de la Tabla 2.14. (7) Valores dela precipitacién efectiva en mm,calculados dela curva dela Figura 2.14. TABLA 216- EJEMPLO22 DEMANDASNETASDE RIEGO DE ESTACION SAN JOSE DE GUARIBE, ESTADO GUARICO ‘NO MES Gm P AREER «ART NRE SREECAO] F ia a te M28 a0 oD yas 76 13 1 ioe Onn aaa PE S FIR DNR 7 aT 2 2 0o mo tak) 28o fo 2s bo Seo ore >on? ee Boo sar ao (8) Cambio mensual de almacenamiento en el subsuelo AS enmm, calculado al restar lacolumna (7) de la (5). Ntese que todas dan negativas para el caso planteado, lo cual significaria extraccidn de agua del subsuelo. (9) Almacenamiento § en el subsuefo en mm, es la suma acumulada algebraica de AS con un maximo positivo de 100 mm. Cuando la suma da negativa, no tiene sentidg isi y significa que no hay agua en el subsuelo. (10) Evapotranspiracién real ETR en mm, calculada por las Ecuaciones 2.9 y 2.10, teniendo cuidado de usar el valor de $ del mes inmediato anterior. En este caso particular, todos los valores de $ son cero y siempre se aplica la Ecuacién 29, por Io que ETR es igual a PE (Columna 7). (11) La demanda neta de riego DNR en mm, se calcula por la Ecuacién 2.8; (Columna (6) menos Columna (10). El valor promedio anual de DNR resulta ser de 1.048 ‘mun. Si se supone riego superficial y se acepta una eficiencia global de 0,50, la demanda druta de riego seria de 2.096 mm anuales en promedio; en consecuencia, la demanda o volumen areservar para 1.000 ha seria de 21 millones de m’. Notese que siel riego fuese por aspersiGn (E,estimado en 0,65) 0 por goteo (E, en 085), los voluimenes de agua a reservar serian de 16 y 125millones de m* respectivamente, o que sefala la importancia del método de riego en el ahorro de agua, Suponiendo que un solo canal alimentase al primer lote cde 200 ha, se calcularfa su demanda de proyecto de acuerdo a los Py EV del ano més desfavorable, dentro de un riesgo a- ceptable, pero con los coeficientes de cultivos pertinentes. En este iltimo sentido, supéngase que en ese lote se va a sembrar ‘matz.en mayo para cosecharlo en agosto (4 meses de gestacién) ¥ caraotas en noviembre para recoger la cosecha en enero (3 ‘meses de gestacién). El afio mds desfavorable se determina calculando todos los ats del registro representativo de P y EV, y haciendo un cilculo de probabilidades con un riesgo aceptable, por ejemplo, de 20%, es decir, que dos de cada diez anos la demanda puede ser mayor, obligando a un racionamiento, El ao en cuestin resulta ser 1978 (no se indican estos cAlculos en el ejemplo) ya {le refieren los célculos correspondiente. La Tabla 2.10 muestra los valores de C, de acuerdo all ‘porcentaje de crecimiento. En el caso del maiz, el 100% del cre- cimiento ocurre en 4 moses (25% cada mes), con lo cual arroja promedios de 0,37;0,76;0,88 y 0,60 para cada mes y para elcaso de las caraotas, para los tres meses Serian: 040;0,87 y 0,52. Para Jos meses de septiembre, octubre, febrero, marzo y abril, en los cuales no hay cultivos se supone un valor de0,20, puesla yerba wotra vegetacién esponténea van a consumis agua, que afecta clalmacenamiento. La Tabla2.12 indica los maximos valores de S posibles. Aceptanda, de acuerdo con la informacién de tierras disponibles, un suelo franco-arclloso, 10s méximos serian de 200 mmm para el matz y de 100 mm para las caraotas. Los cél- culos de los valores de DNR, se muestran en la Tabla 2.16, siguiendo un procedimiento igual a la Tabla 2.15. 5 Los resultados indican una cifra de 368 mm de DNR anual, con apenas un 35% de fa DNR de reserva; claro esté que se han usado cultivos de poco consumo de agua; por ejemplo, los citricos, (cultivo permanente C, promedio de 0,90), arroja- ian valores muy superiores. Siellote de 200 ha vaa ser cultivado de la forma indica da (maiz - caraota), el volumen 9 demanda promedio anual seria de unos 1,5 millones de m?, para una eficiencia global de 0,50. Se hace hincapié en que este volumen reducido a gasto continuo (48 Ips) noes el gasto de disenio del canal de alimenta- i6n, pues el riego puede no ser continuo, por ejemplo: s6lo 12 hr. Ademds habrfa que seleccionar el mes més desfavorable, que seria el mes de julio (Tabla 2.16), Como conclusién final del ejemplo, ademds de la evi denciada por fa influencia de los cultivos seleccionados, hay que sefialar que, para cada ano de registro y para cada mes, cexistiré un valor diferente de DNR, lo que arroja demandas variables en el tiempo, a diferencia de las demandas urbanas, 2.3 HiproztecrRicipan. La estimaciGn de las demandas deagua correspon- dientes a la generacién de energia eléctrica (hidroelec- tticidad) deben completarse dentro de un panorama més amplio: la produccidn de energia eléctrica; Ja cual, a su vez, esté en un marco de referencia todavia mayor, la problematica energética, Con el propésito de tener una idea generat sobre el referido marco, se incluye a con- tinuacién, en forma resumida, un esboz0 sobre el tema, encuadrado éste en la problemética venezolana. a. Fl sector energia. La Figura 2.18 muestra en forma esquemética las diferentes vinculaciones existentes dentro del sector energia y la ubicacién que la generacién de hidroelectrici- dad tiene dentro de él. Elesquema tiene tres grandes par- tes o columnas que representan: las fuentes primarias que son las disponibilidades primarias de energfa existentes en la naturaleza; las fuentes secundarias, representadas por las que se originan al transformar las primarias, ha- ciéndolas asf disponibles para ser consumidas; y los sectores de consumo final, es decir, el destino final de la energia. Dentro de las tres grandes divisiones anteriores, no toda la energia de fuente primaria debe ser primero trans- formada en fuente secundaria para poder ser consumida y, ademés, no todo el consumo ocurre en la tetcera ‘categoria, pues los procesos de extraccién y produccién en las dos primeras requieren de energia para su materializacién. El esquema de la Figura 2.18 tampoco sefiala un renglén de consumo muy importante, que se origina en el hecho de que para lograr las vinculaciones 46 NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA. ] [ seronsecommeo nA Proamnnres coe “0 Figure 218 Esquera de vincutciones del sector energia sefaladas, se ocasionan pérdidas que podrian definirse como la diferencia entre la energfa total extrafda de las fuentes primarias y el consumo total correspondiente. El esquema no es exhaustive y no indica vinculaciones no energéticas. Las fuentes primarias pueden clasificarse en: con- vencionales: petrdleo, gas natural, carbén e hidroenergia y no convencionales, donde destaca la energia nuclear y lun conjunto adicional, todavia muy poco desarrollado. En Venezuela (39p25), la participacidn de las fuentes pri- mariasen el consumo interno para 1977 era -expresado en ppetajoules (P))-de 685,5 PJ para el petréleo; 17,6 PJ de car- én mineral y lea; 506 Pf de gas natural y 150,2 PJ- de hidroenergfa, lo cual arroja un total de 1.359,3 PJ. El consumo final de la cantidad anterior estaba re- partido asf: sector energia 575,0 PJ dentro de los cuales 201,6 correspondian al consumo para generaciGn de ener- ia eléctrica; 331,7 PJ al resto del sector industrial, 0,2 PJ a Ta agricultura y 96,5 PJ al uso residencial, comercial y pti- ico. En ninguna de las cifras dadas anteriormente se incluyen las pérdidas de energia. Notese que la participacion de la hidroenengia pa- ra 1977 era de un 11% y que al petréleo le corresponde un 50% y al gas el 37%, el carbéa y la lena solo contribuian con el 2% aproximadamente. Estas cifras no toman en cuenta las exportaciones de hidrocarburos. Un petajoule (Pj) son 10* joules (1 joule es 0,102 kgm 6 2.778x10* Watios-hora). Otras unidades comunes demedida de energia son el Gigawatios-hora (GWh) igual 10° kilowatios-hora (kWh), la tonelada equivalente de petréleo (TEP) y el barril equivalente de petréleo (BEP). La equivalencia entre ellas es la siguiente: UNIDAD Py GwWho TEP BED vy = 2,78 107 2,22x20¢ wait) 0,36x10 8,06x10" ‘TEP 4ABKI0 1,24x10 : Ber. A410 1,79K10" 44x10" (1) Los, sereferenaG debe mulipicarpor2,8(35%ide efisenia de converse), ih ssundavos par tasadarlos aGWh primarios se A efecto de las cifras anteriores, el término hidro- energia que se ha venido utilizando es sindnimo de hidro- electricidad, sin embargo, la hidroenergia tiene un émbi- tomas amplio que el segundo término empleado y es por ello que se ha incluido la vinculacién 23 en la Figura 2.18, que establece un nexo entre ese tipo de fuente pri- maria y sectores ce consumo final, especialmente el sector transporte; pues, atunque no se computa dentro del sector, esindudable que la energia del agua (cinética y potencial) se consume o usa dentro de cualquier operacién que transporte agua o para movilizar ciertas materias en "7 = << a a ene Mic OR — as eae fame] +. rane] +. A > doesn cn ent pn 962 in Esquema de industrias, y no solamente para generar energfa eléctrica; eroa efectos de este capitulo, es en la forma de energia eléctricacomo se emplea el término. La transformacién de las fuentes primarias en ener- gia eléctrica se hace a través de dos procesos generales: el térmico y el hidroeléctrico. Fl primero consiste en hacer uso de los combustibles s6lidas y Ifquidos provenientes del carbén 0 del petrdleo o bien del gas, para transfor- marlos en energia térmica y generar electricidad; el se- gundo es la conversién de la energia cinética y potencial del agua en energia mecénica y ésta, asu vez,en eléctrica, Elprimer proceso hace uso dé fuentes primarias no reno- vables, mientras que con el segundo ocurre lo contrario. La Figura 2.19 (40) representa al sub-sector electricidad en forma esquemética;sigue una forma similar ala empleada enla referencia seftalada Para el afio 1977 (41p4), la electricidad s6lo repre- sentaba el 7,5% del consumo final de energia;es decir, del total de energfa consumida sélo ese porcentaje era suplido ‘mediante energia eléctrica, el 57,3% lo era de derivados del petréleo, e133,7% del gas natural y el 1,5% del carbén. Dentro del 7,5% (41p3) senalado, el 46,8% provenia de ‘generaciGn eléctrica térmica y 53,2% de hidroelectricidad. La Figura 2.20 representa esqueméticamente la situacién cenergética del pais para el referido afio 1977. El cambio de la situacién del mercado petrolero mundial y nacional acontecido a partir de 1982, ha afec- tado apreciablemente las cifras anteriores, lo cual se ha visto reforzado por la incorporacién en 1986 de las segun- a 219 sector eléetico day tercera etapa del desarrollo hidroeléctrico del Caroni (Guri), que indudablemente ha dado un gran impulso a este tipo de generacién en Venezuela b. Necesidades de generacién de energia hidroeléctrica. La Figura 2.21 representa, resumida y esqueméti- camente, el proceso general de determinacién delos reque- tos de hidroelectricidad. Igual que en la estimacién de las necesidades de agua al medio urbano o para riego, se hace necesario establecer hipstesis de crecimiento. ‘go nr Frente Refers) Figura 220 Distribucion porcenual de consumo de evergi, Vencaucla ano 1977 7 NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA. ra: ES jeeacicos ef fawn eens "acEsDADES| wecrac sei) Figura 221 [Exquema de estmacidn dels necesidades de generac itocterca En el caso de las necesidades de energia, las dos variables determinantes, a nivel nacional, son el creci- miento del producto territorial bruto (PTB) y de la pobla- cidn (42) (49). La variacién con el PTB ha sido compro- badaen Venezuela (trabajos realizados porel Ing, Rodolfo Telleria V.), como puede verse en la Figura 2.22; de cuya observacidn se desprende que la correlacién entre energia consumida y crecimiento econdmico es atin mas concor- dante cuando se excluye la energia consumida por la industria petrolera, La correlacién sefialada puede ser al- ternada al implantarse programas destinados a disminuit el consumo energético. Para comenzar el proceso, se deben formular una ‘més hipotesis razonables de crecimiento (Recuadro N°2, Figura 2.21). En este sentido, es importante la definicién de una politica energética, particularmente en Venezuela, donde la mayor parte de las divisas atin provienen de la exportacién de petréleo, lo cual significa que el consumo interno puede afectar la capacidad de exportacién y, en consecuencia, de generacign de divisas. El planificador hidréulico juega un papel impor- tante en las actividades sefaladas en los Recuadros N° 8, 15, 16y 17, pueses factor indispensable en la estimacién dela oferta de hidroelectricidad. El Recuadro N"15 se refierea la reparticién o asig- nacin de las cantidades de generacién correspandienies plantas érmicas o hidroeléctrcas. En principio, estaasi Fee: Meri el a Ca Yoel Breer Figura 2.22 ‘Crecisent hisirca del consumo de energy el, Provleto terol bruto (PTB) en Venezvel2 ako at Ren lI Robt Estimaciones de demand total de energie Por Tucntes primaries en Venezuela naciGn esta condicionada por criterios econémicos; es de- cir, el menor o mayor costo de generacién, pero deben a- demas tomarse en cuenta dos factores adicionales impor- tantes: * Lahidroelectricidad no requiere del uso de combus- tibles, es decir, no compite directamente con la ge- neraciGn de divisas petroleras (politica energética). Laconstruccién de plantas hidroeiéctricas supone el financiamiento de un componente extranjero y, por lo tanto, salen divisas indirectamerte. + Lahidroenergia es un recurso inagotable, aunque limitado y n0 contaminante; al contrario de los consumos de combustibles de las plantas térmicas. Antiguamente, laasignacién entre térmica o hidro- eléctrica era de tipo excluyente, pero hoy en dia, con las nuevas facilidades de transmision, se han desarrollado los sistemas interconectados, que son alimentados con- juntamente por plantas térmicase hidroeléctricas. Por otra parte, este tipo de sistema, como se veré en el Literal c., posee ventajas importantes de operacisn. Bjemplo deeste tipo de sistema es el existente para la regién central del pais, entre CADAFE y la C.A. Electricidad de Caracas (CALEC) (ambas térmicas) y EDELCA (hidroeléctrica). La Figura 2.23 presenta estimaciones futuras de consumo de energia de fuentes primarias (Ver Referencia (39) y estimaciones realizadas por el Ing. Rodolfo Telleria 9 V)). Las estimaciones de la figura estén hechas basadas en dos hipétesis de crecimiento. La hipétesisa) supone un crecintiento lento (PTB 3,7%, PoblaciGn 2,6%) y lab), uno répido (PTB 6,5% Poblacién 2,6%). Para la hipstesis bj la participacién de la hidroenergia pasaria de un 14,2% en 1978 a un 21,3% en el afio 2000, y la del petréleo, lo aria de un 44,2% a un 58% en el mismo periodo: Para la hipétesis a) -crecimiento lento- los porcentajes en el ato 2000 serfan de 27,6% y 43,1% respectivamente. En Venezuela durante cinco afios (1979-1983) el crecimiento del PTB fue cercano a 0%, lo que indica que estos célculos son probablemente conservadores. En cuanto se refiere a fuentes secundarias, existen estimaciones hechas por el Ministerio de Energia y Minas (MEM) (41p9) y por la empresa EDELCA (no publicadas), que se representan en la Figura 2.24a. La misma figura indica en su parte b las demandas de potencia instalada requeridas para cumplir los requerimientos de generacién. z a a g 7 = i-t+— i ofl 00.050, i ba me Roem yma eEDELCA Figura 224 [Enimaciones de demangas de encrpseléctica en Venezuela re: sae Rat Teer, Figura 228 Pantipacin de fuentes primaras en la produce de eleciicidad en Venera Es importante sentalar que la relacién entre la ener gia requerida ER y la demanda de potencia instalada DP viene dada por la formula. __ER x1.000 e 2.13) FC x 8,760 dondeDP se expresa en millares de watios 0 megawatios (MW) yER enGWh; FCesel factor de carga que representa larelacién entre laER y la DP necesaria para su generacién (ver Literal c). En ambas curvas dela Figura 2.24b se adopts un valor de FC del orden de 0,70. La Figura 2.25 (recopilaciones de R. Telleria V.) muestra la participacién histérica de las fuentes prima- ras de energfa en la generacién de energia eléctrica en Venezuela; los combustibles liquidos (gas oil y residua- les) contribuian para 1964 en un 10,8% aproximadamen- te el gas natural lo hacia con 67,5% y la hidroenergia con €121,7%, para 1979 estas cifras se habfan transformado en 24.2%, 25.5% y 503% respectivamente. El notorio aumento dela generaci6n hidroeléctrica se debié a la incorporat de los aprovechamientos del rio Caran, Estado Bolivar. Noexisten proyecciones muy lejanas hacia el futuro (Ver Literal ¢) para capacidad instalada, pero la politica ener- gética nacional indica que cada vez mas se debe apro- vechar la oferta de hidroenergia que tenga el pais, por las razones expuestas al comentar anteriormente este tema. Adicionalmente, también se ira incorporando el carbén mineral (combustibles s6lidos) como fuente primaria para generacién de energia eléctrica térmica, ademas de estat en consideracién el andlisis de la energfa nuclear y solar, NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA ambas a nivel experimental, en lo que se refiere a Vene- zuela, Nuevamente, se llama la atencién en el sentido de que las cifras anteriores han sufrido cambios importantes de acuerdo con Jos acontecienientos al presente. ¢.Capacidad instalada. Los requerimientos de energia elétrica, tanto de ori- gen térmico como hidroenergético, deben ser traducidosa capacidad instalada, que ¢s la suma de las potencias de las diferentes instalaciones generadotas; para determinar esa capacidad, se hace necesario conocer la llamada curva diaria de carga, que representa la variacién horaria de la demanda, es decir, la forma cronol6gica como se consume diariamente [a energia a nivel de usuario. Las curvas de la Figura 2.26 representan variacio- nes tfpicas: la primera para el caso de una ciudad grande como Caracas, con fuerte consumo industrial, que presenta variaciones ciclicas de noche a dia; la segunda, co- rresponde a Maracaibo, curva més Ilana, debido al alto consumo por aire acondicionado durante la noche; y la tercera para la regién de los Llanos Occidentales, tipica regidn rural agricola, sin grandes concentraciones urba- nas, que induzcan grandes consumes. La capacidad del sistema abastecedor de electrici- dad de una determinada localidad o regién, debe ser tal que pueda suplir el consumo pico o maximo, sefialado porlacurva de carga respectiva, Lacurva dela relacién entre esa carga maxima CM y la promedio del dia, es lo que se denomina factor de carga FC, al cual se ha hecho referencia anteriormente. El 4rea debajo de la curva ‘SSTEMA OCCIDENTAL CADAFE Figura 2.26 CCurvas porcentsis pies de carga (ala labaabie) representa el consumo diario de energia ERD, por lo que elvalorde FC puede expresarse ast ERD FO= 34 CM ea donde ERD se expresa en KWh y CM en KW. Cuanto menor sea el valorde FC, mayor sera la ne- cesidad de capacidad instalada y, en consecuencia, la ocio~ sidad de las instalaciones generadoras correspondientes, cs decir, bajarén su utilizacién o capacidad plena, y porlo tanto, st eficiencia, Efectivamente, durante gran partedel dia operardn las unidades gerteradoras muy por debajo de su capacidad. En este sentido, la interconexién de plantas térmicas e hidroeléctricas es conveniente, pues las, plantas térmicas no se adaptan con facilidad a variaciones relativamente repentinas del consumo, ya que su proceso de generacién requiere de un tiempo para transformar la energia primaria en secundaria;_o contrario sucede conla planta hidroeléctrica, donde el tiempo de adaptacién s6lo esta condicionado al tiempo de estabilizacién del flujo al abrir 0 cerrar Ilaves, 0 sea, que salvo que las unidades generadoras se encuentrent muy alejadas de la fuente de agua, la respuesta es cast instanténea. Las plantas térmicas necesitan un proceso de calentamiento de calderas queno es violento; por lo general, se requieren al menos 30 min, Enuna hidroeléctrica el tiempo de respuesta se cuenta en segundos y, rara vez, es mds de 3.64 min, Por otra parte, las plantas hidroeléctricas, cuando no puede darseles suficiente capacidad al embalse regu- lador respectivo 0 éste no existe, pueden (ener limita ciones de generacién durante los perfodos de baja esco- rentta, Estas dos circunstancias permiten acoplar plan- tas térmicas e hidroeléctricas de la forma indicada en la Figura 2.27, logrando una mayor eficiencia del sistema. En la época himeda, la planta hidroeléctrica [lena la pro- duccion de base y la térmica la de punta, situacién que se invierte en sequia. Claro esté que esta relacién depende nase MDROELECTAICA 2)8Ase TRIGA an imienioe de acuerdo ‘atipos dle gencracin de clectildad 51 mucho de la potencia garantizada en la planta hidroeléc- trica, 0 sea, fa potencia generada en las condiciones mas desfavorables. En Venezuela existen casos donde la ge- neracién hidroeléctrica puede cumplit con la generacién de base casi todoel tiempo, tal como la planta de Gurien el rio Caront, pues su embalse tiene suficiente capacidad de regulacién, La determinacién de las capacidades instaladas re- quiere del conocimiento de la curva de carga mas desfa- vorable a ser servida por el sistema interconectado y que ‘sta, en principio, pueda ser suplida por las instalaciones. generadoras en su condicién, también més desfavorable. En una planta hidroeléctrica, tal condicién serfa por ejemplo, el embalse a cota minima y en temporada de sequia. En la practica, como se veré en el Capitulo 15, pue- deaceptarse un riesgo establecido de forma que nocause datos inaceptables. Te6ricamente, la capacidad instalada de un siste- ma determinado debe acoplarse ala cutva de crecimiento de ia demanda respectiva. Por ejemplo, a nivel nacional la capacidad instalada total de Venezuela deberia aparen- temente ajustarse a las curvas de la Figura 2.24b, debi- damente actualizadas. En la practica, esto no sucede por los siguientes motivos: a incorporacién de unidades ge- neradoras produce escalones, y lo mas importante es que no puede garantizarse una utilizaciGn 0 disponibidad de os equipos el 100% del tiempo, debido al mantenimiento yy allas fallas de los equipos de generacién, transmisisn y distribucidn, Lo anierior lleva a la necesidad de disponer siempre de una capacidad adicional minima de reserva, rnormalmente un 25% al menos. De acuerdo con lo anterior, la capacidad instalada requerida CIR se puede calculaca través de la siguiente formula: 1.000 ERy 4 FC, donde CIR viene expresada en MW, ERen GWh.FS esel factor de segucidad (1,25 minimo) y el subindice d co- rrespondiente al dia mas desfavorable, que debe fijarse a- ceptando un riesgo calculado. Las necesidades de CIR se distribuirén entre térmico e hidroeléctrico, de acuercio a consideraciones econdmicas, de oferta de cada tipo de ge- neracién y a la politica energética respectiva CIR =FS 15) A comienzos de los afos 70, COPLANARH (22p24) realiz6 un inventario del potencial hidroelécteico bruto de Venezuela y en otro trabajo mas reciente del MARNR (44) se hace una evaluacién del potencial neto (la Tabla 2.17 resume estos iltimos resultados). Este po- tencial neto serfa de unos 44,000 MW y la energia corres- pondiente legaria a unos 259,000 GWh, cifra equivatente a unos 1.400.000 BEP por dia de energia primaria, La tabla 52 NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA TABLA 2.17 - OFERTA CONOCIDA DE GENERACION HIDROELECTRICA EN VENEZUELA REGION POTENCIA, ENERGIA GENERADA MW Gun (CAPACIDAD INSTALADY: [A INVENTARIADOPOR INIITEF-MARNR ERIJA, Estado Zli> LOS ANDES, Estados Tichira, és y Trujillo GUAYANA, Extados Boliaey Amazonse SUBTOTAL BINVENTARIADO ANTES DE. gNITEF LOS ANDES, Estados Thien, Mid, Teyjilo Bina y Portagussa GUAYANA, Ertados Bolivar y Amazonas ‘OTROS SUBTOTAL Tora, 200 1310 m0 4350 18090 m0 wasn 120780 197 70% 2480 noavo 2 10 24500 127310 wm 355090 Fuente: Refetenca (4) *Supone ot FE de 075 Enfuncionanent 240 MW (Ry Santo Domingo) ‘Em fancionamiento 240 MW (Rip Caroni- Gare fe, Epa) retine proyectos construtidos, en construccitn yen diversas etapas de estudio, algunos tinicamente de tipo muy preliminar, como los del rfo Orinoco; raz6n por la cual las cifras deben aceptarse con reserva, pero, son indicativas de que existe en Venezuela un potencial hidroeléctrico realmente significativo. Es oportuno hacer notar que el inventario realiza- do por el MARNR se llevé2.cabo considerando cada po- sible aprovechamiento aisladamente; es decir, sin tomar en cuenta el encaje de cada aprovechamiento dentro de sistemas interconectados para cubrir determinados mer- cados, es decir, esos aprovechamientos representan una posibilidad fisica pero no necesariamente real. Por otra parte, en el mundo se ha venido desarro- ando en las iiltimas décadas los llamados sistema de bombeo-almacenamiento (pumped storage} que consisten en elevar agua con la energia térmica disponible en las horas de bajo consumo para generar hidroclectricidad en lashoras pico (energia de puntas). Este tipo de facilidades ha sido considerada en Venezuela anivel deanteproyecto para la Compaiiia Andnima La Electricidad de Caracas (CALEC) (51), y es indudable que ellas podrian contribuir a hacer tos sistemas interconectados mas eficientes, Las demandas de agua correspondientesa la gene- raci6n hidroeléctrica no pueden cuantificarse previamente a la definicién, a! menos preliminar, del proyecto 0 proyectos correpondientes como en los dos casos anteriores (abastecimiento urbano y riego), por cuanto ellas no son solamente funciéin de fa energia requerida, sino también de ia disponible que se estima mediante la fSrmula: PT =9,81x10"n Qy AH (2.16) donde PTes i potencia generada en kW, correspondiente aun gasto turbinadoQ enm?/seg ya una diferencia dela energia por unidad de peso disponible, AH en metros an- tes y después de las unidades generadoras; es la eficiencia de dichas unidades y y el peso especifico del agua enkg/t” Como Qes el gasto en un momento dado y AH la hidroenergfa por unidad de peso consumida, también en tun momento dado, la energia total generada EG durante un periodot seré: pr at=9,81/nQy aH dt 0 ° EG= 2.17) Por lo general, es suficientemente preciso expresar la ecuaci6n anterior asi: FG, =9,8129, 2, AH, 2.18) donde el subindiced se refiere a valor diario yelp a pro- mediohorario. El valor de EG, vendria expresadoen kWh. Este valor EG es, con sus variaciones horarias, el que realmente determina e! valor del gasto medio horario a turbinarde acuerdo a Q, y en consecuencia, los voliime~ nes horarios de agua demandados, de cuya sumatoria se obtendran los vohimenes anuales requeridos, Notese que los valores de EG pueden no ser iguales a los de energia requerida ER, por cuanto existen un conjunto de pérdi- dasen transformacién, transntisiGn y distribucién. 2.4 OTROS USOS DE APROVECHAMIENTO. Los tres usos considerados en los apartes anterio- res; abastecimiento urbano, riego e hidroelectricidad son -en Venezuela- los que demandan mayores voliimenes de agua, particularmente los dos primeros que son usos consuntivos. Adicionalmente, quedarfan por considerar tres usos de aprovechamiento adicionales -navegaci6n, recreaciGn y uso ecoldgico- que no han merecido, hasta el presente, mayor atencién en Venezuela, a. Navegacién, Las necesidades de navegacién fluvial y lacustre deben analizarse dentro del sector transporte, como una via alternativa o complementaria al transporte por carre- tera, por ferrocarril y aéreo. En Venezuela, la navegacién fluvial y lacustre han sido basicamente inducidas por ra- zones muy concretas en dos rutas muy definidas. La pri- ‘mera, en la entrada al Lago de Maracaibo para transporte de petréleo; y la segunda, en el rio Orinoco, desde Puerto Ordaz hacia el Océano Atléntico, para el acarreo de mine- ral de hierro y, mas reciente, de aluminio; en el resto del pais no existe ningiin tipo de navegaciGn que tenga sig- nificacién apreciable. Elandlisis de la factibilidad técnica y econdmica de un proyecto denavegacién, requiere informacién relativa a muchos aspectos, entre los cuales merece destacar los siguientes (es el mismo tipo de informacidn general quese requiere para cualquier medio de transporte): © Elmimero de personas que se vaa transportar. + Eltipoy cantidad de mercancias que han de trans- portarse. + Blorigen y destino del transporte. Estos tres factores, al ser considerados conjunta- mente con las caracteristicas de las vias fluviales o lacus- tres donde se pretende realizar el transporte, permiten la definicién del tipo de embarcacién necesaria y las mejoras -si fuesen necesarias- que deben realizarse en la co- rrespondiente via acudtica, Estas mejoras se refieren prin- cipalmente a obras hidréulicas para garantizar: + Calados, es decir, profundidades minimas. * Anchos necesarios. + Alineamientos. * Velocidades maximasadmisibles. * Facilidades portuarias, Las demandas de agua impuestas por la navega- cién se van a referir més a profundidades que a voltime- nes o gastos, y, adicionalmente, a las condiciones geomé- tricas de las vias involucradas. Las demandas vendrén, en consecuencia, expresadas en acciones necesarias para lograr esas profundidades minimas y ampliar o rectificar los cauices de los rios. Las profundidades minimas pueden serlogradas por aumento de as cantidades de agua (gastos de rio), por represamiento de las aguas 0 por profun- dizacién de los cauces. En Venezuela no existe ningtin estudio completo sobre las necesidades actuales y futuras de navegacién. Un anilisis rapido de la hidrografia venezolana lleva a ‘una conclusién casi obvia: en el pais, solamente el rio Ori- noco y quizas el Apure ofrecen posibilidades importantes, de navegacién; sin embargo, las circunstancias actuales - falta de informacién y poco desarrollo en las riberas de los rfos- permite presuponer que a corto plazo, no habré demandas generalizadas sobre este uso. EIMARNR ha venido propulsando los estudios del Mamado Fje Fluvial Orinoco-Apure dentro de un contexto més amplio que incluye la reordenacién del Territorio. Nacional. Por otra parte, la explotacién de la bauxita en Los Pijiguaos (lugar situado al suroeste de Ciudad Bo- livar y aguas arriba del Orinoco), ha permitido la utili- zacién del rio citado para transporte del mineral hasta Puerto Ordaz. b.Recreacién. Las necesidades de aprovechamiento hidréulico con fines recreativos no han sido determinadas, ni se han fijado procedimientos espectficos para lograrlo;s6lo exis- tennormas sanitarias sobre calidad de las aguas para uso recreativo. Las razones que han ocasionado esta situa- ci6n radican en que este uso ha surgido, usualmente, co- mo hecho secundario de otro uso, por ejemplo, la utili- zacién de un embalse con fines de navegacién deportiva o como balneario. Pueden existir situaciones donde el uso recreativo juegue un papel determinante. Elsaneamiento y aplicacién de los pantanos de Disney World en el Esta- do de Florida en los EF. UU. son un buen ejemplo. En Ve- nezuela el desarrollo turistico de CAZTOR en Puerto La Cruz, Estado Anzodtegui, es también, indicativo al res- pecto. En lineas generales, las necesidades recreativas re- ferentes al agua se traducirén, dependiendo del tipo de variacién,en uno o varios de los siguientes requerimientos: + Condiciones minimas de calidad de las aguas. ‘+ Extensiones de agua requeridas. ‘* Profundidades requeridas. ‘* Velocidades maximas aceptables. Dentro del aspecto recreativo debe analizarse tam- ign la influencia del agua en los aspectos paisajistas, como podrian ser el desarrollo y mantenimiento de par- ques. ¢.Uso ecolégico. El uso ecolégico se refiere a mantener las cantida- des y calidades adecuadas de agua, para que no se ocasio- ne daftos irreversibles al medio ambiente, que redunden en un desmejoramiento de la calidad de vida del hombre. La determinacién de las necesidades correspon dientes a este uso, esta fntimamente ligadaa las necesida~ des de los otros usos, pues son éstos los que, por lo gene- ral, ocasionan los dafios mencionados. Efectivamente, €l abastecimiento urbano que se convierte en aguas servidas, y el riego, con sus excedentes contaminados, son causa principal del deterioro de la calidad de las aguas, a ‘mismo, el drenaje urbano, que arrastra la suciedad de las reas pobladas. Existen ademas requerimientos no impuestos por situaciones como las antes mencionadas, sino directa- mente por las necesidades de fomentar y conservar la flo- ray la fauna, como pueden ser el crear un habitat ade- cuado al desarrollo de ciertas especies. La siembra de peces en embalses, el saneamiento de zonas pantanosas y acciones semejantes, son buenos ejemplos de estos casos, En Venezuela existen numerosos estudios que a- portan un conocimiento de los rfos y lagos cuya calidad de las aguas han sido severamente afectadas. Este conoci- miento, desafortunadamente, es en algunos casos sélo sub- jetivo. La mayoria de estos estudios han sido elaborados enel MSAS, el MARNR y el INOS. Ejemplos de éstos son los Lagos de Valencia y Maracaibo y las aguas de los rfos que recogen los afluentes de los grandes conglomerados urbanos, como son los rios Guaire y Tuy en el érea de i fiuencia de Caracas, el rio Cabriales en Valencia y el rio Yaracuy (Estado Yaracuy). Por otra parte, la antes men- cionada intima felacién con los otros usos, impone prestar atencién aestas necesidades adicionales, particularmente ena de disposicion de aguas servidas. Existen algunos estudios sobre el segundo tipo de necesidad -fomento y conservacién de la flora y la fauna- pero salvo casos aislados, es sdlo recientemente cuando se inician a escala nacional. La creacién del Ministerio del ‘Ambiente y de los Recursos Naturales Renovables NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA (MARNR) (28-12-76) ha dado indudablemente un gran impulso al andlisis de estos temas. En cuanto ademandas deagua, este tipo de necesi- dad puede traducirse en los siguientes aspectos princi- pales: ‘+ Mantenimiento de un gasto en los rios afectados, que permita un grado de disolucién apropiado. Co- mouna regla general para noempeorar la situacién se debe dejar, en principio, un gasto medio igual al correspondiente de la época seca. ‘+ Limitaciones enta cantidad y calidad de los efluen- tes, que pueden ser descargados en los cuerpos de agua (mar, lagos y rios). ‘+ Limitaciones en la obstaculizacién del libre discu- rrit de las aguas, con el objeto de facilitar el habitat natural de la fauna, ‘+ Limitaciones en el tiempo de retencién de lasaguas en Jos embalses u otros cuerpos de agua (lagos, la- unas y pantanos) con el propésito de impedir un deterioro inaceptable de la flora y la fauna que alli sedesarrollen, * Creacién de cuerpos de agua artificiales para la cria de ciertas espe: Eluso ecoldgico de las aguas iré cobrando cada vez ms importancia, pues la necesidad de conservar o crear un medio ambiente apropiado para el desenvolvimiento dela vida humana, animal y vegetal, se ha convertido en una primera prioridad. No deben, tampoco, dejarse a un ladonecesidades de tipo ecolégico y ambiental, queaunque nose traducen en una afectacién directa del agua, si pueden establecer condicionantes en su aprovechamiento; ejem- plos de estos casos pueden ser la localizacién de embalses yy Iineas de conduccién, sin causar deterioro de los efectos bbeneficiosos de la natiraleza. Por ejemplo, el trazado mas econsmico de una linea de aduccién puede ser desechado Por otro mas costoso pero causante de menor dario ecoldgico. 2.5 Usos Dk PROTECCION. Como ya se ha hecho referencia con anterioridad, los denominados usos de proteccién no generan propia- mente demandas deagua, en el sentido estricto dela pala- bra, ya que lasnecesidades que haya que cubrir se tradu- cen, por lo general, en la atenuacién de daitos causados por las aguas. Esta atenuacion se logra, usualmente, me- diante la disminucién oretiro de cantidades de agua que causan esos datos, bien sea atemperando los gastos picos o disminuyendo los niveles de inundacién. En este aparte, se tratan en forma resumida las ne- cesidades que originan esas demandas, pues esos gastos méximos o niveles, no pueden ser caleulados a priori, es decir, sin conocer las obras que conforman el proyecto, aunque sea preliminarmente. a. Disposici6n de aguas servidas. Cualquier agua servida, normalmente contamina- da, debe ser dispuesta de forma adecuada para que no cause dafios. Este hecho implica que debe ser descargada en un cuerpo de agua sin deteriorar la calidad de él, evi- tando asf dafios inaceptables. El cuerpo de agua puede serstiperficial (rios, lagos o mares) o subterrneo (medios porosos).. Conviene aclarar lo que se entiende por dafto ina- ceptable, pues podria interpretarse,en forma excesivamen- te rigurosa, que ello significa cualquier alteracién por pequefia que sea de la calidad de las aguas originales del cuerpo de agua receptor. En la practica, se considera inaceptable cuando el dai o alteracién de las aguas re- ceptorases tal que las hace inaceptables para los usos que para ellas se tengan previstos aguas abajo. Por ejemplo, si eluso previsto aguas abajo es abastecimiento humano, la calidad de las aguas servidas vertidas sobre el cuerpo receptor tendré que ser fijada mucho mas rigurosamente, que por ejemplo, para riego de pastos o para enfriamiento deuna caldera. Es importante sefalar que, aunque aguas abajo no exista aparentemente ningtin uso, siempre estard presente el uso ecolégico, lo que implica que en cualquier caso seré necesario garantizar unas condiciones minimas de la calidad de las aguas. Pueden darse situaciones de entes receptores que tengan una capacidad natural de au- topurificacién, pudiendo recibir en cierta medida aguas servidas casi sin tratamiento previo, En materia de aguas servidas es, pues, importante determinar la calidad y las cantidades de agua que deben ser dispuestas y que pueden ser absorbidas pot los cuer- pos de agua receptores. Las necesidades estén determinadas por lo men- cionado en el primer pérrafo de este literal, que dicho enotras palabras, implica que toda poblacién, industria o 4rea de riego, a la cual se le suplan aguas que van a ser contaminadas por esos usos, requiere de un sistema de disposicién de ellas. En el caso de Areas bajo riego, ello esta intimamente ligado al drenaje agricola y dentro de ese uso deben ser consideradas. No toda el agua que se suple a una poblacién 0 industria se transforma autométicamente en agua servi- da, pues una parte de ella es realmente consumida. En ‘Veriezuela no existe investigacién suficiente sobre cudl es larelacién entre los voliimenes de agua suplida y servida, 55 salvo algunas excepciones (15p76). Es usual dentro del, INOS y del Ministerio de Sanidad y Asistencia Social, aceptar que un 80% del agua suplida por el acueducto regresa a los sistemas de disposicién de aguas servidas (45p15) cuando el uso del agua es doméstico o comercial Sin embargo, este procentaje puede variar, dependiendo de varios factores, como son: + Uso dela tierra, que implica un riego mayor 0 me- nor dejardines. + Clima, queafecta, también el riego citado. + Poblacién atendida por redes cloacales. + Grado de empotramientos, es decir, ntimero de vi- viendas, comercios, etc., que realmente estan incor- porados al sistema de disposicion. Para indusirias, los voliimenes a ser dispuestos de- penden, como en el caso de las dotaciones de agua, del tipo de industria y, entonces, un analisis especifico debe de ser hecho de cada caso. Investigaciones realizadas por la Universidad Central de Venezuela dan algunos valores en este sentido (15p59). El INOS en sus normas (45p16) sugiere una cifra 1,5 Ips por hectérea bruta de rea indus- trial, en aquellos casos en los cuales nose tiene informacin sobre tipo de industrias; en EE.UU., se aceptan valores ‘menores de unos 50 m? por hectarea por dia (46p547) Esimportante aclarar, como se hizo con las deman- das urbanas, que las demandas que se determinan con los procedimientos anteriores constituyen los voltimenes de aguas servidas que deben ser dispuestos, pero no son los gastos de disento de las diferentes obras involucradas.Co- ‘mo se verd en el Capitulo 17, los gastos de disenio deben to- ‘mar en cuenta la cronologia de ocurrencia delos volime- nes de aguas servida (gastos picos o maximos) y as{mismo, Jas aguas del subsuelo que se infiltran en las cloacas a través de juntas defectuosas 0 tubosrotos. Eneste literal se ha supuesto que los sistemas de disposicién de aguas servidas estén separados de las a- ‘guas de lluvia (drenaje urbano). En caso contrario los vo- Kimenes por este concepto deberdn ir unidos a los de dre- naje urbano, que se discuten en el préximo literal. En Ve- nezuela,actualmenteno se permite utilizar sistemas mix- tos de disposicién de aguas. Por lo general, en sistemas, _mixtos el gasto o volumen dominante es el de drenaje, Aunque no es tema especifico de la ingenieria hi- dréulica sino de la sanitaria, conviene en esta oportuni- dad recordar la importancia de la disposicién de las aguas servidas y del llamado uso ecolégico; lo cual pue- de ser puesto en mayor evidencia al traer a la memoria las enfermedades ligadas al agua (bilharzia, amibiasis y las de tipo viral), que tanto daito han causado y causan, sobre todo en los paises llamados del Tercer Mundo; 56 atin, como muestra de esa importancia vale decir que esas enfermedades mataron mas personas en la guerra de Vietnam que la propia batalla. No debe concluirse este literal sin dedicar unas I reas la reutilizacién de las aguas. El crecimiento y desa- rrollo de los paises ha originado, como se mencioné en el capitulo primero, un incremento cada vez mayor de las demandas de agua para riego y para usos urbanos e in- dlustriales, lo que se esta traduciendo en una escasez im- portante de fuentes; esta situacidn ha obligadoa pensar e investigar y poner en practica, todavia prudentemente, la reutilizacidn de las aguas. Estos hechos se han manifes- tado mayormente en el uso con fines agricolas 0 en usos donde el agua no participa como insumo industrial o consumo doméstico; pero hoy en dia, no solamente nose descarta su uso para abastecimiento urbano, sino que se ha avanzado a tal punto que ello es, aunque limitada- mente, una realidad que todo planificador hidréulico de- bbe fener presente. Drenaje urbano. Las necesidades de drenaje urbano estén, como la demanda de agua y la disposicién de aguas servidas, li gadas al desarrollo de los centros urbanos, es decir, al cre- cimiento demografico y al uso de la tierra en las areas urbanizadas, En principio, todo dafio causado por las aguas de huvia debe ser evitado; sin embargo, ena practicaestono es realizable. En primer lugar, conviene establecer que se entiende por daiio en drenaje urbano. En este sentido habria dos tipos: + Dafiosa personas y propiedades, como son las pé didas de vidas humanas y Ia pérdida parcial o to- tal deinmuebles, equipos y bienhechurias,es decir, de propiedades, y ‘+ Perturbaciones al libre desenvolvimiento de la ac- tividad urbana, como los inconvenientes al trén- sito de vehiculos y personas. En términos reales, es imposible impedir que haya dafios a personas y vehiculos ose perturbe el desenvolvi- miento de la ciudad, pues ello exigiria que los escurri- mientos provenientes de la méxima Iluvia, que fisica- ‘mente pueda ocurrir en las condiciones mas desfavora- bles de saturacién de los suelos, sean retitados de la su- perficie urbana total e inmediatamente, lo cual implica- ria obras de drenaje de tamafio irrealizable por sus des- proporcionadas magnitudes. Es por ello que los voltime- nes de agua que habrin de ser retirados, van invari blemente ligados a un riesgo o grado de proteccién, NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA Por regla general, el grado de proteccién (47c1) (47c2) se define como la frecuencia del evento de escurri- miento para cuya ocurrencia se vana evitar los dafios. En la practica, la frecuencia se define en términos de period deretornoT,, queesel ntimero promedio de afios medidos alolargo de un lapso de tiempo infinito, enel cual el gasto esigual o menor queeelcitado evento. Por ejemplo, se dice queel grado de proteccién es de 25 anos cuando seevitan Jos dafios que causan los eventos iguales o menores al e- vento que se presenta con una frecuencia promedio de 25 aiios. Hace algiin tiempo, en Venezuela (47¢2),se han es- tablecido directrices respectoa los perfodos de retorno que sonusualesen la fijacién de los valores deT, de los eventos contra los que se debe dar proteccién; ellasestanen funcién del tipo de dafio que pueda producirse y del uso della tie- rra que se pretende proteger. Cuando los dafios se refieren a personas o propiedades, se adopta en principio, un mi- rnimo de 100 afos, y para garantizar el libre desenvol- vimiento de personas y vehiculos, se sugieren los valores dela Tabla 2.18, que son menores, pues Iogicamente, los riesgos pueden ser mayores. Ademés de sefialar ol periodo de retorno,es necesa- rio para fijar el grado de proteccién, establecer los llama dos limites de inundacién (4p13), que son las alturas de agua admisibles en las poblaciones para los eventos de escurrimientos adoptados. Estos limites se fijan, nueva- mente, en funcidn del tipo de dafios causables; en Iineas generales, para dafios a personas y a propiedades se acep- tan usualmente 15cm 6 20cm (altura de un brocal) de pro- fundidad y en ningiin caso debe adimitirse mas de 50 cm. Para el segundo tipo de dafios, trinsito de vehiculos y personas, 5cm 6 6cm de agua son, aproximadamente, los niveles admisibles; sin embargo, estas cifras pueden variar de acuerdo con cada poblacién. TABLA 2.18 GRADOS DE PROTECCION (PEIIODOS DE RETORNO T,), PARA GARANTIZAR EL. TRANSITO DE PERSONAS Y VEHICULOS ‘TIPO DE USO DE LA TIERRA T Zonas comerciales 10 Zonas de eifeaciones plas 0 Zonas resdensiales de alts densidad 0 Zonas erdencales de baja densidad (Menos de 100 hab/Ha bev) Zonas ecentvas de nts 180 palin 2 (Oras 20005 1 ‘TIPO DE VIA DE CIRCULACION Via arteries (Avtopistasy avenidas principales) 0 Vins de dstibucin (Avenida de scondarin importa) 5 Vins Incas (mportncia tad a un es lca) 2 Vins expels (Vas de acceso a instlacones de suring 0 servicios pleas Fuente Referenca (27) pag y 12 En resumen, dentro del perfmetro urbano de cada poblacidn, las necesidades de drenaje urbano vendrian expresadasen el valor deT, del evento de escorrentia y su limite de inundacién admitido, para cada uno de los dos tipos de daftos: personas y propiedades y transito de vehi- culos y personas. Por ejemplo, se especificaria que en una zona de una ciudad las personas e inmuebles deben ser protegidos para 100 afios y una altura maxima de aguas de 20cm, y en la misma zona se debera garantizar un ade- cuado desenvolvimiento del trénsito de vehiculos y perso- naspara un valor de T, de 10afiosy unas profundidades deagua maximas de 5¢m. En el Capitulo 3 se indica como traducir perfodos de retornos a magnitudes especificas de gastos y en el Ca- pitulo 16 se analiza como calcular los gastos de diseiio respectivos. c.Drenaje agricola. Elconcepto de drenaje agricola empleado en este li- bro se refiere a la capacidad que tienen la superficie y el subsuelo de retirar las aguas de Lluvia. El procedimiento para la determinacién de las necesidades de drenar tie- rras cuyos fines son agricolas, es el mismo que para las 4- reasde riego, que fue resumido en la Figura 2.7. Efectiva- mente, el procedimiento alli sefalado establece como pro- cto final la cuantificacién y ubicacion de las areas bajo 57 riego y en secano, que deben ser desarrolladas. Los pro- blemas de drenaje en las areas bajo riego, son analizados dentro del contexto del proyecto de riego, por lo que el drenaje agricola se refiere mayormentea éreas no regadas. Las metodologias de clasificacién de tierras.con fi- nes agricolas generales 0 de riego espectfico (Ver Figuras 2.9 y2.11), usan como uno de los criterios basicos de clasi- ficacién, la existencia 0 no de un buen drenaje natural, tanto superficial como subsuperficial y, en consecuencia, ellas sirven para detectar aquellas tierras que deben recibir tratamiento correctivo de drenaje, configurando asf las ne- cesidades correspondientes. Por otra parte, existen estu- dios de clasificacién de tierras realizados especificamente con fines de andlisis de los problemas de drenajes, como el realizado por el MARNR en los Llanos Occidentales de Venezuela (48), una muestra del cual se indica en a Figura 2.28. Lacarencia de un drenaje natural apropiado es un factor ae incide desfavorablemente en el potencial agri- cola y porlo tanto, debe en principio, evitarse el uso de tie- rrascon este tipo de problemas. Sin embargo, como el po- tercial agricola esta supeditado a muchos otros factores, escomutin que tierras con problemas de drenaje de mayor 0 menor envergadura, tengan necesariamente que ser inclu- {das dentro de la reparticién a que se refiere la Figura 27; es decir, desarrolladas, pues puede ocurrir que noexistan Figura 2.28, Bjemplo de estuio de problemas de drenaje sgrcola 58 alternativas de otras tierras aprovechables. Esta situacién es de capital importancia en Venezuela, donde extensas zonas agricolas que presentan serios problemas de drenaje serian, si ellos se corrigen, de inmejorable calidad. Los propios Llanos Occidentales, antes mencionados, y la Zo- na Sur del Lago de Maracaibo, en Venezuela, son ex- celentes ejemplos de esta situacién. En un sentido amplio, el exceso de agua corres- pondiente al drenaje agricola esté, como en drenaje urba- no, ligado al concepto de frecuencia, es decir, al doble pa- ‘pel que juegan ef periodo de retorno y el limite de inun- dacién aceptable; pero, diferencia de ese tipo de drenaje, la determinacién del valor del T, aceptable es, te6- ricamente, funcién de los valores econémicos involu- crados. Proteger un drea agricola contra inundaciones mas ‘menos frecuentes vaa repercuir sobre un menor o mayor costo de las obras correctivas necesarias; lo mismo suce- derd sise acepta mas o menos altura de inundacién. Aqui el término inundacién no se refiere al desbordamiento de los rios, sino a la incapacidad del suelo y del subsuelo de retirar las aguas de lluvias. En definitiva, un estudio de beneficios y costos serfa, en principio, ef camino indicado hacia ta Fijacién de los dos parametros de demanda, Dentro de la problemética planteada, tiene una im- portancia vital para estimar dafios,el tipo de cultivo y su capacidad de resistencia al exceso de agua, pues los mas resistentes soportarén inundaciones més frecuentes, de smayoraitura y de mayor tiempo de permanencia sin pér- didas apreciables. Como se verd en el Capitulo 3, en reas rurales no es fécil cuantificar la frecuencia de las inundaciones o del estancamiento de las aguas provenientes de falta de dre- naje, tal como puede hacerse en drenaje urbano o como se veré en control de crecidas; por esto es usual que el and- lisis econémico antes referido, no pueda hacerse tomando como base los dafios relacionados con una frecuencia de- terminada. Las razones de esta imposibilidad radicanen dos puntos: la carencia de informacién bisica sistematica yladificultad hidrol6gica e hidréulica de definir el discu- tir de las aguas. A diferencia de un rfo 0 condueto artifi- cial, el drenaje superficial o subterréneo no es facilmente cuantificable cronolégica y espacialmente. De alli que quizés haya que utilizar criterios simplificades, como podrian ser el tiempo de permanencia o estancamiento medio anual de las aguas, que es un parémetro de primera importancia para determinar la posibilidad de marchitez de los cultivos, Este pardmetro estimado de acuerdo con una buena observacién en el campo -preguntando, por ejemplo, a los agricultores sobrela frecuencia y alturas de inundacién- permitiré formarse una idea aproximada de fa magnitud de los problemas. NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA. d. Control de crecidas. Este uso esta intimamente zelacionado con los dos anteriores, por el hecho de que todas las aguas pluviales, retornan, en definitiva, a los cauces de las quebradas y ios, salvo las que se evaporan ose infiltran aestratos muy profundos; por lo tanto, los niveles en esos cauicesafectan al drenaje de las éreas contribuyentesy viceversa. Las necesidades del control de crecidas, como en os dos casos anteriores, estén determinadas por los dafios aque el desbordamiento de los rfos pueda causar en areas turbanas y rurales y dela misma forma,su exceso de agua «std definida por un perfodo deretomo y unnivel deinun- daciones. Cuando el érea afectada por los desbordes es urba- na, ambos parametros se fijan exactamente en la misma forma queen drenaje urbano (ustialmente 100 afios de pe- iodo de retorno y 50 cm maximo de altura de inunda- cin). En dreas agricolas existe ua posibilidad mayor de usar el planteamiento econémico, en especial, cuando el 4rea inundada puede ser razonablemente delimitada pa- ra diferentes valores de T, . Sin embargo, esa posibilidad se reduce sustancialmente en zonas planas, donde la me- todologia del periodo de inundacién y la observacién en campo cobran entonces vigencia, como en drenaje agri- ‘cola. Aldrea inuindada se e denomina planicie inundable, que es la zona adyacente al cauce principal, esporédica- ‘mente ocupada por las aguas del rio. La Figura 2.29 muestra parcialmente la planicie inundable correspondiente al ro Tinaquillo en el Estado Cojecies, en Venezuela (49), érea preponderadamente urbana, para un periodo de retomo de 100 aftos. La figura indica las éreas que deben protegerse. e.Control de ero: La problemética del control de erosién causada por las aguas, puede ser dividida en tres casos generales: # Lasaguas, én su acontecer natural, causan erosién indeseable como puede ser: arrastre de cobertura vegetal del propio suelo, o la exosién en rios que puedan catisar daitos a vias de comunicacién, + Las aguas causan erosién dentro de proyectos de aprovechamiento y proteccién de los recursos hi- dréulicos, como puede ser la sedimentacin de un embalse o la erosidn 0 decantacién de sedimentos en los cauces de Jos rios, que afecta sus planicies inundables. # Acciones de erosién causadas por hechos ajenosal agua, que afectan la utilizaciGn de ellas. Entre éstos nme Referecia (9) Figura 229 DDemandas de con! de ceciasen eas wharas, ‘Caso de Tinaguillo, Edo, Cojedes eenucla estariar los aumentos de aportes sélidos al sistema urbano de drenajes causados por movimientos de tierra o, el aumento del aporte sélidoa los embalses originado por deforestacién de sus cuencas. Del anilisis de los casos anteriores, resulta dificil esta- blecer un procedimiento general para determinar lasnecesidades de control de erosidn-generaimente, se debe estudiar cada caso en particular y en coor- dinacién con los otros usos del agua. Sin embargo, es oportuno citar que los estudios geomorfolégicos son de una utilidad innegable para detectar dreas susceptibles a procesos erosivos. Las necesidades, en cualquier caso, no vendrian expresadas en gas- toso voliimenes de agua, sino en dreas o lugares a ser protegidos contra la accidn erasiva del agua. 2.6 VisiGN INTEGRAL DE LAS DEMANDAS. Enla Tabla 2.19 se incluye un resumen de las rela- ciones entre usos, necesidades y demandas de agua, de las cuales se ha hablado en los apartes anteriores. Las de- mandas de agua, como puede verse en la tiltima columna de la tabla, no siempre pueden expresarse en unidades hidraulicas (m', Ips 4 m’/seg) sin tenet una definicién previa de las obras que se vana construir; tales el caso de casi todos los usos, a excepciGn del abastecimiento al me- dio urbano y al riego y, atin mas, en algunas situaciones como control de erosidn, no pueden expresarse ni hecha ladefinicién preliminar anterior. Enel Capitulo 1 se ha mencionado que en la prac ca todos los proyectos hidréulicos son de propésito miilti- ple, es decir, que deben satisfacer més de una demanda Esta circunstancia implica que al planificarse un proyec- tohidréulico, su marco de referencia debe tomar en cetenta todas y cada una de las demandas que incidan sobre él Existen demandas que son fécilmente identificables, por- «que satisfacerlas es en si, el propssito primario del proyec- to, pero hay otras que resultan de la ejecucién del propio proyecto y que surgen a medida que éste se planifica, se proyecta, se constituye y se opera. Ejemplo de este iltimo caso son los problemas decontaminaci6n por vertidoscloa- cales aguas arriba de tomas para otros usos, el coztirol de erosi6m en la cuenca tributaria de un embalse, el empeora- miento de as inundaciones agtias abajo generac por una canalizacién del un rio, 0 la desaparicién de ciertas es- pecies animales vegetales al construir un embalse 0 dese- car una laguna. uso ‘Abastecimion | ‘tinea wbano Rego Hidroelctca Navegacion CConservacisn defaunay fora (Uspecalosico) Disposicn de aguasseridas Drenaje wbano Drengje agricola Contrtde creidas Contd de NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA TABLA 2.29 - RESUMEN DELAS RELACIONES USO, NECESIDADES Y DEMANDAS DE AGUA, NECESIDADES* ‘abitantes a ser abastcdos, pos de wos comerciales y publics tipesynimero de indusas Extensn de a eens a ser regadasy tipo decultvos Forma de ego Cantidad deenergia nocesariay vaicion boraria det consumo Cantidad de mercanclasy peronasa set transportadas. Tiposdecopecies ser proegidasfomen lado su desarolo. Cursos ycurpos de 3. i decalidad deteriora. Areas aserseridas.Tpos y nimero de industias ‘Areas ubanas ase drenadas y proteidas Riesgo aceptabe (Peiodo de reorney mites deinundaei) ‘Areas agrcolasy cultivos ase protgios. Permanenca de la iaundacion, (perio de retomo y lines de inundacs) Areas inundablesy bieahechurae ser protegidas Respoe aepables Areas erosonabes y/o cursos de agua na turaesy articles sfectados, [NECESIDADES- DEMANDAS ‘Dotacloes per cpita, Dotciones para proces indir espeticos, dab Sones equivalents. Usosconsunivs demands brits deriege Depende dels relacin altura, gasto ye fckencia de acs proyecto en particle. Cantidad y pode embareacones, Variable de seuerdoal ipa de aci, Porcenaje del ag split para absste- mien wbano'y excrdentes unitaros ‘de proceso indtrales Procedimientoshidoligcos (WerCapitle 3, Similar al anterior ysis poste relacio- res tip benefico-conto w obervacones eorerdlopsas de eampo, Sine a drenaje agrioa 0 uta se incl caso. [Nose traducea denundas de agua. "Todas las neceidades debenubicare en ol empo por veniey en el espace ~ Lasdemanda de agua debenubicars e forma sila ine necsiaes,es decir proyecadas hacia el fara [Netese que ns demandas no siempre se expresan en tnidades de volimenes 0 gastos {Las demandasen wos de protein son seamen ecesos de agi, denivels cs Lavisi6n integral de las demandas es de primerisi ‘ma importancia pues solo asf se lograrén proyectos real- mente beneficiosos al kombre. Por otra parte, esta visién permitiré vislumbrar adecuadamente la posible compe- ‘DEMANDAS* Volimenes de agus requoidos. Se expe también on gusto constant Volumenes de agua ncesatis despos os para cada mes [No staal expresrien vlumen 0g reueri de agua CCalades minis, alinamientos yan reverts, veloidadesperminlesy ledades portals Poede raducirse en gastos mines y lala apropiada de ls aguas, condicio de temperatrao simulates Volimenes de agua por unidad de dre: po deindustna. Calidad de agua a + eta en el cuerpo reepion Eventos mixinos deescorenti, Séte pueden determinarse en basa eolisio Fes peeviaments concedes Portogeneral solo se traduse en tiem, deinundaciones. En cass especiales, ‘stinan eventos nSximos de Eecorrent Similar a drenaje agricola o ubano se leas. [No wsespresbleen domandas de agus tencia entre los diferentes usos, que proviene de la frecuente imposibilidad de que puedan satisfacerse todas las demandas simulténeamente, es decir, de lograr un ba- ance entre la demanda y la oferta. Grosanio ab Coeficientes EIR c Coeficiente. EV cir Capacidad instalada requerida, FC cM Carga maxima. FS d Correspondiente al dia més desfavorable. H, a Relacidn entre las horas promedio con claridad del dia del mes y 12 horas. P a Subindice que se refiere al valor diario p DBR Demanda bruta de riego. DNR Demanda neta de riego PE Dp Demanda de potencia instalada. Pr E Eficiencia de aplicacién de riego. Q E Eficiencia de distribucién del agua en la s arcela t z, Eicencia de conduccién del agua r E Eficiencia global de riego. T Fa Energia total generada t EL Elevacién sobre el nivel medio del mar. i ER Energia requerida. 1 Er, Constumo diario de energia. #H FIP Evapotranspiracién potencial 8 RereRencias (1) VENEZUELA. COMISION DELPLAN NACIONALDE (8) APROVECHAMIENTO DE LOS RECURSOS HIDRAULI COS (COPLANARH)--Plan Nacional de Aprovechamien- tode los Recursos Hidréulicos, El Plan, Tomo I-Caracas, 1972. a @) VENEZUELA. 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Factor de carga. Factor de seguridad, Humedad media mensual. Indice de calor. Precipitacién media anual. Sabindice que se refiere al valor promedio horario. Precipitacion efectiva. Potencia generada, Gasto turbinado. Agua almacenada en el subsuelo. Periodo de tiempo. Temperatura media anual, Temperatura media mensual del aire. Tiempo de claridad de un dia. Periodo de retomo, Eficiencia de las unidades generadoras. Energia por unidad de peso disponible. Cambio mensual de almacenamiento en el. subsuelo. OFICINA DE INGENIERIA ANTONIO J. DE GURUCEA. GA.- Informe parcial relativo a la formulacién de un pro- sgrama para el abastecimiento de agua de la Regién Cen: tral INOS.- Caracas, 1974 MACIPE, A; AZPURUA, P.P. y colaboradores.- Sistema de tarifa de propésitos miiltiples para el cobro de los ser- vicios de agua y cloacas en Venezuela. INOS.- Caracas, Enero de 1980. 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