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SOE em rr ens CaM) Tao essa Tuy Se ag) SU e Rae aeaa erm Seen D Ty SUSUMU Teo) SOWELL at ae Ty CO UEC ET rar} Fespuesta clara, concisa y autorizada, sin concesiones Seen or Neuen fa SY AUS CH EOE EY HUMANA a ee eo) FERNANDO CHAIJ FUERZAS SUPERIORES QUE ACTUAN EN LA VIDA HUMANA EDITORIAL SAFELIZ ARAVACA, 8 = MADRID.2 1 edici esptila 8.000 ejemplares. 1982 75000 clemplares en cireulacion en Latinoameria, INDICE PAGINA Prslogo ° Reconocimient 10 Ineroduccisn “ n 1. ELHIPNOTISMO 1. El hipnotismo como respuesta a la angustia humana ....scces6e 17 2 Qué es qué no ese hipnotismno n Copyright 1982 — Filtoril SAFELIZ, Si 3, Los pros y los contras de Ia hipnosis en medicine 8 ISBN s4-7208 0447 4. Bl aspect rico y social del ipnoismo «+. 38 Depésito egal M 24210) 1982 = i 5. EL hipootisme y I religién coe B Impreso en Espain — Gréficas MAR-CAR. S.A. ‘eoeme yi name Dy 6 ¢Que foereas actin en la hipnosis? . 85 m, ESPIRITISMO, OCULTISMO Y PARAPSICOLOGIA 7, La dorads promest del expiitismo . 89 8, Los fendmenos del espiritismo ante Ia iavestgacin cient... 97 9, Un gran problems: qvignes son los espcitus del espsimo .... 119 10, Parapricologis y percepc extrasensril 15 11, Un importante documento que merece ser examinado ML 12, La inmortaided del alma enfocade por la revlacn 57 13, Bate un castigo eterna? «. 16 14, Una paribola interesante: el sico y Lizaro. 1a 15. El gran problema resueleo:idenifiacién dels “fuerzassupetioces” 191 16. Bspiccismo y cxstianismo + 205 17. El espirtsmo enfocado por la protects biblica 225 18. {Tiene alguna vinulacién el hipoosismo con el espivtsmo? .... 231 EL PROBLEMA DE LA SANIDAD Y LA FELICIDAD. 19, La sanidad y oe milagros rn 20, La fuente suprema de I salu y I inmortalided 253 21, Para hallargozo y paren I vida 265 22, Una siotesisexlarecedora de la verdad ™m 23. La aurora de un mundo nuevo y feliz. 2a PROLOGO El tema de este libro reviste el més alto interés humano 4 cient, Tiene que ver con problemas que efectan leer 29 Ia priquis, y que estén intimamente’vinculadas con el icketer'y le anqulidad presente fotura del oct Iumano, La preparacidn de esta obra fue encerada por esta editorial después de reiteradas demandas de que, entre los numerosos titulos que ella da a ta estampa anualmente, figurase wn libro que enenrara con realismo y con seriedad un asunto que ha sido materia de mil especulaciones, muchas veces carentes de fundamento y responsabilidad. Gon ta profundidad y la solvencia intelectual que lo carac terizan, el Dr. Fernando Ghaij ha realizado una prolija inves. tigacién de la materia, un examen objetivo de los hechos correspondientes, cuya exposicidn no por cientifiea va en des medro de la expresin, siempre dgil y amena. Por otra parte, 4 las fuentes a las cuales suele recurvise, el autor ha ahadide ‘otra fundamental, que con frecuencia se olvida o se tergiversa La lectura de este libro resultard del mas agudo interés para toda persona en cuya alma alienta la inquietud de desen trariar los maravillosos misterios de la vida. Lo damos a pu. biicidad con la certeza de que no sélo. despejard algunos de los mds intrigantes secretos de la naturaleza, sino que a la vez Abriré el camino a wna vida de mayor esperanza, de goxo mds profundo y de més duradera satisaccién LOS EDITORES RECONOCIMIENTO Elautor desea dejar expresa constancia de su agradecimiento a las numerosas personas que tuvieron la gentileza de leer el ‘manuscrto de esta obra y contribuir com itiles observaciones y sugerencias. Entre ellos en particular a los siguientes MARCELO HAMMERLY* SERGIO COLLINS VICTOR AMPUERO MATTA HECTOR PEREYRA SUARE LORENZO J. BAUM MARCELO I. FAYARD RICARDO UTT * Autor de Euciclopedia Média Moderna obra de aestr fondo edxoria INTRODUCCION EES FUNDAMENTAL en el hombre el anhelo de develar el arcano de que aparentemente se presentan rodeados Giertos hechos de la vida. En efecto, una serie de fenémenos que ocurren con cierta frecuencia y que parecen escapar a los rocesos ordinarios y a las leyes naturales, intrigan la mente de toda persona reflexiva y le plantean un enigma a veces angustioso, En épocas pretéritas, cuando los conocimientos cientificos no habjan alcanzado su actual madurez, la humanidad tratd de buscar —y le parecié hallarlas— soluciones a este problema, a tono con tas concepciones entonces en boga, soluciones que atin hoy siguen siendo aceptables para pueblos actuales que se hallan en la infancia del desarrollo cultural. Pero étas esultan ya, en los ambientes cultos de la tierra, no sélo pue. Tiles sino supersticiosas, y por lo tanto inadmisibles. Desconforme, pues, con las explicaciones del pasado, el ser humano se ha abocado, con todos Jos recursos con que cuenta, al estudio de esas fuerzas misteriosas que parecen aetuar en su vida. De ahi que no solamente la filosofia y la religién se ocupen ahora de estos temas, sino que en forma muy particular los aborde la ciencia, cuyas posibilidades mo. dernas permiten realizar utilisimas y esclarecedoras experien. cias para el estudio de hechos antafo restringidos al oculti ‘mo, Ia magia, la hechiceria, la astrologia y otras actividades similares. " Todos los hombres. y a8 le mujeres en jon una erie do fncencs| yarn tet unis no halon exp Siendo que la urgencia del hombre por descorrer el velo del misterio es universal y eterna, esta era prodigiosa de los satélites artificiales y de Ia energia nuclear no se conforma on las extraordinarias conquistas logradas en el ambito de las realizaciones pricticas, sino que anhela también dar una respuesta légica y documentada a las preguntas que surgen en Ja mente, ante la comprobacién diaria de hechos realmente misteriosos ¢ intrigantes. La nutrida produccién bibliogrifica y periodistica, cada vex més abundante, sobre temas tales como la hipnosis y sus fendmenos, sobre parapsicologia, clarividencia, espiritismo, te. lepatia, levitacién, curaciones milagrosas, materializaciones de espiritus o cuerpos astrales, comunicaciones con seres falleci dos, ete, y la publicacién frecuente de experiencias en las que se tomaron todos los recaudos cientificos para precaverse con- tra posibles fraudes 0 alucinaciones, hacen que la persona culta de nuestros dias se pregunte si, al fin y al cabo, no hay algo de real en todo esto, y atizan su interés por llegar, de luna vez por todas, al fondo mismo del tema para descifrarlo, Esta obra se propone estudiar estos problemas en forma objetiva e imparcial, desde el enfoque triple de la filosofia, de la ciencia y de la religién. Pero su verdadero mérito con. sistird en que, ademis de esos elementos de juicio, interesantes pero tal ver insuficientes, aftadiré la investigacin de una fuente que resultard valiosa ¢ indispensable, una fuente ver daderamente autorizada y segura, que acudita en nuestro au xilio para esclarecer asuntos que, de otra manera, permane. cerian envueltos en las tinieblas de la duda y la incertidumbre, Siendo que la mayor parte de los fenémenos que parecen responder a las potencias misteriosas que afectan © pueden afectar nuestra vida, se agrupan bajo los conceptos genéricos de hipnotismo por una parte, y espiritismo por la otra, éstos serdn nuestros dos primeros temas de estudio, Justo es sin embargo sefialar que, amén del gran interés ‘que revisten estos dos asuntos para toda persona mediana mente culta, por la necesidad que tiene cada uno de nosotros de resolver el enigma de lo aparentemente misterioso, encie tran para todo lector una importancia mucho mayor, ‘Tanto el hipnotismo como el espiritismo, en sus diversas 13 manifestaciones, han pasado por una evolucién histérica mis 1 menos larga, y han Ilegado a florecer en forma muy particu: lar en nuestra era moderna, porque ofrecen la promesa de resolver la angustia de nuestros dias, y se presentan como un balsamo para los dolores humanos. De ahi la necesidad tenemos de determinar su verdadera eficacia, y descubrir si acaso no hay otro medio mis radical, otro procedimiento mas ‘itil para resolver los problemas del hombre ‘Trataremos, pues, de responder preguntas como las si- guientes: 2Es realmente el hipnotismo 0 cl espiritismo una respuesta a la angustia humana? ¢Cunta eficacia terapéutica tiene la hipnosis? gPresenta esta actividad peligros e inconve- nientes, tanto para quienes la practican como para los que se someten a sus técnicas? ¢Hay conflicto entre el hipnotismo y Ia religién? De todas maneras, cuales son las fuerzas que actiian para producir en la persona hipnotizada los raros fe: némenos psiquicos y fisicos que caracterizan el trance pro: fundo? Y en cuanto al espiritismo, glogra en realidad ponernos en comunicacién auténtica con el mundo de los espiritus? "Yo erel que era mio; se le parece. Lo llevaré al lugar de donde lo saque eA veees el sujeto se rinde de cansancio ~dice el Dr. Bern- tratando de encontrar una rasOn para la ideas de su oo I siguiente es otro caso que encierra gran interés "ey un contador de 47 aos, intligente y equilibrado, ‘Tiene calambres de escitor, peo es de naturaleza vigorosa “En una ocasin, durante st sueto [hipnotico), Te suger el siguiente acto: ‘Cuando desplerte irda mi oficinay escribir “Hie'dormido muy bien’ en toa hoja de papel. y pond una crus después de a nombre. “Lo lesperté despucs de un cuaito de hora. Fue a Ja of cina, ewriblo la trae que yo Te habia puesto en la mente, la firm® e hizo una crur al lado de su nombre 6 “¢Qué significa esta cruz? ~pregunté. “AES0 —dijo— juro que no lo sé; lo hice “AI dia siguiente le sugeri, mientras dormia: ‘Cuando des. pierte escribir4: “Iré a ver al Sr. Liébanet cuando Ud. salga”, Jo firmard, pero con un error; en vez de firmar H. . . . firmard el mio, Bernheim. Luego veri que ha hecho un error, borrara mi nombre, y pondrd el suyo en cambio’, ‘Esto hizo al despertar, y parecia muy confundido por su error. Pidié disculpas. Pero no sospeché que la responsabi- lidad del error no era suya, ni que yo se lo habia sugerido. “Repito que es un hombre inteligente, y no es histérico ni nervioso. Su imaginacién es tranquila y su mente esta bien equilibrada, Insisto en ello, porque ciertas personas que no sti suficientemente ilustradas sobre este tema, insisten en afirmar que solamente aquellos que tienen temperamento new rético son susceptibles de ser puestos en condicién de sonim- bulos”. (=) Preguntamos: Qué habria acontecido si el Dr. Bernheim no le hubiera ordenado que rectificara el error? Qué hubiera ocurrido si otro hipnotizador sin conciencia hubiera ordenado a este contador que hiciera un cheque por tres millones de francos y lo firmara imitando la ribrica de algiin fuerte cliente del banco donde trabajaba? 2Qué pasa en la mente del sujeto cuando ha recibido una orden bajo hipnosis para realizar un determinado acto o seguir una conducta especifica mis tarde en el estado de vigi “La manera en que se manifiestan las sugestiones en los sujetos —dice Beaunis~, da una informacién valiosa respecto al estado de la voluntad en el sonambulismo [hipnético} Desde el punto de vista psicolégico no hay nada més curioso que observar el despertar y el desarrollo de la idea sugerida en las casas de los sujetos “Por ejemplo, estamos en medio de una conversacién que nada tiene que ver con la sugestién. De pronto, el hipnotiza: dor que esta alerta y observando a su sujeto sin demostrarlo, nota una especie de interrupcién pensada, un shock interior que se manifiesta por una sefia casi imperceptible, una mirada, tun gesto, una arruga en Ja cara; Iuego\Ja conversacién sigue, pero la idea vuelve, aunque todavia débil ¢ indecisa. Hay un pensar. 65 poco de sorpresa en la mirada, Sentimos que algo inesperado pasa por su mente, de tanto en tanto, como un relmpago, “La idea poco a poco toma mis fuerza. Se apodera mis y mas de la inteligencia: la lucha ha comenzado. Los ojos, los gestos, todo habla, todo revela el combate interno. El sujeto todavia escucha la conversacién pero en forma vaga, mecinica; su mente esta en otra parte, Todo su ser es presa de una idea fija que se fuerza mas y mas dentro de su mente. El momento ha Megado; toda vacilacién desaparece. La cara tiene una expresién notable de resolucién, y el sujeto se levanta y realiza el acto indicado. Esta lucha es mis © menos duradera y mis o menos enér gica, de acuerdo con la naturaleza del acto sugerido, y sobre todo de acuerdo con la condicién del sonémbulo”. Y wase cémo termina este ilustre autor sus observaciones: “Cuando el sujeto ha sido hipnotizado con frecuencia, esto obtien: tal influencia sobre él que lo obliga a realizar los actos nuis excéntricos, mis penosos, y hasta los mas peligrosos, sin que haga ningiin’esfuerzo apreciable por resistir”. 02) ePuede consumarse delito bajo la sugestién postbipnotica? EL Dr. Bernheim, que es quien cita a su colega Beaunis, manifiesta que difiere levemente de él, en el sentido de que a veces hay una lucha o una resistencia mds o menos débil a la orden dada hipnéticamente. Y presenta algunos casos en que hhubo lucha y vacitacién, pero donde la sugestién salié tiun- fante, aunque el acto sugerido era antisocial “£1 Dr. Dumont —relata el Dr. Bernheim tajo una joven hiistérica a la Sociedad Médica de Nancy. .Fue hipnotizada y se le sugirié que, al despertar, sacara el bo de vidrio de la impara a gas, se lo pusiera en el bolsillo y se lo Hevara cuando se fuera, Después que se la desperté, se dio vuelta timi hacia la mesa, y parecié confusa al ver que todos la miraban. Luego, después de alguna vacilacién, se trepé de rodillas sobre la mesa. Quedé asi dos minutos, aparentemente avergonzada de su postura; miré alternativamente a las personas que la rodeaban y al objeto que debia llevar, estiré la mano lo sacé, Luego, repentinamente, sacé el tubo, se lo puso en el bolsillo 66 y se fue apurada. No consintié en dejarlo hasta que no aban- doné la habitacién”. 09 - Pero éste es s610 uno de los diversos casos de robo sugerido hipndticamente y realizado en forma compulsiva por el sujeto, pese al bochorno experimentado por la presencia de los demés, Véase, por ejemplo, esta otra experiencia instructiva: “En una ocasién sugestioné a A. —sigue presentando Bern- heim un caso propio— para que, cuando despertara, viera una cuchara de plata en una silla detris de él y se la pusiera en el bolsillo, No se dio vuelta al despertar, y no vio la cuchara, pero habia un reloj en una mesa frente a él, Ademés yo le habia sugerido 1a alucinacién negativa de que no veria a nadie cn la habitacién y se encontraria solo, y esto sucedid, La idea del robo sugerido de la cuchara entré en su mente relaciondn- dola con el reloj. Lo miré, lo tomé, y luego dijo: ‘No, eso seria robar’, y lo dejé. Si se hubiera repetido la sugestién de robar la cuchara en forma imperativa y violenta —comenta Bern- heim— no hay duda de que hubiera ejecutado el acto. “He tenido ocasién de hipnotizarlo de nuevo, y Ie sugeri Jo mismo imperativamente: “Ud. se pondré la cuchara en el bolsillo, No puede dejar de hacerlo, “Al despertar vio la cuchara, titubeé un poco, y luego dijo: “—Dios mio, esto es atin peor —y se la puso en el bolsi Ho", 69) EL Dr. Alfredo Achéval, psiquiatra argentino que particips no hace mucho en una mesa redonda auspiciada por la Facul tad de Periodismo de Buenos Aires, manifesté que el hipno- tismo es un arma sumamente terrible, porque puede ser utili- zada con fines inconfesables. Por ejemplo, mencioné al Dr. Hammershlag, quien, en su obra Hypnotism and Crime, relata cl asalto a un banco de Copenhague bajo Ia influencia hipnd- tica de un amigo; el casamiento bajo sugestién hipndtica en cl affaire Czynsky-baronesa von Zedlitz, y ademas la confesién bajo hipnosis que hizo una persona de haber cometido un acto criminal al que era ajena, como el incendio del Reichstag ocurrido en 1938, Cité también a Masnet, que en su obra Le Somnambulisme Provoqué, sostiene que el hipnotizador se convierte en agente 67 exclusive y necesario de toda la actividad fisiea y mental del hipnotizado, y también al Dr.’ Ure, que asevera que “en el sonambulismo [hipnético] la mujer puede prestar consent miento que no prestarfa en un estado normal”, (®) En el libro mencionado mis arriba, del Dr. Heiz Ham. mershlag, titulado Hypnotism and Crime (Hipnotismo y eri men), halla nteresante relato, que constituye otra notable experiencia confirmatoria de que puede obligarse cometer crimenes o actos delictuosos a personas hipnotizadas que no lo harian en estado normal, “AL final del verano de 1984 —informa el Dr. Hammersh. lag-, un oficial, a quien se identificara por H. E., informé la policia de investigaciones de Heidelberg, que su esposa ha bia sido despojada de tres mil marcos alemanes como resultado de la tergiversacidn de los hechos. El ereia que el perpetrador de este hecho era un hombre que se habia presentado a su esposa como tn médico, bajo varios nombres obviamente ficti cios, pero cuyo nombre verdadero era desconocido para él y para su esposa, Esta persona habia sometido a su esposa a tratamiento hipndtico para aliviar diversas enfermedades. Pro bablemente la habia inducido’a creer que sufria de esas enfer medades a fin de justificar la continuacién del tratamiento y sus constantes exigencias de dinero. Aun parecta posible que el supuesto médico se hubiera aprovechado de la total depen. dencia de la sefiora para abusar sexualmente de ella, Todos los es{uerzos por descubrir al culpable mediante las direcciones que habia dado resultaron infructuosos. Respecto del trata- miento, su esposa sabia tinicamente que acostumbraba colocar su mano sobre su cabeza y decirle que ahora quedaria comple. tamente tranquila y que se dormiria de inmediato, A pesar de todos sus esfuerzos no pudo recordar ningin detalle adi cional. La esposa procedia de una familia de agricultores sana, ‘nunea estuvo enferma en su infancia, y nunca antes habia ma. nifestado seitales de trastorno nervioso”. (Pig. 92), La policia de investigaciones puso el caso en manos del Dr. Ludwig Mayer, quien, después de largos meses de investigacién puso en claro los turbios manejos del “Dr. Walter”, el culpa- ble, y Ia complicada técnica de sugestién posthipnética e in- duccién de amnesia en la victima, a Cuando este “Dr. Walter” descubrié que el esposo de su victima habia entrado en sospechas de que algo andaba mal en el tratamiento de su esposa, a juzgar por st extraiia con- ducta, le ordend, en estado hipndtico, que asesinara a su esposo Esto debia lograrlo por diferentes medios, todos los cuales, afortunadamente, fracasaron. Primero le ordené que le pre. parara una comida de hongos venenosos. Lo hizo ast la sefora, pero el esposo no pudo comer el potaje a causa del gusto desa. Bradable. Tuvo dolor de estémago, célicos, pero se recuperd. En la segunda oportunidad le ordend poner veneno en el café, Lo hizo, pero el esposo se libré porque los polvos blancos se habian volcado en el bolsillo de la esposa, y pudo colocar poca cantidad. Y finalmente, en dos oportunidades, le hizo desco nectar los frenos de la motocicleta del marido. En ambos casos éste choeé y se lesiond, pero quedé con vida. Finalmente, en dos oportunidades, le sugirié a ella que se suicidara. Intent hacerlo pero fue librada por otras personas. Por cierto que Walter no sugeria directamente cometer el crimen 0 el suicidio, sino que usaba un procedimiento indi- recto (y esto desmiente a los hipndlogos que afirman que no es posible cometer crimen bajo estado de hipnosis si es que Ja persona no tiene previamente tendencia a ello). He aqui una declaracién de la "Sra. E”, como se llama a la victima, que aclara perfectamente este punto: “$e me ocurre algo relacionado con tabletas {el Dr. Mayer hipnotizaba a esta sefiora, le presentaba algunas palabras ela ves y le pedia que estableciera una asociacién de ideas en torno a ellas; asi es como surgié esta declaracién], pero vagamente. Ocurrié en 1933 que Walter me dijo que yo tenia tantas pre. ocupaciones y estaba muy afligida porque en casa necesitaba dinero con urgencia y a causa de mi enfermedad. Asi me in- died que debia pedirle a mi médico que me recetara tabletas de Pantopon, las cuales me harian dormir mejor. Me dio la siguiente indicacién para tomarlas: “Permanezea tranquila du. ante todo el dia y beba tinicamente agua tibia. En la noche, a eso de las ocho, tome cinco tabletas, Iuego ponga el reloj despertador para que suene a la medianoche y Ud. pueda to- mar otras cinco tabletas; las cinco tabletas restantes témelas, poco después, alrededor de las dos de la mafiana’’. El envase 69 de tag tablets debia romperlo y atrojalo al inodoro. No eurtié nada de lo previa porque me {ue imposible conse gir as tabletas” (Pag. 112) ‘Cuando la Sra, E, mds tarde le hablé al "médico” otra ver acerca de los cel de a esposo, Walter declaré —ast Io infor ind ella-, que su exposo habla hablado basindose en algo mis; aie era infel y queria divorciane 0 dethacerse de ella de alguns otra mancr, Seria mejor que ella a2 ahogara en el Rin en cuanto se le presentara una buena oportunidad, "En mi-desesperacin realmente queria ahogerme en el Rin’, prosigue la fray E, en su informe, pero me To impidid tistta ama de laves, quien me habia seguido hasta el 0 (Esta declaracion fue corroborada por tetigos prevenciales) ‘Permanec! durante mucho tiempo. bajo na terrible. ten sign (Pag. 114, EL “Dr Walter” y un cémplice, fnalmente fueron descu biertos y condenador a prsin, en 1986, después de doe aos de invesigacin, El Dr, Hammershlag past a continuacion 4 extaer algunas conclusiones de ete tao, valider general de certs conclusion el que la Sr, . hubiera tmanifestado sefales de enfermedad o labilidad mental, pero is tnvenigacones ects concenaament por neu 3 psigutatras demostraron que no se tataba de wna pa- COpata, una histriea o una mujer desequilibrada moralmente, Lon especialisias de la Clinica para Mujeres y la Clinica de Nervior de la Universidad de Heidelberg, como tambien Ta Glinica Psquistrica de In Universidad de Freiberg, junto con otras conwulise experts, concordaron con esta, conclusion y excluyeron desde el mismo principio la posbilidad de que It Sr. fuera tna desequllibrada yuna persona morbossmente suigestionable "Se ha sefialado repetidamente por excito y en la préctca aque Ia hipnosis nunca puede hacer impacto eel niileo mis tho de la_personalidad del hipnotizado, y que ‘aun en Ia hip nos protunda una parte de I personalidad permanece y sigue tristindo y mantiene clerto grado de viglancia sobre 10s pro cesor y acclones del individeo, Por lo tanto, a pear de a prepatacin hipndtica mis estrctay caro del pensamiento 70 completamente alterado que resulta de la sugestién, la perso- nalidad moral como tal no puede ser completamente excluida’, “En relacién con esto citaremos un informe experimental comunicado por el médico Dr. Karl Schmitz: “En la hipnosis profunda..... el sujeto de experimentacién, recibe la instruccién de que a una sefial dada que se le pre- sentara en estado de vigilia debe tomar un pufal que encon. ward frente a él, atacar al colaborador del médico y hundirlo violentamente en su cuerpo. De acuerdo con este plan, el su- jeto (que es una mujer) toma el puial . . . avanza vivamente hacia el otro con el arma levantada .. . y repentinamente des- fallece, es acometida por un miedo terrible . . ., y el cuchillo cae al suelo. Rapido como el relimpago, el sujeto del experi mento se vuelve, cubre el rostro con las manos . . . y apenas logra caer extenuada en una silla, donde queda temblando; es el cuadro completo de un grave ataque de ansiedad’, “El autor de este experimento lo considera evidencia sufi- ciente para basar sobre ella la declaracién de que ‘es completa- mente imposible obligar a una persona a cometer un acto cri- minal mediante la instruccién hipnética’. Resume su idea de este modo: una persona no puede inducir a otra a cometer un crimen bajo hipnosis si ésta no tiene las inclinaciones co. rrespondientes. Podria discutirse la exactitud de este punto de vista no s6lo por los acontecimientos y los hechos sino tam- bién por una consideracién muy sencilla: basta sugerir tal ‘inclinacidn’ al sujeto y fortalecerla en él emocionalmente a fin de crearle la disposicién a aceptar la sugestion criminal. se coloca un pufial 0 una pistola en la mano de un sujeto hipnotizado y luego se le ordena matar a un tercero, en Ia mayoria de los casos, no hay duda, su yo rechazaré esta exigen- cia. Sin embargo, la situacién puede cambiar si, como sucedié en el caso de la Sra. E. que intenté asesinar a su esposo, se inyecta en el sujeto el odio, ta venganza o sentimientos simi- lares, como la base y la razén del acto. Si Schmitz hubiera sugerido a su sujeto detalladamente que la otra persona aten taba contra su vida o que eva responsable de alguna calamidad que habia experimentado, posiblemente su intento hubiera tenido un desenlace diferente. “Un ejemplo de las concepciones erréneas de diferentes au: n tores puede tomarse nuevamente de la obra citada de Sehmitz (Was ist-was hannuns nit Hypnose), quien eonclaye co "emer. en concordancia con experimentosclisicas, que no es posibe incitar ditectamente al aesinatoy a robo" Podemos objear esta declaracion diciendo que hay ax lamacdos experimentos‘lisicos, Ios ms esclarecedores elon ‘cuales ya hemos citado, que demuestran justamente lo con. trario. Sin embargo es més importante refutar el concepto cientificamente insostenible de que sélo la falta de ‘ideas mo- rales obstaculizantes en el inconsciente’ hace posible que se induzea a un hombre a cometer un crimen bajo hipnosis. Que nunca hay ideas morales en el inconsciente es algo que nece- sita mencionarse s6lo de paso; es uno de los ptincipios bisicos que operan en psicologia profunda y no requiere ninguna aclaracién adicional 'No hay ninguna base para sostener que la debilidad moral de un sujeto hipnotizado es una condicién para el abuso de la hipnosis, y que habria podido ser inducido a cometer un delito aun conscientemente. El peligro estd mds en el hecho de que bajo la influencia de ta hipnosis se evita la facultad moral existente; al poner a un lado las barveras conscientes, el sujeto puede ser inducido a actuar de una manera en la que no actuaria conscientemente. “El caso de Walter demuestra, sin embargo, que la influen. cia hipndtica puede tener consecuencias mas extensas que las descriptas. Walter hizo que la Sra. E. llevara a cabo acciones que evidentemente estaban en pugna con todo su ser. No existe la minima evidencia para suponer que sus sugestiones correspondian a sus impulsos originales 0 distaban algo de ellos. “En estas circunstancias nos vemos forzados a hacer frente @ la pregunta de cémo es posible que una persona mental- mente sana se prestara para ser usada y explotada con propé sitos criminales tan contrarios a su personalidad mas intima, los cuales Heva a cabo como si ella fuera una extrafia para si misma, En respuesta a este interrogante, permitanme citar una descripcién dada por la Sra, E. acerca de sus reacciones durante la influencia hipndtica de Walter: 2 “‘Ya no soy mds la misma persona que antes. Hay algo diferente que me gobierna. No quiero hacer algo pero lo llevo @ cabo lo mismo, 0 bien quiero hacer algo y sin embargo hay algo que me lo prohibe. Me sobrecogié una gran indiferencia, y finalmente no pensaba en nada mds fuera de hacer Io que Walter deseaba, Si actuaba de este modo siempre me sentia mds cémoda. Pero nunca estaba libre dentro de m{ —siempre habia algo que me oprimia. ... No podia luchar contra estas presiones. A fin de lograr reposo, preferia dormir. Después de lun tiempo, este estado terminaba, y la presién se desvanecia cuando obedecia las drdenes de Ia vor interior’ ”, (= Todo esto, y mucho mas que podria afadirse, documenta él hecho de que, bajo el trance hipndtico 0 por stgestién hip: nética, pueden realizarse actos delictuosos, crimenes o hechos antisociales y peligrosos para el individuo. He ahi una de las principales razones que hacen peligtoso el empleo de 1a hip. nosis como tratamiento, ta posicidn, basada en la experiencia y comprobada por los hechos, es confirmada por otros numerosos autores. Por ¢jemplo, Andrés Salter advierte sobre los peligros morales del hipnotismo en el siguiente pirrafo: “Considerando Ia hipnosis tinicamente en su aspecto de condicionamiento, nos damos cuenta de que seria posible en. sear a un individuo procederes antisociales involuntarios, Concuerdo con Rowland, Wells y Brenman, quienes afirman que, mediante procederes adecuados, sin que éstos sean pre cisamente arteros, puede lograrse que las personas hipnotizadas realicen actos antisociales, legando hasta el extremo de dafiarse si mismas 0 dafiar a otros en forma criminal. “Como resultado de la sugestién hipnética hubo personas que robaron dinero, se precipitaron a levantar viboras de cas cabel y arrojaron acido sulfirico al rostro de un hombre que, ignorindolo el hipnotizado, estaba protegido por un vidrio invisible. Estas investigaciones resultan reveladoras y las re- comendamos a la consideracién del lector. Expresindolo lisa y anamente, mediante la hipnosis es posible obligar a las personas a cometer crimenes. Los que hablan de la necesidad de que la sugestién hipnética concuerde con el ‘eédigo moral’ del individuo, debieran revisar sus conceptos”. 0" B Conclusion Por lo tanto, y en conclusién, el hipnotismo, desde el punto de vista moral y social, comporta en el caso del operador, arro- garse un derecho que no le pertenece, consumar una, grave violacién de Ja personalidad humana. Para el paciente signi- fica una peligrosa y perniciosa entrega de su voluntad y una renuncia a su libertad y responsabilidad, lo cual nunca se hace impunemente. La comisién compulsiva de crimenes y delitos y la ejecucién de actos perjudiciales para el individuo, es también perfecta mente posible como resultado de la sugestién posthipnética Pero aun cuando éste no {uera el caso, y el hipndlogo fuera un individuo de moralidad intachable, la persona que accede a que se la hipnotice se expone a que toda su vida futura pueda quedar sometida a la voluntad y personalidad de su hipnotizador, pudiendo verse en la necesidad de adoptar en su vida normas de conducta, ideas y sentimientos que no le pertenecen y no la benefician. Para evitar todos esos graves peligros y problemas, y par cularmente frente a la seguridad que tenemos de que existe un recurso supremo de auténtica curacién y bienestar, todo hombre o mujer que no renuncie a sus nobles atributos hu. manos, se abstendra de someterse al hipnotismo en cualquiera de sus formas. Sin embargo hay aspectos atin mis graves y especificos que abordaremos en el préximo capitulo. (1 Hisor Walch Spite Tyutedo ——Hignosie, ado por_Spitr,_ en Se Tiare Mes phe, 1 Be ata at in'pare Bt evar te Santon, aevchie da 2 toi dee co That 83 Sores, igs, 302508. (04) Bernheim, en Spit ©) Dea Rrwditie f ei Detasons of the Super 5) 1 pha ss te Geca phe 4 8) Diario Ea acém, de Boeros Aire, pte aa a (2 Spite ct, poe. 25, te de, 196 gs Helo and 0) ig’ abe Grimes ea Pr nen TNS ta (10) Rail, op it, pi 0 (18) iis Saher” Wat i Hpac, CD ermelm, "Penomenalein dee Nee SG 7” EL HIPNOTISMO Y LA RELIGION g EXISTE algtin contflicto entre el hipnotismo y la religién? tk gs ipnotismo y la religi AI margen de las consideraciones puramente éticas y humanas, gpuede una persona devota y religiosa participar en el hipnotismo sin violentar su conciencia, 0 hay alguna obje- cién fundamental que hace que Ia hipnosis sea incompatible con la religion? Naturalmente que cuando hablamos de Ia religién, no nos ‘referimos a cualquier religidn, sino a la religién por antono- ‘masia, la religién fundada por Jesucristo, que es la auténtica Ahora bien, esa religidn se halla contenida en las Santas Escti tturas, o sea en los libros sagrados de la Biblia. Por lo mismo, ese libro maravilloso, no sdlo es Ia joya mis extraordinaria de la literatura mundial, y ha sido alabado y ensalzado por literatos, estadistas, filésofos y hombres de ciencia, sino que su lectura ha sido recomendada por todas las ramas de la igle- sia cristiana, porque ésta considera a la Biblia como el docu- ‘mento fundamental del cristianismo. Por ejemplo en la Enciclica Providentissimus Deus, de Le6n XIII, dada en 1893, leemos: “Nos, nos propusimos tam- bién, desde hace mucho tiempo, reanimar y recomendar del mismo modo este tan noble estudio de la Sagrada Escritura”; y algunos patrafos mds adelante explicaba Ia misma enciclica que “la causa principal por qué este estudio nos parece tan digno de toda recomendacién es, aparte de Ia excelenent de tal ciencia y de la reverencia que debemos a la palabra de Dios, la miiltiple utilidad que de ella nace, segtin lo atestigua cer 7 tisimamente el Espiritu Santo cuando dice: "Toda la Escritura divinamente inspirada es itil para instruir, para razonar, para conmover, para acomodarse a la justicia afin de que el hon bre de Dios sea perfecto y pronto a toda buena obra’. ©) De igual manera, las ramas jo catdlicas del cristianismo proclaman undnimemente su fe en las Santas Escrituras como cl libro que contiene la revelacién de Dios, y como la norma inspirada de su doctrina y su conducta, EL mismo Seftor Jestis dio este admirable consejo: “Escu: drifiad las Escrituras, porque a vosotros os parece que en ellas tenéis Ia vida eterna, y ellas son las que dan testimonio de mi". © Esta orden del gran Maestro jerarquiza a la Biblia como el instrumento bisico del cristianismo auténtico, Por lo tanto, para contestar la pregunta tan importante que nos hemos formulado, de si el hipnotismo se halla en conflicto con la fe cristiana, hemos de tecurrit a la Biblia a fin de conocer los principios y las normas de vida que ella sefiala para el hombre, para el hijo de Dios. Hemos de esct drifarla a fin de conocer el uso correcto de las facultades que el Creador nos ha otorgado. La jerarquia moral del hombre En los parrafos iniciales del Antiguo Testamento, que es la primera parte de la Biblia, leemos la conocida expresién: “Dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme @ nuestra semejanza. . . . Y creé Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios Io cred”. © Esta declaracién de las Escrituras, segiin la cual Dios formé al hombre a su propia imagen, tiene una importancia funda- mental para sentar las bases de la solucién de nuestro proble- ma, porque establece en forma categérica, inconfundible, Ia jerarquia moral del hombre, En efecto, Adan y Eva Hevaban Ta imagen y los atributos morales de Dios mismo. Poseian ciertas facultades especiales que no les fueron dadas a los de- mis seres de la creacién, y que los distinguen de todos ellos, para convertirlos en la gloriosa corona de la obra magnifica del Creador Afirma el relato del Génesis: “Vio Dios todo lo que habia hecho, y he aqui que era bueno en gran manera”. Nuestros 76 we... ¥cr66 Dios al hombre a en. imagen de Dios lo cos" (Génesis 1: 26, 27) ” Nobles atributos divinos del ser bumano 2Cuailes son los atributos humanos que determinan Ia seme. janza del hombre con Dios? pale cere ard foretell Sta coeoraclancin “Slo el hombre tiene conciencia de que existe, y a la ver es cons: iente de que tiene conciencia. Sabe quién es y para qué existe. Aderds potce un drgano eepiiwal cemor de mi conducta y rientador de sus acciones, que por consenso universal se denomina también conciencia. Este le brinda su aprobacién cuando acta bien y lo reprueba cuando procede mal. Ast se dice de un hombre que tiene o no tiene tranquilidad de con- Ademds, pote el ser humano inteligencia y raciocinio, capacidad para discriminar el bien y el mal, para pesar el pro y elcontrade las cosas, El ejercito pacente de sus facultaies intelectuales le ha permitido ir acrecentando su acervo de co: nocimientos, de tal manera que ha Ilegado a realizar las mas extraordinarias conquistas en el campo de la ciencia, del arte, de Ia industria, y ha conseguido domefiar las fuerzas fantdsticas det universo, utilizéndolas en su beneficio, aunque lamenta- blemente también en su perjuicio. ; ‘También estd el hombre dotado de voluntad, la capacidad de elegir, decidir, tomar resoluciones. Y junto con la voluntad Dios He ha dado mecanismos especiales de, inhbicién para ejercer dominio propio y resistir los deseos o impulsos que son perjudiciales para sf mimo y para los dems. En este sentido no s6lo es un ente moral, sino también es un ser libre. Porque 78 Ja voluntad que lo caracteriza comporta su condicién de agente moral libre. Todo esto es asi porque fue formado a la imagen de Dios. Ahora bien, al implantar el Creador en la naturaleza fisiea ¥ psiquica del hombre estos diversos atributos, lo convirtié en un ser responsable de sus actos. 2Qué ocurre con este hombre, dotado de estas nobles facul: tades, durante el estado de hipnosis? Una subversion del plan de Dios Como ya se ha visto, el trance hipnético se funda en un estrechamiento © una anulacién del campo de la conciencia ~segiin Ia profundidad del trance, en una suspension mas o menos completa 'del raciocinio individual, que queda Teen. Plazado por el del hipnotizador, en una nulificacién de su Noluntad, y por ende en la imposibilidad de tomar determina ciones en forma responsable, consciente e inteligente Todo esto se realiza merced a una renuncia voluntatia, deliberada, que hace el hombre a su condicidn de ser moral libre y responsable, no slo durante la sesion hipnética, sine después de la misma por las sugestiones posthipndticas, lo cual termina en el dominio de una mente por ott mente ) Raweife, 1 He (2) Bester 1-102 AD Byilstoncte co lpoey en tt 9 Guinn, Beira de “astce (1) Un rete completo iment de testis) puede tall cn" W, Capron, Ader Spit Capito Mode £9 Bite Karke, Reeaion apr kaon) les 3056 Been, oe LS Beene Aes fas. (ote ie o'r Biter ie. (2 Panne, Mater Spiiation, OH Ste 96 LOS FENOMENOS DEL ESPIRITISMO ANTE LA INVESTIGACION CIENTIFICA UP? ie os aspectos mds lamativos del espiritismo es ta produccién de hechos misteriosos, de la més diversa espe- cie, de un orden aparentemente supranormal, que parecen escapar a las leyes naturales conocidas, Tales, por ejemplo, los que ocurren en la penumbra de una cémara de sesiones, con intervencidn de un médium: actos de levitacién de objetos © cuerpos, es decir, su elevacién en el espacio sin intervention humana; fenémenos de telequinesia: objetos o muebles que cambian de lugar, 0 que son extraidos de la habitacién ¢on sus puertas herméticamente cerradas; mensajes escritos por la ‘mano del médium-con Ia propia letra del ser difunto del cual pretenden provenir; instrumentos de musica existentes o inexis fentes, habilmiente tocados por manos invisibles; voces de per. sonas fallecidas que se oyen con toda nitidez; aparicién' de ‘Tamtasmas’ 0 materializaciones de espiritus, que reproducen 97 con exactitud maravillosa las taccionés de wn ser fllecido: fevelacion de secret de la vida del muerio, totalmente de Conocidos para el medium, pero concidos para alginpariente cercano pretene; rude tisetiowe de cafenas ue fe array tran; golpesinteligentes que traducen mensajes; tesas que se ttucven; mnanifestacions ruidosss y desordenadas que hacen inhbitable ta ‘cam, eto, ete La autenticidad de los fenmenos Son realmente auténticos estos fendmenos o se deben a fraudes? Este es un problema previo y fundamental, que ha susci tado mucha discusién y un gran caudal de investigacién cien tifica realizada por personas ajenas a la doctrina espiritista, y hasta por escépticos ¢ incrédulos. No hay duda de que los trabajos realizados dejan un gran saldo de fraudes y de trampas. Sin embargo existe una canti dad impresionante de fenémenos producidos por el espiritismo cen sus diversas y variadas manifestaciones, que han resistido todas las pruebas, y han debido ser catalogados por eminentes hombres de ciencia como manifestaciones reales y auténticas de hechos anormales 0 supranormales, de un caricter sobre- natural. Desde los propios origenes del espiritismo moderno, a me- diados del siglo pasado, hombres de ciencia probos y cautos han dedicado tiempo y esfuerzo a investigar estos fenémenos con absoluta imparcialidad y hasta con gran escepticismo. Las primeras investigaciones cientificas Por ejemplo en 1869 —para comenzar con algunas de las primeras experiencias— la Sociedad Dialéctica de Londres de- signd a una comision de més de cuarenta personas, entre las cuales habia’hombres de cieneia y médicos legistas, para que investigaran los fenémenos que, segiin se aseveraba, eran “ma. nifestaciones espirituales” . La comisién en pleno o diversas subcomisiones de la misma tealizaron una meritoria labor investigativa de primera mano. AL principio, las cuatro quintas partes de las diversas subco- tnisones eran “totalmente escéptias en cuanto a la realidad 98 de los fendmenos sostenidos, creyendo firmemente que eran resultado de impostura 0 de engaiios, o de accién muscular involuntaria’. Pero luego ocurrié una notable transformacién en el veredicto: “Fue solo por evidencias irresistibles —dice el informe, bajo condiciones que impiden la posibilidad de cualquiera de estas soluciones, y después de pruebas y expe- ienctas muchas. veces repetidas, coro las mas eseépticas de vuestras subcomisiones, Hegaron a convencerse lentamente y a desgano de que los fenémenos exhibidos en el curso de sus prolongadas investigaciones, eran hechos veridicos”. ©) Aun cuando en las investigaciones de esta comisién diver sos miembros describieron su propia experiencia personal, la del Dr. H. D. Jencken, abogado, ofrece particular interés. Este personaje ya habia tenido ocasién de “observar en su propio domicilio la levitacién de una mesa y un piano de tamaiio regular, sin que ninguna mano tocara los muebles; también habia observado un acorden mantenido en el espacio durante diez 0 veinte minutos, sostenido y tocado por un agente invi- sible. Habia visto también el manejo de carbones encendidos, levitaciones y alargamiento de objetos; ademas manos de espi ritus que se disolvian Jentamente mientras las tomaba, y mu chas otras cosas, mayormente valiéndose de la mediumnidad de D. D. Home”, © Ot10 de los miembros que ofrecieron un notable testimonio fue Cromwell F. Valery, bien conocido clectrénico. Siendo su propia esposa médium, en cierta ocasién predijo ella la aparicién de tres iilceras en su pecho. Para cada una se sefia- laba dia y hora. Lo predicho ocurrié con absoluta exactitud uunas tres semanas después de anunciado, ‘También se habian prescripto los tratamientos para sanar las mencionadas uilceras, los cuales surtieron el efecto anticipado. ‘Aun cuando en los trabajos de la Comisién de la Sociedad Dialéctica de Londres‘abundaban las personas dispuestas a presentar un testimottio positive de lo que habian observado y aldo, no se podlia lograr que los escépticos aparecieran ante la Comisidn para expresar un testimonio negativo ante aboga dos, médicos y hombres de ciencia, y para ser interrogados con libertad por ellos. Tal vez uno de los informes que mds lama la atencién 29, 8 el relativo a fenémenos de “materializacién de espiritus”, Este hecho, evidentemente, afios atris ya habla sido observado cn los Estados Unidos en algunas sesiones en que actuaban las nifias Fox. ‘También se habjan tenido noticias de diversos casos en relacién con Home y otres. Sir Guillermo Crookes, célebre fisico y quimico (1832- 1910), dejé documentados algunos de estos hechos observados directamente por él, después de tomar todas las precauciones fen que puede pensar un hombre de ciencia. Las reuniones del caso se realizaron a menudo en su propia casa, usando a la Srta. Florence Cook como médium, En una de ellas apa recié la forma de Katie King, ataviada con brillante vestido blanco y con cabello rubio dorado. La médium se hallaba vestida de negro y su cabello era oscuro, de manera que no habia forma de confundir a ambas personas. Ademés, las pul- saciones eran diferentes. Por otra parte, la médium levaba aros, y Katie no los usaba, También Katie era mucho mis alta que la médium, No podia tratarse de una alucinacién, porque la aparicién fue fotografiada mas de cuarenta veces. © Interesantes trabajos de la Asociacién de Investigaciones Psiquicas de Londres Hacia fines del siglo pasado surgié en los circulos cienti- ficos de Londres otto esfuerzo metédico y bien realizado para investigar los fendmenos supranormales que iba produciendo cl espiritismo, en su ripida difusién, EI profesor Guillermo Barrett, quien ya habia realizado personalmente algunas experieticias, y habia llamado la aten- ion de la Asociacién Britinica para el Progreso de la Ciencia sobre fenémenos de hipnotismo y telepatia, después de realizar varias consultas, patrociné la fundacién de la Asociacién de Investigaciones Psiquicas, cuya presidencia se encomend6 al profesor Enrique Sidgwick Los obietivos de la misma debian ser, segin sus propios statutos, los siguientes: . Un examen de la naturaleza y extensién de cualquier cia que pueda ser ejercida por una mente sobre otra, iversa manera que por los medios sensoriales conocidos. EI estudio del hipnotismo y el mesmerismo, y una del pretendido fendmeno de la clarividencia, '3. Una investigacién cuidadosa de cualesquiera informes, que descansaran en testimonios suficientemente fuertes y no demasiado remotos, sobre apariciones coincidentes con algiin acontecimiento externo (como por ejemplo una muerte), 0 que dieran datos previamente desconocidos para la persona re- ceptora de los mismos, 0 que hubieran sido verificados por dos © tes personas en forma independiente. “4, Una investigacién de diversos fendmenos aparentemen- te inexplicables por las leyes naturales conocidas, y comin. mente adjudicados por los espiritistas a inteligencias extra humanas, La recoleccién y colacion del material existente sobre la historia de estos temas”. La entidad, que obtuvo su personeria juridica en 1895, fue fundada en 1882, y no podia tener propésitos mas series ni estar constituida por personas mis capaces e imparciales;, por Jo mismo ha tratado de ser cientifica, y de seguir los hechos, cualquiera fuera el lugar adonde éstos condujeran. Existia para la investigacién, y no para la propaganda Durante los primeros aiios de st existencia, las actuaciones de la Asociacién Britanica de Investigaciones Psiquicas tuvie ron que ver mayormente con discusiones y experimentos sobre hipnotismo y telepatia, Habia sin embargo relatos de algunas pocas apariciones, casas “habitadas", premonicién, escritura automitica, etc Pero donde esta Asociacién realiza realmente el comienzo de sus investigaciones mas profundas sobre los fenémenos espi istas, es con el caso de una médium Hamada Sra. Piper. Ya esta médium habia sido analizada por el célebre psicé: Jogo norteamericano, Prof. William James, de la Universidad de Harvard. Los resultados de las reuniones que James tuvo con la Sra, Piper lo convencieron de que tenia facultades su pranormales. Asi por lo menos consta en las Actas de la Aso. iacién. © La inteligencia que controlaba a la médium, que afirmaba ser el espiritu de un médico francés llamado Phinwit, Feveld poseer un sorprendente cimulo de conocimiento rela tivo a los extintos parientes de los presentes, a los cuales pre tendia poder buscar “al otro lado” 101 La iencia con sus potentiimos radio ae een. teloscopios conoce cada dia mojor et espacio intersideral, pro no tiene 102 Estos conocimientos sobrepasaban en forma evidente lo que la médium podia haber adquirido por los medios normale, El profesor James, aunque nunca Hegé a militar abierta: ‘mente en el espiritismo 0 a aceptar sus doctrinas, escribié sobre sus experiencias con la Sra. Piper lo siguiente: “En Jos trances de esta médium no puedo resistir Ia con- viecién de que aparece un conocimiento que ella nunca ha obtenido por el uso normal y vigil de sus ojos, ofdos o ingenio, Cual pueda ser la fuente de este conocimiento no lo sé, y tampoco tengo siquiera una vislumbre de sugerencia explica tiva que hacer; sin embargo no puedo escapar a Ia admisién de que tal conocimiento es un hecho”. Lo cierto es que en 1887 a Sra. de Piper se colocé bajo le supervisién del Dr. Ricardo Hodgson. En el invierno de 1889.90 fue a Inglaterra, ¢ intervino en sesiones en Liverpool, Cambridge y Londres, en las que participé, entre otros sabios, Sir Oliverio Lodge, fisico y fil6sofo inglés fallecido en 1940, La mayor parte de los investigadores arribaron a conclusio- nes parecidas a las del Prof. James. Por ejemplo F. W. H. Myers, a quien le tocaba redactar los informes para la publicacién, escribié: “El Prof. Lodge, cl Sr. Leaf y yo mismo, que estamos preparando estos relatos para la publicacién, no tenemos ninguna teorfa que queremos Imponer al lector. Como se vera, sobre ciertos puntos externos nates, no s6lo nosotros tres, sino todos los que han tenido una adecuada oportunidad de juzgar las cosas, nos ha amos decididamente de acuerdo”. Obsérvese sin embargo cémo en la parte interpretativa ya no habia opinién uniforme, pues sigue diciendo: “Pero sobre la cuestién més delicada e interesante relativa al origen del cual proceden las aseveraciones presentadas en el trance, no podemos unirnos en ningtin punto de vista absolute. Con- cordamos s6lo en sostener que lo que expresé la médium revela que el conocimiento ha sido adquirido por alguna inteligencia en alguna forma supranormal”, Extraordinarias experiencias del Dr. Pablo Gibier Uno de los miembros destacados de la Asociacién de In- vestigaciones Psiquicas de Londres, el Dr. Pablo Gibier, 103 alumno y continuador de Pasteur, investigador y hombre de laboratorio, interno de los hospitales de Paris y mis tarde Director del Instituto Bacterioldgico Pasteur de Nueva York, ‘miembro a Ia ver de la Academia de Giencias de Nueva York, escribié un trabajo titulado Materializaciones de Fantasmas, en que relata el resultado de sus apasionantes investigaciones, hechas con el concurso de una médium, cuyo seudénimo era Sra, Salmon. Seria demasiado largo y no cabria en los limites de esta obra, reproducir in extenso una buena parte de esas expe- riencias, pero como elas estin al alcance de cualquiera, nos contentaremos con sélo citar entre comillas o resumir lo mas destacado de los relatos que hace el autor en Ia obra mencio- nada mis arriba Reconoce el Dr. Gibier la propensién de muchos médiums a simular o realizar fraudes, por lo cual habla de la “‘conse- cuente necesidad de hallarse alerta todo el tiempo de la sesién. Si alguien Mega a decirnos —afirma é— que tiene pruebas positivas de que un verdadero médium ha sido sor prendido con las manos en la masa, 0 quedaremos muy extraiiados: ello probaria, simplemente, que ha deseado hacer mds répido lo que puede obtener normalmente y que ha fa: lado, adulterando, en consecuencia, su produccién, y ello s todo. Toca a los experimentadores adoptar sus’ precau- clones’. En las experiencias realizadas por el Dr. Gibier con la Sra. Salmon, se valié de una jaula completada por un gabinete de tapices, y de un gabinete especial sin jaula, y explica con lujo de detalles la construccién de la jaul> ron enrejado metilico y armazones de madera recubiertos x el enrejado. Describe este investigador “fendmenos de materializaciones, observados fuera del gabinete, con el médium encerrado bajo Mave". En una sesién, por ejemplo, “voces distintas unas de otras se escuchan, no en la caja propiamente hablando, sino desde el gabinete situado a su costado; primeramente es una vor de jovencita que nos desea las buenas tardes;'la vor es seria y jocosa por momentos. Se trata de uno de los ‘con: troles’o ‘guias’ del médium que dice llamarse Maudy”. Luego, “a grandes intervalos, manos blancas y finas . . . se deslizan 104 desde Jo alto del gabinete hasta aproximadamente la parte media “Un brazo y una mano desnudos y otra mano se muestran en muchos intervalos y, al mismo tiempo, en los dos extre- mos de la caja gabinete, hacia dos metros de distancia de nosotros. Apariciones sorprendentes de cuerpo entero “Una forma femenina vestida de blanco, que tiene una altura por lo menos de mas de 16 centimetros de diferencia a su favor respecto a la médium, separa las cortinas del gabi- nite, a la derecha de la jaula, y sale avanzando delante de las cortinas. “Otra forma femenina de talla menos elevada, Hevando una corona y una cintura luminosa, sale bruscamente de entre las cortinas, sin hacer el menor ruido"’ ‘Aparece entonces un hombre de talla superior a la me- diana. Mas tarde surge la forma de un nifio, Cuando des aparece esta visidn, sale una voz de la jaula que indica que se trata de una criatura de algunos meses que ha fallecido recientemente. “Ellan [uno de los controles) aparece entre los cortina- Me acerco a él, y tomo, con mi mano derecha —dice el Dr. Gibier— su mano derecha; estrecho esa mano y me devuel- ve el apretén, La mano que estrecho es tibia, larga, firme, un poco huesuda; sin duda una mano de obrero, mano trabaja jadora, mientras que la mano del médium es bastante mis pequema, blanda y grasosa”, “Muchas otras apariciones se muestran todavia; entre ellas luna mujer que expresa haber perdido a vida en un reciente naufragio y viene presentindose con su vestimenta totalmente mojada; algunos de los presentes, que Ia tocamos, quedamos con las manos mojadas”. Otra aparicién “con la ufia de su dedo indice rasga las cuerdas teniendo la guitarra con su brazo extendido durante quince o veinte segundos, y luego desaparece levando la guitarra al gabinete 0 luego de haberla dejado a la en- trada". 105 El pasaje de un médium a través de una puerta cerrada En otra experiencia explica el Dr. Gibier el “pasaje del médium a través de la puerta de Ja jaula”, por supuesto ce rrada. Después de dos horas de sesién, la vor del control orde na venir a buscar a la Sra, Salmon que est agotada. Esta se halla en el interior de Ia jaula, herméticamente cerrada, y con la Have colocada en el bolsillo del médico. Cuando éste se adelanté para abrir la puerta, una mano lo rechaz6. firme. mente, Instantes después, relata el experimentador, “veo Ia cortina inflarse como bajo la presién de un cuerpo voluminoso. Agarré la masa que se presentaba delante de nosotros y quedé sorprendide al sentir que tenia entre mis brazos a una mujer desvanecida". Era Ia Sra, Salmon, que fue atendida por las damas presentes, mientras los demis comprobaban que la jaula permanecia herméticamente cerrada, Las cortinas es taban tales como al comienzo. La puerta y las paredes se halla: ban intactas. Los tres estimpillados de las junturas, y Ta ce- tradura del candado, también intactos. En otra sesién, “manos de distintos tamafios y forma pro. venientes del gabinete” fueron vistas “acariciar la espalda, la cabeza o el cuerpo de los asistentes a la derecha del médium’" “Una cara se muestra por encima de mi cabeza —sigue relatando el Dr. Gibier— y es vista por las personas sentadas cen frente de nosotros. Objetos diversos han sido tomados del interior del gabinete y trasladados por sobre nuestra cabeza: Js cuerdas de una guitarra puesta encima de una mesa en el gabinete, algo mas de un metro por detris del médium, sona- ron varias veces repitiendo sones y luego el instrumento fue deslizado por entre las dos personas ubicadas a la derecha del médium’.¢ Se refiere que en la misma sesién “varias lineas de escri tura fueron trazadas con lépiz sobre una hoja comin de papel blanco ubicada cerca de la guitarra, en el interior del gabi net in Ia reunién del 10 de diciembre de 1898, entre las di- versas materializaciones registradas se halla la de “una forma femenina enteramente vestida de blanco” que “sale del gabi 106 Dr. Pablo Gibier, continuador de Pasteur, investigador y hombre de laboratoro, que fue director del Incituto Bacerio l6gico Pasteur y miembro de Ia Academia de Ciencias dela ciudad de Nueva York, relata exraocdinarias experiencas de ‘pariciones corporales y materializaciones de expitus nnete y avanza vivamente hacia las sefioras D. y B., quienes irrumpen a gritar simulténeamente: “;Blancal Blanca!’ La aparicién se arroja en los brazos de la seiiora D. —contintia cl relato— y le dice en un francés sin ningiin matiz ajeno: “{Mi tia, mi tia, estoy feliz de veros!’ y volviéndose hacia la sefiora Bz ‘|Y a ti también, Victorial’ Estas dos damas, muy emocionadas, responden a la aparicién con palabras muy afec- twosas y familiares, la abrazan, se besan tiernamente, lo mismo que el sefior B., que viene a ser primo politico. . .. La apari- cién permanece aproximadamente dos minutos con nos- Una de las consideraciones finales que hace el Dr. Gibier cn el relato de sus experiencias es que “las materializaciones - « pueden ser no solamente vistas y oidas, sino también Realidad de los espiritus materializados El Dr. Otero Acevedo, en su obra Los Fantasmas, después de historiar la evolucién del espiritismo moderno y hablar de las experiencias de Grookes con las apariciones de Katie King, explicando que este cientifico tuvo ocasién de docu: mentar fotograficamente la aparicién de espiritus. materi zados, y simulténeamente a la médium dormida, cita las pa- Jabras del ingeniero francés Mac Nab. Este “no cree en la cxistencia, y por lo tanto en la intervencién de espiritus”, y sin embargo “se expresa dice el Dr. Otero— de una manera terminante al ocuparse de las materializaciones de formas humanas o fantasmas: “Los hechos mds inverosimiles —dice el ingeniero Mac Nab— son las producciones espontineas de formas vivas, visi- bles y tangibles, tan reales como puede serlo todo objeto real, y de Jas cuales suministran una prueba indiscutible las Fotografias. . “Yo no tengo para qué examinar si el hecho es verosimil © no, puesto que la verosimilitud no es un cardeter cientific: lo que yo afirmo es que él existe, porque he visto el fantasma, lo he tocado y lo he fotografiado en condiciones rigurosas de igilancia, Oe oe nin: de toes sagas, Vaporeon, eemaparete, 108 como se figura de ordinario a las apariciones, sino de cuerpos humanos absolutamente idénticos, a la vista y al tacto, a los que vemos y tocamos diariamente’ (Le Lotus, pigs. 726, 727, del mim, 24, correspondiente al mes de marzo de 1889)", Un hombre de ciencia, Shaw Desmond, declara en su obra Psychic Pitfalls, que el profesor Carlos Richet, conocido fisié logo, después de haber realizado experiencias durante treinta afios, se vio en la obligacién de admitir las materializaciones de espiritus. Y comenta: "Se ingenié para lograr espiritus tan netamente materializados, que los pesaba, los media, les tomaba la presién arterial, y generalmente hacia con ellos to que cualquiera puede hacer con los cuerpos fisicos de sus amigos”. La etapa ultramoderna del espiritismo Alguien podria todavia presenta Ia leve objeciin de que todas estas éxperiencias centlcamente realizadss y erlesen mente dacumentadas por personas que nos mevecer la mie alta confianza, pertenecen al siglo pasado, Por exo quetemos completar este somero estudio de Ios fendmenos del epic sno ante la investgacion cienifica, hablando de hechos’y te bajs tealizados em nuestro propio tiempo, para mostrar de ato, como el epiritsmo ht ido evolucionande part ads tare a la modalidad de la cienca comemporanes nS? EL hecho es que, on el nombre moderno de parapsicologi, ¢s decir, el estudio de Tos fendmenos que eseapan al dmsbics de la pscologia natural, las Investigaciones relaivas al vee timo y al espirtsmo han invadido las universtdades, donde se dictan citedas sobre esta especlidad y se han montads Iaboratorios para la experimentacion, y se aceptan teis sobre estos temas para optat a lov tiulos doctorale, “Las investgaciones del ocultismo ~comenta.Rawelife, san estudioso de esta actividad hoy en dla estin asummend, Proporciones alarmantes, pues existe una tendenc que eo, Dezb cuando elénfass de Ia invesigacion palquica se despacd de la sala de sesiones al laboratoro, de las comunieaclonee de spirits y ef ectoplasma a los experimenter en telepaia, clarvidencia y_psicoquimess".c® Siendo cate autor un cnemigo'del espriismo, mientras 108 registra la invasién de los circulos universitarios por esta dis ciplina hace constar también sus protestas al decir: EL espiritismo invade la universidad “La difusién del estudio del ocultismo en las universida des modernas, es en si misma ya un problema serio. Pero cuando tal investigacién es reconocida por el otorgamiento de grados académicos, no puede dejar de despertar un sent miento semejante al desmayo. En los afios recientes, la Uni versidad de Londres ha otorgado un doctorado en filosofia y un doctorado en ciencias por una tesis sobre clarividencia ¥ por experimentos de telepatia metalisica, respectivamente Cambridge acepté una tesis sobre ‘Conocimiento paranormal’, ‘que le permitié a su autor obtener el titulo de médico; Oxford concedid a un bien conocido delensor del espiritismo el grado de doctor en filosolia por una tesis . . . sobre ‘los poderes so: brenaturales 0 paranormales' de conocimientos poseidos por ciertos médiums. La Universidad de Duke fue la primera en conceder un doctorado por una investigaciin de los poderes ocultistas de fa mente “La Sociedad Universitaria dé Melbourne para Ia Investi gacidn Psiquica tiene como presidente al profesor de’ légica Y metodologia cientifica de la universidad: una paradoja que demuestra excelentemente el extraordinario atractivo del ocul tismo moderno bajo su aspecto de investigacién cientifica”.C Es cuando Iegamos a los casos en que las facilidades de las universidades nacionales se ponen a disposicién de los investigadores ocultistas, cuando uno se da cuenta del grado fen que el ocultismo esti dominando Ia cultura moderna. Des- de hace tiempo se han estado organizando fraternidades para la investigacién psiquica en las universidades norteamericanas de Harvard y Stanford. El College de la ciudad de Nueva York permite que su laboratorio de psicologia sea usado para experimentos psiquicos. La Universidad de Duke tiene su propio laboratorio de parapsicologia. En Inglaterra, por eje plo, la Universidad de Cambridge posee la organizacién estu diantil Perrot para la investigacién psiquica, mientras que Ja Universidad de Londres ha fomentado oficialmente la causa de la investigacién en el ocultismo, proporcionando ayuda 110 I Dr, Acovedo también se reiere a sorprendentes apariciones ocurtidas ‘durante sesiones expitiias, econémica para realizar experimentos en telepatia 0 en meta fsa, Las universidades continentales de Groningen, Bonn, Leyden y Utrecht, todas han dado sancin oficial sly invest gactén prguica dentro de sus laustros, Se informs reciente Mente que se ha establecido en la Universidad. de Buenos Aires un departamento de investignci6n palquica”.60 Pero el epritismo con sus extrrordinaras manifestactones supranormales no sblo se reduce hoy 4 las universidades, sino que ha tenido una gran difusion popular, y el tema interes into al hombre comin, de cultura media, que es recogido por una importante y creciente producclén bibliogrdia y por Es publicaciones perigdicas mas comunes, Por ejemplo, el diario Le Rozon, de Buenos Aires, publica en ocssones ver daderas series de articuls sobre esta materia, ulgarizando la historia del espirtismo, la actividades de aus principales c- bray y descbiendo aigumos de los trabajos mds destacados Ttresacamos de no de-exos ation, e siguiente dato de interes “EL ingeniero José S. Fernéndee, profesor de Fisica y Ma temic de as Universidade de La Plata y Buenos Aire, ue fue fandador y primer presidente de la Sociedad Argen. tina de Patapsicalogia, y uno de los hombres que mas ha est pr pana on fundamen si ne Gia que hasta hace muy pocos aflor apenas se_conocin [en realidad Io Unico de nuevo es el nombre eee icologia, que define las mismas actividades}, narra la Nidad del sabio hingavo Joan Foronyi" Refiere a continuacion que este hombre fund6 Ia Sociedad Ciemtiea de Metapsiquica de Hlungria, que legé. a cobrar fama por lo espectacular de sus actividades. En ella se com. probaban traslacione de objetos, que en parapsicologia ~nom: bre moderno de las actividades espiritstas~ se denomina tele Gquinesia; Ia apertura de puertas sin intervencion humana ta Cesaparicign de objetos; hasta se documents "cl aterrador jento de fantasmas en casas encantadas”.< Finaliza el articulista expresando que después de que este cientico huingaro-asstid.a importantes congresos mundiales fealizados en Londres, Estocolino, Viena, Pars, Copenhague, Rona y Atenas, en ocasion de st visita’ Buenos Aires, fue 12 invitado a una reunién en donde, como primer mimero, y a la manera de aperitivo, realizé pruebas de levitacién. Hazaitas sorprendentes de Carlos Mirabelli Las hazaiias del médium brasilento contemporaneo Carlos Mirabelli que han sido comentadas en todo el mundo como hhechos de relieve extraordinario, aun entre las manifestaciones del ocultismo, constituyen un verdadero desafio incontestable para los escépticos, y una evidencia adicional de la operacién de potencias supranormales en Ia vida del hombre, cuando éstas son provocadas. Ya no se trata de lograr hechos inusitados en la consabida cimara de sesiones que debe estar a media luz, sino que son episodios que ocurren a la luz plena del dia o bajo una luz artificial brillante. Cuando Mirabelli ha logrado el estado de trance, ha actua- do como médium orador y como médium escritor. En el pri- mer caso hablé hasta en veinte 0 mas idiomas, totalmente desconocidos para él en estado de vigilia, disertando sobre tuna amplia diversidad de temas, entre los cuales figuraban: medicina, psicologia, derecho, filosofia, economia, religién, ocultismo, ete. Gomo escritor, escribié en cierta oportunidad en 28 6 30 idiomas. Produjo con rapidez unas 25 paginas en persa, idioma oriental muy diferente de los indocuropeos y mucho mis complicado. Entre los fenémenos fisicos que produjo estando en trance como médium se cuentan: el haber jugado partidas de billar sin haber tocado el taco; levitacién; desaparicién de entre sus amigos en la estacién ferroviaria de San Pablo, para ha. arse, dos minutos después, en otro Tugar que distaba vai millas; el haber desaparecido de una pieza de sesiones sin desatar las cuerdas con que estaba atado, para hallarse, ins tantes mis tarde, en estado de trance en otra habitacién’con- tigua. Logré ademas la materializacién del supuesto espiritu de luna nifia muerta, reconocida, abrazada y besada por su padre presente, quien estuvo con ella 36 minutos. Dos hombres de Ciencia certificaron esta materializacién.0™) . 413 Los espiritus psicoanalizados y probados por el galvanémetro EL Instituto Psiquico Americano Hlevé a cabo no hace mu cho algunos experimentos totalmente nuevos con técnicas modernisimas para determinar si los espiritus que aparecen cen las sesiones espiritistas, encarndndose en el médium, son realmente personalidades distintas de las del médium, o si en el estado de trance espiritista se manifiesta el inconsciente del propio médium. Esto se realizé mediante anilisis psicoldgicos y prucbas instrumentales, para establecer las diferencias men. tales y emocionales entre el médium y el espirits control A tal efecto se utilizé Ia lista stindard de 100 “palabras estimulo” del psicélogo Jung. Con esta técnica se le pide al sujeto que conteste a cada “palabra estimulo” con una pala bra de reaccién. ¥ como no existen en el mundo dos personas ‘con experiencias vitales idénticas, en estas respuestas se regis tran diferencias apreciables entre un paciente y otro, segin sus caracteristicas intelectuales y emocionales. Este test se aplicé a una médium, Ia Sra. de Garrett, en su estado normal, y luego, cuando afirmaba estar bajo el do- minio de su “espirita control” denominado Uvan Es interesante notar que tanto este test psicoldgico como las pruebas hechas con el galvanémetro, sefialaron diferencias tan amplias que era evidente que procedian de dos persona- lidades distintas. Hereward Carrington, que menciona estas experiencias, dice: reacciones galvinicas de tiempo y a las palabras, son correspondientemente desemejantes. Por lo general el ‘bloqueo’ ocurre con diferentes palabras, lo que de muestra que sus reacciones emocionales son extraordinaria mente diferentes", 0) Ademis, se solicité la cooperacién del mencionado control Uvani para que se retirara en forma temporaria, permitien- do que otro espiritu tomara posesidn directa del cuerpo y la personalidad de la médium en estado de trance. Como resul ado, afirma Carrington, ‘'se produjeron una cantidad de va riaciones galvanicas, que diferian mucho de las registradas en el caso de la Sra. de Garrett en estado normal, por una parte, y de las de Uvani, por la otra”. 14 La parapsicologia y la transmisién del pensamiento Otra de las manifestaciones asombrosas que se logran por actividades espiritistas es 1a transmisién del pensamiento sin la utilizacién de los procedimientos conocides, hecho que es tudia con gran atencién la parapsicologia. Asi como en los fendmenos fisicos supranormales ha descartar una cantidad de hechos fraudulentos € materia de telepatia hay que aceptar que muchis corrientes en la vida cotidiana que suelen citarse como ejem- plos de tclepatia no son otra cosa que dencias sin mayor significado, Pero por otta parte no puede negarse la realidad evidente de que existe transmisién auténtica del pensamiento por fuer: zas de orden espiritual extrahumanas, que determinan fené- ‘menos realmente sorprendentes y que no admiten otra expli cacién fucra de la intervencién de estas fuerzas misteriosas a las cuales nos estamos refiriendo. Tal, por ejemplo, el caso del célebre explorador Hubert Wilkings, que tuvo ocasién de enviar telepaticamente sus mensajes desde la zona drtica para que fueran captados en los Estados Unidos. En su libro titulado Pensamientos a Través del Espacio, relata que, antes de partir para su expedicién al Polo Norte —a fines de 1937—, sabiendo de antemano que ciertas condiciones climaticas, y particularmente las auroras boreales, le impedirian transmitir mensajes cuando estuviera en aquellas gélidas y desiertas extensiones, se puso de acuerdo con uno de sus colaboradores que permanecié en Nueva York para que, tres veces por semana y a horas definidas, concentrara su pensamiento para captar por telepatia las noticias que le enviara Wilkins, con la consigna de que ese mismo dia escr biria los mensajes recibidos de esa suerte y se los enviaria por correo al Dr. Gardner Murphy, a la sazén jefe del Depto. de Parapsicologia de la Universidad de Columbia, El resultado fue asombroso, y revela Ia intervencién de uuna potencia ajena al hombre mismo. Sherman registrd datos precisos, exactos, que luego fueron confirmados absolutamente. Asi, el explorador, el dia 30 de noviembre de ese afio trans mitié los siguientes hechos, que fueron registrados cabalmente 115 por Sherman: su ubicacién, indicando Ia longitud y latitud ‘con precisién matematica; y la tarea que estaba realizando —to- mando observaciones de la estrella polar para fijar el Norte. En otra ocasién Sherman percibié algunos de los accidentes que sufrié Wilkins en el polo, como por ejemplo la rotura de la caja del cigiiefial del avién. Notable clarividencia en accién Un ministro religioso que por entonces ejercia sus fun- ciones en Londres, el Sr. Elman J. Folkenberg, describe, en un articulo de la revista Ministry, de Washington, EE. UU,, el siguiente caso interesantisimo, como una de las tantas demos- traciones piiblicas de clarividencia y telepatia: Las reuniones que el Sr. José Benjamin —un dirigente espiritista— realiza dos veces por semana son caracteristicas de esta nueva y agresiva campafia, A pesar del derecho de entrada de un chelin que se cobra, acuden grandes multitudes. Por espacio de una hora y media el Sr. Benjamin recorre la plataforma, causando la impresién de mantener al auditorio en la palma de la mano. Sus demostraciones de mensajes psi quicos son salpicadas liberalmente con numerosas citas bibli- as, muchas de las cuales son habilmente aisladas de su con- texto y usadas equivocadamente con extraiia efectividad. ierto dia —sigue relatando el pastor Folkenberg— cuan- do iba en camino a una de las reuniones del.Sr. Benjamin, descendi en una estacién subterrinea cerca del auditorium donde se Hevaban a cabo. Se me acercé una agradable pareja preguntandome por el Foresters’ Hall. Después de decitle que yo también lo buscaba, nos pusimos en marcha juntos. Mis nuevos amigos me dijeron que era la primera ver que concu- trian a una reunién de esa clase. . ... Por casualidad encon. tramos tres asientos juntos. “AL servicio de canto siguié un ejercicio devacional de diez minutos. . .. Después de cantar otro himno, el confe. renciante inicié una de las presentaciones mis asombrosas que he presenciado. En medio de sus mensajes, supuestamente procedentes de espiritus directores del otro mundo, se detuvo y dijo: ‘Entre las numerosas personas que han venido por primera vez a este lugar, se encuentran un caballero y una 116 dama que Hegaron de Giudad del Cabo, Suddfrica, el 6 de abril’. Volviéndose repentinamente hacia nosotros, sefiald en forma directa la dltima fila, donde estibamos sentados, y pro. siguié: ‘Voy a decir el nombre ahora. . . . N esi 1 SF. Nouns su esos’, sefialé a los nuevos amigos a quie. nes habia encontrado en la estacién del subterrineo, Los ros tros de estas personas revelaban un profundo asombro, ‘Hace ‘menos de seis semanas —continué el orador— la querida her. mana de la Sta. N........fallecid y cruzé al otto lado’. Y sin Ja menor vacilacién afiadié: ‘Por el correo de esta mafiana ella ha recibido un gran sobre aéreo con una carta y una foto grafia de su hermana desaparecida’. Haciendo una_pausa Anuncié: “Esa fotografia fue tomada en la playa de Ciudad del Cabo dos dias antes de su muerte, ocurrida en un acei- dente automovilistico. Y ademds —dijo con decisién— la Sra. N....-... tiene consigo la fotografia en el compartimento de echo de su cartera de color castafio’. “Con mano temblorosa, Ia Sra. N.......... sac6 la fotografia de Ja cartera, asi como la carta junto con la cual habia Hegado sa misma mafiana, "Y —pregunt6 el orador— gc6mo sé yo odo esto? {Porque su hermana esta de pie a mi lado en este mismo instante! éEra cierto que el espiritu de esa sefiora estaba junto al conferenciante que revelaba aquellos datos tan precisos, evi dentemente sin que ninguna persona humana hubiera po- ido facilitérselos? Y si tal no fuera el caso, gcémo podia ser tan especifico y tan exacto en Ia presentacién de los mismos? Volveremos en breve sobre este punto y daremos Ia respuesta a ambas preguntas en el préximo capitulo. Conclusion Si los limites de esta obra lo permitieran, podriamos ex: tendernos mucho mis en el relato de hechos asombrosos, pro. ducidos por influencias espiritistas, cuya existencia nos consta por haber sido referidos por amigos’ nuestros y en algunos casos por parientes, todos los cuales fueron: testigos oculares de los sucesos, Pero creemos que con lo que ya queda expuesto en este capitulo esté ampliamente probado el hecho de que una gran "17 cantidad de las extrafas manifestaciones producidas por las actividades del espiritismo son absolutamente auténticas, y re. velan la existencia de verdaderas fuerzas misteriosas poderosas, supranormales, extrahumanas, sin cuya intervencién no po. dria explicarse la produccién de esos fendmenos. Las experiencias cientificas realizadas con todos los re caudos necesarios por hombres de destacadisima actuacién en el campo de la fisica, la quimica, la medicina general, la psiquiatria, la psicologia, asi como en otros ramos importan: tes del saber humano, comprueban la actuacién de esas fuer tas denominadas espiritus, Ahora bien, el apasionante problema que hay que resolver continuacién ¢s éste: ¢Quignes son esos espiritus? Este seri el tema de nuestro préximo capitulo, (1) Report on Spirtualiom of the Com. (99 iy wes. 1826 tpiter af the Lamon ‘Dist (10) 14. plan 260 3 Society nda, aden J Arimar (tn) ya a 2 a a Be nig, SR He, 88. ae 2 Hit op. ie, pa 7 8) preity or Pay ie 10 care Wal vc phe 6 ie Resén, de Buenos (6) Discorn ‘tl presidente 8 Te fdera: de aan coy Premier 5" ana Reva Pie Fae de oem ‘oh 1d, ames, Ge 18 UN GRAN PROBLEMA: 9 QUIENES SON LOS ESPIRITUS DEL ESPIRITISMO TENEMOS necesidad absoluta de determinar con toda cer tidumbre quignes son y de dénde proceden las potencias tisteriosas que producen las manifestaciones paranormales de tipo espiritsta que describimos con cierta amplitud en el ca pitulo anterior, Después de seguir a los hombres de ciencia en sus investi gaciones a través de mas de un siglo de experiencias pacientes € imparciales, y de analizar todo cuanto se ha trabajado y escrito, y descartando un buen porcentaje de fraudes, ardides y triquifiuelas, queda un saldo apreciable de manifestaciones auténticas cuyo origen extrahumano y sobrenatural no se puede discutir, y que, sin duda alguna, tenemos que admitir que proceden de espiritus. Estos espiritus, © potencias espirituales invisibles, poseen evidentemente mayores poderes que el hombre; poderes que se manifiestan en ocasiones ttansmitiendo conocimientos aje al médium, en otras encarnindose para asumir formas humanas visibles que reproducen con exactitud las de algin ser fallecido, 0 en otras aun produciendo manifestaciones di versas que escapan a las leyes naturales, Lo que la ciencia no puede descubrir Hasta alli va la ciencia, La investigacién cientifica esté perfectamente acorde en dar su veredicto con respecto a la 119 cexistencia real de esas potencias espirituales invisibles. Pero avanzar més alld de este punto, la ciencia no esti en condi de hacerlo, porque ya no tiene elementos de juicio con los cuales trabajar. Lo demas ya entraria en el terreno dogmatico, religioso 0 filos6fico, que es completamente ajeno a la ciencia. Por esto, el Dr. Pablo Gibier, notable médico y hombre de laboratorio a cuyos interesantes trabajos de investigaci referimos en el capitulo anterior, y que probé en forma feha ciente Ia existencia de fuerzas o personalidades espirituales que se materializan, producen levitacién, telequinesia, ete., cuando Ilegé al final de sus observaciones escril “EI problema concerniente a estos hechos, una ver reco: nocida la autenticidad de las materializaciones, esta muy lejos de quedar resuelto. En efecto: en presencia de hechos tan inauditos, el experimentador que, de la negacién a priori ha pasado a la duda, y de ésta a la certitud, se pregunta qué son ‘sas formas humanas que nos dan la impresién de vida y se desvanecen ante nuestras miradas, en nuestros propios brazos formas que, en breves segundos brotan del suelo 0 de los cortinados y que, asi también, ripidamente, desaparecen. Y surgen, entonces, las preguntas siguientes”. En Jos pérrafos que continian plantea el autor varias pre guntas, y entre ellas éta, que es la que més nos interesa a los efectos de nuestro estudio: “Las personalidades que nos hablan, con una vor que les pertenece, son en realidad lo que ellas dicen ser? "Hemos visto antes de.ahora ~sigue diciendo el Dr. Gi bier, que Ellan [espiritu control de la médium), no pudo © no quiso darnos ninguna explicacién, cuando la hemos pe dido, acerca de la desmaterializacién. Fue bastante metios reservado cuando le preguntamos si no era una segunda per. sonalidad 0 una personificacién emergente del subconsciente del médium, de donde emanarian, asimismo, todas las otras materializaciones. Nos dice, con todo énfasis, que tanto él como los otros espiritus que se manifiestan por medio de este instrumento —el médium—, son entidades libres, person: dades independientes, espiritus desencarnados. . . Sin aceplar ciegamente afirmaciones de la indole que se acaba de con- signar —acota el autor—, acaso no podemos detenernos uit 120 Momento y reflexionar sobre esta cuestién ¢, incluso, esperar que el fenémeno de materializacién nos provea, en un futuro cercano, la solucién de este punto inquietante que en el momento actual confronta la psicologia: Subliminal o es iritus? 0 acaso las dos cosas? O, gquién sabe ni uno ni otro? —E insiste en la duda y en la incertidumbre—. Si no son lo que ellos dicen ser —sigue preguntando el hombre de Giencia— gqué pueden ser? . .. -Y finaliza con esta observa: cién—: Seria prematuro abordar esta cuestién en este mo mento”. El mismo tipo de duda, basada en Ia falta de datos para Poder definir cientificamente quiénes son los espiritus’ del espiritismo, surge del informe presentado por F. W. H. Myers, redactor de los trabajos de la Asociacién de Investigaciones Psiquicas de Londres, quien escribe: “El Prof. Lodge, el Sr Leaf y yo mismo, que estamos preparando estos informes para la publicacién, no tenemos ninguna teorla que queramos im. poner al lector. Como se veri, sobre ciertos puntos externas © preliminares, no s6lo nosotros tres, sino todos los que han tenido una adecuada oportunidad de juzgar las cosas, nos hallamos decididamente de acuerdo”. Esto se refiere a la existencia real de potencias supranormales que determinan los raros fenémenos espiritistas Mas en la parte interpretativa, ya no existe uniformidad, pues continua afirmando: “Pero sobre la cuestién mas del cada ¢ interesante relativa al origen del cual proceden las manifestaciones aparecidas en el trance, no podemos unirnos en ningiin punto de vista absoluto”.© La psicologia no pose la solucion Y bien, ya que la ciencia no estd en condiciones de con- testar esta pregunta tan fundamental, ga dénde recurriremos para hallar la respuesta? Diversos sectores del _pensamiento humano tienen sus respectivas hipdtesis. Ast por ejemplo, la Psicologia habia adelantado, hasta hace poco, Ia idea de que sos espiritus eran emanaciones o manifestaciones del incons. iente del médium. Pero ya vimos que merced a trabajos muy recientes, Ia psicologia psicoanalitica y aun la fisiolégica y experimental, estan Ilegando a la conclusién de que no puede 121 twatarse del inconsciente, ya que tanto los tests psicoanaliticos de Jung como las comprobaciones instrumentales, particular mente con el galvanémetro, establecen que el médium en estado normal y el médium en estado de trance —es decir dominado por uno de esos espiritus— revelan ser dos personas te distintas. Una aseveracion interesada e indemostrable Si la psicologia no tiene la solucién, zqué dice Ia filosofia, qué afirma la tologia popular, qué declara el propio espi Desde luego que este tiltimo pretende que estas personali dades invisibles son los espiritus desencarnados de los muertos, que aparecen para trabar contacto con los vivos con el pro- posito de convencerlos acerea de que hay una vida en ultra tumba. gEn qué se basa el espiritismo para sentar esta doc trina? Su tnico fundamento consiste en la propia aseveracion de los espiritus, Pero la ple nos indica que esa aseveraci6n no constituye ninguna garantia, asi como no com- porta ninguna garantia para cualquiera de nosotros que se presente en su casa un buen dia un seiior bien trajeado y asevere ser Fulano de Tal. Nunca olvidaremos un episodio en que nos tocé participar ¥ que constituye una buena ilustracién dle cuin poco, vale a veces la declaracién de la parte interesada. Se presentd en ‘nuestro estudio un sefior de impresionante presencia que se hizo anunciar como neurocirujano. Como no conoclanos su mbre, alegé que era amigo de numerosas personas que eran intimos amigos nuestros, mencionando sus nombres, ocupa- ciones, y circunstancias particulares de su vida. Manifesté que se hallaba en una grave emergencia: poseia un cheque librado a su nombre por una elevada suma de dinero, pero que como los bancos ya habjan cerrado, y se encontraba sin efectivo, estaba ‘en la necesidad de recurrir a algin amigo, porque tenia su coche en compostura en el garage, y necesitaba sacarlo para hacer un viaje a una ciudad distante en la que st. esposa habia sido operada de urgencia ‘Todos los datos que presentaba eran aparentem sus modales afables y conquistadores; su. vocabul exactos; concor. 122 dante con su supuesta profesién. Habia un solo dato que nos despertaba sospecha: era demasiado locuaz, Cuanto mas ha- blaba aquel hombre, mayor desconfianza nos despertaba. Ppr fin, no queriendo exigirle un documento de identidad, Io cual hubiera sido poco delicado, optamos por manifestarle que lamentibamos mucho no poder prestarle el dinero -que solicitaba. Pocos dias después Hegamos a saber que con el mismo ardid y los mismos argumentos, habia engafiado a un amigo nuestro y le habia sacado varios miles de pesos. Era pasar por crédulos aceptar su declaracién como suficiente prueba de su identidad, muy particularmente cuando su forma de hablar iba despertindonos creciente sospecha. De idéntica manera, en un terreno mil veces mas delicado, indo ya no estin en juego sélo unos pocos miles de pesos, sino toda una doctrina que tiene que ver directamente con nuestra felicidad y bienestar, no podemos aceptar erédula e ingenuamente la afirmacién de los espiritus como elemento fehaciente en que fundar nuestra composicién de lugar, mé xime cuando la actuacién de los mismos, los propésitos que persiguen con sus fenémenos, y Ia influencia que ejercen sobre muchisimos seres humanos, despiertan muy fundadas sospe chas, Aftidase a esto el agravante de que, segin lo afirman los propios apéstoles del espiritismo, Allan Kardec y Conan Doyle, una gran parte de los espiritus son mentirosos y en- gailadores. Si esto es comprobadamente asi en el caso de mu chos de los espiritus, gqué seguridad tenemos de que todas las fuerzas espirituales que hacen su aparicién en las participan de la misma naturaleza? im eResuelve el problema la teologia? Sin quererlo, la teologia popular ha prestado su apoyo al espiritismo al postular la inmortalidad del alma o el espiritu, Pues naturalmente, si el espiritu o alma sigue viviendo des pués de la muerte, se halla en alguna parte, y podria ser facil que se comunicase con los vivos y ejerciera sobre ellos su in: fluencia. Pero preguntamos: gde donde ha obtenido, una fuerte co: rriente de la teologia cristiana, esta concepcién del espiritu 123 © alma inmortal? Y por otra parte, aqué es el espirit y qué es el alma? Ya tendremos ocasién de ver mas adelante, que estos son dos problemas intimamente vineulados que la teolo- ‘gia no puede resolver. En realidad la teologia postula la in. mortalidad del espiritu sin tener otra base que una herencia recibida de la filosofia griega, una posicién injertada en el dogmatismo decadente de la cristiandad a wavés del neopla tonismo de los primeros siglos de nuestra era 2 qué furidamento tiene la flosofia para ofrecer una sol. ign del problema? Ninguno. . En resumen, pues, Ia ciencia no esti en condiciones de responder a la importante pregunta de quiénes son los espi Titus, Ademés, la mera afirmacién de los espititus mismos, que es la base de la doctrina espiritista, no puede merecernos confianza, porque cacriamos en la credulidad de aceptar uni lateralmente el testimonio de la propia parte interesada sin otro elemento fehaciente. Tampoco Ia flosofia ni la teol paractistiana son capaces de resolver este problema, ni el problema relacionado, de qué es el alma y qué es el espirite, ¥ a través de siglos de especulaciones no han hecho la luz en 1 tenebroso panorama Si tal es el caso, es evidente que para dar Ia respuesta acertada a este interrogante, es indispensable disponer de una fuente més autorizada que la especulacién filoséfica o el dog. matismo teoldgico. eExiste una fuente semejante, que nos permita abordar de leno la solucién del problema planteado? Esto es lo que examinaremos en el proximo capitulo. G) Proceedings Sotety for Payeioa! 124 PARAPSICOLOGIA Y PERCEPCION EXTRASENSORIAL FERAN los 7:80 de la tarde del 5 de septiembre de 1920. En la casa del Dr. W. J. Crawford, profesor de Ia Escuela Téc- nica Superior y Universidad de la ciudad de Belfast, Irlan- da, todo esti dispuesto para comenzar con una sesién espe cial en que el Dr, F, Mel Stevenson quiere comprobar fotogr’- ficamente la realidad de ciertas materializaciones o aparicién de fantasmas que el Dr. Crawford, antes de su muerte, habla documentado reiteradamente. La médium es la Srta, Catalina Goligher. El Dr. Stevenson, después de consultar a los “operadores” 0 fuerzas invisibles, recibe, mediante golpes en cédigo de una mesa especial, per miso para tomar fotografias con luz roja. Mas, se le permite Sentarse junto a la médium durante la sesién. De esta manera puede observar directamente todo cuanto ocurre a lo largo el proceso, El circulo de personas presentes se compone mayormente de miembros de la familia Goligher, todos con capacidades mediumnisticas. También se hallan en la sala un fotdgrafo profesional muy conocido en Belfast, dos médicos y un renom- brado pintor, Revelaciones de las placas fotogréficas Se han tomado ya todas las precauciones para evitar cual- quier truco. EI Sr. Santiago Pollock, el fotdgrafo, ha contro. 128 Jado todas las placas que va a usar, y cada fotografia se toma con cinco cdmaras en forma simultinea. E] cuerpo de la médium se sume en un estado de rigider y tensién, Las cimaras son accionadas para realizar cinco di rentes tomas. Y al efectuarse Ia revelacidn se descubre el si- guiente resultado: Primera toma: negativa. Segunda toma: aparece una materializacion, es decir, una 1nasa plasmtica 0 “teleplistica” cerca del tobillo de la mé dium. Tercera toma: la materializacién se extiende entre el to: billo de la médium y Ia cara inferior de la mesa, frente a Ia coral se halla la Srta, Goligher. Cuarta toma: la materializacién o fantasma esti en el re gazo de la médium. EL Dr, Stevenson, al escribir el informe de to que pasé en esa experimentacién, se expresa de esta manera: “Para todos los que han seguido con atencién Ia intensa labor del extinto Dr. Crawford —en cuya casa se habia reali zado esta sesién—, no serd necesaria ninguna confirmacién sobre la autenticidad de sus resultados [aparicién visible de formaciones 0 fantasmas]. Mas para los eseépticos que no ter- minaban de convencerse, me siento feliz de poder ofrecer las pruebas arriba citadas que segtin mi opinién son irrefutable. “Estoy convencido dle que toda persona que tome parte en una sesién como Ia descrita mas arriba, sentird la presencia de una inteligencia invisible cuyas energias rebasan las fron: teras del razonamiento humano”. © Desde fines del siglo XVII, cuando Emmanuel Kant, el gran filésofo de Koenisberg, escribié sobre Swedenborg —no. table vidente que predijo un gran incendio en Estocolmo, a 450 kilémetos de distancia, describiéndolo con detalles hasta los mis recientes fenémenos supranormales de nuestros” dias, 1a ciencia y la psicologia, a través de sus mds conspicuos representantes, han tratado infructuosamente de desentrafiar cl misterio de esas fuerzas extraordinarias que escapan a todas las leyes fisicas y cdsmicas conocidas por el hombre. En las uiltimas décadas se ha ido estructurando una nueva disciplina que se ha dado en lamar parapsicologia. El prefijo 126 para quiere decir al lado de, Otros autores la denominan meteptiquica. En exe time voeablo, el pret meta quice decir mds alld (de Ia psicologia). Pid “ Cusiquiera sea la denominacién que se use, esta rama de tos estudios humanos tata de invesigar los fendmenve. que pareeen esapar a ls ley naturales Gardner Murphy dele 1a parapsicologia como “la rama de a piclogla us se ocupa de lo paranormal eto e, de los hechot petguicos que parecen tscapar a dominio de To que, hasta el presente, Je reconoce mo Teyes normals", © “Reberto Amadou a deine como “el eatudio de los hechos extration, cuionos,extradinarion, inhabituales, cuyas manifentaciones no ham sido clasiende 3 por a encin lsi,pata as ces no eh orld dodoaten Sera ena a fnalidad de la parapsicologla no es otra que la del clio. Sin embargo, ln preocopacidn principal de le poe mera consiste en descubrr las leys que gobiertan eos fend menos paranormal, si acsoexisieran, De ah la definition de Richets “La metapsquica es la ciencia que ene por ob, jeto los fendmenos tisicor o picoldgicos prouucidon po fuer ‘as que parecenintligentes por lacultades descondcidas de in mente". Fl campo de la parapsicologia La esperanza de los parapsicélogos modernos es que los hhechos parapsicolégicos, que hoy por hoy son inexplicables, puedan algin dia entrar en el marco de la ciencia clisiea, por Jo que ta tarea principal, o mejor dicho el ideal bisieo de esa dlisciplina, consiste en Hlegar a demostrar que el fendmeno pa ranormal es perfectamente normal. En este sentido la parapsi. cologia se diferencia radicalmente del ocultismo y del espiri tismo, ya. que estas los actividades reconocen que los fendme- hos que son materia de su interés son extraordinaries ¢ inex Plleales en base alas lejes natures

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