NNO 249 - 200!
PRIWER JUZGADO DE LETRAS?
26 OCT 201
DEDUCE RECURSO DE APELACION.
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RGR
S.J.L
CARLOS BONILLA LANAS, Abogado Procurador Fiscal de
Antofagasta, en autos caratulados “DIRECCION GENERAL DE AGUAS
con HOTEL ALTO ATACAMA S.A.”, rol N° 5457 - 2007 de este Primer
Juzgado de Letras de Calama, a SS., con respeto, digo:
Deduzco recurso de apelacién en contra de la sentencia de
primera instancia dictada por SS. con fecha 27 de septiembre de
2011, escrita a fojas 235 y siguientes de estos autos, que acogié la
excepcién de prescripcién extintiva opuesta por HOTEL ALTO
ATACAMA S.A, en relacién a la denuncia formulada en contra de ésta
por la DIRECCION GENERAL DE AGUAS DE LA SEGUNDA REGION
(DGA).
Para arribar a la decisién SS. consideré que entre el dia 15 de
febrero de 2007, fecha en que la DGA constaté la construcci6n de una
obra no autorizada en el cauce del Rio Loa y que corresponde al
hecho constitutivo de la falta denunciada, y el dia 31 de agosto de
2007, fecha en la que la DGA interpone denuncia en contra de HOTEL
ALTO ATACAMA S.A., transcurrié en exceso el plazo sefialado en el
art. 94 del Cédigo Penal, el que debe computarse de conformidad con
lo prescrito en el art. 95 de dicho Cédigo, determinando, en
consecuencia, que tratandose de una falta el plazo de prescripcién se
computa a partir del dia en que aquélla se hubiere cometido (en este
caso puesto en conocimiento de SS. para la imposicién de la multa
que en derecho corresponde aplicar) y que dicho término de
prescripcién es de 6 meses.
La sentencia dictada por SS. causa agravio a mi parte por las
siguientes razones de derecho:1. En primer término, SS. ha dado a los arts. 173 y 175 del
Cédigo de Aguas una interpretacién y un alcance que no corresponde
de acuerdo al tenor literal de las normas citadas.
En efecto, conforme al tenor de las normas citadas, SS. s6lo
tiene competencia en esta materia para los efectos de aplicar
la multa, mas no puede, en caso alguno, pronunciarse o entrar a
conocer sobre otras materias propias de! procedimiento establecido
en el Cédigo de Aguas, puesto que en el caso sub - lite estamos en
presencia de un procedimiento administrativo y no de un
procedimiento judicial, procedimiento aquél que culmina con lo
dispuesto en el art. 175 citado que fija y sefiala la atribucién y
competencia de SS. en la materia a que se reflere estos autos.
El art. 175 sefiala literalmente que si la ley no indicare la
autoridad encargada de imponer la multa, ésta sera aplicada por el
Juez Letras del lugar en que se hubiere cometido la infraccién.
Dicho de otro modo, la nica facultad, atribucién y, por tanto,
competencia que la ley le otorga a SS. en la materia de autos es la
obligacién de imponer la multa.
Lo anterior se explica por cuanto SS. y la infractora han
entendido que, en el caso sub - lite estariamos en presencia de un
juicio de reclamacién de la multa impuesta y/o de la infraccién
cometida, lo que no corresponde.
En efecto, en este caso ni siquiera estamos en presencia de un
procedimiento judicial en juicio de aguas, sino que tan sdlo frente a
una infraccién, debidamente constatada por la DGA en el uso de las
atribuciones legales que le son propias y en el marco que es de su
exclusiva competencia.
Es, por tanto, a la DGA a quien le corresponde determinar la
existencia de la infraccién y, hecho que sea esto y no existiendo
autoridad encargada de imponer la multa, corresponde al Juez Letras
del lugar en que se hubiere cometido la infraccién imponer la multa,
lo que en caso alguno - segtin veremos més adelante - importa quela infraccién, por el hecho de llevar aparejada como sancién la multa
pueda ser considerada para todos los efectos como una “falta penal”
a la que le son aplicables las normas sobre prescripcién extintiva que
SS. ha determinado en el fallo contra el que recurro.
Por tanto, de mantenerse lo resuelto por SS. estariamos
definitivamente frente a un agravio que genera una nulidad de
derecho piiblico, pues se cometeria infraccién a lo dispuesto en los
articulos 6° y 7° de la Constitucién Politica de la Reptiblica que
establecen en nuestro ordenamiento juridico el denominado “Principio
de Juridicidad”, piedra angular del Estado de Derecho. Con arreglo a
tales normas y principio, las actuaciones de todos los poderes y
érganos del Estado sélo tienen validez si retinen las siguientes
condiciones:
1°.- Que el érgano del que emanen cuente con previa
investidura regular;
2°,- Que el mismo érgano haya obrado dentro de su
competencia; y
3°,- Que también haya obrado en la forma que prescribe la ley.
Si no se retinen todas estas condiciones, el acto infringe el
mencionado principio y, por consiguiente, se encuentra expuesto a
ser anulado judicialmente.
En el caso sub-lite es evidente que SS. ha invadido el ambito
que es propio de la competencia de la DGA y no sélo eso, sino que se
ha excedido en el uso de la Unica facultad que la ley le acuerda, que
es imponer una multa, mas no referirse a cuestiones de fondo del
procedimiento administrativo y, mucho menos, pronunciarse respecto
de excepciones que sélo podrian ser opuestas en el marco de un
procedimiento judicial como el regulado en el Titulo II del Libro II
del Cédigo de Aguas, siendo que el tema que nos ocupa se
encuentra tratado en el Titulo I del Libro II del Cédigo de
Aguas sobre Procedimientos Administrativos.2, De otra parte, la circunstancia de encontrarse reguladas
algunas responsabilidades por normas de derecho piiblico no impide
que las acciones destinadas a perseguirlas puedan extinguirse por el
transcurso del tiempo, en razén a que la prescripcién tiene un
caracter universal e indispensable para asegurar criterios de certeza y
seguridad en las relaciones juridicas.
3. Que asentado Io anterior es necesario sefalar que en el
Ambito del derecho administrativo sancionador no existe una regla
especial de prescripcién o que establezca la imprescriptibilidad de las
acciones.
4. Que ante la ausencia en el ordenamiento juridico aplicable al
caso de autos, y traténdose de disposiciones especiales, debe
necesariamente entenderse que han de aplicarse supletoriamente las
normas de derecho comun que, segin la materia especifica,
correspondan.
5. Que, por lo que a continuacién sefialaremos, no correspondia
aplicar en este caso el plazo de prescripcién establecido en el art. 94
del Cédigo Penal tratandose de una falta, pues la sola circunstancia
de que la infraccién conlleve tan solo una pena pecuniaria (multa) no
transforma al ilicito en una falta penal o que deba reputérsele como
tal, toda vez que esta sancidn es, segiin el art. 21 del Cédigo Penal,
una pena comtn para los crimenes, simples delitos y también para
las faltas,
6. Asimismo, la sancién administrativa es independiente de la
sancién penal, raz6n por la que debe hacerse una aplicacién matizada
de los principios del derecho penal en materia de sancién
administrativa, no siendo razonable aplicar, como ha ocurrido en el
caso de autos, el plazo de prescripcién de las faltas, pues al ser ésta
una prescripcién de corto tiempo (6 meses) resulta eludida la
finalidad que el legislador persigue para dar plena eficacia a los actosde la Administracién adoptados en represién de estos ilicitos y la
sancién contemplada en la ley carecerfa, en consecuencia, de toda
finalidad preventiva general,
7. Que esta independencia entre la sancién administrativa yla
sancién penal queda claramente establecida si se considera que la
primera puede afectar a las personas juridicas, en tanto que la
segunda no podria afectarla.
8. Que, por lo anterior, no es posible desentenderse de la
imposibilidad juridica que se advierte en asimilar la contravencién
administrativa a una falta pena, que es la Unica manera de concluir
en un plazo de prescripcién de 6 meses para la accién persecutoria.
9. Que si bien es cierto en doctrina se puede hablar de delitos
Menores, no es menos cierto que ellos no han dejado de ser tratados
como infracciones propias del derecho penal e interpretados de
acuerdo a sus principios, de lo que se desprende que por nimia que
fuere la sancién anexa al hecho éste no deja de ser un delito penal
por tal circunstancia.
10. Que es util recordar que el art. 20 del Cédigo Penal sefiala
que no se reputan penal las multas y demas medidas correctivas que
los superiores impongan a sus subordinados en uso de sus
atribuciones gubernativas o disciplinarias, propias del ius puniendi del
Ambito administrativo.
11. Que aceptar la prescripcién de 6 meses para la aplicacién
de la sancién admii
istrativa (recordando en esta parte que el tema
que nos ocupa se encuentra tratado en el Titulo I del Libro II
del Cédigo de Aguas sobre Procedimientos Administrativos)
atenta contra la debida relacién y armonfa que debe guardar la
legislaci6n, ya que no resulta coherente que la accién disciplinaria por
responsabilidad administrativa de los funcionarios publicos prescriba
en 4 afios conforme al art. 158 del Estatuto Administrativo y que, en
cambio, la accién sancionatoria dirigida contra particulares prescriba
en el plazo de 6 meses.12. Que, por lo dicho, no estamos en presencia de una falta
sancionada por el derecho penal, sino ante una falta de caracter
administrativo, a la que no le es aplicable por extensién el plazo de
prescripcién establecido en el art. 94 del Cédigo Penal.
13. Que frente a lo anterior, tratandose de una falta de caracter
administrativo, regulada en el Titulo I del Libro II del Cédigo de
Aguas sobre Procedimientos Administrativos, y existiendo el
defecto normativo de omisién de un plazo razonable y prudente de
Prescripcién en la ley se impone el deber de encontrar en la
legislacin positiva, actual y comun, la solucién al problema,
debiendo recurrirse, en consecuencia, a las normas generales del
derecho comun dentro del ambito civil, razén por la que no cabe sino
concluir que el plazo de prescripcién de la falta administrativa
cometida por HOTEL ALTO ATACAMA S.A, sélo puede ser aquél al que
corresponde a la regla general de prescripcién extintiva a que se
refiere el art. 2515 del Cédigo Civil, tema respecto del que SS. sélo
tendria competencia para conocer en el evento de iniciarse por parte
de HOTEL ALTO ATACAMA S.A. un juicio ordinario declarative de
Prescripcién extintiva de la falta, mas no de la multa que le fue
impuesta en el procedimiento administrativo 0, en este tltimo
evento, una vez transcurrido el plazo de prescripcién previsto en el
art, 2.515 citado, computado a partir de la fecha de la imposicién por
parte de SS. de la multa conforme la regla establecida en el art. 175
del Codigo de Aguas.
14. A mayor abundamiento, conviene destacar que la aplicacién
de la normativa del ordenamiento ordinario en materia de
Prescripcién de las acciones no lo es con cardcter de supletorio,
basado en las normas generales del derecho, sino que tal aplicacién
debié hacerla SS. en virtud de mandato expreso del legislador,
contenido en el art. 2497 del Cédigo Civil, conforme al que las reglas
relativas a la prescripcién se aplican igualmente a favor y en contra
del Estado.15. Finalmente, SS, deberd tener presente que los hechos
materia de la denuncia formulada por la DGA no fueron desvirtuados
en modo alguno por HOTEL ALTO ATACAMA S.A.
POR TANTO,
y con el mérito de lo expuesto y de las disposiciones legales
invocadas,
RUEGO A SS. tener por interpuesto recurso de apelacién en
contra de la sentencia de primera instancia dictada en la causa,
dictada por SS. con fecha 27 de septiembre de 2011, escrita a fojas
235 y siguientes de estos autos, que acogié la excepcién de
prescripcién extintiva opuesta por HOTEL ALTO ATACAMA S.A. en
relaci6n a la denuncia formulada en contra de ésta por la DIRECCION
GENERAL DE AGUAS DE LA SEGUNDA REGION, conceder el recurso
para ante la Iitma. Corte de Apelaciones de Antofagasta, a fin de que
dicho Tribunal de Alzada revoque la sentencia dictada por SS. y en su
lugar declare que: (i) el art. 175 del Cédigo de Aguas sélo facultaba a
SS. para imponer una multa, dado que la ley no indica la autoridad
encargada de hacerlo en el caso sub-lite; (ii) que correspondiendo al
juez a quo imponer la multa, y al no haberlo hecho en funcién de lo
resuelto en el fallo de primer grado apelado, corresponde al Tribunal
de Alzada hacerlo de conformidad con lo prescrito en el art. 175 del
Cédigo de Aguas, imponiéndose, en consecuencia, a HOTEL ALTO
ATACAMA S.A. una multa de 20 Unidades Tributarias Mensuales; (il)
en subsidio de lo anterior, que la Iltma. Corte de Apelaciones de
Antofagasta impone a HOTEL ALTO ATACAMA S.A. la multa que
estimare prudente establecer, atendida la gravedad de los hechos y
acciones constitutivos de la infraccién, y (iv) que el plazo de
prescripcién extintiva de la falta administrativa cometida por HOTEL
ALTO ATACAMA S.A. sélo puede ser aquél que corresponde a la regla
general de prescripcién extintiva a que se refiere el art. 2515 del
Codigo Civil.