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ay Franco Berardi Bifo GENERACION POST-ALFA Patologtas ¢ imaginarios en el semiocapitalismo Traduccién Diego Picotto Emilio Sadier Ezequiel Gatto Manuel Aguilar Patricia Amigot Hibai Arbide Aza Marfa Sirera Conca Manuel Aguilar Hendrickson indice ; Queda hecho el depésito que marca la ley 12.723, ‘wwwtintalimon.com.ar Uma bifurcacién: A modo de epilogo La altima bifurcacién Bifo Gerieraci6n Post-Alfa : patologias e imaginarios en el semiocapitalismo, . ta ed,- Buenos Aires : Tinta Limén, 2007. Didlogo Franco Berardi - Colectivo Situaciones 7 264 p.; 20x14 cm. - (Nociones comunes; 8) Introduccién: Bifurcaci 2 ISBN 978-987-23140-4-0 Beret aero : 1 Pllosofia Polfica. 1. Tilo Primera biferacién: Utopta/Premonicién disutpica cpp El afio en que el futuro se acabo 35 jao.r ¢Qué significa autonomfa hoy? 7 1 reimpresion: abril 2010 Segunda bifurcacién: Conectividad /Precarizacién Generacién post alfabética B Infotrabajo y precarizacién 8 Bote es un titulo original elaborado por Tinta Limén east eee eee eee Tercera bifurcaci6n: Semiocapital/Splattercapital iciones ‘Trabajo cognitive y capital recombinante 107 ‘Traduccién del italiano: Patricia Amigot; Manuel Aguilar, Splatterkapitalismus m9 Ezequiel Gatto; Diego Picotto; Emilio Sadier; Hibai Arbide _ ‘i ‘Aza; Manuel Aguilar Hendrickson; Maria Sirera Conca. ee — i Correccién: Graciela Daleo Puritanismo y virtualizacién a4 Disefo: Cucho Fernéndez Quinta bifureacion: Infostera Alice y Lenin 59 Infosfera y mente social 195 Mediamutacién. Cultura de los medios y crisis de los valores humanistas 18: exs9 Sexta bifurcacién: Psicésfera Cafda tendencial de la tasa de placer 197 Patologias de la hiper-expresién ant Atribucién-No Comercial-Sin Obras Derivadas 2.5 Argentina La epidemia depresiva. Una lectura de Cho 2as El lado oscuro de la belleza 239 251 Caida tendencial de la tasa de placer Hiper-sexualizacion y des-sensibilizacion Le Monde del 19 julio de 2007 informa que Durex, el gigante del preser- vativo, la gran corporacion productora de condones, solicit una encues- ta al Instituto Hams Interactive. Fueron escogidos veintistis paises de diversas culturas, En cada pafs fueron entrevistadas mil persons sobre ‘una cuesti6n simple: qué satisfaccién obtienen en el sexo. Sélo el 44% de los entrevistados respondié que obienta placer en ia sexualidad Puede suceder que los bipedos posmodemos obtengan un placer zefinadisimo en el trabajo o en la guerra, quién sabe, Pero, cierta mente, el amor no obtiene un gran éxito de piblico, tanto més que es dificil creer que todos los del 44% hayan dicho su intima verdad, la que corresponde a su mis profundo sentimiento; mientras que po- driamos estar seguros de que los restantes 56% son infelices de veras. Estoy diciendo pavadas Lo admito, estoy diciendo pavadas. «Como se puede medir el placer? No se puede, Pero se puede creer en la percepcién de la experiencia que un ntimero creciente de personas zmanifiesta (aunque busca no admititlo). 1-H erin utlzad ee “aneate" qu, ene hale cobiana, nfomal gifs una aficmacin our {iin cnliers Qo er entipda, tn, ptad de sentido lice depea hace paras). (N. eT.) 197 Las explicaciones que sexélogos, psicblogos y socidlogos ofrecen so- bre estos temas san, en general, poco interesantes: la Hberacién de las costumbres sexuales, la cisis del deseo, la mercantilizacién del cuerpo ‘humano, la banalizacién mediitica del sexo. Explicaciones que explican poco, Lucy Vincent, una neurobigloga entrevistada por el diario Le Pari- sien, ofrece una interpretacion inteligente, si bien un poco sintética: “On ne ‘accord plus assez d’aitention*. No estamos mas en condiciones de dar- nos atencién 2 nosotros mismos. Esto sf que es interesante, No tenemos tiempo suficiente para atendernos a nosotros mismos ni a aquellos que viven alrededor nuestro. Presos en la espiral de la competicién, ya no somos capaces de comprender nada del otro. La atencién, facultad cognitiva que vuelve posible la plena percep- cién de un objeto mental (nuestro propio cuerpo, por ejemplo, o el cuerpo de Ia persona que acariciamos) esté disponible en cantidad li- riteda; tanto es asi que en los iltimos afios algunos economistas (los economnistas, verdaderos sepultureros del alma humana) comenzaron a hablar de attention economy. Y cuando un recurso se vuelve objeto de esa ciencia necréfila, quiere decir que se vuelve un recurso escaso. La atencién es un recurs6 escaso, tanto es asi que existen técnicas, para optimizarla, En las sociedades postindustriales, la atencién viene siendo absorbida de manera creciente por la competicién, por lo que es natural que se vuelva éscasa para una actividad que no puede tener nada que-ver con la competicién y con Ja productividad. En confirma- ‘ién de esta hipétesis la encuesta de Durex ofrece los siguientes datos desagregados: s6lo el 1596 de los japoneses declara conseguir satisfac- ciGn en el sexo, s6lo el 25% de los franceses (que también declararon. hacerlo con més frecuencia que todos los otros), los mexicanos Tegan al 63%ylos nigerianos (los mas felices de todos, dado que el tinico trabajo competitive que pueden desarzollar consiste en hurtar petréleo de los ‘tubos que los occideritales coristruyen ent la periferia de sus pueblos) nada menos que al 67%. La tafda tondencial de la tasa de goce es, cteo, la ley fundamental de la econorafa del semiocapital. Experimento cierta incomodidad por este lurking, por espiar a través del agujero de le cerradura de los dormitorios de la humeni- 198 dad. Busco los signos de un suftimiento que no es realmente podible cuantificar. Sin embargo, estoy convencido de que en esta creciente infelicidad por desatencién se encuentra el punto decisivo pare las es- ‘trategias de subjetivacién por venir, porque la desatencién es el efecto de la explotacién competitiva de nuestro tiempo. La sensibilidad es el punto decisivo. Sensibilidad es la facultad de comprender los signos que no pue- den ser verbalizados, es decir, codificados de manera regular, verbal, digital. Cuanto més la atencién humana es ebsorbida por la verbali- zaci6n, por la codificacién digital, por la modalidad conectiva, tanto ‘menos sensibles son los organismos conscientes. Infelicidad puede significar, quizas, precisamente esto: conciencia sin sensibilidad. Conciencia privada de la gracia de la armonfa entre juego césmico y deriva singular. Singularidad inarménica Los neo-humanos de las primeras generaciones post-alfa no son asexuados ni des-sexualizados, al contrario. E] sexo esti cada vez mis publicitado, esta cada vez més disponible en les estanterias del hipermercado global. Fl sexo ocupa siempre el centro de la escena del discurso publico e, incluso, del discurso privado. Pero @ la hiper- semualizaci6n de la modernidad tardia le corresponde una creciente des-sensibilizacién, ¥ ésta es le causa de la fragilidad de la psicésfera emanada del semiocapital.

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