Professional Documents
Culture Documents
Descartes, Meditación de La Filosofía Primera, I-III PDF
Descartes, Meditación de La Filosofía Primera, I-III PDF
Descartes, Meditación de La Filosofía Primera, I-III PDF
soy, aunque yo sempre estédormido y aquel que me ha creado sre engatieLemitu ct euauly ex en vu pila? Que 8 Bo ye a distingue de mi pensamiento? Qué es fo que puede devise que «itd separado de mn! mismo? Porque es tan evidente que yo Soy elque duda, ef que entende, ol que quiere, que no hay nada por medio de lo cual se-explique con més evidencia. Ahora bien, yo tarabién soy el mismo que imagine: porque, aunque tal ve, como te supuesto, ninguna cosa imapineda sea verdader, sin embargo la Guerzetitme de imaginar existe en verdad y hace parte decal pinsamiento, Finalmente, yo mimo soy el que sent, o el que me day cuenta de las cosas corporales como por ios sents; e cltzo gat ahora veo luz, cigo rulo, sient calor, Estas cosas son flsas, Porque estoy dormido, Pero cietamtente parece que VE0, olgo, siento calor, esto no puede se falso, esto es propiamente lo que en aise lame sentir: esto tomado at con precsi6n, no es otra cose 41: pensar 1 dibs fala primera pega Pee por gul..? ® »Sau musta ‘Con Jo cual comiento en verdad a conocer un poco mejor lo que soy: pero sin eubargo todavia parece, y no puedo abstenermne de reer, que las cosas corporates, cuyas imagenes se forman en el pensemiento y que los mismos sentidos exploran, se conocen con sucha mas distneién que ese no s€ qué de mi que no cat bef la {maginacién: aunque en verded resulte exabo que las cosas que me doy cuenta de que son dudoses, deszonocidesy aenas a caf, ean comprendidas por mi con mas distincién que aquello que es ver dadero, que es conocido, en fn, que yo misma, Veo sin embargo lo ‘que pase: ml mente gozaextravidndose, y todavie no soporte verse cohibida dentro deloslimites dela verdad. See pues, y concedémosle todavia por una verlendas muy sueltes, pare que poco después, re: Cogides oportunamente, se dee dirigir con més fecilidad, Consideremos aquellts cosss cuye comprensién es consi: derada vulgacmente le rds distinta de todas: « saber, los cuerpos que tocamos y que vemos, pero no ciertemente fos cuerpos en comén, porque esas percepciones genereles suelen ser un poco més confusas, sino uno en particular, Tormemos, por ejemplo, este cera: ecaba de ser retirada del panal, ain no be perdido todo el subor de su mil, retlene algo del olor de las flores de donde fue recolectads; su color igure y tamao son claros;es dur, es fl 4s fill de tocar y, a se la golpes con al dedo, emite un sonido; alll estén, on fin, todas las cosas que parecen cequerise pare que ‘un cuerpo puede ser conocido dele manera mis distinta, Pera he ‘aqui que mlentras hablo esacercada sl fuego: pierde los restos de ‘tebos el olor se eafume,cambie el color, deseparece le Sgura, crece ¢l tamaso, se vuelve iguida, se caliente, apenas se In puede tocer, 1 ahora la golgeas no emite sonido, 2Permanece caso todavia J misma ceze? Hay que confesar que permanect, nadie lo nig, ‘adie dice otra cosa. Entonces qué eralo que en ell se comprendta de manera tan distin? Por certo, nada de aguelias cosas que yo sleanzabs con los sentidos: porque todo fo que cafa bajo el gusto, 0 e olfato,o la vista, al tacto, 0 el ofdo, ha cambiedo ahore, y permanece la cera, Segunda modineen ‘Tal vex era aquello que ahora pienso, w saber, que le cere ‘misma no ere en verdad esa dalzura de le mia, nila Sregancia de las lores, ni esa blancura, nite figura, of el sonido, sno el eusrpe gut poco antes me aparecia visible con esos modos, y ahora con ‘olzos. Empero jqueé es proplarente eso que as! imeginot Prestemos atencién y, apartando lo que no pertenece a ln cera, vearnos qué queda: dnicamente algo extenso, flexible, mudable. Ahora bles. iguées ego Rexible y mudablet” ;Acaso lo que yo imagino, que esta cera puede pater de une Sgura redonda a una cuadrada, o de ésta ‘une triangular? De ninguna manera, porque comprendo que ella es capar de ineumerables cambios de esu especie, y nb puedo sin ‘embargo recorzer con ia imaginacién esos Innumerables, por lo ‘uel esa comprension tempoca se lleva a cabo por Ia facultad de Amaginar. xQu¢ 8 fo extenso? zAca90 su misma extenaién no es también desconocida? Porque en la cera que se dersite se vuelve mayor, adn mayor en le hirviente, y todavia mayer a se aumenta é) calor; y ne juagacia correctamente lo que es la cers no juzgera que admite también més variaclones en cuanto ala extensién de Jae que he abarcado alguna vex con ls imaginacién. Silo me queda coneeder que en verdad no Smagino lo que es Js cera, sino que lo percibo con Is sola mente Me refiero a ésta en particular, porque dela ceraen peneral es més claro, Ahora bien iqué cera es esa que slo se percibe con la mente Precisamence In misma que veo, que tect, que imagino, y Ia misma, por fn, que detde el eomienzo he eoniderado que era Por lo tanto lo que hay que notar es que at percepeién’ no es visidn, nf tketo, nl imaginacién, ni nunca fo ha side, aunque antes parectera asi, sino una inspeccién de la sola ‘mente, 1a cual puede ser imperfecta y confura, como lo ere antes, 0 clara y distinte, como lo es shora, segiin que yo le preste menos 0 _mis atencin a aquello de lo que consta, ‘Me admiro sin embargo entre tanto de lo propense que es mi mente a los ezrores; porque, sun cuando considere estas cosas ie: ta Ahr ie 1 Nero ancs y que carat i eennenta cnc 9 Tato francts pl mara gu cones dude lconenen 1 Tent fans ata: o le la azn eure pcibe »‘conmigo mismo en silencio y sin hablar, sin embargo me veo frenado por las palabras mismasy soy cai engafiado por lt misma manera de hablar. Porque decimos que vemos la cert misma si ‘std presente, yno que jurgamos que elle estd presente « parti del color 6 dela Bgura, De donde conciuiria inmediatamente:lacerase conoce entonces por lt visiin de los ojosy no porla sole inspeccién de la mente; si no hublera acabado por casualidad de observar por Ja ventana hombres que pasen por a calle, alos que digo tem! {que veo con no menor ccstumbre que en el caso de la cere. Pero {qué veo ademés de sombreros y vestidos, bajo los cules podrian ‘esconderse autématas? Sin embargo juzgo que son hombres. ¥ ash 10 que consideraba que vei con fos ojos fo comprende tinicamente ‘porla facultad de jongar que hay en smi mente ‘Ahora bien. que se averglence, quien desex saber por encima del vuigo, de haber ido a buscar dudes en les formes de hablar que ha inventedo el vulgo; y sigemos adelante investigando si yo per~ cibin mas perfecta y evidentemente lo que era la cera cuando la smlré por primers vex y cre que la conocfa pos el mismo sentiio extern, oal menos pore! sentido comtin, comolo loan, es decir, por lacapacidad de imaginer; o més bien ahora, despues de haber investigndo con mis diligencia Io gue ella es y cSmo se la conoce, Dudar de esto seri en verde Insensate, porque qué rao distinto na primera percepciént Qué habia que no parezca que To puede tener cualquler animalt Pero cuando distinge la cera de las formes externas y; qitindole sus vestides, la considero como desnuds, sunque todavia pueds haber error en mi juleto, sn embargo no la puedo percibir sin la mente homens Qué dirt entonces de esta misma mente, o de mi mismot Porque hasta ahora no admito que en mi heya nada més que Ik mente, Qué ditt repit, yo, ue tengo la impresién de percibi esta cere con tanta distinctén? jActs0 no me conozco a mi mismo, no sélo con mucha més verdad y mucha ms certs, sino también con ‘muchn ms distincién y mas evideocia? Porque sijuzgo que la cere caste porque la veo, resulta en verdad mucho mds evidente que yo rifsmo también exiso por lo mismo que ls veo. Porque puede ser {que es0 que veo no sea en verdad cera, puede ser que ni siquiera a 2 Segunda mecalan tenga ojos con los cuales se vea algo; peto de ninguna manera Puede ser que cuando veo, 0 (lo que ya no distinge) cuando pienso {que veo, yo mismo que estoy pensando no sea alge. De manera ¢- ‘mejante, si juago que la cera es porque la tovo, vuelve a resultar lo ‘mismo, a saber, que yo soy. Si es porque Lmagina, o por cualquier tra causa, sucede por completo lo misme, Pero esto mismo que rvierto de Ia cere, resulta leit aplicarlo a todas las demés cosas que estén puestes fuera de ml. Més adn, se percepclén dela cere tu parecido mis cara después de que se me dios conocer no s6lo or la vista o por el tecto, sino por méltiples eausas, con culata ‘nbs distincibn debo conceder que me conozco am( mismo, puesto que no hey razones que puedan ayudar ala pereepcién de Ia cece, 0 de cualquier otro cuerpo, sia gue todas elles prueben ain mejor ja naturaleza de mi mente, Sin embargo, hay ademés tentas otras ‘covas en la misma mente por las cuales se puede esclerecer ain mds ‘0 conoclmiento, que aquellas que emanan del cuerpo a la mente apenas si merecea ser tenldas en cuente, Y he equi que por fn he regresadn natnralmente alli donde ‘uerfas porque como shora me esulia claro queles cuerpos misinos ‘to son percibidos propiamente por los sentidos, 0 por la facultad 4ée tmaginar, sino pore solo intelecto,y que tampoca sft percibe Porque se los toque 0 se los wea, sino tnicamente porque se los entiende, aé elaramente que nada puede ser percibido por m{ con ‘més facilidad ocridencia que ml mente, Pero comone puede aban. conarte tan pronto le costumbre de una antigua opinin, conviene Aetenerse aqui para que se grave mAs profundamente este nueven conochmiento en mi memoria con fz duracién de le meditacisn, “Tercera meditacién Acerca de Dios, que existe CERRARE AHORA LOS 0705, me taparé ls odos, sparta todos ‘ls sentidos, también todas ts imégenes de lea cossscorporales los borraré de mi penstmieno,o, en verdad, ye que esto apenas puede ‘hacerse, como inenesyfalses no les deré vor algun, sino que, bo- blando sdlo conmigo y observindome mis a fondo, rataré de b cerime poco a poco tis conocido y familar conmigo mismo. Yo soy tans cosa pensante, es decir, que duds, que afrms, que nlzga, que en- Hiendepoces cosas, que gnora rauches que quere que-e quiere, que maging también y que sient; porque, comolo sefwlé ya antes, aunque aquelles cosas que siento 0 imagino fuer de mi tal et no sean nad sin embergo esos modos de pensar que llamo sentidoseimeginecién, ‘ncuanto ton Unicamenteclertos madosde pens, stoyieto deque estén en mt Y con estes poces comns he resehado todas las que s¢ ver- daderamente, 0 al menos aquellas de las que me he dado cuen hasta ahora que s&, Voy s examinar ahors con més cuidado pars ver si hay tal vex en ml todavia otras cosas a las que atin no he atendido. Estoy certo de que soy cose pensante, pero entonces sno sé también lo que se requiere para estar cierto de elgo? Porque en tste primer conocimiento no hay nade més que clerta pereepcién 1 Teno Retr ahade eae gut ol ween india dra y distintn de aguello que afro; ie que en verdad no cia suliclente para que yo legaraa estar certo de le verdad de a cose, sialgna ver pudierasuceder que algo que percibiere de tal manera claro y ditinte fuer flo; y pr lo tanto me perece que ve puede ‘ettablecer ye como regla general que e verdadero todo aquello que prcetbo may clara y distintsmente, Sin embargo, he adtido eneriormente muchas cosas como sinrtas y claras, que Inego descube! que eran dudosas. iY cuiles fueron esas cosas? Puss I tera el cielo las earls y todas las dems costs que tomeba por los sestidas. Empete jgué percibla con carhdad de ells? Prelsarneste, que la deas mlsmas de tales «#sa5,olospensarientossepresentaban mal mente:pero tempoco ahors pongo en cuestén que esas ideas estén en ra. ces era ‘ira cosa lo que yo afrmaba, y también lo que, por Is costambre de creer conskderaba que yo peelbla, pero que en realidad ro per- cia, a saber, que hebia algunas cosas foera de mi delat que pro cidlan esas ideas y les cunles les exan por completo semseantes, ¥ en esto ezaen To que me equivecaba,o, si jurgabaacertadamoente, fo en verdad no sucedia en virtud em petcepcion. WY entonces? Cuando consideraba algo may simple y fll cerca delas cosa Aritméticas o Geométcicat, como que dos y tres Jumtos hacen cinco, 0 cosas semeantesgtcaso no ints al menos esis cosas con suficlenteclaridad come para airmar que eran ve Giderast Yo mismo no jusgul luego que se debla dudar de tales cess, sino nicemeate porqueme vente alamentequetalvexalgia Dios podia heberme otorgato una natuealea tl que se engasara hist con respecto n aguellascoess que parecan evidentisimas pttoeada ver que se me presenta esta opin preconcebida acerca de I oranipatenca de Dios, no puedo menos que conser qu, s! 4l quisiera, le sera fel acer que me equivacara aun en aquellas ccses que considezo ver con os ojos de fa mente dela munere mis evidene; pero cada ver que atlendo a eas cotas misma que eon- silero percibir muy claramente, me persuaden de tal manera, que ex forma espontinea lego exclme:que me engate quien pees, «ue aunca Inrard que yo see anda mlenteas plense que soy slg, © ‘qe alga vex sea verdadero gue nonce he sido, cuando shora es‘rare madaclin verdad que soy tl ver también que dos y tres juntos sean rads 0 ‘menos que cinco, o cosas sercejantes, en las cusiesreconozco una ‘evidente contradicciéa, ¥ es verdad que, como no tengo motivo slguno pare cotimar que haya elgiin Dios que sea engafiador. y ni siquteca sé todavia suficlestemente si hey algin Dios, la razén de duder que depende dnicamente de esa opin es muy tecve 1 por decirlo asl, Metaftica, Empero, pare que también ella sea descartada, eperas se presente la ocasién deberé exeminar si existe Dios y, si existe, si puede ser engaador, porque ignorade esto. no ze parece que pueds estac completamente clerto de ninguna otra cose BL orden, empero, parece exiglr ahora que yo disteibuya primero todos mis pensamientos en cierlos géneros*y que examine en cules de ellos se dé propiemente la verdad o Is falsedad. Al- ‘gands son como imagenes de las cosss, alos cuales inicamente ies conviene con propiedad el nombre de ideas: como cuando pienso en tn hombre, o en ona Quimera, 0 nel Ciee, o en un Angel, © en Dios, Otros, en cembio, tlenen ademas otras certas formas, como cuando quiero, cuando temo, cuando afro, cuando niego, siempre cepto ciertamente alguna cose como sujeto de mi pensa- miento, pero también sbarca algo mde con el pensamiento que la semana de esa cosa: yde esos elgunos se Haman voluntades © fects, 0s en cambio juicios, ‘hore bien, en lo conceraiente a l ideas, si se las considera soles en sf mismas y no las reiero a ninguna otre cose, no pueden, propiamente ser falsa: porque slimagino una cabra cuba qulmera, rao es menos verdad que imagino la una que le otee. Tampaco hay que tere faleedad alguna ele voluntad misma, o en los afectos, Porque, aunque yo pueda optar por cosas males, o por equellas ‘que no existen, sin embargo no por ella deja de ser verdad que he ‘optado par esas cosas, y pot Io tanto abio quedaa Jos julcios en 1 Texto fans po queyo pce er easton de xana esht earpiece pat metar que prepa, ques pus ‘or aos dels noinas qu encuentro sen pers en meri squats ue pur encoriar all eds sacar gu divide oqutades i penalise eels gnc, 9 Jos que debo culdarme para no errer. Ahore bien, el evcor prin- pal y el més frecuente que puede encontrarse en ello, consiste en que yo juzgo que la ideas que estén en mi son semejantes 0 con- formes a ciertas cores puestas fuera de mis porque clertamente, si considerare las ideas mismas sélo come ciertos modes de mi pea semlentoy no las refirera a mada mis, apencs podrian darme ma- tecla alguna para erat. De esas ideas unas me parecen que son innatas, otras adven- Ula y otras heches por mi mismo: porque entender lo que es une casa, lo que es la verdad 0 lo que es el pensamiento, no parece que Yolo tenge de otra part, sino de mi misma natureleza; pero que shora escuche un estrépit, vea el solo sientn el fuego, hasta ahora hs juzgado que procede de algunas cosas puesta fuera de mi, por ‘timo, las Sicens, los Hipogrifor y costs semejantes son inven todas por mi mismo. O tal vez puedo considerar también que todas son adventicias,o todas inmats,o todas hechas, porgue gin no he visto con claridad su verdadero origen Pero aqui sobre todo hay que peeguntac por aquellas que con- stlero como romadas de cosas que existen fuera ce mi, cudl sea In rxén que me mueve a estimar que son semejantes a exes covas. Y esque parece que asi melo ensefia la naturalea. Ademés, expetl- rento que no dependen de ms volunta,y por lo tanto tempoco ds m{ mismo: porque con frecueacla se presentan aun contra mai ‘oluntad: como ahora que Sento calor quiérelo 0 no, por lo tanto ‘onsidero que ess sensacin, 0 le idea del ealox, me viene de une cosa divesa de mi,a saber, del calor del fuego junto al cual estoy sentado. Y nade resulta més obvio que jurgar que est cosa, antes ‘ie cualquier otra, me envie su similltud. ‘Voy e ver ahora si estas razones son suficlentemente firme. (Cuando digo aqui que ai me lo ensefa ls naturelezs,s6lo entiendo ‘ue por cierto impulso esponténeo me veo levado & creer eto, y 1a que se me haya mostrado que es verdadero por alguna luz na- tural, Estes dos cosas éiserepan mucho; porgus todo aquello qué ‘cme manifesta por la luz natural, como que del hecho de que yo ade ue siga que soy y otras cosas serosjentes, no puede de ninguna ‘aneta ser dudaso, porque no puede haber ninguna etre facultedsara asin en la cual confle tanto como en esta lux, y que puede ensefarme «qe esas coras no son verdaderag pero en cuanto 2 los Impulsos naturales ya antes me he dado cuenta de que con frecuencia he sido impulsado por ellos hacia la parte menos bueae, cuando se trata de elegir el bien, y no veo por que haya de poner en ellos rns fe con respecto otros asuntos. Ademds, aunque aquellas ideas no dependan de mi voluntad, no consta por lle que ells procedan neceseriamente de ls cosas poesins fuera de mk Porque ast como aquellos impuisos, de los ‘cuales actbo de heblar, snque estén en mi, sin embargo parecen aque son diferentes de mi voluntad, as tal vex también heya en mt alguna otra facultad, ain no conocida suficientemente por mf cai- sante de esas ideas, como hasta ahora siempre sea visto que se forman en m{ mlentras duermo, sin ninguna intervencién de costs externas, Yen fin, aunque procedieran de cosas diversas de mf, de ahi no s sigue que deban ser semejantes asa cosa, Forel contrari, ‘me parece que con frecuencia se ha descubierto tm muchas una fan difeencie: asi, por elemplo, encuentro en mi dos ideas del sol diversas, una como tomada de los sentidos, que debe ser aslgnada or compieto a aquellas que considero adventicis, y por la cual me aparece muy pequeto, y olra, en camblo, deducide de as ra~ ‘tones de is Astronomia, es decir, snceda de algunes nociones que reson jnnatas, o hecha por mi Ge agin otro modo, y por le cual ‘muestra varias veces mayor que la tierra; amas, por supuesto, no pueden ser semelantes al mismo sol que existe fuera de ml, y In razén me persuade de que la mds distil es aquella que parece tmanar del mismo sol dela manera més inmediat, ‘Todo lo cul me demuestra suficlentemente que hasta ahora 00 he creido por un juici cietto? sino solo por algin impolso ciegp, ‘que existen algunas coses diversas de mi gus me envian sus ideas 0 Amégenes por los Srgenos de los sentidos, de algin otro modo. 1 Teno fate porn ia ey y premeltads, Se me ofttoe, empero, todavia otro cemino pare examina si ‘risten fuers de mi algunas de las costs cuyas Meat estén ex mi, Porque, en cuanto ese idess son able clerior modos de pensar, ao reconoaco entre elas desiguelded alguna y todas parecen pro- ceder ce mi de In misma manera; pero en custo usa representa sans cosa, y otra, otra, es evidente que son entre si muy divecsas, Porgue, sin duds las que me muestran sustanclas son algo ms y por decrio ax, coatlenea en si més realidad objetiva que las que slo representen modos o accidentess you vez, aqulla por la cual ‘esendo algiin Dios, eterno, infinlto, omniscente, omipotente y ‘ead de todaslas cosas que hay ederts dol, sin duda que tiene taal mis realidad objetiva que aquellas por ls cules se muestran sostanciasfnitas. Peroya ot sua natural es menifiesto queen lacause efciente ‘total debe haber al menos tanto, cuanto en al efecto de I misma causa, Parque, pregunto jde dénde podela tomar el efecto su zeae Iedad sno ¢s deo cause? ,¥ cémo se la podria dar la causa s! no la taviera? De ahi se sigue entonces que algo no puede ser hecho dela ads, yque tampoco la mas pertecto, es decir, lo que contiene en sf rs ealidad, puede serhecho porlo que es menos. esto no él as claramente verdadero de aquellos efectos cuya realidad es actual 0 formal, sino también de ls idessen as que sto se considera larese Uidad objetiva. Ast pues, no s6lo no puede, por ejemplo, una piedra ‘que aotes no ers, comenaar a ser shora sin que tea producids por clguna coss en It que, ya sea de manera formal, ya sea de manera eminent, est todo aquelo que se pone en a pledra; nl puede in- ducirse calor en un sujeto que antes no estabe caliente, sine por ‘una cosa que sea de un orden al menos tan perfect como e calor, y ss! defo dems; sino que ademés tampoco puede estar en mila iden Ge calor, o de pledr, si no ha sido pueste en mé por alguna causa ale que haya el menos tanta realidad, cusnta coneibo que bay en é calor, o en le piedra, En efecto, aunque esta causa no trensmi ‘ta idea nada de su realidad actual o formal, no por exo hay que «Teno francks ade er dei partipan por reject ms reds de sero prc,considerar que ella debs ser menos rea, sing quel naturaleza de Je idea misma etl que de por 6 no exige ninguna otra realidad formal fuera deaquella que ome de mi peasemlenia, del cusles un soot pero que ess idea contenga esta 0 equela realidad objetiva amis bien que otr, esto sin dude debe tenero de alguna cause en le aque hays al menos tanta realidad formal, cvanta rented objetiva tiene els. Porque suponemos que se encuzntra en 1s iéea algo aque no s: halla en sa cause, esto entonces lo tiene dela nada; por to tanto, por mis imperfecta que sea ese modo de ser gracis al cal ia cosa estdabjtivamente en el intelecto por la ies, sin duda que no «spor completo nade, por lo tento no puede provenit de Tenaga. [Ni debo tamnpocoallmentar la sospechs de que, camo la ren- lidad que cansidero en mis dees estan slo objetiva, no haya ne cesidad de que esa misma realidad ae encuestre formelmente en ls causa de esas ideas sino que baste con que taridn eté all cbe tivamente, Porque, asi como ese modo de ser obevo les corres ponde alas ideas por la misme naturaleza de sta, as también el ‘modo de ser formal les corresponde alas ceusas de as ideas por la paturalers de dichas causas, al menos ales primeresy principales Y aunque tl ver una dea pueda nacer de ot, sin erabargo at no se da un progreso al infinto, sino que ali debe legsrse a alguna idea primera cuye causa seta la manera de an azquetipo en el que se contenga de manera formal toda la realidad que esté en In idea s6lo de manera objeliva; de modo que por laluz natural me rests Claro que las ideas son en mal ala manera de imdgenes, que pueden muy bien decaer con facilidad de la perfeecin de lat cosas de las cues son tomadas, pero no pueden contener nade mayor 0 mis perfecto Y entre més lego tempo y con mayor cuidado examino todas estas cosas, con tanta meyor cleridad y dstinlén sé que son verda- eras, Peo entonces qué voy s conclu de ellast Que sila realidad bjetiva de alguna de mis ideas es tanta, que est cierto de que ella fn puede estar en mf ni formal, nl emineatemente,y que por lo ‘enlo no puedo tampoco ser yo mismo le couse desu ides, de ello se sigue necessclamente ve no estoy solo en el mundo, sino que Tevera meatier sxiste también alguns otra cosa que cele cause dent ides, Pero ai vp Se encueatra ea coi una idea ast, no tend ningin argumeato que me otorgue le certeza de la existencia de algune cost divecsa de eat porque he xaminade todo con le mayer diigenci, y hasta hora no he podido encontre ningin otro argumento. Ahorabiea, entre isideas,ademés deaqulla que mesnesra « mil mtsmo y dete cual no pads haber aqut ninguna difcultad, hay otra que me representa a Dios, otra «Iss cotas corporates « dmaniciadas,otrasalos Angeles, otras a los animales, fnalmente, ttas a ottos hombres semajantes a ml, Yen cuanto alas idces que me muestra otros hombres, 0 taimsles,o Angeles, etiendo con facilidad que se pueden com- poner de las que tengo de mi mismo, de las cosss corporal y de ios, aunque no hubiere en el mundo, ademés de ml, ni hombres, a animales, nl Angeles En cuanto las idea dels cosescoxportles,en camblo, nade tan grands se encuentra en elas que no parsaca que hays podido rovenir de au miemo;porque sl obsecvo més fondo ylasexamin0 ‘ne por una, al modo como exarninéayerla ides dela cera, me doy cuenta de que sélo hey ray pocas costs en elles que yo perciba alata y distintamente, a saber, a magnitad o la extensién en lon tad, lath y profundidad; a Sgura que surge delos limites ce asa ‘tensa el ger que les diversas configuraciones cbtienen entre ‘hy elmovimiento, o¢l cambio de ese luge; las que pueden agre- jguse la sustancialaderacion y et nimero. Las dems, en cambio, como lay les colores los sonidos, los laces, ls sabores, el calor Ye ft, asi convo las ders cualidades betes, no son pensadas por mi sino muy confusa y oscuramente, haste el punto de que Uego a ignore si son verdaderas o falss, esto es Tas ideas que \engo de elias son ideas de algunas cosas, o no de cote, En efecto, sangue hace poco ht sefialado que la falseded proplemente dich, © formal, no puede encontrare sina en let juletot, no cabe duda de que hay sn embargo cicrta ote faleeded material en las coando preseatan lo que no es casa coma cosa: si por ejemplo, las ‘ideas que tengo del calor y del fio eon tan poco cares y distintas, aTercera meta que no puedo aprender de clas sel fro estan solo una privecién de calor, ol color privacion deffo, oambas son cualidedes reles, ‘000 es ninguns, ¥ como las ideas no pueden ser sino de casas! si fuera verdad que el flo noes mis que una privacin de calor, no sn raxbn se dirie que es felée 1a idea gue me lo representa coma algo real ypositivo, ys! de las demas, ‘Alas gue, por supuesto, no es necesario que les asigne alga autor diverso de mi; porgue si fueran falas, esto es, sino repre- sentan cose alguna,me resulta clo porla hz natural que proceden ela nade, eto es, no estén en mf por otra cause, tine porgue algo Je falte ami naturaleta y no es por completo perfects: pero si son verdaderas, como rae muestran sin embargo tan poce reallded que ‘i siquiera puedo distinguitlede lo que noes cos, no veo por qué ro puedan proceder de mi. De aguello, empero, que es claro y distinto en las ideas de Jas ‘cosas corportles, algo creo que ha podido ser tomado de Is idea ‘de mi mismo,» saber, Je sustancie, Ja duracién, el nmero y atras cosas que haya serajentes; porgue cuando pienso eut la pitdra es sustancia, o que es una cosa apta de por si pars exstin y asi mistno que yo soy sustancia, aunque concibe que yo say cosa pensante y ‘no extensa, mientras que le piedra es cosa extense y no pensante, que por lo tanto entre los dos conceptas se dain méxima diver- sidad, sin embargo se ve que convitnen en razén de la sustancias Yyanl mismo, cvande percibo que ahora soy, y me acuerdo de que tamblén habia sido vn poco antes, y cuando tengo varios pensa- rientos cuyo niimero entiendo, adgulero ls ideas de le durecion y el nimero, las que luego puedo transferir x cualquier otra cosa. ero todo lo demas con lo que se conigursn las ideas de Ins cooss corporales, a saber, extension, figura, ugar y movimiento, no estd ‘en verdad contenido de manere forreal en il, puesto que no toy sino una cosa penseote: pero como son inicamente clertot modos de la sastencia,y yo soy sustancla, parece que pueden estar conte- nidos en mide manera eminent {Teno ancl ade tai gi er es como igenes mopude aber guna cue mous pore ropes. ‘wearameincéo Y asl a6lo queda in idee de Dios, en la cual hay que considera si se encuentra lgo que no pueda haber provenido de m{ mismo. (Con el nombre de Dios entlendo cierca sustanclaInfinita, indepen- lente, suprememente inteligente, supremamente podeross, por {guiea, tanto yo mismo, camo todo lo demds que existe, si algo mas existe, hemor sido creados. Todo Jo cual es en verdad de tel ns- traleza, que entre més culdadosamente Jo considero, mens me parece que hays podido proceder s6lo de mf. Por lo tanto, de Lo icho anteriormente hay que concluir que Dios existe necesaris- mente, Porgue, si bien es clerio que la idea de sustancia'esté en il ppor lo mismo que soy sustancia, no por ello, sin embargo, ester!a Ia idea de sustancle Infinite, siendo yo finito, si no procediera de alguna sustencia que en verdad sea infin Y¥ tampoco debo creer que no percibo lo infinite mediente una verdadera ides, sino s6lo ports negacién de lo finito, asl como percibo la quietud y Is tinleblas por Is negacién del movimiento yy de la Inz; porqus, por el contrario, entiendo claramente que hay ‘ms realidad en (a sustancts infnita que en Is nits, y que por 10, tanto, de alguns manera, se da en m{ antes la percepeién de o in- Grito que de lo Gnito, esto es, de Dios antes gue de mi mismo. Porque jcon qué raz6n entenderfa que dudo, que quieto, es decir, ‘que me falta algo y que no soy por completo perfecto, si ne hubieca en mi ninguna ides del ente ms perfecto con enya comparacisn conociera mis dfectost “no se puede decir tampoco que tal vex este Idea de Dios sea materialmente fas, y que por o tanto podria praventr de la nada, ‘como hace poco losefilé acerca de las ideas de cslor, de frfoy otras semejantes, porque, por el contrario, como es cara y distinta en el rms alto grado, y como contiene mis tenlided objetiva que cual- quler ota, na hay ninguna que de por sl sea mds verdadera,o en la ‘caal se encuentre menos sospecha de faloedad, Digo, pues, que esta Idea del ente soberanamente pecfecto ¢ in fnito ex vesdadere en. ‘sumo grado; porque, aunque tal vex se pueda inventar que vn ente ta} no existe sin embargo no se puede inventar que su ides no me 6‘wracn vedas reste nada rel como he dicho antes dela ida del eto, También clara y dlatnte en sumo grade; porque ode lo que percibo de sanera clara y distinta que es real y verdadero, y que implica alguna pevfecidn, se contiene por completo en els ¥no importa que yo no eamprenda lo innit, © que en Dios haya otras inc marubles costs que 7o de ninguna manera peda comprender, nl tal vex tempoco aleanaar com el pensamiento; porque correspende 4 la razén de lo infnito que no sea comprendido por mf que soy ‘into; ex sufcente gus yo entiende esto mismo, y que juzgue que todo aquello ue percba caramente y que sf que comporta alguns perfeccén, asl com tal ver también otras innumerables cos que Jgnoro, eatin en Dios, ya sea forme, ya see eminentemence, pera ue la ide que tengo del ses a mks verdadera de todas}aa que hey en mi,yla mie caray distints, Sim embargo, tal vx yo soy algo rads de lo que yo mismo en tendo, y todas esas perieccones que atrbayo a Dios estén en mf de alguna manera en potencia, aunque todavia no se despliguen, i pasen al acte. Porque experimento que mi conoeimtento se va sumentando pavletinamente; yao veo nada que se oponga a que se aumente més y mas hasta el iafinite, ni veo tampoco por qué a sumentar as el copoclmiento, yo no pueda con su ayuds alearzar todas Jas dems perfecciones de Dios, por sto, tampaco veo ‘por quéls poteaci para esas perfecclones, si est ya en mi, no sea sufclene para produci a lea de ells. De ninguna menera, nada de oxo es posible. Forge, en primer lugar, si as verdad que mi conocimlento aumenta paulatinamente 1 que en rat hay much covat en potencis que todavia na estén en ‘cto, sin embargo nada de eso pertenece& la iden de Dios, ye que nila nada es potencia; porque el mismo aumentaren forme pau Intra es une demostrcién may clerta de imperfeccién, Ademés, tunque mi congelmienio sumente més y eis, entiendo sin em- bargo que por lo mismo nunca serénfnito, porque nunca legard hasta el punto en que no sea capez den aumento ulterior; x Dio, en cambio, lo jungo sr de tl manect snd en acto, que nada se le puede afudiea su perfecein, ¥ por dltimo, percibo qu el ser ob- setivo de a idea no puede ser producido por un er sélo potencal, ue, heblando con propiedad. no es nade, siao nicamente por un ser actual o forma. Y, por sapuesto tempoco hey nada en todas estes cosas que 430 ten obvio por Ie uz natural «quien lo considere con stenclén: pero dado que, condo presto menos stencién y ls imdgenss de Jas cosas sensbiescbnubilan I uz de rl mente, no rccerdo con tanta feclidad por quéla idea del ence mis perfecto que yo procede secesaramente de algin ente que aoa ex realidad ris perfecto, e6 bueno proceder a investiga si yo, que tengo aquella Idea, podria ser sl tl ente no existiera aDe de tendris yo mi ser? Sin dada de ml, ode ris padres, 6 de algunos otros menos pefectos que Dict, porque nada s¢ uede pensar oinventar mas perfecto que 4 ni tampoco igual de perfecto, Pero si yo procediera de mi, no dudaris, nl tendris deseos, no ne faltria sbsolutamente cede; porque me hublers dado todas las perfeclones de les cuales vera alguna iden, y 4 yo mismo sera Dios. ¥ no debe creer que tal ve Jo que me falta sea més Aificil de adquiric que lo que ya esté en mis porque, al contraro, renulta lero que hubera sido mucho ms diflell que yo, ex deci, le cose o sustancia pengante surgiere de la nada, gue adquiric los ‘onocimlentos* de muchas cosas que lgnoro, jo cules no son mis que accidentes de esa sustancia. Yclertament, a tviera de mit suelo que ef mis, n0 me habria negado al menos aquellas costs «ue se purden obtener con més faeldad, pero tampoco singuns de les que percibo que se contienen en a idea de Dios; porgue en verdad ninguna me parece que sea més diflll de hecho; pero si ‘gunts fveran de hecho ins diffe, clertsmente me parecerien también més diffcles, dado que ls otras que tengo las teria de ‘ni porque expecimentarla qu en datas se agota mi poder? 1 Teno facts a lcs lat conoctniet, 2 Texto ane: hay dade qu precera et eponiande gue demi provi todas as dems cosas ue pst) equ experiment gu ish ser termarn al, ue navi cep de ear bast i “a‘ora masincn Y 0 escapo ala fuerza de estos argumentos i supongo que tal vez yo siempre he sido como soy ahora, como si de all ses giuiera que no hay que buscar on autor de mi xistencie, Porque todo tiempo de vide puede dividirse en Inaumerables partes, cade una de az cuales no depende en modo alguno de las demés, y de {que yo haya sido un poco antes, nose sigue que debs ser ahors, © no ser que alguiie cause me cre cast de nueva para este momento, teto es, me conserve, Porque resulta claro, e quien considere a aa traleza del tlempo, que es necesuria exactamente a misma fuerza Y accién para conservar cuelquer cosa darante los momentos en que dure, que la que es neceseri pare erearla de nuevo si todavia no esters; hasta ef punto de que también sea une de les cosas que son claras por la uz natural, que la diferencia entre conservacién y creacion es slo de razén, ‘Asi pues, dbo ehorainterrogarme a m| mismositengo guna fuerea porla que pueda hacer que eee yo, que soy shore, sige siendo también un poco después; porque, como no soy més que cosa pen- sante, 0 al menos, como slo me reBiero ahora « ese parte de rot {que es cosa pensante, sLhubiera en mf une tal fueres, no cabe dada de que yo seria conscieate de ela. Pero no experimesto que baya Agana, y por esto mismo sé con total evidencia que dependo de algsin otro ente dverso de ml ‘Tal ver, sin embargo, ese ente no sea Dios, y yo soy producto de mis padres, o de cualeaquiere otzas causes menos perfectas fue Dios. Pero no; como lo he dicho antes, resulta claro que en Jn causa debe ber por lo menos tanto, cuanto hay en el efecto; Y por lo tanto, como soy cosa pensante y tengo ademée en ml clete idea de Dios, hay que contesar que, cusiguiere que venga a ver la causa que se me asign, debe sex también cosa pensante y tener idea de todas Jas perfecciones que le atesbuyo a Dios. Y de ‘lla se puede volver a preguntar si procede de af misma o de otra, Porque si procede de si es evidente, por lo dicho, que ella misma 4 Dios, ya que, en efecto, comp tiene fuerea pera existir por s ‘ene sin duda también foeria para poseer en acto todas las per- fecciones cuyas iets tiene ens, esto, toda ls que concibo que m bay en Dios, Paro sl proviene de ot, se preguntard de nuevo dela misma manera de esta otras proviene de st ode otra, hasta que se llegue Gal mente ala causa daa que serd Dio. Results en efecto uy evidente que aqui no puede darse pro- 41080 al infnito, sobre todo porque no me refero aqut slo la causa qae en otro tempo rue prodnjo, sine también y Sobre todo a Ja que me conserva en el tiempo preegte, No se puede tampoco Inventar que tal vez hayan concursido muchas causs paciales para hacerme,y que de una haya rcibido Ja dea de una de as perfecclones que atsbuyo & Dios, yde otras iden de ote de tal manera queen verdad todas eas perfecclones se encuentren en algin Inger del universo, pero no todas juntas en un algo Gnico que sea Dios. Porque al contrat, le tnidad, Ja simplcidad o la toseparabiidad de todo le que hay en Dios es una de las principales perfecciones que entiendo gue hay en él. Y en verdad, tampoco la Idea de esta unided! de todas sus pefeceiones ppudo haber sido pueste en rl por alguna causa de la cual yo no Austra también fa idea de les demés perfecciones: porque elie no huabria pode hacer que las entendiera juntas einzepacables, sella _ng hublera hecho ala ver que yo conaclera lo que son. Por iltmo, en fo que respecta los padres, zunque sea verdad todo lo que en alguna ocastin he credo de ellos, sin embargo ellos ‘en verdad no me conservan, ni tampoco me han hecho de ninguna ‘manera en cuanto soy cosa peassnte; sino que tan a6lo pusieron ‘lgunas dispoticones en aculla materia, en la que be juagado que ‘atoy yo, esto es, a mente, daica que tomo ahora por mi. Y por lo unto sobre ellos no puede heber aqui éiicutad alguna; sino que Inay que conciie sin mis que, por el sla hecho de gue yo exist, y de que hayaen mi clerta dea del ente perfectisimo, esto ex de Dios, se demuestra con toda evidencin que Dis tablén existe, Sélo me resta exarninar cémo he tecibido de Dios esta ide porque nola he tmado de ios entidos,ni aes legedo nunca de smanera inesperada, como suclen hecario las ideas de as cones sen- sibles cumndo tals cosas se presenta, o patecenpresentrse lor 1 Tesolin dee way ron ”“cre medion {6rganos externos de os sentidos: ni tampoco ha sido heche por mi, porque no puedo de ninguns manera sustraerie o afadisle nai y queda por lo tanto gue me sea innata, asf como me es también Ironata la dex de mi mismo Y enverded nohay por qué admirerse de que Dios, al erearme, ‘me haya introducido ese idea, para que fuera como Ja marca del arsfice Impress ensu obra: tampoco es necesaro que esa mare sea une cosa distinta dla obre misms, Sino gué, por el solo hecho de que Dies me ha creado, resulta muy creible que yo haya sido hhecho en cierto modo a su imagen y semejanta, y que tal seme- janca, en In que eth contenida le idea de Dios, sta perciblds por ‘mi con la misma fucutad con Ja que me percibo a mf mismo: est> ‘es, que mentees dio la luz de mi mente hacia mf mismo, n0 slo cenlendo que soy una cosa incompleta y dependiente de otro, yuna cosa que aspira de manera indefiaide cada vex mis y més, o hacia lo mejor; sino que a la ver entiendo también que equel de quien dependo tiene todas esas cosas mayores, no sélo de manere inde finida yen potencia, sino cn efecto de manera infinite, y que e8 msl Dios. ¥tada la fuerza del argumento conalsteen que yo reconozca ‘que.n0 puede ser que ya exits con Ia natursleza que tengo, a aeber, tenlendo ea mila idea de Dios, a no ser que Dios en vecded exista también, Dios, digo, ese mismo cuya idea esti en mi, esto es, et que posee todas aquellas perfecciones que con el pensamiento yo puedo, no comprencier, pero sf de alguna manera aleanaar, y que ‘no esté sometidoa ningin defect, Porlo cual ex todasluces claro ‘que no puede ser engafiador; porque es evidente por le tar natural {que todo fraude y engatio depende de algin defecto. Pero antes de exeminar esto con mayor diligenca,y de inves tiger ala ver otres verdades que se pueden colegir de ahi, deseo demorarme agut un poca én lt contemplacién del mismo Dios, sopeser para mi sus atrbutos, y contempla, admirar y adorar In Deliezs de esta inmensa iu, haste donde pueda soportara la pers- 1 “exo anc por counts no queda ed gud dvi fi gu a gual gran deri mic, iat f produit cong dard tt ceed picacia de mi ingenio obnubiledo. Porque asi como creemos par fe que en esta sole contemplacién dele divina majestad consiste a ssuma felicidad de la otra vids, asl también ahora experimentarnos ue de larnisms, aunque rouches menos perfects, ee puede percibir el maximo placer de que somos capaces en esta vid.