cia parcial en ia disposicién constitucional y puede incluso afirmarse
que todas Jas predisposiciones humanas son cualitativamente idén-
ticas y no difieren entre si mas que por sus proporciones cuantitatt-
vas. No menos decisive es este factor cuantitativo en lo que respecta
a la capacided de resistencia del sujeto contra la neurosis. Todo
depende, en efecto, de la cantidad de libido inempleada que el su-
jeto pueda mantener en estado de suspensién y de la parte mas o
‘menos considerable de esta libido que e] mismo sea capaz de desviar
de la sexualidad y crientar hacia la sublimacién. El ultimo fin de
Ia actividad psiquica, que desde el punto de vista cualitativo puede
ser descrito como una tendencia a conseguir placer y evitar el dolor,
se nos muestra, considerado desde cf punto de vista econdmico, co-
mo un esfuerzo encaminado a dominar las magnitudes de oxcitacion
actuantes sabre el aparato psiquico ¢ impedir ef dolor que pudiera
resultar de su cstancamiento
Es todo esto lo que me proponia deciros sobre la formacioa de
sintomas en las neurosis; pero quiero insistir uma vez mas. y en for-
ma mas explicita, sobre la cirounstancia de que todo !o dicho no se
refiere sino a la formacion de sintorvas en la histeria. Ya en la neu-
rosis obscsiva nos hallamas ante un diferente estado de cosas, aur
que los hechos fundamentales continiian siendo los mismos. Las
resistencias a los impulsos derivados de fas tendencias, resistencias,
de ias cuales hemos habledo a propdsito de la histeria, pasan en la
acurosis obssiva a ocupar el primer plano y a dominar ef cuadro
clinico por medie de las Wamadas "formaciones reaccionales"
Andlogas diferencias y otras mis profindas aparecen en fas de-
mas neurosis, en las que ain no hemos evade término nuestcas
Investigaciones sobre sus corresponciientes mecanismos de formacién
de sintomas,
Antes de terminar esta conferencia, quisiera Mlamaros todavia Ia
atoncion sobre una de las facetas mas interesantes de Ia vida ima-
ginativa. Se trata de la existencia de un camino de retorne desde la
fantasia a la realidad. Este camino no es otro que el del arte. El
artista es, al mismo tiempo, um introvertido préximo a la neurosis,
Animado de impulsos y tendencies extraordineriamente enérgicos,
quisiera conquistar honores, poder, riqueza, gloria y amor. Pero Ie
faltan los medios para procurarse esta setisticcién y, por tanto, vuel-
ve fa espalda a lz realidad, como todo hombre insatisfecho. y con-
centra todo su interés, y tembién su libido, en los deseos creados por
su vida imaginativa, actitud que facilmente puede conducirle a la
acurosis. Son, en efecto, necesarias muchas circunstancias favorables
para que su desarrollo no aleance ese resultado, y ya sabemos cuan
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