ZEN MASTER HAKUIN’S CHANT IN PRAISE OF ZAZEN

From the beginning all beings are Buddha.

Like water and ice, without water no ice,
outside us no Buddhas.
How near the truth, yet how far we seek,
like one in water crying “I thirst!”
Like a child of rich birth wand’ring poor on this earth,
we endlessly circle the six worlds.
The cause of our sorrow is ego delusion.
From dark path to dark path we’ve wandered in darkness—
how can we be free from the wheel of samsara?
The gateway to freedom is zazen samadhi—
beyond exaltation, beyond all our praises, the pure Mahayana.
Observing the precepts, repentance and giving,
the countless good deeds, and the way of right living
all come from zazen.
Thus one true samadhi extinguishes evils;
it purifies karma, dissolving obstructions.
Then where are the dark paths that lead us astray?
The pure Lotus Land is not far away.
Hearing this truth, heart humble and grateful,
to praise and embrace it, to practice its wisdom,
brings unending blessings, brings mountains of merit.
And if we turn inward and prove our True-nature—
that True-self is no-self, our own Self is no-self—
we go beyond ego and past clever words.
Then the gate to the oneness of cause and effect
is thrown open.
Not two and not three, straight ahead runs the Way.
Our form now being no-form,
in going and returning we never leave home.
Our thought now being no-thought,
our dancing and songs are the voice of the Dharma.
How vast is the heaven of boundless samadhi!
How bright and transparent the moonlight of wisdom!
What is there outside us, what is there we lack?
Nirvana is openly shown to our eyes.
This earth where we stand is the pure Lotus Land,
and this very body the body of Buddha.
 EL CANTO DE HAKUIN-ZENJI EN ALABANZA DEL ZAZEN

Todos los seres son Buda desde el comienzo mismo/

Como el hielo y el agua/ sin el agua no hay hielo/ sin
nosotros no hay Budas./ ¡Cuan cerca esta la verdad y cuan
lejos la buscamos!/ Como aquel que un lago dice y clama
“tengo sed.”/ Como aquel que en la tierra vagando anda en
pobreza con un padre adinerado,/así hemos circulado por
los seis mundos sin tregua. La causa de nuestra pena es la
ilusión de “yo.”/Así/ de camino oscuro en más oscuros
caminos,/ hemos deambulado en muy grande oscuridad./
¿Cómo poder librarnos de la rueda de Samsara?/ De la
libertad la entrada es el Zazén Samadh.i/ Del ensalzar mas
allá,/ más allá del alabar esta el Mahayana puro./ La
observación de Preceptos, caridad,/ arrepentirse,/ la vida
del vivir recto,/ acciones buenas sin cuento,/ todo viene
del zazén! / Un Samadhi verdadero extingue todos los
males,/ purifica nuestro karma al disolver obstrucciones./
¿Dónde entonces se encuentran los oscuros caminos,/
aquellos que nos desvían?/ La Tierra de Loto Pura de
nosotros no esta lejos./ Con gratitud y humildad esta
verdad al oír,/ el alabarla,/ abrazarla/ y su gran sabiduría
cada instante el practicar/ méritos y bendiciones
innumerables nos trae./ Si nosotros nos volvemos hacia
adentro de nosotros y sometemos a prueba nuestra Real
Naturaleza/ nuestro propio Si-Mismo/ es/ en verdad/ No-
Sí-mismo/. Mas allá del yo vamos./ Mas allá de las
palabras./ De un solo golpe se abre la puerta que nos
conduce a la unidad inherente de la causa y el efecto./ No
dos, no tres/ rectamente la Vía corre adelante./ Nuestra
forma es ya no-forma./ Si vamos y regresamos no dejamos
nuestro hogar./ Y ya nuestro pensamiento es así no-
pensamiento/ y nuestras danzas y cantos son la clara voz
del Dharma./ ¡Cuan vasto es el paraíso del Samadhi sin
limite!/ ¡Cuan transparente y fulgida la luz de Sabiduría!/
¿Qué hay fuera de nosotros?/ ¿Qué hay que nos haga
falta?/ El Nirvana se nos muestra sin velo ante nuestros
ojos/ y la tierra donde estamos es la Tierra-Loto-Pura./
Este mismísimo cuerpo es el cuerpo del Buda.