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la península tangerina
Mohamed BEN ATTOU, Profesor Universidad de Agadir
Abstract: Morocco and Spain: Architecture, territory and urbanism: the case study of Tangerine peninsula
This article is considering the Moroccan-Spanish relations brought back to the scale of the
architecture and the production of the urban territoriality under the protectorate. The aim is to
highlight the heritage approach that must prevail in any form of tourism development, bilateral
and cooperation. To do this, it is essential to reconcile ourselves with our heritage first. Then to
understand it at the Mediterranean scale from an angle of Andalusia circular civilization that
brings us closer than it separates us. The examples analyzed thus of Tetouan, Larache and Ksar
El Kebir do not leave any doubt rapprochement
Keywords: Morocco-Spain, Protectorate, architecture, territory, Heritage, rapprochement
حالت شبه الجزيرة الطنجيت، الهندست المعماريت واإلنتاج الترابي والتعمير: المغرب وإسبانيا:ملخص
انمقال محاونت حىل انعالقاث انمغربٍت – اإلسباوٍت زمه انحماٌت مه وجهت وظر ترتبط بانهىدست انمعمارٌت وإوتاج انمجال
هدف انمقال ٌروو تثمٍه انمقاربت انتراثٍت انتً مه شأوها تحصٍه كم أشكال انتىمٍت انسٍاحٍت وانعالقاث انثىائٍت.انحضري
نهتمكه مه ذنك ال بد أن وتصانح مغ.وانتعاون بٍه دونتٍه ٌحكمهما انتارٌخ وانجغرافٍا وانجىار وانحضارة األودنسٍت اندائرٌت
حانت تطىان وانعرائش وانقصر انكبٍر انتً تىاونها.تراثىا ووفهمه حتى وتمكه مه انبىاء به مه أجم تقرٌبىا ببعض ونٍس إبعادوا
.انمقال تؤكد بجهٍت ترابطىا بما ال ٌدع مجاال نهشك
. انتقارب، انتراث، انتراب، انهىدست انمعمارٌت،انحماٌت، إسباوٍا، انمغرب:انكهماث انمفاتٍح
Introducción:
25
relación entre historia de un lado y arquitectura bajo el protectorado español de otro
lado para corregir los clichés que a menudo se transmiten en el sitio. Una ofensa más
que en una civilización "circular" asegurada por el crisol andaluz. Esto para resaltar lo
que nos acerca a la civilización y la urbanización para dar a conocer realmente lo que
tenemos y lo que podemos intercambiar entre nosotros. La historia específica de
Marruecos y España en los últimos decenios del siglo XIX y los primeros del XX que
ella es feliz o infeliz, es una historia compartida de un lado como de otro del
Mediterráneo.
Al nivel de la arquitectura y del urbanismo, un buen número de las ciudades
marroquís sobre influencia arquitectura española del momento pugnaban por desarrollar
actitudes cosmopolitas (Tánger), modernas (Tetuán), donde se reflejaban en la adopción
de estilos artísticos que estaban plenamente de moda en las principales capitales
europeas. Como indica el respeto Antonio Bravo Nieto en 2005: “Este “estar a la
ultima” no es por tanto un fenómeno aislado, e impregna los deseos de gran parte de
los grupos sociales más privilegiados, que se ubican sobre todo en las ciudades. Refleja
por tanto, una actitud consciente de participar de algún modo en esa imprecisa noción
de progreso y modernidad”1.
1
Antonio Bravo Nieto (editor), 2005: Arquitecturas y ciudades hispánicas de los siglos XIX y XX en
torno al Mediterráneo occidental, Publicación del Centro Asociado a la UNED de Melilla, p.11.
26
malentendidos2, se puede constatar, desgraciadamente, que la mayoría de los estudios
realizados se han alineado –sin razón- al modelo francés, más que al español. Además el
acercamiento patrimonial no se ha desarrollado suficientemente en las investigaciones
del extremo norte marroquí. Por eso, la mayoría de los estudios y tesis sostenidas sobre
este espacio proceden de un análisis de la Escuela francesa3, ya que fueron realizados
por franceses y marroquíes pertenecientes a ella. Como título indicativo, todas las
medinas del norte de Marruecos, no se han deteriorado ni han sido sistemáticamente
densificadas por el éxodo rural.
2
Se trata de un primer tiempo de los actos militares, muy consecuentes, ver a Sanchez Montoya,
Francisco. Los campos de concentración y centros penitenciarios en Ceuta y el Protectorado occidental
español en Marruecos 1936-1939. Instituto de Estudios Ceutíes: 117. En un segundo tiempo, se trata más
particularmente de dos operaciones de destrucción física de dos partes de la medina de Tetuán: la primera,
en lo que fue la puerta Bab M’barek, de la plaza del Feddane; y la segunda, en el antiguo mellah, M’salla
Kdima, Sidi Abbass y una parte de Rbat Asfal. Ver a ABDELLAOUI, M. : «la médina de Tétouan et son
évolution récente : étude de géographie urbaine », Université de Lille, 1986- p.30
3
Para más información, ver a RACHICK, A. Etudes et recherches urbaines sur le Maroc 1980-2004,
informe realizado a través del Centro de Investigaciones Jacques Berque, en el marco de su programa de
estudios “Leer y comprender el Magreb”, Rabat. 2005. 60p.
4
BEN ATTOU, M. « Le protectorat espagnol et le nord marocain : organisation administrative et
stratégie socio-économique, le cas du Bas Loukkos », Revue Dirassat n° 11, Agadir, 2003, pp.41-107.
5
NACIRI, M. « Politique urbaine et politique de l’habitat au Maroc ». In Politiques urbaines dans le
monde arabe. Ed. Maison de l’Orient, Lyon, 1985. ABDELKAFI, J. La médina de Tunis. Presse du
CNRS, Paris, 1989, 278 p. ; AMEUR, M. Fès ou l’obsession du foncier. Centre d’Etudes et de
Recherches sur l’Urbanisation du Monde Arabe (URBAMA), Laboratoire associé au CNRS, Université
de Tours, Fascicule de Recherche n° 25, Tours, 1993. 428 p.
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2-Tetuán: un territorio urbano típicamente andaluz y laboratorio arquitectural
Es de señalar que la población de la ciudad de Tetuán estuvo congelada durante
largos periodos en su historia demográfica. Su espacio urbano quedó fijado por su
muralla. Ella no aprovechó su posición geoestratégica como pasaje obligado hacia
Europa. La ciudad jugó numerosos roles económicos y administrativos importantes,
pero su impulso demográfico no tendrá lugar hasta su fase colonial. En efecto, la ciudad
pasó de 15000 a 80732 habitantes entre 1913 y 19506. Es decir, una tasa de crecimiento
global de 438% equivalente a una tasa de crecimiento medio anual del 4,9%. A nivel
espacial, esto se tradujo en una urbanización extra-muros en gota de aceite que
comprendió varios nudos urbanos (Centro español, Martil), nuevos barrios y nuevos
espacios de extensión (Barrio Málaga, Barrio Mulay Hassan, Ziana, Sidi Talha, Saloui,
Dersa, M’hannech), así como la aparición de los poblados costeros de Fnidak y Mdiq.
El hecho que la ciudad de Tetuán no se benefició de proyectos de construcción y de
distribución de viviendas, que fue el eje mayor de la política urbana llevada a cabo por
las autoridades marroquíes ente 1956 y 1972, provocó la falta de compromiso estatal y
la ausencia de mecanismos de financiación de vivienda social en aquella época 7, y ha
inducido que se considere simbólicamente, como más durable, la acción llevada a cabo
por la colonización en materia de urbanismo de promoción oficial en la ciudad.
De hecho, hicieron falta esperar a los años ochenta para asistir a la vuelta de la
urgencia del Estado en su misión imposible por intentar encontrar una solución a la
situación de desprendimiento del éxodo rural y del hábitat subdesarrollado que
proliferaron y pusieron varios problemas en la seguridad de Tetuán.
A partir del final de los años setenta, se terminará en Tetuán con la lógica de la
producción de vivienda a través de la promoción oficial según el modelo colonial. Pero,
sí se mantendrá una lógica de producción de suelo urbanizable por el Estado. Esto
produjo ocho urbanizaciones implantadas por toda la zona Sur y Este de la ciudad de
Tetuán8. Es decir, en las zonas más favorables y las más accesibles, porque las
urbanizaciones se estructuraban en una parte y la otra de la red viaria diseñada durante
el protectorado, y particularmente realizada en la época para encuadrar la urbanización
6 CHEIKHI, N. « Etude géographique des groupements urbains tétouanais ». Résumé de Thèse, Revue
Espaces Magrébins n° 1, Rabat, 2007, pp.53-64. (en árabe). P.54
7El plan quinquenal de desarrollo económico y social marroquí de 1973-1977, previó el rembolso
presupuestario del Estado providente que se destinará hacia la clase media marroquí, juzgada solvente
para financiarse su vivienda. El plan consideró que era prácticamente ilusorio esperar satisfacer a los más
pobres mientras que las clases solventes no podían acceder a su vivienda. Para más detalle, consultar
BENZAKOUR, S. Essai sur la politique urbaine au Maroc. Editions Maghrébines, Rabat, 1978, p.18
8 AZOUGAGH, A. Production du logement et processus de construction dans les lotissements privés
réglementaires à Tétouan. Pub. Du Groupe de Recherches Géographiques sur le Rif (G.R.G.Rif), Série
Etudes Spatiales n°1, Fac. Des Lettres et des Sciences Humaines de Tétouan, Tétouan, 1999 p.349. Ver
también la tesis Doctoral de la universidad de Provenza (Aix-Marsella) sostenida por AZOUGGAR A. en
1995.
28
colonial, tanto la central como la periférica. Así los barrios peri-centrales de Mhanech y
relativamente de Touabel, van a abrir la urbanización de más de 54 hectáreas
equivalentes a 1953 parcelas, donde la investigación de un carácter urbano fue
prácticamente concebida por el Estado como una noción de islas sub-clasificadas en
conceptos de unidades de habitación. En la zona periférica, la lógica del estado girará
hacia la producción de recursos de suelo. La urbanización de la aviación alrededor del
nodo colonial abrió 44 hectáreas a la urbanización para la producción de un urbanismo
oficial para acoger el lugar de la Wilaya de Tetuán, y otros equipamientos socio-
colectivos. Así mismo, el Estado abrió la urbanización, a través de Tamuda, de más de
70 hectáreas para la construcción de una ciudad nueva que pudiera acoger a medio plazo
unos 30000 habitantes a través de más de 1707 parcelas.
Después de varias decenas durante las cuales la ciudad de Tetuán sufrió importantes
transformaciones para adaptarse a las necesidades estratégicas de la colonización, nace
un movimiento de ideas y de interés por vehicular el arte y la arquitectura andaluza
sobre un fondo de sostén de la cultura “indígena”. Para algunos intelectuales bien
informados del hecho español en el Norte de Marruecos, se trató de mostrar que la
mentalidad y la cultura de los europeos españoles instalados después de siglos y
generaciones en el suelo marroquí, a través de los presidios de Ceuta y Melilla, fueron
influenciados por la vida musulmana de las poblaciones autóctonas, que presentaban
una identidad propia. Esta tesis es del todo posible vía la encrucijada andaluza y la
presencia cuasi indirecta de españoles en Tetuán, a partir de Ceuta, a lo largo de cuatro
siglos, y a través de la protección consular después la Cumbre de Madrid (1880) hasta la
independencia.
Una vez que la fase militar de la pacificación finalizó, hacia finales de los años veinte,
la capital del protectorado español se encargó de la gestión política y económica de la
zona de acción. Desde y hasta la independencia, con un debilitamiento durante la
segunda guerra mundial, este periodo se traducirá en la construcción de la imagen de
29
una capital que protege y respeta la identidad de la población “indígena”. De igual
forma que el estilo de los cuarteles tradujo la fase militar de la conquista colonial, el
estilo protector mostraba la nueva fase política y económica. Diferentes medios
contribuirán a la construcción de esta imagen oficial: la voluntad de incrustar una
arquitectura oficial neo-morisca; la organización de exposiciones coloniales, la
publicación de guías turísticas y obras sobre la ciudad, el interés nuevo dedicado a los
monumentos árabes y casas tradicionales.
30
Para Tetuán, la elección como centro español, respondía a dos imperativos: la
topografía y la disponibilidad de una reserva de suelo, constituida, entre otros, del
antiguo mellah judío en la zona sur de la medina9. El plan de urbanismo de la ciudad
española fue concebido de manera que constituyera una unión de las calles y arterias,
como prolongación de la medina. En ese sentido, el bulevar principal –hoy llamado
Mohammed V- era una continuación de la calle Terrafine. La plaza de Primo de Rivera
–hoy, de Hassan II-, atravesada por la gran arteria, fue concebida como un espacio de
transición entre los dos espacios urbanos. El servicio de ingeniería fue responsable de la
instalación de las tropas en las construcciones existentes militares o civiles
transformadas. Los cuarteles e instalaciones militares fueron parte integrante del nuevo
paisaje urbano. De hecho, varios momentos importantes marcaron el desarrollo de los
proyectos de transformación de la ciudad de Tetuán.
9La constitución de esta reserva fue realizada en dos tiempos: en 1860-62, y tras 1913. Ver al
ABDELLAOUI, M. La médina de Tétouan et son évolution récente, étude de géographie urbaine. Thèse
de 3ème cycle de l’université de Tours, reproduction de l’Université de Lille III, Lille, 1986. Pp.:23-25.
Es necesario destacar la evidencia de que el patrimonio de suelo propiedad judía de las ciudades del norte
de Marruecos fue importante. Remonta al siglo XIX donde los judíos se beneficiaron de un estatus
especial de “comerciantes exclusivos del Sultan”, en el marco de la abertura económica de Marruecos al
comercio exterior. Sin embargo, este patrimonio de suelo difícilmente cuantificable vista la discreción en
la negociación judía. Para más detalles, consultar BRIGNON. J. Histoire du Maroc. Ed. Hatier, Paris,
Librairie Nationale, Casablanca, 1982 p.311.
10 Merece ser citado en el contexto, el caso ilustrativo de la implicación de las inversiones privadas en los
primeros proyectos de vivienda de Tetuán, a favor de los propietarios judíos marroquíes desde los años
treinta, así como los proyectos realizados por arquitectos municipales como Castro Fernández Shaw y
José Miguel De la Quadra-Salcedo en 1940, alrededor de la Plaza de España –hoy Feddane-, a favor del
personal municipal de Tetuán, en Revista Nacional de Arquitectura. Nº24 Plan de ordenación urbana de
Tetuán. Madrid, 1944.. Recuerda que los primeros resultados de este trabajo fueron compartidos con
Alejandro Muchada (coordinador) et otros, 2015: La ciudad colonial y la cuestión de la vivienda 1912-
1956. Colección Kora n°27, Universidad de Sevilla, 365 p..
31
comprendiendo la medina y el centro español. Sin embargo, la colonización española
fue particular, caracterizada por una débil capacidad de intervención, la guerra civil
española, la sociedad dividida, país de emigración y fuerte movilización para la
pacificación. Estos hechos provocaron una fuerte demanda de vivienda social, que fue
formulada por la clase social de base, española, constituida por pescadores, agricultores
-recolectores- y pequeños soldados.
32
Fig.2- La estación del ferrocarril Tetuán-Ceuta como símbolo del cosmopolitismo: obra
del Ingeniero Julio Rodríguez Roda
33
Fig.3- La combinación entre la arquitectura néo-árabe et las disposiciones nuevos
La libertad de composición del interior del Palacio Jalifiano
34
disonancia o en descomposición en cuatro dimensiones. Entre los arquitectos que
marcaron la escena de la arquitectura oficial de Tetuán durante este tiempo podemos
mencionar: Fernández Shaw, Arrate, Bustinduy, Cuadra Salcedo y Hernan. El edificio
Fénix, sigue siendo la figura de arquitectura emblemática de posguerra, década de los
años cuarenta. Arquitectura simbólica de poder político-administrativo, En fénix debe
asegurar la función del Centro de negocios de la ciudad. En su interior coexisten sin
problemas los usos comercial, administrativo y residencial de alto nivel. La imponente
escultura del Fénix situada en la coronación del torreón, simboliza El poder franquista a
través de la arquitectura como lenguaje, posicionamiento e imagen.
13
ANTOIO BRAVO NIETO: La construcción de una ciudad europea en el contexto norteafricano.
Arquitectos e ingenieros en la Melilla contemporánea. Melilla-Málaga Ciudad autónoma universitaria,
1996, p.100
35
de la población tetuaní14. En efecto, se daba la situación de una concentración exclusiva
del nacionalismo marroquí en las ciudades, como en el caso de Tetuán15, donde las
autoridades coloniales, activaron anticipadamente, la máquina de la producción
arquitectónica social de urgencia para mantener la paz tan deseada por la reconstrucción
de la economía metropolitana. Esta paz, se podía considerar singularmente amenazada
en el momento en el que el movimiento nacionalista planificaba extenderse de la ciudad
al campo16, comprometiendo también todos los esfuerzos empleados en la afirmación de
la colonización rural de las riquezas agrícolas y de extracción minera. El recurso de la
urbanización periférica, responderá a una situación de la urgencia y no a un marco de
planificación.
14 Durante la guerra civil española, el movimiento nacionalista marroquí conocerá un aumento sensible,
que tenía varias razones particulares. Se considera, por ejemplo, las importantes operaciones de
reclutamiento de soldados marroquíes para los ejércitos franquistas, que se hizo posible, con la ayuda o
no del gobierno español, según las diferentes hipótesis. Algunos miembros de tribus rifeñas y/o jbalas que
se opusieron a los reclutamientos, fueron ejecutados. Ver a BENJELLOUN, A. « Le mouvement
nationaliste marocain de l’ancienne zone nord et les Jbala ». En, Jbala, histoire et société. Pub. Du
Groupe Pluridisciplinaire d’Etude sur les Jbala, Ed. Du CNRS, 1991
15
DE SIERRA OCHOA. Alfonso. Arquitectura urbana. Cuarto curso de Interventores. S.N. Delegación
de Asuntos Indígenas, Tetúan. 1950, p. 51
16
BENJELLOUN, A. op cite pp.95-105.
17 Para más detalle sobre este tema, consultar el archivo personal de Alfonso De Sierra Ochoa, en la
biblioteca Vicente Aleixandre del Instituto Cervantes de Tetuán.
36
urbanismo español, realizado desde la urgencia y desde las ventajas de la colonización
europea. Durante más de treinta años después de la colonización, la arquitectura se
realizará sin arquitectos pero en la línea de los métodos de urgencia inspirados por la
obra colonial18. Los arquitectos dispersados en las diferentes administraciones no
aportarán más que una débil participación en la construcción y en las acciones del
urbanismo.
El sector de la vivienda y del hábitat fue la primera disfunción en este sentido. El Estado
no reaccionó inmediatamente. Hubo que esperar la promoción en Larache como cabeza
de provincia en 1986, para asistir a la reactivación tímida en materia de urbanismo. Es
por lo que los asentamientos chabolistas de Jnan Massari, Jnan Bacha, Jnan Bdaou y
Mhasshas se hipertrofiarán y tomarán una gran extensión, provocando hasta la
actualidad muchos desafíos –como el hábitat precario y el hábitat no reglamentario, de
dificultades y de resistencias al programa estatal –villes sans bidonvilles –ciudad sin
chabolas-, iniciado en 2004.
37
Fig.4- Proyecto de Plano general de ordenación de la ciudad de Larache en 1947
38
3-1-La Administración colonial: un mecanismo de la nivelación social y
territorial
Sin pensarlo, se puede decir que hoy, después de más de un medio siglo, de
independencia, la realidad urbana de la ciudad de Larache debe mucho al periodo
colonial.
3-1-1- El orden territorial urbano
La prueba incontestable es que, hasta muy recientemente, la administración
marroquí consultaba todavía los planos y las bocetos de ordenación establecidos en
1935 y 1947, especialmente el proyecto de ordenación urbana de Larache. En esta
ciudad, la colonización creó una verdadera ciudad nueva, destinada a la residencia de
técnicos e industriales españoles. Esta nueva ciudad fue concebida como una
continuación de la medina hacia el sur-oeste, para explotar el relieve. La actual plaza de
la Liberación (antigua plaza de España) es un espacio de transición entre la ciudad y la
medina. Entidad urbana y modelo donde se cruzaban medina y ciudad nueva sin sufrir
roturas ni contrastes, ni provocar procesos de aculturación o desarraigo, Larache supo
unir dos culturas. Se puede decir que hoy, la Ciudad de Larache, como Tetuán, debe
mucho al periodo colonial. La articulación territorial entre la medina y la Ensanche era
de grade importancia. A diferencia de la leña de separación causada por la colonización
francesa en casi todas las medinas ocupadas y nuevas ciudades, al contrario, España
reforzó la liaison entre las dos entidades territoriales sobre un fondo social
antonomástico. El crisol andaluz servirá como una unidad cultural neo-morisca
circulare. Lo que explica por qué la sociedad nórdica marroquí ha aceptado
profundamente, la cultura y el comportamiento españoles hasta hoy.
Fig.5-6- Los fundamentos de la orden administrativo- territorial
39
Vista aérea de la plaza de España en años 20 que muestra la articulación
entre la medina y la ciudad nueva en forma radial de crecimiento extensivo
La plaza pública central de Larache jugó un rol federativo entre dos entidades: la
araboislámica, y la ibérica. Es decir, entre una cultura islámica y una cultura europea
fuertemente atravesada por un bien-estar andaluz cuasi universal. La estructura espacial
peatonal de la medina, traducida en estrella y forma octogonal –Ensanche- de la plaza
de la España –hoy llamada Liberación-, es un ejemplo constructivo. Las calles son más
largas. Las parcelas son más grandes, permitiendo la edificación de inmuebles de tres y
cuatro plantas. Un hecho singular que también influyó sobre la producción
arquitectónica colonial en Larache, fue ser una de las ciudades del norte de Marruecos
con mayor concentración de efectivos europeos -13577, en 1955-. El desarrollo de su
espacio urbanizado, se fijó, en el periodo colonial, con una mayor celeridad que en otras
ciudades del Norte. La obra urbana colonial comenzó, de hecho, tiempo antes del
establecimiento del Protectorado. Porque Larache fue también y sobre todo, un
patrimonio portuario de un gran valor estratégico e histórico. Su puerto fue construido
en 1910, por la autoridad española. Desde ese año a 1930, la ciudad nueva, con el barrio
residencial y administrativo español y la zona industrial portuaria, fueron totalmente
concebidos y realizados. Desde 1927, las autoridades coloniales instaurarán un
programa de vivienda social de promoción oficial. Éste fue realizado tanto para los
40
“pequeños blancos” pescadores, funcionarios, mano de obra agro-industrial, soldados;
como para los autóctonos. Las famosas “Casas baratas”19 de los barrios de Barrio
Nuevo, Nador, Caleto y Mhasshas, llenaron su rol de barriadas de urgencia destinadas a
contrarrestar la avanzada de los asentamientos informales de Jnan Messari, Jnan
Bdaoua y Lalla Mennana.
Este tipo que jerarquía social calcada sobre la morfología espacial no fue nada nueva.
En la medina de Larache, la alcazaba kasbah dispone una morfología espacial que
corresponde con una clase aristocrática musulmana que vivió entre 1610 y 1689, antes
de ser el barrio general de las fuerzas de ocupación española. Procediendo así, la
autoridad colonial, utilizando la arquitectura neo-morisca consiguió alcanzar un modo
de producción espacial dual no sólo con el tejido tradicional sino en el seno de una
nueva estructura urbana. El edificio público dedicado al comercio iniciado como
mercado municipal de Larache queda una obra muy significada et simbólica del
clasicismo arquitectural revisado.
41
popular y proletario, una estructura de cuarteles se localizó como punto de partida del
“Ensanche” 22, y de las principales arterias de la ciudad colonial.
Fig.7 El mercado municipal de Larache : una obra simbolo del cosmopotlitismo de los
centros de négocios
22 Sobre la noción de Ensanche, ver a BRAVO NIETO, A. « Tetuán y Larache, dos modelos de
ensanche en el norte de Marruecos”. En la formación de la ciudad: apuntes sobre urbanismo histórico de
Ceuta. 2006. Pp.83-108
42
motivos geométricos acompañaron y tuvieron una importancia relevante, como
símbolos de la administración colonial en las urbanizaciones y los cuarteles que
dominaban los ejes de circulación y de penetración en los diferentes barrios de Larache,
partiendo de la plaza pública de España –de Liberación-. En efecto, la administración
colonial instrumentalizará el orden geométrico para simular el orden administrativo y
político. El ejemplo de la Comandancia23 es muy instructivo. Sus formas geométricas
ordenadas en color azul y amarillo, bien incorporadas en los azulejos, estilo de la nueva
arquitectura morisca, ordenada a la manera de las colonias españolas, querían expresar,
claramente, a través de los motivos, una necesidad de identidad y de autonomía, que
serán colocadas en la entrada de la Comandancia de Larache.
Los mismos motivos van a ser incorporados en los diferentes cuarteles y en las
diferentes urbanizaciones como símbolo del rigor político –administrativo colonial que
se encuentran en Tetuán, Tánger, Asila, y en los poblados donde había una
concentración del tercer regimiento de las fuerzas auxiliares –Beni Gorfet, Tleta de
Raïsaana, Tnine de Sisi El Yamani, etc.-
Desde muy temprano, los españoles comprenderán hasta qué punto era
importante la situación de Larache, tanto para el intercambio económico como por su
posición estratégica. El estatus de capital del territorio le permitirá a esta ciudad, jugar
un rol importante. Es cierto que su función administrativa fue de segundo grado, ya que
dependía directamente de Tetuán, concretamente de la Delegación de Asuntos indígenas
del Alto Comisariado; pero, de cara al territorio del Lucus, será ella quien concentre
remarcablemente todos los otros poderes, a saber, las Delegaciones de Economía, de
Industria y Comercio, de Higiene, de Educación y Cultura, de Obras Públicas y
Comunicaciones, de Finanzas, y de Vivienda. Dotada de un gobernador que dependía
directamente del Alto Comisario que dominaba totalmente al Pacha (bien si éste último
dependía del Jalifa del Majzén), la capital del territorio del Lucus jugó un rol decisivo
en el funcionamiento del aparato administrativo colonial. Será Larache quien focalice
todos los circuitos administrativos territoriales y quien organice la vida económica y
social. Será también dónde se tomarán las decisiones.
23
Llamado localmente “Dar el Majzén Al Jadida”
43
política administrativa. Es más particularmente en el Lucus, donde el funcionamiento de
las instituciones administrativas locales resultó más eficaz.
24 Se trata de la ocurrencia del dahir del 12 de agosto de 1913 que organizaba la propiedad corporativa,
el dahir del 1 de julio de 1914, concerniente a la inyección de propiedad pública a partir del patrimonio
de suelo del Majzen; el dahir del 3 de enero de 1916, redefiniendo la propiedad privada del estado; el
dahir del 19 de octubre de 1921, relativo a la propiedad de las colectividades locales. Otros dahires
concernientes a la reorganización de las tierras colectivas fueron promulgados también: los del 14 de
diciembre de 1920, el 20 de mayo de 1924, el 16 de marzo de 1926 y el 5 de enero de 1952.
25 Raïssoni había heredado de su padre, Caïd Cherif Raïssoni más de 2000 hectáreas en los territorios de
los Jbala de Béni-Arouss, de Béni Gorfet y de Soumata, que se sumaban a las numerosas tierras que
pertenecían a la familia Raïssoni emigrada a Larache desde Asilah (FC Henares, 1953: 23). De hecho, el
patrimonio de propiedad de suelo de Larache se formaba de los aportes de numerosos migrantes del
Jbala. La mayoría de las tierras fueron adquiridas por la fuerza de la lay, en la que el Caïd y el Pacha de
Larache colaboraban con el sistema colonial. Para comprender los orígenes fundamentales del conflicto
regional, ver MEZZINE M. « Jihad au pays Jbala ». In Jbala, histoire et société. Pub. Du Groupe
Pluridisciplinaire d’Etude sur les Jbala, Ed. Du CNRS et WALLADA, Casablanca, 1991. Pp.76-78.
44
ciudad, serán expoliadas por el Pacha Raissoni para desarrollar su territorio de caza26.
Pero el hecho de que los Raissuni no fueran ni grandes rentarios, ni agricultores-
elevadores, sino hombres de la administración que no podían invertir en el medio rural
ni peri-urbano, donde eran ampliamente odiados y cuestionados27, hizo que su intención
fuera ceder una parte de su propiedad a las autoridades coloniales y/o vender sus
terrenos a los especuladores españoles interesados en revender las tierras agrícolas a la
Administración –Majzen-28.
45
permitirán a los “franquistas” reclutar una parte importante de la juventud local,
fascinada por la imagen del soldado español admirado, en su vivienda social, sobre los
escenarios fijados en la “Plaza del Teatro”.
30 Fueron también los conceptualizadores de la revolución verde del servicio agronómico de todo el
protectorado, apoyándose en el hecho de que el territorio de “Lucus” fue el más fértil y que sirvió
destacadamente para la construcción de una base económica agroindustrial metropolitana, a partir de la
colonización agraria. Las empresas se harán valer a través de la mejora de las redes de saneamiento e
instauración de irrigación de más de 2000 hectáreas a través de bombea. Esto permitió desarrollar las
culturas especulativas, de horticultura, cítricos y ganadería. Esta base de producción permitirá alimentar
la industria agroalimentaria de Larache, y gestionar las constricciones de una ciudad en proceso de
proletarización rápida, y de soportar su urbanización.
31 Se recuerda que los colonos, dispondrán en Raïssana (a 21 Km al Este de Larache) de 1400 hectáreas
talladas hasta después de 1945 por el Estado español sobre tierras colectivas y del Majzén. En 1947, los
colonos les serán concedidas más de 122 hectáreas en Mrisa. Para más detalle ver HENARES F.C.
Alcazar el Quivir en 1950. Tetuán, 1953. P.87; ver también GARCÍA FIGUERAS, T.; DE RODA
JIMÉNEZ, R. (1951-1955), Economía social de Marruecos, IEA, Volumen I , Madrid, 1955.. p. 217
46
de vivienda respondió a la necesidad de un orden social y militar. La creación del Barrio
Nuevo y Nador, debía resolver el problema de la vivienda de las clases medias cada vez
más numerosas: administradores, pequeños industriales, etc. Era evidente, que la calidad
de las edificaciones fue menor que en el barrio europeo. Se trataba de viviendas
económicas mejoradas. Sin embargo, animado por el flujo del éxodo rural atraído por
las unidades industriales de Larache, se comenzaron a saturar los espacios periurbanos,
en forma de asentamientos informales que aparecerán desde los años treinta 32. La
industrialización de Larache provocará la aparición de una extensa red de calles trazadas
por la colonización, en vistas de una extensión eventual de la ciudad. Fueron los
asentamientos de Jnan Massari, Lalla Mennana y Jnan Bdaoua, los primeros
asentamientos chabolistas en aparecer. El primero fue debido al éxodo rural local
intensivo. Los otros dos, fueron consecuencia de la emigración española de pobreza –
pescadores, obreros, campesinos, soldados, etc.-
32 DELISTE. S.T (1949). Le prolétariat marocain de port Lyautey. Rapporté par LECOZ Jean (1964). Le
Rharb : fellahs et colons, étude de géographie régionale. Centre National de la Recherche Scientifique,
p.914
33 Este nodo va a tener el objetivo de la construcción de un programa de Casas Baratas en Caleto en
1987, después de la destrucción de una parte de barrios chabolistas y la construcción de un muro,
escondiendo el asentamiento de Mhasshas, a raíz de la visita real en marzo de 1988. Para más detalle,
consular, KARCHAFI F ET THIBEAU J., 1986 : Ville de Larache, résorption des bidonvilles Jnan
Bacha, Jnan Bdaoua et Mhasshas : étude préliminaire. Rapport de l’ANHI, p.6.
34 Estas vivienda fueron atribuidas a personas en posesión de un certificado de no recursos, deliberado
por la Pachauía de Larache, tras la aprobación del Moraqib español.
47
y 1930, antes de la llegada del flujo del éxodo rural, la población española representaba
más del 44% de la población total de Larache. Lo que explicaba las iniciativas de
urgencia de las autoridades coloniales en la producción oficial de viviendas sociales35.
En 1950, Larache dibujaba ya el perfil espacial de la ciudad de hoy.
48
Por supuesto, la obra colonial en Alcázar el Quivir no era tan densa ni
monumental como en Tetuán y Larache, porque Alcázar era una ciudad fronteriza entre
dos áreas de protectorado (español y francés). El protectorado quería hacer de esta
ciudad un lugar de reclutamiento de soldados para servir en el proyecto político de
Franco. Esta es la razón por la cual la arquitectura española en Alcazar ha sido una
mezcla de motivos islámicos, andaluces y judíos.
Fuente: Mapa reproducido de P. MORALESY D. CERRALBO, 1958 y completado a través del trabajo
de F.C. HENARES, 1953.
49
La segunda etapa fue caracterizada por la ingesta de José LARRUCEA. Sus
obras, más allá de su cierto valor escultórico, están firmemente enraizadas en la
memoria colectiva del paisaje urbano de esta ciudad. El Instituto Ibn Khaldoun así
como la residencia general (1926), la Iglesia Corazón sagrado (1931) y La fundación
Sidi Bouhmed (1934), constituye un testimonio aún en pie de un severidad compositiva
donde coexisten los elementos provenientes de la tradición racionalista de los años
treinta con aquellos trasladados, así literalmente, de la arquitectura árabe: arcos de
herradura, portada con alfiz, rejas y celosías.
50
Boughalen Andalusí, los santuarios de Sidi Azmiri et de Sidi Yaâcoub. Despues, la plaza
del Mers, la Mezquita Saïda (la graciosa), la Medersa Inaniâ et la escuela Mouahada
(unitaria)
Fig.9 El apoyo del patrimonio Kasri por parte de la junta de Andalucía
durante las últimas dos décadas.
51
tener éxito si se vacía de su sustancia y de su alma, cualquiera que sea el grado de su
inteligencia económica. Aunque el proyecto es específico sobre el plan sectorial, no
puede garantizar la sostenibilidad. Si el proyecto turístico no es apropiado por la
sociedad local como su propio proyecto integrado, eventualmente se desgastará.
Conclusión
52
en el protectorado español, ya que puede desplazarse hacia una generalización, sin
referenciarse fuertemente en la característica global de la política española en materia de
hábitat, en toda su integralidad. El otro riesgo es el de una lectura ideológica que
pudiera venir del hecho de transponer los referentes políticos del modelo francés al
modelo español, forzándolo a encontrar coincidencias ideológicas.
53
modelo de hábitat social y de producción del territorio periurbano que pasará a ser el
tejido urbano de la ciudad independiente. Si el Estado independiente hubiera podido
continuar, durante los primeros treinta años de independencia, el ritmo de producción de
vivienda y de territorio periurbano, el hecho de la crisis de vivienda y la precariedad
urbana en materia de hábitat insalubre tendría hoy menos consecuencias.
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