Download as pdf or txt
Download as pdf or txt
You are on page 1of 11

See discussions, stats, and author profiles for this publication at: https://www.researchgate.

net/publication/259481638

GEOQUÍMICA DE LOS SUELOS Y AGUAS SUBTERRÁNEAS DEL ÁREA MINERA


DE RODALQUILAR

Conference Paper · September 2005

CITATIONS READS

0 605

4 authors, including:

Andres Navarro Luis Miguel Domenech


Universitat Politècnica de Catalunya Universitat Politècnica de Catalunya
153 PUBLICATIONS   1,070 CITATIONS    13 PUBLICATIONS   99 CITATIONS   

SEE PROFILE SEE PROFILE

Some of the authors of this publication are also working on these related projects:

Environmental Threats of water and soil surrounding old mine sites View project

Geochemistry of uranium and groundwater contamination. View project

All content following this page was uploaded by Andres Navarro on 02 January 2014.

The user has requested enhancement of the downloaded file.


GEOQUÍMICA DE LOS SUELOS Y AGUAS SUBTERRÁNEAS DEL ÁREA
MINERA DE RODALQUILAR

Doménech, L. M.1,2 , Hernández, F.3, Navarro, A.1,2 y Mendoza J. L.1,2

1: Dep. M. Fluidos, ETSEIT, Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), Colón 7, 08222-Terrassa.


navarro@mf.upc.es
2: Grupo Consolidado de Geología Económica, Ambiental e Hidrología . UB-UPC.
3: Repsol YPF, Pso. de la Castellana 278-280, 28046 Madrid

Abstract

The characterization of mine wastes, soil and sediments in the Rodalquilar area,
indicates the existence of high levels of As, Pb, Cu, Se and Zn. Groundwater presents
high concentrations of Ni, As, Se, Sb, Pb, Fe and Mn. The column leaching studies
results, indicate high contents of As (>2 mg/L), Ni (11.4-0.3 µg/L), Cr (67-0.6 µg/L), Se
(238-8.8 µg/L), Sb (21.8-4.25 µg/L), Pb (>200-3.42 µg/L) and Zn (>250-55.0 µg/L) in
the lixiviate.
The possible mass transfer processes which could explain the presence of the
contaminants in the aquifer and the lixiviate, were simulated within the PHREEQC
code, which presents the dissolution of the following mineral phases: jarosite,
natrojarosite, pyrite, alunite, anglesite y arsenopyrite.

Key words: soil contamination, As, groundwater, lixiviation.

Resumen
La caracterización de los residuos mineros, suelos y sedimentos del área de Rodalquilar
indica la existencia de contenidos elevados en As, Pb, Cu, Se y Zn. Las aguas
subterráneas presentan elevadas concentraciones de Ni, As, Se, Sb, Pb, Fe y Mn. En los
lixiviados obtenidos mediante ensayos en columna, también se detectan altos contenidos
de As (>2 mg/L), Ni (11.4-0.3 µg/L), Cr (67-0.6 µg/L), Se (238-8.8 µg/L), Sb (21.8-
4.25 µg/L), Pb (>200-3.42 µg/L) y Zn (>250-55.0 µg/L).
Los posibles procesos de transferencia de masa que explicarían la presencia de los
principales contaminantes en el acuífero y en los lixiviados, simulados mediante el
código PHREEQC, indican la disolución de las siguientes fases minerales: jarosita,
natrojarosita, pirita, alunita, anglesita y arsenopirita.

Palabras clave : contaminación de suelos, As, aguas subterráneas, lixiviación.

1.- INTRODUCCIÓN

La posible contaminación de suelos y aguas subterráneas originada por la explotación


de yacimientos epitermales de Au-Ag de alta sulfuración es función de numerosos
factores, al igual que sucede con cualquier depósito mineral. Entre ellos cabe destacar
los siguientes: geoquímica de las mineralizaciones y roca encajante, alteración
supergénica, métodos de concentración, características de los residuos, procesos
metalúrgicos, climatología, y parámetros hidráulicos del terreno (zona no saturada y
zona saturada), entre otros factores. El principal mecanismo de contaminación suele ser
la formación de aguas ácidas, que suele incluir procesos como la oxidación de la pirita y
1
otros sulfuros, distintas reacciones de neutralización e hidrólisis y que suelen dar lugar a
la formación de numerosas fases secundarias, desde las poco solubles (hidróxidos y
sulfatos de Fe) hasta las llamadas sales “eflorescentes”, de mayor solubilidad.

Por otro lado, la formación de fases secundarias como consecuencia de los procesos de
neutralización y/o hidrólisis constituye el principal mecanismo de atenuación de los
productos de oxidación, en zonas mineras abandonadas (Blowes et al., 2003)
produciéndose en climas semiáridos como el estudiado una serie de fases secundarias
que son el resultado de una concentración elevada (saturación) de los productos de
oxidación y de los resultantes de la neutralización ácida. El papel de las fases
secundarias más solubles (sales eflorescentes) como depósitos transitorios de acidez y
contaminantes ha sido puesto de manifiesto por distintos autores (Jambor et al., 2000;
Dold y Fontboté, 2001; Navarro et al., 2004), originándose en relación con
determinados sulfatos un nuevo aporte de acidez al medio, si se disuelven como
consecuencia de un episodio húmedo, como en el caso de la melanterita que actúa como
depósito transitorio de Fe (II), H+ y sulfatos (Frau, 2000; Ptacek y Blowes, 2003).

Aunque los datos procedentes de mineralizaciones de Au-Ag no son muy abundantes,


en el caso de Rodalquilar ya se conocía la existencia de contenidos anómalos de As, Pb
y Zn, entre otras substancias, en los residuos mineros y sedimentos aluviales (Wray,
1998). Por otro lado y en relación con el potencial impacto sobre el medio hídrico, el
pH de los drenajes mineros de minas de estas características suele estar comprendido
entre 2.0 y 8.5, presentándose altas concentraciones de Fe (0.01-50000 mg/L), Al
(0.001-5000 mg/L) y sulfatos (0.8-100000 mg/L). En cuanto a los metales pesados y
otros elementos traza, suelen aparecer en las aguas contaminadas en concentraciones
muy variables a causa de la naturaleza de cada depósito mineral (Seal et al., 2003),
apareciendo con frecuencia elementos como: As, Fe, Cu, Zn, Cd, Co, Ni, Pb, Hg, Tl, Se,
Te y Sb.

El objetivo de esta comunicación es describir la contaminación de suelos y sedimentos,


su relación con la del agua subterránea, y establecer los posibles procesos de
precipitación-disolución que explicarían la movilización de los distintos contaminantes
en el medio hídrico.

2.- MARCO GEOLÓGICO. MINERALIZACIONES

El marco geológico de la Sierra del Cabo de Gata es el del volcanismo calcoalcalino


Neógeno del Sudeste de España, encuadrado en el dominio de las Cordilleras Béticas
(López Ruiz, J. & Rodríguez Badiola E. 1980). El yacimiento de Rodalquilar (fig. 1)
debe su origen a los procesos relacionados con la formación del complejo de calderas de
hundimiento de Rodalquilar y La Lomilla, el cual tiene unas dimensiones de unos 8
kilómetros en la dirección Este-Oeste y de unos 4 kilómetros en la dirección Norte-Sur.
La tipología del yacimiento es epitermal y contiene filones mineralizados de baja
sulfuración con Pb-Zn(Cu-Ag-Au) y de alta sulfuración con Au(Cu-Te-Sn) (Arribas
Moreno, A. 1998). En la tipología epitermal de baja sulfuración, los sulfuros son los
minerales más importantes en los filones aunque no faltan los óxidos y los silicatos. En
la tipología epitermal de alta sulfuración, se pueden ver los procesos típicos de

2
alteración hidrotermal de alta sulfuración y su distribución en zonaciones: propilítica,
sericítica, arcíllica intermedia, arcíllica avanzada y silícica.

Como rasgo general de ambas tipologías en Rodalquilar y sus alrededores, se puede


decir que los filones mineralizados encajan en las propias rocas volcánicas neógenas y
que son comunes los sulfuros, algunos óxidos, los carbonatos y diferentes silicatos. El
motor metalogenético ha sido únicamente el volcanismo ó el volcanismo y algún
proceso supergénico. Las sustancias explotadas económicamente a través de los siglos
han sido fundamentalmente el oro, el alumbre, la plata, el plomo y los caolines, sin
olvidarnos de las canteras de adoquines (Hernández Ortiz, F. 2002).

Fig. 1.- Mapa geológico sintético de la zona minera de Rodalquilar. E:


falla, MV: materiales volcánicos, MA: calizas, calcarenitas, margas y
conglomerados miocenos, Q: glacis y depósitos aluviales cuaternarios.
Modificado de Arribas Rosado, 1993.

Sin lugar a dudas, el mayor impacto ambiental de la minería en Rodalquilar se ha


producido a lo largo del siglo XX, como consecuencia de las diferentes instalaciones
metalúrgicas que han existido para beneficio de oro. En 1925 funcionó efímeramente la
primera de ellas, con capacidad para 20 toneladas diarias de mineral, utilizando el
método de amalgamación y sin llegar a generar un volumen apreciable de residuos. En
1929 funcionó, también efímeramente, la segunda de ellas, con capacidad para 20
toneladas diarias de mineral, utilizando nuevamente la amalgamación y generando unas
5.000 toneladas de residuos mineros.

Será en 1931 cuando Rodalquilar entra de lleno en los modernos procesos industriales
de la minería, coincidiendo con la inauguración de la Planta Dorr, instalación de
cianuración dinámica en tanques y precipitación del oro mediante cinc en virutas, con
capacidad para tratar 80 toneladas diarias de mineral. Esta instalación estuvo
funcionando entre 1931 y 1956 y originó unas 300.000 toneladas de residuos (fig. 2).
Pero el cenit se alcanzaría en el periodo 1956-1966, lapso de tiempo en el cual estuvo en
funcionamiento la Planta Denver, instalación metalúrgica de cianuración dinámica en
tanques y precipitación del oro mediante cinc en polvo, con capacidad para tratar 600
3
toneladas diarias de mineral. La Planta Denver originó aproximadamente 1.200.000
toneladas de residuos (Hernández Ortiz, F. 2002). Tanto la Dorr como la Denver
utilizaron la misma balsa de estériles, situada junto al pueblo de Rodalquilar,
convirtiéndose en un registro de 1.500.000 toneladas de residuos mineros continuos en
el tiempo entre los años 1931 a 1966.

El ultimo episodio minero de Rodalquilar tuvo lugar entre 1989 y 1990, cuando una
empresa minera multinacional puso en funcionamiento una instalación metalúrgica de
lixiviación en pilas y precipitación del oro mediante columnas de carbono, pero en esta
ocasión la instalación no estaba en los alrededores de Rodalquilar. Se originaron unas
300.000 toneladas de residuos que aun permanecen en las propias pilas.

Fig. 2.- Planta Dorr en pleno funcionamiento en el año 1935 (Fuente: Hernández Ortiz, F. 2004)

3.- MATERIALES Y MÉTODOS

Con objeto de caracterizar geoquímicamente los suelos y las aguas subterráneas del área
de Rodalquilar, se realizaron dos campañas de muestreo entre junio de 2004 y febrero
de 2005. En total se recogieron 30 muestras de suelos y 11 muestras de aguas
subterráneas (figura 3). La muestras de suelos se tomaron a una profundidad de entre 15
y 20 cm, muestreándose tanto los “tailings” como suelos y sedimentos aluviales de los
torrentes localizados aguas abajo de los “tailings”.

En los pozos con instalación de bombeo, las muestras de agua se tomaron directamente
de los grifos o mangueras existentes, previo purgado del sistema. En los que no
disponían de instalación de bombeo o en las norias, las muestras se recogieron mediante
un “bailer”. En cada punto muestreado se midió antes de la toma de muestras, la
profundidad del nivel piezométrico mediante sonda hidronivel. Una vez recogida la
muestra de agua se determinaron los siguientes parámetros de campo: temperatura, pH,
conductividad y potencial re-dox, mediante pH-metro portátil pH-25 y conductivímetro
portátil CM-35 de Crison.

En los suelos y residuos, tras su cuarteado, secado y molienda, se determinaron


mediante activación neutrónica (INAA) los siguientes metales y metaloides: Au, As,
Ba, Co, Cr, Cs, Fe, Hf, Hg, Ir, K, Rb, Sb, Sc, Se, Sn, Sr, Ta y tierras raras. Mediante
digestión ácida y posterior espectrometría de emisión atómica con plasma acoplado por
4
inducción (ICP-AES), se determinaron: Ag, Cd, Cu, Mn, Mo, Ni, Pb, Zn, Al, Be, Bi,
Ca, K, Mg, P, Sr, Ti, V, Y y S. Asimismo, también se determinó mediante colorimetría
los cianuros totales, cianuros libres y tiocianatos.

Para cada muestra de aguas subterráneas, se tomaron dos submuestras, en la primera y


después de acidificarla a pH=2, se determinaron mediante ICP-AES: Na, Li, Be, Mg,
Al, Si, K, Ca, Sc, Ti, V, Cr, Mn, Fe, Co, Ni, Cu, Zn, Ga, Ge, As, Se, Br, Rb, Sr, Y, Zr,
Nb, Mo, Ru, Pd, Ag, Cd, In, Sn, Sb, Te, I, Cs, Ba, Hf, Ta, W, Re, Os, Pt, Au, Hg, Tl,
Pb, Bi, y tierras raras. A partir de la segunda muestra se analizaron mediante
cromatografía iónica los aniones fundamentales.

El estudio experimental de la movilización de los metales pesados en fase acuosa se ha


realizado mediante un ensayo en columna. Para realizar dicho ensayo se rellenó una
columna de laboratorio de 760 mm de alto y 150 mm de ancho, con partículas de 2 mm
diámetro de material poco reactivo (poliestireno) hasta una altura de 400 mm,
colocando encima de este material una franja de de unos 100 mm de suelo a ensayar
(aproximadamente 1700 cm3). Posteriormente, y con objeto de que el flujo de agua
fuese lo más uniforme posible, se relleno la columna con partículas de poliestireno hasta
la altura máxima de la columna, A continuación se inyectó agua desmineralizada por la
parte superior de la columna a razón de 1,8 L/hora durante 4 horas. La primera muestra
(correspondiente al tiempo 0) se tomó en el momento que empezó a salir el agua por la
parte inferior de la columna. De cada muestra se hicieron dos partes, la primera se
acidificó hasta pH = 2 para evitar la precipitación de los metales antes de su análisis
químico, y la segunda se destinó al análisis de los iones mayoritarios.

Los lixiviados, previa filtración con un filtro de 0.45 µm, fueron analizados por ICP-
OES en ACTLABS (Ontario, Canadá), determinándose en el laboratorio el pH, Eh,
oxigeno disuelto y la temperatura con un sistema de medida de multiparámetros de
laboratorio marca HACH modelo sensIONTM378.

Fig. 3.- Localización de los puntos de muestreo de aguas


subterráneas (Ortofotografía Digital de Andalucía, Junta de
Andalucía). Modificado de Domènech et al. (2005).

4.- RESULTADOS

Tal y como puede observarse en la tabla 1, el As y el Pb, son los contaminantes que
presentan las concentraciones más elevadas en la mayor parte de muestras de sólidos
5
analizadas, tanto si se trata de “tailings” como de suelos y sedimentos fluviales. En los
“tailings, las concentraciones de As oscilan entre 71 ppm y 1410 ppm, y en los suelos y
sedimentos fluviales entre 61,3 ppm y 581 ppm.

Las aguas subterráneas del Valle de Rodalquilar, tal y como puede observarse en el
diagrama de Piper (Fig 4), presentan un marcado carácter clorurado sódico, intuyéndose
también posibles fenómenos de mezcla con aguas sulfatado-cálcicas. La muestra de
agua AS-8, localizada en el extremo septentrional del valle, presenta un contenido en
sales disueltas mucho menor que el resto de muestras (Tabla 2).

La mayor parte de las muestras contienen metales y metaloides en disolución,


presentando en algunos de los pozos y/o norias muestreados elevadas concentraciones
de Ni, As, Se, Sb y Pb, Fe y Mn (Tabla 3).

Elemento

As Cd Co Cr Cu Hg Mo Ni Pb Se Zn
Muestra ppm ppm ppm ppm ppm ppm ppm ppm ppm ppm ppm
MC 53.00 0,40 0.7 13.00 485.0 <1 <1 2.00 71.0 <3.0 112.0
MT 1700.00 0,32 <0.5 13.00 70.0 3.0 49.0 2.00 38.0 150.0 9.0
RSS
Media 520.59 0.81 4.07 43.90 143.46 0.33 3.23 14.70 670.69 14.53 340.14
Máximo 1410.00 4.65 11.00 90.00 957.28 3.00 5.51 43.20 8743.64 36.00 1869.72
Mínimo 61.30 <0.3 - - 53.95 - 1.61 - 131.20 - 76.13
Desviación S 322.28 0.89 2.83 25.04 205.90 0.88 1.03 12.60 1543.57 9.85 445.35

Tabla 1: concentraciones medias de metales pesados y metaloides


presentes en los residuos, suelos y sedimentos fluviales (RSS) del
Valle de Rodalquilar, así como de las principales mineralizaciones.
MC: mina Consulta, MT: mina Transacción (Cerro Cinto).

CATIONES mg/l ANIONES mg/l

Ca Na Mg K Fe Si Cl SO4 NO3 CO3H2

AS-01 77,35 427,16 70,33 19,46 2,08 24,98 711,96 465,48 3,63 201

AS-02 803,01 1992,35 509,61 74,48 0,33 13,92 3983,83 1851,58 0,00 623,15

AS-03 230,04 469,44 124,34 15,67 nd 9,90 848,91 874,01 53,23 295,45

AS-05 313,41 536,49 166,08 17,43 0,57 10,06 1086,77 717,23 3,69 191,05

AS-06 431,64 812,13 276,57 16,35 60,22 6,68 1734,04 1082,31 0,00 nd

AS-07 333,24 767,00 214,85 23,31 5,92 15,63 1562,34 640,22 14,54 202,4

AS-08 75,16 164,07 43,38 9,64 0,09 16,47 335,37 164,64 0,35 190

AS-09 98,45 575,01 79,72 19,06 39,41 9,77 720,29 507,82 1,42 334,65

AS-10 416,72 611,31 197,48 18,84 5,01 8,36 1612,84 1212,52 29,29 259,85

AS-11 369,08 936,38 233,17 64,24 0,22 13,56 1645,87 1299,87 2,23 395,45

AS-12 110,08 999,94 120,71 22,15 0,16 9,83 1981,64 127,87 1,50 531,95

Tabla 2.- Iones mayoritarios de las aguas subterráneas.

Dichas substancias aparecen también en cantidades anómalas en los residuos mineros y


en los suelos contaminados, por lo que para evaluar la incidencia de ambos en la calidad
del agua subterránea se han realizado los distintos ensayos de lixiviación. En ese
sentido, el As es posiblemente el contaminante de mayor interés, alcanzándose
concentraciones que superan los 0.2 mg/L en un pozo, y concentraciones próximas o
por encima del límite de potabilidad (tabla 3) en la mayoría de los muestreados,
mientras que en aguas subterráneas no contaminadas las concentraciones de As suelen
6
ser inferiores a los 10µg/L (Smedley et al., 2002). Se suelen presentar concentraciones
elevadas de As (0.5-5000 µg/L), generalmente para pH alcalino, a causa de problemas
de contaminación minera, industrial, agrícola, campos de golf, áreas geotérmicas o de la
existencia de mineralizaciones (Armienta et al., 2001).
Conductividad pH Eh (mV) Au Ni As Se Sb Pb Fe Mn Zn Cr
(µS/cm) (µg/L (µg/L) (µg/L) (µg/L) (µg/L) (µg/L) (µg/L) (µg/L) (µg/L (µg/L
AS-1 2390 7.7 136 <0.02 5 12 7 3.1 14.7 1900 730 426 19
AS-2 12750 7.6 134 1 645 6.3 25 2.7 2.9 1300 1750 108 34
AS-3 3260 7.6 136 <0.02 9 0.3 10 2.7 0.4 400 <1 190 15
AS-4 4080 7.8 121 0.08 4 1.6 8 6.4 0.3 500 10 99 13
AS-5 4190 7.8 110 0.08 <3 2.8 4 6.3 0.8 1000 3 33 13
AS-6 6350 7.1 -40 0.21 119 16.5 <2 2.4 22.3 76300 416 125 6
AS-7 6040 7.7 40 0.13 39 13 <2 2.4 1.6 10200 115 191 10
AS-8 2210 8.3 112 <0.02 <3 1.4 <2 2.7 1.2 100 14 62 12
AS-9 3260 8.0 -20 <0.02 42 2.1 <2 2.7 21.7 46100 624 297 <5
AS-10 4870 7.4 -0.5 <0.02 4 < 0.3 <2 3.1 8.4 5500 70 83 <5
AS-11 6220 8.1 135 0.22 4 224 <2 3.9 8.2 800 45 79 11
AS-12 2390 7.7 147 0.11 <3 < 0.3 <2 2.6 1.7 300 107 67 16
Criterio de Calidad * * * * 20 10 10 5 10 200 50 * *
R.D. 149/2003

Tabla 3.- Parámetros físico-químicos de campo y concentraciones de algunos metales y


metaloides presentes en las aguas subterráneas del Valle de Rodalquilar. (*): no dispone de
criterio de calidad.

Fig. 4.- Diagrama de Piper de las aguas Fig.5.- Diagrama de estabilidad del As y Fe.
subterráneas.

El As puede movilizarse en las aguas subterráneas en las condiciones habituales de las


mismas, en cuanto a pH (6.5-8.5), y tanto en ambientes oxidantes como reductores. Se
presenta en las aguas naturales en forma aniónica como As (III) ó As (V), así como en
forma orgánica cuando las aguas han sufrido procesos de contaminación industrial
(Smedley et al., 2002). A diferencia de lo que sucede con la mayor parte de los cationes
metálicos en condiciones próximas a pH = 7, las formas aniónicas del As tienden a ser

7
desorbidas del suelo o de la fase sólida de la zona saturada de los acuíferos conforme el
pH aumenta, siendo relativamente móvil en condiciones reductoras.

En relación con las muestras obtenidas, las que presentan condiciones oxidantes y pH
neutro-alcalino tendrán como especie dominante el HAsO4-2 . Por otro lado, las de
condiciones reductoras y para pH inferior a 9.2 tendrán como forma dominante al
H3AsO30 (fig. 5). En aguas subterráneas, donde existen condiciones oxidantes, dominan
las especies de As (V) sobre las de As (III), aunque la proporción entre ambas depende
de la cantidad de materia orgánica, actividad de los microorganismos y disponibilidad
de oxígeno, entre otros factores.

En el caso de los lixiviados las concentraciones de As son mucho más elevadas,


presentándose valores que superan los 2 mg/L en casi todas las muestras, lo cual es
coherente con las condiciones de pH (7.60-8.33) y de Eh (237-256 mvolts), puesto que
para esos valores la forma más estable del As es el HAsO4-2 disuelto (fig. 5). En esas
condiciones oxidantes de los ensayos de lixiviación, y también mayoritariamente de las
aguas subterráneas, la arsenopirita se vuelve extremadamente soluble con
concentraciones de As disuelto en equilibrio que pueden alcanzar cientos de mg/L para
valores de pH elevados (Craw et al., 2003). Así, las concentraciones de As en el
acuífero podrían atribuirse, en una primera hipótesis, a la presencia de arsenopirita en
los residuos mineros, y su disminución en algunas muestras de agua subterránea estaría
relacionada con la disminución del potencial redox (muestras: AS-6, 9 y 10).

En los lixiviados también se detectan concentraciones significativas de Ni (11.4-0.3


µg/L) y Cr (67-0.6 µg/L), muy parecidas a las del agua subterránea. También se
detectan altos valores de Se (238-8.8 µg/L), Sb (21.8-4.25 µg/L), Pb (>200-3.42 µg/L) y
Zn (>250-55.0 µg/L), en concentración muy superior a las del agua subterránea y de
forma similar a como sucede con el As. Todo ello podría explicarse por la fácil
movilización de estas substancias en medio oxidante y pH próximo a la neutralidad, tal
y como debe suceder en las masas de residuos mineros donde estos elementos son muy
abundantes (tabla 1).

En el caso del Fe y Mn en los lixiviados se alcanzan valores de 2990 y 95.8 µg/L,


respectivamente, muy inferiores a los del agua subterránea y que podrían explicarse por
las condiciones de pH-Eh del acuífero en algunas zonas. Así, las muestras AS-6, 7, 9 y
10 presentan valores muy bajos del Eh (40/-40 mvolts) y concentraciones de hasta 76.3
mg/L de Fe y 1.75 mg/L de Mn, lo que podría indicar la disolución de los oxi-
hidróxidos de Fe y Mn a partir de los sedimentos del acuífero.

Resulta también interesante señalar la presencia de cantidades significativas de Au en el


agua subterránea (0.22/<0.02 µg/L) y en los lixiviados (2.97-0.02 µg/L), en
concentración similar a la de algunos sistemas geotérmicos como Broadlands (Henley et
al., 1984).

5.- MODELIZACIÓN HIDROGEOQUÍMICA

Para simular las transferencias de masa entre el agua desmineralizada y los lixiviados
del ensayo de lixiviación, se ha empleado el código PHREEQC (Parkhurst y Appelo,
8
1999) y la llamada “modelización inversa”. Los cálculos que realiza la modelización
inversa pueden explicar no sólo los procesos de disolución-precipitación producidos
durante el ensayo de lixiviación, sino también los que se producen a partir de los
residuos mineros y que provocan la contaminación del agua subterránea, aunque en este
caso están atenuados por el papel ejercido por la dispersión hidrodinámica y los
fenómenos de adsorción que se producen en el terreno.

La modelización inversa requiere del conocimiento de una solución de entrada (agua


desmineralizada) y una de salida (lixiviado), así como de las posibles fases minerales
intervenientes en los procesos de precipitación-disolución. Dichas fases, basadas en los
datos de Llobet (1992), son las siguientes: yeso, jarosita, natrojarosita, pirita, halita,
hematites, caolinita, alunita, goethita, ferrihidrita, anglesita, clorita y arsenopirita. Las
reacciones de equilibrio asociadas a dichas fases y obtenidas de la base de datos Minteq
aparecen en la tabla 4.

Fase mineral Reacción Log k(Minteq)


Yeso CaSO4:2H2O = Ca2+ + SO4-2 + -4.848
H 2O
Jarosita KFe3(SO4)2(OH)6 + 6H+ = K++ -14.8
3Fe3++2SO42-+6H2O
Natrojarosita NaFe3(SO4)2(OH)6 + 6H+ = Na++ -11.2
3Fe3++2SO42-+6H2O
Halita NaCl = Na+ + Cl- 1.582
Pirita FeS2 + 2H+ 2e- = Fe2+ + 2SH- -18.47
Hematites Fe2O3 + 6H+ = 2Fe3+ + 3H2O -4.008
Caolinita Al2Si2O5(OH)4 + 6H+ = 2Al+3+ 5.726
2H4SiO4+ H2O
Alunita KAl3(SO4)2(OH)6 + 6H+ = K++ -1.346
3Al3++2SO42-+6H2O
Goethita FeOOH + 3H+ = Fe3+ + 2H2O 0.5
Ferrihidrita Fe(OH)3 + 3H+ = Fe3+ + 3H2O 4.891
Anglesita PbSO4 = Pb2+ + SO4-2 -7.79
Clorita Mg5Al2Si3O10(OH)8 + 16H+ = 68.38
5Mg2+ + 2Al+3+ 3H4SiO4+ 6H2O
Arsenopirita FeAsS + 3.25 O2 + 1.5H2O = 198.17
Fe2+ + SO4-2 + H3AsO4

Tabla 4.- Fases minerales empleadas en la modelización inversa.

Los resultados obtenidos (8 modelos) indican que el As podría estar originado en la


disolución de la arsenopirita y/o piritas arsenicales, mientras que el Fe provendría de la
pirita y jarositas, fundamentalmente, así como de los sedimentos del acuíferos cuando
las condiciones sean reductoras. El Pb que aparece en aguas subterráneas y lixiviados
podría movilizarse a partir de la anglesita. Por otro lado, el mantenimento del pH en los
lixiviados podría estar provocado por la disolución de jarosita, natrojarosita y alunita, ya
que no parecen existir cantidades muy altas de carbonatos, quienes ejercen
habitualmente el papel de agentes de neutralización en estos ambientes hidroquímicos.

6.- CONCLUSIONES

Tanto los suelos como las aguas del Valle de Rodalquilar presentan entre otros metales
y metaloides, elevados contenidos en As y Pb, debido principalmente al vertido de
9
residuos generados por la actividad minera, y en particular por los procesos de
lixiviación y concentración de oro. Los resultados obtenidos con la modelización
hidrogeoquímica, realizada a partir de ensayos de lixiviación en columna indican que el
As de las aguas subterráneas podría estar originado en la disolución de la arsenopirita
y/o piritas arsenicales, mientras que el Pb podría movilizarse a partir de la anglesita.

7.- REFERENCIAS
Armienta, M.A.; Villaseñor, G.; Rodríguez, R.; Ongley, L.K. y Mango, H. (2001): “The role of arsenic-
bearing rocks in groundwater pollution at Zimapán Valley, México”. Environmental Geology, vol. 40, pp.
571-581.
Arribas Moreno, A. 1998. El yacimiento epitermal de oro de Rodalquilar. Boletín Geológico y Minero. El
oro en España. (Puche, O. Ed.) Vol. 109, 5 y 6, 15-28
Arribas Rosado, A. 1993. Mapa Geológico del distrito minero de Rodalquilar. I.T.G.E, Madrid.
Blowes, D.W. ; Ptacek, C.J. and Jurjovec, J. 2003. Mill Tailings: Hydrogeology and Geochemistry. En:
Environmental Aspects of Mine Wastes, Mineralogical Association of Canada, Short Course Series, vol.
31, pp. 95-116.
Craw, D., Falconer, D. y Youngson, J.H. 2003. Environmental arsenopyrite stability and dissolution:
theory, experiment, and field observations. Chemical Geology, 199, pp. 71-82.
Dold, B. and Fontboté, Ll. 2001. Element cycling and secondary mineralogy in porphyry copper tailings
as a function of climate, primary mineralogy and mineral processing. Journal of Geochemical
Exploration, 74, 3-55.
Frau, F. 2000. The formation-dissolution-precipitation cycle of melanterite at the abandoned pyrite mine
of Genna Luas in Sardinia, Italy: environmental implications. Mineralogical Magazine, 64 (6), 995-1006.
Doménech L.M.; Navarro, A.; Viladevall, M.; Mendoza, J.L.; Hernández, F. 2005. Efectos ambientales
de la minería del Au en el área de Rodalquilar (Almería). VI Simposio del Agua en Andalucía. Sevilla (en
prensa).
Henley, R.W., Truesdell, A.H., Barton, P.B. y Whitney, J.A. 1984. Fluid-mineral equilibria in
hydrothermal systems. Reviews in Economic Geology, vol. I, 153 pp.
Hernández Ortiz, F. 2002. El oro y las minas de Rodalquilar. Años 1509-1990. Junta de Andalucía,
Consejería de Medio Ambiente. Madrid, Grafistaff S.L., 263 págs.
Hernández Ortiz, F. 2004. Rodalquilar: Historia Gráfica. Editorial G.B.G., Barcelona, 96 págs.
Jambor, J.L.; Nordstrom, D.K. and Alpers, C.N. 2000. Metal-sulfate Salts from Sulfide Mineral
Oxidation. En: Sulfate Minerals –Crystallography, Geochemistry, and Environmental Significance-, ed.:
Alpers, C.N.; Jambor, J.L. y Nordstrom, D.K.; Mineralogical Society of America, Reviews in Mineralogy
& Geochemistry, vol. 40, pp. 303-350.
López Ruiz, J., Rodríguez Badiola, E. 1980. La región volcánica Neógena del Sureste de España.
Estudios Geológicos. Vol. 36, 5-63.
Llobet, A. 1992. Estudi Geològic Mina Transacción, Rodalquilar. Almería. Universitat Poletècnica de
Catalunya. Inédito
Navarro, A.; Collado, D.; Carbonell, M. and Sánchez, J.A. 2004. Impact of Mining Activities in a semi-
arid environment: Sierra Almagrera district, SE Spain. Environmental Geochemistry and Health, 26 (4),
383-393.
Ptacek, C.J. and Blowes, D.W. 2003. Geochemistry of concentrated waters at mine-waste sites. En:
Environmental Aspects of Mine Wastes, Mineralogical Association of Canada, Short Course Series, vol.
31, pp. 239-252.
Parkhurst, D.L.y Appelo, C.A.J. 1999. User´s Guide to PHREEQC (version 2)-a computer program for
speciation, batch-reaction, one-dimensional transport, and inverse geochemical calculations. U.S.
Geological Survey, Water-Resources Investigations Report 99-4259, 326 pp.
Seal, R.R., Hammarstrom, J.M. 2003. Geoenvironmental models of mineral deposits: examples from
massive sulfide and gold deposits. En: Environmental Aspects of Mine Wastes, Mineralogical Association
of Canada, Short Course Series, vol. 31, pp. 11-44.
Smedley, P.L. y Kinniburgh, D.G. (2002): “A review of the source, behaviour and distribution of arsenic
in natural waters”. Applied Geochemistry, vol. 17, pp. 517-568.
Wray, D. 1998. The impact of uncofined mine tailings and anthropogenic pollution on a semi-arid
environment-and initial study of the Rodalquilar mining district, south east Spain. Environmental
Geochemistry and Health, 20, 29-38.

10

View publication stats

You might also like