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  • Losrasgosdeladiversidad GilManuelyotros

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    LOS RASGOS DE LA DIVERSIDAD un estudio sobre los académicos mexicanos Manuel Gil Antén Rocio Grediaga Kuri » Lilia Pérez Franco Norma Rondero L6pez * Miguel Angel Casillas Alvarado Adrian de Garay Sénchez. UAN-A) Edgar Armenta Castro (VABCS) José Ratil Rodriguez. Jiménez. (UNSON) - Patticia Camarena Gallardo (PN) Lorenza Villa Lever (UNAM) Carolina Acevedo Canteros » Martin Patricio Fernéndez Atala Livas Gonzdlez * Miriam D. Ramirez Barrera ‘Angélica Vences Esparza (AN) Marfa Luisa Chavoya Peiia (UDG) Silvia Aguila Tecuatl - Héctor M, Alvarez L6pez Ricardo Moreno Botello (yap) ‘Themis Ortega Santos Jenny Beltrén Casanova (Wy) Maria Elena Campuzano (UAH) Elia L, Herndndez Jimate (1?) Equipo Interinstitucional de Investigadores sobre los Académicos Mexicanos INDICE INTRODUCCION GENERAL Nuestras preguntas bisicas . De los puestos a los actores Estructura del libro Breve nota sobre nuestra empresa colegiada. Agradecimientos I ORIGEN Y DESARROLLO DEL CUERPO ACADEMICO CAPITULO L. LA PERSPECTIVA DEL ANALISIS Evolucién de Ia educacién superior mexicana: 1960-1992 La moltiplicacién de los puestos académicos eens ie eee een ee ate ‘Los aeadémicos como objeto de conocimiento en México Compleja transicién: profesién y mercado neadémicos CAPITULO 2, CARACTERISTICAS DEL ESTUDIO COMPARATIVO Estructura y dimensiones del anslisis Fases tipicas Dimensiones de observacon, Ejes de diferenciacién........ Decaioees ie feeb tcl candela oe Integractén del equipo: entidades e instituciones a estudiar Delimitacién de los académicos a estudiar .. Tipo de muestra... Rasgos generales del cuestionario .. En torno a los sectores institucionales En torno a los periodos de ineorporacién. n “4 16 ” 18 23 2 ess SRRSSsssRasS CAPLTULO 3. {QUIENES SON LOS ACADEMICOS? Situactén social 6 Lacuestion del género ...2.2.0+ ar, 65 En torno a la edad. ceteect a 0 Estado civily dependientes. e f B ‘Origen social de los académicos. 15 Escolaridad de los padres. . 16 Rangos de escolaridad B Percepciones sobre la incorporacién 3 Un rol social en proceso de constitueton. 87 CAPITULO 4. INCORPORACION E INICIACION EN LA ACTIVIDAD ACADEMICA ee 89 : Brea 90 Procesos de incorporacién informales ee roe Elfenémeno del auto-reclutamiento ks Experiencia laboral previa al primer contrato. ee Experiencia académica previa al primer contrato.......+e0e001e115 99. Tipo de vinculacién en la incorporacién . 101 Condiciones de trabajo en la incorporacién Funciones contempladas en el primer contrato Percepciones del primer contrato ..... Una mirada de conjunto a tas incorporaciones. .. : Tniciacién acts eiy costaneeeaeeeee tec” Ll Actividades en el primer ato. : eeu Capactacion apoyo a a coninuidad de lor estution ne La docencia en el primer aio 14 La investigaciOn en el primer afto.......+..0..+002+ 16 Perel Menta eal rept 18 Los principales rasgos de la inciacién 120 CAPITULO 5. DESARROLLO Y SITUACIGN DE LOS ACADEMICOS BN 1992 Noticta general de as trayectorias 1s Distribucidn sectrial en 1992 ......0.sscvscsserseeseeseens 127 Cambio en tos nivelesformativos 2.42.2.» 19 Cambio en las condiciones de trabajo Si i Bi La situacion en 1992 135 Las nivelesformativos en 1992. ee Condiciones de trabajo en 1992...» 17 Actividades académicas 140 Una aproximacién a a investigacién 143 El eercicio de ta profesion ‘ 146 Percepeiones de los académicos en 1992. 150 {La complejidad del desarrollo y sus resultados. .... 156 1. LOS RASGOS DE LA DIVERSIDAD CAPITULO 6, HACIA UNA TIPOLOGIA DE LOS ACADEMICOS MEXICANOS Construceién de los tipos de vinculacién a partir del indice de centratidad enlas actividades académicas 164 Dedicacién plena o marginal: un contraste... ve IT 1Lineas de profundizacién para una tipologia .... ia ‘CAPITULO 7. LA AFILIACION DISCIPLINARIA Blestado de a cuesti6n. 0. ....esccsesese Per Estrategias para el andlisis por eampos de eonocimiento saplee La aproximactén por éreas de conocimiento sade Composicin disciplinaria entre sectore y periodos. + 184 Afilacién diseiplinara y earactertstleas generales....+.2+.+1s+sse+s 187 Incorporacine inicacién = 189 Situacidn en 1992 .. » 194 La aproximacién por disciplinas espectficas ... Distribucién sectorial y por periodos de incorporacién . Género y origen social . xcolaridad en la incorporaciony en 1992 Procesos de iniciacién y actividades en 1992. ‘Una veta promisoria CAPETULO 8. UNA REFLEXION EN TORNO AL GENERO {La movlldd ecalarintergeneraclonal ente los éneras Relacién entre géneros y afiiacién diseiplinaria Los procesos de iniciacién y situacién en 1992 .. [Lineas para ahondar en esta dimensién. SALDO PROVISIONAL ¥ AGENDA FUTURA PARA LA INVESTIGACION ‘Anexo 1. Objetivos y organizacién del equipo de investigaciGn . ‘Anexo 2: La muestra y el cuestionario. . . Referencias 24 . 241 1 216 229 21 255 INTRODUCCION GENERAL En nuestros das, a escasos seis afios del fin del siglo e inmersos en un periodo caracterizado por la certeza de multiples transiciones y, paradgjicamente, por la incertidumbre de los rumbos a Jos que estin orientadas, resulta indispensable pregun- tarnos al respecto de los complejos procesos que nos han conducido a la situacién de transitoy al debate sobre sus orientaciones. Esta situacidn parece ser denominador comiin en los mas diversos Grdenes de la ‘experiencia humana y no resulta ajena si pensamos en el nivel de la educacién superior ‘en México: jeusl es el rumbo de su transicién?, ;hacia dénde se orienta inmerso en un contexto de transformaciones sumamente complicado?, ;qué perdura de sus refe- rentes previos y emo se pondrin en correspondencia con los que van apareciendo en Ta transiciOn? Nosotros ereemos queen una medida significativa,estasy otras cuestiones crucales para la educacién superior mexicana, podrin enfrentarse de mejor manera si contamos con esfuerzos por reconstruir los procesos que nos han conducido alla situacién actual. En otras palabras, consideramos que sin atender de manera suficiente a las condiciones cn las que se ha generado el conjunto institucional al que denominamos sistema de ceducacién superior, la comprensidn de su transicién es sumamente dificil ‘Nuestras preguntas bisieas En Ja més reciente publicacién oficial, se informa que en 1992 la matrfcula de licenciatura en el pafs estaba conformada por 1°126,805 estudiantes; el personal docente del mismo nivel ocupaba 113,238 puestos de trabajo académico adscritos a tun gran conjunto de escuelas de nivel superior: 372 (ANUIES 1992.) ‘Si nos remontamos al inicio de la década de los aos sesenta, podremos advert {que lo sucedido en este nivel, asf sea nada més en una comparacién cuantitati 12 © Los rasgos de la diversidad inicial, es relevant: la matricula nacional se ubicaba en 78,000 estudiantes aproxima- ddamente, el personal académico se calculaba en 10,749 personas y las instituciones eran i ‘Mas allé de 1a comparacién entre las cifras, cuestiGn que no cs menor pero uc puede conducimnos a una sobre-estimacién del aspecto més superficial del fendmeno, se encuentra la conjetura general que nos ha animado y orientadoen nuestro trabajo de investigacin y que Olac Fuentes Molinar expres6 muy claramente en 1987 Partimos de la constatacidn de que frente a nosotras, junto con nosotros, se hha ido constituyendo durante los pasados 20 alfos una universidad nueva, desprendida de una matriz tradicional en la cual todavia se reconoce, pero pprofundamente distin en aspectos sustanciales. No s6lo es una universidad ‘mucho mds grande —institucional y socialmente~ sino que esta poblada por sujetos nuevos, académicos profesionales ubicados en un mercado aguda- ‘mente diferenciado, estudiantes de un amplio abanico de origenes sociales, ‘administradores y burSeratas de oficio, empleadbos y trabajadores. Entre élos ‘se ha establecido tuna compleja red de relaciones sociales, mientras hacia cl exterior se han transformado los vinculos con las clases sociales, con el Aparato productivo y el empleo, con los procesos politicos y el Estado, con Iacreacién y apropiacién dea cultura. A esta universidad la conocemos mal ¥y poco. (Fuentes Molinar, 1987:7) ‘Uno de los aspectos que Ole Fuentes destaca como elemento distintivo de ta transformacién universitaria, y que José Joaquin Brunner postula como una de las dimensiones més relevantes de la universidad latinoamericana contemporénea, €S el de la conformacién del mercado académico. Al referirse Brunner a los problemas modernos en las universidades, propone como el primero al surgimiento de la profe- sidn académica: seguramente la transformaci6n mAs importante que experimenta Ia univer- sidad moderna ~ y que es un momento constitutivo de esa modernidad ~ es la conformacién de un mereado académico..En efecto, al mercado académi- ‘co subyacen una nueva divisién del trabajo de produccién y transmisién de los conocimientos; una organizacién del saber en disciplinas especializadas que en el contexto de la universidad desarrollan su peculiar cultura de disciplina; por tanto, opera en ese mercado un nuevo tipo de profesional —un hombre que no necesariamente vive para la cultura o el conocimiento pero ‘que de cualquier modo vive de la cultura ~ y la universidad, convertida ella ‘misma en un importante espacio ocupacional, se transforma en la meta de ‘vastas eapas de inteletuales y cambia sus relaciones con las clases y grupos en Ia sociedad.(Brunner,1987:19 y 20) Introduccién General « 13 ‘Ya sea que se proponga como la transformacién més importante o como elemento ccaracteristico de la vida universitaria en nuestros tiempos, parece existir acuerdo en la relevancia de este actor, tanto para comprender Ia historia reciente de nuestro sistema {de educacién superior como para entender sus condiciones de posibilidad en el futuro: ‘ms asin, en los alios recientes, la decisiones en torno alas condiciones para la carrera académica se han convertido en uno de los aspectos cruciales de las polttcas para la ceducacién superior en el pais. A pesar de este acuerdo, resulta sorprendente lo poco que sabemos al respecto de este actor universitario: hoy en dfa, segdin las cifras aportadas antes, el conjunto de puestos de trabajo académico que contiene el nivel de licenciatura es muy parecido alaforo del Estadio Azteca. Tal vezel lector haya tenido la oportunidad de estar en un estadio de futbol de magnitudes semejantes y le proponemos que se imagine ubicado fen el centro del campo de juego y observe Ios graderfos antes de que leguen los espectadores, Observard, sin duda, varias secciones en el estadio: las destinadas al sector popular, Jas de los paleos y plateas, y las mas cercanas al campo de juego y que en México Tamamos seecidn especial o localidades preferentes. Esta imagen del estadio vacfo y sus secciones es muy parecida a lo que sabemos ‘del mereado académico mexicano: sabemos la cantidad de puestos ~113,238-y que 30,823 ocupan localidades de tiempo completo(27%), 8,657 tienen entrada paramedio Liempo(8%) y el restante 65% —73,758- verdn el partido en as secciones més distantes: sus puestos son “por horas”. (ANUIES, 1992) ‘Un primer aspecto que muestra con claridad nuestra ignorancia es que, a ciencia cierta, no sabemos la cantidad de personas que forman parte de este extenso espacio ‘ocupacional, pues las fuentes de informacién a nivel nacional emplean como equiva- Tentes los términos puestos y personas. Sabemos que una sla persona, con frecuencia, ‘ocupa mas de un puesto de trabajo académico, debido a que su vinculacién con las {nstiuciones puede ocurrir con varios contratos “por horas" o combinando un medio tiempo y algunas horas, por solo mencionar algunas modalidades. Esto nos Ievarfa a pensar que las personas son menos que los puestos; pero, por otra parte, las {nstituciones que informan lo hacen con arreglo ala coherencia de las plazas aprobadas, ‘no necesariamente ocupadas, Io cual viene a complicar el asunto pues podria estar vvacante una cierta cantidad 0 haber sido, en Ia préctica, fragmentadas. En fin, no sabemos cudntas son las personas que tienen una vinculacién laboral con las instituciones de educacién superior ni, a ciencia cierta, cémo varian por tipo de vinculacién, En alguna ocasiGn, al exponer estas dudas al respecto de la estadisticas bésicas del nivel, un funcionatio de la Secretarfa de Educaci6n Péblica nos coment6 que, para la ‘SEP, ese no es un problema pues el conjunto de los puestos puede ser convertido ~y de hecho asf se hace en varios edlculos, sobre todo presupuestales~ en lo que se

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