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‘mendamos intervenir en toda ocasiGn, pero con tuna advertencia: no ser aburrido, pretencioso 0 ccharlatén; para decirlo en una palabra que lo de- fine bien: hay que evitar ser “pelmazo" 0, como dicen otros, “pesado”. Si cuando uno habla en pi- blico (aun en intervenciones ocasionales) cae pe- sado, €s porque hay algo que tiene que corregit. Ya lo hemos dicho —y lo reiteramos otra vez—: el orador se hace hablando, pero no de cualquier cosa o de cualquier modo. De abt Ta im- portancia de que todo curso de oratoria tenga su prictica; ello ayudard a deseubrir las propias po- sibilidades (las cualidades para una buena comu- nicacién) y las propias limitaciones (los aspectos aque hay que mejorar). Uno puede set consented la necesita de prepararse para hablar en public, puede ha- ‘ber tomado la decisisn de hacerlo Hasta po do pancipar en un curso. Sin embargo, tiene sin resolver un problema: emo superat el miedo que obstaculiza la capacidad de expre- saree y de comunicare en piblica? 3. Obstéculos psicolégicos a la comunica- idn: el miedo y la timidez Usted tiene miedo de hablar en piiblico? Si responde afirmativamente, no se sorprenda. Esto no tiene nada de especial lo extrafo serfa lo con- 36 trario. Normalmente, la mayoria de las personas sienten miedo o temor de hablar en piblico. ‘Ahora bien, si usted, por la fndole de su traba- jo. debe hablar en piblico y tiene miedo (aqut no importa si es mucho 0 poco), piense dos cosas: puede disminuir ls incidencias del miedo o tim dez a tal punto que no afectard la calidad de su discurso, y un poco de miedo 0 temor es saluda- ble; eso evidencia que usted pose responsabili- dad. Hace siglos que Cicerdn lo consideraba no ‘6lo natural sino necesario: "A mis ojos —de- cfa—, el orador, incluso el mejor, el que tiene 1a ‘comunicacién més fécil y mejor adornada, si no se intimida en el momento de tomar la palabra. es un desvergonzado 0 poco menos.” No se preocupe por eliminar completamente el miedo de hablar en piiblico; 1o que debemos climinar es el miedo o timidez. que dificulta, pa- raliza u obstaculiza para hablar frente a un audi torio, Es lo que se llama "miedo escénico”. Por si le sirve de consuelo y de alent, le diremos que Ia historia nos revela que la timidez ha sido el "ta- Ton de Aquiles" de grandes personajes historicos, 'y que buena parte de los grandes oradores han si- do personas timidas, No se desaliente ni se desa- rime si usted es una persona timida. "De una co- sa a lo menos podemos estar seguros: de que el Adiestramiento y Ia ejercitacin hardin desvanecer el temor del auditoro, instalndonos por siempre Confianza en nosotros mismos y valor.."? 37 Quisiéramos hablar de dos tipos de miedos ante un auditorio. Uno es el miedo normal y el otro es el miedo paralizante. Toda persona, cuan- do tiene que enfrentar a un auditorio, si posee un cierto grado de responsabilidad, ha de tener algu- nna ansiedad 0 temor. Esto es “natural y necesa- rio", como deciamos antes, citando a un gran ora- dor. Este tipo de miedo es saludable, ya que esti- ‘mula el cerebro y nos hace més agudos y més despiertos. Pero, siesta ansiedad se transforma en miedo ¥ temor, con sfntomas paralizantes en lo fisico y en lo psiquico, es necesario superarla. ‘Cuando tenemos miedo, nuestro cerebro or- dena a la glndula suprarrenal que comience a se- cretar adrenalina a la corriente sanguinea, y esto produce una serie de reacciones fisicas especifi- cas: nuestras gléndulas salivales no secretan lo suficiente, se seca la boca y la garganta, y cuan- «do es mucho el temor la boca se vuelve pastosa ¥ ‘en ocasiones se traba la lengua. Los miisculos del rostro quedan blogueados, los movimientos del ‘cuerpo, de los brazos y de las piernas se vuelven, torpes, se produce transpiracién, se traban la arti- cculacién y la voz. Y, lo que es peor, se obnubila Ja mente y fa persona se siente invadida por una sensacién de vacfo cerebral y aturdimiento, lo ‘gue hace dificil rezonar, memorizar, coordina las ideas y la afluencia natural de las palabras. O sea: el miedo se transforma en un fendmeno psfquico 38 paralizante y, cuando se produce el llamado “efecto de ciclo", el miedo produce més miedo. YY, cuando va més alld de ciertos limites, estamos paralizados con la consiguiente incapacidad para ‘coordinar nuestras ideas y expresarlas adecuada- ‘mente. Si el miedo de hablar en piblico es tan co- rriente, 2qué puede hacerse?, cexisten remedios contra el temor al auditorio?, ;qué podemos ha- ccer para superar el miedo, o al menos para con- trolarlo? Algunas sugerencias para superar el miedo frente a un auditorio No hay recetas; no obstante, si el miedo no es morboso, existen algunos medios que permiten superarlo 0, por lo menos, atenuarlo lo suficiente como para poder expresarse en piblico y lograr comunicarse. He aquf algunas recomendaciones priicticas que pueden ser tiles. ‘8) Saber bien el tema que uno va a desarro- ar y estar compenetrado con él. Verdad de Pe- rogrullo pero de gran importancia para quitarse el ‘miedo; esta verdad se basa en un hecho bien co- nocido: la seguridad intelectual da seguridad psi- col6gica. Por esta raz6n —como se explicaré mas adelante—, s6lo hay que hablar de los temas per- tenecientes al propio dmbito de conocimiento 0 39 experiencia y que, ademas, han sido suficiente- mente preparados para desarrollarlos en una con- ferencia 0 discurso. Se puede hacer frente al piblico con més se- guridad y confianza, si se ha preparado bien el discurso. El cabal conocimiento del tema reduce considerablemente Ia tensiGn, da aplomo y pro- vvoca una actitud mental de apoyo. Por el contra- rio, si uno no sabe bien lo que va a decir, o no ¢s- familiarizado con el tema, 0 no estéinteresado cen las cosas que dice, dificilmente podri sentirse tranquilo cuando hable ante un auditorio. Preparar y estudiar un discurso con el firme ropésito de hacerlo bien... ayuda a hacerlo bien. b) Lograr una decontraccién/relajacién, ‘combinada con una concentracién/ensimisma- miento, Antes de hablar hay que disminuir al mé- xximo Ia ansiedad y las tensiones que nos bloquean (no la tensidn que nos da tono vital comunicativo). En ese sentido, uno se relaja, pero al mismo tiem- po hay que concentrarse/ensimismarse, aistarse del ruido y de la agitaci6n, para crear en s{ mismo ‘un estado emocional acorde con el tema de Ia con- ferencia y una concentracién en relacién con lo aque se va adecir... Relajar los masculos y concen- ‘rar la mente; he aqui la primera recomendaci6n, ©) Controlar Ia mecénica corporal. Una vez frente al auditorio o piblico, aun cuando el con- ferenciante ha tratado de producir una decontrac- ‘i6n/relajacién antes de comenzar a hablar, no es 40 cextraio que se mantenga tenso y, en algunos c2- 50s, invadido por el miedo; éste produce un cier- to temblor, y el sentirse tembloroso sumenta el ‘miedo. Para romper este citculo vicioso y salir el “efecto de ciclo", no hay nada mejor que en- contrar alguna forma de relajarse, habida cuenta de que ya est frente a un piblico. Para lograrlo, realizaré algo que alivic la tensiGn: tomar un bro, acomodar una ficha, respirar profundamente en cada interrupcién (cuidado con ser exagerado, ue podria ser ridfculo), cambiar la postura (con ello se evita la sensacién de hormigueo), mover se apoydndose hacia adelante, etc. ‘Ayuda mucho a guitar el susto tener algo que hacer frente al auditorio: escribir en te pizarra, cexplicar un gréico,sefialar un punto en un mapa, tomar agua, ete. Liberando el cuerpo de Ia ten- sin y el nerviosismo, se libera la mente. A ma- yor soltura muscular, se est en mejores condi cones para expresar las ideas. La decontraccién fisica estimula la inteligencia,aviva el raciocinio 1 facilita la elocucién, 4) Desarrollar actitudes mentales de sos- tén, Los psicélogos suelen sefialar tres actitudes mentales que ayudan al apoyo psicol6gico del que habla + Proceder con confianza en s{ mismo: la inseguridad personal es un obstéculo para Ja comunicacin; quien tiene una mala 0 disminuida imagen de sf mismo, o se sien- 4l 42 te inferior, casi seguro que se sentiré te- rmeroso de revelar a un auditorio su propia personalidad. Por el contrario, la confian- ‘zaen sf mismo crea una disposicién men- tal que ayuda a superar el miedo. Aqui le aquella conocida frase de William Ja- ‘mes que suelen citar los profesores de ora- toria: "Para sentir valor, procedamos co- mo si fuéramos valientes, empefiemos to- dda nuestra buena voluntad para ese fin, y lo més probable seré que un arrebato de centusiasmo reemplace el estado de te + Ansia por ofrecer algo que considera importante que los otros reciban: quien hhabla deseando que los oyentes reciban su ‘mensaje, sin duda produciré estimulos ca- paces de suscitar un estado emocional en ‘el que la ansiedad y el miedo se diluyen. + Hablar por una causa: actitud similar a la anterior; cuando una persona est fuer- temente convencida de una causa por la ‘cual lucha, se toma naturalmente elocuen- te y encuentra una fuerza interior que le ayuda a superar los obstéculos psicolégi- cos que pudieran inhibirla. Cuanto més fuerte es la motivacién, menor ser el ni- vel de ansiedad y, a menor nivel de ansie- dad, menos temor y menos miedo, ©) Lanzarse al agua con un buen comienz0. Se recomienda de manera especial preparar cui-

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