La aventura del muchacho
azotado
7 a del alba seria cuando don Qui-
jote salié de la venta mas que
satisfecho por verse ya armado
caballero.
No habia andado mucho, cuando le
parecié que de la espesura del bosque
meee
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scccocscn SO Don QyIJOTE DE LA MANCHA Qunun27.D>
salian unas voces delicadas, como de
persona que se quejaba, y apenas las
hubo ofdo, cuando dijo:
-Gracias doy al cielo por la merced
que me hace. Estas voces, sin duda, son
de algtin menesteroso que necesita mi
favor y ayuda.
‘A unos pocos pasos vio atada una
yegua a una encina, y atado a otra en-
cina a un muchacho de unos quince
afios, que se encontraba medio desnu-
do y que era el que daba las voces, por-ee La aventura del muchacho azotade
a
q¥eun labrador lo estaba azotando con 4
mn cinturon.
Don Quijote, viendo lo que pasaba,