¿Cuál es la función del maestro para que la sociedad sea más equitativa y más

productiva?
Pienso que la función del maestro está fundamentada en la integridad,
entendiéndose como el conjunto de aspectos necesarios en un docente, tales como
disciplina, entrega, amor, respeto, honestidad, conocimientos, autoridad, paciencia,
prudencia, entre otras. Si partimos de esto, podemos no sólo pensar en un profesor,
sino en un maestro, capaz de formar personas antes que profesionales. La principal
función del maestro es la de crear, brindar, posibilidades de que sus alumnos utilicen
sus cualidades y contrarresten sus debilidades, para lograr un conocimiento
estructurado a través de sus vivencias, de la creatividad, intuición y pensamiento
crítico. No basta únicamente con llenar de información o dictar una clase. El maestro
debe estar involucrado con sus alumnos, relacionarse, ya que, el conocimiento se
construye mediante el lenguaje, por eso es necesario comunicarse (alumno-
docente). El maestro tiene que entender que no todos tienen la misma afinidad en
cuanto al desarrollo de aspectos básicos como la lectura, la escritura, expresar sus
ideas claras, elaboración de proyectos, trabajo en equipo. Por tanto, debe buscar
soluciones o alternativas para asegurarse de que sea equitativo y productivo la
adquisición del conocimiento.
¿Qué les diría a los maestros que en primaria y bachillerato contribuyeron a
su formación?
Algunos de ellos dejaron huella en mí por su compromiso, entrega, amor y cariño.
Muy pocos son los maestros que se interesan por el aprendizaje en el niño; algunos
sólo buscan enmarcarse en un currículo y no se apropian de su labor como
docentes. No incentivan al niño a desarrollar su creatividad, intuición, lógica, etc.
Buscan respuestas mecánicas, saturar de información. Por atal razón, muchas
personas consideran la educación como algo “aburrido” cuando debería ser todo lo
contrario. Pero de lo bueno se disfruta, y de lo negativo se aprende. Tuve algunos
vacíos hasta el día de hoy. Eso, debido a la metodología de los profesores, sus
comentarios, la burla en clase, utilizando el sarcasmo como método de “corrección”.
Sin embargo, me sirve de ejemplo, para mi proceso de formación. No pedo ser igual
que ellos. Debo apropiarme de lo bueno que tuve de algunos profesores, y lo malo
tenerlo en cuenta para no cometer los mismos errores.
“Cómo piensa usted el papel del maestro en el siglo XXI”
El papel del maestro en la actualidad es fundamental, ya que, la educación ha
tomado otro rumbo debido a las circunstancias actuales. Esto precisa, una reforma
en el sistema educativo. La tecnología implica personas que sepan utilizarla y poder
aprovecharla de la mejor manera posible. Es necesario que el maestro entienda
esto, que se adapte al cambio. Que actualice sus métodos de enseñanza, que sus
clases sean diferentes. Esta generación necesita aprender a generarse
interrogantes, a tener pensamiento crítico, a no comer entero, a desarrollar su
creatividad, su intuición. El maestro es pieza clave para influir de manera positiva o
negativa mediante un comentario, una mirada, etc. Se necesita maestros que se
interesen por sus alumnos, que se involucren, que se preocupen. Que brinden
opciones, alternativas, posibilidades, para que todos puedan desarrollar métodos
para un proceso cognitivo rico, para la adquisición de conocimientos.
¿Qué se debería plantear un maestro en su actividad pedagógica para rendirle
cuentas a la sociedad sobre su labor?
Personalmente creo que la mejor rendición de cuentas de un maestro a la sociedad
son sus alumnos. La formación integral de ellos, debido a sus maestros, es la
prueba exacta de si un maestro está haciendo bien su trabajo. Personas antes que
profesionales. De nada sirve tener unas máquinas en la matemática, en la física, en
la química o la filosofía, sino saben decir gracias, o por favor. Si son groseros, si no
sienten empatía por el otro. Si prefieren el bien común por encima de lo que sea. Si
no es agradecido. Si es egoísta o no sabe trabajar en equipo. La formación debe
ser integral, y el maestro es clave fundamental en su alumno. Puede ayudarle a
desarrollar su actividad cognitiva, abrir su mente, generarle interés por el
conocimiento y el aprendizaje. Pero también, enseñarle la importancia del trabajo
en equipo, de la solidaridad, de la empatía. La audacia de ser diferente o el deseo
de explorar lo desconocido, el valor de disentir de las creencias y opiniones
generalizadas, las ganas de soñar otros mundos, el conocimiento de sí mismo, la
lucha por la libertad, el derecho a la felicidad, la búsqueda de la belleza, la rebelión
contra la injusticia.
¿Por qué se puede considerar que tener claros los procesos psicológicos
básicos aporta a la formación docente?
La educación requiere de virtudes activas como la intuición, la creatividad, riesgo,
crítica, imaginación. El maestro debe tener en cuenta esto en su proceso de
formación. Podemos trazar métodos que nos ayuden a crecer como maestros y de
la misma manera, a nuestros alumnos. Continuamente estar creciendo
intelectualmente, actualizando conocimientos sin dejar a un lado lo humano. Nos
hace entender la importancia de lo moral en la educación. Nos hace comprender la
importancia de relacionarnos, de construir conocimiento en conjunto. El docente
entiende que está tratando con personas y por lo tanto lo hace con respeto, con
amor, con cariño, y pasión. Entiende las circunstancias que se pueden presentar en
el aula de clase, y buscar una solución, Se abre a sus estudiantes y ellos a él.
Partiendo de la lectura podemos concluir que el maestro es pieza fundamental en
la sociedad, ya que desde su visión se planea una educación integral, donde alberga
tanto el conocimiento como lo moral, lo ético y humano. Es un reto para el maestro
en la actualidad formar excelentes personas, antes que a profesionales. Por ende,
necesita tener cualidades afines a este sentido; a su vez que instruir, brindarles a
sus alumnos el camino, o la vía para que pueda este alcanzar un conocimiento
determinado y obtener un aprendizaje. De esta manera podemos decir que, un
maestro debe tener las cualidades necesarias para poder enseñar a sus alumnos
desde su ejemplo. Debe tener excelente presentación personal, pues tal sea la
presentación así es como luce por dentro el maestro. Si su presentación personal
es desordenada, de igual forma lo será su trabajo y su vida. Si por el contrario
muestra una excelente presentación personal, su trabajo lo será de igual manera,
demostrando respeto y compromiso. Así mismo, el lenguaje y conocimiento que
emplea el maestro debe ser claro y preciso, ya que lo está trasmitiendo, por ende,
no solamente dice datos al azar, sino que expresa valoraciones, afirmaciones,
puntos de vista; algunos alumnos no cuentan con recursos lingüísticos debido a que
nacieron en lugares marginales, entonces se precisa un lenguaje entendible.
Es indispensable que el maestro sea afectuoso con sus alumnos, que deje a un lado
la rigidez y que entienda que está formando seres humanos, y que somos seres
emocionales, que sentimos. Un ambiente cálido es sinónimo de un aprendizaje
mejor y más significativo. Esto conlleva que el alumno sienta confianza con su
maestro, esté seguro de sí mismo, que no le dé pena preguntar por temor a una
burla o sarcasmo de su propio profesor. Aumenta la capacidad de escucha, se
disfruta con los compañeros, y puede expresar sus sentimientos sin temor. Si un
maestro no revela un interés profundo y sincero en las disciplinas que enseña
difícilmente hará significativa y motivante para los alumnos la experiencia de
aprender. La tarea de enseñar debe irradiar alegría, verdad, y convicción para que
induzca aprendizajes jubilosos y comprometidos.
La comunicación exige una relación entre dos o más, exige interés en el otro, es
atreverse a que el otro nos sorprenda. La efectividad y calidad de la comunicación
oral dependen de la habilidad del maestro para emplear los métodos correctos en
el momento oportuno, y del gusto y propiedad con que maneja su tema de
exposición. Nuestras palabras dicen más de lo que queremos decir, denotan
valoraciones y sentidos inconscientes.
El maestro debe guiar al alumno hacia lo desconocido, y darle las herramientas
necesarias para que por medio de estas desarrolle sus capacidades; el maestro
debe incentivar el deseo en ellos de aprender.
Debe enseñarle a preguntar, ya que es un deseo inherente de la condición humana.
De igual forma debe respetar las preguntas de sus alumnos y tomarlas en cuenta.
No se permite una reacción de burla hacia una pregunta cualquiera que sea.
Muchas veces estas son el inicio de grandes descubrimientos.
Los maestros promueven y aceptan un conocimiento ritual, y estereotipado. Se
satisfacen con respuestas que son sólo un recuento verbal o escrito más o menos
preciso de hechos, conceptos, o problemas que han enseñado. Cada alumno es
diferente y dentro de sí hay muchos enigmas y cosas que ignoran, por lo que, no
podemos descartar la idea de las concepciones iniciales, los pre saberes,
estereotipos y demás cosas que los alumnos traen a la escuela.
Y para concluir la lista enorme de cualidades que debe poseer un maestro, está el
nuevo rol del maestro, y con este se busca que él pueda cultivar el espíritu de sus
alumnos y no llenarlo de información. Debe actualizar su información de manera
creativa e incorporarla a su trabajo docente.
El buen maestro no es aquel que pretende que sus discípulos lo imiten. El maestro
verdadero es el que alienta y estimula:
• La audacia de ser diferente
• El deseo de explorar lo desconocido
• El valor de disentir de las creencias y opiniones generalizadas
• Las ganas de soñar otros mundos
• El conocimiento de sí mismo
• La lucha por la libertad
• El derecho a la felicidad
• La búsqueda de la belleza
• La rebelión contra la injusticia

Un maestro no tiene que ser el ejemplo viviente de todas las virtudes, ni el único o
mejor modelo que sigan los alumnos en todos los campos. Sí debe ser un testimonio
de superación y desarrollo humano permanente. Es necesario que cada día sienta
la necesidad de crecer, de elevar su condición humana.
Si hace aunque sea al menos estas cosas, podemos decir que su trabajo no será
en vano.