160, Civilizaciones avanzadas antiguas/Mesopotamia 2350 (Sargon 1) logemonia do los uteos 2150-2060 dinaatio de Ur 9050-1950 esplandor | 0 are babilonica Peto aso antigua {e00-1360 farmmrabi 1728-1686 Babionia) e859 D. Timbal lejancko en bonis 331 sumetioe sos (BER aicrios Panorama cronolégico, instrumentos musicalesMesopotamia tiene una historia plena de alternativas. En el cuarto milenio precristiano se establecieron alli los sumerios, luego los acadios o babilonios, los asirios, y también ios hititas, casitas, elamitas y persas, hasta que finaimente se produjo la entrada de AvziANDRO MAGNO en Babilonia en 331 a.C. La situacién de Mesopotamia es central. Influyé podero- samente sobre los paises circundantes al sur (tribus arabes), al oeste (hititas, frigios, fenicios, exipcios, grie- 208), al norte (Irén, tribus indogermédnicas) y al este (mas all del norte, hasta la India). Por este motivo la mitsica de Mesopotamia, también sobre todo sus instrumentos, vuelven a hallarse en es0s paises, aunque a veces conside- rablemente modificados, del mismo modo que también hos encontramos con influencias en sentido contrario. Era corriente que, en las conquistas, se respetase a los miisicos de los pueblos extranjeros, tomando a menudo posesion de la misica, a la cual se consideraba un bien precioso. Las fuentes para la averiguacién de ta miisioa son too documentos literarios, asi como reproducciones (sellos cilindricos) sumamente instructivas, relieves en piedra y hallazgos de instruments. Instrumentos de everda La lira se considera el instrumento nacional sumerio. Ya se le representa a fines del cuarto milenio precristiano, Se hallaron preciosas liras, adornadas con oro, plata y placas de concha con profisién de itustraciones, en las tumbas reales de Ur I. Estas primitivas liras sumerias son tan grandes que se apoyaban en el suelo (lira de pie sumeria, fig. A). Su caja de resonancia se construia en forma de toro (simbolo de la fertilidad, cf. sello cilindrico, fig. A, a). Mas tarde, esa forma se estiliz6, pero la cabeza de toro quedé como ornamento de la barra detantera (columna) (fig. A, b). El ejecutante se sentabai ante el instrumento y tocaba las cuetdas con ambas manos. En las reproducciones, el niimero de estas cuerdas oscila entre 4, 5 y 7, y en los instrumen- tos hallados, también entre 8 y'I1. Las cuerdas se aseguraban al travesafio mediante clavijas, y pasaban sobre un puente hacia la caja de resonancia. Estan dispuestas con una inclinacidn hacia el ejecutante, a fin de que éste pudiese alcanzarlas todas—La lira de pie se convirtié Iuego en la lira de mano, cuya primera imagen reproducida procede de la época babilénica {alrededor de 1800 a.C.) 1 arpa. También encontramos ya este instrumento en la &poca sumeria. La caja de resonancia y el cordal forman una unidad en forma de arco (arpa de arco), o bien se enlazan en un ligero acodamiento (arpa de arco acodada). Segiin el modelo, se la sostenia en forma vertical w horizontal (fig. C, b, c). Las arpas tienen de 4 a 7 cuerdas (;por culpa de un modo de represemtacién defectuoso?). Los asitios conocian, so- bre todo, el arpa de angulo, Su caja de resonancia se halla en ia parte superior, y'el cordal se halla forman- do Angulo agudo con ella; su niimero de cuerdas es clevado (fig. C, a). HI laid se denomina, en sumerio, pantur, y en griego, ‘pandura, es decir, «pequetio arco musical». Su existen- cia esté documentada en reproducciones babilénicas del segundo milenio precristiano, casi siempre en ma- nos femeninas, pero lo esta de igual modo entre los asitios (ig. B). Llama la atencién su largo cuello (latid de cuello largo) con diapasén, sobre el cual corren de 2 a3 cuerdas, y su pequeiio cuerpo de resonancia, sobre el cual se halla tendido un parche, en forma de'media calabaza (también de caparazén de tortuga, etc.) Civilizaciones avanzadas antiguas/Mesopotamia 161 Instrumentos de viento — Flautas. Su existencia se halla demostrada ya desde tiempos primitivos. Se denominan gi-bu, «tubo lat- 0», no tienen embocadura, y se sostenian en posi- idn casi vertical. Ademas existen flautas de orificios digitados. — Chiriméas dobles eran, presumiblemente, los dos tu- bos de plata, de igual longitud, sin boquilla y de 4 orificios digitados cada uno, que se hallaron en las tumbas de Ur I — Trompetas rectas. Al igual que las trompetas en espiral, s6lo aparecen en el periodo asirio (Ninive). Seguramente se las empleaba como instrumentos de sefales en el ejército. {nstrumentas de percusiin Habia toda una serie de ellos: sonajas, varillas entrechoea- das, sistas en forma de U, eampanas de bronce y platillos de mano, Una peculiaridad la constituyen los grandes timbales de caldero de metal (fig. D)—Conocian el pequcio tambor cilindrico, qus se lievaba verticabnente Gelante del vientre, y también horizontalmente en caso de tener dos parches, en cuyo caso se 10s golpeaba de ambos lados con las manos, el pequefio tambor de marco (pandereta) y un gran tambor de marco © bombo (de un Giimetro aproximado de 1,50-1,80 m), de dos parches, percutido por dos ejecutantes. Este iiltimo instrumento es, presumiblemente, de origen asiftico. A menudo esta- ba coronado por una pequefta figura erguida (fig. E). De la masica cn si, poco es lo que se sabe. El niimero de cuerdas y de orificios digitados de los instrumentos permiten deducir el empleo de las escalas pentaténica y heptaténica. Ya para los sumerios, la misica guardaba relaciones cosmoldgicas, por lo que el nimero desempe- jiaba para ellos un papel de primordial importancia (relacién con las estaciones del afio, con los planetas, ete.) ‘Ademas de la homofonia, parecen haber conocido tam- bign ciertos tipos de polifonia. Asi, las liras y las arpas casi siempre se punteaban con ambas manos; también la chirimia doble sonaba a dos voces (epractica del bordén?) En numerosas imagenes se ven a varios misicos compo- niiendo pequeiias orquestas, como p. ej. dos arpas y cantante, 0 lira, arpa, tambor, platillos, © también chiri- mia doble, flauta doble, arpa, lira, ec., es decir, combina iones de” sonidos manifiestamente suaves. La Biblia describe la orquesta de Nasucononoso II (Daniel, 3), y segtin ella tromperas 0 trompas, flautas w obves dobles, liras y arpas sonaban, presumiblemente en forma indi ual al principio, y luego conjuntamente (Sacus). Exis- tian los miisicos profesionales. Las imagenes de la época ‘muestran ejecuciones musicales en las celebraciones del culto, en la danza y en torneos de lucha, pero también durante las comidas y en los jardines.