RESUMEN

El problema que se abordó en las sesiones anteriores está ligado al mal estado del
cableado estructurado en centros de privación de libertad y en planta central. Se empezó
por estudiar los principios de Cobit 5 para tener una mejor idea sobre cómo aplicarlos
en la solución del problema. El primer principio de satisfacer las necesidades de las
partes involucradas nos permitió conocer los requerimientos de los funcionarios
públicos y directivos, para en base a sus necesidades, implementar el proyecto. El
segundo principio sirvió para incluir la participación de varias direcciones en el
desarrollo del proyecto. Es importante que todas las direcciones dentro de la institución
estén al tanto del proyecto, a pesar de que sea un proyecto tecnológico gestionado por el
departamento de TI. El tercer principio ofrece un marco de referencia en el cual se basa
el desarrollo del proyecto y provee estándares útiles. El cuarto principio ayudó a
determinar los catalizadores y dominios de COBIT 5 que se compaginen con el
proyecto a desarrollar.
En este caso en particular, se utilizó el dominio BAI (Construir, Adquirir e
Implementar). Este dominio se acomoda perfectamente con este proyecto, ya que las
fases de su ejecución incluyen la adquisición de materiales, herramientas e insumos para
el mejoramiento del cableado estructurado. Los procesos de este dominio permiten
hacer un análisis de riesgos previo a la implementación de tal manera que no se
presenten inconvenientes a futuro. De la misma manera, indica las directrices para una
apropiada gestión de los recursos para así evitar malgastar o despilfarro.
Adicionalmente, este dominio permite que el proyecto se ajuste de acuerdo a cambios
de requerimientos o a dificultades que se vayan presentando a lo largo de su desarrollo.
El cuarto principio igualmente se apoyó en las Normas de Control Interno, con énfasis
en las tecnologías de la información. Las 17 normas fueron claves en definir una serie
de mecanismos y procesos para la elaboración del proyecto. Por ejemplo, en la
adquisición de los materiales y herramientas necesarios, se debe elegir un proveedor que
ofrezca garantía en sus productos. De esta manera, se puede asegurar la inversión, ya
que en caso de que se presente un mal funcionamiento el reemplazo de los equipos no
impida la operatividad. Es fundamental que el proyecto tenga una duración prolongada
con el mantenimiento adecuado. Como se indicó en talleres anteriores, la duración
debería ser de al menos 7 años. Las normas igualmente definieron los riesgos que
pueden aparecer durante o antes de la ejecución del proyecto. Por ende, mantener un
monitoreo continuo permitirá la mitigación de problemas. Posterior a la evaluación de
necesidades e infraestructura, definir el alcance del proyecto es primordial para la
definición de metas e hitos. De esta manera se mantiene un enfoque estructurado.
Finalmente, el quinto principio sirvió para separar las actividades que corresponden al
gobierno de las actividades de gestión. La toma de decisiones descansa sobre las
autoridades y directivos, quienes controlan que las necesidades sean satisfechas y que se
alcancen los hitos y metas. Por otro lado, la gestión es responsabilidad de los técnicos,
quienes de acuerdo a los parámetros definidos por el gobierno, planifican, construyen y
desarrollan el proyecto. Ambas entidades trabajan en conjunto para garantizar un avance
eficaz del proyecto. Respecto al financiamiento, el gobierno es quien administra los
recursos.