This document provides a summary and analysis of the book "There's a Boy in the Girls' Bathroom" by Louis Sachar from the perspective of a student. The student highlights several important lessons learned from the book, including that children don't misbehave without reason and the importance of communication between students and teachers. The story helped the student better understand the perspective of a "troublemaker" child and emphasized the impact of empathy and support from others.
This document provides a summary and analysis of the book "There's a Boy in the Girls' Bathroom" by Louis Sachar from the perspective of a student. The student highlights several important lessons learned from the book, including that children don't misbehave without reason and the importance of communication between students and teachers. The story helped the student better understand the perspective of a "troublemaker" child and emphasized the impact of empathy and support from others.
This document provides a summary and analysis of the book "There's a Boy in the Girls' Bathroom" by Louis Sachar from the perspective of a student. The student highlights several important lessons learned from the book, including that children don't misbehave without reason and the importance of communication between students and teachers. The story helped the student better understand the perspective of a "troublemaker" child and emphasized the impact of empathy and support from others.
LOUIS SACHAR Para comenzar me gustaría resaltar lo mucho que me ha gustado el libro y todas las cosas que enseña y hace ver. Creo que es un libro maravilloso que, aun siendo dirigido para niños, me ha enseñado a mí muchas cosas. Con este libro he podido refrescar mi memoria en cuanto a lo que hemos dado en clase. Me resuena, de las teorías de las que hicimos un trabajo en grupo, la manera de pensar que tiene la psicóloga del colegio en cada una de las sesiones que lleva a cabo con Bradley. Esta forma de pensar en la que no hace importancia a los malos comportamientos o las malas notas, sino que da visibilidad a la parte positiva de cada una de las cosas que el niño le cuenta, me parece que es la que deberían tener todos los docentes a la hora de escuchar los problemas de sus alumnos o incluso a la hora de “obligarles” a hablar con ellos. Como ya he dicho, destaco el hecho de que el libro me ha enseñado muchas cosas. Primeramente, y la que considero más importante, es que ningún niño se comporta mal sin ningún motivo o hace cosas “sin querer”. Como la señorita Davis dice en el libro, todo lo hacemos por algún motivo. Con esto he podido reflexionar y pensar después de leerlo en cada una de esas cosas que pienso que hago “por error”, y realmente me doy cuenta de que nada pasa “porque sí”. Otra de las cosas que he podido aprender con el libro es la importancia que tiene hacer pensar a las personas sobre lo que hacen en vez de intentar “dárselo hecho” y decirles lo que deben o no deben hacer. Antes de leer Hay un Chico en el Baño de las Chicas, la idea de la importancia de tiene la comunicación alumno-profesor que tenía no tiene nada que ver con la que tengo ahora que he leído el libro. He conseguido realmente reflexionar mucho y he logrado reforzar ese pensamiento, ampliándolo además con la idea de que es necesario hacer que los alumnos hagan funcionar la mente y piensen lo que deben hacer para solucionar los problemas. Me gustaría agradecer al libro, y más concretamente a su autor, porque gracias a la historia que he tenido oportunidad de leer he podido ver cómo es la vida en el colegio desde la perspectiva de un niño “malo”, haciéndome sumergirme en la historia para empatizar con todos esos niños a los que excluyen porque no son iguales a los demás o porque no se comportan “como es debido”. Una de las partes que más me ha emocionado ha sido el final del libro. Leyendo las cartas tanto de Carla como de Bradley he podido sentir ese gran vínculo que uno puede crear con las personas con las que uno está agradecido por todo lo que le ha ayudado y le ha enseñado. Este sentimiento tan bonito seguramente se quedará grabado en mi mente para que el día que me enfrente a algún niño que “se porta mal”, sepa que debo ayudarle, como dice Carla Davis, desde el corazón. Finalmente, quiero destacar algunas otras cosas que han llamado mi atención dentro del libro. La primera de ellas es que el protagonista “odia” todo y a todos porque realmente odia su forma de ser. Otra sería la emoción de la familia y de las profesoras de Bradley al ver cómo el niño empieza a mostrar interés en comportarse bien. Por último, el cambio drástico del niño cuando leyó la carta de su psicóloga, el cual me hizo sentir verdadera felicidad solo con leerlo.