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    Arquitectufa irg ca eee: perenne csc ed EL ALTAR CRISTIANO = Por Félig’Maria Arozena saab 29, 256 pags ISBN 978-64-9605-146-9 i AMBITOS DE REVELACION © ARQUITECTURA Y NUEVA, BVANGBLIZACION cores Por Eloy Aran Sala CPL Libri 23. 352 pags reat es eco i TEOLOGIA Y ARQUITECTURA CRISTIANA ENELSIGLOXK = Por Fernando Lopez Arias ‘Cuadernos Phase 230. 148 pags. ISON G7EBLIOE STG cel PP Resitorial ‘Ntim, 383 septiembre / octubre ~ Phase 59 (2019) 437-460 PRINCIPIOS TEOLOGICOS PARA UN ESPACIO MISTAGOGICO Abstract: The Liturgical Movement from a hundred years ago still shows us that in order to make the best use of the liturgical space we have to regard it in relation to the celebrating com- munity in time. Here we study unknown texts by Romano Guardini and Rudolf Schwarz to recognize their great intui- tions in some examples of today’s churches and commu- nities where there is celebrated a liturgical dynamism worth of our time. Keywords: Schwarz, Guardini, mys- tagogical space, celebrating community, liturgical dyna- ism, Bert DAELEMANS, 5} Resumen: El movimiento litdrgico de hace cien afios nos sigue ensefiando que para hacer un buen uso del espacio litdrgico hemos de considerarlo en rela- ién con ta comunidad cele- brante en el tiempo. Aqui se estudian textos desconocides de Romane Guardini y de Rudotf Schwarz para reconocer sus grandes intuiciones en algunos ejemplos de iglesias y comuni- dades de hoy dende se celebra tun dinamismo litdrgico digno de nuestro tiempo. Palabras clave: Schwarz, Guardini, ‘espacio mistag6gico, comu- niidad celebrate, dinamismo litaigico. Bert Daelemans, sacerdote jesuita flamenco, miisico, ingeniero- arquitectoy doctoren teologia, Esmiembro del comité cientifico del congreso anual sobre arquitectura litiirgica enelmonasterio ecuménico de Bose. 498 ert Dantas jara entender y «habitar» nuestros espacios littirgicos hoy, los afios 1920 siguen siendo de una extraordinaria fecundidad. Pensamos aqui sobre todo en la fructifera interaccién entre el tedlogoy sacerdote Romano Guardini (1885-1968) y el arquitecto Rudolf Schwarz (1897-1961) en la célebre «Sala de los Caballeros» del castillo de Rothenfels.? Revisitar aquella envidiable flexibilidad y seriedad que carac- terizaban entonces al trato con los espacios litirgicos permitiré llegar a una simple y profunda verdad para nuestro tiempo: para hacer un buen uso cel espacio -para «habitarlo» bien— hemos de reconsiderarlo en relaci6n a la vida y en el transcurso del tiempo? De tal modo, el espacio littirgico se abrir4 a través de unasucesi6n: orgénica de «configuraciones comunitarias», «bisagras» 0 westa- ciones» que, como simbolosdela comunidad mismaensurelacién con Dios, la despliegan como Cuerpo de Cristo porsu iniciaciénen. el Misterio cristocéntrico, trinitario, eclesiolégico y escatolégico. Todasestas dimensiones teol6gicasdeberfan encontrar una expre- sinenel espacio litirgico para que sea de verdad «mistagégico», esdecir, para quepueda contribuira la mistagogia-la introducci6n en el misterio- de lacomunidad celebrante.* 1. Para una vision ms detallada de esta colaboracion, véase Godehard Rurrenr,«Liturgie und Kunst. Theologiegeschichtliche und kunsthistorische ‘Anmerkungen Zum Verhaltnis Romano Guardini ~ Rudolf Schwarz», Das ‘Minster 34 (1981); 32-38; HB, Gent-Faxovrrz, Romano Guardini 1865-1968 Leben und Werk, Mainz: Griinewald ‘1995 (1985); Walter ZannveR, Rudolf Schwarz ~ Baumeister der Neuen Gemeinde, Ein Belirag zum Gegprich zwischen Liturgictheologie und Architektur in der Liturgiscken Bewegung, Minsteraner ‘Theologische Abhandlungen 15, Altenbenge: Oros Verlag 71998 (1992); Fr dérie Draws, L’entrécen lturgi. Introduction a leuore de Romano Guardini, Paris: Cerf 2008. Quiero hacer constar mi agradecimiento a Adelaida Gil Martinez del Instituto Cervantes por su valiosa revisién del castellano. 2. Enestesentidopodemosentenderque «el tiempoessuperior ales Como noslorecueda papa Francisco en su ences Lauaato a, 178. 3. Para un desarrolly més detallado del espacio mistagégico, véase mi Spintusloct:A Theological Method for Contemporary Church Architecture Boston: Brill2015; «Teotopia: enquin sentitarquitecturaesdevéteoldgicay, Questions de vide cristiana 254 (2C16): 23-48; «Umbrales entre cielo y tierra. Espacios litargicos contemporéneos» en El cielo historia yespiritualidad, M.M GRANA Civ (ed), Madrid: Universidad Pontificia Comillas 2018, 419-443. ‘sm. 359 Phase 59 (2019) 437-460 rincipios teol6gicos para un espacio mistagégico 439 {Qué es un espacio mistagégico? Tomo esta vision mistagégica del Padre dela Iglesia Méximoel Consesor (580-662). Ensucélebre tratado Della mistagogia de la Iglesia, de lo que simbolizan los ritos de lasanta Iglesia durante lacelebracion de cada divina synaxis, describe el espacio littirgico a partir de la asamblea y notanto a partir de los presbiteros ~como lo hace Dionisio el Areopagita-. Segiin Méximo, «la nave es un sarttuario en potencia porque es consa- grada por surrelacién al término de la mistagogia» y «elsantuario es una nave en acto porque contiene el principio de esta incesante mistagogia».‘ Ademés, en ambos espacios, nave y santuario, la mistagogia «sigue siendo la misma. Detras de esta afirmacién esti el principio cristolégico de Calcedonia: una persona en dos naturalezas. De igual manera se divide el espacio litvirgico en dos espacios que se necesitan y se complementan para poder introducirnos en el misterio que se celebra alll principio de la mistagogia se encuentra en el presbiterio -en el altar- mientras quel érmino de la mistagogianoseencuentra alli,sinoah{donde esté la asamblea, convertida ahora en Cuerpo de Cristo. No toda laatencién debe centrarse en lo que ocurre en el presbiterio, sino que la nave -espacio de la asamblea- debe devenir santuario; mientras que el presbiteriosin nave no sirvea nada. La asamblea noes espectadora pasiva de lo que ocurre en el presbiterio sino participante activa en el proceso mistagégico, en la celebracién de los misterios. Entrarenunespaciolitizgico esentraren unmisterio. De talmanera, a comunidad se transforma en el misterio del Cuerpo de Cristo anteel Padre y enel Espiritu. Es esencial que cualquier comunidad local se apropie «domestique», como dirfa el zoxro del principito de Saint-Exupéry-el espacio litirgicodondesuelecelebrar. Estono implicaenabsoluto que haya queintroducir alfombras y asiconver- tirlo en una sala polivalente y familiar. Significa més bien que una comunidad, conscientede quese trata de un espacio poderosamente ‘mistagégico—capaz de introducir en un misterio, no tanto haciendo visible un misterio invisible sino haciéndolo experimentable por el 4 Maxims te Conmsssun, La Mystagogie,trad. M.-L, Charpin-Ploix, Paris: ‘Migne 2005:PG91,681D. Miscursivas. Vermidiscusiénen Spiritus loci,27-33. yo ert Dae as hecho de celebrarlo-, se siente en su casay ala vez tome la respon- sabilidad de cuidarlo como uno cuidarfa su propia casa. Ademés dearquitecto, Schwarzera un gran tebricode la arquitec- tura, Gracias a Guardini publica en 1924 su primer escrito sobre la arquitectura, «(ber Baukunst»,en el cual la describe como una sucesiGn organica de formas fundamentales (Grundanschauungen). En 1938aparecesu obra més conocida, desgraciadamente todavia mal interpretada a dia de hoy, Vom Bau der Kirche («acerca de la construccién dela iglesia»), fruto de su estrecha colaboracién con el autor de Vom Geist der Liturgie (1918) en Rothenfels, ademas de la construccién de su primera iglesia, la Fronleichnariskirche 0 Corpus Christi (1930) en Aquisgrén. En 1960, este templo seguia siendo controvertido, por lo cual Schwarz publica una defensaen «Bucharistischer Bauy. Finalmente, en el mismo afio se publican sus memorias autobiogréficas bajo el titulo Kirchenbau.s Desumagna obra propongo destilar aqui cuatro principiosbasicos que podrian guiarnos hoy para que los espacios que usemos en nuestras celebraciones litiirgicas sean de verdad mistagégicos. Estos principios teol6gicos son: el lugar de culto es un «espacio vivo» que se desarrolla enel tiempo (1), segtin la «capacidad lit gica» de la comunidad (2), que se expresa en distintas configura- Gonesespacialeso cbisagras» que traducen actitudes comunitarias ante el misterio (3), que «orienta» y envia para que el mundo se convierta en Reino (4). Al final, visitaremos algunos templos de reciente construccin para percibir cémo se puedan implementar estos principios teolégicos hoy. 5 RScrwarz, «(ber Baukunst», Di Schildgenossen 4 (1924):273-284; Vort Bru der Kirche, Heidelberg: Lambert Schneider "1947 (1998); «Eucharistischer Baw», Das Miinster (1960); Kirchenbau. Welt vor der Schwelle, Heidelberg: FH. Kerle Verlag 1960. Estas obras no son traducidas al espaol y siguen siendo, desgraciadamente, desconocidas. Principos teol6gicos para un espacio mistagégico 4a 1. EL ESPACIO LITGRGICO SE DESPLIEGA DE MODO ORGANICO: BL MODELO DELAPLANTA Desde su primera publicacién, Schwarz describe la arquitectura como «el lugar donde la vida se abre, se desarrolla y se perfec- ciona en una realidad més alta>.* Es decir, el espacio se relaciona con la vida y con el tiempo: «La vida sigue siendo el centro de la arquitectura, que se entiende solamente desde la vida: solo asi ella se convierte en experiencia (Erlebnis)». La arquitectura es «el arte de juntar» el espacio, el tiempo y la vida. Juntos, el espacio yeltiempo forman el «cuerpo», la «expresién» o el «simbolo» de la vida. El espacio es un instante en un proceso evolutivo, una bisagra, un paradéjico «estado de oscilacién» (Schwingungsstand) entre dos realidades: una menos completa y otra «mésalta». Estas formas fundamentales (Grundanschauungen) son los «miembros de un mundo originario» (Glieder einer Urwelt) como si fueran los miembros de un cuerpo primordial. Su paradigma es una planta: nace desde el espacio-punto (Puntk- traum) intimo y cerrado de la semilla y se despliega a través de nuevos espacios oscilatorios a lo largo del tallo hasta el céliz, que acogeré el fruto. Cada «estado» o bisagra contiene en potencia la promesa de una realidad més alta. Es la misma vida que se des- envuelve de manera ritmica (rhythmisch verknilpft) y con una clara direcci6n (eine bestimmte Richtung) a través de distintas etapas 0 estaciones hacia una realidad mayor. Asi mira Schwarz a la arquitectura: no ve un espacio estatico de «cosas muertas» yuxtapuestas —como si fuera un bodegén 0 naturaleza muerta- 0 como el espacio absoluto y abstracto de las mateméticas, sino que ve la vida en vibracién, atrapada en un instante, en un «espacio vivo» (Lebendige raum), con todo su dinamismo y su energia.' Es tarea de los usuarios, habitantes, 6 — Scuwarz, «Uber Baukunst», 273, 7 dtl, 73.274 Miscursvas Eleermino , 276, 13° Woid,,273. 14 Bid.,27. 15. Scurwarz, Kirchenbau, Welt vor der Schwelle, 11. sg ert Dacca unespacioarquitect6nico que es «abrazo» (Umarmung)**Estonos leva a formular un segundo principio. 2. EL ESPACIO SE HACE MISTAGOGICO POR LA «CAPACIDAD LITGR- GICA» DE UNA COMUNIDAD CELEBRANTE Enlasmemoriasautobiograficasde un arquitecto resultasorpren- dente leer que «la liturgia no necesita el edificio eclesial».” Lo podirfa haber dicho un protestante, tal y como lo formul6 recien- temente el tedlogo Horst Schwebel: «Los edificios eclesiales no son ningtin medium salutis» y, por lo tanto, «la forma del edificio es irrelevante para la salvacién humana y para la relacién con Dios».* Pero para entenderlo bien habré que compaginarlo con otra frase lapidaria:la arquitectura y todoloquecontiene «nodebe servir a la liturgia sino que debe ser la liturgia, aunque de manera modesta».'*Loimportanteen una iglesiaesla liturgia, noel edificio ni el arquitecto. Y todo debe devenir liturgia o mistagogia «a su maneray. Eledificionoesen absoluto irrelevante para nuestra rela- ci6n con Dios: debe ser sacramental y contribuir en la celebracién del misterio y en la introduccién en el misterio. Noes ninecesario niirrelevante. La pregunta es: emo puede contribuir ala liturgia ala «capacidad litdrgica» de una comunidad? Guardini abre su célebre Vom Geist der Liturgie (1918) afirmando rotundamente: El fin primordial y més inmediato de la liturgia no es el culto tri- utado a Dios por el individuo, nila edificacién, ni la formacién, ni el fomento espiritual del mismo, en cuanto ser individual; no es el individuoel soporte osujetodelasaccionesy plegariaslittirgicas;nilo estampocolasimpleagregaciénaritmética deuna multitud de eles [sk La persona o sujtolitrgico es algo distinto: es, sencillamente, 16 Scuwanz, «liber Baukunst, 277 17 Scuwanz, Kirchenbau. Wel order Scelle 43. 18 _H.Scrwestt,«Die Kirche und ihr Raum Aspekteder Wahmehmung,» inKirchen—Raum~ Pidagogit, S.Glockzin-Bever-H. Schwebel (ed.}, Minster LIT-Verlag 2002, 930,15. 19 Scuwanz, Vom Bau der Kirche, 135. Principios teol6gicos para un espacio mistagégico ats la unin de la comunidad creyente, como tal considerada;es, por lo tanto, algo que superaelconcepto rigido de un agregado aritmético deindividuos;es, en términos definitivos, la iglesia. (...] En la litur- gia los homenajes tributados a Dios lo son por la unidad colectiva ¥ espiritual, como tal considerada, edificéndose y santificandose, a ‘suvez, la comunidad, mediante la adoracién quea Diosse inde. Es ‘muy importante, para poder avanzar por este camino, penetrarse vivamente de este sentido esencial y objetivo de la liturgia.” En sus memorias autobiogréficas, Schwarz hace suya esta idea: El arquitecto no construye una iglesia para un individuo sino para ‘una comunidad, algo muy diferente a una suma de individuos, porque tiene la capacidad de hacer nacer formas comunitarias mas alld de las personas (gemeinsame und iiberpersénliche Gestalten) Estas formas aparecen tinicamente a condiciGn de que el individuo se incorpore a la comunidad y asf pueda contribuir a su nacimiento. Enna iglesia, estas formas comunitarias se orientan hacia el altar Esta orientacién aparece solo porla forma del Nosotros (Wir-Gestal!) ‘que se orienta hacia aquel centro amado (geliebte Mitte), una orien- facién comunitaria que no es simplemente espacial o estética sino ‘que deviene plena adoracién, devocién y oracién y que se vuelve ‘graciosa y vivamente (gnadenreich und lebendg) hacia este centro." Podriamos decirmuchas cosas acerca de este texto, especialmente acerca de la «participacién activay de una comunidad celebrante que «toca» el espacio littirgico como si tocara un instrumento de :miisica, haciendo nacer «formas comunitarias» del Nosotros que se orientan hacia el altar y asi devienen expresiones teolégicas de la adoracién ante el misterio, Por lo tanto: La ciencia de la arquitectura tiene que ser una ciencia de la forma (Gestalt) (...] Un edificio no ests pensado como una fiesta para los ‘ojos sino que es un espacio habitable (Wohnraum). Habitar [...} es la expansi6n del propio espacio corporal a la ancho y aloalto; es la ‘omunién con muchas personas en una forma (Gestalt) comdin, una comunién en un cuerpo més elevado.= 20 _ R.Guanprar,Elespirihadela iturgia trad. Félix Garcia, Araluce:Barcelona 1946, 60-61. Véase la contribucién de Juan Rego Barcena en este volumen, 21 Scuwanz, Kirchenbau. Welt vor der Scheele 6. 2 Bid.,8 46 ert Dae ans En Vom Bau der Kirche, escribia Schwarz: Las obrasarquitecturalesson formas comunitariasy elindividuono puede entenderlas mientras esté solo. Estas obras son producidas porlacomunidad y,en efecto, es engendréndolas quela comunidad demuestra ser una unidad. Solo desde la comunidad pueden set entendidas. Edificar no significa resolver problemas matemsticos ni crear espacios agradables: significa colocar grandes formas comunitarias ante Dios. A distancia tanto de lo subjetivo como de lo abstracto, la arquitectura auténtica habita en el canon estricto y elevado de las grandes formas. Entre los afios 1924 y 1939, la Sala de los Caballeros de Rothenfels. era un lugar de profunda experimentacién litdxgica, de vuelta a la sencillez y la densidad en la celebraci6n, debido a la «capaci- dad littirgica» (Liturgiefihigkeit) de la comunidad y, sobre todo, de su der Guardini.* Esta sala, pintada de blanco, permitia ala comunidad encontrar unas configuracionesespaciales adaptadas adistintas funciones, entrelas cuales destacabanlas celebraciones litairgicas mayores de Pascua y de los encuentros multitudinarios de verano: «El espacio vivo era estructurado por la comunidad misma segiin la forma que queria adoptar. De tal modo tomamos en serio la capacidad de una comunidad de crear por s{ misma unas “formas” espaciales. Realizamos unas muy simples y muy convincentes».* En la liturgia, no se trata simplemente de usar una sala polivalente sin carécter sino de jugar» conlaflexibilidad de un espacio consu propio genius loci. En 1929, Guardini escribe: Lo que aqui tomé cuerpo es una Gestalt, una «forma» ejemplas, un todo no solamente pensado sino vivido, suficientemente real para originar unaaccién clara y eficaz, Salida delacomunidad misma,esta 23. Scarwanz, Vom Bau der Kirche, 33. 24 Véase la insistencia sobre la Liturgifthigkeit del abad benedictino Ilde- fons Herwegen en su prefacio a GUARDINI, El espirita de la liturgia, 47-56; Davide Pisky, «La notion de Liturgiefthigkeit (capaci liturgique): Une question diactualité permanente», La Maison-Diew 291 (2018): 145-165; ‘Lettre de Romano Guardini a Johannes Wagner pour ie Congrésliturgique de Mayence», La Maison-Diew 291 (2018): 137-144, Véase la contribucién de Fernando Lépez Arias en este volumen. 25 Scurwanz, Kirchenbau, Welt order Schwellecitado en Dowuvst 66. rincipios teol6gicos para un espacio mistagégico == 487 accién Ilegéa transmitirel vigor de la forma, Nos sentimos levados, porellay,sin embargo, dependfa de la responsabilidad de cada uno L...J-Con respecto al dia. dia, Rothentels nos ofrecta as{ un modelo objetivo, ya portador de una auténtica tradicién.* Precisamente, esta Gestalt que toma cuerpo enunaacciéncomuni- tariaesel fundamentodelo que busca Schwarz. Elarquitectoquiere plasmaren arquitectura unas formas comunitarias comosi fueran distintos «estados oscilatorios» que permitan a una comunidad acercarse mas directamente al misterio. En esta sublime teoria consiste el genio deSchwarz, que no siemprese ve reflejadoen su obra construida. Ya en su primer templo en Aquisgrén (1930), la comunidad parroquial no le ofrece las mismas condiciones favo- rables de Liturgiefihigkeit que habia encontrado en Rothenfels.” Se refiere explicitamente a esta capacidad y a la relacién entre Rothengfels y Aquisgrén en suconferencia publicadaen1960como «Eucharistischer Bau». Recordamos que para Guardini, esta capacidad y participacién littirgicas se perciben ya en la manera de mirar, escuchar y hacer silenci El acto litingico se realiza ya en el hecho de mirar. Esto no signitica solamente que la vista percibe lo que ocurre en el santuario, sino que ella mismaes participacién viva. Esto lo viviun dfaen Palermo ‘cuando experimenté a través de la catedral entera, la atencién con lacual ...Jel pueblo particip6 sin ningxin libro, sin ninguna palabra sexplicativa».[...] La mirada del pueblo era ella misma un shacer»; mirando, el pueblo participaba en los distintos gestos rituales.® 3. LA “CATEDRAL DE TODOS LOS TIEMPOS»: EL MODELO DEL CUERPO Ya lo anuncié Schwarz en «Uber Baukunst»: la arquitectura es como un cuerpo que envuelve y abraza a la comunidad. Su idea 26, Delaintoiucion de. Guaxomniala Burgh Rethenfs (1929), ctado 27, Una comunidad monacal suele tenet mas «capacidad litingica para habitar unespaciominimalista que una comunidad parroquial:pensemosen laabadia de Nuestra Sefiora de Novy Dvur en Chequia John Pawson 2008) 28 Gvagprnt, «Lettre a Johannes Wagner», 140. 448 ert Dart mans fundamentales que laasambleaseconfigureenelCuerpodeCristo centradoenelaltar comoen su sagrado corazén que le da vida. Es lo queaprende de las catedrales medievales: sila Edad Medianos hadejado unosedificios tan auténticos y tan insuperables, estono se debe a su estilo gético que habria que imitarsinoa su concepto teol6gico del cuerpo. Schwarz deduce quesilaarquitecturamedie- val tiene una verdad perenne, entoncessu teologiadebe tener algo de verdad para nosotros. ‘Schwarz destaca que la Edad Media tomé muy en serio al cuerpo, a la ver que permiti6 al cuerpo transformarse y articularse en un abanico de formas e interpretaciones sin dejar de ser el mismo. La tarea dela arquitectura entonceses teconocer y reinstituir el cuerpo ensudignidad, como criaturay comorevelaci6n, de talmaneraque deviene un cuerpo sagrado, un trozo del mundoenoracién: «Llevar ‘elmundoa su forma més intrinseca y traducirla en oracién». Esta es también la dimensién escatol6gica, sobre la cual volveré més tarde. De tal modo, la arquitectura eclesial es una «dogmitica dela eternidad».» El ojo abierto y la mano abierta son dos simbolos del cuerpo porque son receptivos. El cuerpo noes un microcosmos, un sistema cerradoy autosuficiente, sinoqueesté creadoparael encuen- tro;es una respuesta. la luz; es una forma abierta en necesidad de plenitud. Elcuerponoes algo «pesado» quemantienealalmasujeta al suelo, sino que es lo expresivo que nos permite sustraernos del suelo por las formas e interpretaciones que adopta el cuerpo. Aejemplo de las catedrales medievales, Schwarz imagina una «catedral detodos os tiempos.” Esta visién sublime, quecombina espacio, tempo y Vida, sigue siendo mal entendida hoy. Lo lama «catedral» porquese trata de algo més que de un simple «iglesian, de algomés que de un simple «plano» o planta de edificio que fija para «todos los tiempos» y de manera estética a unos espectado- 29 Scuwanz, Vom Bau der Kirche, 56. 30 Ibid. 4 31 _ Th{d,, 128-140, Estddistinguido de los seisotros porque se trata del lugar de referencia de foda la vida eclesial. Lo llama «catedral» porque implica una pluralidad de espacios litirgicos y un desarrollo de distintos tiempos littirgicos complementarios, ademés deuna teologia del cuerpo. Nolallama «de todos os tiempos» porquepretendaencontrar un tipo ideal que valga «para todos los tiempos» sino que busca un espacio flexible y dinémico que incluya «todos los tiempos» litirgicos, todas las configuraciones posibles de una asamblea celebrante ante Dios. Setrata,en definitiva, de una asamblea mSvil queadopta distintas configuraciones espaciales e interiores. La «catedral de todos los tiempos» consiste en la sucesi6n de seis «bisagras» o configuraciones espaciales, mal llamadas «planos». Nosonplantasde edificiossinoinstanténeas deunas disposiciones comunitarias que fluctiian alo largo dela celebracién litargica. Es el mismo Cuerpo de Cristo vivo y celebrante que est4 ante Dios en diversas actitudes de oracién, stiplica, penitencia, adoracién, alabanza, comuni6n y envio. Bs el mismo Cuerpo que se desplie- gue a través del espacio, usando el espacio como un instrumento de musica, incorporandolo, haciéndolo vibrar y cantar, contribu- yendoasfa la expresiGn del misterio. LAnillo > ano ablrto 40 rt Daas Los distintos westados oscilatorios» o «bisagras» de la «catedral de todos los tiempos» son el «anillo», el «anillo abierto», el «céliz luminoso», el «camino», el «céliz oscuro» y la wesfera luminosa». Desdeel punto de vista teol6gico, se trata de una progresién tem- poral de la Natividad (el «anillo») hasta las «Bodas del Cordero» (la «esfera luminosa»), a través de la peregrinacién a través del desierto (el «camino») y la noche oscura del Viernes Santo (el «cdliz oscuro»). El mismo Cuerpo se despliega como una planta que sale de la intimidad de la semilla y con una direccién clara. Cada configuracion, «parada» 0 «estacién» expresa una manera comunitaria de ser Iglesia ante el misterio celebrado. Lo que propone Schwarz en Von Bau der Kircheno es una coleccién de planos para la construccién de iglesias sino més bien la con- cepcién de un proceso creciente y evolutivo dela construccién de la Iglesia con maytiscula, como Pueblo de Dios en camino, como Cuerpo de Cristo celebrante y como Templo vivo del Espiritu vivo. Cada unadelas configuracioneso «paradas» conllevaunaimagen teol6gica (dequignes Dios) y eclesiolégica (de quiénes somos ante Dios) distinta y complementaria. Fosilizar a una asambleaen una ‘manera fija de estar ante Dios reduce la teologfa y la eclesiologia; reduce el misterio que habrfa que salvaguardar a todo coste. Es ya significativo que la primera configuracién espacial que Schwarz considera para una comunidad eucaristicanoes la tradi- cionaly longitudinal de labastlica romana, sino una mas universal yantropol6gica,la de un «anillo» alrededor de un centro. Esloque ‘acurre con los muisicos callejeros en la Puerta de Sol en Madrid: sison buenos, crean a st alrededor un anitlo de circumstantes que disfrutan y a menudo participan en el espectaculo. En la iglesia, es «el Sefior quien retine alrededor» del altar (cf. SC.7) y es la asamblea quien «lleva al mundo hacia su tinico centro», Cristo.* Todo el universo es incorporado con la asamblea sacerdotal en la vuelta de accion de gracias de Cristo al Padre. Es la forma de interiorizacién sagrada: «El sentido més profundo de este plano es el hecho de incorporar la asamblea en el rfo sagrado eterno en el 32 Ibid, 95. Principios teol6gicos para un espacio mistagégico 451 cualnacen desde elPadrehaciael Hijoy denuevohaciaelPadre».* Es la imagen de la Natividad y de la Encarnacién, donde nace el Cuerpo de Cristo, también eclesial. Es el misterio mismo que con- voca alrededor de un centro animado. Una prueba de que no se trata del plano de un edificio sino de una configuracién comunitaria en un cierto momento litirgico, Jo demuestra la advertencia de Schwarz contra el peligro de que esta forma, y por lo tanto la comunidad, quede encerrada en sf misma. Schwarz adviertecontralaabreviaciéndelanilloalaliteral « cenel proceso orgénicodela «catedral de todos los tiempos»—en lo que llama el «anillo abierto», orientado al espacio detrés del altar, el «cAliz luminoso», abierto alos cielos. Assu vez, el «anillo abierto» y el «céliz luminoso» se despliegan en «camino». Schwarz afirma que «aquellos que est4n instalados enlas formas cerradas munca entenderdn aquella peregrinacion». Debemos dirigirnos hacia una meta comtin, hemos de entregar- nos a una orientacién comunitaria. También el camino (y no solo el anillo) expresa nuestra intima comunién porque es el segmento de un anillo que tiene el centro al infinito. Schwarz quiso que esta forma fuera experimentada como abierta, como una forma viva y procesional. Desgraciadamente,lousamos asisiempredemanera estatica, para ocupar nuestros asientos como en un autobuis o un avién, como espectadores pasivos y ajenos al drama litirgico. El «camino» desemboca en el «cAliz oscuro» del Viernes Santo, que expresa bien que no podemos ver la eternidad del Padre con nuestros sentidos corporales. Este «ciliz oscuro» se abre a la 33 fd. 34 _Ibfd, 41. Juntocon Guardini, Schwarz descubrié las riquezasinherentes al versus populuri en los arios 20 en el castillo de Rothenfels, peronunca pudo llegar a implementarlas en sus edificios. 452 ert Dart ca «esfera luminosa» como la Pascua responde al Viernes Santo y al primer plano, como si fuera «su explicaci6n».* Es muy dificil tra- ducir esta tiltima configuracién en arquitectura, admite Schwarz, Jo que confirma que no se trata de un plano para la edificaci6n de un templo sino de la visi6n de un momento condensado de la celebraci6n littingica no solo decualquier celebracién eucaristica sino de la de toda la historia de salvacién y del afo littirgico que va del Adviento hasta Pentecostés y de las Bodas del Cordero-. Imitamos al Seftor en su camino de salvacién. De tal modo, el espacio littirgico «pone en movimiento» a la asamblea.* Lahaceadoptar distintas «formas comunitarias», dis- tintas expresiones corporales de su actitud litiirgica ante Dios. La asambleaaprendea rezar consucuerpo, individual y comunitario. Enel acto, la asamblea es «configurada» en Cuerpo de Cristo y «santificada» en Templo del Espiritu. De estose trata en el espacio mistagégico: no que estemos «ante» el espectaculo de un misterio sino quecelebremos el misteriodeloquesomosen os ojos de Dios, snuestra vocaci6n ultima, la expresada por las Bodas del Cordero, la unién esponsal entre Cristo y su Iglesia. Estamos hablando de la dimensién escatol6gica del espacio lituirgico. 4, La DIMENSION BSCATOLOGICA: LA ORIENTACION HACIA EL REINO ‘Segtin Guardini, toda obra de arte auténtica tiene una dimensién: cescatol6gica.” Elartees unaindicacién, una promesadeunmundo nuevo que solo puede venir de Dios. El arte auténtico despierta una esperanza y una «garantia misteriosamente consoladora» sin que sepamos cémose produciré.” Esa es una dimensién religiosa anterior a cualquier temética contenido religioso: indica «una existencia nueva, donde todo esta abierto, donde las cosas estén en el espacio cordial (Herzraum) del hombre y donde el hombre 38 Ibid, 124. 36 Teta, 40, 37. R.Guanpnn, Uber das Weser des Kunstwerkes, Griinewald: Mainz 2005 (1947) 30. 38 Ibid, 29, rincipios teoldgicos para un espacio mistagégico____________ 453 deja que su esencia se vierte en las cosas». Hemos de entrar en este espacio abierto por la obra de arte, sentir la autenticidad del mundo para descubrir en ello nuestra propia autenticidad, sentir de nuevo la llamada a hacerse mejor, a hacerse aquel que hemos deser: esaes la dimensi6n ética de todo arte auténtico.“ Entrar en esteespacionos pide, segiin Guardini, un granesfuerzo:elesfuerzo dela contemplacién, dela concentraci6n, dela atencién, de hacer silencio, de la espera: es algo tan necesario hoy en dia, nos dice Guardini, porque nos hemos hechos activistas y ya no sabemos hacer silencio y escuchar.” Ahora bien, esta dimensién escatolégica esta bien expresada en la teorfa de Schwarz. De su contemporéneo Johannes van Acken, Schwarz adopta la idea del altar cristocéntrico -el altar, como. Cristo mistico, debe ser el foco central e inicial que da forma ala iglesia pero lo lleva mas lejos por una ampliacién trinitaria: la asamblea ocupa el «espacio habitable (Wohnraum) del Espfritu que traspasa todo, llevando al mundo a florecer en su belleza», el altar es ef umbral, el lugar del Sefior entre los suyos y el Padre; y detrés seabre «el espacio dela eternidad>.“Igualmente, Guardini describe el altar como umbral.” En un apartado de gran densidad teol6gica, intitulado «repre- sentar el cielo», Schwarz examina distintas maneras de abrir el espacio detras del umbral del altar, como abrirlo hacia un jardin, hacia el océano o simplemente dejando una pared blanca como en Aquisgrén, como expresiOn de la apertura a la eternidad del 39° Tbfd.,30. 40° bic, 22. AL En Besinnung wor de Feeder Heligen Mese(1999), Gunnin firma Si iguien me preguntara condeempieza a vida litirgica,lediria:«aprendiendo hacer silencio»»,citado en Desuysr 43, 42. Scuwanz, Kirchenbau. Welt vor der Schtvelle 29; cf. J. VAN ACKEN, Christo- _zentrische Kirchenkunst. Ein Entwourf=um liturgischen Gesanitkunsterk, Gladbeck 1922. 43. R.Guanpim, Besinnumg vor der Feier der Heiligen Messe, cf.en Desuyst 4. 454 Bert Data Padre. Esencial aquf es encontrar una expresién para el «ya si» yel «todavia no» escatolégico: se muestra ya un espacio, una rea- lidad que ensancha el espacio litirgico propiamente dicho pero que todavia noes del todo accesible; la liturgia solo introduce en este misterio. Guardini tuvo que responder a las criticas contra el minimalismo de la Frotleichnaniskirche: En esta iglesia vive la Presencia Santa, Entiendo que muchos solo vvean unedificio vacio. Entonceslosanimaréaadentrarsemésen sus ppropios sentimientos. Actualmente somos incapaces de reconocer laserena tranquilidad de planos inmensos, a amplia claridad de un espaciolimpio,lapuraesencia de formassencillas.Solemosllamara esto «vacfo». Preferimos Ilenario todo con formas, cbjetoseimagenes del mismo modo que no soportamos hacer silencio (Schtveigen)-. {Ohemos olvidado ‘0 quees hacer silencio, y que forma parte dela Palabra como el inspirar del espirar? ;Hemos olvidado quee! silen- Gio es la oracin més profunda ante Dios, y que la oracién hablada es imposible sin el silencio? Lo mismo ocurre con los vastos planos {que no se llenan de omamentos, imagenes o articulaciones. No es tun vacto, jes el silencio (Stile)! Y en el silencio esté Dios. Desde el silencio de esas enormes paredes puede brotar un presentimiento dela presencia de Dios. Schwarz quiso configuracionesabiertas, formas capaces demante- nerabierta unabrecha,uina herida quesolo Dios puede colmar. De talmanera, laiglesia tinicamentehace visibley palpablela «brecha eterna» existenteenel mundo, el deseoinconscienteyanonimode Dios. Ast, la iglesia da forma y cuerpo al mundo y «lo traduce en oraci6n». Esa es la esencia del «anillo abierto»: el espacio infinito y transcendente del Padre entra en el seno de la Iglesia. La primera edicién de Vont Bau der Kirche tuvo como imagen de portada la configuracién del «anillo abierto», lo que muestra cla- ramente que es la disposicién preferida de Schwarz. Ademés, la 44 Scorwanz, Vort Bau der Kirche, 56-64. Véase mi discusi6n en «Umbrales centre cielo y tierra», 419-442 45 _R.GvaRDin1, «Dieneuerbaute Fronleichnamskirche in Aacher», Schild- _genossen 11 (1931) 267 Principios teol6gicos para un espacio mistagégico 455 denomina la configuraci6n «para las celebraciones cotidianas», seguramente porque es ella misma lo que Guardini llamé un Gegensatz, una paradoja entre un anillo cerrado y un camino abierto, una espera: es ya una «bisagra», un Schwingungsstand, unestado oscilatorio entre dos realidades. Es una forma bas6exclusivamenteen el «anillo» de Schwarz, aquellacelebracion 46 Scuwanz, Vom Bau der Kirche, 45. 47 Tid, 52. 48 _ Véasemianilisisteoldgico de esta celebracién y deste espaciolitirgico nspinision 213235. 7 7 4g Bert Daten pascual mostré un uso més dinamico del espacio, desplegandose en distintas configuraciones comunitarias. La asamblea «habit» cel espacio littirgico, adoptando diversas «formas comunitarias» alrededor dedistintos focos litirgicos: dibujé un tipo de «catedral de todos los tiempos» en este lugar especifico, permitiendo queel edificio entrara en la adoraci6n eucaristica. Schwarz quiso llegar a unas formas comunitarias basicas. Nonos ofrece una lista exhaustiva; existen otras (como la de situarse en dos coros enfrentados en una silleria de coro). Nose trata tanto de estas formas sino de considerarlas como «paradas» en uncamino, como «estados oscilatorios», como instanténeas de un proceso temporal. El espacio vivo depende del tiempo (zeitgebunden). Deberfamos,con Schwarz, criticar losedificios quenoinvitana un dinamismo litargico sino que asignan a la asamblea un papel de espectadores pasivos. Cualquier plano de un espacio litirgico no es més que una «bisagra» que permite més de una tinica configu- racién comunitaria, $i hay edificios con plano centralizado, como la Catedral catélica Cristo Rey de Liverpool (Frederick Gibberd, 1967), ola nueva propuesta para la Catedral St Hedwig en Berlin, por Leo Zogmayer, laasamblea litargica tiene que abrirel «anillo» en «anillo abierto» o «céliz luminoso» para no encerrarse en una reduccién teoldgica y litirgica del mistetio celebrado. También podemos pensar en edificios de tipo basilical, como la Herz Jesu en ‘Munich, en la cual la apertura y el dinamismo dela configuracién deberian hacerse palpables durante cada celebracién. Una maravilla de apropiacién 0 domesticaci6n comunitaria se encuentra en la parroquia parisina Saini-Francois de Molitor (Corinne Callies, Jean-Marie Duthilleul, 2005). La iglesia tiene el plano deun «anillo» queseabreen «anilloabierto» durantelos ritos penitenciales (Kyrie y Gloria), manteniendo firmemente unidos las dimensiones sacrificial y doxolégica como lo habia sugerido el P. Jungmann® en una orientacin comunitaria -presbiteros y asamblea- hacia el oriente littirgico (versus orienter), hacia la cruz 49. Josef Andreas JuncMann, Missarum Solleminia: Eine genetische Erkrung der rémischen Messe, vol. I, Herder: Wien 1962 (1948), 333 n5; Albert Gem Principios teolégicos para un espacio mistagégico 57 gloriosa (versus crucem), hacia la luz (versus lucem) y haciael jardin (versus paradisum), Solo es un momento, solo es una instanténea, pero tan expresivo, tan densamente teolégico. Hasta donde yosé, esel Gnicolugar en el mundo donde se configura una asambleaen «anilloabierto» comola intuyé Schwarz en los afios 1930, es decir, todavia antes de que la Iglesia universal implementara el versus populum y antes de la desgraciada oposicién «cara a cara» entre presbitero y asamblea que caracteriza muchas de nuestras cele- braciones. Segtin Schwarz, la arquitectura eclesial debe apuntar al cielo pero sin dejar el mundo: una de sus propuestas concretas paraexpresarel umbralentre cieloy tierraes precisamente utilizar vidrio, que es «a a vez transparente y duro», mostrandoala vezel «todaviano» y el «yas» de larealidad escatolégica quecelebramos. Las otras configuraciones comunitarias imaginadas por Schwarz seencuentran fécilmenteen este templo. Experimentamosincluso algodela «esfera luminosa» al entrar enel santuario una vez atra- vesado el nértex oscuro. El timido oculus encima del altar como axis mundi-sugiere el «cAliz Juminoso», sobre todoen laelevacién WARDS, «Versus Orientem - versus populum: Zum gegenwéctigen Diskus- sionsstand einer alten Streitfrage>, Theologische Revue 98 (2002): 15-22 48 Bert Dat acans eucaristica, Al atardecer, la orientacién comunitariahaciaeljardin (ahora oscuro) se transforma en «céliz oscuro». La comunidad se pone en «camino» durante la comunién, pero la idea de un Pueblo peregrino se expresa sobre todo en el ee sagrado que une el umbral, la fuente bautismal, el alter, el amb6n, la cruz gloriosa yeljardin. Durante un funeral, el féretro también se coloca eneste eje, de manera significativa entre la fuente bautismal y el altar. Este eje es el santuario que, desde dentro, transforma el templo entero en santuario durante la Eucaristfa. Felizmente, para no insinuar un protagonismo clerical, lasede presidencial -mésbien ministerial-nose encuentraen este ee: los dosbancossesitianen medio de los del pueblo y tienen la misma forma, lo que muestra su vinculacién con el sacerdocio bautismal, pero estén hechas de tuna madera mas oscura, lo que sugiete su distincién esencial (cf. LG 10). Louis Bouyer (1913-2004) hubiera alabado esta solucién, donde los ministros actiien desde dentro y a favor de la asamblea comolalevadura enla masa, progresivamenteuniéndoladesdela escucha de la Palabra, ofreciéndola por la comunién en e! Altar y orienténdola hacia la Parusia, hacialaconsumaciénescatolégica.” Apartirdel altarsale unejetransversalhacia el sagrarioy elOriente césmico. La nave es «tin santuario en potencia» y el santuario es «una nave en actoy: el dinamismo de este espacio litiirgico solo se hace palpable durante una celebraci6n. No se puede llegar al fondo teol6gico del espacio a partir del mero planoode una mera visita individual. Ni siquiera la iglesia Heilig Kreuz que Schwarz construye en Bot- tropp (1957) deberfamos limitar a su plano de «céliz.oscuro»,sino hay queentenderlaensu dinamismo orgénicocomo merabisagra deuna.«catedral detodoslos tiempos»,ensucapacidad deponeren movimientoalaasamblea, desde el baptisterio situadoa la entrada, en«camino» haciael umbral del altar quese abreala eternidad del Padre, expresado aqui por una pared curva de ladrillos rojos que sube hacia la imagen del ojo de Dios en una vidriera. Solo es una 50 Louis Bouven, Liturgyand Architecture University of Notre Dame: Notre ‘Dame 1967, 90-91. Véase la contribucion deCarolina Blazquez Casadoeneste volumen. Principios teolégices para un espacio mistagégico 59 «parada» en el camino, en el via crucis que desemboca en la lumi- nosidad pascual. Lo que Schwarz construyeson solounasbisagras que la comunidad celebrante ha de interpretar—comolla orquesta interpreta una mtisica~en el marco de una «catedral de todos los tiempos», es decir, dentro de un proceso litirgico y mistagégico. Louis Bouyer tuvola idea de diferenciar el espacio parala Liturgia de la Palabra alrededor de un bema y el espacio eucaristico alre- dedor del altar. Existen templos que adoptan aquel dinamismo un tipo de «catedral de todos los tiempos» porque se trata de la sucesi6n de distintas formas comunitarias durante una celebracion: litdirgica~. Esto ocurre en la parroquia universitaria de Lovainaen la iglesia de San Juan el Bautista. La Eucaristia empieza alrededor del ambén, en «anillo abierto». En el ofertorio, la asamblea es invitada a acercarse en «anillo» alrededor del altar, donde ceiebra de pie hasta la comunién, Este es también el uso actual de la iglesia del convento dominico Sainte-Marie de La Tourette (Le Corbusier 1960). Para la Liturgia de la Palabra, la asamblea se sienta en la silleria del coro. Para la liturgia eucaristica, suben como «anillo» alrededor del altar. Sin cambiar nada en la arquitectura, la actual asamblea ~de unos 200 personas~ha encontrado una nueva manera de habitar el espacio litaxgico. De esta manera, toda la vivencia del espacio ha cam- biado, permitiendo una nueva experiencia mistagégicaadaptada anuestro tiempo. Demanerasimilas,en|aiglesia episcopaliana St Gregoryde Nyssaen San Francisco en California (John Goldman 1995), un templo que seinspiradirectamente en a vision de Bouyer, la asamblea adopta distintas configuraciones comunitarias alrededor del bema y del altar, construyendo asi su propia «catedral de todos los tiempos» durante cada celebracién. Estos pocos ejemplos muy diversos demuestran el dinamismo inherente a la idea de la «catedral de todos los tiempos». Para expresar la dimensiGn escatol6gica, es suficiente que se muestre, como en Saint-Frangois de Molitor, un punto de gravedad fuera del espacio litirgico propiamente dicho: por esto la asamblea se 460 ert Dae ans orienta hacia la luz y hacia el jardin, en esperanza escatolégica.* Paratal efecto, nohay tanto que volveral versus rientemdurantela plegaria eucaristica porque tiene su Gestalt en el banquete,como nos lo recuerdan tanto Guardini como Debuyst~* sino introdu- cirlo en momentos oportunos, como los ritos penitenciales o las oraciones colecta y de comunién.* En el monasterio de Tautra en Noruega oen la Capilla sobre el aguade Tadao Andoen Hokkaidose abreel espacio litizgico hacia el agua que es visible (expresi6n del _yasf) pero inaccesible (expresi6n del todavia no). Las dospartes que forman un soloaltar en St Peter Canisius en Berlin tienen el mismo efectoe intencién. Las tres ventanasenel coro del monasterioecu- ménicode Bose también tienenesta funci6n escatolégicade «llevar ‘el mundo a su forma més intrinseca y traducila en oracién»* 51 Con respectoa la imaginacién escatolbgica, véase Richard BAUCKMAN, ‘Trevor Han, Hope against Hope. Christian Eschatology at the Tarn ofthe Millen- nium, Grand Rapids /Cambridge 1999, 153-162. 52 El capitulo intitulado «La forma (Gestalt) det memorial: el banquete» Se quit6 de Besinnung vor der Feier der Heiligen Messe (1939) desde la cuarta edicién (1947), Véase la discusién en Desvvst 44-46. 53 Véase la propuesta del arquitecto Johannes KRAMER, «Offener Raum ‘und orientierte Versammlung», Gottesdienst 35 (2001): 81-83 y mi discusién en Spiritus oc, 306-309, 5A Scuwanz, Vom Bauder Kirche, $6, Véase mi

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