La Hacibn Santiago 7 iO AML P10
TECLEO RAPIDO
OrinioN
MARTIN RUIZ
os tapices de Violeta
Sé recuerda esta semana el 25° aniversario de la
lesaparicién de Violeta Parra, El recorrido por sus
ermosas canciones es un lugar comtin por estos dias.
nuevo es el descubrimiento de su obra plistica, que
les tan valiosa como su miisica. Violeta fue una prodi-
‘giosa creadora de tapices cn los que eché a volar su
imaginaci6n inagotable. El otro dia vimos en la TV
unas arpillerassuyascomentadas por Nemesio Antinez,
que mostraban las ceremonias de los velorios de los
“angelitos” en el campo. Nos recordaron las figuras
ingenuas y aladas de Chagall. Nadie podria decir que
es un arte realista o figurative. Cuando 1a imaginacién
vyuela se acercaa la incoherencia de los suefios:nada es
l6gico ni explicable. Pero todo es reconocide por
miuesiros ojos que ven ms all4 de lo que pueden palpar
las manos.
Cuando los tapices simples y complejos de Violeta
se conozcan y aprecien en su tolalidad ocurriré un
fenémeno parecido al de Frida Kahlo, la fabulosa
pintora mexicana. Mientras vivid era la esposa de
Diego Rivera, una bella mujer invalida, reconocida por
sus amores insinuados con Leén Trotski que, en rea-
lidad, 1a amé platénicamente y Ie escribié unas cartas
roménticas mientras sofiaba con larevolucién mundial.
Ahora Frida Kahloes més apreciada que el mismisimo
Rivera, Sus exposiciones producen asombro en todoel
mundo y sus cuadros se venden en millares de délares.
La vocacién plastica de Violeta fue siempre tan
perentoria como su guitarra. En su infancia confec-
cionaba trajes multicolores de retazos de géncro junto
asumadrecosturera. Después siguié pintando y crean-
do artefactos coloridos mientras danzaba en los circos
pobres o distrafa a la brava clientela de los bares de 1a
vieja y ferroviaria calle Matucana.
Cuando cantaba en Paris en pequefios subterrineos
de] Barrio Latino segufa creando tapices con lana de
\ejer 0 esculturas con alambres. Las llevé al Louvre y
consiguié vencer todos los menosprecios. Present6
una exposicién con 61 obras y Ilen6 todo un salon.
Entusiasmé hasta a los més severos eriticos.
Larrelevancia de Violeta en la cancién popular dejé
en segundo plano su creacién plastica que la acompaiié
siempre. Quienes la conocieron dicen que tejer, pintar,
disefiar era uno de sus consuelos en medio de las
muchaspenasyy tensiones quela acompafiaron siempre.
Mostraba su produccién en la carpa de La Reina en la
que se suicidé vencida por la dura batalla de la vida en
Ia calurosa tarde del 5 de febrero de 1967.
Serfa un buen’ servicio de la cultura chilena reunir
todo lo posible de la plastica de Violeta para mostrarla
en una exposicién retrospectiva en e] Museo de Bellas
Artes, como ya se hizo con Venturelli y Matta, Le
entregarfamos asf a todos el otro mundo de una artista
que -como el Rey Midas- convertfa en oro todo lo que
Violeta Parra trabajando con lanas, otra de sus ricas
formas de expresién atin no revelaba en su total valor.