Aleerta

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Aleerta Revista de la Direccién de Géneros y Diversidad Sexual de Conadu Historica 13) ate UNIVERSIDAD aaa Soll Lay DE GENEROEN LAS UNIVERSI IDADES e gVOLVER ALA : ayers MUJERES Y CIENCIAEN PANDEMIA DYN By NS) VIOLETAS N°1 - NOVIEMBRE 2020 SOle}SIBAIUN SAsOpealD A sasopeSisanul Hl ‘sequaz0g ap jeuoen Uolesapay EENGVNOD A modo de editorial Enos ultimas cinco aos vvimas un avance impresionante del movimiento de mujeres y diversdades, Irrumpid a nivel masivo algo que se venia gestando-el Ni Una Menos del 3 de junio de 205, el para de mujeres del 2018 y ls BN posteriares la marea verde del 2018 por el derecho al abort legal. segura y gratuito. tambien surgieron los protocolas universitaris, la Ley Micaela, el cupo labora travestitrans en el sistema publica nacional. En ste contexto, en marzo de 2015 la Mesa Ejecutiva de la CONADU HISTORICA resovis crear la Direscidn de Géneros y Diversidad Sexual de la Federacidn, Desde esta nueva Direccin, empezamos a recorrer un camina en vinculavgn estrecha con todas las Asociaciones de Base, con el objetivo de generar un entramado paderaso que permita abordar las tareas pendientes en materia de génera en nuestras universidades, colegios preuniverstaras, insttuts,facultades, escuelas, departamentos, yen los propios gremias, articulanda can otras organizaciones de mujeres y diversidades. Ceemas que es imprescindible una perspectiva de génera y de derechos que sea transversal a todas nuestras précticas, también en la universidad y nuestros sindicatos, y vemos necesaria replantear cdmo abordamos las vinculas cotidianas, para errata ls violencias de todo tipo. pero también para debatir el contenido dela que se ensefa, se investiga, en la extensin.Y sabemos que ahora, travesanda la andemia por el CWVIDS que profundizs tadas las desigualdades, queda todavia més clare de qué estamos hablando, Coma un aporte en ese recorrido surge esta revista con el obetva de visiiizar las précticas y debates que se vienen desarvallanda desde los espacias gremiales y las colectivas de mujeres y dsidencias en todas las universidades del pas, Alerta les invita a mostrar sus experiencias, a mastrar que aca estamos, que caminamos y que ro hay forma de que no nas vean Porque nos proponemas transforma lo que sea necesrio, er'un camino liberadar para mujeres, diversidade. y el pueblo todo ALEERTA Directoras y editoras de contenido: Laura Kniznik Ayelén Martinez Diseno grafico y Arte Serpiente Viva ¢ Estriben en este WSitbart, Guirado” Nea ae" de Medeiros Laura Kniznik Elizabeth Paz Burgos Osear Vallejos Fabiana Gonzalez Dionisio Germanis Alejandra Ironici Analia Silvia Garcia ¢ Ayelén Martinez Direccién Géneros y Diversidad Sexual Laura Kniznik de Conaduh Histérica laurakOG@gmail,com generosydiversidad@conaduhistorica.org.ar Ayelén Martinez oe GenerosConaduh ayelenmartinez84@gmail.com © @GenerosConaduh Silvana Rosario Guirado Lépez guiradosilvana@gmail.com Dulcinea Duarte de Medeiros dmedeiros@untdf.edu.ar Elizabeth Paz Burgos bautista.mia.tucuman.abu@gmail.com Analia Silvia Garcia analiasilviagarcia@yahoo.com.ar Oscar Vallejos oscar@adul.org.ar Fabiana Gonzdlez fabianaben@hotmail.com Dionisio Germanis dinogermanis93@gmail.com Diseno Grafico Alejandra Ironici Gserpiente. viva ironici76@gmail.com ONTALTOt EDUCACION SEXUAL INTEGRAL: UNA EXPERIENCIA DE FORMACION EN ADICUS La Educacion Sexual Integral (ESI), es un derecho adquirido por niftes y adolescentes a través de la Ley N'26.150. La sanci6n de esta ley (2006) tiene ya 14 afios en nuestro pais y la adhesi6n en la provincia de San Juan tiene dos aiios (septiembre de 2018). Durante todo este trayecto, la provincia de San Juan y el Mi- nisterio de Educaci6n (organismo encargado de garan- tizar su aplicacion con obligato- riedad) hicieron muy poco al res- ecto, la realidad es que en las es- cuelas sanjuaninas no hay ESI al dia de hoy. El Ministerio de Educacién de la provincia encomendé la formacién de los docentes a la Escuela de la Fa- milia y a la Universidad Catélica de Cuyo, instivuciones que poseen un im- portante sesgo ideoldgico, con una fuerte influencia de la iglesia catélica, que no ga- rantiza la efectiva aplicacién de la ESI. gESI EN PANDEMIA? El problema de la implementaci6n de la ESI se agudiz6 con la Pandemia en curso por la que toda la comunidad educativa quedé bajo el confinamiento social obligatorio, desarro- Iando el proceso de ensefianzaraprendizaje en un contexto doméstico, en muchos casos sin la conexién y el equipamiento necesario, situacidn que merece todo un andlisis aparte. Asi, este aio ni siquiera los escasos docentes recibidos en las instituciones anteriormente mencionadas han podido ingresar a las escue- las de San Juan 0, al menos, a la enseianza virtual, Aleerta / Noviembre 2020 Escasamente este afio se abordaron algunos contenidos desde la materia Formacién Etica y Ciudadana (con profesores sin formacién en ESI), por lo cual, no se garantiza los conoci- mientos cientificos actualizados ni herramientas y experiencias necesarias que permitan la cons- truccién de una sexualidad integral, tampoco se garantiza la transversalidad de los contenidos en los diferentes espacios curriculares, ni su co- rrespondencia a cada nivel educativo. Pig 4 En San Juan existen diferentes instancias de for- macién alternativas (donde se garantiza la pers- pectiva de género y derechos humanos), que no son reconocidas por el Ministerio de Educacién para poder brindar ESI en las escuelas de la pro- vincia. Cursos, diplomaturas, charlas, encuentros, jor- nadas de debate, entre otras, se impulsan desde di- ferentes sectores de militancia (gremios, organiza- ciones feministas, partidos politicos, etc.) para darle fuerza a la lucha que tomé un especial impul- s0 luego del debate en el Congreso por la legaliza- cién de la interrupcién voluntaria del embarazo (IVE), en el aiio 2018, Es asi que la ESI con pers- pectiva de género y Ae impuso fuertemente en la agenda de trabajo de diferentes organizaciones feministas, dentro de la Universi dad y también en nuestro gremio. En el marco de esta lucha nos encontramos como gremio, haciendo frente a la adversidad y aportan- do a la formacién cientifica y laica en la Universi- dad Nacional de San Juan (UNSJ). Es por esto que desde la Direccién de Géneros y Diversidad de ADICUS, y en el marco del programa de capa- citacién docente gratuita CONADUH-ADL- CUS, se convocé en el mes de junio de 2019 a afiliadas/os a presentar proyectos para cursos de formacién docente. Asi, surgieron proyectos que abordan estas temiticas que poseen un especial interés y que calan fuerte en los deba- tes y en la estructura insti- tucional de la Universidad. La necesidad y urgencia de comenzar a trabajar la ESI en el nivel medio Institutos _ Preuniversita- rios) y en la formacién docen- te (profesorados) es de suma importancia, como ast también la aplicacion de la Ley Micaela 27499 ‘ : La experiencia de nuestro gremio con la realiza- cién de estos proyectos fue muy positiva, comté on GEESE y fue dirigido por tres com- pafieras abogadas formadas en la temdtica, Lucia Salinas, Sabrina Giménez y Noemi Pujovich. Aleerta / Noviembre 2029 abordé la evelucin legislati Bbprimer encuentro va de los derechos de las mujeres, la perspectiva androcéntrica, la legitimidad de la-violencia, el modelo tinico familiar y la instancia privada. Se vomaron momentos hist6ricos de gran relevan- cia como el reconocimientoide la desigualdad por parte del Estado argentino y su compromiso para realizar todas las acciones que fueran necesarias para erradicarla. A su vez, también se detallé la re- forma del Cédigo Civil y Comercial del afio 2015, que avanz6 en importantes cambios, entre ellos este nuevo cédigo democratiza a la familia, (las far milias) concibiéndola como un conjunto de persov nas unidas por lazos afectivos y de solidaridad, donde cada persona es sujeto de derecho con un proyecto de vida propio, tomé la importancia de ga- Tantizar una formacién integral que tome la di- mensién biolégica, psicolégica, emocional, social, afectiva y ética de las personas, y también la nece- sidad de garantizar los derechos humanos y la petspectiva de género. Considerando alos derechos humanos como de- rechos conquistados a lo largo de la historia hasta Ia actualidad por varones, mujeres y mis reciente- mente pe noc LeeEOLa sexuales y colectivo LGBTTTQIA. Yala pere- pectiva de género como un enfoque Rrindareteiie reesacce ere laciones de poder que se dan entre los géneros, en general favorables a los varones como grupo social y discri minatorias para otros géne- tos. Estas relaciones son es tructurales y han sido cons’ truidas social, cultural e his. tbricamente desde un enfoque androcéntrico, es decir con la perspectiva de una sociedad des- igual donde el varén y su punto de vista es central y superior al resto. Todos estos aspectos fueron desarrollados te- niendo en cuenta que las desigualdades entre los géneros atraviesan y se intensifican con las diferen- tes clases sociales, etnias, religiones, orientacién sexual, etc. Big 5 — : Se enfatiz6 en la importancia de construir una nueva mirada que no posea jerarquias de género, donde todas las personas tengan el mismo valor y los mismos derechos, para lograr la equidad y la igualdad entre las personas. Dentro de las reformas del Cédigo Civil y Comer- cial se dialogé y reflexiond sobre la Responsabili- dad Parental y sus principios, teniendo en cuenta que la misma es el conjunto de deberes y derechos que corresponden a los progenitores sobre la per- sona y bienes del hijo, para su proteccién, desarro- Ilo y formacién integral mientras sea menor de edad y no se haya emancipado. Se trabajé con diferentes actividades sobre el inte- rés superior del nifio, la autonomfa progresiva del hijo/a conforme a sus caracteristicas psicofisicas, aptitudes y desarrollo, el derecho del nifio a ser. coido y a que su opinién sea tenida en cuenta segtin su edad y grado de madurez, Se debatié sobre el derecho de las nifias/os y ado- lescentes a recibir educacién y toda la informacién que la ESI propone, por lo cual ningdn responsa- ble parental puede aponerse, concluyendo en que las familias pueden participar como parte de la co- munidad educativa de la ESI, pero no pueden opo- nerse a que su hija/o la reciba. ue se abocd a trabajar con actividades de articulacién con los espacios curri- culares de los docentes asistentes. Se utilizaron es- trategias de trabajo en grupo y clases simuladas desde diferentes materias, con el fin de mostrar el tencial de transversalidad que la ESI posee. 1 prabajote acencangachs del dirs fi comple mentado con un importante aporte de recursos di- dicticos (im4genes, videos y_frases-reflexivas)..y. con los cuadernillos y folleter‘a proporcionada por el Programa Nacional de Educacién Sexual Inte- ee gue contribuyeron a un constante intercam- Be dislogo con las y los asistentes, Aleerta / Noviembre 2029 Puntualmente, se tomaron a modo de conclusién {tems fundamentales a tener en cuenta ante la ela- boracién de un proyecto institucional de ESI: Debe cumplir efectivamente con la Ley N’ 26.150 y todo el contexto de leyes que la complementan. >Debe tener perspectiva de género y derechos hur manos. >Debe respetar lo integral, es decir, debe vincular los aspectos biol6gicos, psicalogicos, sociocultura les, afectivos y éticos de la persona. '>Debe abordarse de manera transversal y univer- sal en todos los niveles del sistema educativo, tanto en escuelas piiblicas como privadas, en todos los espacios curriculares y en espacios especiales dedicados especificamente a los ejes teméticos de la misma. > Debe contemplar prevencién y protocolos ante situaciones de violencia y acoso, consumo de drogas, armas en la escuela, ete. DEI proyecto de ESI de la escuela debe tener vir culacién con diferentes instituciones de la comuni- dad: centro de salud, unién vecinal, comisaria, CIC, etc. Para realizar actividades conjuntas y ar- ticuladas. foi) btn ie Entendemos que la realizacién de este carso en ADICUS es un paso importante que abrié las puertas a demandas urgentes de nuestros afiliados/as en su ejercicio como docentes, Espera- cages instancias de capacitacién sigan de- sarrollindose para aportar a la lucha y al empuje social que se desarrolla en nuestra provincia desde diferentes sectores para lograr la efectiva imple mentacion y cumplimiento de la Ley 26.150 de Educaci6n Sexual Integral. Silvana Rosario Guirado L4peg. Profesora y Li cenciada en geogrefia. Docente e investigadora de la Universidad Nacional de San Juan. Directora de Géneros y Diversidad de ADIGUS. AY Res ae ek N@RMALIBAD” ES a PRODLEMA: if REFLEXIO Arscaegaetanee ——— gemonfa de algunas normalidades fuera perturbada por la pandemia estabamos cam- biando el mundo. Cuando pensé en estas Iineas por primera vez la idea de pandemia ocupaba diferentes lugares en el imaginario colectivo’, pero cualquiera que fuera el mis cercano de esos lugares aiin se que- daba muy lejos de nuestras multiples normali- dades. Ese “lejania” del riesgo, muy caracteris- tica de la modernidad occidental, se traduce perfectamente en la frase: “No hay posibilidad de que eso ocurra”, como si la historia respetase Ja idea de imposibilidad. Como la racionalidad moderna occidental declaré que la naturaleza solo le gana al hombre en las telas de cine, bajo a forma de zombies o tsunamis, negamos hasta que fuera demasiado tarde que una pandemia estaba en curso. ‘Como no somos negacionistas y consideramos que es la actitud reflexiva la que nos posibilita- raun mundo pospandemia mejor que el prepan- demia es que escribimos estas Iineas. Por tanto Aleerta / Noviembre 2020 PANDEMIA los invito a una reflexién, bajo la luz pandémica, prospectiva con respecto a dos experiencias de mi universo laboral, que es la docencia y la investige- cién de nivel superior. Ambas ocurrieron en el se- gundo cuatrimestre de 2019, una en Rio de Janeiro (en octubre) y otra en Lima (en diciembre). Si yo estuviera escribiendo estas Tineas en otro contexto la siguiente aclaracién no seria necesaria, pero ante lo que estamos viviendo les recuerdo que 2019 fue un aio duro. Pero duro en el molde del siglo XX, que Hobsbawn en su genialidad ca- racterizé como “un siglo corto”: dos guerras mun- diales, crisis del capitalismo, “desastres naturales”, bombas atémicas, pandemias... Otro modelo de dureza. ‘Vivimos un punto de inflexi6n en la historia de la humanidad, han habido otros, pero en ninguno de ellos fuimos tan conscientes de que las formas de vivir el mundo tal como las eonocemos podian dejar de existir. Y, quiz, uno de los aspectos mis aterrorizante del posible desaparecimiento de esos modes de vivir es el perder las “peque- fas” cosas que la mayorfa de nosotros tenfamos como “naturales”, por lo menos en gran parte del occidente: el saludarse con besos y abrazos 0 escaparse de casa si fuera necesario. En 2019 nada de eso parecia posible que des- apareciera y menos atin un acto peligroso para nuestra salud. La dureza de 2019 era de otro tipo: la preocupacién con las elecciones en Ar- gentina y Uruguay, Bolsonaro en Brasil, el esta- llido de Chile, ei golpe en Bolivia y muchas otras cosas, porque si hay algo que la moderni- dad inauguré y nila pandemia fue capaz de re- vertir fue la aceleracién del tiempo. En 2019, como en algunos de los afios anteriores, gran parte de lo que ocurrfa estaba atravesado por Jas “pautas identitarias”, y el caso de los femi- nismos fue quizds el mds impactante, por lo menos en latinoamérica. En octubre fui invitada a visitar la Universi- dad Federal de Rio de Janeiro, era volver a casa, volver a una universidad en la cual fui alumna, militante, joven. Volvi madre, docto- ra. La universidad no me esper6 estdtica: sus alumnos segufan jévenes, en su mayorfa, pero era mas feminista, ms heterogénea, plural, menos blanca, aunque en el curso que estuve la mayorfa seguia siendo hijos de clase media alta a alta’. En Lima, presenté un trabajo en un congreso en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM). Un evento bastante cari- caturesco (como casi todos los académicos, y por eso no suelo escribir sobre ellos), lleno de “Jatinoamericanistas” hablando de decoloniali- dad tras pagar 150 délares de inscripcién. El evento fue en homenaje al genio de Anibal Qui- jano, profesor de UNMSM, que tuvo también otros docentes ilustres entre otros grandes inte- lectuales y no puedo dejar de comentar que ahi también trabajaron como docentes los lideres de Sendero Luminoso, pero eso no fue tema del evento, aunque la violencia de los afios 90 atin esté presente en las palabras de los mradores de Lima. Volviendo, estdbamos all4, territoriali- x4ndonos latincamericanamente, escuchando- nos entre nosotros mismos. Pero atin asi se sentfa y se vefa algo distinto, se escuchaban cosas diferentes, estaban las banderas del orgu- Ilo, uno u otro pafiuelo verde, o sea, un tipico evento académico en su estructura pero, a la vez, muy diferente de los eventos de hace 10 afios Aleerta / Noviembre 2020 Hoy, no hay nada que me parezca més lejano que Lima o Rio de Janeiro, tan lejano como el riesgo de una pandemia lo fue hasta hace poco. Aunque la OMS defineypandemia-como “la pro- pagacién mundial de una nueva en- fermedad”, en esa reflexién, en la cual me acompaiian, los invito a pensarla como un contexto en lo cual no hay una suspension total del Estado de Dere- cho, pero tampoco el mismo estd en su plena vigencie (aunque en algunos paises Pstace ce Derecho ae sus nd En- snail que él “quédate en casa” es una restriccin all “sacro” derecho de ir y venir, uno de los andes “bastiones” de i libertad bargue- sa, adn asi muchas personas en la mayorfa de paises acept6 esa restric- cidn y se quedé en casa’, El “quedarse en casa” no era algo sencillo, la mayoria de la gente no sabia o no entendia qué significaba eso, sacando la mayoria de nosotras las mujeres. Mismo las que llegamos a “salir de nuestras casas”, las que estabamos en los even- tos de Rio y de Lima, es decir, las que pudimos escapar de fa profecia autocumplida de lo que es. “nacer mujer” dificilmente escapamos del “hogar”. Por lo tanto, en mayor o menor grado, conociamos algo de “quedarse en casa”. Todos los dias leo “posts” sobre cémo los dias en cuarentena son iguales, yo veo otra cosa: veo que tan rapido como el virus los machismos y el patriarcado se van reorganizando: en grupos de whatsapps de madres, en correos de escuela donde sélo las mujeres somos las destinatarias, en regulaciones de teletrabajo que sigue sin dis criminar positivamente a las mujeres y muchas otras cosas, pero quizds la més cruel y dura para nosotras es, en multiples aspectos, el “estar en casa”. Sobre todo porque casa no significa y nunca significé, necesariamente, estar seguras. a Pig 8 GR Y las redes y mecanismos que recién empezéba- mos a armar estaban, obviamente, basados en formas y estructuras de solidaridad, seguridad y contencién que el virus también puso en riesgo. Las mujeres, géneros no binarios y muchos otres “seres inferiores” no conformamos norma- tivamente, epidemiologicamente y ni estadisti- camente “grupos de riesgos” porque el célculo de la “ingenierfa social” y de la racionalidad es- tatal que los determinan incluyen variables como PEA, CUIT, CUIL, la caja, OSDE. Aunque sepamos que en el mundo sin pande- mia somos grupos mds “vulnerables” a la muerte no natural, al momento de establecer quienes son los grupos de riesgo nosotres no es- tamos contemplades. Y¥ es a esta altura que los que me acompaiian en esta reflexién por ahi se sienten un poco per- didos, eso es comprensible porque la idea de grupos de riesgo est4 estructurada a partir de un discurso cientifico al cual se atribuye veraci- dad, neutralidad y legitimidad. Pero, otra vez més, la narrativa blanca, heteronorma- da, patriarcal, capitalista, territo- rialista que vive desde siem- pre una relacién minima: mente ambivalente con la ciencia_se vio cuestio- nada. El COVID19 no maté ni sélo, ni preferencialmente, ‘ni primeramente, a Jos que conforman los grupos de © — riesgo, maté prime- = ro, mas rapido y preferencialmente a Jos mds pobres y vul. — nerados. Para ser més ~ precisos atin: todavia no conocemos cudntas vidas fueron realmente Ievadas por el virus y cudntas fueron llevadas porque no hay acceso uni- versal a la salud. a ‘ Es aterrador pensar que alguien necesité una pandemia para darse cuenta que las normalida- des que viviamos necesitaban desmoronar, pero es mis terrorifico atin pensar que hay personas que extrafian esa normalidad. Cualquier disi- dencia no puede darse el lujo de extranar ningu- na normalidad a priori, menos cualquier norma- lidad que tenfamos. Si estamos en lo cierto y la pandemia es un punto de inflexién, eso significa que el futuro puede ser céncavo 0 convexo. Y en la disputa, que ya se esté dando, por el mundo post pandemia: icémo y dénde estamos nosotres? €Qué estamos haciendo les silencia- des, ausentes, explotades, mujeres, travestis, pueblos originarios? éDénde estamos les que somos histéricamente les primeres en morirnos? Hay momentos en la historia en que se viven eras en aiios, siglos en décadas, meses en sema- nas, se equivoca el que dice que el tiempo se detuvo. Los dfas que vivimos son tan sombrios que hay quien piense: primero salvemos las vidas y la economia: “el virus lo derrotamos entre todos”, después volveremos a discutir fe- minismos, aborto, homoafectividad... No, nosotres no podemos esperar, ‘no solo porque seguiremos muriéndonos en el el camino sino porque ya sabemos que en la his- toria ese “después” s6lo Ilegé porque lo fuimos a buscar. Dulcinea Duarte de Medeiros. Doctora en Ciencia Politica Docen- te investigadora Universi- dad Nacional Tierra del Fuego AelAS integrante de Asociacién Docente Universitaria Fueguina ADUF. (x) Antes de la pandemia la asociacién entre las palabras virus y pandemia solfan estar relacionadas a apocalipsis zombie, peliculas, y algin conocimiento sobre un “pasado” que reconecia que pas6 pero no diferenciaba mucho entre Sbola o gripe expafiola. (2) Las politicas de discriminaci6n positiva para acceso al nivel universitario arrancan en 2003 y cambiaron el perfil del alumnado de las universidades piblicas. (3) Infelizmente por més importante que sea entender cémo y por qué “nos quedamos en casa” esa discusién escapa a este texto e Pe GR Aleerta / Noviembre 2020 REFLEXION SOBRE LAS CARRERAS DE INVESTIGACION DE QUIENES REPRODUCEN LA VIDA DURANTE LA PANDEMIA éBrechas o precipicios? La pandemia por el covid-rg leva mds de seis meses extendiéndose y agravando una crisis mun- dial que pone al descubierto situaciones de vulne- rabilidad y profundiza desigualdades de todg tipo. Entre ellas, la brecha de género en el sis tema universitario y de ciencia y_ i tecnologia (CyT). Ya sabi mos que la ciencia repro- duce los sesgos patriarca- les, androcéntricos y sexis- tas, asi como los de clase del sistema del que forma parte, pero la. pandemia lo vuelve mas evidente. Las brechas y los. g sesgos de género en a universidad, en la ciencia y la tecnologia son visibilizados_y cuestionados incluso en forma institu- cional_como desde la RUGE ue depende eel CIN RAGGyT. En bos < ‘iltimos afios, mien tras se Henaban cada vez ~~ més los talleres de CyT y de uni- versidad en los Encuentros de Mu- jetes, y conflufamos en los 8M, 3, los tos Paros feministas y la marea jeron numerosos colecti- vos de trabajadoras en ciencia y tecnologia como Ciencia sin Machismo, Las Curie, trabajadoras CyU, Las de Sistemas, Trabajadoras de CyT en Lucha, que fueron mostrando sesgos no sélo en los procesos de la ciencia sino también en sus contenidos. El sistema en que vivimos deja sus marcas también en qué y como se investiga. Como somos parte de esta realidad, también en la universidad y en los organismos de CyT somos Alleerta / Noviembre 2020 las mujeres e identidades feminizadas quienes principalmente nos hacemos cargo de las tareas de cuidado y reproductivas dentro de nuestros hoga- res. Y muchas nos venimos cuestionando ese rol como responsable primaria de las tareas de cuida- do,y cémo influye en nuestras vidas la decisi6n de ser ono madre. hora, iqué estd pasando en estos meses en las universidades y organismos de CyT? Desde % marzo existe una avalancha de sobretrabajo e invasi6n de los Ambitos privados junto con una exigencia de disposicién conti- nua para todas las ® tareas, que afecta especialmente a las ' personas con cargos precarizados o menores dedicaciones y categorias. le Entre quienes hacemos do- cencia, se agrega una can- tidad interminable de clases, _preparacién, seguimiento, correc” ién. Esto afecté a . todxs, en mayor o ‘menor medida, porque la sor brecarga se suma a la preocupa cién y angustia por la situacién sanitaria y social nuestra, de nuestros seres queridos y gene- Pero, como en la pre-pandemia, nuestras casas no son neutrales en cuanto al género: en esta si- tuacién somos mayormente nosotras quienes cui- damos y seguimos el estado de salud fisica y mental de familiares y amigxs. Muchas sufrimos algin tipo de violencia, que no ha cedido durante la pandemia, ya que el aislamiento hace més dificil sostener y acompafiar, la distancia vuelve mds complicado acceder 2 esas redes que podrfan fre. Pig roe nar y enfrentar esas violencias. Ademés, la des- igualdad por las tareas de cuidado y de reproduc’ cién de la vida se profundiza por la permanencia las 24 horas y los 7 dias de la semana de hijxs y/o adultxs mayores en nuestros hogares. Que ademés de cuidados y atenci6n requieren, en los més pe- quefixs sin jardines ni escuelas, garantizarles la es- colaridad en casa, convertirse en maestra de todas las areas y de todos los grados, ensefiarles y ayu- darlxs con las tareas, acompafiarlxs en todo ese di- ficil proceso. Por supuesto esto se agudiza en el caso de familias monoparentales 0 monomarenta- les. En algunos casos estuvo la posibilidad de pedir licencias, pero en otros no, por motivos tanto objetivos como subjetivos. Asi, desde el 16 de marzo en nuestro pais, las do- centes e investigadoras tenemos esta doble o triple carga. Como ademés la preparacién de clases vir tuales insume muchisimo més tiempo que el habi- tual en la normalidad académica, la tarea docente abarca casi todo el tiempo dedicado a las tareas la- borales y lo que queda claramente relegado es el trabajo de investigacién. Podrfa decirse que no somos s6lo nosotras quie- nes cuidamos, pero en nuestro pais y en Latinoa- mérica dedicamos més del triple de tiempo al tra- bajo reproductive (doméstico y de cuidados, no remunerado) que los varones. Por eso, pese a que. cada vez hay més hogares en proceso de transfor- macién, atin es principalmente a nosotras a quie~ nes afecta en mayor medida esta situacién. Por su- puesto en forma diferente segiin se tiene hijxs o personas a cargo. E incluso dependiendo de la edad de esos hijxs. ‘A la vez, asf como en general somos quienes ocu- pamos los primeros lugares en atencién de salud y cuidado durante la pandemia, hay muchas docen- tes e investigadoras haciendo aportes significati- vos tanto desde sus conocimientos especificos, fundamentalmente en las Areas biomédicas, como desde sus capacidades organizativas y solidarias, en muchos casos por iniciativa propia. En este Be dcast de Feminacida se relatan als cias en nuestro pais y en el articilo CON Research: Women Are Changing the Face of the Pandemic (Investigacién en COVID-10; las mujeres est4n cambiané te el rostro de la pande- mia) también abordan el tema. Entonces, icudnta investigacién estamos hacien- do en estos meses? Para muchas seguir producien- do es una presién tanto interna como externa. De la misma manera que ocurre con el dictado de las clases virtuales, con la investigaci6n cientifica por ‘momentos se sintié y se siente una exigencia que no tiene relacién con la gravedad de lo que esta~ Aleerta / Noviembre 2020 mos viviendo en términos de salud: seguir como si nada pasara. ‘Ademés, cabe preguntarse: Qué entendemos por producir en el sistema cientifico y tecnolégi- co? dEs el paper la produccién en si, como parece muchas veces en la universidad y en al- gunos organismos de CyT? iO es sdlo una medida de ella? Muchas de esas publicaciones hay que pagarlas a un alto precio en délares, con lo que eso implica para subsidios y salarios en pesos. Esto sumado a que no es indistinto enviar un articulo a revistas europeas 0 esta- dounidenses desde un pais dependiente como la Argentina, cuando la posibilidad de publicar est sesgada por el origen de Ixs autores y, por supuesto, por los intereses de las revistas y/o los pafses a los que pertenecen. ‘Con todo esto en cuesti6n, es posible hacer un relevamiento de cémo se viene abordando esta situacién desde publicaciones en esas mismas re- vistas. La pregunta es: écémo afecta la pande- mia ala produccién cientifica de mujeres y per- sonas cuidadoras? éQué se puede pensar para después, para afrontar los dafios causados? Aqui, alld vue todas partes Desde abril y mayo hubo articulos alertando sobre una mayor cantidad de trabajos cientificos enviados por varones que por mujeres (s6lo se dis- tinguen esas dos opciones en los datos existentes) comparando 2019 y 2020, como en este articulo de Nature, éste de The Lily 0 este otro también de Nature. En ellos, dan cuenta de una pérdida de hhasta un 50% de productividad entre las mujeres y de que los trabajos enviados por hombres habfan aumentado mis del 50%. ‘A medida que fueron pasando los meses aparecie- ron nuevos articillos de opinién y trabajos con rele vamiento de datos y entrevistas, incluido uno na- ional: How Support of Early Career Researchers Can Reset Science in the Post COVID19 World (25 de junio — Cell - Cémo el apoyo a los investigadores jvenes puede reiniciar la ciencia en el mundo post COVID19). En el articulo afirman que la crisis del COVID-19 magnificé los problemas que recorren el sistema cientifico, pero que a la vez se le estd dando una oportunidad para reiniciarse. Entre ‘otros temas, analizan que esta crisis agrava | Ta discri- minacién que ya existia: las mujeres, personas con menores a cargo y minorfas Pig ne mujeres, personas con menores a cargo y minorfas raciales o étnicas abandonan los campos de la cien- cia, la tecnologia, la ingenierfa y las matematicas (STEM) en instancias tempranas de la carrera. Se. plantean estrategias para la recuperacién post-pan prorrogar plazos de subsidios y concursos, promocionar en los vulnerables, tener en cuenta para el cargos la desigualdad de oportunidades que la pandemia incrementé, incentivar guarderias y jar- dines de infantes, disminuir carga docente y de gestién. ‘7Unequal effects of the COVID-19 pandemic on scientists (15 de julio — Nature - Efectos des- iguales de la pandemia del COVID-19 en cientifi- cxs). El articulo analiza que el COVID-19 no ha afectado a todas las personas que hacen ciencia por igual. A través de una encuesta con més de 4 mil respuestas, observan que las cientfficas, quie~ q sustancial en el tiempo dedicado a la investigacién, de un 17% Aik si son menores a cinco afios. Las mujeres encuestadas in- formaron mayores disminu- ciones en el tiempo que podfan dedicar a la investi- gacién que sus colegas mas- culinos. 2 Opinion: In the wake of CO- 19, academia needs new so- lutions to ensure gender equity (15 de julio- PNAS - Opinién: a raiz del COVID-19, la academia necesita nuevas soluciones para garanti- zar la equidad de género). En este articulo las au- toras plantean que, en lugar de utilizar soluciones sesgadas, neutrales al género, que a menudo ayudan a los varones por sobre las mujeres, las ins- tituciones deben ser conscientes de las desigualda- des de género que esta pandemia intensifica y tomar medidas para proteger a las mujeres, cam- biando la forma en que la academia piensa sobre la equidad. >The career cost of COVID-19 to female re- searchers, and how science should respond (20 de julio Nature - El costo del COVID-19 en las. carreras de las investigadoras y c6mo deberfa res- ponder la ciencia). Analiza mediante una serie de entrevistas la situacién de las investigadoras y ensaya algunas propuestas. Aleerta / Noviembre 2020 > The impact of the COVID19 crisis on women in science: challenges and solutions. (El impacto de la crisis del COVID-t9 en las mujeres en la ciencia: desafios y soluciones). Conferencia vir- tual organizada por el laboratorio europeo EMBL, en la que plantean que “el COVID19 no ha afectado a todxs Ixs cientfficxs de manera uni- forme: los virus no discriminan; las sociedades y los sistemas lo hacen. Ha habido una clara dismi- nuci6n en las publicaciones preimpresas de muje- res desde que comenz6 esta crisis: las mujeres y Ixs cientificxs monoparentales estén dedicando un tiempo extra desproporcionado a la educaci6n en el hogar, las tareas del hogar o el cuidado de los ancianos”. “Para mantener nuestros logros en la igualdad de género, debemos preparar una res puesta inmediata y un esfuerzo de recuperacién a més largo plazo. No podemos permitirnos perder tuna getetecién de. Geneitcas bien capacitadas y ver desaparecer todos los esfuerzos previos para nes realizan trabajo de laboratorio y, especial lucir la brecha de género”. mente, aquellas con menores a cargo experimentaron una disminucién ) 2Contexto y perspectiva laboral en emergencia COVID9. forme técnico del 15 de jb del CCT Patagonia Norte del CONICET que afirma: “Los resultados de este rele- vamiento revelan claramen- te que hay factores que afectan diferencialmente las posibilidades de desarrollar el trabajo domiciliar en el con- texto de aislamiento motivado por la pandemia, permitiendo identificar tres constelaciones de cit- cunstancias”. Y nombra a: quienes est4n en un cargo laboral inestable que ademas est sujeto a ser evaluado para completarlo, como Ixs beca- rixs; las personas con menores a cargo especial- mente en el caso de las mujeres; la conjuncién de ambas situaciones: becarias con menores a cargo. Recomienda ademés: “la implementacién y comu- nicacién clara de medidas positivas que compen- sen dichas asimetrias y no reproduzcan desigual- dades histéricas e impacten negativamente en sus carreras e informes”. Construyendo el mundo post-pandemia Probablemente en los préximos dos o tres afios se van a ver los efectos de todo lo relatado, cuando tendrian que aparecer los resultados del trabajo realizado actualmente. £ Pig nen Entonces, équé estrategias, medidas o programas que tengan en cuenta esta situacién se van a llevar a cabo en el sistema universitario y de CyT en nuestro pais? Las evaluaciones no pueden ha’ cerse como si nada hubiera pasado, tanto en rela- cién con los subsidios, como con las promociones en el sistema cientifico y los concursos docentes. {Qué planteamos desde los gremios o los colecti- vos de trabajadoras? Er bercralajos:menclodades aparecen sileanws ideas para ir pensando exigencias para hacer a las autoridades universitarias y a los érganos de evar Juacién y direccién de los organismos de CyT. Por un lado, para contar con informacion: que haya estadisticas relevamientos sobre (des)igualdad de género en el sistema cientifico y universitario durante la pandemia, analizar la si- tuacién de Ixs docentes e investigadorxs con me- nores © mayores a cargo, conocer el estado de salud tanto fisica como mental de trabajadorxs du- rante estos meses, incrementar los datos desagre- gados por sexo. Por otro, para afrontar el problema: considerar en las evaluaciones las situaciones asociadas al cui- dado de menores o mayores con medidas positi- vas, prorrogar becas y plazos de concursos docen- tes y de proyectos de investigacién, otorgar subsi- dios con impacto de género, revisar las condicio- nes para concursos y promociones teniendo en cuenta la desigualdad de oportunidades que la pandemia incrementé, disminuir carga docente y de gestién de ser necesario, garantizar el acceso a farcines o el dinero para cuisado, otorgar licencias reales y que incluyan/Suplencias enicl cA80lUe la docencia. Para ello, los comités de evaluacién y jurados.de- bern incluir mujeres e identidades feminizadas en paridad y tener perspectiva de género. Pero fundamentalmente ser4 necesaria yoluntad. politica y un debate profundo sobre-la Ssituacion vivida y las desigualdades estructurales existen- tes. Y eso no lo hard el.sistema por sf solo. como tuna consecuencia natural pasada la pandemtia, porque hay mucho para cuestionar si se expulsa a quienes cuidan, haya Covid o,no, Sélo serd, posi- ble si avanzamos unidas en nuestras organizacio- nes colectivas, en nuestros gremios, én la lucha por estas exigencias, que son parte de lo que tene- mos que cambiar para promover él acceso y pers manencia de las mujeres ema ciencia y la tecnole- gia. Porque es més justo e igualitario, pero ademas porque fa complejidad de la, realidad natural y social que investigamos se ve enriquecida con las miradas diversas para describirla, comprenderla y transformarla. Y en ese camino estamos,,corfien- do velos y desnudando sesgos, cuestionando los modelos patriarcales y opresores de la ciencia y la tecnologia, peleanda por ponerlas al servicio deila) emancipaci6n de las mujeres y el pueblo todo. Laura Kniznik. Doctora en Fisica, investigadota en CNEA y docente dematemética en UBA y de ciencia de materiales ene! Instituto Sabato, UNSAM. Directora de Géneros y Diversidad Sexual de Conadu Histérica, {1} En referencia a Publish or perish (publicar o perecer) frase acufiada en telacién con fa exigencia de publicar en revistas cientificas internacionales para sobrevivir en el sistema. Muchas veces sin importar qué, y sin considerar otras formas de evaluar la produccién cientifica. Aleerta / Noviembre 2020 rege La Importancin dens eypcricickss AUECITE ‘XC perspec ee cromemeietaensee! campo educativo hace misde soarios.r'2005, en ocasién de rendit concursos regulares para los dos cargos que tengo er el preunivessitario de IEM de Tarta- gal como profesora orientadora y como integrante del Equipo Interdisciplinario de Asesoramiento y Orientaci6n, mis propuestas las realicé desde fa perspectiva de género [1]. De fa misma manera abordé los concursos para las cdtedras que tengo a mi cargo en el Instituto de Educacién Superior N° 6oag de Tartagal en carre- ras de formacién docente. Participé y me formé en la “Especialidad en Estudios de Género en la UNSa", en el posgrado de la facultad de humani- dades, armando y desarmando pensamiento y praxis con el aporte de investigadoras, militantes del mundo y del pafs. Milito en ADIUNSa, asocia- cin de base de CONADU HISTORICA. ‘A los fines de la viieta que deseo compartir con ustedes, tomaré como referencia a autoras como Dora Barrancos[2}, Rita Segato[3}, Diana Maffiaj4}, Ana Maria Fernndez[5}_ y Marcela Lagarde y- de los Rios{6]. Sus investigaciones, mi litancia y generosi- dad las pueden encore out ail ros, en las redes, con in- soclaies cisivos diag- nésticos = -y propuestas, siempre politicas y éticas, que aportan a los movimientos de nuestra sociedad y del mundo _académico, desde los feminismos[7} y sus diversas voces y potencias, que convocan en las calles y en las redes en la ac- tualidad, denunciando, exigiendo, proponien otros Tp Aleerta / Noviembre 2020 il Las VOCS de los movimientos “1ascalles un. osibles eS, con > SCHCKO cil cf eimpo eclicativo do alternativas a la globalizacion y su discurso tinico. Las voces de los diversos movimientos sociales en las calles y en las redes Comparto testimonio de quienes, en tanto estudiantes, han compartido y aceptado la apuesta de cambiar la mirada hacia una epistemologia feminista y de género:proponen otros mundes posibles, deconstruyendo conoci- mientos, recreando el lenguaje, cambiando los vin- culos, las subjetividades, es decir, una propuesta de transformacién critica, inclusiva y de justicia social y cognitiva. Los femninismos y sus agendas, asi como las leyes y politicas ptiblicas aprobadas y en vias de aproba- cién en el Congreso de la Nacién ponen en este siglo XXI herramientas para visualizar las desigual- dades como construcciones histéricas y la impor- tancia de los derechos humanos, la deconstrucci6n del pénero, la significacién social de los cuerpos y las Brapolltias, importancia de la afectividad como aspecto fundamental de conocimientos, saber tes, vinculos intergenera- cionales y formas de orga- nizacién de las institucio- nes con perspectiva de cuidado integral. Estas propuestas alternati- vas a los discursos globales abren horizontes y lugares ara las diversas formas de vivir, de hacer cultura y conocimientos que, por diversas, enriquecen, acogen, cuidan, en “tiempo de pandemia” y 7 mésalls. OS Con grata sorpresa recibi el presente aiio entre los saludos en ocasién del dia del trabajador, el mensar je que transcribo a continuacién: g Pig ue “Hola Profe... Le quiero comentar algo que pensé. Siempre die lo que pensaba, me senté a explicarle a mi niro acerca ibs dieses pe de fils 0 ue igi se gy, ee leshiana. hetero, lo que es género, le mostré muck peliculas al respecto, ala vez hemos le(do juntos libros y iis Price de su clase... Hablamos acerca del rol de la mujer en diversas épocas, y cémo en algunos hogares van cam- biando dea poco. Me tocd enfrentarme al machismo de mi En nuestras universidades estamos en procesos de cambios y en nuestra sociedad existen muchos aportes ¢ imaginarios sociales mas amplios con pro- puestas con perspectiva de género para conformar el comin de nuestras practicas cotidianas en las universidades y en la sociedad para acompafiar los cambios epocales con justicia social y derechos hu- manos. papi y saber sobresalir, hoy en dia tengo un emprendi- miento, el cual me llena de orgullo. En fin, le explique muchas cosas a mi nifio para que apré ‘sepa respetar, Hats de atorle Aled ue Geneve ne ellen Pero hay algo que siempre me inquiet6, me dijeron que debo ser més femenina, usar ws is as y pinladas, usar polleras cars tine el plo de nia, eur aeerica como pulseras, anillosy siempre dije“nome gusta, a mi me gusta ser como soy, sencilla y quizis mas varoncito”. Recién sin querer, me di cuenta que tanto expliqué los prejuicios y de los estereotipos culturales acerca dela mujer y, realmen te, no lohabta incorporado. me di cuenta que ese es el este ie que habian sembrado en mi, y por ende, siempre desea poco varoncito”. Hace poco en el laburo arregle el cableadlo de un foo y mi patrén me dijo “no, por favor, esa es tarea de un hombre’, yo levante mi ceja, le dije ~ yolo sé hacer,- a lo mejor “soy un changuito vestido de mujor, es deciy aceplando que ese era trabajo de un hombre yno es ast”. Muchas veces planteé los discursos de Diana Maffia, siem- pre los entend y me encantaron pero quizds recién me di cuenta que hay cosas de las cuales afen no me despoje-. Lo bueno es que todo esta en proceso” Elizabeth Paz Burgos. Licenciada en Psicologia con especialidad en Estudios de Género. Profesora del IEM Tartagal UNSa. Secretaria adjunta de ADIUNSa. {1} La perspectiva de los Estudios de Género da cuenta de las inequidades sociales histéricas de las mujeres, visibilizadas por los movimientos feministas de las décadas del ’70, ‘80 y ‘90, develando que las ciencias no sélo no dan respuesta a las diversas situaciones denunciadas por estos movimientos sino, lo que es mas grave atin, contribuyen a dicha inequidad. Puedo afirmar que la ciencia es sexista puesto que fue construyendo sus practicas y discursos desde un imaginario social que confirma la identidad de los machos en tanto supremacia con relacién 2 las mujeres, 0 segundo sexo, y todo aquello que no representa ese modelo, esentcializando lo masculino y lo femenino que no es otra cosa que la conformacién de los “estereotipos de género”. Elizabeth Paz Burgos (2019). {2} Sociéloga, historiadora, investigadora y feminista, Profesora en la UBA e investigadora del CONICET, siendo parte del directorio entre 2010 y 2019. {3] Doctora en Antropologia Social por la Queen’s University of Belfast. Bjerce la docencia universitaria en la Universi dad de Brasilia y es investigadora (Art) del Consejo Nacional de Investigaciones Cientifcas y Técnicas del Brasil, En el +2002 elaboré junto con més de cuarenta mujeres indigenas del Brasil, una propuesta de politicas pablicas y acciones afirma- tivas para mujeres indigenas. {4} Doctora en Filosofia, docente de la facultad de filosofia de la UBA. Investigadora de! Instituto Interdisciplinario de Estudios de Género de la UBA. Diputada de la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires (2007-2011). {5} Doctora en psicologia por la Universidad de Buenos Aires. {6} Antropéloga e investigadora mexicana, especializada en emologia y representante del feminism latinoamericano. {7} El feminismo empexé junto con la nocién de ciudadanfa y es el hijo no querido de la ilustracin segtin Amelia Valear- cal (1991). El feminismo no existe, existen feminismos como historia politica. Referirse alos feminismos en plural ayuda a mostrarlo como miltiple en su historia, en las tensiones, ambigtiedades y luchas de poder. El libro JE futuro es feminista? (2017) como parte de la coleccién “La media distancia", desde una pregunta disparadora, un prologuista y tres autores, nos ofrece Ie posibilidad de pensar, debatir, conocer los feminismos. a Pig ay Aleerta / Noviembre 2020 éPOR QUE LA, NECESIDAD CUPO LABORAL TRANS UNIVERSIDAD NACIONAL DEL LITORAL (UNL)? OC arcdo ernacel «trite le wriverided ye eutonled con andes difeubedes que desconoc(a. La comunidad trans nunca ha podido accederala educacién de forma continua como cualquier ciudadano por el simple hecho de ser expulsada no s6lo del sisteva ecicalivoy taboral sino por toa eemulion general. EXPULSION de les laces afectivos, socic estatales. Esta expulsion llevé a la comunidad trans a crear un ‘grupo social paralelo al contin del que conocemos. Creantos nuestro propio lenguaje, nuestras propias costumbres, nuestras propias reglas, nuestras propias formas de su- pervivencias y nuestras propias medlicinas y tratamientos y tecnologias para cuidar Erunsfornnay a cesrtseverpon eon el nico recuree guy deys Liaccedeely ol Estado jLa prostitucién! Recuerdo cuando era nia, apenas 16 aiios y me di cuenta que mi tinica forma de so- brevivir iba ser dedicarme al trabajo sexual. No fue facil, estar sobreviviendo en las calles, no era s6lo cuidarte de un cliente, un ladrén oun asesino sino también implica ba cuidarte de les maltratosy vejaciones del Estado que te reprimia, te golpeaba, te en~ carcelaha y te violaba con toda impunidad. Fllos que nos debian cuidar sdlo nos repri- mieron y nos torturaron. Existieron en ese momento compajieras adultas que nes en- sefiaban a sobrevivir, a sobrellevar el trabajo sexual para que no nos afecte en lo psico- légico y principalmente queno nos quite la humanidad. Aprendimosa no ser victimas de violencia no sélo de los hombres que transitan la noche con mala intencién sino a sobrevivir dentro de un sistema que nos preferfa muertas, El Cupo Laboral Trans para nosotvas es una forma de reparacién a todo el abandono de tantos artos que no nos permitié vivir una vida digna. Nos privaron de la farnilia, la educacién, del trabajo, la salud y nos privaron de la dignidad de existir. El Cupo Labo- ral Trans viene a dar respuestas a esa guerra que venimos librando desde que tenemes uso de razén contra una sociedad y un Estado represor. Queremos comparieras docen~ tes, estudiantesy trabajadores en todos los espacios yriblicos. La universidad tam- bién tiene wna ceuda con nuestra comunidad, necesitamos visibilidad transen las uni- versidlades, necesitamos ser parte de las investigaciones y no sdlo el objeto de estudio. La mejor forma de conocernos nunca va ser como objeto de estudio sino conviviendo con nosotras en las aulas, en los puestos de trabajo y en la vida cotidiana como ciudadanas/os humanos. jiiCupo Laboral Trans en la UNL yal!!99 Fabiana Gonzalez. Evita Diversidad.- Ex estudiante de trabajo social - Mi nombre es Dionisio Germanis, estudio derecho en la facultad de ciencias juridicas y sociales de la LINE: Cab var fensiven lc vassal eplrientac lee labora era sipver dae yo que es tl parle a cde in re altareac Ie equal ula Alay i easeslesenc nee oe voson multiples, a discriminacién social, el precio, el estigma y la violacién sociale institucional y la tasa de desempleo es alsima en nuestro pais y muches terminan gjerciendo la prostitucién para sobrevivir sin Siete lyae dad Pi te dederedes Sibien identic le género sancionada en 2012 fue un gran paso en la conquista rechos: eee eee hepa tairderastbn dele res Isley de cp labora po tu ste enue hay que reflesionur solve la que wvplca ev tarmarea de sper iain ro deciatecrurnmsmsesta de lrabaia crteetiio devtotslevstin cos cee Rzronerrnaees ra lia Uboral iba ellen tae bb TRANS yo pasar er unteccencincyecol amin la ley esuma herramienia mds, un resguardo a conquistar, que no invalida, sino que por el contrario se 30s- tiene con la luchay las organizaciones cle mavimientos, espacios y activistas, asimismto requiere de acommpa- arena socalesy puticoe potnics en los que a agenda de derrulas Waren bavi sa nada ea pdt Nall i a somite v nase eben po Will sviedad 9? Dionisio Germanis - Miser Santa Fé - Estudiante de abogacia - UNL - Aleerta / Noviembre 2020 “ La Universidad nos debe muchisimo porque siempre fuimos el congjite de indias en trabajos de investigacidn de tesinasy es hora de que dejen de vernos ast y empiecen a transitar con nosotres la Universidad. La demanda por el Cupo Laboral Trans en la UNL nace como una reivindicacién de las colectivas transy no binaries. En el camino, fue encontrando el apoyo de sindicatos, de organizaciones estudiantiles y de diversos Tye no del tase teabatzrnie cc Solon lavaboraion ara proce! fa Ge age relied la tneuaclde de ee perseta trans Goma treba aleras Cb Ls Una nee Cuando decidl‘estuciar abogaciaen 2009 tuve que dejar por falta de acceso al mundo laboral. Volvi a retomar en 2018 la carrera y ahora estoy tratancio de meterla para ter- raise Do Hie bcte me Ver on a Alig aia ea eile ae inica de las dentidades de la diversdd sexual, Estarios queriendo romper con es- tructuras muy hegeménicas. A pesar de que hemes ale ele duet pacha esl turalmente hacer visibles las identidades travestis, trans y no binaries. Lo que quere- ‘mos es poder habitar la universidac como estuclantes, como no-docentes y como do- centes. Giro orel Tron Gent quan oat tel ened eoea rayeeioreanyele Cuando tenés un sueldo fijo, tenés una obra social, estas bancarizada, podes acceder a préstamos, podés pensar en un futuro. Yo sigo estudiando, no importa la edad en que ‘me reciba sino que el dia de mafiana podamos decirles a las trans que se puede. Suef con un mundo donde esas inf cias y adolescencias puedan tener las oportunidades que muchas, muchos, muches de nosotres no tuvimos. 99 Victoria Alejandra Ironici Castillo - Miser Santa Fé - Estudiante de abogacia UNL Lass compaiierss expresan en primera persona por qué vienen, venimos, luchando para conquis- tar el derecho bisico al trabajo. La Universidad no permanece, no puede permanecer ajena. La Uni- versidad argentina alberga programas académicos (doceneia, investigacién y extension) para dar cuenta de las condiciones de existencia de las per- sonas travestis, trans y no-binarias. Asi avanz6 el saber sobre la realidad de esta poblacién y muchas Universidades abrieron sus puertas para que los saberes travestis y trans ~ y de las disidencias en general ~ pudieran crecer, explorar medios expre- sivos diferentes, circular y constituir diferentes piblicos. El activismo travesti y trans produjo el pasaje de ser objeto de conocimiento a ser sujetxs de conocimiento y a hacer reflexiva las modalida- des en las que los saberes son encarnados por ells a través de una experiencia situada y re-organiza- da desde una posicién politica; es decir, han cons- tituido una politica del saber. La Universidad ar- gentina que hizo tanto, tiene que hacer ahora algo mds: asegurar experiencias universitarias integra- les para las personas travestis, trans y no-binarias; experiencias integrales que van desde e! trabajo — tanto docente como no-docente — hasta el estu- Aleerta / Noviembre 2020 dio, pero no s6lo, porque también sabemos que muchas personas’ travestis o trans abrazan la maternidad/paternidad y sus hijxs también tienen que transitar 0 estar en la Universidad. Hoy lu- chamos junto a las colectivas travestis, trans y no- binarias por el Cupo Laboral Trans pero sabemos que no podemos quedarnos aqui. ADUL (Asociaci6n de Docentes de la Universi- dad Nacional del Litoral) empez6 a trabajar con APUL ~ el gremio nodocente -, las organizacio- nes estudiantiles de la UNL y el Programa de Género de la UNL a partir de la convocatoria de las colectivas que venian de conquistar el Cupo Laboral Trans en la Provincia de Santa Fe. Ahi se definieron principios fundamentales: 1) Nadie habla por Ixs compafierxs travestis, trans y no-binarins, se habla con ellxs; 2) Hay que avanzar en la Universidad en el reco- nocimiento del saber o de los saberes que las per- sonas travestis, transexuales y no-binarias tienen y han construido sobre la base de su experiencia his- t6rica; 3) ADUL, APUL, las organizaciones estudianti- les y el Programa de Género apoyan la construc: cién de un Proyecto para que sea discutido y apro- bado con urgencia po el Consejo Soperior dela INL. Ahora el Proyecto de Cupo Laboral Trans para la UNL empezaré a discutirse en un espacio de de- rechos distinto a partir del Decreto del Presidente Fernandez que establece el Cupo Laboral Trans en los organismos nacionales. Eso nos da més espe- ranzas y muestra que las formas en que las colecti- vas travestis, trans y nobinarias hacen politica van conquistando derechos, transformando vidas y construyendo posibilidades de vida. Como dice Marlene Wayar: Asi de ineludible es todo movi- miento impulsado por la vida. Oscar Vallejos, Licenciado en Letras, se desempe- fia en el drea de epistemologia e historia de la cien- cia, Secretario General de ADUL. Director del Instituto Interdisciplinario de Investigacién y For- macién de la CONADUE Histérica. S-ASipe~ ELUDIBLE ) ES TODO - / MOVIMIENT’ IMPULSADO Pox LA VIDA9é Aleerta / Noviembre 2020 = La perspectiva., de género en la Universidad Nacional del Nordeste: entre la construccién institucional y las:asignaturas pendientes Le ley de Educacién Superior N° 2452/95, producto de la politica neoliberal de los afios 90, enuneia los principios fundamentales de la politica educativa en los articulos del Titulo II, Capitulo 1 “De los fines y objetivos”, haciendo referencia a garantizar el acceso a la educacién superior, a pro- porcionar una formacién cientifica-profesional destacada y al establecimiento de una convivencia pluralista, participativa y democrética para posibi- litar la formacién integral permanente de quienes componen la universidad. Ademés, rechaza todo tipo de discriminacién - superando los estereoti- pos culturales - y enuncia la concrecién de una efectiva igualdad de oportunidades. En relacion con ello, la educacién superior nece- sita revisar criticamente los estereotipos femeni- nos y masculinos transmitidos en los contenidos, en las metodologias, en las estrategias y en las inte- rrelaciones docente-alumno/alumno~alumno, creando las bases para un aprendizaje diferente, estimulado por una convivencia solidaria y una participacién democrética donde haya un recono- cimiento pleno de los derechos de todas las identi- dades sexo-genéricas. Lograrlo teclama incorporar el enfoque de género a las tres funciones fundamentales de la tniversidad: investigacién - proyectos, becas, tesis, de grado y posgrado; docencia- de grado y posgra- do; extensién. Con ello estariamos logrando la transversalizacin del enfoque en la universidad. Sabemos que la “cuestién de género” como des- igualdad estructural nos permea, se encarna en nuestros cuerpos, en nuestras normativas, en nuestras pricticas. Su transformacién requiere por lo tanto de una mirada critica y sdlida concep- tual, politica y éticamente. ‘Ninguna experiencia es transferible en la medida de lo deseado, pero puede operar como mapa de orientaci6n cierto derrotero institucional del enfo- que de género en la Universidad Nacional del Nordeste (UNNE) que tiene dos instancias con- tempordneas entre si. Una de ellas se circunscribe a normativas apro- badas por consejo superior, entre las que se cuen- tan: la resolucién 823/16 que declara a la UNNE libre de discriminaci6n por género u orientacién sexual, la 1098/18 que aprueba el protocolo insti- tucional ante situaciones de discriminacién y vio- lencias de género u orientacién sexual y la resolu ci6n 318/19 que establece la licencia especial para personas en situacin de violencia de género, segiin la ley 26.485 y 26.743, destinada a docentes Aleerta / Noviembre 2020 y no docentes de esta universidad. Sin embargo, por sf sola, ninguna norma es sufi ciente para transformar los arraigados sistemas de creencias respecto de las relaciones sociales de género. ‘Otra instancia la constituye la presencia de nues- tra universidad en el comité académico de género de AUGMf{r} (Asociacién de Universidades Grupo Montevideo) sosteniendo un compromiso con este espacio de construccién conjunta a través del tiempo. Entre sus objetivos se cuentan: DImpulsar y/o fortalecer la perspectiva de género en las funciones sustantivas de la universidad. >Propender a la creacién y/o institucionalizacion de espacios y recursos especificos para el desarrollo de los estudios de género y su articulacién con otros actores sociales. >Contribuir a la implementacién de poltticas de género en las universidades miembro, para lograr condiciones de trabajo y de estudio que garanticen tuna creciente equidad. El comité de género ha implementado una escue- la de verano (EVI) denominada cuestiones de género en clave interdisciplinaria, que durante los meses de marzo se realiza en distintas sedes, en el 2019 se realiz6 en la facultad de medicina de la UNNE. En mayo de 2018 se retine por primera ver la Red Universitaria de Género (RUGE) en el contexto del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), después de intensas luchas en un espacio fuerte- mente androcéntrico. La rectora de la Universidad Nacional de las Artes Sandra Torlucci es la coor- dinadora y desde alli se est trabajando fuertemen- te con los protocolos. Las actividades se inician con un programa que busca hacer un relevamiento acerca de cudles son las universidades que elaboraron protocolos, cul es su grado de implementacién y la posibilidad de armar una clinica que permita diagnosticar proble- méticas relativas a su efectiva puesta en marcha. La aplicacién del protocolo es muy importante porque la perspectiva de género irrumpe como problema frente a situaciones de violencia y/o abuso sexual, al tener que dar respuestas se evi- dencia la incapacidad institucional para abordar estos conflictos. € Pie ae Género y Ciencia La ciencia moderna nace con la exclusién de las mujeres, espacios que le fueron negados y que las mujeres han ido conquistando a partir de la lucha silenciosa que implica el enfrentamiento a dificul tades de orden cultural. A lo largo de la historia, en forma lenta y gradual, hubo una incorporacién femenina a las actividades cientifices y tecnoldgi- cas ya los estudios de posgrado, de cuyo egreso depende, en no pocas ocasiones, las dicecciones de proyectos de investigacion{2}. El aumento de las mujeres en la ciencia se regis tra_ sobre todo en reas vinculadas a las humani- dades, asociadas a roles atribuidos tradicionalmen- tea las mujeres, sin embargo, existen algunos obs- téculos para su participacién particularmente en territorios profesionales y cient{ficos que son casi exclusivos de los hombres. ‘Muchos de ellos tienen que ver justamente con las contradicciones entre los roles asignados a mu- jeres y la estructura de las instituciones académi- cas y cientificas, disefiados originalmente para los hombres donde la vida familiar y social, resorte fe- menino, se ve confrontada, en oportunidades, con las exigencias de la actividad cientifica. Implicarfa el descuido de aquellos roles con los cuales histéri- camente se ha identificado: madre y esposa donde entran en colisién la dicotomia publico/privadols]. Pero ademds hay que pensar en qué medida se considera la dimensién género en la agenda uni- versitaria, no sdlo como objeto de estudio sino dentro de las investigaciones 0 en becas que pro- muevan la formacién de recursos humanos en este sentido y, en la medida de lo pesible, su incorpora- cién como prioritario. Una muestra de las direcciones de pro- yectos de investigacién presentados. ante la seeretarfa general de cien- cia y técnica en el alo 2018 revela un nGmero bastante si- métricoa favor de las mujeres en términos generales, esto es: 56 mujeres y 50 varones, aunque hay asimetrias muy claras segiin la unidad acadé- mica y estereotipos de las dis- ciplinas. Género y Extension La extensi6n fue el nexo que hist6ricamente rela- cioné a la universidad con su entorno social en la creacién y multiplicacién de vinculos con la comu- nidad en procura de contribuir, a partir del conoci- miento y el pensamiento critico, a la promocién, estudio, disetio, formulacién, monitoreo y evalua cién de politicas pdblicas en la bisqueda de una mayor y mejor calidad de vida para todos sus habi- tantes. La resolucién N° 692/12 del CIN plantea que “la comunidad académica considera que la extensién no refiere al solo acto de transferir los resultados de la produccién cientifica a la sociedad, sino ‘pro- ducir’ en funcién de las problemticas y demandas que surgen en la vinculacién de la Universidad con la sociedad, por lo que debe realizarse en el marco de un proceso dialéctico en el que la socie- dad y universidad se enriquezcan mutuamente nu- triéndose con nuevos conocimientos y nuevos pro” blemas a investigar..."[4J. En términos generales, su vinculacién importa beneficios mutuos que nacen de su efectiva inte- raccién. La sociedad y la comunidad aportan temas reales para el trabajo académico universita- rio, contribuyen a definir agendas para la investi- gacién y estimulan un aprendizaje significative y auténtico en los estudiantes. Para la comunidad, el beneficio consiste en obtener respuestas y colabo- racién para la solucién de algunos de sus proble- mas e, igualmente, que algunos de sus miembros incorporen, también, por la via de estas experien- cias, conocimientos nuevos para identificar y solu’ cioner situaciones que requieren su. especial atencién{5}. El género es una de las problematicas de gran demanda desde la sociedad civil. Hay nicleos focales dentro de la UNNE que estan haciendo hincapié en ello: Centro Interdisciplinario de Género perteneciente a la facul- tad de humanidades, el Obser- vatorio de Igualdad de | Género y Derechos Huma- nos que funciona en depen- dencias de la facultad de de- recho y ciencias politicas y sociales y el programa de género y diversidad de la fa- cultad de medicina, ¢ Pee Todos ellos otorgan un papel trascendente a la extensi6n, asf por ejemplo, el Centro de Género ha realizado acciones de extensién desde el Pro- grama UNNE en el Medio con las EFA, gener6 procesos de sensibilizacién y redacté y puso en marcha el protocolo de intervencién en casos de violencia de género en la facultad de humanida- des Durante 2016 y 2018 se implementé, en acuerdo con el gobierno de la provincia del Chaco, las pri- meras diplomaturas{6} en el 4mbito de la universi- dad referidas a la problemitica entendidas como espacios de formacién y capacitacién que cuentan con formato pedagogico y curricular especialmen- te orientado a necesidades, problemas y demandas concretas surgidas en ambitos locales y regionales de la sociedad. En tanto el programa de género y diversidad de la facultad de medicina trabaja articuladamente en el dictado de cursos con el ministerio de salud publica de la provincia de Corrientes, la Asocia- cién de Travestis, Transexuales y Transgéneros de Argentina (ATTTA) filial Corrientes, y el INADI. Ademiés el érea de medicina familiar lleva adelan- te el funcionamiento de uno de los consultorios in- clusives- amigables para la diversidad sexual, de reciente creacién. Género y docencia de grado Una de las principales asignaturas pendientes es la transversalizaciin de esta perspectiva en la trama institucional de nuestra alta casa de estu- dios. Entendemos por transversalizacién de Ia pers- pectiva de género, la institucionalizacién de linea- mientos rectores para propiciar y materializar re- laciones de igualdad entre los seres sexuados que, lejos de “compartimentarse” o de restringirse a nichos de tratamiento especifico, atraviesan y per- mean el tejido del acontecer universitario. Hay un “silencio conceptual” que sufre todavia la categoria de género, a la hora de ordenar for- malmente el conacimiento y traducirlo en conteni- dos para las distintas asignaturas que integran la curricula. Su incorporacién curricular en las carreras de Aleerta / Noviembre 2020 grado ocurre excepcionalmente y por conviccién individual de algunxs docentes. Es muy lejana como realidad extendida y “naturalizada”. {Qué ensefiar? ECémo hacerlo? EQué tensiones atraviesa nuestro saber pedagdzico, el de los nuevos y los viejos docentes frente al imperativo de incluir la problemética del género en la accién educativa? La formacién docente se halla en el centro de las encrucijadas, sigue atravesada por sus viejas ten- siones porque Ixs docentes no son agentes neutra- les, portan las relaciones de poder que atraviesan y organizan a la sociedad. Esa encrucijada se dirime en el curriculum que sobrevalora ciertos aspectos y subvalora otros. Ademds tenemos que pensar en. la presencia de nuevos actores de la politica educa- tiva: estudiantes, comunidades indigenas, movi- mientos sociales y grupos feministas. Su inclusién implica también una discusién sobre los fandamentos de los patrones culturales que transmiten nuestros sistemas educativos. Histéricamente nuestro sistema _ educativo formal transmitid, reforzé y reprodujo los estereo- tipos sexuales tradicionales convirtiéndose en un poderoso instrumento que modela, a través de una escala de valores y cédigos, las maneras de actuar y sentir de lo que socialmente se consideran atri- butos femeninos y masculinos, estableciéndose, asf, diferentes roles y funciones asignados a muje- res y varones. Por lo tanto, los aportes de los estu- dios de género en este campo, como categoria de anilisis conceptual y metodolégico, son elementos ineludibles para revisar las concepciones tradicio rales, desarticular las construcciones culturales y ayudar a examinar criticamente las normas y los saberes incorporados en los curriculos institucio nales Curriculum oculto de género Todo esto nos lleva a Ja necesidad de aplicar un curriculo flexible, inclusivo, abierto y libre de sexismo. Existe un curriculum oculto de género en las uni- versidades, es decir, una serie de valoraciones, c& digos, normas, ideas, supuestos, mitos, discursos, coniceptos, creencias, relaciones de poder, roles, re- cursos textuales y simbélicos generalizados y sexis- tas, Es necesario atender la transformacién del curri- ey culo oculto, discriminatorio, reflejado en lenguaje, actitudes y gustos; llevar a cabo programas de orientaci6n no sexistas con el fin de ampliar los cri- terios de seleccién de carrera impulsando la parti- cipacién de mujeres y hombres en todas las areas del conocimiento. Si advertimos la necesidad de una educacién no sexista, traducida en contenidos, actitudes, proce- dimientos, metodologias y destrezas, debemos apuntar a un cambio curricular es modificar pro- fundamente los contenidos y las practicas, hacien- do hincapié en la superacién de construcciones discriminatorias, de inequidad social y de asime- trfa en Ja relacién entre los sexos en la basqueda de una sociedad més democrética y justa integran- do a todos los miembros de la comunidad. Analfa Silvia Garcia. Licenciada en Historia, profesora e investigadora en el Centro Interdisci- plinario de Estudios de Género (CIDEG), Institu- to de Historia, Facultad de Humanidades, UNNE. Integrante de la Comisién Géneros de ADIUNNE. {1] El comité académico de géaero esté integrado por: Universidad Nacional de Rosario ( ‘Nacional de Cérdoba- Universidad Nacional de Cuyo- Universidad Nacional de Entre Rios’ Universidad Nacional de Plata Universidad Nacional del Litoral- Universidad Nacional de! Nordeste- Universidad Nacional del Sur- Universida Federal de Parané- Universidad Federal de Rio Grande do Sul Universidad Federal de Santa Catarina- Universidade E. tadual de Campinas: Universidade Federal de San Pablo- Universidad de Playa Ancha- Universidad Nacional de Asur- ciér- Universidad Nacional del Este- Universidad de La Repiblica. {2] Hay que considerar que la tasa de egreso de los posgrados es superior en mujeres que en varones, es factible asociar la situacin a las caracterfsticas atribuidas a mujeres {3} Nélida Archenti. Los caminos ¢e la inclusién politica. Acciones afirmativas de género, En: Storani, Marfa Luisa; Vizquez, Silvia; Archenti, Nélida; Tula, Marfa Inés; Pautassi, Laura. Hombres pblices, Mujeres péblicas, pp. 3528. {4} Cuadernos de Extension Universitaria de la UNLPam. Afio 1, N't. Secrevarfa de Extension Universitaria de la UNLPam, Sta Resa, 2015, p. 9. {5} Ibidem, p.16. {6} Diplomatura en Cénero y Sexualidades, Movimientos de Mujeres y Politicas Péblicas, Se dictaron dos cohortes en la sede Resistencia de la Facultad de Humanidades y una cohorte en la sede Juan José Castelli de la UNNE. Pig. a4 Aleerta / Noviembre 2020 Ietas es una seccién de la revista que tiene por objetivo aportar al anilisis de la realidad desde un punto de vista feminista. El nombre hace alusion a la metéfora utilizada por la escritora Gemma Lienas en su libro El diario violeta de Carlota. En ese libro la autora define el concepto de las gafas violeta -pos- teriormente popularizado por los feminismos- como una nueva manera de mirar el mundo para dar cuenta de las situaciones injustas, de discrimi- nacién y exclusién hacia las mujeres y diversida- des sexuales. En esa linea, decidimos pensar esta seccién para aportar esas miradas al interior de nuestras uni- versidades y sindicatos, y también para conocer un poco més a quienes formamos parte de la Fede- racién CONADU Historica Alleerta / Noviembre 2020 Hoy inauguramos este espacio presen- Dy tando a Ménica Frias, B ingeniera industrial y laboral y actuaimente secretaria general de la Asociacién de Docentes Universitarios Fueguinos (ADUE) y vicepresidenta del colegio de ingenieros/as de la provincia de Tierra del Fuego. Monica es nacida en Tucumén y desde 1995 vive en la ciudad de Rio Grande. Se gradué de ingenie- ra en el afto 1983 cursando sus estudios universita- rios durante la dictadura militar en Tucumén, Monica, contanos un poco mas de vos, de tu vida en Yocum hasta qué decdeetdar nena y re inte, Pig. as -Bueno, naci en una familia de clase media, catélica y estructurada y numerosa, seis hermanos, como corres- pondia para la época. La primaria y secundaria la cursé en colegios de monjas para seforitas, no sin muchos problemas por mi cardcter poco décil para lo eperaty en los 60 y 70. Sin embargo, como era esperable, si- geet los mandatos propios de la época, me casé a los 19 afios cuando cursaba el segundo afio de la carrera universitaria y tuve a mi hija cuando estaba en el titimo aio. Cuando decidi cursar ingenieria mi padre lo prohi- bi (no era carrera para una mujer), obligindome a anotarme en administracin de empresas, pasado el Primer cuatrimestre me cambié a ingenieria industrial y me recibi rdpidamente. Los mandatos sociales los segui solo un corto tiempo, me divorcié en 1988, estrenando la Ley del divorcio en Tucumén, fue uno de los primeros en la provincia Mis padres — tardaron mucho tiempo en digerir esa situacién que conside- raban vergonzante. Pude ejercer_ mt profesién, no sin dificultad ya que no solo era la cuestién de género, sino que U {a ingenieria y carreras afines entraron en decadencia en la década menemista cuando se destruyo e! aparato pro- ductivo sin posibilidades laborales para las profesiones técnicas. La formacién de ingeniera industrial me permi- ti6 también desempefiarme en areas econémicas, que es- tuvieron en auge en esos afios. Me mudé a Tierra del Fuego donde ademds pude ejer- cer la ingenieria en ef ambito fabril, me dedico ademas ala docenda universitaria, tengo un inseparable compa- fiero hace més de 30 afios, tengo otro hijo ya adulto y un maravilloso nieto adolescente. Enprelaciénsa-tus afios..como...estudiante, Recordas alguna situacion particular 0 anécdota que nos quieras contar? ~Cuando era estudiante era la nica mujer en la clase, y en las 45 materias que cursé en la carrera de grado Solo tuve dos profesoras, una abogada y una psicdloga. Fra una buena estudiante, nunca reprobe una asignatura ¥ 50 enojaba a mis compafieros, que constantemente apostaban por ver cuando desaprobaria por primera vez. No se les cumplié el deseo. Sufri acoso de un par de docentes, en una época donde esa expresién no existia, no se lo conté a nadie, supere los dos hechos estudiando muchisimo y pidiendo exame- nes piiblicos. Mientras cuento esto me parece una locura, es como si fuera otra vida, hoy me parece impensable. Aleerta / Noviembre 2020 “ERA LA UNICA MUER MEN LA CLASE Y EN IAS 45 MA CURSE EN LA CARRERA DE GRADO SOLO TUVE.DOS PROFESORAS. UNA ABOGADA y INA PSICOLOGA= Cuando me abate cui dejé Una vex inserta en el dmbito laboral, en el desempefio de tu profe- sion, Crees que existe fo que se conoce como “techo de cristal”? ;Alguna vez te sentiste menospreciada 0 excluida por tu condicion de mujer? -§i, lo creo como en casi todas las profesiones y con mayor crude- za. Alin hoy en dia hay muy pocas mujeres en cargos gerenciales de activi- dades productivas, 0 propias de las inge- nierias, haciendo trabajo de planta. En relacion a situa- ciones de menospre- cio, muchas veces lo senti pero te cuento mas ofensiva. 45 HATERIAS QUE en Tucuman un par de trabajos donde habia superado con mucho esfuerzo y lucha las cuestiones de género en el ambito laboral, entonces como me parecia normal el ejercicio de fa ingenieria por parte de una mujer (solo estaba teniendo en cuenta mi experiencia), me presenté a una bisqueda de ingeniero para jefe de planta en una electrénica. La bisqueda la hacia directamente Buenos Aires. Me seleccionaron, vino meme de Bs As, etc. Me di- Jeron que el iitimo paso era fa entrevista con los geren- tes de la planta de Rio Grande, asisti absolutamente confiada, tenia 36 affos, y me recibieron estos ingenie- 105, fet mayor de mas de 50, me hicieron sentar y me dijeron que en esa planta solo se aceptaban mujeres como operarias, yo no lo podia creer, fue un cachetazo de realidad, les respondi que jamés trabajaria con perso- nas como ellos. Veinte anos después visité esa planta y habia una ingeniera en el area de produccién. Por su- puesto un par de aflos después pude trabajar en el drea productiva industrial y Hlegue a ser gerenta. En relacidn a las situaciones que comentas que tuviste que enfrentar durante tu paso como estudiante en la universidad {Qué avances observas en la actualidad en el ambito universitario para contribuir a la inclusion de fas mujeres-en-tu-profesion? -Te cuento algo interesante, hace 35 aitos era la tinica ‘mujer cursando ingenierla, hoy soy docente en el dltimo afio de ingenieria quimica y son 5 estudiantes, | varén Pig 265

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