DE LA REPUBLICA DEL PERU, 28
mas el nombre de terceron, cuarteron, pardos , chino-cho-
Jos, ete., dlos nacidos de sangre mezelada, segun la raza que
predomina mas 6 ménos.
No nos atrevemos 4 decir cuantos son los de cada raza en
la actualidad, pues carecemos de datos seguros sobre la ma-
teria.
IDIOMA. — COSTUMBRES. — VESTUARIOS.
El espafiol es la lengua de la raza no indigena; esta aun
habla el guichua, el aymardy otros diferentes dialectos.
El idioma quichua es suave, perfecto, muy rico en voces,
sin faltarle la concision ; tiene declinaciones y conjugaciones,
como las mas adelantadas lenguas, asi es que ha Ilegado 4 tener
una gramatica. En este idioma ha sucedido lo que en todos los
idiomas del mundo, es decir que hablado por varias nacio-
nes, cada una de ellas le ha impreso un sello y por consi-
guiente han nacido los dialectos. Los principales son :
- El guiterio , que es el menos puro. El /anana se habla en
algunos puntos del departamento de la 1ibertad ; el yunca,
en el obispado de Trujillo; el chinchaysuyu, en el Cerro de
Pasco ; el caugui, en la provincia de Yauyos ; el calchagui,
en el Tucuman, y el cuzquero, en el departamento del Cuzco,
que es el mas perfecto y el propio idioma quichua.
Seria muy importante hacer un estudio filologico de este
idioma para ver sus afinidades y poder de alli tomar algunos
datos sobre el origen de los Peruanos. Tenemos por ejemplo
. la palabra ynté, el sol, en quichua gquien no ve alli un de-
rivado de indh, que en sanscrito significa lucir, brillar, etc.?
Mas no basta ver una sola palabra que puede ser fruto de la
casualidad ; es necesario ver muchas analogias, estudiar la es-
. tructura é indole de Ja lengua para que con ese eximen con-
cienzudo se sepa algo mas sobre Ia primitiva historia pe-
ruana.26 “ GEOGRAFIA
Para dar & conocer un poco el antiguo idioma de nuestro
pais, copiarémos de las ¢ntigiiedades peruanas del sefior Ri-
vero, la Oracion dominical y un verso del S. D, M. Mariano
Basagoitia, con lo cual se tendré idea de la prosa y de la poesfa
quichua.
Yayacu hanac pachacunapi cac; sutiyqui muchhasea cachun ; ceapaccay-
iyqui fiocaycuman hamuchun ; munayiiiyqui rurasca cacbun ; imainam ha-
naepachapi, hinatae, cay pachapipas ; ppuochauoincuna ttantaycucta cunan
cohuaycu ; huchayeuctari pampachapubuayen imanam fiocaycupas, flocay-
cuman huchallicuccunaeta, pampachayeu hina. Amatac cacharibuayeuchu
huateccayman urmanceaycupae; yallinrae, mana allimantae quespichi-
huayeu. Amen.
« Nos complacemos en dar lugar 4 un ensayo reciente de
poesia quichna, insertando una décima del Sor. D. M. M. Ba-
sagoitia en honor del Senior cura Cabrera, con la traduccion
castellana del mismo autor (1).
Mana eaeemanta cachispa __8-un Dios imitas en su poder extenso
Pacha-camaceman ricehanqui; P01 8242 arrancando un ser viviente,
a eman TICChANGUE ; Enire auras crudas y en soledad paciente
Chiri-Uaquicpa rafframpi Descorres de natura el velo denso,
Pachata ceapace yachisna. ‘Tulo descubres rico valor... jinmenso ?
a ceapace yactrsp En la Peco-vicufia que, tu afan presente
Huiccuria alpaccace churinta —_Ofrece de caudal cual una fuente,
Tuta-ppunchay yupipanqui. _Que de oro corre, hasta ¢) mar mas denso :
i k 5 , Este tesoro, que ai mismo oro excede,
uatan-huatan, nausai, Mampi ps et hallazgo de tu desvelo intenso
Tarinque ecorie ccorinta. Enire tinieblas y entre luz naciente.
5 ‘Para honra tuya a tu memoria quede,
Mana cacemanta cachispa e Que 4 un Dios imitas en su poder extenso
Pacha-camaceman riechanqui. De ta nada arrancando un ser viviente, »
(2) Con motivo de haber formado un rebaiio de paco-vieuia. Esta cria se
conveia desde el afio de 1826, habiéndose presentado algunos de estos nue-
vos animoles al general Bolivar por el prefecto que mandé entonces el de-
partamento de Puno, y de los cuales el Sor. Rivero Hevd uno a la capital
de Lima. Su lana blanca 6 negra es finisima, y de largo tiro; se ln uraide ya
i Kuuropa, y se ve en In Exposicion de Londres.DE LA REPUBLICA DEL PERU. at
El aymard tiene tambien declinaciones y conjugaciones
como el quichua, aunque en su pronunciacion es muy gutu-
ral, fuerte y varonil. Iguala en brio & cualquier idioma, en
lo relativo 4 palabras significativas.
Y¥ es de notar que solo se habla el aymard en el paralelo de
Arica, 4 saber; enlas cabeceras de Tacna, Torata, Candarave,
Camilaca, Araca, Juli, Ilave, Pomata, Chucuito, la Paz, ete.
En Eten, pueblo de Lambayeque muy cerea de 1a costa, se
habla una lengua que nadie sino ellos entienden en el Perit;
tambien se encuentra el puquina, pero es raro.
A pesar de ser el guichua el idioma general de }os Indios ,
comprenden y hablan la mayor parte de ellos el espaiiol ,
salvo los de muy adentro de la costa. EF] sabio y recomen-
dable Peruano D. Mariano Rivero habla con alguna esten-
sion acerea del quichia,en el cap. 5° de las Antigiiedades pe-
ruanas.
El anaco es una bata de color oscuro, ya negro, ya café,
acinturado como una faja de colores y de un tejido grueso,
pero fino y de buena lana.
Este vestuario de las Indias del Pera, que varia poco mas é
menos, segun los lugares, es una especie de manto higubre,
que les dura mucho tiempo.
El topo es una cucharilla de oro, plata 6 cobre, de paleta
larga, redonda y puntiaguda que sirve para prender en el pe-
cho la Zfel/a, manta de una vara y cuarta por lado, dalgo mas.
La montera es especie de sombrero, de dos hdjas en forma
semicircular. Varia algo su forma segun los lugares.
La raza blanca, viste lo mismo que la Europea, siendo
de notar, en general, que el lujo en los vestidos es propor-
cionalmente mayor que en Europa y sobre todo en la gente
de color.
Sobre costumbres y vestuarios dirémos que pertinaces los
Indios conservan siempre las suyas. Darémos razon de elas
en la deseripcion de cada Departamento por haber alguna
diferencia segun los diversos lugares.8 GEOGRAFIA
Enel Atlas que forma parte de esta geografia se vera mejor
el yestido de los Indios, pues con este objeto, copiamos al-
gunos grupos de una fotografia tomada de los Indios del
Cuzco y Puno por el habil fotografo Garreaud.
We In Coca y Lincta.
La coca (Erytréxiton coca) es un arbusto pequetio , cuyas
hojas se asemejan a las del naranjo. La mascan los Indios y
le sirve de.alimento. Para sazonarla toman un pequeiio
trozo de lejia, llamada /dveta, que viene 4 ser para la coca,
lo que la sal para el huevo. La /lucta varia segun los lugares :
en la mayor parte del sur de la Republica se hace de ceniza
de espinos, molle y otros vejetales, amasada 4 veces con pa-
pas cocidas. No todos los espinos son aparentes para este em-
pleo, pues algunos son muy malos.
En el N. del Pera, toman los Indios en lugar de ducta la
cal viva, que llevan en unos matesitos colgados al cuello y
cuya embocadura es como del grueso de una pluma, tapada
con un palito que al sacarlo, sale rociado de la cal y lo chupan.
‘A veces, en fuerza del exceso de la coca y cal, quedan los
Indios estasiados, es decir, como maquinas, que continéan
sus labores, pero sin sentido comun. Se dice enténces que
estan armados y se les respeta, porque hay riesgo en des-
pertarlos subitamente de su letargo.
La coca es alimenticia y da tono al aparato dijestivo ; puede
contener, tomada en infusion teiforme, las diarreas que pro-
vienen de atonia; pero pasando de ciertos limites es perjudi-
cial 4 Ja salud. Aunque no se conoce exactamente su verda-
dera accion, parece mas racional admitir, con Weddell, que
obra como un excitante de todo el organismo; por eso sin
duda los indios soldados con la coca solamente resisten tanto
Jas marchas. Es vicio.mas fuerte que el licor.
Se masca la‘coca poco a poco en un lado de la boca, siendoDE LA REPUBLICA DEL PERU. 20
la cantidad que sirve en cada aeudlico (asi se lama cada por-
cion que se toma), como la porcion de té que se sirve para
un individuo. De rato en rato, se le daun apreton y se traga
el jugo, despues se bota el bagazo. Queda por consiguiente
inchado el carrillo por donde se halla el acudlico y esta incha-
zon se Hama picchy. Raras son las Indias que comen coca, al
ménos las jovenes.
La coca de los Ytngas de Bolivia es la mejor que se conoce
en América, por su fuerza y dulce y grato sabor. No laco-
men sin embargo, sino en los pueblos limitrofes y es algo cara.
Con un trozo de charqui(carne salada en hojas delgadas),
un poco de cancha 6 anca (maiz tostado), y una bolsita de
coca con su trozo de dlucta, hagen los Indios viajes asom-
brosos.
- De Ia Quena.
‘La quena, instrumento peculiar del Indio, es una especie de
flauta de una cajia particular que solo hay en las montaiias
6 bosques del sur del Peri. Su largo es, por lo comun, de
media vara, poco mas 6 menos, y su didmetro de } de pul-
gada. Ninguna de sus dos bocas esta tapada, y la embocadura
es un resorte en forma de rectangulo, pero cuyo lado su-
perior esta eliminado y el opuesto & este cortado en chaflau
hacia al interior, como en los clarinetes.
Hay tambien algunas pequerias de g 4 10 pulgadas de largo
y dari sonido mas agudo.
La quena solo tiene cinco agujeros, en la direccion de la
embocadura y uno al costado, asi es que solo da semitonos
muy fianebres y melancdlicos. Casi siempre se toca a dio este
Idbrego instrumento, resultando ef mas tierne y aflictivo cou-
-elerto que se insimia en lo mas hondo del alma, para ane-
garla en un indescriptible dolor.
Sueten 4 veces los que las tocan horadar un cintaro de
barro por los costados , para introducir las manos por los3
GRARLA
agujeros y hacer resonar sus quejidos dentro del cantaro.
Es enténces el eco de ta quena la verdadera expresion de los
sepuleros. Los sones que parten de esta selvatica zampoiia
rompen en mil pedazos el corazon y parece que la muerte
se valiera de ellos para anunciar su funesta mision.
Las doloridas voces de Ja quena son el Ianto con que el
infortunado Indio expresa su dolor, abyecion y abatimiento.
Desde el tiempo de sus monarcas, sufre e] mismo tratamiento
que las bestias de carga; es la constante victima de la rapa-
cidad y trapaceria de todos cuantos no le pertenecen en raza
y hasta, para mayor dolor, de sus mismos consangufneos
cuando ejercen el menor mando. Y ninguno de estos seres
inhumanos piensa en que el Indio es el duerio primitive del
territurio peruano.
Sin voz para quejarse, sin fuerza para defenderse, sin re-
cursos para demandar y obtener justicia, viven los deseen—
dientes de Manco entregados 4 la mas profunda melancolia,
vistiendo el negro ropage del dolor, buscando las altas y ne-
vadas cumbres de Jas montafas para ocultar en ellas su ver-
guenza y derramar amargas y copiosas lagrimas que alivien
el peso que en tan crudo cantiverio gravita siglos ha sobre
sus hombros.
Allt en esas escabrosas alturas se lamenta al son de la fi-
nebre y sepulcral quena, repitiendo endechas y tan sentidas
quejas que el hombre mas feroz Noraria al escucharlas. En
esas aridas y glaciales serranias devora en silencio sus agudos
dolores y sus multiplicadas tribulaciones. Y sus danzas y
sus cantos y sus diversiones no son las danzas, los cantos,
ni las diversiones del hombre de otros lugares ; sdlo son ana
viva representacion del congojoso estado de su espiritu al
verse sin houra, sin libertad y sin patria. Entréganse 4 la em-
briaguez para olvidarse de su dolor y no traer 4 la memoria
los recuerdos de su patria.
Esta pues identificado el Indio con la quena por una natu-
ral consecuencia de su actual estado. Raras veces hace sentirDE LA REPUBLICA DEL PERU. . vy
durante el dia sus patéticos sones ; espera las tinieblas de la
noche y solicita el retiro para que nada interrumpa sus vo-
ces : y simbolo fiel del caricter melancdlico det Indio huye
del bullicio social, de los resplandores del luminar del dia,
cual ave nocturna, y solo ama y apetece la soledad, las tinie-
blas y el silencio. Y cuando toda la naturaleza se halla en re-
poso, es cnando la quena despierta, cuando lanza sus sentidos
tonos, como para no ser escuchada de nadie. Hasta su color
es fiinebre, si tal se puede decir, pues tiene un amarillo os-
curo semejante al de Ios moradores de las tumbas; es
asombrosa esta singularidad del color de Ja quena; es en
fin, la quena el Super flumina Babylonis del Peruano, pues
parece 4 veces que se oyera en sus tristes y tétricos que-
jidos las voces de los hijos de Sion cuando en su cautiverio
decian
Ya pendian colgaclos en sileneio ,
Sin que nodie escuchase sus tonadas,
Los instrumentos todos que en otro tiempo
Con sus sonidos dulecs deleitaban.
Porque lus mismos que nos han veneido
Y que nuestra nacion han hecho esclava,
Pretenden que cantemos por la fuerea
Nuestras canciones tiernas en La flauta.
Los mismos que del suclo natalicio
Nos acrancan con violencia tanta,
‘Nos repiten : « Cantadnos los cantares
Que se suelen cantar en vuestra patria, »
(Pardfrasi del salmo 136.,