ES — 8 5 4. eomuno nuseee 16. duceién (*) iu i HUSSERL, Edmund (1859-1938) Je anterano dl taciones cartesianas (1931). Seacssmocvos de las Medi Editorial Tecnos, 1986, reo, poseen un ti Traduccién de Mario Presas. (Seleccién de ta Primera, Segunda, Cuarta y Quinta Meditacién) Folo son miembros no independientes de Ta Gia universal, que et I lotta. Selo den Gad sistemitica de la filosofis pueden aquéllas ‘Abora bien, tal como se han de ccarecen de esa entendida como unidad unidad de. dics fonds ién_ absolute. testa exigencia de re: in se traduce en una blosofia subjetivamente vo se realiza en dos impor Guiee Hepat a set Also frismo, derrumbar todas as i Toner’ reconstruislas. La flosofia —1 ‘pot él mismo y tendente # lo ‘del ‘que él puede hacerse responsable, desde lun comiento y en cada uno de sus pasos sobre 1a base dle sus evidencias absolutas. Si he tomado la decisién€1z fefxione sobre ol mov coro peda encontrar un i todo progesive caper de conducir 4 un verdadero ot ego de las. cogitationes puras. El que medita lleva a cabo tal regteso mediante el conocido y muy notable método de fa dude, Di absolute, él se niega a hacer valer como exis tente algo que no permanezca preservado de toda conce: 6 EDMUND snUssERt Cierto en It vids natural Jc ia experiencia y del pen iemto, ¥, exchuyendo todo lo que deja sbi ides de duda, trata de obtener un eventual cvidente. Con este pot fundamentos, Al dde sus fundamentos, empero, 0 s¢ les se a [az Meditaciones dk todo, la certeza dela expe dado el is ‘Asi, pues, en juedar m0 ingenyo al parece tender, en ensayos ‘embargo siempre inguficientes, a una for no pasado, una decadencia con respecto a id se ha perdivie 8 ADMUND HUSSERL 1a, cuando ta fe reigiosa fue ensjnindose fn’ una convencidn czrente de vide propia, It hu ded intelectual ele ac nace ca fe cde Ie hutnanided habia de ser guisds 9 intelecciones cientficas y, on vittud de ca gar de une sera ‘dace a de teotiss en confcto. —les rturbable fe en In verdaderaSlosfia—, tenemos psu epriiones predates, Ja mera sparencie de von filosofar serio en colaboracién y recipracidad. En lo no se pone de manifiesto nada seme per at ivamente vilidos. «Objet dos», empero, no significa otra cosa que reat ficados por Ta critics mutua y por ende 1 Ahora bien, gcémo tun genuine estudio y una genuina coll bay tantos flésofos y cas a tenemos congtesos filosdficos. Los fil6 ‘pero, lamentablemente, no las fl 10. apse musseRe sto se ha sefil: fenomenologia teascence fen que cayeronPeSeCeeSPeeeee eee eee eee eee eee oo Se ae a a 12 EDMUND HUSSERL Primera meditacién todas ss mano vn ideal deo el de Ia ciencia nm. aqoellos in, sin see sometido & nas. aca Dest: en comprensibie de suyo que la Je un sistema dedi venia que apoyarse. sobre un ‘de la deduccién. El axioma de EL CAMINO HACIA EL EGO TRASCENDENTAL re age! to, cada uno para si alg fos que comienzan de —sélo pronto fuera de juego las también todas gradualmente, 12 forma de una co 'Sélo que hemos de tomar precauciones res- ecto del modo de ponetla como ? Obviamiente no podemos supo- fo no. debemos prejuzgar ni tan siquieta su pos ‘Ai menos ‘in decit que considers —_lidad. Ahora bien, gcémo se puede remano algunas de rales formal que se pre- fas cieneias, en cuanto hecho verdadero y posibilidades © fume como de suyo que las Sf una. pretensién cayo Ingacden que se ine ica clench, idea? Muy bien sizoz lez que ells pre- specto. a Ja autenticided de realmente persiguen. dando progr verdad justifieada en ited de volver a tal acto como una y la ta una ad permanente © una posesién, y en cuanto tal es conacimiento, _natucamente egatemos, al explic de una fundamen a Ia idea de ba evi 16 FoMUND HUssERL mente: juzgat es un mentar y en genetal un mero pre mit, que sean estoy aquelle. El iseeado) es por cone 4 Ja vista algunos eleme 10s fondament fig que ig Yodo qvhacer ci smos que el cientitco. no, go sivo fundamentae sus juicion no quiere dejar valet y ante on nto cientifico, que él no hays mente, y que, Juego, no pueda fen todo moment © @ sida, pero en todo eas0 yace ag Sin embargo, hay que destacar plementatio: tenemos que ivicio (en el més ampliTACIONES CARTESIANAS 19 los. rasgos 2 ciencia, que al_ principio predomina ‘expresién en. cusa ‘© menos buena, a lo mentado y ismo;, pose, por tanto, SU Pi ia que también entra en He. pre és parte codetermi ica, en cuanto comple} fundamentadas 0 por fundamentar en for ene, coneituyen, un Fs obo gue ‘0 constante papel ea la ina, con sus. obj cia ‘busca verdades que de una ver todos sean vélidas y gada a modificar continuamente sus verdades; pero, todos modos, persigue la idea de In verdad abs im pritrer 0 proceder ulterior. Es obvio cen el filosofa’ Kendencia a fa 1. na puedo form endcacia a It univ don que. pueda haber ey hace slg pees lad (Selbstgebumg) de las co- te Ia. evident ral de la tendencia cientifica y sin prejurger su pos LtSHANAS 21 20 EDMUND HsseRL ‘completa y evidentemente sde modo predicstiva, c= de este a respecto de Ia perfecc donde se emplean su Aqui, sin embargo,-en este lenguaje. comin en estas si ydamentadas, ‘También esto lo tenemos en cuenta en nuestro pio metédico normative de Ia eviden de shora idencies mdz o menos perfectes. En e: re decir, eben y pueden sopor ado del conocit la de Is cvidencia adecuade de si fn constantemente at i : cién_ de In evider cobrar sentido Ja matcha y ln construccién de uns cl cia conforme a Je un sistem defi iento —con Ia infinitud que pres jmnismo a esta idee ~erminado pec demaada de perior se manlist ‘mis y en un pew principios, fond ias, y cuyo vs fen su empeno pot fundamentar ,remonténds os In captacién en gue €3 0 que es de tal manera, en cl modo del rnismon, con plena certeza de ese ser, la cval, pot excluye toda duda, Pero no por ello excluye la posibi: lidad de que lo evidente pueda mis tarde tornarse d antemano, como cerente de objet ble. Ademis, la cvidencia de aquelle -reflexién6c 24 EDMUND HUSSERL WJ del noser de lo que yace en uoa vez eae cided spade 4 cosa —tanto que 4 nadie se le ocurtieg enu ‘cxpresimente cn una proposicién—. Pues noso% wmente Ia continua experiencia en Ia eval y determina de si podeimas «) caso de fo menos ido de set que esté asegu , de una que une ex dscuiéndote como iuién de fos sn sive el conjuato en su unidad, puede revelarse com slo de un sueio caberenie, No necesi Plena procka de mundo, 2 pesar de la cor io paramos taci6n. radical la evidencia de Ia expe: nes ‘Ahora bien, si nos detenemes en este pun fen general, unser que sitva de 319 habl que meditan de26 EDMUND HuSsERL manera radical, no tenemot ahora una otros. vilida, mundo, en ‘ly al ser (Seinsgleuben) propia de ate nosotros més que una mera pret resprach). Esto concierne también a la jimundans de todos los ottos «yocse, de modo tal save de derecho no podemos ya hablat propiamente cn el plural comunicativo. En ef naturslest corporal lided del conereto mando circundante d Feaémes ee pre de realidad efectiva de ese fendmeno, y como que yo algusa vez pueda decidisme por el ser o Ja mera apaticncia, él eo (9-208. aeabo de hacerlo ‘de modo que permanez- 2 el ser del mondo de la lo que es 8 esa vide peek como presente, el pasado como pasado, 28 EDMUND HussERL es. deéir, con mi tuitivas y mis jones de fines. y jda Ia mirada’ de ‘esa atencién, en cust de juego respect al mundo objetivo ya dade, y ante todo tomas de posicidn respecto del ser’ (las concern’ al ser, Ia speriencia, el ser pos set probable propio por todas sus vi ciones puras, sentido de fslez 30 EDMUND HUSSERL yo, y con ico fundamental de la ¢pokbt fa en que feconduce a ese por ello reduccién fenomenoldkica trascendental ® = pata mi el entero mundo objetivo y Todo ser munda $9. Aleance de le evidencis epodictice del «yo soy» de si ider de ser. En ‘a la que per gue en " i yo me pongo a si mismo tengo de llevar rex del ego puro y Sus cogi , en cusnco ‘precede, por tanto, al set natural del indo del que ida e080 undo’ mismo, 0 Pn eekin metodiea dela revolucion, ‘conelato. oem feosa gue. DIO. pasa por alle logicamente, Fes ela organ peop dex ace rentido et madtodo de blema de [MEDITAGIONES CARTISTANAS. 31 mente al concepie de apo ado. la apodi ‘base de una 1do al hablar o se fa pasara por nar, de ello be de_ haerez ti 32 EDMUND HUSSERL 34 EDMUND JWUssERL cl ego es ic cet expire ofece oh do de modo. adecuado: a saber, bese iviente def imo ef case expen fo gramatical de ln. propo tra lcterminadamente. general, presont dele propiamente’ no expe necesatiamente comentado, A este propio pas veces es completamente 0 ino es raed peneneen tampaco debe wales en ible Je ides de que indeterminado en su. genera Jo. propiamente-no-perci experime mos aqul ‘que nos ha sido dado efectivamente y ante wmediato en et campo del nada. generalidad de cs inhetente. Seguin base en si primere del conocimiento firme; per ms grende de todos los descul to modo ya lo ha hecho; me io de mente peculiar de uneee IFDITAGTONES CARTESIANAS 95 § LL. Bl yo pslcldgleo y el yo tescomdentl. La tom cendencia de mindo Si retengo de modo epokbd respecto del ser se me ofrece a fa mi 36 EDMUND HussERL. el valot de ser de todos fos hechos apercibidos mente, y también ct de los hechos de la espe- ieneia interior, Para mf, yo que medite, cl cual al etary petmanecer’ en la épokbé se pone a si mo exclsivamente como fundamento de valider de todas las vigencias y fundamentos objetivos, no bay, por tanto, 0. priclégico, ni fendmenos iquicos. eX el sentid. de le psicologla, esto es, como partes inte arenes de Js hombres pects’ Por. la épokbé fenomenolégica yo redoaco mi yo acura yan i ide pli el tno ds experiencia pricoldzica de mi misrro— a mi yo fen tmenologico-tascendenal al tino de la experience fon menolégico-trascendental’ de mi mismo. El mundo ob- vo que para mi existe, que siempre existié y exist ue sigmpre, poled cxstir con todos sus objeto, cextrae, como ya he dicho, todo su sentido y su validez de ser —2quel que en cada caso tiene pare m= de mt tnismo, de) en cuanto yo taseendentl tmerge inicamente con Ie épokié fenomenol cendental Este concepto de lo trascendental_y su conce cottelativo, el de lo trascendente, tiene que ser © do egcsivapeste de noes sinin de meedre filosdticos. Hay que advertt, x este respecto, que, ast como ef yo redocido no es ningsin trozo del mundo, fn inversa, tampoco el mundo ni ningsn objeto del mun: do son trozos de mi yo; no se los puede encontrar realmente {reell)" en mi vida de conciencia como una usserl emplea ta palabra areeits, en esie caso, ¥ n0 dea de sideracion eidética y trascendental que no apre- Hende ta viveneie como. parte del mundo real (real). Cl Torendhst, Der Welirheltebegrff bei Musser? und Heideeger mnece al sentido propio de tole i bien éste s6lo cobra y puede cobrar oe fo determing —-y con a set— de mi cxperimentac, de mi respective repre- fentar, pensar, valorar, hacer; también el eventual sen: tido de'una existencia evideatemente valida ha de rec Jo. precisamente de_mis propias evidencias, ds actor fundamentales. Si esta treseendencia de i) pertenece al que ports en sf 7 €8 ree fenomenolégico, i= problemas Gr'eh § 3 de estar Meditoctones