La Experticia

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República Bolivariana de Venezuela

Universidad José Antonio Páez

Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas

Escuela de Derecho

LA EXPERTICIA

PROFESORA: BACHILLER:

Abg. Ledys Herrera Camilo Márquez;


C.I: 28.200.666

San Diego; diciembre 13 de


2.021
1.- Realizar un análisis sobre la prueba de la experticia. La oportunidad
para el nombramiento de los Expertos y quienes pueden ser expertos, y
oportunidad para su juramento.

La experticia puede ser promovida y evacuada por las partes,


representando una forma especial de los medios de pruebas comunes por medio
de un encargo judicial previamente solicitado por estas y autorizado por el Juez
o Jueza; llevado a cabo por terceros que deben ser necesariamente ajenos a las
partes y como ya fue mencionado, dotados de conocimientos especiales y
experiencia empírica, por los cuales plantean las situaciones de hechos
determinados para guiar o, ayudar al desarrollo de la convicción del Juez o
Jueza, esto pues, considerando que el dictamen o lo expresado por el experto o
experta no es vinculante en sus decisiones, pero sí debe ser monitoread bajo la
crítica que permitirá subsumir lo manifestado dentro de la normativa,
verificando al tiempo su obligatoriedad, aplicabilidad y valor. Rengel-Romberg
explica que la influencia de este medio de prueba tiene su génesis en las
legislaciones europeas, primeramente, en el Código de Procedimiento Civil de
1836.

Hoy en día, la experticia como tal es llevada a cabo sobre puntos de


hechos, hechos que requieren una resolución, en los casos permitidos por la ley
o de acuerdo a la solicitud de las partes, siendo estas promovidas bien sea por
escrito o diligencia de forma clara y concisa (Art. 451 CPC) para que así,
posterior a ser admitida la prueba pueda procederse con la oportunidad de
nombramiento de los expertos, cuya hora será fijada por el tribunal (del
segundo día siguiente), las partes presenten la constancia de que el experto al
que designarán, en efecto aceptará el cargo, y se efectúe la intervención del
juez o jueza para su incorporación al acto, al permitírsele nombrar a otros en su
lugar, de igual manera, siendo por las partes o por los jueces, solo podrá recaer
en personas que bien por su profesión, industria o arte, tengan conocimientos
prácticos en la materia a que se refiere la experticia de forma obligatoria. (Art.
453 CPC)

Estos, son puntos que deben cumplirse, necesarios a tal punto que de no
cumplirse, la parte interesada podría alegar la carencia de estos y solicitar la
sustitución por alguien que cuente con ellos, y el Juez lo acordará así, en caso
tal de encontrar fundada la petición por la información que se suministre,
debiendo la parte proceder dentro de las veinticuatro horas siguientes a
nombrar otro experto en lugar del anterior, nombrando el juez uno en caso de
este no hacerlo.

En este, las partes manifestarán si están de acuerdo en que la experticia sea


practicada por un solo experto y tratarán de convenir en su nombramiento, de
ser convenida la cantidad pero sin determinación de alguno en específico, el
Juez podrá designarlo, si por otro lado, no se define la cantidad, cada parte
nombrará uno y el Juez a un tercero. Si la experticia es acordada de oficio será
el mismo juzgador quien nombrará uno o tres expertos considerando la
importancia y complejidad del dictamen requerido.

Respecto a la Juramentación, ésta se realizará al tercer día siguiente a el


nombramiento de los expertos por las partes, donde deberán concurrir al
Tribunal en la hora pautada por la Jueza o el Juez a prestar el juramento de
desempeñar el cargo de manera fidedigna, esclareciendo que, de no
comparecer inmediatamente, el Tribunal nombrará a otro en su lugar. Es así
que, dentro del mismo acto de juramentación los jueces, consultarán a cada
uno de los y las expertas sobre el tiempo que necesitarán para llevar a cabo las
funciones para poder establecer los lapsos con excepciones no mayores de
treinta (30) días.

Destacamos que, la experticia no es más que un simple medio de prueba, es


el aporte y el punto de encuentro del Derecho Procesal con el mundo,
mediante los conocimientos, ya sean artísticos, científicos y/o técnicos
especiales de los profesionales que posteriormente recrearán los
acontecimientos por medio de resoluciones que progresivamente irán
formando o influyendo en el criterio o convicción de los jueces acerca de lo
acontecido, siendo así como se configura como un elemento intrínsecamente
importante en el procedimiento tanto civil como penal respecto a aquellas
situaciones controvertidas susceptibles de ser analizadas por esos
profesionales que serán valorados en conocimientos bajo los diversos
principios que rigen las actuaciones de quienes juzgan ante la máxima de
experiencia y por supuesto, el criterio mismo, que definirá la apreciación final
de los resultados logrados y por ende, la resolución de los eventos sucedidos.

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