Este documento describe los valores, virtudes cardinales y virtudes teologales. Explica que los valores guían el comportamiento hacia la transformación social y el desarrollo personal, y que las virtudes son hábitos que permiten realizar obras morales perfectas. Enumera las virtudes cardinales de prudencia, justicia, fortaleza y templanza, y las virtudes teologales de fe, esperanza y caridad, resumiendo brevemente lo que cada una significa.
Este documento describe los valores, virtudes cardinales y virtudes teologales. Explica que los valores guían el comportamiento hacia la transformación social y el desarrollo personal, y que las virtudes son hábitos que permiten realizar obras morales perfectas. Enumera las virtudes cardinales de prudencia, justicia, fortaleza y templanza, y las virtudes teologales de fe, esperanza y caridad, resumiendo brevemente lo que cada una significa.
Este documento describe los valores, virtudes cardinales y virtudes teologales. Explica que los valores guían el comportamiento hacia la transformación social y el desarrollo personal, y que las virtudes son hábitos que permiten realizar obras morales perfectas. Enumera las virtudes cardinales de prudencia, justicia, fortaleza y templanza, y las virtudes teologales de fe, esperanza y caridad, resumiendo brevemente lo que cada una significa.
los valores son considerados referentes, pautas que orientan el
comportamiento humano hacia la transformación social y la realización de la persona.
¿QUÉ SON LAS VIRTUDES?
Para llegar a las virtudes tiene que existir el valor como hábito adquirido en la persona. La virtud permite al hombre hacer una obra moral perfecta y le hace perfecto a él mismo. la virtud es una disposición habitual y firme a hacer el bien. Permite a la persona no sólo realizar actos buenos, sino dar lo mejor de sí misma.
VIRTUDES CARDINALES.
PRUDENCIA: La prudencia es la luz que dirige
todos nuestros actos para llegar a Dios. La prudencia ayuda al hombre a poner atención a la voz de su conciencia, en vez de poner atención a lo que siente.
JUSTICIA: Es la virtud moral que consiste en
la constante y firme voluntad de dar a Dios y al prójimo lo que les es debido. La justicia para con Dios es llamada ‘la virtud de la religión’.
FORTALEZA: Es la virtud moral que asegura en las
dificultades la firmeza y la constancia en la búsqueda del bien. Reafirma la resolución de resistir a las tentaciones y de superar los obstáculos en la vida moral. La virtud de la fortaleza hace capaz de vencer el temor, incluso a la muerte, y de hacer frente a las pruebas y a las persecuciones.
TEMPLANZA: Es la virtud moral que
modera la atracción de los placeres y procura el equilibrio en el uso de los bienes creados. Asegura el dominio de la voluntad sobre los instintos y mantiene los deseos en los límites de la honestidad.
VIRTUDES TEOLOGALES.
Tener fe es aceptar la palabra de otro,
entendiéndola y confiando que es honesto y por lo tanto que su palabra es veraz. El motivo básico de toda fe es la autoridad (el derecho de ser creído) de aquel a quien se cree. Este reconocimiento de autoridad ocurre cuando se acepta que él o ella tiene conocimiento sobre lo que dice y posee integridad de manera que no engaña.
PROF. ANA CECILIA MAYURI REYES.
Educación Religiosa 4 año
LA FE: Se trata de fe divina cuando es Dios a quien se cree. Se trata de fe humana
cuando se cree a un ser humano. Debemos: ➢ Tener una fe informada. Para ello es necesario estudiar lo que nuestra fe enseña. ➢ Retener la Palabra de Dios en su pureza. ➢ Ser testigos incansables de la verdad que Dios nos ha revelado. ➢ Defender la fe con valentía, especialmente cuando esta puesta en duda o cuando callar sería un escándalo. ➢ Creer todo cuanto Dios enseña por medio de la Iglesia. ➢ "La fe es el comienzo de la salvación humana" (San Fulgencio).
LA ESPERANZA: Por la esperanza deseamos la vida eterna, es decir la
visión de Dios en el cielo. Es por lo tanto operante en la voluntad. La esperanza nos da confianza de recibir la gracia necesaria para llegar al cielo. El fundamento de la esperanza está en la omnipotencia de Dios, Su bondad y Su fidelidad a Sus promesas. La virtud de la esperanza es necesaria para la salvación.
LA CARIDAD: Se basa en fe divina y no se
adquiere meramente por esfuerzo humano. Puede conferirse solamente por gracia divina. Por ser infusa junto con la gracia santificante, es frecuentemente identificada con el estado de gracia. Por lo tanto, quien ha perdido la gracia sobrenatural de la caridad ha perdido el estado de gracia, aunque puede que aun posea las virtudes de la fe y la esperanza.