Fernández, María Soledad

Psicopateame : cuando amar duele y enferma, sé resiliente / María

Soledad Fernández. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Fun-
dación CICCUS, 2023.

196 p. ; 21 x 15 cm.

ISBN 978-987-693-961-4

1. Autoayuda. 2. Psicología. 3. Resiliencia. I. Título.

CDD 150

© Tinta Libre Ediciones - 2019

© Soledad Fernández - 2019

© Ediciones CICCUS - 2023

Moreno 2640 - CABA (1094)
ciccus@ciccus.org.ar
www.ciccus.org.ar

Coordinación: Alejandra Teijido

Producción gráfica: Andrea Hamid

Hecho el depósito que marca la ley 11.723.

Prohibida la reproducción total o parcial del contenido de este libro en cual-
quier tipo de soporte o formato sin la autorización previa del editor.

Impreso en Argentina
Printed in Argentina

Ediciones CICCUS re- Ediciones CICCUS ha

cibió el Diploma de
Honor Suramericano
que otorga la Fundación
Democracia desde su
Programa de “Formación en Valores
en el Mercosur y la Unasur”.
Círculo de Legisladores,
Honorable Congreso de la Nación.
sido merecedora del re-
conocimiento Embajada
de Paz, en el marco del
Proyecto-Campaña “Des-
pertando Conciencia de Paz”, auspicia-
do por la Organización de las Naciones
Unidas para la Ciencia y la Cultura
(UNESCO).

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Una relación tóxica, ciberacoso, un psicópata,
repercusiones en el cuerpo: estrés, enferme-
dades autoinmunes; amor, desamor, leyes
y abogados. Quiero contarles de resiliencia.
Resiliencia con o sin silencios. Experimenté
situaciones en las que muchas mujeres nau-
fragan, quiero darles mi tesoro más preciado:
mis aprendizajes, que aquí les cuento. Y no es
ningún cuento. Reíte con tu resiliencia, es tu
mejor amiga, no importa qué te haya sucedi-
do en la vida, siempre se sigue adelante. Hoy
puedo decirte:
«Dame tu mano, dejá de naufragar, pateá,
amá, reí y volvamos a intentar».

Soledad Fernández
 Gracias a mis padres.
A toda mi gran familia y a mis amigas y amigos,
la familia que se elige.

Muchas gracias a quienes apostaron por este

proyecto de publicar mi primer libro, a través del
financiamiento colectivo (crowdfunding):
Cristian Fernandez, Carlos Fernandez,
Romina Rodríguez, María Fernanda Bigozzi,
Claudio Czer, Gastón Maron, Gabriel Ruckert,
Camilo García y Martin D´Anello.

¡GRACIAS DE CORAZÓN!
 PSICOPATEAME

Cuando amar duele y enferma,

sé resiliente
 PRÓLOGO

Por eso, / me están sobrando los consejos, /

que en las cosas del amor / aunque tenga que aprender /
nadie sabe más que yo.

Julio Sosa
Qué me van a hablar de amor.

¿Por qué Psicopateame? Casi nadie admitiría que se deja o se

ha dejado psicopatear, ¿cierto? Algunos ni siquiera saben que les
están haciendo eso. Este nombre hila con sedosidad, crea una ar-
monía dentro del caos. Esa sedosidad se da gracias a la resiliencia,
mi mejor amiga. También, por mi tipo de personalidad, es una
“provocación”, una forma de decir: «Dale, vení, psicopateame,
intentá, animate, vas a ver que no puede psicopatearme nadie
más», es una forma de decir: «ya no temo». Y a la vez provoca
una mueca en la comisura de mi boca, algo de altivez y risas por
el susto vivido.
Elegí el nombre Psicopateame porque estoy incluida en él;
no me victimizo, ni me alejo, ni culpo; formé parte. Es una
historia sobre la psicopatía, la manipulación, los hackers, la

Psicopateame • 13
codependencia emocional, la autodestrucción y el patearse a una
misma. También, el patalear ante la impotencia de no poder salir
de un círculo vicioso, tremebundo, y las consecuencias de tomar
malas decisiones: las enfermedades autoinmunes (EA). Si algo
damos por seguro, además de que todos moriremos, es que lo
único seguro de la vida es que no existe nada seguro. Por eso,
cuando hablo en este libro de EA como una especie de autodes-
trucción, ¿les suena? ¿Sintieron que han actuado contra su vo-
luntad alguna vez? ¿Se autoboicotearon? Me siento con el deber
de propalar que las relaciones tóxicas (con otros o con uno mis-
mo) no solamente te pueden matar, sino que también pueden
hacer que agonices.
“Pateame” tiene que ver con esto mismo de patearse y dejar
que te pateen, sin poder poner freno, y aquí vale mencionar a la
tan conocida por muchas de nosotras: la dependencia emocio-
nal. He pateado y pataleado. Me han pateado de un lado al otro.
Incluí “ame”, haciendo alusión al amor o a la ilusión del amor.
Porque he amado una relación enfermiza más que a mí misma.
Amé. Aunque, en el fondo, sabemos que una relación así jamás
puede dar como resultado amor. Pero “ame” también es una in-
vitación a la esperanza, ¡amá!, que es lo más lindo de la vida. No
pierdas la fe en el amor sano.
De más está decir que contiene, en cierta forma, el adjetivo
psicópata. Pero, a la vez, elegí que comience con psico- ya que
proviene del griego clásico ψυχή, transliterado psykhé ‘psique’,
‘alma’, ‘actividad mental’; significa también ‘tratado del alma’.
Qué locos somos los seres humanos, ¿no? ¡Abarcamos tanto!
El mismo título lo demuestra: amor, patearse, patear, psicópata,
psicología, desamor, autodestrucción, dolor.

14 • Soledad Fernández
 Y aunque haya mucha literatura al respecto, les prometo que
mi historia, si la tienen en sus manos, no es casualidad. No hace
falta mucho más que mirar cualquier noticiero para ver maltrato,
manipulación, desigualdad, ciberacoso, violencia psicológica y/o
física, el ambiente en el que viven muchas mujeres y, en menor
medida, hombres. Pareciera que jamás nos enseñaron sobre el
“amor sano”, ese que te hace volar, pero con los pies en la tierra.
Nos enseñan a usar preservativos (en el mejor de los casos), pero
pocas veces se habla de relaciones amorosas sanas o de “hacer el
amor”.
La vulnerabilidad no aparece en lo que se habla, sino en los
secretos que se guardan, lo que callamos. Lo que se pretende
tapar, escabullir y esconder es lo que debilita, es lo que te des-
maya el alma. Por eso quiero que Psicopateame sea multiplicador
de mi voz en pos de: ayudar a otras mujeres, abarcar espacios,
compartir un bálsamo, entender, aceptar, saber las consecuencias
de las elecciones y ser conscientes de las compañías tóxicas que
elegimos. Hacernos cargo de nosotras mismas.
Obviamente, como toda humilde escritora, comunicadora o
cuenta cuentos, siempre me pica el bichito que me pregunta ¿y
si no se entiende la historia, mi mensaje? Dudaba si publicarlo o
no… Hace unos instantes, me llegó un mensaje a Instagram de
una chica con la que trabajé en una productora musical hace tres
años, nunca más nos habíamos visto ni habíamos hablado hasta
que leí su mensaje: “Hola, Sole. Quería preguntarte si recordás
que una vez te conté de mi ex, el que tanto amé y me hacía mal,
y yo quería volver. Eso siempre tilda aún mi mundo. Vos habías
mencionado un libro que me recomendaste leer y no recuerdo
el nombre, me habías comentado que habías pasado por algo
similar y que te había servido”.

Psicopateame • 15
 Ella se refería al libro Amores que matan de Patricia Faur, una
maestra para mí. Si ese mensaje de Instagram no fue una señal de
que tengo que publicar este libro, no sé qué fue. Y no creo en las
casualidades; sí, en las causalidades.
Amores que matan ha marcado un antes y un después en mi
vida. Con él empecé a entender, a investigar sobre diversos te-
mas, me sentía muy identificada y, sobretodo, me llevó a conocer
otras historias —algunas fatales—. Me permitió conocerme para
sanar mi corazón roto; cuidarme no solo de mí misma y del psi-
cópata, sino también de algunas cuestiones anteriores. Al final
del libro de Patricia Faur estaba el contacto de ella, que invitaba a
todas las mujeres dependientes emocionales a su grupo de ayuda
(a mis diecinueve años, obstinada y hasta engreída, no creía que
yo debía ir allí, «yo podía sola»).
No es la primera vez que me dicen que haga un libro de esta
historia particular, que haga un blog o que escriba artículos;
de hecho, he escrito en algunas redes sociales, poemas, relatos
—como quieran llamarle— sobre este tema y varios más. Por
ejemplo, cuando me dieron la primera gran oportunidad de es-
cribir en una revista importante, la de la Asociación Argentina
de Esclerodermia y Rayunad (A.A.D.E.Y.R.), muchas mujeres
—que allí asistieron— me incentivaron.
Luego de ese artículo para A.A.D.E.Y.R., muchos años des-
pués, se comunicó conmigo vía Facebook un hombre aproxima-
damente de mi edad. Este hombre me agradeció por el artículo
que escribí, por mi valentía y mi lucha. Dijo que haberme leído le
hizo muy bien y que sintió que no estaba solo, que a él le pasaba
lo mismo que a mí. (Yo, totalmente impresionada de que tantos
años después se hubiera tomado el trabajo de buscarme y escri-
birme, me sentí halagada). Mi voz tenía repercusiones positivas.
16 • Soledad Fernández
 Parar finalizar con estas dos simples anécdotas, les doy la
bienvenida a Psicopateame. Cabe destacar que el título no tiene
el afán de promover dejarse psicopatear o el psicopatear a los
demás. Con este título pretendo hacer promoción de la intros-
pección (más que enfocarte en una pareja psicópata —o no—,
enfocate en por qué elegimos ese tipo de relaciones), reflexio-
ná, valorá el autoconocimiento. Claramente, no soy la misma
que hace diez años; pero aun así, diez años después, aquí estoy.
No por un psicópata ni por un hacker ni por la dependencia
emocional ni por las relaciones tóxicas ni por las enfermedades
autoinmunes; estoy acá, escribiendo estas líneas, para vos; para
que, quizás, una historia que se puede palpar, bese ese corazón
despedazado. Y porque sé que los libros llegan justo en el mo-
mento en el que los necesitamos.

Escribir puede ser llevar un diario íntimo: la escritura

cura. Relatar-nos nos alivia. Las palabras pueden ser
orales: alcanza la escucha atenta, amorosa, capaz de
despertar la actitud resiliente de quien sufre […]

Procesar las emociones y ‘traducirlas’ en palabras pue-

de ser muy sanador. El psicoanálisis es la posibilidad de
sanar, mediante el encuentro de la novela personal […]

Diana Paris
Mandatos Familiares

Psicopateame • 17
 ÍNDICE

PRÓLOGO.................................................................................... Pág. 13

INTRODUCCIÓN........................................................................ Pág. 21

MI CUENTO DE HADAS. MI PRIMER AMOR....................... Pág. 33

BIENVENIDA A LA JUNGLA.
COMENZANDO A VIVIR........................................................... Pág. 37

EL PSICÓPATA............................................................................ Pág. 45

SE HIZO LA LUZ......................................................................... Pág. 53

EL HACKER. THE DARK SIDE.................................................. Pág. 61

MI DROGA, MI AMOR............................................................... Pág. 81

ME ACOSTUMBRÉ A PERDERME......................................... Pág. 91

LA PESADILLA CONTINÚA...................................................... Pág. 99

DE PROSTITUCIÓN, LEYES Y ABOGADOS........................... Pág. 109

NO LLUEVE ETERNAMENTE................................................. Pág. 115

¿EL FINAL? SIEMPRE UN NUEVO COMIENZO................... Pág. 125

Psicopateame • 191
TU AMOR, MI ENFERMEDAD................................................ Pág. 133

DE EMOCIONES Y ENFERMEDADES AUTOINMUNES..... Pág. 143

DOCTOR, ME DUELE TODO.................................................... Pág. 149

LO BUENO DE TOCAR FONDO

ES QUE SOLO QUEDA SUBIR................................................. Pág. 165

MI CAMINO RESILIENTE (Y SONRIENTE)........................... Pág. 179

RESILIENCIA SIN RESISTENCIA............................................ Pág. 185

192 • Soledad Fernández