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    Bandieri S Historia de La Patagonia

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    [as problematicas del conjunto. Asimismo, pret ‘mirada superadora de las fronteras entendidas como to las que se crearon por imposicion de divisions vas ala hora de formalizar la soberanta territorial de los” neste caso Chile y Argentina —, coma aquells mas difusas ian diferenciarculturas aparentementeirreconcliables, tada "fronters interna” entre Ia sociedad blanca y la ‘resumen, se trata de una obra de sintesis del ‘ construido desde y sobre la regién alo largo de muchos on la preocupaciSn constante de incorporar nuevas aes que cambien las miradas muchas veces generaizantes x nacional, Derrumbar fronteras y destruir mitos sobre ‘entonces parte sustancial de su objetivo, Susana Bandieri Editorial Sudamericana HISTORIA DE LA PATAGONIA ‘recor, Joss Care Chararonte 1 al sleance de un pce amp, que exces ee eStana pare gos lo ntuya. una serie de Obras Gobre Ios pinelpaes acres tn gue se aune dvr pasodoargorno. Eas aborars aus ‘Stor en tame sonapesmert cea sceeandose a preset oa ‘Shiu cub a storie toda do pals cer oe tre checrin wn ness scutes ol cnsenen ‘bre sv camo, aa! como, sve oves ranges prescodran do [8 exci ‘Smuna os rebar romsonaer. naar enc mate DOD tea eur de eva longer sopra a uncaring Pftine cd qucade, cago Guo i hasor, mo toda Gacpna, 380 Pos Jee un congue pais de aber ria su bjt, se como una sr do nen caro tan mata or prec nls dao ie Se ‘je sess pooninasdrfores ro lmao eae Susana Bandieri HISTORIA DE LA PATAGONIA EDITORIAL SUDAMERICANA BUENOS AIRES. Titi den Puagoia— Ie. — Beno Ae: Sutaneriana, 20, {ep 2iaiecm ina Aen) |. Acne ania To i de cabs sane Jt a pln no pode reduc todo em pu, aed lg eel pn ws te ie ope os a Sng forms por stogin ui. nex mena, min ere ‘tl sepa: ec go> Que cho dpi gus prone ele 11.723. 0 200 fase! Sudimercane SA® ‘uonbere 1531. Buono Aira wore edendamercina.comar ISBN 950.07-2217 ‘Los mapas includos en ex publican se stn ae caograeofical ules por el FEN » avs del IGM 1 conesponden sl expedient mimeo CGUS 0395/5 de febrero de 2005 A Tomés, Juan Crus, Ulises y Violeta, nacidos en la Paragonia Para que el conocimiento del pasado os ayude a pensar lor problemas de su preiente. AGRADECIMIENTOS Ese esfuerzo de sintesis no hubiera sido posible sin Ia ayuda de un conjunto muy amplio de colegesy amigos. En principio debo a los serfs eal eu inven igesten bes Eleceris e ba Pee gonia, en el mareo institucional del Centro de Estudios de Historia ‘Regional — CEHIR— que dirijoen Ia Facultad de Flumanidades de la Universidad Nacional del Comahue, buena parte de lo que sé de alla y que he tratado de volcar en este libro. Large tiempo de traba- Jos compartidos e intercambios de saberes me han permitide cono~ fr su produccién en profundidad y valorar sus exfucrzor como tstudiosos que sufren el enorme pero de las distanci com otros fencros de produccién académica, en el veno de univetsidades « Insdtutos disperses en el dilttado cepacio patagonico, como son las tuniversidades nacionaler de la Patagonia Austal y de la Patagonia San Juan Bosco, con sus distintar sede, y l Centto Paragénico del CONICET —CenPat— de Puerto Madzyn, en la provincia de CChubut. Muchos de ellos son investigadoces formados, otro con doctorandos y macstrandos, algunos bajo mi diceccién, que genero- Samente me permitieron willzr sus avancer para volearloe en ete texto. Sera largo mencionarles aqui, pero tedor ellos figuran cua do corsesponde en el ensayo bibliogrifico que da cuenta de los textos consultados, por cuanto sus estidios consituyen, a julcio de IE autora ls aportes mds novedosos al campo historiogrifico regio salen lor dleimor afos “También debo agradecer a los miembros del CEHIR que me acompafian diarlamente en Neuquén: Graciela Blanco, Joaquin Perren, Lisandro Gallucci y Fernando Carullo, y en Bariloche, Laura Méndez. Todos ellos colaboraton acercande. materiales ¢ informacién de mucho valor de nis propias lines de investiga: n cif, y le cern enna eaten de spoyay coutnclén que apreco sruchtime, - oie indys Varela excuchs pacentemeare la ecura de algunos seamos det epecilidad y spor valioms sugetencns,ayodando SToage vclucnron tore, con anu acta generac y dedi adh que vloro cspecaimente! Agree en particular + Fabide ‘in bu dedicciony emer, que oritaron en valiorsimosapor- $a sis 7 bibhogethces gus carucervy sebemner ol ‘Tajo. También Ral Mandei ley lov cxpilon que comperen Wae'temas de esadio y tranquil mis preocupaciones. Jost Carlos Chinramonte, en su condicign de diecror de a caleccin, ‘pats alos opiniones n cine ena. Por6lGimoy ogres WT Gerardo delong, mi compare en la vds, que me ens Couce l Baragueia: pickets y Korean ses rt Sho de lo que asut se dice Angus debe rodor le nombrados Srna pre de or eutados, lo que ag edie ex de exclusiva ponsabilidad ‘isin Lun Jo yA, agate iconic wei ieee eg alee apoyo a lo gue hago. Ep. ‘Tic eva Pura que lan gencaciones venders de patagGnicon = Seman formande pave de una historia que loscontene parte =x fer de una historia general del pis que los compromete con el Es 12 Inrropuccion (Cuando el director de extacoleccién me propuso escribir una histo- sia de la Patagonia, Ia idea me parecié importante por varias r2o- ‘es. Primero y principal, porque no existia todavia una obra que, tomando como base la produccién académica sobre la regia s¢ proyectse con modalidad de sincere al dmbito nacional pata un onjunto de lecrores que exceds ere miemo campo, Si bien hay une poco trabajos de cariccr integral para el espacio patagénico, que ‘encionaremos en el correspondiente ensayo bibliggrifico, la ma Yyorla de ellos estin elaborados sobre Ia bare de fences secundatas, {5 decit, sobre variada bibliograis producida sobre la repisn en dlistintas épocas, peto particularmente antiguas, Esta obra tiene, frente a aquellar, fs ventaja de dar a conocer las producciones mis nuevas, las que, cari siempre desde el mismo émbito regional extin aportando nuevos conocimientos pars la reconsrruccign de un pro- {550 histdrico mucho mas rico y complejizado, En ese mismo senti- do, tiene también Ia ventaja de superar las tradicionales “historias provinciale”, construidas generalmente con gran erudicidn, pero ‘que no aleanzan a relleja cabalmente lr probleméticas del conjure 1. La cuestion se agrava en el caso patagsnico por euanto las pro- vincias surgidas dela anterior divisiGn administativa de terrtorios Iicionales no tienen limiter que respondan 4 critesio alguno de fincionamiento econémico y cultural de las ociedader involucrs- dis, Ellos fueron fjados por una ley nacional dictada en Ia segunda sitad del siglo XIX a parr de accidentes geogrifices y eazos cone vencionales, como paralelos y meridianos, erearamente reconocides or entonces en el terreno. Estos imicer, de hecho, de poco sirven ‘tla hors de intentar explica el funcionamiento de lo social y dela infinidad de relaciones que loz superan. B Un aporte importante de esta obra es entonces derribar sfrontera”, canto las que se crearon por imposicin de divisiones ceerecte vas la hora de formaliza la soberanta cecricorial de Teeebe como aquellos me difusas que prerendian diferenciar tes aus aparentemente ireconciliables, como la llamada “fronce~ Suintcrnat entre la sociedad blanca y Ia indigena. Ambas, curiosa- FaeteTFancionacon por mucho tiempo en el proceder de los ests tienes como verdaderas vallas mentales ala hora de aproximarse Comprensivanente al todo regional. ‘Gon objeto de superar tales limitaciones —o all menos en el intento de svanaar hacia ello, ete libro incospora una novedad rm respecte al teatamiento de la historia indigena, SUESGio cn las ulummar décadas se convirdd em materia de procs 205 fn para los hstoriadores. La influencia del pensemiento posi- Perse Gal siglo XIX, que hizo del documento escrito la fuente MEG pottcxcelencia, redujo por mucho tiempo el estudio de foe pusblos originacioe a arqueélogos y antropélogos. Ello desivé 1S. Eifecho de que la problemética indigena cuviera escasa presen- SAS as coleccloncs dledicadas Ia historia nacional, apareciendo ca ST unpes como capitulo intcoduetorio y desvinculado del con- Fahie general, Machas veers, lor espacios ocupados por las socie- Wie indigenas no mostaban relacién apareate con el mundo Trento y ie Strontcra™ entze ambor ae constinula em an muro que eatsied separaba a estudios y estudiosos de una y orra temitica, ‘Bianco auc los temas selativos a los espacios fronterizos apenas si fe wezban, Enc cucstibn, sélo més recientemente revertda, debe attic buirse sia dua al'peso que la historiografla del siglo XIX cuvo ve Gn algunos casos sigue tenicndo— en la construceién de una Tiere eeonal encertada en loe limites errcoviales de domi Bie teenal, con una sociedad culcuralmente homogencizada Ciropelsada por efectos de la inmigracin c identificada con el Gtoyeeto de Nacibn emergente. Esto hizo quc la historia de fos Prebios indigenes fuera sblo un capitulo iniil y superado de exe Prisms proceso, lo eval implicaba, de hecho, aceptar su margina- Indad hbsgrica y su tol de “vietimas del progreso”. Asimismo, e Tio bajo su dominio siguié llamindose “desirto", lo. cual (Eibign sopone aceptar «1 sentide que los idedlogos de 1880 14 buna eer cams se petoctucrtone sate 0 sige To mia, cpa te sian Tas brs, donde Ix historia Blanes Ia indigena conven pardcae, Siertecncioteccar eupeased! coo Mies Arar esmtoyiege a geome See Seeelee ci acter Suateaaieta tietenbntenois eageeisinaes ace ‘Eien ene cw Agena Cle cl conven Se fees npn Slee goin open Sect dave Seema COO Penryaeteetay a aereres eicemereeato a sini edn ou ey rs uae cea a clenched Piles keane oo eke {ep mannan aco ma et ee Si fepeces asa tlica igeistomctbeg oy epeety Citrate yaicreatgreise cas Bes Ife erdraron over pci feria por rea See racket eegintged pieced oon te ‘Specter Boal aiconts lage dogo 0% tea ee ee Boecleaey dl ats rots dela deemende his rhc! en ss i et Gaga aoscnee seein ee ere eae eel pee eel ee yeti ai oe eee See eee eee a ee ee eee Gee er age ees, ee ee Bae ant dgcpene acca ey de Samia careers) in pear eee eer Ste ee ee oe 15 mica producida en ese mismo sentido, donde ganados y captales sic po cea de a evenacon sina el rmoelo formate Elos dominante cn fs Argentina, Nede més lejos de SER ce muchas drcas de la Patagonia, como se demostraré en Sie warbao. ‘ ee, men, ta ex una obra de sntsis del conocimiento consecide dente iaregidn al largo de michos ais, pero con la eden constant de incorporar nucra Investigaciones que eae oraplejicen las miredan muchas veces generalizes de Hn eee Derrumbar froncers y denrte mits sobre la nmot Tas entonces pares wistancals de su objetivo. Importante para el lector Los cndimor como tehulche, mapuche tn van plural: Noobs seen pe impucseo porta contmbre aslo hemos amido em er pinimo nombres dives de vgn ndigen odeber acca pangs oc rata dengue eo tenn estar 0 0 TUTE, Poe Sicae ene ar distancia y de un Inga a oto Sie cargo eno dlacnt sa general mart lr xin Sot nico austral, Bee (GEOGAAFIA E HISTORIA: EL. TRABAJO INTERDISCIPLINARIO ee cere een ee aan eet ee ese fara eae eas ey eae eee tiga eho acide patanmente cost ee eatied ena eaamenpoesae eaten estes eis eget ee eat yar ee ee caress nese ovarian ora (hee area mae Oe eyeee Mis coca teeter pees emeaoae cae memaneeecaa eee este ae erates aca eae ieeeal Peon a ine seer cenecse oa ee ee prreneeereee tae te ie sundrens ms ge” ep ced Paes tam crana muna wales, ie peace a ret diversos, En el marco de esta perspectiva, el pensemiento “geopolitica” cobré durante varios aos una dimension especial, alentado por permanentes hipétesis expansionist y de conflicto ntre pals vecinos, Las fronteras fueron consideradas dreas de Clausuts del erritrio estatal a la vez que zonas siempre poten- Cialmenteeriicar y de censién, cuestiones éstas que se repiten, en ‘lao patagénico, tanto en la bibliograa argentina como ca la chilena Distintas versiones renovadoras modifican hoy extas concep- cones, donde los limiter naturaler ¢ instivacionales —estatals, provinciales u otros— ceden paro a una vsin mis dindmiea de la {fociedad, particularmente en las ieeasfronterizas, donde los suje- tos involucrades participan de un mundo complejo de relaciones construidas en el proceso histrico, que casi nunea responden a los Limite reritoriales que los respectivos Estados nacionales intenta- ton imponer. Esto implies, ademés, hacer uso de una renovaciSn, importante —-auinque no generalizada—en el campo de a geogra- fis, donde la eogign se concibe como un “sistema abierto” a cuya ‘comprensién se arriba mediante sucesivas aproximaciones que en- Serran en su eonjunto la idea de toralidad, Es en este sentido entonces que Is breve descripcién fsica que incluimor en este capitulo sélo tiene el objeto de constituir Sha primers aproximacign descriptive a espacio regional patags- nico, Es sobre ese escenario bare donde jugerin luego los actores Gel proceso hisérica respectivo, lo cual permitiré observar, a t= ‘és del estudio de las actividades econdmicas, ln organizacién s0- ‘ial del espacio resultante. Es decie, se parte de considerar que el ‘pacio no alo funciona como soporte inerte de-los peocesos s0- isles, sing que interactda dindmicamente con ellos constituyén~ {dose tn une de sus insumos bisicos. A ni ver, el propio expacio tulve las modificaciones que el proceso social le impone. Desde fate punto de wists, I historia y In geografla pueden y deben Sportarinterdisciplinariameate al conocimiento de lo socal 28 Castruto 2 Los rursios oniGiNanios ‘ARQUEOLOGIA DE LA PATAGONIA: SITIOS, POBLAMIENTOS ¥ CULTURAS “Los primero af do la [los y Héroe de lo tu hes] pasaron igorados en la soledad de desiorto. El ‘odor fue su estén, fe abrigé on su noe lana de {quanaco, le Rizo conocer loz senderoe de a mona Eta sigs ereiendo, vent of aro y la Hoch (u) So ‘ision ha terminade, Na hecho ol hombre aborgen: he {ators hurnana le Ma enseiad ol Se0zt0 do Ia com buston. Le ha dado las armas, fe ha dado abrigo de isles, le ha dado albergue. Ha removise para odes (os obetculos do Ia ngrata naturales y dicho: Ande: ‘i horzonte e tye" (El"mito ea ereacon” sgn Ra- Ini Una, Una raza que desaparece. Lox indor Teh thas, Bvenoe Ares, Con, 1094). El poblamicnto iniial de la Patagonia recoge antecedences de una antighedad que ronds lor 13.000 afos. De diferente origen racial Y étnico, distntos grupos habefan legado desde el norte al exe ro més ausieal de América, presumiblemente provenientes de ‘ia, ances de que la comunicaciSn entre los continentes se cortara al focmarse el estrecho de Bering, 0 aribando por mar desde las 29 conas del Palfico 0 del Aslintco, to Gime segin lar teorlas ‘Sigrtorias mio tecienter que sortienen que las evidencias de ublamicnr mds antiguas se encontacan en la eas del litoral Porting antico, sora sumengidas. De todas manera, abela ad dum proc enn gd wincld como despa ‘Tica de peaetor grapes humanor que buseaban nucros car side caus de fos grandes mamiferos herivoros de la Edad de FRito, como.el milodn (pesezoro gigante que superaba lov 3 me- tron de larg y 13 de altars, exsnguldo hace 10,000 aos) Tiare, 1 eaballeamescano y el mastodontco clefante america: Foe diergncins dala exiene pect de [a cighcdad'y procedenta del poblamiento eno reals evidencias ae todo dpe Grqucologicas: genética, biologics, et) recogidas $e io capecastas pareeen confirmar que la colonizacign del Eetromo mds aus del continents americano fue parte de on fiasco may complejo que comena® a fines del Pleistoceno, Efgndo las grandce masas de hiclo comenzaron a reirarse, vole endo el ella mucho ms benign y favorable par i insta on humana El allan dearefntor de to humano,asociados i tvwos dela mogafauna que se extinguié al final de la aime Giincién face nos 10.000 afios, ai lo indica. Hay un consen- Siigeneraizade acerea de Ia importancia de los grandes cveor de see tn la definicion de las zonas caracteristcas del poblamiento $erhipinice de la Patagonia: una septenttonal, deade los clos Timay’y Negeo hava lar proximidades del fo Chubut; una cen- foil eotee for sls Chub y Santa Graz y, finalmente, una me- Sdlonaenece este iltimo Y ef esrecho de Magallanes. Esto no implies de ninguna maneta, derconoces los contacts interse- ‘Sunes cote los grupen sobre todo «parti dels tltimas inves ‘Siguiendo a los especialistas, pueden distinguirse al menos acs ctpas en la histori sociocultural dela Patagonia previ ala Iisgads de los europeos, Eso no implica nivlesevoluivos de de~ ollo, De hcciey no hay socedades mis rimpls que axas. Los “Erorcllor tcenolgicns hbrian sido, en cada caso, los adecuados furs obtenct ls revues nccesaros ara la supervivencia, Ta primera de cas capas ae extenderia,aproximadamente, 30 \ desde los 13.000 hasta los 7.000 afios antes del presente (A.P.), undo pequefos grupos cazadores y recolectores habrian ursdo Jos refugioe rocosor para protegerse de la intemperie, mientraz segulan rutas diversas en busea de agua y alimentos. Posibles ins- Glacioner de permanencia anual se han encontrado en Ia Patago- hia Feptentrional, particularmente el sitio de Monte Verde, a 35 lim al sudoeste de Puerto Monct en la actual Republica de Chile, con una antigiedad que supers loz 13.000 afoe AP. Allie encom avon rertor de eatacas y pieles que indican In construccién de ‘iviendss, utenilioe diversos de hueso, madera y picdra, sl como Imuestas varias del aprovechamiento de los recursos terrestres y fraritimos que Ia ubieacion permitia. Otros restos axqueolégicos Go gran antigdedad (12.600 Ar), que incluyen instrumentos Iiicos eealizados sobre lascas grandes, raedetas y cuchillos aocia- dos 4 estos dscos de fauna moderna y extinguida, se hallaron al fir del rlo Deseado, en los aiveles infeiores de la Cucea 3 Lor Toldes. Asimismo, en Ix meseta central santacrucena, el sitio de Piedra Museo permitiS extract rertor ayo Fechado data de 10.400 ‘AD. Las investigaciones regionales que se vienen cealizando sste- tndticamente desde varias décadas aris han permitido para cl drca de Sanca Cru Ia obtencién de secuencias ronoldgicary euleuraler te gran valor clentifice, Tambien la lal de Tlerea del Puego segs ‘ta ccupaciones de mis de 10,000 afioe de antighedsd, como de- ‘nuestra los hallgos relizados en los niveles inferioes del sitio Tres Arroyor, al norte de Ia sierra Carmen Sylva, donde se asocian arefactos de piedra y testos de fauna actual (uanaco) y extinta (milodén y caballo americano). Namerosos restor de "conchales™ te fect geared ere ea ei peatveti ta ‘oluscos meacladas con artefactos de pied, restos de cenizas y bhuesor de animales han sido encontrador en la costa sur de la Jslay en el drea del canal de Beagle. (Otros lugares con evidencies arqueclégicas antiguas en el sorte de Ia Patagonia —cntce 10,000 y 9.000 alos A.P.— son las cuevas Epulldn Grande, Cuyin Manzano y Trafuhcercanas al Curso elo Limay, en la actual provincia de Neuguén. Los estratos mas. satiguos de cits sitios guardan euuesteas de [a fabricacién de arte- fauos Iticos para la caza de animales y del uso de pigmentos, incluyendo las pincuras en prictieas funerarias. En Traful, ademis, 31 sc encontraron cuentas confeccionadas con valvas de moluscos de. Siigen occinicay otros elementos similares a los que presentan los Sides eeasandinor, lo que permite suponer felaciones tempranas a tino'y otro lado de la cordillers, En todos los casos, parece trarase {Eo grupos domésticos de exploradores que permanectan durante Sigfin tempo en estos eefgios rocosos. Mas recentemente, en el Flo arqueclbgico £1 Trebeb,abrigo rocoso de 22 metros de frente 37 de profundidad, ubicado en Ia base de un cerro de rocas vol- Uaniensa la vera de i laguna del mismo nombre, dentro del ejido Grbano de San Carlos de Bariloche, se encontraron evidencias de Tractvided del hombre, como lascar (desechos de la fabricacién ide clementos de piedra), un punzéa de hueso,espinss de pescado, ‘moluscos del Pacifico y restos dscos de los animales que fueron ‘ante dela dicta de los habitances del lugar: aves, un zorvo extiazo, Ta cicevo més grande que el huemal y, lo que es muy importante, Fragmentos de huesos y un diente de milodén, lo eval permice fogoncr una antigtedad del sitio igual 0 mayor que exe tiempo. Tae hacson, con visibles hucllar de haber sido cortados con una femamienta de pieden, estaban aprisionados entre [os carbones de To que fue una gran fogata, donde el gigantesco animal habra sido sada con el euero. ‘La siguiente claps se extiende entre los 7.000 y los 2.000 flor AP. Los grandes cambios ambientales teminaron por retract Ios hiclos del continente, aumentando los tetritoris habitables y voreciendo cl asentamiento de poblacién con caractersticas re flonales A esta etapa corresponderian enconces las primeras con EXntraciones de pablacign en las Areas més favorecidas, como las famodiaciones de los ios o las costas martimas. A los grupos de Cazadores y recolectores descriptos anteriormente, se agregaron ‘Shtonces cazadores especializadoe que hicieron de los grandes ani- ales, eopecialmente el guanaco la base de su aimentaci6n y sus Tonto, Else de arvefactorIiicos de mayor complejidad técnica [Uineaté considerablemente, apareciendo puntas triangulares Spedunculadas, aspadores, peforadores, cucillose instramentos SE motienda. Las mismas cevas antes mencionadas mucstran, en Sur distitos pisos de ocupacién, signes de esta colonizaci6n con fgrupos cazadores especializados. Para esta Epoct, e& probable que muchas actividades no se 2 relies yu en os abrigas rcotas sno en zonas abierat,genert- Titodove el uso de paravienos, Nocrascapas de expansion pats cen haberse producido hace 3.000 shot hacia las drew de mesct, Sprovechando cusos de agua de régimen anual come los stroyos chi Leu Comallo en ar cerns de Plcaniyew en la acl provincia de Rlo Negro, tal como lo demucstan lor iis de Cu fu Seria y Cueoa Visconti, entre ottes. De ee petiodo ex tabien tn tito srqueologic ubicado on Chongue Hatel en uaa euere localiza t35 kn de a actual loaded de Lat Lajc om la poovin: Gis de Neuguén. Ocupado desde hace unos 7800 ator, exe sito fmuosia In imporancia que tivo In actividad recolecors en al igre han cond mucha ita de mole con estes vegealescorespondiente a lor piftoncs de araucaria que abundan Eee as Senet Te aime capa se etiende entre los 2.000 aos AP. y el sislo XVI Loe grupos ater dcfinideregionalmente habran toni- do usa mayor expansion ceri, inrensificiedace ln elaciones invereineat los lnercambis de toda tipo, Pendurabany da ne tango, diferencias imports, como fueron la idiomdtcas les vinesladas con el contol de decrminadortesitorcn, con dere= ‘hos reconocos sabre stor de exza, casos de agua, efupio, te. sro es lara mucsta dela caencla de organieacloncs tecales cstucturas de poder mds complejas que lar erginalmence sapucr- tas Aparecen aquf armas nuevas como el seo yl lech y 2 uso dela cerkmica, esto imo demostrave de fequerimientos ai teentcios expecinles que supontan dearrallostecnologicesespect- Ficos para el manejo de aclary el uso de combustonesadectadas pare la regulacin de las temperatura El erecimienta poblacional fe manila en la aparicion de mamerosory varader silos a= {ueol6gicoe, con stenallos diveres inaumcables muestra: de devo eno pop de grande ato vide chaman- te que variaban su localeacon anual entre io de invernada veranada_pars un mejor aprovechamicaro de lor recursos. La undancia de guanacon permiis a extor grupor aprovechas terme como principal limento, coero pur ln confecion de vestments todos, y sus ses ycendoncs pars la Fbriacion Ck vesindas stat y buco, Tambien claves eae lee gran des animalerproporionaba carn, gram y huevo sendo ut plu= 33 ras muy codiciadas para Ia fabricacin de tocados. En forma si- Tmaltiney, los pucblos canoeros del extzemo sur patagénico bactan cl mar su principal Fuente de supervivencia. ‘Dade ol cardcter de alta movilidad de estos grupos origina- sos e¢ muy dificil encontrar restos de arquitectura pero s{nlume- Fons pinturaselaboradas en las cuevas que regularmente se usaban, ‘SSino'refugio, en especial en temporada invernal. Estas pincaras SGperres dan’ cuenta de Ia vida doméstica y cotidiana de estor pegblon, Lx més importante de estar cepresentaciones es la llamada, ‘ene de et Manos, ubicada en ol cafadén del rio Pinturas, em bx Gienea superior del ie Dereado, en el noroeste de la provincia de Santa Cate, cayos niveles mis antiguas corresponden los 9.300, ROSA En che sitio, declarado Pateimonio dela Humanidad por fs UNESCO en el afio 1999, se encuentra una valiosa serie de ‘presenaciones pietéricas alo largo de més de 200 metros de pa- Telecom, Lar mis antiguas corresponden a los negativos de ‘anos humanas y escenas de caza de guanacos reproducidas con Gan fidelidad, incluyeado también motives gcométricos sim Site En ecapas posterior de ocupaciém se representaron otfO+ Enimales como svesteuces, lagartos, huellas de puma y motivos Sbstractos, valiéadose de colores muy vivos obtenidos de pigmentos minerales y adherentes orgénicos {Entas coloridas imigencs se repiten en otos sitios ocupados en primer milenio de la er cristiana, asociadas a [a cecimica y alos festor funeratios, lo cual permite dar cuenta de la percepeién del ‘Hunde de lo sagrado. Aun cuando no quedan demasiados restos Gqueoldgicos que permitan reconstruir la cosmovisin de estos Pubbloe psu concepeién de la vida y de la muerte lo cotidianey lo Eigrado xparccen permancntemente ligados en las formas de eepre- Seaeacibn del arte rupestre. Los primeros reistros de empleo de la Sifseeria nurgen tardlamente en la regién, entre los 1.500 y 1.000 Shon AP. y sus manifestacones ms importantes se encuentran en Thea sole septenctional de la Patagonia. Esto se deberia a la in foencta de pucblos sedentarios ubieados en la regién de Cuyo, en far nettar ceneales y en ol lcoral, lagares desde donde se habla Uifundide la técnica cerimica. El ascendiente cultural de los pucblos ‘iblendos en el occidente cordillerano habla incrementado la sili- ‘ln de vasijao de cenimica a partir del siglo XVI 34 “eadicionsimente lot argueblogesreconoctan, en tdi tor gentle In frewacl de Induncias de wrecllin 9 ans ed eaten 9 soci extol caetno suey to Peep ‘Sacre partiendo. del supuctio de que habran peemarteide das sevaceaop mies adnctl Nejoeeweccano ys Sines, na mayor uration faci nce Se genes press te evidencls an sibs dra on tanvo que hoy se econe. Gia presencia de Wereambios rogulares coer les Yonas mart lied cone lotree arse oe pea ‘tutenliog vation dels bles cancers (pendicnte cach tary cuentas de wala pants de aepény ste), provenientss tanto del Atlintico como del Pacifico, en el interior patagéni Sir Ouro canto auccde con lor Sater anqucolopieee Gest dc ‘Scar pgmentor minecses, ote) que prucben la exsenca de esis aries de Interamibla ence lu ccmdeses ooo dslinetor dela menta ioe pablo den eves Por lo menos See's aps Seton, Sedo de 8.000 aos APs ee a dt eet ator Viet calavaics +0 fneremeatton notablemiate co’ enpes terimicos, snededor de los 1.500 ator A.P En el norte dela Fetagonta: por su parte, ls ectonanucolégicos mucsran cv demas de tnayorehcoatacton con grapes lnstaladns cn as es pa yeeros iaece "Acomienaos de ser cana pueden observare enol con eS ae ta por loc arquedlogssehtchos, propa deo lamas tel i are ae amare ee frie y los mayors coatacion Tobcebr enol rea concn Y onerca Tiers dal Bing en las denominaciones con qe tual Then se conace «le dos grandes grapes indigenas des Pago. tis apensons pari de 28 momenin Flordos yeaa, 17 sVecte del coven dete In la de Chllod ave exten’ tustal dea Pragons clon, fron el bite de oxos parlor trmpistsf ans og none guard aleve ematee as ‘Tort, slompec en ees sccdental de a cnrloce se practce bans agictlars dvesifeads que no se habla genetics come caltivo al conjnte patagésic, entre otes oa pot ls 35 ‘eanctersticas del terreno. En Ia antigua laguna de “El Juncal”, en Gites de Viedma, la actual capital de Rio Negro, un grupo cono- Side tomo erdneos negros, peoveniente del sur de Brasil, habla ya Gesapateetdo ala legads de los europeos. PUEBLOS CAZADORES ¥ CANOEROS. ATEHUELCHES Y ONAS: LA VIDA EN TORNO AL GUANACO Hacia la poca de I conquist pucde hablar entonces de la predo- ihuncla Ue grupos de cundoresezpecializados, mayoritariamente lie alte ycorpuemten, que Balaban dina lengua sgn Coe ea al aur dal trea de Neuguée, otros cazadores, pos bictncateemaparentdos con los chono del Ira pacific, eran los vgs “bene del esc” on lengen mapuche—, ‘del Nabuet Fiero notson de piegua que habitaban las isle y lx argen cee Sonal del gran ago, llegando posiblemente por ol sur Teta ago Futastquen De menos natura yeuclto e- sere cet pucblos tenan au propia lengua y se caracteriaban Seen, tate canoss compucstas de tres tablas de aleree cocidas Pot Gorton desarmarse ficlonent, lo cual les permitia navegae Y SGHSANE cnere los lager cordilleranos. Al norte del lago TRBERELEgsen en el drca de predominio de la araucaria o Hehtea, ac ubieaban los pehwenche, que se alimencaban bisiea Bohs raco de esta planta mllenari, En la costa meridional TET feaa del Fucgo y en as ila alder, grupos de canocros fSvtas stspeado sar covtumbres [a vida en el mar, Les rasgos fico ra moreadamene distor En at fo indie del cone (incest dercribis Anconio Pigaetea eran partiulacmente al- nen ue lon, fe ser conv atria Se ese diteen los habitantes de Tos canaler meridionales se esseey delgados, con micmbeorinfeiores mis debilcados or el cjercicio de la naveguein, Pe eee lor expects, nombre tehuelche (chuwelebit genes Een. asia) les habria sido impuesto por lox aauca- TEE ine eescordilerana y de ese modo lo secogieron Los 20 holes durante la etapa colonial, cxtendiendo mu dso a todas Hr eetisdesindigenas que ingrsaban desde In Patagonia = 36 Ja campaia bonaerense. Pucden distingwirse dos grupos: los te- hice epenonnles —autodenomnadon Gunns hanna a agente por excelencia® en gununa iajtcho “lengua gunna’ y ior tchuelcher meridional, seg ac asentaran al norte o al sur del ro Chubut, rexpeetivamente. Estos sltimos, a su ver, a divi- dian en dos pacialidades con dialector difecentce —Aonib'onk y Ponkink (*aietor" y “norieher, werpectivamente)—, segin se biearan al sur o af novte del slo Santa Crus, Se debe al Scndlogs panagSnice Federico Ercalda, en 1949, la denoraiag Gién de "Complejo Tehuelche” todo el conjunto, incloyendo ‘or cazadores terest de In isla de Tierra del Fuego, los lelk'nam, conocidos genéricamense como nai. Todor ellos ompartian rasgos cltursles comunes como cluso de colder y lor elementos usados para el vstido, asf como arose sinlarcs (arco, fecha y boleadoras) y lenguas emparentadas entre si, nnque difereneas, En cl iron occidental Gy eeapecion de los fehuclches seprentrionales, lor grupos subandinos —-atek chiswich a kana ("gente del bord dela cordlles” 0 prop tnente “cordillersnar’)—, también conocidos en las fuentes como chulilacuné, quienes aparentemente tomaron el nombre de poyar en versiones cartcllanizadss que citelacon hasta fines de siglo XVILL, habrian consticvido un desprendimicnto de loz tehuelches sptentsionsics que compartian wa lengon pero co ttolaban su propio ceritorio, ubicedo al sar del lage Nabuel Hroapiy facia l ese hasta la transi con la messin patags- sca propiamente dicks Lor primeros datos histricos registrados sobre las poblacio- set oxiginaras del ire centro-norre de la Patagonia —‘ohuelcher inprentrionale-~ son los proporciosados por Ia expedicion de Simén de Alezaba, que aribé alas coats de la actual provincia de Chubut en el afo 1534, iniciando un prime fntenco colonisador pomeriormente fxeasado. Sux cronistr deecibieon encuentro fon grupos de indos, obserrando el uso de refugios confections: dos con amas, [a caza de guanacosy l consumo de series mo- id La primers noi brea fora de iad lo hehe meridionale son, en caabio, del propio Pigafeta, cuando la cx dion de Magallanes debié busear efupio en las coors 4d sur pstaginico para pasar invierno del ato 1520. Ea la outa de la 37 See aortas pare are arena ‘aparecié aquel individuo de “aspecto gigantesto”, con el, ae ar carta yuma peo ee ee Saas eal gren Sanne PELiat patentee aoe ria os erupt ae ae eee Secor a ol cren eben come gor mnporan pat alae rs : Beg bey nds sme mr vale eee eee eee Seb aata gains ec pe ere ea ane irre tal beces Qs a grapos *SGUSWS del condscne. La potted le sshumanci ot ees eee cere Sense an vteraa evcolaes plasmas Gene puSas gard eae cada pErPerblt cigis bilson mamta oe contelonaben ae ab yaa atone eat ie kacr ance te ee ees ae tacit yanjoce Tas oceor pe Se FUchiay pu Gincdn te be utes de wo cote See ee gee tao 7 cise ta pacas ds See epee recs pare ree fences ees a ai tueracioa femestam e'eovan pare ese ren aaa tocar ramblds relay ee ee aaa ad sree plod gen SoS ata phan cae oid pra ee tee er Petre le Rigetin de jee vem, Le at alr de opel petindocay tle 7 See resi aas elated amt = eae cer ary peratpaaes arta ads aS See a pees Oa ea uence poe ae eae yon femtacata Lh welder un mc Saar tated wa oe een alse iog veges come, hoses sles pe ce eg age cle pac pepe poem Berpetio de ws beganizacign socal, se tatsba de grupos peque™ a ae ar Sfp ca teens poo aE Sir par eat aang oe ater y tossed Soe aces Ge pant peotcos 38 ‘Ya desde Ia expeilicién de Magallanes se tenfa idea del poblamiento de la isla Grande de Tietra del Fuego. Fue precisa ‘mente el avistaje de fogatarlo que lleva los navegantes« dasle exe nombre. Mis tarde, en 1580, la expedicién de Pedro Sarmicaco de Gamboa reaizé los primecos contactor con sus habicantes. Con el Hlempo, se comenzé a llamar a estos pucblos onas recogiendo la ddenominacién que de ellos hacian los grpoe pdmanas que habit ban el sur de fa mismasla (aone yémena: "hombres del norte”), aunque se llamaban si mismos sell nam. Su semejanca con los tehuelches del contineate y sus pro} ‘tadiciones indican, pars algunos especialistas, un antiguo origen comin y desarollos cu turales diferentes, posiblemente provocades por la separaci6n de la fala, conecuals al continence antes del fin dei Pletsoceno, cuando el nivel de las aguas era inferior, Cieros rages fsicos la general ependencia de la ezza del guanaco, el uso comin del quillango, aunque con la piel hacia fuera, y las formas del idioma asf pare” fen indicarlo. Aun reconociendo ertas simillcudes con sus vecl- tos del continente, otfor autores sostienen, sin embargo, que los ‘dik’nam babslan constiuide una version distinta de los tehuel- ches, con formas de vida transicionales entre las actividades te frestres vineuladas con la caza y las marftimas. Lo cierto es que tstos pueblos, que habitaban la parce oriental dela isla estaban organizados en pequesor grupor familiaces de desplazamicnte ‘continuo, con tetrtorios y rutas de caza claramente delimitados. Al igual que los tchuelches continentales haclan un aprovechas miento integral de los animales disponibles, usando la grasa de lobos y otras especies marinas para untar su cuerpo y soportar las Figurosidades del clima De mucha impoctancia entre estos grupos era Ia ceremonia de iniciacin de los varones jévenes, conacida como Hain una especie de concilio secreto que se zealiaba en determinadas épo- cen que el alimento no escaseabe, pudiendo dusar varios me- ses, La organizacién y ef desarollo de la ceremonia sélo podian ser llevados a cabo por hombres adultos. Con los euerpos dest dos y completamente pintados, los hombres represeataban dis. ‘intos espiritus con grandes miscaras alusivas, movimientos y danzas expecficas, con objeto de atemorizar alas mujeres. Los jévenes inicindor se pintaban sélo de blanco —curiosament, el 30 mismo color con que el méico brujo pintaba alos bebéstebul- shame ee esants con la intencin de representa el orgen del Sac Pe odo una vieja teadici, los hombres recuperaban de Serene etSfoder aniguamente urerpado por las meres, Teer hatitan mantenida dominados ngiendo la aparicién quienes for tres malignos. Segin sus ccencas, en ls tempor de abet ado el sol y lx hina atdaban por Ix cetra como fatigues, cuands far moncafas dormidas eran seres humane, Ia tee isis conocida por lar majrey, quienes mantenian ae ercion secrets «1 que ningin hombre podla acceder. SEMIS" Nogeban's ln pubestad, lar J6venes doncellas eran ins carne aie wees migiesy podlsn controlar ls enfermedades Hite en Los hombres vivian entonces atemoriaador y sme EIT SES fers Granta Pero descubricron el engafo y amaron wot a lpieacin matando 1 codas las mujeres que conocfan los aoe eeeperhechiceria, Pas que no volieran a fecuperat £0 eet hombeeserearon entoncer una sociedad seereta © i~ rere tie lr mujereey los ninos se aceraran alas reuniones TE HoDA AS sesteionce cam muy fuerte cant que pesaba Ua de ee vate pars eualguier mujer que curisears la chor Tec, ecSaeae cl reualy aun sobre los jovenes que cometie~ torts Subiclones: Todor lov vanes de ene 17 y 20 afos Se anaes a algin momento de ext ctemonia, después dels eae considcttdas adultos cn condiciones de formar pro- sal ee as dn diflles presoss debian soreaae pre de Pe em eae y la madres cmocional fli de ls aspiran- on to stores invrprctan que ena tradicion, en paticolar SEL AUSIIE’ posblemente haya hecho alusign «un aniguo me 2. cancers de las isla y de los caales del ocsidense cordiiersno, ylmanas 7 alaclafen que ol cientilico, Charles sean ate biervivten em cambio mds ftegramente del mar. RrTTe Seite principalmente de pecesy molusos y is expre- SCAEPEliater guardaben crrecha relacin con ese AbHAE wore Son punta de huci,cuchllosconssuidos con valvas de TUOMAS) Einoas de madevs, ene otras. Tambien ss sspeco rate 2 Stercurs poqueha, con na adaptacign fisiea partion fee, Michamllaba una capa de grasa subeutines, denotabs, “0 Dee eee eee ee sutodenominados yémanar hombre") ——tainbign conocidos ‘como jahpaner © yaganer—y habitaban el drca del eanal de Beagle en Sennea pe aera ae Tet regs yoo oe ea ee Se pet eee ea ae ee zemejanza cultural con los zelk'nam y los ydmanas era evidente, lo See hee Hopes de las Corea de del © ee ce ose eet eee eee ee aera talent oe oer ea ee lee ee eee onde Chae ee ae oer ee Goes etllaces gee eee Sen eee ree eee eee se lacie aes ene ee eee ee Tees canta ae ee tee ee (SSS EL CONTACTO CON Los eUROPEOS ‘os ha aflcionado @ la yerba. el azicay, ain galt, la hata ya otras regalas quo anes no canacamos, pero ‘que nos han sig ya eas! necararin. 61 nacemos la gus a ‘uaz pele, ponchos, pumas, etc: de modo queen nuss- tre propio interés esta mantonor con ots buenas rel ‘ones spare de que equ hy lgar de sobra para todo" (palabras dat eacique Foye a George Chawortn Masters, fo Vide entre ie patagones. 187). Rerula indudable que la Megada de lor europeos y ol posteior etn al contacto con let grupos hispano-rillos cambiaron iMZgnrumbeceindigenar, alerando profundamente us pritias SGiStahey a vise dl mundo, Parclarmenc importante, en fie seme” fue neorporactn de blo de fon gunados SES fete Raves Contant, cn special los"witior, como el a+ GSR Aohot fcitaron cl initio de ona profunda dslucisn CURA deorcelda por un se menos inportante cjercicio dela ialcnca fen por parte de! blanco, hecho que s intensifies alo LASGE siglo MUX pure lconjunto de los pseblos oiginarios de In Patagonias tl comma veremor ns adelante E.G icex sats aut del continence cl contacto con ct blanc anparmente vile como producto del inter writ can de lobos marine cays pie y aete eran muy coe Ber Bvopa, Numerosas expedicones de variadas banderas incasonaon ead os siglos XVI y XVI m Ina de Tera del ro tafencando slot indigenss para robares sus piles rete i sue mejrey a aver que se dsminuta su posoidad abner alimentos del mac. En 1830, como parte de un expe- SCONES, cuatro joven yhmanar fueron evades iitgra por el capiin brine Fis Roy con objeto de inculear~ [2' calurs octdenealy crstana. Por su parte, las misiones ISalcanas csbleidas en el ien desde 1970 cambiaron las cos- TEES'Ec ign pueblos naiv provocindoles seriasenfermeda- EEPictos evtrona la muerte: Ello psd, por cjemplo, cuando SS Suites wr vementa al eco carapco abenonande su SAGGLE? Lit el cuerpo dormulo com gras animal paca Tepe i. A fn del vil DX, le xpigucion de ove “ievaty cl posterior dearollo de a ganadera ovina provocazon TUE Uitcnatca climinacion de indios de la regidn. Para coe cee Suedabun vivor unos 4000 onasy unos 3-500 yma- 2 as, Pocas décadas despues, s6lo unos pocos individuos eran de- positarios de estar culturas que en la actalidad se encuentran Eralmente extinguidas En el caso de los tchuclches sptentrionals, la incorporacién del eaballo europea para el transporte In cata, hecho gue +2 habria producide = fines del siglo XVI, les habe permitigo am pliar norablemente su movildad, aumentando sus derplzaraion= for dentro dela rogign y fuers de ella, sla actual provincia de Beene Ales» i Pampa cet, Exo atom influence tchuclche en a porcién centro y norte de a llsnura pampeana, En la segunda mitad del siglo XVII cl uso del caballo te extends al resto de la Patagonia, con la sola excepcién de su poreion mis steal, donde lor grupos tndigenas munca lucton couse, come es el caso de los que habitaron a ila Grande de Tiers dl Fucgo. Is elaciones interénicasaumentacon ys fortlecicron- La adop- «idm del ganado europea taneformé también los grupos indige= far en partores ecuestes, ganaderor y comerciantesy particule rmente en el norte dels Pacagonia, Pan ce ensoncey esas pobla- ones respondian a patconessocioecondimicor mucho mis com= plejos que el simple modelo dela cana y ls secoleccion, hasta no hace mucho tiempo recogido por In historiografla tradicional. En los tabajoreliicor también ae svtenia que los grapos ssaucanos provenicnter de Chile hablan cjercide desde fines Gel Siglo XVII una presin decisiva sabre el orience cordllecano da Ao lugar a un proceso de propapacign de modelos sociopoliicos ycultiales denominado de areucanizacion, iniciade primero en les reas septentrionales y extendide luego al suc patagonico, uc se hubris afancado alo largo de a seguncia ita del siglo 3001 con mds fuerza, en el XIX. Mar recientemente, se ballegado a uestionar esta categoria por su mateizdifsioniss, sortniendo {te Ia incorporacién de biencscultualesaraucanos fue previa al ASeatamiento definitivo de grupos de cie origen en ef oviente ondillersne, que sean oe hebria producido et las peimeras dé das del sigho XIX: En opinign de quienes sosenen exta lima poston le profanda aafoanctoner cla sie as sociedaderindigenas del eet andino «lo largo de este perlodo se deben mis a au dindmies Interna que alas lafluencay prove: Sientes de un cent difusor de eultars, como seria el cao de la “a ‘Araucanta Es decie que las nuevas condiciones hisses, derive Gis cmuee ors coous del contacto con lor eoropeos, habrlan favorcido la incorporicin de elementos provenientes de la eal furs sucana, cn cpecial la lenges. Dorota pate, parece sensi {o aconsarcautla ala hors de usr expreioner como interno orice para eerie» ae sed naigenay oh te Pe Siodo, por cuanto cass catgorfes puatdan caiechafelaciém com th erga formativa de los Erador nacional producida en la SSguns ited del siglo EDX cuande lor limiter extras ade ‘hucren oro carcter. “ Cate nlarar mime, qu a denominacin de Arann, ac se dio ala rin de alle lor Andes comprendida entre los ‘los Bisbe y Tolten, proviene de lor cspaoley deriva del nom- bre de nugcor con que se conacia alo indios que habtaban al sur Se Concepcion, funosos por nt ressteneia al dominio hipdnico sombre se cplet por primera ver cn cl poctna exciton el gle XVI por Alonso de Eseilay Zain, lado “La Araucana", Jn cso oe fue genetaiznnda con el tempo. De ea manera, lot “upatole habrian uu In desominacion Je arencanos para le- ibe que lamaban a sf mismoe rece Cente verdader. El tinmimo mapuche (ogee de a ters") pas referee a ests mise ‘hos puclos mo aparece en ns funtcs har a segunda mtd del elo CVI lo cl ha Hevede als xpecallatr nsonenes que tl ‘Terominacign ce producto de los grandes cambios provocados pot STcomtacto con lor patie, que habrian derivado eal construc Sign histories de una nucrsidentidad clea. Es muy importante ntonces tener espeaimente ex nents la difcltad de rotular Giidades Enicas "come tchuclcher poysn puciches, cte.— que posblemente no se hayan correpondido con Ia realidad sino a Torus de una identfeaion importa por los ors on exe caso los Epatoles, Como cl wma ex cn dscislgn y la recontruccin Sica de los grapes que acuparon Ia regia Una cara en gran mmodids todavia pendicnte, por st mama complejidad, sdlo lo Tsjaremos planceedo, weatale de mantener una interpretcién gue vertebre, denis dele posible y sin entrar en contradicciones, ie‘capleaionestndicionscs que consderamor vidas con ls nis moderne. ‘in duda que la presencia simultines de vasias Lengua en el 4“ interior de lar Pampas, Is gradual imps (che sungure “lengua de la gente") —o mapudangy (“lengu dela tierra"), también anotada como Chilidugu lengua de Chile")—y In carencia de escrtara indigena complicaron sobremancra la iden tificacién de las parcialidades, dificultad que se extiende hasta [a actualidad. Muchas veces los espafolescayeron en el eror de apli- far sus propios conceptos, lo cual los Hevé a confundir unidad cultural con wnidad social y politic, asi come adacripcign étniea on ubicacién geogrifies, Esto es més evidente en ef norte de la Patagonia, donde convergicron difintas influencias culturales provenientes del drea del Pacifico, del sur de Mendova y de los eazadores tchuelches eapecializados, sobee todo cn la regién ordilletana del actual Neuquén, convictiéndola en un dcee de Incensos contactos entre distintas corrientes poblacionales, favore= «ida por su proximidad con la Araucania chilens y la accesbilidad 4a cruce de lor Andes. Por ello en esta zona, las denominaciones de las distincas parcalidades, utadercovrientemente en las Fuentes, fguardan estzecha relacién con la ubicacign geogrifica rclativa de los grupos en el occidentecordillerano, como es el caro de lor huilliches Agente del sue” (que habitaban la acnales provincas chilenas de Lianguihac, Osorno y Valdivia)— y los picuncher —"gente del nor- te" que habitaban al norte del rio Maule). El panorama é:nico parece simplifieare a partir de mediados del siglo XVII, cuando los Eronistas mencionan sdlo a estr dos grupos ascatados cn lat fads rientales de los Andes, incluyendo enere loz regundor a los pebuenches, No ebstante,cabe destacar que dentro de estos Itimos Eambién pueden distinguire tes parcilidades: una ubcada mis al sur, en cl drea de los lot Refileava y Curi Leava, afluctes del Neuguén; otra en el centro los pehuenches de Varvarco, en el extre- mo mds occidental del actual Neuquén, y una tercera, los malalquinos", que ac habrfan extendido harta cl sur de Mendoza, ‘Aunque emparentados entre sh exter grupos habrian funcionsdo come entidader independien ‘Los esfuerzos de los expafoles por mantener el contsol poli tico y militar de la Araucania feacasaron sisteméticamente a ciish dela resistencia indigena, motivando que, en el ah 1641, durante ¢1 famoso Parlamento de Quill, se reconociers la independencia dl cerritorio ubicado al Sur del Biobio otorgindole, sogin las “s Leyes de Indias, identidad de “nacién indigena". Pere 2 ello las Tatenlones de fos pueblos araucanos fueron estimuladas por la Seapacién eopafila de los valle centzles ehilenos y por Is presen~ Se Esl genadoe y pifone: de araacaria en el ea oriental de La SSndiers- Lor imensos contactor y los cambios provocados por la presencia europes habrian ayudade a que la influencia aravcana se PRtendiera gradualmente hacia el este hasta alcanzar la tanura Fumpeana y'la parte més seprentrional de la Patagonia, antes in- Biune de que hubiese una radicacin extable de grupos de ese ori- Gen, procere que reciéa se habria dado durante la primera mitad EG jple XIX. Bestance avanzado ese siglo tales influencias, ya sea Hingtlsriens religions. de la onomiéstica (nombres propios) © de nenbcros materiales, como puede ser la confeccin de cjidos, cr Ton el lo Negro hacia cl sur, mientras que Ia lengua araucana no Tieunes = penctrar en la Patagonia central y austral. El uso de Hombres propios y topGnimos araucanos en la regiGn se asienta faciza en el siglo XX y muy probablemente por intromisién de los lancos, De hecho, ls excritos de los famosos viajeros del siglo XIX, como Mustert @ Moreno, que luego analizaremos, no hablan Ye sopbnimon de ovigen tehuclehe “eraducidos” al araucano. 46 Carrruto 3 EN TieMpes DE La Colonia Los navecares 98 10s sicios XVI-Y UNIENDO LOS OCEANOS prec ot “21 de mart 120, Wapera de Dingo de aon sr pu eS ft a ae oe ee tr cn Sonny on ane ye ca a a ere ‘tas ces Sts cies pos na sap eee aera ord mentees eneaiecneas peas ater Semi qn ae penises ear souneaneer omen oe hast hme os euts tor Sag coos {Se puto” Pend None, ‘yas haute ye as La bésqueds de un paso que permities unis por mar ambos ot Sos Aico y Pectin, nen dca le mayer motrin dee davegantes espaol del siglo XVI, Descubista el estrecho de Todor los Santos, que lleva l nombre de Hernando de Magall ten en ese mismo fo 1520, ls Patagonia fue objeto de varias Silene de ecanocniet 9 oeionaly eembaror For ate de marinos europess de divenas procedencia. Al propio Magallanes se deben los primeros contactor con los pueblos dl a7 ugar, el reconocimicnto de las costas que desde San Jalién se ‘hicnden basa al evecho, at como cl nombre del rfo Santa rox en cuya deserabocadura se aprovisionaron las naves de agua lee, lea y alimentos. ‘Pocos aos después, en 1534, l monarca espaol Carlos V dividié por Real Cédula ia América del Sud em cuatro grandes Sonar dé daseentas lepust cada una, que en direign nortesut Tourespondicron a Pizarro —el Perd—~ 4 Diego de Almagro y « Pedro'de Mendora, eapectivamente. La poreign més austral dal Continente ede lor 56° 8,200 legiat hacia el srecho— con Slnombre de Gobernacién del Burechoo Nueva Leb le covsespon- Gist Simén de Alcaba y Sotorayor, cormégrato porcugues al Scrvicio de Espa. Com dor naves y dorccntos cincuenta hor rca entre marinetonsaldador, colonosy eleigs, legs Acaraba son lugar que denomind Panta Lobos Arcecife de los Leones en ius conte de Chubut, may cera dl seual Camarones, dando por fundada su provincia cl 9 de marao de 1535. All se inici el primer intento colonzadoe de lor crpafoles en los confines mis fstales del continent Los conquistadores se insalavon precariae Iente en ete sito iniciaron expediciones por tera internindo- Seen ln mescta patagSnica con la idea de aleanzar el Paco ‘vanzaron hast lactase Chico, que llamaron Guadalquivit,y iiggaron al ro Chubut, arrbando presumiblemente hasta el atoal Cmnpammiento den lcliad de as Plomaso ie Los Altar Dition que mencionamon anterarmente. Ante el facaso de la cx pediciiny lo dficaltadcr propia dl viaje, e produjo un levan- Eimiento gue cerming con la muerte de Alcazabay ol regreso de- finitve 2 Espa Frustraios estos primeros itentor, divert cecunstancias demorarom la empress colonizadora erpafola hasta avanzado el Siglo XD Sin duda que la Iejnia del entonces centro del mundo JES prenumiblefalea de potencialersiquezas demoraron este pro- Tesora menos ena ew commen pagina, Las enenty tsfencos entre Espa e Inglaterra, incentvados a parti de 1580, J ln creiente preencia de corarosingleses como Francs Drake, {ue se aventuraban por ls canals fueguinas en basea de navios Spafoies procadence del Pacifico, habrian morivado la necesidad 4a peti ee ae a i a A ABE aR BEA de forvificar el estrecho en sus dos angosttas, idea sugerida por Sarmiento de Gamboa, quien, persiguiendo « Drake desde El Ca- Iso por encargo del virtey del Pert, habla cecorrido el paso interoceinico y elaborado un mapa de ss costas. Quince naves 7 tres mil hombres saleron entoncer de Cédiz por orden de Felipe IL Después de una serie de peripeciss —nauleagio de naves, per= ida de hombres, motines y demoras en distntos puertor—, Sat- siento de Gamboa legs al estechorel 2 de febrero de 1584. Lege de algunos emplazamientosfllidos por falea de agua dulce y lea, ze fandé oficialmente el primer asentamienca expatol en Punta Dungeness, conformado por "183 soldados, 68 pobladores, 13 mujeres, 11 niles y 2 negros", con ls denominacién de Colonia dl Nombre de Jetix. Como todos los adclantados de la época, Sarmiento de Gamboa dio una misa, delineé el pueblo, distibuys las parcelas y ordené levantar las prieeras casas con madras de los bareor averiados. Casi inmediatamente aparecicron los tchuclches, que el conquistador expafolllamé “gente grande”. Pero sabrevivit Allf con pocas naves y sin recursos era tn problems y la elecciin ‘del lugar parecla no ser la més acertada. Se intentaron entonce: ‘ravesias por mary por tiers para buscar otro emplazamiento, este vex para un fuerte, a que llamaron Ciudad del Rey Don Felipe, en la bahia San Blas. Desprotegidar por Ia Corona, ambas poblaci nes desaparecicron poco despues, victimas del hambre'y de los Fgores del clima, Se dice que al imitar Ia dicts exclusivamente ‘marina de lor alacalufer, lor colonos se debilitaron y murieron, Sarmiento de Gambos, que habia partido rambo a Espafia por ayuda, fue victima de un eruel destino. Apresado primero por los ingleses y luego por los franceses, fae degradado por Ix Corona ‘spahola y murié-en alta mar como euidador de barcos. En 1586, Thomas Cavendish, marino ingles que realzs la tereera vuelta al mundo, desembareé en un punto al que denomi- 16 Puerto Dereado y desde allt incursions nucvarnente por ls via fluvial en el interior de la meseea pasagénica buscando sna nueva conexién interocednica. En la costa del estrecho encontraron tees hombres, tnieos sobrevivientes del fracasado intento de colonin cién espatola. Cuando liegaron a la ensenada del Rey Felipe, ha- Iiaron dentro de las chozas los cadiveres de los colons en sus ‘atres de ramas. Todavia habla ropa tendida en los cordeles y un 4 cuerpo pendia del centro de fs pla, Al redratse del Inga, el Corsi inglés puse 2 exa coloniatamba el nombre de Fort Famine (Duere Fabre con que despucs se ln conocer. A partir Er Caconce la Patagonia passa ser, en ln vein de los curopeos, ose menos que un teiterie maldto imposible de colonia Por eas mismas zone, darante el siglo XVIL,miensas la via intercednica er habiuanente utiliza por lors y galcones Ac disuoras bandera, interior del continent sgulasendo pare tos euopeot un tritoro priciamence desconorio, rodeado de ttn partelar miserio. Grandes yTansticos animales, altos ye0- bstor habitantes los patagonts® descriptor por Pigafewa—, sc tmostaban en los grabadoryceritor dela epoca y eran pate dela Tyee cesidscn worne ala Pasgonia, Bocctano, xpetiie Se fotandsancinglses rcortas la cova Tox caalesfuegut Stor buscando vas aferativas para unirambor océanos y otorgan- do nombres a lor accidents detectados” Ast aparecieron, en la Steeva carota, el canal de Le Maire, la isla de Tos Estados y el Tabs de Hotn luego de Hornos— entre otror Todas ets ex feaiciones sufferon ls inclemencie del clima y de los braver Tiare de sur, senda muchas veces ausliadas con alimentos por tos pucblos que habieaban ol lugar ‘Nove sabe a cleneia cierta cuindo ni quién descubri las ils Malvinas Ya sen que a2 tate de Améslco Vespucio, cuando en 1501 partis de Lisbon y naveg® baci lon marer del sur avistando dina dons muy esarpadas en las cuales no puo desembaear © a" pllow Eneban Gomes, que al deertar dela cxpeiion de Magallanes en 1320 atria divsado nas terrasdesconocidas. Lo Erode er que te sabe que los epatlercenlan noticia desu exis Cencla desde comienaos del tigle XVL Ya en el mapa dibujado por Pedro Reinelen 1522 se muestra un conjunto importance dels fel Acco Sur entonce lads “ane Oto pects Svisajes del archipilago, ungue no calminaron en desembarcos, Ricros hechos por maioos de diversas nacionatdades, como lot Ac los ingles: John Davis on 1391 7 Richard Hawking en 1594. EL fcconoclmicnto de lar costar del archipielago que ol holandés Sebald de Weert hizo en 1598, etablecienda su exactaubicacin, thotivs que durante os siglos XVIL y XVII se le atibuyera el Toscubeimiento, ean por la call iss aparecen em las earas 50 _geogrificas de e505 afios como “Scbaldinas". En 1690, el inglés Johin Strongse se incerné por primera ver en el ertrecho cue separe las dos islas principales, al que Ilamé Falkland Sound, aunque sin tun acto de posesida efectiva. ASor después, en 1739, una expedi

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