, Ellos pueden odiarse, pero jolvidarse? (Eso nunca
DAY TORRESUNA JAULA PARA LA REINA. PREFACIO
Chiara Keller jamas fue un angelito, era una reina
Como una de las CEO del mayor banco de Suiza,
tenia mas caracter y astucia que muchos de los
hombres que conocia, y ninguna de sus relaciones
llegaba a nada serio. Quizas por eso conocer al
Director de Crimen Organizado de la CIA fue algo
tan memorable. Jhon Hopkins era un hombre que
no se andaba por las ramas, un luchador nato y la
vida para él era una eterna guerra que debia
ganar. En eso los dos se parecian demasiado, y
por lo que fue un momento magico, el hechizo
perduro.
Pero eventualmente tenian que salir de la cama
¢Qué pasara cuando sus trabajos y sus vidas
colisionen de frente?
¢Qué es lo peor que puede suceder cuando la CEO
de un banco de un paraiso fiscal se enamora del
encargado de perseguir a todos sus clientes?
Traiciones, mentiras, desengafos, errores que no
pueden perdonarse porque al final de todo, el
amor no es mas fuerte que los barrotes de la jaula
de la reina
PREFACIO
Chiara estaba desesperada. Su cufiada Andreaestaba en el hospital, en la peor situacion posible,
y su hermano Zack estaba en algun lugar de
Africa en el que no lograban localizarlo
La vida de Andrea estaba en peligro y la del bebé
que estaba esperando también, y la unica
esperanza de encontrar a Zack era aquel hombre:
Jhon Hopkins, Director de la Divisién de Crimen
Organizado de la CIA.
Era el que habia metido a Zack en todo aquel
problema, asi que esperaba que la ayudara a
encontrarlo. Por eso habia volado hasta La Haya,
para interceptarlo en medio de un juicio en el que
participaba.
Por supuesto que no a cualquiera dejaban entrar a
la corte de justicia, asi que en cuanto trato de
acercarse la detuvieron
—Necesito hablar con Jhon Hopkins —le dijo a uno
de los guardias pero este neg6.
—El sefior Hopkins esta ocupado ahora, tiene que
hacer una cita
Chiara miré mas alla de la cadena, hacia el
hombre que daba las ordenes. Tenia una
presencia imponente y era facil ver que sabia
dirigir. Pero mas que eso, era increiblemente
atractivo. No era sdlo su aspecto, habia algo en él,
algo en su forma de ser y en el modo en que sus
ojos parpadeaban entre la multitud como sicalculara su siguiente movimiento. Chiara conocia
muy bien esa mirada. No es que fuera un hombre
malvado, pero todos los hombres tienen algo de
oscuridad en su interior, y eso era sexy
—Vaya y digale que hay una mujer que lo necesita
con urgencia, por favor.
—Ya le dije que no puedo...
—jEstas a tres malditos metros! —grujid ella
cuando vio que se iba—. jDile que quiero hablarle!
El hombre fue y regresé en un segundo, y solo le
dio otra negativa.
—Dice que ahora no puede, mejor vayase...
Era evidente que no la dejarian acercarse, pero a
Chiara Keller no habia ser en la tierra que le dijera
que no.
—jEstoy embarazada, Jhon! —grité lo mas alto que
pudo-. |,{Hasta cuando vas a seguir negandome!?
igO es que no piensas hacerte responsable?!
Cada persona en aquel corredor gird la cabeza
hacia ella, y por encima de todos, Jhon le dirigio
una mirada asesina. Era una mujer muy hermosa,
de largo cabello recogido con elegancia y toda la
actitud de una reina. Sin embargo le estaba
gritando una mentira en medio del juzgado de la
corte internacional sin que un solo musculo de su
rostro temblara.Se acerco a ella con el instinto del depredador y la
observo de arriba a abajo con una mirada lasciva
Ella le despertaba un no sabia qué, que le hacia
querer hacerle de todo en aquel instante
—Estoy bastante seguro de que jamas me he
acostado contigo, pero puedo hacerte el favor en
cualquier momento —sised con un tono que hizo
que a Chiara se le erizara la piel que no se ve, pero
ella no era de las que se amedrentaba con
facilidad.
—Bien, si estas tan necesitado puedo dejar que te
me trepes por una pierna en el avidn, pero ahora
vas a venir conmigo y vas a poner todos esos
recursos que tienes en funcién de encontrar a mi
hermano —replicé con determinacién.
Jhon la miro directo a los ojos.
—cTu hermano?
—Zack Keller: Tengo entendido que te fue de gran
ayuda hace unos dias. Ahora tenemos una
emergencia familiar y necesito localizarlo en
Nigeria, asi que me pareci6 que estarias mas que
de acuerdo en ayudarme a encontrarlo
Jhon achico los ojos con sospecha. jAquella
mujer parecia demasiado convencida!
—éY exactamente por qué estas tan segura de que
te ayudaré? —le pregunto pegandose tanto a ellaque si alguien no se habia creido lo del embarazo,
ahora, viendo cémo se miraban aquellos dos,
nadie podria poner en duda que tuvieran algo muy
intimo—. Respdndeme. {Qué te hace creer que te
ayudaré?
—Que yo sé que dejaste morir a Mason Lee a
Proposito —replicé Chiara.
Jhon miré a todos lados para asegurarse de que
nadie la hubiera escuchado y la tom6 del brazo
para arrastrarla hasta el estacionamiento.
—¢De qué diablos estas hablando? —pregunto
molesto.
—Lo que escuchaste —declaré Chiara—. Eres el
director de Crimen Organizado, no un novato.
Zack metio para ti varias camaras en la casa del
mafioso ese en Canada, tenian todo preparado
para arrestarlo jgy me dices que no pudiste actuar
cinco minutos antes!?
Jhon se acercé a su cuerpo peligrosamente.
—Sera mejor que no te atrevas a repetir eso en voz
alta en ningun lado —le advirtio y sintid que algo
se le movia dentro cuando vio la mirada altiva y
firme de aquella mujer.
—No te preocupes, no es crea que estuvo mal lo
que hiciste, pero necesito ayuda urgente, la
esposa de mi hermano esta mal y tengo que
encontrarlo, asi que espero tu amablecooperacion... Jhon. —Su nombre salié de sus
labios como una amenaza y él apreto los suyos
antes de sonreir. jAquella mujer no le tenia miedo
a nada!
—Muy bien, iré contigo —accedié—, déjame
Movilizar a mis chicos para que me den una
ubicacién y enseguida nos vamos. Pero no estoy
Seguro de que mi cooperacién sea tan... amable.
Le sefialo el camino y cuando ella se contoned
delante de él de regreso al juzgado, Jhon no pudo
evitar morderse los labios con un gesto
imperceptible al ver su trasero.
"¢Sera que si me deje treparmele Por esas piernas?
",penso.
Respuesta corta: Si, y eso era mas Peligroso de lo
que él jamas habia imaginado.
Jhon solia viajar en aviones privados de la
agencia, pero el avion de los Keller era otro nivel
de elegancia. El estaba acostumbrado a ir
rodeado de agentes, pero Chiara estaba
acostumbrada a ir rodeada de asistentes, y
aquella barbilla levantada y aquel porte de reina
No los perdia ni siquiera cuando estaba en la
mayor necesidad.
Habia algo de ella que le encendia la sangre y por
mas que tratara de evitarlo su cuerpo se sentia
como un volcan en erupcion.El vuelo despego de inmediato y Chiara clavé en él
unos ojos interrogantes, porque las pupilas de
Jhon no se despegaban de ella.
— ¢Pasa algo, Jhon? —pregunto con curiosidad
El se echo adelante en su asiento, paso los indices
bajo las rodillas de Chiara y tird de ella hacia su
cuerpo con un gesto firme que la hizo ahogar un
grito.
—{No dijiste algo sobre ayudar a los necesitados?
—pregunto muy cerca de su boca y la vio sonreir.
Jhon separo sus piernas con un gesto sensual
mientras le acariciaba la cara interna los muslos
con los pulgares. El era dominante,
extremadamente dominante, controlador, y
posesivo, pero eso con Chiara Keller no iba a
funcionar.
—Pues depende de qué tan bueno sea el servicio —
susurré ella metiéndole despacio aquella braga de
encaje blanco en el bolsillo del saco, y
recostandose comodamente en el asiento
mientras lo miraba hacia abajo, entre sus piernas
—. Ya puedes empezar a trabajar... Jhon. +